El Salat Del Nabi (Saw) Ani
El Salat Del Nabi (Saw) Ani
El Salat Del Nabi (Saw) Ani
“Este es uno de los dichos más incorrectos existentes, puesto que si el ijtilaf es
una misericordia, entonces el acuerdo sería un castigo, algo que ningún
musulmán debe decir, porque sólo o se está de acuerdo o no, y solo puede
haber misericordia o castigo.”
b) Maudú (fabricado). Contado por Ibn Abdúl Barr en Yamí Bayán al-‘Ilm
[2/91] & Ibn Hazm en al-Ijkam [6/82] por medio de Salam ibn Sulaim, quien
dijo (de): al-Hariz ibn Guisén nos narró de al-A’mash quien a su vez de Abu
Sufián y a su vez de Yabir y por último del Profeta (Salallahu alehi wa salam).
Ibn Abdúl Barr dijo: “la prueba no puede fundamentarse con este isnad porque
al-Hariz ibn Guisén es mach-jul (desconocido)”; Ibn Hazm dijo: “Esta es una
narración derruida. Abu Sufian es débil; al-Hariz ibn Guisén es Abu Uahb a-
Zacafí; Salam ibn Sulaiman narró muchos hadices fabricados, y sin duda este
es uno de ellos.”
Criticar este hadiz de Salam ibn Sulaim –también conocido como Salam ibn
Sulaiman –es mejor, porque él está de acuerdo de que es da’íf; de hecho, Ibn
Jirás dijo sobre él que es “un mentiroso” e Ibn Hibban dijo: “él narró hadices
fabricados.”
En cuanto a Abu Sufián, él no es débil como Ibn Hazm dijo, pero más bien es
confiable como dijo Ibn Hayar en a-Tacrib, y Muslim narra de él en su Sajíj.
Al-Hariz ibn Guisén es desconocido ya que Ibn Hazm dijo lo mismo que
Abdúl Barr, a pesar de que Ibn Hibban lo menciona en a-Zicat (los narradores
confiables).
Yáfar ibn Abdúl Uahid, quien dijo: Uahb ibn Parir ibn Azim nos lo informó
de su padre y a su vez de al-A’mash, y a su vez de Abu Saleh y a su vez de
Abu Huraira y por último del Profeta (Salallahu alehi wa salam).
Uno de los mohadices, Ibn al-Mohíb o Dájabi, escribieron al margen: “este
hadiz no es nada auténtico”, o sea, que es fabricado; el defecto aquí es Yáfar,
sobre quien Daracútni dijo: “él solía fabricar hadices”; Abu Zur’a dijo: “él
narró hadices infundados”; Dájabi dio unos hadices, los cuales motivaron que
él lo despreciara, entre ellos éste, diciendo luego: “¡Esto es una calamidad
suya!”
2.2) “Lo que sea que os ha sido dado del Libro de Alá acatadlo; no hay
ocasión para quien lo abandone. Si no se halla en el Libro de Alá;
(acatad) un precedente mío (sunna). Si no hay precedente mío (sunna),
entonces (acatad) lo que mis Compañero dicen: pues en verdad mis
Compañeros pertenecen a la constelación de estrellas; así que cualquiera
de ellos elijáis, seréis guiados y el desacuerdo de mis Compañeros es una
misericordia para vosotros.”
Sobre Sulaiman ibn Abi Karima, Ibn Abi Hatim [2/1/138] reportó de su padre
sobre éste: “Es él débil en hadiz.”
Al-Iraquí acotó la última parte del hadiz en su Tajrich del libro de Ihyaa’
‘Ulum a-Din [1/25] y después dijo: “es un isnad da’íf.”
Maudú (fabricado). Reportó Ibn Batta esto en al-Ibána [4/11/2], Jatib, Nizam
al-Malik en al-Amáli[13/2], Diyá en al-Muntacá ‘an Masmu’atiji bimaru
[116/2] & Ibn Asakir [6/303/1] por medio de:
No’aim Ibn Hammad, quien dijo: Abdú Rahim ibn Zeid nos narró de su padre
y a su vez de Saíd ibn al-Musayyib a su vez de Omar ibn al-Jatab y a su vez
del Profeta (Salallahu alehi wa salam)
No’aim Ibn Hammad es débil: Ibn Hayar dijo: “Comete muchos errores.”
Sobre Abdú Rahim Ibn Zeid al-‘Amí, Bujari dijo: “él es desidioso”; Abu
Hatim dijo: “Sus hadices son abandonados: él es inaceptable en el hadiz –él
solía subestimar a su padre al narrar las desgracias de aquél”; Ibn Mahín ha
calificado a Abdú Rahim como un mentiroso; dice en al-Mizan: este hadiz es
falso.”
2.4) “De verdad, mis Compañeros son como las estrellas: así que si
aceptáis cualquiera de su dichos, estaréis guiados.”
Ibn Batta lo narró también en al-Ibana [4/11/2] por una cadena alterna de Abu
Shihab.
Ibn Abdú Barr dijo: “este isnad es falso; ninguno sirve de prueba de que haya
sido reportado por Náfi’.”
El tal Hamza es Ibn Abi Hamza; Daracútni dijo sobre él: “Matruc
(desidioso)”; Ibn ‘Adi dijo: “Sus narraciones son en su mayoría fabricadas”;
Ibn Hibbán dijo: “él nada más narra cosas que fabrica a partir de narradores
confiables, a tal grado que parece que lo hace deliberadamente- no es
permitido registrar nada de él.”; Dájabi acotó algo de sus hadices inventados
en al-Mizan, y éste es uno de ellos.
Ibn Hazm dijo en al-Ijkam (6/83), después de declarar que este hadiz (no. 2,
con todas sus versiones) es indudablemente una mentira que contradice
claramente a muchas aleyas del Corán, o sea, La estrella (53:3-4), las Mujeres
(4:82) y el Botín (8:46). Por lo cual:
Ibn al-Mulaquin dio una versión resumida de Ibn Hazm en la obra al-Julasa
(2/175), que aprobó y terminó con la discusión del hadiz diciendo: Ibn Hazm
dijo “esto es una narración falsa, inventada, fabricada incorrecta.”
APÉNDICE 2
Hadiz auténtico:
Abu Baker dijo: “¡Oh Mensajero de Alá! ¡Por la vida de mi padre! ¡Por Alá!
permíteme interpretar este sueño.” El Profeta (Salallahu alehi wa salam) le
dijo: interprétalo. Abu Baker dijo: “la nube con sombra simboliza el Islam; la
mantequilla y la miel cayendo de ella simboliza el Corán; su dulzura y la
gente es la que aprende mucho o aprende poco. La soga que se extiende del
cielo a la tierra es la Verdad que tú (Nabí) sigues. Tú la sigues y Alá te elevará
a ella, y un hombre la seguirá y se elevará a ella; y otro hombre la seguirá y
se elevará a ella; otro hombre la seguirá y se romperá y luego se unirá para él
y se elevará a ella. ¡Oh Mensajero de Alá! ¡Por la vida de mi padre!¿Estoy
correcto o no?”
Abu Baker dijo: ¡Oh Profeta de Alá! Por Alá, debes decirme en que estuve
mal.”
El Profeta (Salallahu alehi wa salam) dijo: No jures.
(Relatado por Bujari & Muslim, también por Abu Daud, Tirmídi, Darimi, Ibn
Maya, Ibn Abi Cheiba Y Ahmed.)
APÉNDICE 3
Hadiz auténtico:
[Narraciones posteriores del este hadiz se han hallado en otras obras de hadiz
como Sunan Abi Daud, etc. Conteniendo más detalles.]
APÉNDICE 4
La inconsistencia del hadiz sobre poner las manos abajo del ombligo.
De: Irwá al-Galíl (353) & Ajkam al-Yanáiz (p. 118), de Sheik al-Albani.
Abdú Rahmán ibn Isaac por medio de Ziyaad ibn Zeid a-Siuáí por medio de
Abu Yuhaifa y por medio de Alí (A. S. E.), quien dijo: “es de la Sunna
durante la oración colocar una palma sobre la otra (mano), (por) debajo
del ombligo.”
Este isnad es da’íf (inconsistente/débil) debido a que Abdú Rahmán ibn Isaac
(al-Uasiti al-Cufi), es inconsistente (léase más adelante). Por lo anterior,
contiene idtiraab (alteración), ya que él lo narró con tres cadenas diferentes
cada vez que lo mencionaba:
(1) Una vez con: Ziyad por medio de Abu Yuhaifa y por medio de Alí
(como se lee arriba);
(2) Otra ocasión: No’man ibn Sa’d por medio de Alí (registrado por
Daracútni y Baijáqui);
(3) Y en otra ocasión con: Siyaas Abul Hakam y por medio de Abu Uaail,
quien dijo: “Abu Huraira dijo: ‘es de la Sunna…” (registrado por Abu
Daud [758] y Daracútni).
Entonces, estos tres hadices demuestran que la Sunna es colocar las manos
sobre el pecho, y cualquiera que se encuentre con ellos no dudará que todos
ellos son suficiente prueba de ello.
APÉNDICE 5
Maudú (fabricado). Ibn Tahir lo acotó en Tadkira al-Mauduat (p. 93) y dijo:
“el isnad contiene a Mamún ibn Ahmed al-Harawi, un mentiroso que solía
narrar fabricaciones.” Muchas de sus descripciones están dadas en el hadiz 2
de adelante. Ibn Hibban mencionó este hadiz a su nombre en ad-Du’afa
(narradores débiles) y Dájabi lo consideró como una calamidad de aquél.
Algunos hanefitas han sido engañados por este hadiz, arguyendo en base de
que cualquier recitación detrás del imám es totalmente prohibida. Abul
Hasanat al-Lucnaui dijo en at-Ta’lic al-Mumachid ‘ala Muwatta Muhammad
(p. 99): “mencionó el autor de Nijáya y por otros que es marfú en su
expresión: ‘…habrá un carbón ardiendo en su boca’, lo que es totalmente
infundado.”
Dijo antes de eso. “no hay ningún hadiz marfú que tenga una prohibición de
recitar la Fatiha detrás del imám; todo lo que ellos consideran marfú es tanto
infundado como falso.” Entonces mencionaron este hadiz con dos expresiones
como ejemplo.
2.- “Quien eleva sus manos durante la oración, no hay oración para éste.”
Está claro para mí que los hadices inventados por Mamún al-Harawi, un
fanático adicto al mad-jab hanefita, con hadices adscritos a él (en los libros de
narradores) al respecto, defienden (vehementemente) al Imám Abu Hanifa e
insultan (tenazmente)al Imám Chafeí, de los cuales el de arriba es uno de
ellos; rechazando el que apoya el punto de vista de Chafeí de levantar las
manos tanto al bajar en rukú como al erguirse después de él (lo cual es la
verdad, indudablemente); pero apoyando el punto de vista hanefita el cual lo
condena a makrú. Más aún, no conforme con esto, llegó al punto de inventar
el hadiz que leemos, para así diseminar la idea de que levantar las manos en la
oración, la anula.
Tal vez intentó apoyar la narración de Majúl de que Abu Hanifa dijo: “quien
levante sus manos durante la oración, su oración esta arruinada” narración que
embaucó a Amer Katia al-It-cani, quien compiló un tratado basado en el
argumento de que la oración no vale al elevar las manos. Asimismo, engañado
vive quien traza y sigue este camino, ordenando inclusive que no es permitido
para los hanefitas rezar detrás de un chafeíta porque éste último eleva sus
manos. Por todo ello, esta narración atribuida a Abu Hanifa es una atroz
mentira, tal como lo verificó ‘Aláma Abul Hasanat al-Lucnaui es su obra al-
Faua’id al-Bajiya fi tarayum al-Hanafía (pp. 116, 216-7).
Sheik Alí al-Qari apuntó este hadiz en su al-Mauduát y después dijo (p. 81):
“este hadiz fue fabricado por Mohámed bin ‘Ucasha al-Kirmani, ¡que Alá lo
arruine!” y posteriormente (p. 129), apuntó lo que Ibn Cayyim dijo al
respecto: “Es fabricado”.
