Estado de Derecho y Democracia
Estado de Derecho y Democracia
Estado de Derecho y Democracia
ESTADO DE DERECHO.
1.1.
Desde el mundo del Derecho tenemos al Estado caracterizado como una persona
jurdica en sentido estricto - esto es, capaz de ser titular de derechos y obligaciones. En
un sentido ms amplio es una organizacin ms compleja que la persona jurdica
Estado, que si bien la comprende, alcanza adems a otras personas jurdicas estatales
(cuyas denominaciones varan de acuerdo a los distintos ordenamientos jurdicos).
E. JIMNEZ DE ARCHAGA (1995)
El Dr. E. Jimnez de Archaga caracterizaba tambin al Estado a travs de tres
elementos principales: Poblacin, Territorio y Gobierno o Poder ettico. Por supuesto
desde su ptica internacionalista nos ubicaba al Estado como sujeto de Derecho
Internacional Pblico. As tambin Debbash y Daubet, en el diccionario de Trminos
Polticos, recogen distintas definiciones de Estado y estructuran la propia a travs de
una conceptualizacin omniabarcativa de los tres elementos que ms lo identifican:
Poblacin, Territorio y Poder ettico.
MARA AGUERRE (2011)
La Lic. Mara Aguerre, ms recientemente, identifica como elementos constituyentes
del Estado a los siguientes: a) Territorio con fronteras claramente delimitadas dentro de
las cuales tienen vigencia las normas econmicas, financieras, civiles, penales y
culturales creadas para la convivencia de una comunidad humana. Actualmente no se
consideran Estados los ncleos de poblacin sin territorio propio; b) el pueblo o
habitantes de ese territorio dispuestos a mantenerse unidos por los lazos establecidos por
esas normas; c) y un poder centralizado, capaz de hacer cumplir los mandatos de los
magistrados que han logrado situarse en una posicin de poder, ya sea por elecciones,
por el uso abusivo de la fuerza o por cualquier otra causa. Por tratarse de organizaciones
complejas, los Estados disponen de una administracin centralizada bajo las rdenes de
los gobernantes; d) soberana nacional. Los juristas reclaman la idea de soberana,
puesto que los Estados tienen autodeterminacin o dejan de existir como tales. Desde
ya sealo que se est haciendo referencia al Estado moderno, ya que su aparicin es un
fenmeno relativamente tardo en la humanidad, subrayndose que el estudio de tal
circunstancia sera tpico de un anlisis histrico que escapa a los propsitos del
presente trabajo.
1.3.
ESTADO DE DERECHO
Este se crea cuando toda accin social y estatal encuentra sustento en la norma; es as
que el poder del Estado queda subordinado al orden jurdico vigente por cumplir con el
procedimiento para su creacin y es eficaz cuando se aplica en la realidad con base en el
poder del Estado a travs de sus rganos de gobierno, creando as un ambiente de
respeto absoluto del ser humano y del orden pblico.
1.3.1. CONCEPTO PARA NACIONES UNIDAS
Promover el Estado de Derecho en los planos nacional e internacional es uno de los
aspectos esenciales de la misin de las Naciones Unidas.
Para las Naciones Unidas, el concepto de Estado de Derecho ocupa un lugar central en
el cometido de la Organizacin. Se refiere a un principio de gobierno segn el cual
todas las personas, instituciones y entidades, pblicas y privadas, incluido el propio
Estado, estn sometidas a unas leyes que se promulgan pblicamente, se hacen cumplir
por igual y se aplican con independencia, adems de ser compatibles con las normas y
los principios internacionales de derechos humanos. Asimismo, exige que se adopten
medidas para garantizar el respeto de los principios de primaca de la ley, igualdad ante
la ley, rendicin de cuentas ante la ley, equidad en la aplicacin de la ley, separacin de
poderes, participacin en la adopcin de decisiones, legalidad, no arbitrariedad, y
transparencia procesal y legal
1.3.2. CONCEPTO DICCIONARIO DE CIENCIAS JURDICAS, POLTICAS Y
SOCIALES
En su definicin existen profundas divergencias.
Para algunos autores, todo Estado lo es de Derecho, puesto que se rige por normas
jurdicas, cuales quiera que sea su procedencia o la autoridad de que dimanen, con tal
que tenga la posibilidad de hacer cumplir sus determinaciones dentro del orden interno.
