Nemo - Cartas Rosacruces
Nemo - Cartas Rosacruces
Nemo - Cartas Rosacruces
THEOSOPHICAL SOCIETY
BRITISH SECTION
REFERERCE LIBRARY
28, Alomarle Street,
London, W.
HIS book is the pri^erty of the
. :gv/.
^
ir
i.
X
4
I-:
-.t
cartas rosacruces
V
ORIENTALISTA
PUBLICADO POR LA BIBLIOTECA
CARTAS
ROSACRUCES
traducidas dcl aleipn W'
ingls por ipemo
y del
BARCELONA
TiP. La Acadmica, de Serra H" y Russell
Ronda de la Universidad, 6
'
-
)v^vC^t0C\A^^^ '
.i
1
i
'
,-
- f"
-.i
.s. .
.,>i
CARTAS ROSACRUCES
Sabidfia divina
y en proporcin lo
sol espiritual,
que nos aproximamos la luz, es este
calor sentido.
Desde centro causa suprema y
el
ali-
Dirjanse todos tus esfuerzos
que
mentar la tierna planta de virtud
en tu seno crece. Para facilitar su
desarrollo purifica tu Voluntad y
no
permitas que las ilusiones de la sen-
sualidad y del tiempo te tienten y te
engaen y a cada uno de los pasos
que des en el sendero que la vida
eterna conduce, te encontrars con
un aire ms puro, con una vida nue-
va, con una luz ms clara, y en
pro-
porcin tu ascenso hacia lo alto,
aumentar la expansin de tu hori-
zonte mental.
La inteligencia sola no conduce
la sabidura. El espritu lo conoce
todo, y embargo ningn hombre
sin
le conoce. La inteligencia sin Dios en-
loquece, empieza adorarse ella
misma y rechaza la influencia del Es-
12
pritu Santo.
Ah
cun poco satis-
!
verdad.
El hombre un hijo de
espiritual es
la Luz. La regeneracin del hombre y
su restauracin su primer estado de
perfeccin, en el cual sobrepuja to-
dos los dems seres del universo, de-
pende de la destruccin y remocin
- 15
de todo ciiauto obscurece vela su
verdadera naturaleza interna. El hom-
bre es, por decirlo a.s, un fueg-o con-
centrado en el interior de una cscara
material y grosera es su destino el
;
16
noblece por completo la constitu-
cin del hombre hasta que se convier-
te en el verdadero Seor de la crea-
cin.
El deseo hacia lo dm -
l, tiene que
no, debe cesar en Luz
espintual haca la
o-i su visin
nubes que de
V tratar de disipar las
le separan.
El primer paso,
lamisma
yeTnecesario,%seltenerconemnca
del
de la existencia
mismo, para dui^i
i
dentro de uno -
hacia aquel ce
ooder de la Voluntad
interna y
llevar una vida
los
estrictamente todos
para cumplir
externos
tPberes internos y
oculta, de la
cual se
Existe una ley
nada, P
que nada, absolutamente
y
fnsigniScante que aea.
que le yP
dependa de algo
es q
jnLho mis elevado asi ;
19
interior superior reacciona
obra, el
siguientes
1. " El reino interno de la natu-
raleza.
El lazo que une al mundo in-
2.
III
ganizacin y de la constitucin de
nuestras facultades perceptivas. El
mayor de los obstculos que en el ca-
mino del progreso encuentra el estu-
diante de las ciencias ocultas, es el
30
habei'se desarrollado en l la creencia
errnea de que las cosas sonlo que
l leparecen ser, y menos de que
pueda elevarse por encima de esta su-
persticin y considerar las cosas, no
desde el mero punto de vista relativo
de su ego limitado, sino desde el In-
finito y el Absoluto, no ser capaz de
conocer la verdad absoluta. Antes de
que adelantemos ms en nuestras
instrucciones respecto al modo prc-
tico de aproximarse la Luz, ser ne-
cesario que imprimas con ms energa
en tu mente el carcter ilusorio de to-
dos los fenmenos externos.