Yendo más lejos, otra de las invenciones de este miserable mentiroso, y esta
vez, insultando abyectamente al Imám Chafeí (Mohámed bin Idris), es el
siguiente:
Mamún ibn Ahmed as-Salmi, quien dijo: Ahmed ibn Abdulá al-Yuwaibari nos
narró: Abdulá ibn Mi’dan al-Azadi nos informó de Anas como marfú; y luego
dijo que es “fabricado; inventado por Mamún o por Yuwaibiri. Hakim lo
mencionó en el Marjal que a Mamún le preguntaron: ‘¿acaso acudís a Chafeí
y sus seguidores?’ a lo que respondió, ‘Ahmed ibn Abdulá al-Yuwaibari nos
narró…etc.,’ de modo que es evidente de esto que él es el inventor de esto.”
APÉNDICE 6
No hay bases para decir que el hadiz fue expresado de esta manera, hasta
donde sabemos. Ibn Hayar dijo en Taljis al-Habir (p.90): “No lo he
encontrado con estas palabras, pero su significado está vinculado con Ibn
Maya en el hadiz de Bíchir ibn Rafi.”:
Da’íf (inconsistente/débil). Relatado por Ibn Maya (1/281) y Abu Daud sin la
añadidura (entre corchetes) (1/148), por medio de:
Bíchir ibn Rafi a su vez de Abu Abdulá, primo de Abu Huraira; a su vez de
Abu Huraira quien lo contó del Profeta (Salallahu alehi wa salam).
Ibn Hayar en Taljis (p. 90) dijo: “Bíchir ibn Rafi es inconsistente; el primo de
Abu Huraira se dice es un desconocido, pero Ibn Hibban lo ha declarado
confiable.”
3.- “Cuando terminaba de recitar la Madre del Corán, elevaba su voz y decía
‘aamíin’.”
Todas las demás fuentes contienen a Isaac ibn Ibrahim ibn al-Ála’ az-Zubaidi,
conocido como Ibn Zibric, quien es inconsistente; Abu Hatim dijo: “un
anciano no se le daña”; Ibn Ma’in lo describió en buenos términos; Nasái dijo:
“no confiable”; Mohámed ibn ‘Auf dijo: “No tengo duda de que Isaac ibn
Zibric solí mentir.” Sin embargo, estas palabras son correctas en significado
ya que se basan en un hadiz de Ua’il ibn Hayar con isnades sajíj.
4.- “Solía escuchar a los imames: Ibn az-Zubair y otros después de él decían
‘aamíin’, y los que estaban atrás decían ‘aamíin’, hasta que la mezquita hacía
eco.”
(i) La inconsistencia de Muslim ibn Jalid az-Zanyi; Ibn Hayar dijo: “él
era confiable, pero cometió muchos errores.”
(ii) El ‘an ‘anaj (que con respecto de él) de Ibn Yuraich, quien fue un
mudalis; tal vez lo tomó de Jalid ibn Abi Anuf, quien lo narró de
áta’ como viene:
Relatado por Baijáqui (2/59) e Ibn Hibban en Zicat (2/74); la narración alterna
es del primero.
Este Jalid fue descrito por Ibn Abi Hatim (1/2/2355-6), pero esto no incluyó
ninguna confirmación o negación. Ibn Hibban lo incluyó entre los narradores
confiables; pero Ibn Hibban es mejor conocido por no ser tan riguroso en tales
casos, por lo que no me satisface que dicha narración sea auténtica. Esto es
porque Ibn Yuraich lo tomó de él, lo que implica que hay una vía debatible; si
no es así, no sabemos de quien lo tomó Ibn Yuraich. Parece que el imám
Chafeí no estaba satisfecho con la confirmación de esta narración, porque su
posición es contraria a este; dice en al-Umm (1/95): “así que cuando el imám
completa la recitación de la Madre del Libro y dice ‘aamíin’, alza su voz a
modo de que los que están detrás puedan seguirlo; cuando lo dice, ellos lo
dicen a sí mismos, pero a mí me disgusta que lo digan fuerte”; de ser que la
anterior narración de los Compañeros fuera auténtica desde el punto de vista
de Chafeí, él no se habría opuesto a su aplicación.
De aquí partimos que la opinión más correcta en este asunto parece ser el
mad-jab de Chafeí: que el imám sin que lo sigan, debe decir el amén
fuertemente. Y Alá sabe mejor.
En esta narración, Ibn Yuraich ha aclarado que (cara a cara) tomó la narración
de Áta’, por lo que estamos bien seguros de la ausencia de tad-lis, y la
narración de Ibn a-Zubair está firmemente establecido. De igual manera está
comprobado de Abu Huraira; Abu Rafi dijo:
5.- Abu Huraira solía llamar a la oración en lugar de Marwan ibn al-
Hakam, estipulando que el último no llegaba hasta ‘Ni de los extraviados’
a menos que supiera que Abu Huraira había entrado a las filas. Así que
cuando Marwan dijo ‘Ni de los extravíados’, Abu Huraira decía ‘aamíin’,
prolongándolo. También dijo: ‘Cuando el amén de aquellos en la tierra
coincide con el amén de aquellos en el cielo, ellos son perdonados’.
APENDICE 7
Ibn Uahb ha sido respaldado por Abdulá ibn Saleh, quien dijo: Muawiya ibn
Saleh nos narró… etc., relatado por Daracútni (p. 177) y Tabaráni en al-
M’yam al-Kabir (1410). Abdulá ibn Saleh es un maestro de Bujari, así que
puede ser usado como evidencia para apoyar otras narraciones.
Este hadiz es utilizado como evidencia por el Imam Ibn Juzaima “que la
oración después del uiter se permite a quienes quieran rezar después de él, y
que las dos rakás que el Profeta (Salallahu alehi wa salam) solía rezar después
del uiter no fueron exclusivamente para él sobre su umma, ya que nos ordenó
rezar dos rakás después del uiter, una orden de recomendación y preferencia,
no una de obligación forzada.”
Se deduce claramente de este hadiz (por su orden general para su umma) que
las dos rakás después de uiter no eran exclusivamente para él; parece que el
propósito de su ordenanza de hacer la última oración de la noche impar era
evitar la negligencia de la raká impar, así que dicho objetivo no se contradice
con las dos rakás después de ésta, como está establecido en su práctica y en su
ordenanza. Y Alá sabe mejor.
APÉNDICE 8
Tirmídi dijo después de esto: “este es un hadiz garib sajíj. Sólo se sabe que es
un hadiz de Jamád ibn Isa, ya que solamente él lo reporta, quien tiene pocos
hadices que sin embargo, la gente los ha reportado de él.”
Ibn Mahín dijo “un buen Sheik”1 ; Abu Hatim dijo: “débil para el hadiz”; Abu
Daud dijo: “débil, él reporta hadices munkar”; Hakim y Naccach dijeron: “él
reporta hadices falsos de Ibn Yuraich y yapar reporta cosas, las cuales son
‘equivocadas acerca de la autoría de Ibn Yuraich y Abdúl Aziz ibn mar ibn
Abdúl Aziz, que parece que aquellos que están en juego lo hacen
1
Si Ibn Mahín habla favorablemente de un narrador cuando el resto de los sabios lo han declarado
inconsistente, entonces la afirmación de Ibn Mahín es descartada; la razón es que él fue conocido por su
rigidez y severidad en la crítica; los narradores inconsistentes deberían ser cuidadosos en no revelar su
debilidad ante él; por lo que el juicio se pasa en conformidad. Esto explica el por qué esta sólo en la
autentificación del narrador.
deliberadamente; no es permitido referirlo como prueba.” Ibn Makula dijo:
“ellos declaran sus hadices débiles.”
Da’íf (débil). Abu Daud (1492) de Ibn Laji’a de Hafs ibn Hisham ibn Utba
ibn Abi Uacca de Sa’ib ibn Yazíd de su padre.
Este hadiz no puede ser reforzado por ninguna de las dos vías de narración
debido a la gran inconsistencia presentada en el primero (de los hadices), el
cual ya hemos visto.
Da’if (inconsistente). Relatado por Ibn Maya (1181, 3866), Ibn Naser en
Quiyam a-Lail (p. 137), Tabaráni en al-Múyam al-Kabir (3/98/1) y Hakim
(1536), de Saleh ib Hásan de Mohámed ibn Ka’b de Ibn ‘abbas (A. S. E.)
como marfú.
Es un isnad débil debido a que Ibn Hásan, quien es munkar en hadiz, como
afirmó Bujari; Nasái dijo: “el está desamparado en hadiz”; Ibn Hibban dijo:
“él solía andar con solteras y escuchar música y solía narrar reportes
inventados con la autoría de narradores confiables”; Ibn Abi Hatim dijo en
Kitab al-‘Ilal (2/351): “pregunté a mi padre (o sea, Abu Hatim a-Razi) sobre
este hadiz, del cual dijo: ‘Munkar’.”
Ibn Hásan ha sido respaldado por Isa ibn Maimún, quien también lo reportó de
Mohámed ibn Ka’b, como lo contó Ibn Náser. Sin embargo, no altera nada, ya
que Ibn Maimún es igualmente inconsistente: Ibn Hibban dijo: “él reporta
hadices, los cuales son invenciones”; Nasái dijo: “Nada confiable.”
Éste hadiz de Ibn Abbas también lo contó Abu Daud (1485), y a su vez de él
Baijáqui (2/212) por medio de: Abdúl Malik ibn Mohámed ibn Aiman de
Abdulá ibn Yacub ibn Isaac de alguien que lo narró de él de Mohámed ibn
Ka’b, quien dijo:
Este isnad es débil: Abdúl Malik es declarado inconsistente por Abu Daud;
también conlleva al maestro de Abdulá ibn Yacub el cual no se nombra, y por
lo tanto desconocido – es posible que sea Ibn Hásan o Ibn Maimún, ambos
mencionados anteriormente.
El hadiz es también transmitido por Hkim (4/270) a través de : Mohámed ibn
Muawiya, quien dijo que Masadif ibn Ziyad al-Madini se lo narró a él y que lo
escuchó de Mohámed ibn Ka’b al-Curazi. Dájabi lo complementó recalcando
que Ibn Muawiya fue declarado mentiroso por Daracútni, de modo que el
hadiz es falso.
Abu daud dijo sobre este hadiz: “este hadiz ha sido narrado por más de una
vía de narración con la utoría de Mohámed ibn Ka’b; todos ellos son débiles.”
Elevar las manos en cunút por una calamidad está establecido por el
Mensajero de Alá (Salallahu alehi wa salam) en su súplica contra los
politeístas quienes mataron a setenta salmodeadores – transmitido por Imám
Ahmed (3/137) y Tabaráni en Al-Múyam as-Saguir (p. 111) como en el hadiz
de Anas con un isnad sajíj. Igualmente está comprobado por Omar y otros en
el cunút de la oración uiter. Sin embargo, ya que frotar la cara después de du’a
al-cunút no es para nada registrada del Profeta (Salallahu alehi wa salam) y
de ninguno de los Compañeros, es una innovación sin lugar a dudas.
Aprendió también de su padre el arte de la relojería –en la cual fue muy hábil-
y de la cual obtenía sus ingresos. A la edad de los veinte años empezó a
profundizar en el campo del hadiz y materias afines tras leer los artículos
escritos en la revista “al-Manaar”.
Inició su trabajo en este campo al transcribir del Hafiz Al-Iraquí la obra “El
Acaudalado, que aporta de los libros de interpretación la revitalización
del mensaje”(al-Mugni 3 ‘an-hamlil-Asfaar fil-Asfaar fi tajrích maafil-ihyaa
minal-ajbaar) añadiéndole notas.
Ahondó más en el campo del hadiz y sus múltiples ciencias a pesar del
desánimo de su padre. Más aún, los libros que necesitaba no se encontraban
en la biblioteca personal de su padre, la cual estaba compuesta principalmente
de obras del Fiq hanefita, siendo para él necesario pedir en préstamo los libros
2
En albanés Shkodër
3
Al-Mugni (acaudalado): Uno de los nombres de Alá el Grande.- N. T.
de la Biblioteca de Damasco –Maktabatu Zaahiriyyah- u otras veces de los
vendedores de libros (libreros).