En consecuencia, el concepto sera aplicable lo mismo a un gobierno democrtico y
constitucional que a uno autocrtico y tirnico. Sin embargo, la doctrina mayoritaria es
absolutamente contraria a esa tesis, por entender que el Derecho no puede estar
representado por la voluntad de una persona o de una minora que se impone a una
mayora, y, en ese sentido, slo es Derecho la norma emanada de la soberana popular
en uso de su poder constituyente. El Estado de Derecho es aquel en que los tres poderes
del gobierno, interdependientes y coordinados, representan, conforme a la conocida
frase de Lincoln: el gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo.
A este respecto dice Snchez Viamonte: Los tres poderes o ramas del gobiernopertenecientes a un tronco comn nacen del pueblo en forma ms o menos directa. Los
tres actan, pues, en su nombre, bajo el imperio de las normas constitucionales.
El Gobierno es la colaboracin y concurrencia de los tres, identificados a travs de la
norma jurdica, que fundamenta y caracteriza al Estado de Derecho.
MYLO XOLOTE
I.
LA LEY Y LA POLTICA
1.
LA NOCIN DE LEY
Las leyes son normas cuyo objetivo fundamental es regular el espacio pblico de la
sociedad. Dicho de otro modo, las leyes son los principios que permiten y promueven la
convivencia de los hombres no como individuos aislados, sino como miembros de una
colectividad. Las leyes no se establecen para normar o garantizar lo que un individuo
puede o no puede hacer de manera independiente, sino lo que puede hacer u omitir en
cuanto integrante de una sociedad. Por ello, pese a que existe una rama del derecho que
ha sido llamada de derecho privado, slo lo es en cuanto que el mismo derecho define
lo que es privado y lo que es pblico. De este modo, incluso lo particular, lo privado, lo
estrictamente individual slo es tal en trminos jurdicos si est reconocido a un nivel
pblico por la forma jurdica correspondiente. Las normas estrictamente individuales
pueden ser morales o prcticas, pero no legales. El derecho puede ser comparado con el
lenguaje: aunque nuestro uso del lenguaje es individual y podra parecer que sus
trminos slo tienen sentido porque cada uno de nosotros los expresamos, el lenguaje
como tal es una realidad social que se construye colectivamente y hace circular un
sentido social ms all de cada uno de sus hablantes. No hay, por ello, posibilidad de un
lenguaje privado. Del mismo modo, el derecho slo existe porque permite establecer
una vinculacin social especfica entre distintos individuos, es decir, porque los iguala
como sujetos de derechos y obligaciones bajo un poder comn.
1.
FUNDAMENTOS LIBERALES Y DEMOCRTICOS DEL ESTADO DE
DERECHO
El liberalismo ofrece los criterios mnimos para la existencia de un Estado de derecho,
es decir, los que organizan la estructura bsica de un rgimen poltico orientado a la
proteccin de los derechos individuales elementales. Sin embargo, como se ha visto en
el caso de Locke, el liberalismo no implica necesariamente que el principio de soberana
ciudadana pueda ser ejercido por todos los ciudadanos; adems, este autor considera que
los nicos derechos que deben ser garantizados son los de tipo negativo (de
proteccin de la persona y la propiedad) y no los positivos (de promocin del desarrollo
de las personas y reduccin de la desigualdad econmica).20 El liberalismo cumple las
condiciones de un Estado de derecho pleno, pero probablemente estas condiciones no
sean suficientes (aunque s son necesarias) para alcanzar un modelo de Estado
democrtico de derecho.
Las caractersticas generales del Estado de derecho han sido enlistadas del siguiente
modo por un destacado jurista:
a)
b)
c)
d)
Derechos y libertades fundamentales: garanta jurdico-formal y realizacin
material.
Si se considera, segn el criterio liberal, que el punto d, relativo a los derechos y
libertades fundamentales, es satisfactoriamente cubierto con la proteccin de la libertad
individual (que incluye libertad de conciencia, de movimiento, de opinin, de
contratacin, etc.), de la igualdad ante la ley y de la propiedad, se acepta en
consecuencia que el Estado carece de toda legitimidad para intervenir en la distribucin
de la riqueza social y en el apoyo a los sectores ms desprotegidos de la sociedad. En
efecto, el modelo de Estado de derecho no es por s mismo un modelo de distribucin de
riqueza (no contempla la llamada justicia distributiva) ni de compensacin de las
desventajas de las clases bajas.