Todo cuanto el hombre sensual co-
noce acerca del mundo externo, lo ha
aprendido por medio de las impres-io-
nes que llegan su conciencia al tra-
vs de los sentidos. Recibiendo repe-
tida continuamente semejantes im-
presiones, comparndolas unas con
otras, y tomando aquello que l cree
coLocer como base para especulacio-
nes acerca de cosas que no conoce,*
- 31
puede ovmar ciertas opiniones refe-
su
rentes cosas que trascienden
poder de percepcin sensual pero en ;
Jga
divina.
alqueprocede,delceBt.-c.^^^,~
Uuivftrso ha sido
remos elemental y ^
I
60
Slo puede existir- una Razu Su-
prema, Una bey Suprema, Una Sabi- 7
dura Suprema; en otras palabras: UN i
el
I
61
la
toda su vanidad y pretensiones
sabidura, ms que una gota en el
\
62
tulo de este libro es M., significando:
El Macrocosmo y el Microcosmo de la
AaUiraleia reunidos en un volumen.
El poder leer este libro correctamente
exige poderlo hacer no slo cont el ojo
de la inteligencia, sino que es nece-
sario adems leerlo con el ojo del Es-
pritu. Si sus pginas son iluminadas
solamente por la fra luz de la luna,
por la luz del cerebro, parecern muer-
tas, y aprenderemos nicamente lo
que en su superficie figura ira{)reso;
pero si la luz divina del amor ilumina
sus pginas radiando del centro del
corazn, comenzarn ellas vivir, y
los siete con que algunos de
sellos
tiene. :
68
lnaturaleza con la mera luz externa
de los sentidos, nada conocern de
ella ms que su mscara exterior; en
vano pedirn se les enseen los mis-
terios que nicamente con la luz del
espritu pueden ser contemplados;
porque la luz del espritu ha brillado
eternamente en las tinieblas, pero las
tinieblas no la comprendieron.
En dnde podemos esperar encon-
trar esta luz del espritu, ms que en
el interior de nosotros mismos? El
hombre nada puede conocer excepto
aquello que ya dentro de s mismo
existe. No puede ver, oir ni percibir
uing-uua cosa, externa; puede nica-
mente contemplar las im;igenes y ex-
perimentar las sensaciones que den
lug-ar los objetos exteriores en su con-
ciencia. Todo cuanto pertenece al
hombre, excepto su forma externa, es
un eptome, una imagen, una contra-
parte del universo. El hombre es el
Microcosmo de la naturaleza, y en l
se halla contenido, germinalmente,
- 64
eii un estado ms menos desarro-
llado, todo cuanto la naturaleza con-
tiene. En l residen Dios, Cristo y el
Espritu Santo. En l la Trinidad se
halla contenida, y los elementos de
los reinos mineral, vegetal, animal y
espiritual ;
l contiene el Cielo, el In-
tierno y expurgatorio ;
todo en l se
halla contenido, porque es la imagen
de Dios, y Dios es la causa de cada
una de las cosas que existen, y nada
existe que no sea una m.anifestacin
de Dios, y acerca de lo cual pueda de-
jar de decirse en cierto sentido que
sea Dios la substancia de Dios.
La totali4ad del universo y todo
cuanto el mismo contiene, es la ma-
nifestacin exterior de aquella Cansa
Poder interno, al cual hombres los
'
dad del Divino Principio en el interior
de nuestros corazones, escuchar su i
j
mi-
trado la vida eterna y la verdad ab-
soluta.