Tanto llegó a estar absorto en la Ciencia del Hadiz que él cerraba su local para
estudiar en la biblioteca un lapso de doce horas –por supuesto interrumpiendo
sus estudios para el zalá- sin comer excepto dos ligeros bocadillos que llevaba
consigo.
Los distintos estudios de los sheiks sobre el hadiz del Mensajero ((Salallahu
alehi wa salam) 4 tuvieron gran impacto en su persona, haciendo que él se
apartara de la ciega obediencia que solía tener de su formación hanefita,
aceptando y actuando conforme al Corán y la sunna –con el entendimiento de
los predecesores píos (A-Salafu-Saalij) Ello naturalmente lo condujo a tener
diferencias con algunos sheiks de su comunidad que seguían ciegamente la
escuela hanefita, y de igual modo con los imams sufíes y varios innovadores,
quienes comenzaron a oponérsele y alborotar a la gente del pueblo en su
contra etiquetándolo de “Uahabita extraviado” 5 . Sin embargo, fue apoyado
por algunos nobles sheiks de Damasco que lo alentaron a continuar, entre
ellos el sheik Bahyatul Baichyaar, sheik Abdúl Fattaah el Imám, y Taufiq al-
Barza
Después de un tiempo, empezó a dar clases cada dos semanas, a las que
asistían estudiantes y maestros universitarios –en las cuales enseñó de varios
libros: Aquída, Fiq, ciencias del Usul y el Hadiz. También organizaba cada
mes viajes de da’ua a distintas ciudades de Siria y luego Jordania.
Tras haber aparecido varios de sus trabajos impresos, el sheik fue elegido para
enseñar hadiz en la nueva Universidad de Medina, Arabia Saudita, por un
período de tres años, del 1381 al 1383 H – en la cual fue también miembro
del comité universitario -.
4
Lla paz y bendiciones de Alá sean sobre él. N. T.
5
Calificativo erróneo histórico que usan para quienes seguimos (In shá Alá) el Corán y la sunna, tratando
de practicar el auténtico Islam y que aduce precisamente al renovador y restablecedor Abd-al-Uaháb.
Esto tan solo incrementa divisionismos entre quienes tratan de seguir una senda recta y de los que se
empecinan en sus equívocos (pido a Alá no ser uno de ellos). N. T.
Después de dicho trabajo, regresó a sus estudios y labores habituales en la
Biblioteca de Damasco, dejando su taller en manos de uno de sus hermanos.
Visitó varios países para dar da’ua y conferencias –entre ellos Qatar, Egipto,
Kuwait, los Emiratos, España e Inglaterra.
Sus trabajos cubrieron principalmente el campo del hadiz y sus ciencias, los
cuales llegan a ser más de cien obras.
INTRODUCCIÓN
Alabado sea Alá, quien hizo la oración obligatoria a sus siervos ordenándoles
establecerla. Lo mismo quien asocia el éxito y felicidad con la humildad en la
oración; quien la realiza para poder discernir entre imán y kufr; y a quien hace
se contenga de actuar injusta y vergonzosamente.
Y que llevó a cabo dicha tarea. La oración fue una de las cosas más
importantes que explicó a la gente, de palabra y obra. Inclusive una vez sobre
el púlpito en la oración realizando las posiciones de firmes, inclinado y
prosternado, al final les dijo: “He hecho esto de manera que vosotros me
sigáis y aprendáis de mi oración” 7 . Él nos hizo obligatorio el igualarlo en su
oración, diciendo: “Orad como me habéis visto orar” 8 . También dio las
buenas nuevas a quien fuera que orase como él, ya que dicha persona tiene la
promesa de Alá que entrará en los Jardines, como dijo: “Hay cinco oraciones
6
Sura an-Nahl, 16:44
7
Bujari y Ahmed
8
Malik, Abu Daud, Nasai e Ibn Hiban. Un hadiz sajij, declarado sajij por muchos Imames. Se da su
significado en el libro Sajij Abu Daud (451, 1276)
que Alá Todopoderoso ha hecho obligatorias. Quien realiza bien la ablución
para ellas, las reza en su tiempo pertinente y completa sus postraciones en
humildad, tiene la promesa de Alá que será perdonado; pero quien no lo hace
así, no la tendrá: Si Él quiere (Alá), lo perdonará o si Él quiere, lo
castigará”.
La paz y bendiciones sean también para su familia y para sus Compañeros, los
cuales nos legaron el modo de adorar, rezar, decir y actuar del Profeta
(Salallahu alehi wa salam) y quienes hicieron de todo esto, y solamente esto,
su escuela (mad-jab) y la senda la cual seguir; y también para aquellos que
siguieron, a su vez, sus pasos y siguen sus huellas hasta el Día del Juicio.
Sin embargo, los detalles conocidos que cubren los aspectos de la oración es
contrario a lo que la gente piensa debe realizar de ella actualmente,
incluyendo a los sabios del din, porque ellos se limitan exclusivamente a sí
mismos a una sola escuela de pensamiento (mad-jab). Pero siendo concientes
en la recopilación y estudio de la sunna pura que se conoce, cada mad-jab
tiene ‘sunnas’ que ninguna de las otras tiene, incluso, cada mad-jab tiene
dichos y hechos que no se pueden encontrar y ni son auténticos del tiempo del
Profeta (Salallahu alehi wa salam); siendo que cada uno de los susodichos
pertenece a sabios tardíos 10 , ¡que aseveran fervientemente que pertenecen al
9
Sajij- colectado por Ibn al-Mubarak en az-Zuhd (10/21/1-2), Abu Daud y Nasái de buena continuidad
(sanad), he dado su interpretación en Sajij Abu Daud” (761)
Profeta (Salallahu alehi wa salam)! 11 Esto es el por qué los sabios de hadiz –
Alá los recompense a todos- habían producido libros de interpretación acerca
de los libros famosos de los sabios tardíos, explicando la categoría de cada
hadiz dado en ellos, o sea, si era uno auténtico, débil o fabricado. Ejemplos de
estos libros de interpretación están : Al-‘Inaaya fi Ma’rifa Ahadiz al-Hidaaya
y At-Turuq ual-Uasaa’il fi Tajrich Ahadiz Julaasa ad-Dalaa’il del sheik
Abdulá Qaadir ibn Mohámed al-Curashi al-Hanafi; Nasb ar-Raaya li Ahadiz
al-Hidaaya del hafiz Zayla’i, y su versión abreviada ad-Diraya del hafiz ibn
Hayar al- Ascalaani, quien también escribió Taljis al-Habir fi Tajrich Ahadiz
10
Abul-Hasanat al-Lucnoui dice en An-Naafi’ al-Kabir liman Yutaali’ al-Yaami’ as- Saguir (p. 122-3),
después de catalogar los libros de Fiq hanefita y cuál de ellos son confiables y cuáles no, dice: “Todo lo
que hemos dicho acerca de los grados relativos de éstas compilaciones se relacionan con su contenido de
temas fiq; pero en cuanto a su contenido, el cual concierne a los hadices del Profeta (P. B. E), estos no son
aplicables, puesto que en muchos libros en que se basan la crema y nata de los faquíes, tienen hadices
totalmente fabricados, haciendo a un lado las disposiciones de los sabios. Es claro desde un punto de vista
analítico que aunque muchos de los autores son de modo alguno competentes, fueron descuidados con
sus citas de las narraciones (o sea, notas o glosas)’
Uno de estos hadices falsos y fabricados que se hallan en algunos de los mejores libros que es el
siguiente: “Aquel que ofrece (realiza) las oraciones obligatorias durante el último viernes de ramadán,
valdrán por cada oración fallida durante toda su vida hasta la edad de 70 años”. Lucnoui dice en Al-
Aazaar al-Marfu’a fil-Ajbar al-Maudu’a (p. 315), después de haberse dado este hadiz: “Alí al-Qaari dice
en su al-Maudu’at as-Sugraa y al-Kubraa: ‘Esto es totalmente falso, porque contradice el ichmaa
(consenso de opinión)de que un acto de adoración no puede compensar aquello que se dejo de hacer por
años. De aquí, no hay lugar a que el autor dé mención del an-Niháya ni el resto de los comentaristas del
al-Hidaaya, porque ellos no son sabios del hadiz, ni dan referencia a este hadiz a cualquiera de los
compiladores de hadiz.’ ”
Shaucani también hace referencia a este hadiz en Al-Fawaa’id al-Machmu’a fil-Ahadiz al-
Maudu’a de un modo similar al anterior (p. 54) diciendo: ‘Esto es una fabricación sin duda alguna –
¡porque ni siquiera lo encuentro en las compilaciones de hadices fabricados! Sin embargo, se ha hecho
popular entre algunos estudiantes de Fiq de la ciudad de San’a’ que muchos de ellos han comenzado
actuar conforme a él. Yo no sé quien lo ha fabricado para ellos-. Que Alá desgracie a los mentirosos”.
Lucnoui dice más aún: “Ubicando dicho hadiz, que se encuentra en los libros de ceremonias y
rituales, es fabricado. He compuesto un breve ensayo con evidencia intelectual y narrativa llamado
Rechazo a las Cofradías con Invenciones sobre el Último Viernes de Ramadán, en el cual he
registrado aspectos que darán luz de los hechos, así que consúltenlo, porque es importante dicho tópico.”
La aparición de hadices falsos similares en los libros de Fiq destruyen la confiabilidad de otros
hadices que no se inscriben en los libros de hadices confiables. Las palabras de Alí al-Qaari contiene una
indicación al respecto: ‘Un musulmán debe tomar el hadiz de la gente que es experta en la materia; como
el dicho árabe reza, La gente de Meca conoce las veredas abruptas mejor y el dueño de su casa conoce
mejor lo que hay en ella’ ”.
11
En palabras resumidas del imám Nauauí de su Al-Machmu’ Sharjul Muhadhdhab (1/60) : “Los
eruditos en investigación de la gente del Hadiz y otros afirman que si un hadiz es débil, no debe
considerarse (con) ‘el Mensajero de Alá (Salallahu alehi wa salam) dijo/hizo/ordenó/prohibió...’ u otras
frases que señalan certeza, en su lugar deben decirse ‘se reportó/señaló/narró de él...’ u otras que sugieran
incertidumbre. Ellos dicen (los sabios del din) que las palabras de certitud corresponden para los hadices
que son sajij(auténticos) y jásan(bastantes buenos); y las frases de incertidumbre indican todo (menos
hadiz). Esto es porque las frases que designan certeza significan que lo que se sigue es auténtico y sólo
ellas pueden usarse en el caso de algo confirmado, porque de otro modo estaríamos diciendo mentiras
sobre el Nabí (Salallahu alehi wa salam).
Esta convención es ignorada por la mayoría de los faquíes de nuestros tiempos, que de hecho son
los más metidos en la disciplina, exceptuando a los mujadices expertos. Esta negligencia es indignante,
porque a menudo dicen de un hadiz sajij ‘Se reporta de él que...’, y sobre uno daíf (débil) ‘él dijo’ Y
‘reportado así y así...’ y ello está lejos de la realidad.”
ar-Raafi’i al-Kabir; existen muchos otros que no nombraremos por su gran
extensión. 12
Así que me embarqué en una tarea difícil e investigué los hadices relevantes
de diversas fuentes. El libro que tiene en sus manos es el resultado final de
todo esto. Me propuse que solamente daría hadices que tuvieran una cadena
de narradores (isnad) auténtica de acuerdo a los principios de regulación en la
ciencia del hadiz. Descarté cualquier hadiz que se basara en narradores
desconocidos o vacilantes, ya sea que hubiesen tratado con la forma externa,
el recordatorio, la excelencia, etc. de la oración. Porque sostengo que los
hadices auténticos 13 son suficientes, sin dar lugar a lo endeble; porque a la
postre no hacen más (los hadices débiles) que llegar a conjeturas (daan) y
equívocos, pues como dice el Excelso:
12
También en dicha categoría están los trabajos de nuestro profesor, autor de Irwá al-Galíl fi tajrích
Manaar as-Sabíl en 8 volúmenes, y Gáya al-Maraam fi tajrích ahadiz al-Halaal ual Haram, una
interpretación de los hadices encontrados en el libro Lo Lícito y lo Prohibido en el Islam del Dr. Yusuf
al-Qaradaawi (el cual contiene muchos hadices débiles).