Histricamente, han existido distintos intentos por superar el modelo liberal y las
instituciones, como su particular Estado de derecho, a que ha dado lugar. Todos estos
intentos coincidiran en que los principios liberales son insuficientes para atender las
necesidades sociales. Algunos le opondran las demandas de igualdad real y justicia
distributiva que las sociedades contemporneas plantean con gran urgencia. Otros le
reclamaran el abandono de los valores comunitarios como la patria y la raza. Otros ms
le reprocharan la defensa del egosmo y el olvido de las jerarquas de un supuesto orden
social natural. Sin embargo, el modo de resolver aquello que se detecta como
insuficiencia es lo que define a las otras opciones polticas. Si se considera que las
libertades y los derechos defendidos por el liberalismo son slo ficciones o
formalidades que esconden un sistema de dominacin que requiere ser destruido,
entonces se le podr contraponer un modelo revolucionario que pretenda establecer
una verdadera igualdad material entre todos los hombres. La consideracin de la
omisin liberal de los principios comunitarios de nacin y raza ha podido dar lugar a
respuestas totalitarias como el nazi-fascismo. La crtica al egosmo liberal y la defensa
de las jerarquas ha sido una sea de identidad del conservadurismo. El siglo XX ha
contemplado cmo estas crticas polticas se convirtieron en movimientos sociales que
consideraron necesario el sacrificio de, entre otras instituciones, el Estado liberal de
derecho. Sin embargo, en nuestra poca los principios liberales han sido reivindicados
por prcticamente todos los movimientos polticos razonables como el marco de accin
necesario para el planteamiento de sus demandas y el desarrollo de sus estrategias. Esto
ha requerido, sin embargo, la combinacin del liberalismo con el mtodo democrtico.
La historia del liberalismo en los siglos XIX y XX ha quedado marcada por su
encuentro e integracin --muchas veces conflictiva-- con los principios y valores de la
democracia. A diferencia del liberalismo clsico, la democracia supone el principio de
gobierno del pueblo en el sentido de la participacin universal de los ciudadanos en
la conduccin de las cuestiones pblicas. Como sabemos, en su origen el liberalismo
conceba como sujetos polticos de pleno derecho slo a los propietarios. Las luchas
obreras y sociales opuestas al individualismo liberal y la creacin de grandes partidos y
movimientos contrarios a la gran desigualdad reinante en los pases liberales, entre otros
elementos, dieron lugar a la demanda de que los derechos asegurados por el gobierno no
deban ser slo los propios de la tradicin liberal, sino verdaderos derechos sociales que
garantizasen la mejora en la calidad de vida de los grupos menos favorecidos.
Los movimientos y partidos polticos que abandonaron la idea de destruir las
instituciones liberales, o los que con compromisos populares nunca optaron por ella,
pudieron encontrar en tales instituciones y al hacerlo lograron ampliarlas y
democratizarlas el medio para acceder al poder poltico sin necesidad de la violencia o
la supresin de las libertades individuales, pero, sobre todo, lograron que las demandas
de igualdad social pudieran convertirse en estrategias e instituciones distributivas que
potenciaron el desarrollo social de los pases donde empezaron a funcionar. As, el
marco institucional liberal empez a ser superado sin necesidad de renunciar a la
defensa de los derechos individuales y la equidad de las leyes.
La democracia liberal es, tericamente, un mtodo pacfico para elegir gobiernos por el
principio de mayora (principio que garantiza que la soberana popular pueda
convertirse en leyes generales, al tiempo que garantiza los derechos de las minoras).
Este mtodo reposa en una serie de valores socialmente compartidos como la primaca
de las soluciones pacficas, la tolerancia y el respeto a la legalidad. La democracia
supone la existencia de una pluralidad de formas de vida y opiniones en la sociedad, la
cual no slo debe ser mantenida, sino fortalecida como el signo ms evidente de la salud
poltica de una sociedad. Las instituciones democrticas, por tanto, no pueden renunciar
a su componente liberal, toda vez que ste asegura que los objetivos de justicia social no
sean perseguidos a costa del sacrificio de los derechos bsicos de algunos ciudadanos.
Por ello, el ncleo de la democracia liberal reside en la existencia de instituciones
legales que permiten la expresin de la voluntad popular por medio de canales formales
y regulados.
2.
moral y poltico de una comunidad especfica. Uno de los crticos ms lcidos del
positivismo jurdico, Ronald Dworkin, ha mostrado cmo los jueces, al interpretar las
normas constitucionales, tienen que recurrir a principios de justicia, tradiciones y
razonamientos cuyo espacio natural es la moral y la cultura poltica de una sociedad.