El gran error de nuestra poca in-
telectual es el q^ue crean los hombres
poder llegar al conocimiento de la
verdad por mera especulacin inte-
telectual, cientfica, filosfica teo-
lgica ycon slo el raciocinio. Esto
es falso por completo, porque si bien
un conocimiento de la teora oculta
tu contestacin mi carta l-
tima, has manifestado la opinin
de que el ex'ponente de espiritualidad
(significando intelectualidad y mora-
lidad combinadas) exigido por nues-
tro sistema de filosofa, es en exceso
elevado para que el hombre pueda
alcanzarlo, y dudas t si alguien ha
llegado alguna vez l. Permite que
te diga, que muchos de aquellos
quienes la Iglesia Cristiana llama san-
tos, y otros muchos que no han per-
manecido jams aquella Iglesia y
quienes se acostumbra llamar pa-
ganos, han obtenido aquel estado,
y por lo tanto han alcanzado poderes
espirituales que les han permitido lle-
var cabo cosas bien extraordinarias,
llamadas milagros.
Si examinas la historia de las vi-
das de los santos, encontrars en ellas
una gran cantidad de cosas grotescas,
fabulosas y falsas, puesto que aque-
llosque escriben las leyendas cono-
cen bien poco nada acerca de las le-
yes misteriosas de la naturaleza; ellos
han registrado fenmenos que han
tenido lugar, que por lo menos se
cree que han sucedido pera no pue-
;
y la lgica.
En muchos puntos del mundo han
78
sido las gentes degradadas hasta
un
punto tal por la civilizacin moder-
na, que ha llegado ser para ellos
completamente incomprensible el que
una persona pueda verificar acto al-
guno, sea el que fuere, excepto con el
objeto de ganar dinero, obtener como-
didades por aficin al lujo el nico
;
frvola ,
sino por el deseo de se-
80 -
guir el camino de la misma, me es
permitido darte las noticias siguien-
tes: (1)
Los Hermanos de quienes hablamos,
viven desconocidos para el mundo; la
historianada sabe acerca de los mis-
mos, j sin embargo, son ellos los ms
grandes de entre toda la humanidad.
Los monumentos que en honor de los
conquistadores del mundo han sido
erigidos, se habrn convertido en pol-
YO reinos y tronos habrn cesado de
;
mismos se excluyen.
Mientras los ateos, materialistas y
escpticos de nuestra civilizacin mo-
derna falsean la palabra Filosofa,
con objeto de preconizar como sabidu-
ra divina las elucubraciones de sus
propios cerebros, estos Hermanos vi-
ven tranquilamente bajo la influencia
de una luz ms elevada, y construyen
un templo para el eterno espritu, un
templo que continuar existiendo des-
pus de que ms de un mundo habr
perecido. Su trabajo consiste en cul-
tivar ios poderes del alma ni el tor-;
- 83 -
ciientran en l todo cuanto en la
naturaleza es bueno, verdadero y be-
llo.Son ellos los que no se limitan
creer meramente, sino que conocen la
verdad por contemplacin espiritual
Fe, y sus obras hllanse en armona
con su Fe, porque ellos obran bien por
amor al bien y porque saben qu es el
bien.
No
creen que pueda un hombre con-
vertirse en un verdadero Cristiano por
la mera profesin de una cierta creen-
cia, por unirse una iglesia Cris-
tiana en el sentido literal de la pala-
bra. Convertirse en un verdadero
Cristiano significa convertirse en un
Cristo, elevarse por encima de la es-
fera de personalidad, incluir
y po-
seer en el seno del yo propio divino
y
de uno mismo, todo cuanto existe en
los cielos sobre la tierra. Es un
es-
tado que se halla fuera de la concep-
cin de aquel que no lo ha alcanzado;
significa una condicin en la cual uno
es actual y conscientemente un templo
84
en donde la Trinidad Divina, con todo
su poder, reside. Unicamente en esta \
tiloso.
Slo existe un Dios, una verdad,
una ciencia y un camino para llegar
a
F/
)
85
ella, *
este camino se le da el nombre
de religin, y por lo tanto, slo existe
VI
Expepieneias personales
'
en la naturaleza misterios
^^ xiSTEN
innumerables que desea el hom-
bre descubrir. La creencia d que
existen ciertas sociedades en posesin
de secretos determinados que podran,
si quisiesen, comunicar otras perso-
nas que no han llegado al grado de
desarrollo espiritual de los que las
mismas, constituyen, es una creencia
errnea. El hombre que cree que el
verdadero saber puede ser obtenido
por medio de favores, en lugar de des-
envolvimiento espiritual, cesa de es-
forzarse en lograr su propio desarrollo
- 95
y se une sociedades secretas
d
igdesias, esperando con ello obtener
algo que no se merece pero siempre ;
caciones.