13
El término hadices auténticos implica los sajij (correctus) y los jásan (bonus) a la vista de los
mujadices, ya sea que un hadiz sea correctus per se o correctus pro alter, o bonus per se o bonus pro
alter.
14
La estrella, 53:28
15
Bujari y Muslim.
16
Sajij – compilado por Tirmídi, Ahmed Ibn Abi Cheiba.
Posteriormente descubrí que éste hadiz es débil: Me había basado en Manawi al declarar sajij el
isnad de Ibn Abi Cheiba, pero casualmente encontré que era evidentemente da’íf (débil), siendo el mismo
isnad tanto en Tirmídi como en otros –busquen en mi libro Silsila al-Ahadiz ad-Daífa (1783). Sin
puesto que nos ha prohibido relatar narraciones débiles, puede decirse que está
prohibido actuar conforme a éstas.
embargo, este dicho viene a propósito por el dicho que dijo el Profeta (Salallahu alehi wa salam): “Aquél
que relata de mí un dicho que (se) sabe es una mentira( ya que) ciertamente es uno de los mentirosos”.
Compilado por Muslim y otros.
Desde la publicación de éste libro con ambas partes [la principal y la accesoria
en árabe) no es factible de momento [colocar ambos) 17 por muchas razones,
por lo que hemos decidido publicar sólo la parte principal del libro [junto con
notas al pie de página como habrán ya notado) por la voluntad de Alá, y lo
hemos denominado Descripción de la Oración del Profeta, desde el inicio
al fin, tal como vieron que se realizó (Sifa Salatu Nabí, min at-takbír ilá at-
taslím ka’annaka taráhaa)
Puesto que el propósito del libro es llevar la buena guía del Profeta (Salallahu
alehi wa salam) con respecto a la oración, era esencial que no me limitara a
una escuela (mad-jab) en particular, por las razones antes mencionadas. Por lo
tanto, daré lo que está realmente confirmado del Profeta (Salallahu alehi wa
salam) y libre de dudas, ya que siempre ha sido hecho así por los sabios del
Hadiz 18 , sea que fueran de antaño o de reciente corte 19 , como reza el dicho:
Así que este libro, Dios queriendo, reúne lo que es relevante en cada tema de
los diversos contenidos de los libros de hadiz y de los libros que tratan las
17
Aquí se refiere a su publicación en inglés, que a su vez en español se hace de este modo, por ser
obviamente la versión que usted lee, una traducción directa de la misma.- N. T.
18
Abul Hayy al-Lucnoui dice en Imám al-Kalám fimaa yata’allaq bil-Quiraa’a jalf al-Imám (p. 156),
como sigue:
“Cualquiera que navega en los mares del Fiq y en los fundamentos de la jurisprudencia con
mente abierta, y no se permite a sí mismo ser perjudicado, sabrá con certeza que en muchos de los temas
primordiales y secundarios en los cuales los ulemas han diferido, el mad-jab de los sabios del Hadiz es el
más firme de los mad-jabs. Cada vez que exploro las distintas ramas de las diversas opiniones, encuentro
que el punto de vista de los mujadices es el más cercano a la verdad –Alá los recompense y los
favorezca-. Cómo podría ser de otro modo, cuando ellos son los verdaderos herederos del Profeta
(Salallahu alehi wa salam), y son los sinceros representantes de su ley –Que Alá nos incluya dentro de su
compañía y nos haga morir queriéndolos-.
19
Subki dice en al-Fataua (1/148): “El asunto más importante de un musulmán es la oración, la cual a
todo musulmán debe importar y (debe) afianzar su realización estableciendo sus bases. Los temas
relacionados con la oración en los que hay un consenso y no hay escape de la verdad y otros temas, los
ulemas tienen divergencias. La aproximación correcta es mantenerse libres de disputas en lo posible, o
cerciorarse de lo que es auténticamente probado del Profeta (Salallahu alehi wa salam) y adherirse a ello.
Cuando uno lo hace así, su oración será la más correcta y justa, incluyendo palabras del Exaltado: “Quien
espera encontrarse con su Señor, dejadlo actuar correctamente y con justicia” (Corán 18:110)”
20
Del poeta Hássan ibn Mohámed a-Nasaui, tal como lo narró el hafiz en Diyaa’ a-Din al-Maqdisi en su
artículo sobre la excelencia del hadiz y su gente (la Gente del Hadiz).
diferencias entre los mad-jabs, de modo que el juicio correcto hallado en este
libro será claro para cualquiera de los mad-jabs. A partir de aquí, uno debe
actuar conforme a esto, Dios queriendo, estaremos entre aquellos que Alá ha
guiado: “En honor a la verdad, en lo que respecta a lo que ellos difieren, Alá
guía a quien Él quiere al camino que es correcto” 21
Para mí es suficiente que éste sea el más correcto de los caminos, el que Alá
ha ordenado a los creyentes tomar, en el cual el Profeta Mohámed (Salallahu
alehi wa salam), líder de los mensajeros ha explicado. Ésta es la vía que fue
trazada por los predecesores piadosos: los Compañeros, sus Sucesores y los
sucesores de los Sucesores, que incluyen a los cuatro imams, cuyas escuelas
de jurisprudencia están adscritos muchos musulmanes hoy en día. Todos ellos
estuvieron de acuerdo en la obligación de adherirse a la sunna y estar atentos a
ella; ignorar cualquier cosa que sea contraria a ésta, sin importar cuan grande
o pequeña sea, no puede sobrepasar el prestigio y talla del Mensajero de Alá
(Salallahu alehi wa salam). Por ello, he actuado conforme a su guía, siguiendo
su huella y llevando a cabo sus órdenes de mantenerme con los hadices
auténticos, aún si ello se opone a otros puntos de vista. Las ordenanzas de
aquellos que me han influenciado enormemente, han hecho que sea cuidadoso
en mi lectura por dicha vía y rechazar el seguir las opiniones ciegamente
(Taclíd). Pido a Alá el Exaltado los recompense enormemente.
21
Corán 2:213
22
Tirmídi, Qudaa’i, Ibn Bushrán y otros
Sería bueno que diéramos algunos ejemplos de ellos aquí, porque así tal vez
amonestará o recordará a aquellos que siguen la opinión de los imames
ciegamente 23 –o sea, de aquellos que están lejos de serlo o son meros
aficionados-, adhiriéndose a sus mad-jabs u opiniones ¡Como si dichas
hubiesen descendido del cielo! Pero Alá, Poderoso y Sublime, dice:
ABU HANIFA.
23
Esta es la clase de taclíd (ciega obediencia) que el imám Tajáui se refería cuando dijo: “solamente
algunos de espíritu partisano o de ciega obediencia sigue la opinión”- Acotado por Ibn ‘Aabidín en
Retrato de un Mufti (Rasmul Mufti)(Vol. 1, p. 32 de la compilación de sus ensayos)
24
Corán 7:3
25
Ibn ‘Abidín en al-Haashiya (1/63), y en su ensayo Rasmul Mufti (1/4) de La Compilación de los
Ensayos de Ibn ‘Abidín ), Sheik Saleh al-Fuláni en Icáz al-Himam (p. 62) y otros. Ibn ‘Abidín escribió de
Sharjul Hiaddaya de Ibn al-Shahna al-Kabír, maestro de Ibn al-Humám, como sigue:
“Cuando un hadiz es sajij y contradice el mad-jab, uno debe actuar conforme al hadiz y hacer de él su
mad-jab. Actuando conforme al hadiz no inhabilitará al seguidor de ser un hanefita, porque se reporta que
en verdad Abu Hanifa dijo: ‘Cuando un hadiz es sajij, entonces él es mi mad-jab’. Esto ha sido relatado
por el Imám Ibn Abdul Barr de Abu Hanifa y de otros imames.”
Esto es parte del conocimiento absoluto y piedad de los imames, porque ellos señalaron esto al decir que
ellos no eran expertos en toda la sunna, y el Imam Chafeí lo dilucidó posteriormente. Pudo haber sido que
ellos hubieran contradicho la sunna porque ellos no estaban enterados de ella, por lo cual ellos nos
ordenaron seguirla y considerarla como parte de sus mad-jab. Alá dé misericordia a ellos.
26
Ibn Abdul Barr en Al-Inticaa’ fi fadá’il a-Zalaza al-Aima al-Fucajá (p. 145), Ibn al-Cayyim en I lam
al-Muquiín (2/309), Ibn ‘Abidín en sus Pies de Nota sobre Al-Bahr at-Rá’ic (6/293) y en Rasmul Mufti
(pp. 29, 32) y Sha’rani en Al-Mizán (1/55) con la segunda narración. La última narración fue compilada
por Abbas a-Dauri en a-Taríj por Ibn Ma’ín (6/77/1) con una cadena de transmisión correcta en base a
Zafar, el estudiante del imám Abu Hanifa. Existen narraciones similares atribuidas a Abu Hanifa, basadas
en los relatos de sus amigos: Zafar, Abu Yusuf y ‘Afiya ibn Yazid; cf Icáz (p. 52). Ibn al-Cayyim ratificó
su autenticidad en base a Abu Yusuf en I lam al-Muquiín (2/344). La añadidura a la segunda narración se
refiere al editor del Icáz (p. 65) a Ibn Adúl Barr, Ibn al-Cayyim y otros.
Si esto es dicho por quien no sabe la evidencia de aquellos, ¿Cuál sería su respuesta a el que conoce la
evidencia que contradice su dicho, pero aún da el veredicto contrario a la evidencia? Por lo tanto,
reflexionen lo dicho, porque por sí es bastante para arrasar la ciega obediencia de opinión; esto es el
porqué uno de los sheiks mucalid cuando lo critiqué por dar un veredicto con las palabras de Abu Hanifa
sin conocer la evidencia, rehusó a creer que estaba usando un dicho de Abu Hanifa
En una narración se cuenta: “Es prohibido a cualquiera dar veredictos en base
a mis palabras (ya) que no sabe cual es mi evidencia”
Otra narración añade: “...porque somos (meros) mortales decimos una cosa un
día y nos retractamos (de ella) al siguiente.”
En otra más se dice: “¡Maldito seáis! ¡Oh Ya’cub! 27 No escribas todo lo que
oigas de mí, porque puede pasar que yo tenga una opinión hoy y la rechace
mañana, o tenga una opinión mañana y la rechace pasado mañana.” 28
“Cuando diga algo que contradiga el Libro de Alá el Excelso o de algo que
narró el Mensajero (Salallahu alehi wa salam) entonces no hagáis caso a mis
palabras.” 29
27
Ilustre estudiante del Imám Abu Hanifa, Abu Yusuf
28
Esto era porque el imám muchas veces se basaba desde su propio punto de vista por el Quiyas
(Analogía), tras el cual había una analogía más sustentable que le venía a la mente, o un hadiz del Profeta
(Salallahu alehi wa salam) que le hubiese llegado, de modo que esto último lo aceptaba e ignoraba sus
previas opiniones. En palabras de Sha’rani en al-Mizán (1/62) se resume así:
“Nuestra creencia es también aquella que cada investigador halla sobre el Imam Abu Hanifa la
cual es que, habiendo vivido hasta el registro de la Scharía, y estando en los viajes de los Guardianes del
Hadiz en distintas ciudades y fronteras para poder así compilarlos y adquirirlos, simplemente los habría
aceptado (los hadices) e ignorado todas las analogías empleadas (hasta ese momento). El monto del
quiyas en su mad-jab habría sido justamente el mismo que el de los otros mad-jabs, casi nada. Pero ya
que la evidencia de la Scharía había sido difundida entre los Sucesores y los sucesores de los Sucesores y
no habiendo sido colectado en su tiempo de vida, era necesario que hubiera más quiyas en su mad-jab en
comparación de los otros imames. Los sabios postrimeros entonces hicieron sus viajes para encontrar y
compilar los hadices de las diversas ciudades y pueblos para registrarlos; por ello, algunos hadices de la
Scharía explican otros. Esta es la razón verdadera tras la enorme cantidad de quiyas en su mad-jab, ya sea
que fuera poca en los otros mad-jabs.”