De esta forma, las constituciones no originan el Estado de derecho, sino que son ms
bien su expresin y plasmacin codificada. La legalidad a la que sus principios dan
lugar es una legalidad que ha sido aceptada como valor compartido de la ciudadana y
cuyos principios provienen de las luchas, acuerdos y equilibrios resultantes de la
interaccin de los sujetos polticos. No obstante, una vez que una constitucin ha sido
establecida y su aceptacin se ha generalizado, sus ordenamientos tienen una
obligatoriedad que no posee ninguna norma moral o prctica poltica.
La doctrina del Estado de derecho exige que el principio que inspire toda accin estatal
consista en la subordinacin de todo poder al derecho. Pero esta subordinacin slo es
posible gracias al proceso histrico de constitucionalizacin de las normas limitantes
del poder poltico. Por ello, el llamado constitucionalismo moderno es inseparable de
los fundamentos tico-polticos del Estado de derecho. Los principios constitucionales
desempean funciones distintas segn la perspectiva con que se les contemple. Cuando
un juez imparte justicia recurriendo a las normas vigentes en la sociedad, se dice que
acta sub lege (segn leyes establecidas); ste es el aspecto funcional del Estado de
derecho y, por cierto, el que tomado de manera aislada conduce a la ilusin positivista
de la plena autonoma de las leyes. Pero cuando un legislador participa en la definicin
de los principios constitucionales que habrn de valer como normas generales de justicia
para la sociedad, se dice que acta per lege (promulgando leyes). En el primer sentido,
una Constitucin se opone a la costumbre y la arbitrariedad como normas colectivas y
establece principios generales y abstractos; en el segundo, una Constitucin expresa el
principio de soberana ciudadana como fuente del derecho en oposicin al despotismo.
Histricamente, las constituciones pueden, tambin, ser legtimas o ilegtimas, pero la
corriente llamada constitucionalismo slo acepta como legtimas aquellas vinculadas
a un proceso democrtico. En efecto:
LIZI MC GUAYER
3.
De este modo, el contrato social permite que la razn legisladora de cada individuo se
comprometa a abandonar su libertad natural, salvaje y sin ley, y la recupere luego como
miembro de una comunidad, es decir, como miembro de un Estado. El contrato social
vincula las aspiraciones morales individuales con un sistema de leyes jurdicas que
permiten a los hombres guiar la bsqueda de su propia felicidad.
Este ltimo punto es esencial. A diferencia de Rousseau, Kant no cree que el Estado
deba tener como objetivo la felicidad de sus ciudadanos. sa es ms bien una aspiracin
que cada uno de ellos debe satisfacer. Por eso, las leyes del Estado no pueden plantearse
el bien comn como equivalente de la felicidad de todos. Si as fuera, el Estado estara
robando a los individuos su autonoma para decidir sobre las mejores vas para alcanzar
su felicidad. Lo que el Estado tiene que hacer es promulgar una Constitucin que
establezca normas generales y abstractas que garanticen la libertad e igualdad de todos
los hombres en trminos legales. Las normas constitucionales deben estar en
consonancia con las normas morales descubiertas por la razn autolegisladora. Esta
relacin entre normas morales (que ordenan el comportamiento interno) y jurdicas (que
ordenan el comportamiento externo) slo tiene sentido si estn orientadas por el mismo
principio moral. Tal principio moral es lo que Kant llama el imperativo categrico,
cuyas distintas formulaciones coinciden en definir como moralmente prohibida toda
interferencia con la libertad individual, la integridad humana y las metas legtimas de
los dems. En este sentido, las leyes, definidas en el horizonte del imperativo
categrico, tendrn bsicamente una definicin negativa, es decir, habrn de definir la
libertad ms como derecho de los individuos a no ser obstaculizados en sus proyectos
que como prescripcin positiva de actos determinados. En trminos ms sencillos: las
leyes, segn Kant, hacen libres a los hombres al proteger su espacio de decisiones, no al
proponer medidas concretas para su desarrollo personal.
Este ltimo punto tambin es fundamental en una concepcin del Estado de derecho.
Segn Kant, las libertades bsicas estn garantizadas en un Estado que, por definicin,
es un Estado de leyes. Por ello dice que:
El derecho es la limitacin de la libertad de cada uno a la condicin de su concordancia
con la libertad de todos, en tanto que esta concordancia sea posible segn una ley
universal.