Tiene V. negocios? exclam yo.
Desempea V. algn cargo p-
blico?
Querido amigo, contest el ex-
tranjero, el que es bueno siempre,
encuentra en qu ocuparse, y el hacer
el bien es el ms alto empleo que
gn premio egosticamente.
Por lo tanto, vemos al Cristianismo
dividido en algunos centenares de so-
ciedades, sectas y religiones diferen-
tes, mclias de las cuales se odian y
procuran perjudicarse unas otras,
mirnclose mutuamente con despre-
cio. Y vemos el clero de todos los pa-
ses tratando de obtener poder poltico
111
intereses egostas
y de piomover sus
el inters egosta de su iglesia. Han
perdido ellos de vista al Dios Univer-
sal de laHumanidad, y han colocado
al dios del yo en su lugar. Pretenden
ellos estaren posesin de poderes di-
vinos que no tienen, y sea cual fuere
el poder que poseen, lo emplean para
obtener beneficios materiales para su
iglesia.
As vemos que el divino principio
de verdades prostituido todos los das
y todas horas en las iglesias, que'
son tan slo mercados para los que
las ocupan. El templo del alma hllase
todava ocupado por mercaderes, y de
l permanece todava excluido el es-
pritu de Cristo.
Luz Universal del Logos
Cristo, la
Manifestado, la Vida y la Verdad, est
en todas partes y no puede ser ence-
rrado ni en una Iglesia ni en una So-
ciedad Secreta. Su iglesia es el Uni-
verso, y sus altares el' corazn de cada
sr humano en el cual su luz es admi-
112
tida. Elsecuaz verdadero de Cristo no
conoce yo alguno, y no sabe lo que
es un deseo egosta. No se preocupa
por el bienestar de ms iglesias que
por de aquella que es lo suficiente-
el
mente ancha para contener la hu-
manidad entera, sin tener en cuenta
ni diferencias ni opiniones. Se, pre-
ocupa muy poco de su salvacin per-
sonal, y mucho menos espera obte-
nerla costa de otra persona. Sintin-
dose l mismo sumido en el amor
inmortal, sabe que l esya inmortal
en aquel principio ;
sabiendo que su
ego individual tiene sus races en la
conciencia eterna de Dios, bien poco
se preocupa de aquel yo personal^ que
no es ms que una ilusin hija del
contacto del espritu eterno con la
materia. El verdadero secuaz de la
Luz no posee ms voluntad, pensa-
miento deseo que aquello que el Es-
pritu Universal quiere, piensa , de-
sea por medio de l. El poner al yo
de uno en situacin receptiva para la
113
luz divina, el ejecutar lo que su vo-
limtail indica, y convertirse as en un
instrumento por medio del cual pueda
Dios manifestar su divino poder sobre
Ja tierra, es el nico medio de obtener
la ciencia espiritual y de convertirse
en un Hermano de la Cruz y de la
Rosa de Oro.
8
VII
Los HePi^^r^os
in
diferencias de 0{)iniones entre ellos no
existen. Todos ellos estudian un solo
libro, y el mtodo de estudio es para
todos el mismo.
Nuestra Sociedad se halla compues-
ta de Elegidos, o sea de aquellos que
buscan la luz y que son capaces de re-
cibirla, y aquel que posee la mayor
receptividad para aquella luz, es nues-
Nuestro punto de reunin
tro Jefe.
es conocido intuitivamente por cada
miembro, y fcilmente alcanzado por
todos,importando bien poco el lugar
en donde residau. Est muy cerca, y
sinembargo se halla oculto los ojos
delmundo, y nadie puede encontrarlo
como no sea un iniciado. Aquellos
que estn maduros, pueden entrar;
aquellos que no lo estn tienen que
esperar.