Abul Hassanat al-Lucnoui citó sus palabras completas en An-Nafí al Kabír (p. 135),
respaldándola y expandiéndola en sus notas al pie de página, así que quien quiera consultarlo ahí está.
Ya que ésta es la justificación por la cual Abu Hanifa algunas veces ha contradicho inconsciente-
mente los hadices verdaderos –y es una motivo bastante aceptable, porque Alá no asola ninguna alma con
más de lo que puede afrontar- no es permitido insultarlo por ello, como alguna gente ignorante ha hecho.
De hecho, es obligatorio respetarlo, porque él es uno de los imames de los musulmanes por medio del
cual éste din ha sido preservado y llegado a nosotros, en todas sus ramificaciones; también porque es
recompensado de cualquier modo, a sea que este correcto o equivocado. Tampoco es permisible a sus
adeptos continuar bajo el influjo de sus declaraciones (erróneas) que contradicen el hadiz auténtico,
puesto que tales declaraciones no son, efectivamente, parte de su mad-jab, como los anteriores ejemplos
lo muestran. Esto muestra dos extremos, y entre ellos la verdad permanece: “ ¡Señor! Perdónanos, a
nosotros y a nuestros hermanos que nos han precedido en la fe ¡Haz que no abriguen nuestros corazones
rencor a los que creen!¡Señor! Tú eres cortés, misericordioso” (Corán 59:10).
29
Al-Fulaani en Icaza al-Himam (p. 50), remontándose al imám Mohámed dice: “Esto no se aplica al
muchtajid, porque es ajeno a sus opiniones de cualquier modo, pero ello se aplica al mucalid.”
Sha’rani lo amplia en Al-Mizán (1/26):
“Si se dice: ‘¿Qué es lo que debo hacer con los hadices que mi imám no utilizó, y se encuentra
que son auténticos después de él morir?’ la respuesta apropiada a esto es: ‘Actuar sobre ellos, ya que tu
imám de haberse topado con ellos y los encontró auténticos, él os habría instruido para seguirlos, porque
todos los imames están sujetos a la Scharía’. Aquél que lo hace así tendrá tanto bien como sus manos
sean, pero aquél que dice: ‘Yo no actuaré conforme a un hadiz que mi imám no puso en práctica’,
entonces se estará perdiendo de las bondades al igual que los seguidores de los mad-jabs de los imames
hacen. Será mejor para ellos actuar conforme cada hadiz encontrado auténtico tras la desaparición del
imám, siendo esto la voluntad de los imames, ya que es nuestra firme creencia que los imames de haber
MALIK IBN ANAS
“En verdad que soy solo un mortal: Me equivoco [a veces) y acierto [a veces).
Por lo tanto, mirad en mis opiniones: Todo lo que está acorde al Libro y la
sunna, aceptadlo, y todo aquello que no está de acuerdo con el Libro y la
Sunna, ignoradlo.” 30
“Aquél después del Profeta (Salallahu alehi wa salam) tendrá sus dichos [los
dichos de aquél) aceptados y rechazados – no así el Profeta (Salallahu alehi
wa salam)”. 31
Ibn Uahb dijo: “Escuché que Malik fue cuestionado sobre la limpieza entre los
dedos de los pies durante la ablución. Él respondió: ‘La gente no tiene porque
hacerlo’. No me acerqué a él sino hasta que la multitud se había reducido,
entonces le dije: ‘Sabemos una sunna sobre eso’. Él contestó: ‘¿Cuál es?’ Y le
dije: ‘Laiz ibn Sa’d, Ibn Laje’a y ‘Amer ibn al-Harit nos narraron de Yazid
ibn ‘Amer al-Ma’afiri de Abu Abd al Rahmán al-Hubuli de Mustaurid ibn
Chaddad al-Curashi, quien dijo: ‘ Ví al Mensajero de Alá (Salallahu alehi wa
salam) frotarse entre los dedos del pie con su dedo meñique’, (a lo que) él
dijo, ‘este hadiz es bueno; no había escuchado de él nada, hasta ahora’.
Posteriormente supe que él era cuestionado sobre el mismo asunto, a lo cual él
ordenaba que se limpiaran entre los dedos de los pies.” 32
vivido por más tiempo y hubieran llegado a conocer aquellos hadices auténticos después de no saberlo,
ellos definitivamente los hubieran aceptado y actuado conforme a ellos, ignorando cualquier analogía que
previamente ellos hubieran dictaminado y cualquier opinión que hubieran sostenido.”
30
Ibn Abdúl Barr en Yamí Bayaan al-Ilm (2/32), Ibn Hazm, citándolo de lo anterior en Usul al-Ajcam
(6149) y similarmente Al-Fulani (p.72)
31
Este dicho es bien conocido de Malik que circula entre los entre los sabios tardíos. Ibn Abdul Hadi lo
confirmó en Irshad a-Salik (227/1); Ibn Abdúl Barr en Yamí Bayaan al-Ilm (2/91) e Ibn Hamzm en Usul
al-Ajcam (6/145, 179) lo habían narrado como un dicho de al-Hakam ibn Utaiba y Muyajid; Taqui a-Din
a-Subki lo dio embelasado, en al-Fataua (1/148) como un dicho de Ibn Abbas y después dijo: “Estas
palabras fueron originalmente de Ibn Abbas y Muyajid, de quienes Malik las retomó, y por eso se volvió
famoso”. Parece que el Imam Ahmed después tomó este dicho de ellos, como lo dijo Abu Daud en
Masaail del Imam Ahmed (p. 276): “Escuché a Ahmed decir, ‘Cada quien es aceptado y rechazado por
sus opiniones, con excepción del Profeta (Salallahu alehi wa salam)’.”
32
De la introducción a Al-Yarj ua-Ta’dil de Ibn Abi Hatim, pp. 31-2.
CHAFEÍ
En cuanto al Imám Chafeí, sus notas son muchas y hermosas 33 ; sus seguidores
fueron los mejores en su adscripción:
“Las sunnas del Mensajero de Alá (Salallahu alehi wa salam) van y vienen a
cada uno de nosotros (constantemente). De modo que adonde sea que expreso
mi opinión, o formulo un principio, donde algo contradice mi punto de vista
(es que) existe la (opinión) del Mensajero de Alá (Salallahu alehi wa salam),
entonces el punto de vista correcto es aquél que el Mensajero de Alá
(Salallahu alehi wa salam) ha dicho, y esto es mi punto de vista (también)”. 34
“Si vos encontráis en mis escritos algo diferente a la sunna del Mensajero de
Alá (Salallahu alehi wa salam), entonces hablad en base a la sunna del
Mensajero de Alá (Salallahu alehi wa salam) y abandonad lo que he dicho”.
33
Ibn Hazm dice en Usul al-Ajcam (6/118):
“En verdad las opiniones seguidas por todos los faquíes eran contrarias al taclid, y ellos
prohibieron a sus camaradas de seguir sus opiniones ciegamente. El más severo entre ellos al respecto fue
Chafeí, porque él enfatizaba repetidamente, más que cualquier otro, siguieran las narraciones auténticas y
aceptaran cualquier prueba dictada; él también se desentendía de que lo siguieran ciegamente y así lo
anunció a los de su rededor. Que esto lo beneficie frente Alá y dicha recompensa sea la más grande,
porque él ha aportado grandes bondades”
34
Relatado por Hakim con un sanad que continua hasta Chafeí, como en Tarij Dimashq de Ibn ‘Asáki
(15/9/10)
“Cuando un hadiz es sajíj, entonces él es mi mad-jab.”
“Vosotros estáis más percatados del hadiz que yo, así que cuando un hadiz es
correcto, informadme de él, ya sea que es de Cufa, Basora o Siria, de modo
que pueda tomar el punto de vista del hadiz en cuenta, en tanto éste sea
correcto”.
“Por cada cosa que digo hay algo auténtico del Profeta (Salallahu alehi wa
salam) que contradice mis palabras, entonces el hadiz del Profeta (Salallahu
alehi wa salam) está primero, así que no sigáis mi opinión.”
Narraron que: “No copiéis vuestra religión de cualquiera de ellos pues lo que
viene del Profeta (Salallahu alehi wa salam) y sus Compañeros, tomadlo;
después (lo que viene) a sus sucesores, donde un hombre tiene elección.”
“Pero ¡no por tu Señor! No creerán hasta que te hayan hecho juez de su
disputa; entonces ya no encontrarán en sí mismos dificultad en aceptar tu
decisión y se adherirán plenamente.”
También dice:
“Por lo tanto, es obligatorio sobre cualquiera que escucha una orden del
Mensajero de Alá (Salallahu alehi wa salam) o la conoce, explicarla a la
umma, aconsejándola con sinceridad y ordenándoles seguir su orden, aún si
ésta contradice algún renombrado (ulema). Esto es porque la autoridad del
Mensajero de Alá (Salallahu alehi wa salam) tiene todo el derecho de ser
respetada y seguida, por encima de la opinión de algún famosísimo (ulema)
que ha contradicho la orden del Mensajero en cualquier asunto por
desconocimiento. Esto es el por qué los Compañeros y aquellos que refutan a
cualquiera que contradice la sunna son algunas veces muy estrictos en sus
refutas, no sin granjearse el odio de las personas que lo amaban y respetaban,
ya que el Mensajero de Alá (Salallahu alehi wa salam) es más amado por ellos
y sus ordenanzas son superiores a las ordenanzas de cualquier criatura. De
aquí se desprende que una orden del Mensajero debe ser apropiadamente
consolidada y cumplida. Nadie debe dejar de respetar a la persona que
refutaron porque saben bien que ella será perdonada (por su error); de hecho,
esto último no le debe perturbar ya que la orden del Mensajero de Alá fue que
claramente se deben de oponer.”
De hecho, cómo podría molestarles eso, cuando ellos mismos han ordenado a
sus seguidores hacerlo, como hemos visto, y se han unido a ellos para
abandonar cualquier punto de vista que contradice a la sunna. De hecho Imám
Chafeí dijo a sus camaradas que le achacaran la sunna auténtica también, aún
si él no la había adoptado o hubiera adoptado algo contrario a ella. De aquí,
cuando el analista Ibn Daquic al-‘Eid los compiló a todos ellos en un fastuoso
volumen en los temas de los cuales uno o más de los cuatro mad-jabs de los
imames habían contradicho el auténtico hadiz, escribió al principio de éste:
“Esta prohibido imputar estas respuestas a los imames muchtajids, y es
obligatorio sobre los juristas que siguen sus opiniones conocer éstas de modo
que ellos no puedan citarlas con respecto a estos y de permanecer en su
contra.”
Imám Mohámed dice en su Muwatta (p. 158): “En cuanto a Abu Hanifa, él no
consideraba que hubiera una oración de súplica para la lluvia, empero
sostenemos que el imám reza dos rakás y después suplica y extiende su ropa
envuelta...”
“Cuando se llama a los creyentes ante Alá y su Enviado para que decida
entre ellos, se contentan con decir: ‘¡oímos y obedecemos!’ Esos son los
que prosperarán. Quienes obedecen a Alá y a Su Enviado, tienen miedo
de Alá y le temen, ésos son los que triunfarán.” 35
ACLARACIÓN DE CONCEPTOS
La introducción anterior fue escrita hace diez años, tiempo durante el cual se
nos ha hecho necesario que nuestras palabras han tenido un efecto positivo
sobre la juventud musulmana al guiarla hacia sus obligaciones en materia de
religión y adoración, para volver a las fuentes más puras del Islam: el Libro y
la Sunna. Entre ellos existía un aumento en los rangos de aquellos que
practicaron la sunna y se entregaron totalmente a ella. Sin embargo, sigo
viendo a varios de ellos renuentes a la práctica de la sunna, y no porque se
deba a que duden en sus obligaciones (de ejecutarla) tras la lectura de los
versos coránicos y las advertencias de los imames de regresar a la sunna, sino
porque ellos han escuchado de algunos sheiks mucalids algunas objeciones y
malas interpretaciones al respecto. Es así como he decidido mencionar estas
nociones erradas y refutarlas, a modo de motivación para más gente de
practicar la sunna y así estar de entre los salvos, Dios queriendo.