Los ciudadanos son absolutamente iguales en el marco de la ley, pero esta igualdad no
puede extenderse a sus propiedades, a su corporalidad o a su espiritualidad. Para Kant,
al igual que para Locke, las normas jurdicas no pueden atentar contra la distribucin de
la riqueza existente en la sociedad, pero tampoco tienen facultad alguna para impedir el
enriquecimiento legtimo y el ascenso social de quienes, situados en cualquier nivel de
la sociedad, usan su esfuerzo y su talento para buscar una mejor condicin.
Si un Estado slo puede ser la unin de hombres libres bajo normas jurdicas, estamos
ya ante el elemento esencial del Estado de derecho: la jurisdiccin de la poltica.
Cuando la poltica es regida por normas jurdicas generales y abstractas, tenemos como
consecuencia la proteccin de los derechos individuales por medio de un poder poltico
coactivo y la actuacin del gobierno limitada por los derechos ciudadanos. La figura
mxima que garantiza esos derechos es la Constitucin, concebida como ley
fundamental cuyos principios velan por la libertad de los ciudadanos. Por ello, Kant
DEMOCRACIA
2.1.
QUE ES DEMOCRACIA
La democracia es una forma de organizacin social que atribuye la titularidad del poder
al conjunto de la sociedad. En sentido estricto, la democracia es una forma de
organizacin del Estado en la cual las decisiones colectivas son adoptadas por el pueblo
mediante mecanismos de participacin directa o indirecta que confieren legitimidad a
sus representantes. En sentido amplio, democracia es una forma de convivencia social
en la que los miembros son libres e iguales y las relaciones sociales se establecen de
acuerdo a mecanismos contractuales.
Hay democracia directa cuando la decisin es adoptada directamente por los miembros
del pueblo. Hay democracia indirecta o representativa cuando la decisin es adoptada
por personas reconocidas por el pueblo como sus representantes. Por ltimo, hay
democracia participativa cuando se aplica un modelo poltico que facilita a los
ciudadanos su capacidad de asociarse y organizarse de tal modo que puedan ejercer una
influencia directa en las decisiones pblicas o cuando se facilita a la ciudadana amplios
mecanismos plebiscitarios. Estas tres formas no son excluyentes y suelen integrarse
como mecanismos complementarios.
No debe confundirse Repblica con Democracia, pues aluden a principios distintos, la
repblica es el gobierno de la ley mientras que democracia significa el gobierno de la
mayora.
2.2.
ELEMENTOS DE LA DEMOCRACIA
CLASIFICACIN DE LA DEMOCRACIA
NERA ELI
2.4.
DEMOCRACIA Y REPBLICA
Las diferencias y similitudes entre los conceptos de democracia y repblica dan lugar a
confusiones habituales y diferencias de criterio entre los especialistas.
En general puede decirse que la repblica es un gobierno regido por el principio de
divisin de poderes y sin rey, en tanto que la democracia es un sistema en el que el
gobierno es elegido por el pueblo.
3.
3.1.
PRINCIPIO DE MAYORA
Los votos no deben ser sometidos a control de calidad. Todos valen igual porque todos
los ciudadanos valen igual. No hay, pues, otro criterio democrtico de adopcin de
decisiones colectivas que el cuantitativo, el de contar votos y hacer valer como decisin
del colegio de votantes el sealado por la mayora de sufragios. Esta solucin
cuantitativa comporta la nica valoracin cualitativa compatible con la democracia: el
valor igual de todos y cada uno de los ciudadanos.
PRINCIPIO DE REVERSIBILIDAD
Un acto de soberana popular que tenga por objeto su propia supresin a manos de un
grupo totalitario slo puede ser entendido como democrtico de modo inconsistente:
aunque ese acto haya sido adoptado por mayora, si comporta la irreversibilidad de la
situacin creada, si cierra toda posibilidad de cambio, est negando todo nuevo acto de
soberana popular y de alternancia en el poder; es decir, est impidiendo la democracia
como mtodo. Un rgimen apoyado por una Mayora que elimine la Oposicin y niegue
a la Minora, es autocrtico porque la Mayora est erigindose en todo el pueblo para
siempre, impidiendo con ello que otra parte del pueblo pueda alcanzar alguna vez
gobernar; y esto, es contradictorio con el concepto de democracia como mtodo.
3.3.