Nuestra orden tiene tres grados. Al
primero se llega por el poder de la
inspiracin divina;
al segundo por
medio de iluminacin interior y ai
la
tercero y ms elevado, gracias la
118
contemplacin y la adoracin. En
nuestra Sociedad no existen ni dispu-
tas ni controversias, ni especulacio-
nes, ni sofismas, ni dudas, ni escepti-
cismos, ya(;[uel quieu se le presenta
la mejor oportunidad para hacer bien,
es el ms feliz entre nosotros. Estamos
nosotros en posesin de los misterios
ms grandes, y sin embargo, no so-
mos ninguna Sociedad secreta, porque
nuestros secretos son un libro abierto
para cada uno que se encuentra en
disposicin de leer en l. El secreto no
es debido tener nosotros poco deseo
de ensear; dbese la debilidad de
aquellos que piden se les ensee.
Nuestro.s secretos ni pueden ser com-
prados por dinero alguno ni pueden
ser pblicamente demostrados son ;
terna.
Deseas llegar ser un miembro de
nuestra Sociedad? Si es as, penetra
en tu propio corazn. Deseas conocer
los Hermanos f Si es as, aprende
conocer la divinidad manifestndo-
se por s misma dentro de tu propia
alma. Basca dentro de t aquello que
es perfecto, inmortal y no sujeto
cambio alguno, y cuando lo hayas
encontrado, habrs entrado en nues-
tra sociedad y nos conocers nos-
otros. En nuestro no pueden
crculo
admitirse imperfecciones de ningn
126
gnero, y antes de que puedas entrar
en l, tienes que arrojar de t todas
las imperfecciones de tu naturaleza
propia. Los elementos corruptibles de
tu interior deben ser consumidos por
el fuego del Amor Divino. Debes ser
bautizado con el agua, de la verdad,
y
estar revestido de una substancia in-
corruptible que es producida por pen-
samientos puros. El interno sensoriwn
debe ser abierto la percepcin dlas
verdades espirituales, iluminada la
mente por la sabidura divina. Enton-
ces se desarrollarn dentro de tu pro-
pia alma grandes poderes, ahora para
t desconocidos, y podrs entonces
vencer el mal. Tu entero sr ser res-
taurado y transformado en un sr de
*
luz, y tu cuerpo servir de mansin
para el espritu divino.
Preguntas t, cules son nuestias
doctrinas? No tenemos ninguna para
proclamar, porque cualquiera quesea
la que presentemos, no puede s-r para
t ms que una opinin dudosa, du-
_ 127 .
1
129
humanas que poi' las calles encuen-
de carne llena de impu-
tras, repletas
rezas animales y con el sello de la
intemperancia y de la sensualidad
impresos en sus rostros, y pregntate
t mismo, si estn no adaptadas
para las manifestaciones internas de
la sabidura divina.
Tambin decimos nosotros que esjii-
Tu Sus atri-
es substancia, realidad.
butos son indestructibilidad, impe-
:
n
130
mundo, por decirlo as, la pintura
sombra del mundo interno
y real,
producida por la luz del. espritu vi-
viente que obra en el interior y en el
exterior de la materia animada.
La inteligencia inferior del hombre
toma sus ideas prestadas del reino
siempre inestable de lo sensual y ;
y espiritual del
hombre, y ser nica-
mente posible, el da en que sea cono-
cida por completo la entera constitu-
131
APRENDE A CONOCER
TU PROPIO YO
\
/
w
ndice
Pgs.
. Sabidura divina 5
Luz . 17
(74
VI. Experiencias personales 94
VIL Los Hermanos 114
O
i
i
i-: 5 -y.
."O
-.."tr.
I
>
*
V
'3
-rf
p
^ .
I : ;
" t
V,/ ^'a
r-
^
%
^ 9
-M
'
\
.. <
^
^
.r--'v-v.'
9' , >
y
fi:
- f.
%^- ^--r
" f*
t t
; :
^,. . .
.
!
-(