35
Corán 24: 51-52
de religión, especialmente en los actos recomendados de adoración tales
como la oración, donde no hay lugar para la opinión o el ichtijad, debido a su
naturaleza inmutable. Sin embargo, muy difícilmente escuchamos alguno de
los “mucalids” proponer esto. De hecho, los vemos que tienen diferencias de
opinión, que las consideran de gran flexibilidad para la “umma”. Su prueba
para esto es el hadiz que ellos mencionan repetidamente en tales
circunstancias, cuando quieren refutar a quienes sostienen la sunna: “La
diferencia de opinión (ijtilaf) entre mi umma es una misericordia (rajma)”.
A nosotros nos parece que este hadiz contradice el principio por medio del
cual usted nos invita (seguir) y en base a lo que usted ha compilado este libro
y otros. De modo que ¿Qué tiene que decir respecto a dicho hadiz?”
El Segundo: Este hadiz contradice al glorioso Corán, porque las aleyas que
prohíben el divisionismo en la religión y gozar de la unificación son bien
consabidas como para mencionarlas. Sin embargo, no hay inconveniente en
dar algún ejemplo de ellas al respecto; Alá dice:
“... ¡Y no seáis de entre los politeístas (mushrikín)! ¡De los que escinden su
religión en sectas, contento cada grupo con lo suyo!”
“Más no cesan en sus discrepancias, excepto aquellos que han sido objeto
de la misericordia de tú Señor”.
Respuesta: Sí, hay una gran diferencia entre estos dos ejemplos de
discrepancias, que se manifiestan a sí mismas en dos formas: primero la de
causa y la segunda es la de efecto.
Pero en cuanto a las diferencias halladas entre los mucalids de hoy, estas son
inadmisibles e inexcusables. Prueba de ello está en el Corán y en la sunna, que
pasa a apoyar a un mad-jab distinto que el que le es habitual, de modo que
hace a un lado la prueba solo porque ella contradice a su mad-jab. ¡Y sucede
aunque su mad-jab es el original, o del din que Mohámed (Salallahu alehi wa
salam) trajo, mientras que otros mad-jabs conformen en sí dines diferentes
que han sido abrogados! Muchos otros toman posturas extremistas con lo que
respecta a los mad-jabs –por todas sus diferencias- como códigos paralelos a
la Ley (de Dios), como algunos de sus adeptos posteriores lo explican: No hay
perjuicio en que un musulmán tome lo que le plazca de ellos y deje lo que le
disguste, ¡porque todos ellos son códigos de ley válidos!
Ashjab dijo:
“Malik fue cuestionado sobre una persona que aceptó un hadiz narrado por
gente confiable basada en los Compañeros del Mensajero de Alá (Salallahu
alehi wa salam): ‘¿Ves alguna flexibilidad ahí?’ a lo que contestó: ‘Por Alá
que no, de modo que él tal vez esta en la verdad y la verdad puede ser una
sola. Dos puntos de vista contradictorios ¡¿pueden ser ambos correctos?! La
verdad y lo correcto son una sola.’ ’’.
Omar ibn al-Jatáb se enojó una ocasión por la disputa entre Ubayy ibn Ka’b e
Ibn Masud sobre la oración de una sola pieza de ropa. Ubayy dijo: ‘La oración
en una pieza es buena y óptima’; Ibn Masud replicó: ‘Eso es solo si uno no
tiene muchas ropas’. Así que Omar se enfureció y dijo: ‘¿Dos hombres de
entre los Compañeros del Mensajero de Alá (Salallahu alehi wa salam)
estudiados y respetados son quienes disputan? Ubayy ha dicho la verdad sin
importar lo que diga Ibn Masud. Si (vuelvo) a alguien disputar sobre esto yo
le haré tal y tal’ ’’.
“Hay quienes permiten diferir y piensan que si dos sabios hacen ichtijad en
algún asunto y uno dice “Jalal”, mientras que el otro dice ‘Jaram’, ¡Entonces
los dos han llegado a la verdad con su ichtijad! Siendo la cuestión ‘¿Es acaso
este punto de vista que tienen, en base a las fuentes del quiyás (analogía)?’ si
ellos responden ‘sobre las fuentes’, puede cuestionárseles ‘¿Cómo pueden
estar basados en las fuentes siendo que el Corán niega las diferencias?’ Y si
contestan ‘por la analogía’, puede decirse que ‘¡¿Cómo pueden las fuentes
negar la diferencia y a su vez que se os permita por la razón de la analogía
tener diferencias?! Esto es inadmisible para cualquier mente inteligente,
dejándolo así a un hombre de ciencia (islámica).”
Pero si aún continúan diciendo: “Lo que ha citado del Imám Malik que la
verdad una sola es, no plural, se contradice por lo que hay en Al-Madjal al-
Fiqui del sheik Zarcaa’ (1/89): ‘Los califas Abu Yafar al-Mansur y después a-
Rashid, propusieron elegir el mad-jab de Imám Malik y su libro al-Muwata
como el código de ley oficial para el Imperio abbasí, pero Malik se los
prohibió diciendo:[En verdad, los Compañeros del Mensajero de Alá (P. B. E)
diferían en asuntos nada fundamentales y que se esparcieron en muchos
pueblos, pero cada uno de ellos estaba correcto]’ ’’.
Yo les respondo: Este incidente con el Imám Malik es bien conocido, pero su
dicho al final de ‘pero cada uno de ellos estaba en lo correcto’ es sin
fundamentos en cualquier otra narración o fuentes con las que me he topado,
por Dios; excepto por una narración compilada por Abu Nu’aim en su Hilya
al-Aulía (6/332), pero con una cadena de narradores que incluye al-Micdam
ibn Daud, quien es tachado de entre los narradores como débil por Dahabi en
a-Du’afa; no sólo eso, sino que las palabras son: ‘... pero cada uno de ellos
estaba correcto a sus propios ojos’. De la frase ‘a sus propios ojos’ muestra
que la narración en el Mad-jal es fabricado. Si no, ¿de qué otro modo sería,
cuando contradice lo que ha sido reportado por la autoridad de Imám Malik
que la verdad es sólo una y no es plural, como hemos mencionado, estando de
conforme con todos los imams, los Compañeros y sus sucesores, al igual que
los imams de los cuatro imames muchtajids y otros? Ibn Abdúl Barr dice: “Si
los puntos de vista conflictivos pudieran estar en lo cierto, los salafis (los
primeros en el Islam) no se hubieran corregido unos a otros en el ichtijad, en
sus juicios y en sus veredictos. La simple razón prohíbe que un algo y su
opuesto puedan estar en lo cierto; como el viejo refrán dice:
“El hacer dos cosas contrarias iguales, es lo más absurdo que hay”
Dicen más aún: “Dado que dicha narración del Imám Malik es falsa, ¿por
qué prohibió a Mansur que la gente se acercara a la Muwatta en vez de
acceder al deseo del Califa?”
Ahora veamos las diferencias más obvias por razón del efecto.
Para algunos mucalids las diferencias entre los mad-jabs han ido de mal en
peor, que la simple unión matrimonial entre hanefitas y chafeítas no se
efectúa. Un renombrado sabio hanefita, posteriormente apodado Muftí a-
Zacalain (El muftí de humanos y genios), expidió un veredicto permitiendo a
un hanefita casarse con una chafeíta, porque ¡¡“la posición de ella es como
aquella de la gente del libro”!! Esto implica –porque los significados
36
Basmala: es el decir bismilá (en el nombre de Dios).-N. T.
implícitos son aceptables a ellos- que en el caso contrario (un chafeíta con una
hanefita). Esto no es permitido, ¡¡como si se tratara que se casa con un judío o
cristiano, lo cual está prohibido en estos casos!!
Estos dos ejemplos, extraídos sólo de un millar que existen, son suficientes
para ilustrar a alguien inteligente los efectos malignos de las diferencias de las
generaciones posteriores y su insistencia al respecto, a diferencia de las
discrepancias que tuvieron las primeras generaciones (los salafis), las cuales
no causaron efectos adversos en la umma. Es por eso que ellos están exentos
de los versos que prohíben división en la religión, a diferencia de éstas últimas
generaciones. Pido a Dios nos guíe por el camino recto.
El resultado fue que los invitadores al Islam dejaron a los que fueron invitados
en mucha confusión, ya que ellos mismos se confesaron confusos también.”
Esto surgió porque (al parecer) una gran disputa, una vil discrepancia había
pasado aquí cuando un numeroso grupo de intelectuales japoneses querían
entrar al dín del Islam, y pudieran ennoblecerse por el noble imán [fe).
Cuando ellos se disponían a hacerlo (convertirse) frente algunos musulmanes
presentes en Tokio, algunos de la India dijeron: “Es mejor que ellos escojan el
mad-jab de Abu Hanifa, porque él es luz para la umma”; alguna gente de
Indonesia [Java) dijo: “No, ¡ellos deben ser chafeítas!” De modo que cuando
los japoneses escucharon estas palabras, quedaron sumamente perplejos y
renunciaron a su propósito original. ¡Es por ello que el tema de los mad-jabs
se volvió un obstáculo en el camino de su aceptación al Islam!”
Respuesta: Esta idea está lejos de ser la verdad, pues es falso y obviamente
errado, como evidentemente aclaramos en nuestras previas discusiones, que
sugieren todo menos esto. Simplemente a lo que llamamos es que dejen de
venerar el mad-jab como si fuera el din, colocándolo por encima del Corán y
la sunna, tal como lo hacen para arreglar una disputa o para extraer un nuevo
juicio para circunstancias inesperadas, como lo hacen los seudo juristas
actuales cuando imponen nuevas reglas en asuntos sociales, divorcio, de
matrimonio, etc., en vez de acudir al Corán y a la sunna para distinguir el mal
del bien, la verdad de la mentira –y todo en base a su “la diferencia es una
misericordia” para su cómoda y fácil conveniencia-. Cuán correcto es el dicho
de Sulaiman Taymi:
“Es por ello, mi hermano, que debes preservar los fundamentos y ponerles
atención. Debes saber que quien se hace cargo de cuidar las sunnas y los
mandamientos establecidos en el Corán, toma en cuenta los puntos de vista de
los juristas para asistirlo en su ichtijad, explorando ángulos diferentes para
explicar y aproximarse a la suna, la cual conlleva diferentes significados
posibles, sin seguir al mismo tiempo ciegamente la opinión de alguno de ellos
en una sunna que deba seguirse sin el análisis correcto, ni tampoco ignorar lo
que los ulemas mismos llevaron a cabo para preservar y reflexionar sobre las
sunnas, pero síguelos en la discusión, entendiendo y analizando.
Agradeciendo a su vez sus esfuerzos del cual ellos se han beneficiado
alertando sobre varios puntos, halagándolos por sus conclusiones atinadas,
como es en la mayoría de los casos, pero que no les aclara los errores al igual
que ellos mismos no lo hicieron: Tal es la búsqueda del conocimiento que se
une a la vertiente de los predecesores piadoso; así es el que realmente es
guiado, un verdadero afortunado; y tal es así el adepto a la sunna de su Profeta
(Salallahu alehi wa salam) con la buena guía de los Compañeros.
Pero aquél que se abstiene del análisis, abandona el método que le hemos
mencionado, disputa la suna con base a su opinión y deseo para acomodarlos
solamente donde los propios puntos de vista y deseos se acomodan a los
suyos: esta persona está desviándose y llevando a otras por el mismo camino.