Sin primaca del Derecho no hay democracia, sin democracia no hay primaca del
Derecho.
3.6.
Tanto peso como la regla de las mayoras tiene el respeto de las minoras en la
definicin de la democracia. La toma en consideracin de la minora implica la
institucionalizacin, directa o indirecta, de la Oposicin poltica. En la democracia de
partidos, la real y efectiva divisin de poderes es la que se establece entre el partido o
Hoy se entiende por Estado de Derecho. Al respecto, examinado este concepto a la luz
del modo en que ha evolucionado histricamente; desde su momento fundacional en la
etapa de la Ilustracin, pasando por la grave crisis que le afect en el siglo XX por la
arremetida del movimiento social y el surgimiento del fascismo, hasta llegar a la etapa
actual; el Estado de Derecho es, sin duda, la expresin jurdico-poltica de la
democracia entendiendo, a su vez, que su razn de ser es la proteccin de los derechos
humanos.
En efecto, el Estado de Derecho no puede ser comprendido de otra manera pues, como
producto del movimiento de ilustracin que acompa la revolucin burguesa en
Inglaterra, la lucha por la independencia poltica en EEUU y, en Francia, el
derrocamiento del rgimen monrquico-absolutista, se establecieron diversas formas de
gobierno democrticos - parlamentarismo, presidencialismo y semi-parlamentarismo
que, extendidos hoy en la mayor parte del mundo; adoptaron valores fundamentales
como los de libertad e igualdad y justicia los mismos que han pasado a ser parte del
derecho internacional en lo que desde 1948 se denomina la Declaracin Universal de los
Derechos Humanos.
Pero este concepto sobre el Estado de Derecho, debido a la influencia predominante del
positivismo jurdico, fue desconocido por un buen tiempo, hasta bien entrado el siglo
XX, plantendose en su lugar que lo que defina el Estado de Derecho era
fundamentalmente ser producto de un ordenamiento jurdico que normaba su
funcionamiento. Bajo este concepto era vlido cualquier rgimen poltico,
desapareciendo o desconociendo las diferencias entre lo que significaba la democracia y
la dictadura pero, a su vez, ignorando valores tan importantes para la convivencia y el
desarrollo humano como los de la libertad, la igualdad y la justicia.
Derecho en el Per, no obstante la frecuencia con que este ha sido violado por golpes de
estado el ltimo, del ao 1992 fue perpetrado por el presidente de ese entonces, Ing.
Alberto Fujimori- no ha sido ajeno a los cambios que se han dado en el escenario antes
expuesto.
Efectivamente y as lo reconoce el Tribunal Constitucional, el Estado Peruano no solo
es un Estado Social y Democrtico de Derecho cuyo fundamento es el reconocimiento
de los derechos individuales y sociales, sino tambin un Estado Constitucional de
Derecho cuya principal caracterstica es garantizar y hacer efectivos los principios y
valores de la Constitucin y en especial lo que corresponde a los derechos humanos.
En este sentido, el Tribunal Constitucional sostiene lo siguiente:
La Constitucin de 1993 (artculos 3 y 43) establece que la Repblica del Per es
Social y Democrtica de Derecho, superando de este modo la concepcin de un Estado
Liberal de Derecho (el subrayado es mo). El trnsito de uno a otro modelo no es slo
una cuestin semntica o de trminos, sino que comporta el redimensionamiento de la
funcin del propio Estado.
En efecto, si bien es cierto que los valores bsicos del Estado liberal eran, precisamente,
la libertad, la propiedad individual, la igualdad, la seguridad jurdica y la participacin,
en todo mbito, de los ciudadanos en la formacin de la voluntad estatal, tambin lo es
que (...) el Estado social democrtico y libre no slo no niega estos valores, sino que
pretende hacerlos ms efectivos dndoles una base y un contenido material y partiendo
del supuesto de que individuo y sociedad no son categoras aisladas y contradictorias,
sino dos trminos en implicacin recproca de tal modo que no puede realizarse el uno
sin el otro.
Asimismo, por otra parte, seala que:
El trnsito del Estado Legal de Derecho al Estado Constitucional de Derecho supuso,
entre otras cosas, abandonar la tesis segn la cual la Constitucin no era ms que una
mera norma poltica, esto es, una norma carente de contenido jurdico vinculante (el
subrayado es mo) y compuesta nicamente por una serie de disposiciones orientadoras
de la labor de los poderes pblicos, para consolidar la doctrina conforme a la cual la
Constitucin es tambin una Norma Jurdica, es decir, una norma con contenido
dispositivo capaz de vincular a todo poder (pblico o privado) y a la sociedad en su
conjunto.