Además, aquél que ignora todo lo que hemos mencionado y comienza a dar
inconscientemente veredictos sin preparación, tal persona está aún más ciega
y en un camino más desviado.”
Uno de los efectos más sorprendentes de éste claro error es en el que sus
partidarios los previenen de no seguir la sunna cuando ésta no concuerda con
su mad-jab, ya que para ellos practicarla significa un insulto para su imám,
pues consideran que seguirlo es mejor a pesar de estar contrariando la sunna
pensando que así lo honran y respetan. Es por ello que insisten en seguir sus
opiniones para no faltarle al respeto, según ellos.
Esta gente ha olvidado esto (y no estoy diciendo que lo hagan a propósito) por
dicho concepto, cayendo en un abismo peor del que pretendían salir. A esta
gente se le debe decir: “si seguir a alguien significa que lo estás respetando y
el oponérsele significa que lo estás insultando, entonces ¿Cómo es posible que
te permitas oponerte al ejemplo del Profeta (Salallahu alehi wa salam) y no
seguirlo, prefiriendo seguir al imám del mad-jab en un camino diferente de la
sunna, cuando el imám no es infalible e insultarlo no es Kufr? Si tu interpretas
que oponerte al imám es un insulto para él, entonces oponerte al Mensajero
(Salallahu alehi wa salam) es más que obvio más insultante y esto sí es claro
Kufr, del cual nos refugiamos de ello en Alá.” Si esto se les dice así, por Alá
que ellos no podrán responderlo, a menos que alguien de los que replica de
cuando en cuando: “Nosotros hemos dejado esta sunna confiando en el imám
del mad-jab ya que él está más enterado de la sunna que nosotros.”
La respuesta a ello puede ser desde muchos ángulos, que ya han sido
discutidos a lo largo de la introducción. Esto es el por qué sólo doy en breve
una respuesta decisiva con el permiso de Dios y digo:
“El imám de sus mad-jabs no es el único que estaba más enterado de la sunna
que ustedes. Es un hecho que hay docenas, no, miles y cientos de imams que
también tenían más conocimiento sobre la sunna que ustedes. Por lo tanto, si
una sunna auténtica llega a discrepar de sus mad-jabs y fue admitida por
cualquier otro imám, es importante que acepten dicha sunna en tales
circunstancias. Esto es porque sus argumentos antes mencionados no sirven de
nada aquí, porque alguien que se les ponga enfrente dirá: ‘Nosotros hemos
aceptado ésta sunna confiando en nuestro imám, quien la aceptó.’ Bajo dichas
circunstancias, seguir al susodicho imám es preferible que seguir al imám que
ha discrepado de la sunna”
Esto está claro y no confunda a nadie, Dios queriendo.
Puesto que este libro ha sido compilado con las auténticas sunnas reportadas
del Mensajero (Salallahu alehi wa salam) sobre la descripción de su oración,
nadie tiene excusa para no actuar conforme a ella, porque no hay nada que los
ulemas hayan unánimemente rechazado, cosa que nunca harían. De hecho, en
cada caso, muchos de ellos han adoptado la sunna auténtica. Cualquiera de
ellos que no lo hiciera así está dispensado y recompensado con una bendición,
porque la información no le llegó de ningún modo o le llegó pero de una
manera que no constituyera una prueba sólida o debido a otras razones que
son bien conocidas entre los ulemas. Sin embargo, aquellos que les sucedieron
que conocieron la información exacta no tienen excusa para continuar con sus
opiniones. Más bien, están obligados a seguir la información desechando lo
erróneo.
37
Corán 8:24
DIRIGIÉNDOSE A LA CAABA
“Él hacía rukú y sachda sobre su montura con (solo) estar agachado y
haciendo la sachda más abajo que lo que es el rukú”
Yabir dijo:
“Él (Salalalhu alehi wa salam) solía rezar hacia Baitul Mucaddas 38 (estando él
frente a la Caaba) antes de que los versos siguientes fueran revelados:
PARADOS EN ORACIÓN
Él (Salallahu alehi wa salam) solía estar parado en la oración tanto para las
oraciones obligatorias como voluntarias, ejecutando la orden de el Exaltado:
38
La mezquita de Jerusalén
39
Una franja que comprende Siria, Líbano, Palestina y Jordania.
“¡Observad las azalás –sobre todo, la azalá intermedia- y estad con
devoción ante Alá! Si teméis algún peligro, de pie o montados. Y, cuando
estéis en seguridad, ¡Recordad a Alá... como os enseñó lo que no sabíais!”
(Corán 2:238-9)
‘Imran Ibn Hussein dijo: “Yo estaba sufriendo de hemorroides, así que le
pregunté al Mensajero de Alá (Salallahu alehi wa salam) y me contestó: Reza
parado; si no te es posible, entonces sentado; si no te es posible, entonces
reza acostado.”
También dijo ‘Imran Ibn Hussein: “Yo le pregunté (al Profeta) sobre la
oración de un hombre sentado, y me contestó: Aquél que reza parado, es lo
mejor; aquél que reza sentado, su recompensa es la mitad del anterior. Aquel
que reza acostado (en otra narración: reclinado), tiene la mitad de recompensa
del que se sienta.
Esto se aplica a una persona enferma, porque Anas dijo: “El Mensajero de Alá
(Salallahu alehi wa salam) salió a la gente mientras ellos rezaban sentados
debido a la enfermedad, así que dijo: En verdad, la oración de alguien
sentado (vale) la mitad de la oración de uno que lo hace parado”
Una vez: “Él (Salallahu alehi wa salam) visitó a una persona enferma y la vio
rezar (apoyado) sobre una almohada, de modo que la tomó y la hizo a un lado.
Así que el hombre tomó una vara para rezar (apoyado) en ella, pero él la tomó
y la arrojó diciendo: Reza sobre el suelo si puedes, si no, haz movimientos con
tu cabeza haciendo tu suyúd más abajo que tu rukú”.
Algunas veces: “Él rezaba sentado, así que recitaba sentado, así que recitaba
sentado hasta casi 30 o 40 versos en su recitación, donde se quedaba; entonces
él se paraba para recitar éstos parado y después inclinarse y postrarse, y hacía
del mismo modo en la segunda raká.”
De hecho, “él rezaba subja 40 sentado al final de sus días cuando se hizo viejo,
y eso fue un año antes de su muerte”
“Él solía pararse (en oración) con los pies descalzos y algunas veces
utilizando zapatos41 .”
“El Mensajero de Alá (Salallahu alehi wa salam) un día estaba rezando con
nosotros. Mientras estaba absorto en la oración se quitó sus zapatos y los
colocó a su izquierda. Cuando la gente vio esto, todos se quitaron sus zapatos.
40
O sea, la oración voluntaria (en la noche o la mañana), nombrada así debido a su contenido de tasbij
(glorificación)
41
Hemos utilizado el término para referirnos a cualquier tipo de calzado, o sea, pueden ser unas chinelas,
unos mocasines, unas sandalias, babuchas, botas, etc. puesto que el término como se concibe actualmente
indica solamente un calzado que no pasa del tobillo, con suela y cubierta de cuero u otro material (como
usa el occidental).- N. T.
42
Abu Daud y Bazzár (53, a-Zaua-id); Hakim lo declaró auténtico y Dájabi estuvo de acuerdo.
43
Ibíd.
Cuando él terminó su oración dijo: ¿Por qué se sacaron los zapatos? Ellos
contestaron: ‘Te vimos quitarte los tuyos, así que nos sacamos los nuestros’. Y
dijo: Gabriel ha venido y me ha informado que tenía suciedad –o dijo: algo
pernicioso (en otra narración: porquería)- en mis zapatos, así que me los
saqué .Por lo tanto, cuando alguno de vosotros vaya a la mezquita, debe
mirar sus zapatos: Si halla alguna suciedad en ellos –o también dijo: algo
pernicioso (en otra narración: porquería) - él debe retirarla y entonces rezar
con ellos.” 44
LA ORACIÓN EN EL MIMBAR 45
“Una vez él (Salallahu alehi wa salam) rezó sobre el mimbar (en otra
narración: ‘... que tenía tres escalones’). De aquí (él estuvo sobre él y dijo
takbír y la gente atrás de él dijo takbír mientras estaba sobre el
mimbar)(después él hizo rukú sobre el mimbar), después se incorporó y
descendió hacia atrás para hacer prosternación al pie del mimbar. Después
regresó, (y continúo haciéndolo como lo había hecho en el primer raká), hasta
que completó su oración. Él después se volvió hacia la gente y dijo: ¡Oh
pueblo! He hecho esto así para que vosotros podáis seguirme y aprendáis de
mi oración.
“Él (Salallahu alehi wa salam) solía estar cerca de la sutra de modo que
hubiera tres codos entre él y la pared” y “entre el lugar de su postración y de
la pared, con suficiente espacio para que una oveja pudiera pasar.”
Él solía decir: “No recéis sino hacia una sutra y no dejéis que nadie pase
enfrente de vosotros, porque si alguien continúa (tratando de pasar) entonces
reñidlo, porque tiene un compañero con él (el diablo).”
Él también decía: “Cuando alguno de vosotros reza hacia una sutra, debe
acercarse a ella porque el diablo no puede romper la oración.”
44
Abu Daud, Ibn Juzaima y Hakim, quienes lo declararon auténtico, y Dájabi y Nauauí estuvieron de
acuerdo. El primero lo constata en su Irwá (284)
45
Mimbar (del ár. Minbar) m. Púlpito de una mezquita.- Academia
46
En árabe significa literalmente “pantalla, cubierta”; en el contexto de la oración, se refiere a cualquier
objeto justo más allá del sitio de prosternación, área dentro de la cual nada debe pasar, como se detalla en
ésta sección.
En otras (narraciones) se dice: “él buscaba rezar en el pilar que estuviera en la
mezquita”
“Cuando él rezó (en un espacio abierto donde no había nada que usar como
sutra) él plantaba una lanza en el suelo enfrente de él y rezó hacia ella con la
gente detrás de él”. En otras se narra: “él colocaba su montura atravesada y
rezaba hacia ella” que no se aplica rezar en el lugar donde los camellos se
postran, y algunas veces “él tomaba su silla de montar; la colocaba
longitudinalmente y rezaba hacia su extremo.”
Él decía: Cuando uno de vosotros coloca enfrente de él algo tal como un palo
al extremo de una montura, debe rezar sin importar que alguien pase más
allá de ella.
Una vez “el rezó hacia un árbol” y algunas “él rezaba hacia la cama en la cual
Aixa dormía (bajo sus sábanas).”
También una vez “mientras rezaba una oración obligatoria, él cerró su puño,
de modo que cuando hubo terminado, la gente dijo: ‘¡Oh Mensajero de
Alá!¿Sucedió algo durante la oración?’ A lo que contestó: Nada, excepto que
el diablo quería pasar enfrente de mí, de modo que lo sujeté del cuello, con lo
que pude sentir la frialdad de su lengua en mi mano. ¡Por Alá! Que de no
haber sido por mi hermano Salomón que lo golpeó, lo hubiera atado (al
diablo) a uno de los pilares de la mezquita de modo tal que los niños de
Medina lo hubieran observado. (Así que cualquiera que pueda impedir que
algo interfiera entre él y la quibla, que lo haga)”
Cuando uno de vosotros reza hacia algo que es la sutra entre él y la gente y
alguien intenta cruzar frente a él, entonces debe empujarlo por la garganta
[repelerlo tanto como él pueda]. (En otra narración se dice: debe detenerlo dos
veces). Pero si él rehúsa (continúa insistiendo en pasar) entonces debe reñirle,
porque en verdad es un demonio.
LA INTENCIÓN
Él (Salllahu alehi wa salam) solía decir: Todas las acciones son por la
intención y cada hombre tendrá lo que su intención es.
TAKBÍR
ﷲ أَآْﺒَﺮ
ُ ا
También “él solía alzar su voz en el takbír de modo que los de atrás pudieran
oír.” Pero “cuando cayó enfermo Abu Baker, solía alzar su voz para llevar el
takbír del Mensajero (Salallahu alehi wa salam) a la gente.”