Es decir, signific superar la concepcin de una pretendida soberana parlamentaria, que
consideraba a la ley como la mxima norma jurdica del ordenamiento, para dar paso
-de la mano del principio poltico de soberana popular- al principio jurdico de
supremaca constitucional (el subrayado es mo) , conforme al cual, una vez expresada
la voluntad del Poder Constituyente con la creacin de la Constitucin del Estado, en el
orden formal y sustantivo presidido por ella no existen soberanos, poderes absolutos o
autarquas. Todo poder devino entonces en un poder constituido por la Constitucin y,
por consiguiente, limitado e informado, siempre y en todos los casos, por su contenido
jurdico-normativo.
LA REGIA SALCHI
Otra vez, como en el ao dos mil, los peruanos y peruanas tenemos que optar entre
defender, preservar y mejorar la democracia, o permitir el retorno de la dictadura a la
que Fujimori y Montesinos sometieron al pas durante toda la dcada de los 90.
Democracia o dictadura es nuestro dilema. Dictadura con todo lo que sta signific
entre 1990 y el 2000: permanencia inconstitucional en el poder, corrupcin
generalizada, control de las instituciones, compra de medios de comunicacin,
violaciones innumerables de derechos humanos, vnculos con el trfico de drogas y de
armas, persecucin de opositores y dems arbitrariedades y abusos propios de todo
rgimen dictatorial, como el que vivi el pas y ahora se pretende reinstaurar.
Gana Per, como movimiento poltico que ha logrado la mayor votacin en la primera
vuelta, quiere despejar todas las dudas que puedan haberse generado, por una u otra
razn, sobre los principios que guiarn su gobierno a partir del 28 de julio de este ao.
Con esta intencin, ante la grave disyuntiva en que nos encontramos, he decidido no
solo proclamar explcitamente mis compromisos ante todo el pas, y ante la opinin
pblica internacional, sino expresarlos bajo la solemne gravedad del juramento,
teniendo al pueblo entero del Per como testigo. He pedido adems a un grupo de
ciudadanos de indiscutible credibilidad que acompaen este acto y testifiquen as, ante
la Historia, mi compromiso.
a)
Proclamo que no me quedar ni un minuto ms de los 5 aos, que dura el
perodo presidencial. Asumo el compromiso de no hacer ni intentar ningn cambio
constitucional que permita la reeleccin.
b)
Manifiesto que respetar la independencia y los fueros de los otros poderes del
Estado.
c)
Me comprometo a que la libertad de expresin ser respetada, protegida y
estimulada. Que la libertad de prensa no solo ser respetada y valorada sino ser
decididamente defendida.
d)
Proclamo que cumplir con los cambios ofrecidos para lograr una distribucin
ms justa de los recursos econmicos del Per, y para una mayor inclusin econmica,
social, tnica, geogrfica y cultural de todos los peruanos, especialmente de quienes se
encuentran en pobreza o extrema pobreza.
2.
DEMOCRATIZACIN
PARTIDOS
FORTALECIMIENTO
DEL
SISTEMA
DE
La jefa del Gabinete Ministerial, Ana Jara, inform esta noche que el dilogo entre el
Gobierno y los partidos polticos comenzar el lunes 9 de febrero. Agreg que el
presidente Ollanta Humala participar en este proceso, que busca generar una agenda
concertada, en medio de una serie de ataques entre el oficialismo y la oposicin.
En conferencia de prensa de Palacio de Gobierno, Jara dijo esperar contar con todas las
fuerzas vivas que quieran apostar por una agenda nacional. Por disposicin de
presidente de la Repblica estaremos convocando a todas las fuerzas polticas para el
lunes 9 de febrero a las 10.00 horas en Palacio de Gobierno, subray. Segn inform,
maana jueves ser remitida la convocatoria oficial para esta reunin.
La primera ministra agradeci a los sectores polticos y sociales que han mostrados
voluntad para asistir a la reunin. Asimismo, exhort a quienes han mostrado su
discrepancia con la propuesta a modificar su posicin, teniendo en cuenta que los
intereses del Per estn primero.
3.
En los ltimos aos el Per ha desarrollado una poltica exterior de bsqueda de ampliar
sus relaciones polticas y comerciales con economas emergentes en el mundo, al mismo
tiempo que en la regin ha continuado siendo un buen aliado de los Estados Unidos.
Con este pas las relaciones de cooperacin han sido amplias aunque en la agenda la
poltica de cooperacin en la lucha contra las drogas ha tenido un papel sustantivo. Sin
embargo, la cooperacin de los Estados Unidos para la lucha antidroga en el Per se ha
reducido dramticamente en los ltimos aos y el presidente Humala parece querer
revertir esta situacin desde un enfoque de responsabilidad compartida. En ese sentido,
ha anunciado la creacin de una Cumbre Presidencial Regional Antidrogas con la
participacin de los pases productores y consumidores.
Por otro lado, el gobierno de Humala, por intermedio del Ministro de Relaciones
Exteriores, Rafael Roncagliolo, ha anunciado que desarrollar una poltica exterior
multilateral en Amrica Latina, y promover la integracin regional en el marco de la
Unin de Naciones Sudamericana (UNASUR) y la Comunidad Andina de
Naciones (CAN), buscando que estas no sean solo un foro de dilogo poltico sino
tambin de cooperacin econmica frente a la amenaza de crisis de las economas
desarrolladas.
5.
Al igual que otros pases de la regin, Per presenta una tendencia creciente en ndices
de crimen y violencia. Somos conscientes que estamos frente a un problema en el que
nos toca firmemente actuar.
La estrategia en esta materia parte por introducir reformas normativas y acciones que
realizar el gobierno. Esperamos que el paquete legislativo que remitiremos en
breve sea atendido con la premura y urgencia que se requiere.
En esta materia queremos enfatizar que estamos trabajando en una serie de reformas
importantes. Fortaleceremos la organizacin policial, buscando una mayor eficacia en
las reas especializadas de combate al crimen y mejorando y ampliando las comisarias
para brindar un adecuado servicio al ciudadano y protegerlo. Reestructuraremos los
protocolos de intervencin en las diversas acciones que se realizan: denuncias,
investigaciones, estrategias, seguridad de Estado, entre otros aspectos. Aprobaremos
una nueva ley de organizacin y funciones del Ministerio del Interior, para fortalecer sus
reas crticas y poder sostener el proceso de reequipamiento y modernizacin policial
que requiere el pas. Reformaremos el Cdigo Procesal penal para darle mayor eficacia
y evitar impunidad.
Sin duda, la Polica Nacional requiere urgente atencin para poder enfrentar la tarea de
la seguridad ciudadana. Ello pasa por abordar una estrategia
de equipamiento
integral y atencin a sus recursos esenciales. En este mbito se adquirir un
conjunto de vehculos como porta-tropas, patrulleros, motocicletas y motobombas
antidisturbios. Ser la compra ms grande que se ha hecho en aos. Se contar con
patrulleros inteligentes, un concepto diferente de seguridad con cmaras de video,
GPS, computadora, radar de registro de velocidad, dispositivo biomtrico y equipos de
telecomunicaciones.
Se ultiman los detalles para contar con patrullaje areo, lo que permitir una
accin rpida ante eventos criminales. Para ello, est previsto adquirir 4 helicpteros
equipados, para lo que se prev una inversin aproximada de 93 millones de soles.
Para la seguridad de los policas y el trabajo de control de disturbios se invertirn ms
de 30 millones en chalecos antibalas y equipo antimotines.
En el mbito tecnolgico, la reforma que emprenderemos implicar la puesta en
funcionamiento en diciembre de este ao del Sistema para la identificacin de huellas
dactilares (AFIS). Se trata de una poderosa herramienta de lucha contra el crimen que
permitir identificar a los delincuentes y evitar la duplicidad de identidad.
La Polica Nacional ingresar a la Era de la Comunicacin Digital, con la adquisicin
del sistema de comunicacin radial TETRA 2 para las ciudades de Lima y Callao el cual
entrar en funcionamiento en marzo de 2013, que ha significado una inversin de 29
millones de soles. Esto permitir una poderosa plataforma de comunicaciones de voz y
datos encriptados, para comunicar al personal policial de manera segura, eficiente y
confidencial. Tambin incluye un Sistema de Video Vigilancia para visualizar en
tiempo real puntos estratgicos de la ciudad. En el primer semestre del ao 2013,
implementaremos dicho sistema de comunicacin en las Regiones de Tacna, Arequipa y
Piura. Esto ya se encuentra en proceso de licitacin pblica, con una inversin de 30