Él alzaba sus manos algunas veces con el takbír, algunas veces después del
takbír, y algunas otras antes de él.
“Él las alzaba con los dedos separados [ni muy abiertos, ni muy juntos]” y él
las colocaba a la altura de sus hombros”, aunque ocasionalmente, “él las
alzaba hasta que estuvieran al nivel (del límite] de sus orejas.”
“Él (Salallahu alehi wa salam) solía colocar su brazo derecho sobre su brazo
izquierdo” y decía: Nosotros, el grupo de profetas, se nos ha ordenado
apresurar el rompimiento del ayuno, demorar la comida antes del ayuno y
colocar nuestros brazos derechos sobre nuestros brazos izquierdos durante la
oración.
También “él pasó cerca de un hombre que estaba rezando y había colocado su
brazo izquierdo sobre el derecho, así que él los jaló para colocar el derecho
sobre el izquierdo.”
También: “Aixa tenía una tela con pinturas extendidas en todo el sahwa 49 , a lo
que el Profeta (Salallahu alehi wa salam) dijo: Aléjala de mi (porque sus
pinturas no cesaban de perturbar mi oración) 50
47
Prenda de lana con estampado.
48
Una prenda ordinaria sin ornamento ni estampado.
49
Espacio de una tienda fijada ligeramente en el suelo, a modo de pequeña alcoba o camerino. (Nijaya)
50
Bujari , Muslim y Abu ‘Auána. El Mensajero (Salallahu alehi wa salam) no mandó suprimir o arrancar
las pinturas, sino solamente cambiarlas de lugar porque –y Alá sabe mejor- que no eran pinturas con seres
de alma. La evidencia de esto es que él (Salallahu alehi wa salam) arrancó otras pinturas como lo prueban
muchas narraciones de Bujari y Muslim y quien quiera ahondar en el asunto, puede consultar Fath al-Bari
(10/321) y Gáya al-Marám fi Tajrich Ahadiz al-Halal ual Haram (Nos. 131-145).
51
Bujari y Muslim
A continuación, él (Salallahu alehi wa salam) comenzaba su recitación con
muchas clases de súplicas en las cuales él alababa a Dios Exaltado,
glorificándolo y enalteciéndolo. De hecho él ordenó “al hombre que rezaba
mal” hacer así, diciéndole: La oración de una persona no está completa a
menos que diga takbír, alabe a Alá el poderoso y Sublime y lo exalte,
recitando del Corán lo que le sea más fácil...
1.-
اﻟﻠـّ ُﻬﻢﱠ،ِﻦ اﻟـْ َﻤﺸْﺮِق ِ َو اﻟـْﻤَﻐـْ ِﺮب َ ْت َﺑﻴ
َ ْﻋﺪ َ ي آـَﻤَﺎ ﺑَﺎ
َ ﻦ ﺧَﻄـَﺎﻳَﺎ َ ْﻋﺪْ ﺑَﻴْﻨِﻲ و َﺑﻴ
ِ اﻟﻠـّ ُﻬﻢﱠ ﺑَﺎ
ْ اﻟﻠـّ ُﻬﻢﱠ اﻏـْﺴِﻠـْﻨِﻲ ِﻣﻦ،ِ ﻦ اﻟ ﱠﺪ ﻧـَﺲ َ ﺾ ِﻣ ُ ب اﻟـَْﺄﺑْ َﻴ
ُ ْي آَـﻤَﺎ ﻳُﻨـَﻘـﱠﻰ اﻟﺜَـﻮ َ ﻧـَﻘﱢـﻨِﻲ ِﻣﻦْ ﺧَﻄـَﺎﻳَﺎ
.ي ﺑـِﺎﻟـْﻤَﺎ ِء وَاﻟﺜـﱠﻠـْﺞ ِ وَاﻟ ْـ َﺒﺮَد
َ ﺧَﻄـَﺎﻳَﺎ
Alájuma ba’id baini ua baina jatayaya kama ba’adta almasriq ual magrib,
Alájuma naqini min jatayaya kama yunaqa a-zaubul abiad min a danas,
Alájuma Igsilní min jatayaya bil má-i ua zalch ual barad
¡Oh Alá! Aléjame de mis errores como alejas el Oriente del Occidente.
¡Oh Alá! Purifícame de mis errores como se purifica la ropa blanca de la
suciedad.¡Oh Alá! Depúrame de mis pecados con agua, hielo y nieve.
2.-
ﻦ
َ َو ﻣَﺎ أَﻧـَﺎ ِﻣ،[ً ] ُﻣﺴْﻠِﻤﺎ،ً ﺣﻨِﻴﻔﺎَ ض َ ْت وَاﻟـَْﺄرِ ﺴﻤَﺎوَا ﻲ ﻟِﻠﱠـﺬِي ﻓـَﻄَـ َﺮ اﻟ ﱠ َ ﺖ َوﺟْﻬِـُ َْوﺟﱠﻬـ
ت
ُ ْﻚ ُأ ِﻣﺮَ َو ﺑـِﺬ َِﻟ،ُﻚ ﻟَـﻪ
َ ﺷﺮِﻳ َ َ ﻻ،ب اﻟ ْـﻌَﺎﻟَـﻤِﻴﻦ ي َو َﻣﻤَﺎﺗِﻲ ﻟِﻠﱠـ ِﻪ َر ﱢ َ ﺴﻜِﻲ َو َﻣﺤْﻴَﺎ ُ ن ﺻَﻼﺗِﻲ َو ﻧُـ ِإ ﱠ،اﻟـْ ُﻤﺸْﺮِآِﻴﻦ
،ﺖ َرﺑﱢﻲ َو أﻧـَﺎ ﻋَـﺒْﺪُك َ ْ أﻧـ،َﻚ َو ﺑِﺤَﻤْﺪِك
َ ﺳﺒْﺤﺎﻧَـ ُ ،َﻻ أﻧـْﺖ ﻻ َ إِﻟ َﻪ إ ﱠ،ُﺖ اﻟـْ َﻤِﻠﻚ
َ ْ اﻟﻠـّ ُﻬﻢّ أﻧـ،ل اﻟـْ ُﻤﺴِْﻠﻤِﻴﻦ
ُ َو أَﻧـَﺎ َأوﱠ
ﺐ
َ ﻻ َﻳﻐْ ِﻔ ُﺮ اﻟﺬ ﱡﻧُـ
َ ﻓـَﺎﻏـْ ِﻔﺮْ ﻟِﻲ ذ َﻧـْﺒـِﻲ ﺟَﻤِﻴﻌﺎ ً إﻧـﱠ ُﻪ،ﺖ ﺑـِﺬ َﻧـْﺒـِﻲ ُ ْ َو اﻋـْﺘَـﺮَﻓـ،ﺖ ﻧـَﻔـْﺴِﻲ ُ ْﻇـَﻠَـﻤ
3.- Similar al anterior excepto por: Anta rabí ua ana a’bduk; Tu eres mi Señor
y yo soy Tu siervo... al final, con la siguiente adición:
¡Oh Alá! Tú ere el Rey, no hay Dios excepto Tú, alabado y glorificado
seas.
4.- Igual que la No. 2 hasta: Ua ana aualul muslimin; soy el primero de los
musulmanes, añades:
Alájuma ajdiní li ajsani al ajlaqui ua ajsanil a’mali la yajdí li ajsanija íla ant,
uaquiní sayi-al ajlaqui ual a’mali la yaquí sayi-ija íla ant.
¡Oh Alá! Guíame al mejor de los modales y a la mejor de las obras, nadie
guía a su mejoramiento sino Tú. Desvía de mí lo peor de los modales y de
las obras (pues) nadie (nos) desvía de su maldad excepto Tú.
Se dicen tres veces: La ilája íla Alá (No hay Dios sino Alá)
Y tres veces dices: Alá juákbaru kabiran (Alá es el Más Grandemente
Grande)
9.- Alájuma laka aljamd, anta nuru samauati ual ardi ua man fihim, ua laka
aljamdu, anta cayimu samauati ual ardi ua man fijina, [ua laka aljamdu, anta
maliku samauati ual ardi ua man fijim], ua laka aljamd, anta aljac, ua
ua’duka jac, ua cauluka jac, ua li cauca jak, ual yannatu jac, ua nar jac, ua
sa’atu jac, ua nabiyuna jac, ua mujammadun jac, Alájuma laka aslamtu, ua
aleika tauacaltu ua bika amantu, ua ileika anabtu, ua bika jasamtu, ua ileika
jakamtu, [anta rabbuna ua ileika al masír, fagfir lí ma cadamtu, ua ma ajart,
ua ma asrartu ua ma a’alant], [ua ma anta a’alamu biji minni], antal
muccadim ua antal muájir, [anta ilají], la ilája íla ant.
¡Oh Alá! Para Ti las alabanzas, Eres la luz del cielo, la tierra y de quienes
las habitan. Para Ti las alabanzas, Guardián del cielo, la tierra y quienes
habitan en ellos. [Para Ti las alabanzas, Dueño de los cielos, la tierra y su
contenido], para Ti las alabanzas, Eres la Verdad; Tu promesa es verdad,
Tu palabra es verdad; Tu encuentro es verdad, el Paraíso es verdadero;
el Fuego (del Infierno) es verdad, la Hora (final) es verdad; los profetas
verdaderos al igual que Mohámed. ¡Oh Alá! A Ti me someto, en Ti pongo
toda mi confianza, en Ti creo, a Ti me vuelvo, por Ti combato, a Ti
recurro para decidir. [Tú eres nuestro Señor y tuyo el Destino.
Perdóname lo pasado y lo futuro, lo que oculto y lo que muestro] [y de lo
que (de antemano) más sabes y yo ignoro]. Tu eres el Proveedor y el
Moroso [Tu eres mi Deidad]. No existe dios sino Tú.
10.- Alájuma rabba yibraíla ua Mikaíla ua Israfíl, Fátira samauáti ual aud,
álim-al-gaibi ua shajáda, anta tajkumu rá-una íbaadika fíma kanú fíji
yajtalifún, ijdíni lima ijtúlifa fíji min al jaqui bi ídnik, ínnaka tajdí man tasháu
ilá siratin mustaquím.
11.-El decía takbír,52 tajmíd, 53 tasbíj, 54 tajlíl 55 e istigfár diez veces cada uno,
y después remataba con:
¡Oh Alá! ¡Me refugio en Ti de la angustia del Día de ajustar cuentas. Esto
diciéndolo diez veces.
12.- Alá Juákbar [tres veces] dúl malakúti ual yabarúti ual kibriá-i ual ádima.
¡Alá es el Más grande! [decirlo tres veces]. Dueño del Reino, el Poder, la
Magnificencia y la Grandeza.
RECITACIÓN
52
Decir Alá juákbar (Alá es el Más grande)
53
Decir Aljám dulilá.(Alabado sea Alá)
54
Decir subjána-lá (Gloria a Alá)
55
Decir la ilája ílalá (No hay dios mas que Alá)
Aléjame Dios de Satán maldito, de su instigación,56 de su arrogancia y de su
verborrea 57 . Algunas veces el añadía a lo anterior lo siguiente:
Y posteriormente recitaba:
[pausaba, y continuaba:]
Arrajmáni arrajím
... y así sucesivamente, hasta el final de la sura. El resto, al igual que lo que
vimos, los describimos así: detenerse al final de cada verso y no unir uno tras
otro 59 ]
56
Las tres palabras árabes para instigación, arrogancia y verborrea (jámz, nafj y nafz) respectivamente,
fueron interpretadas así por el narrador; toda interpretación posible datan del Profeta (P. B. E) con un
isnád mursal auténtico. Por ‘verborrea’, entendámoslo como el Profeta dijera alguna vez: “En verdad en
cierta verborrea hay sabiduría” (Bujari)
57
Abu Daud, Ibn Maya, Daracútni y Hakim, quines junto a Ibn Hibbán y Dájabi, lo declararon sajíj. Junto
con la siguiente súplica, podrá encontrarlas en Irwá al- Galíl.
58
Bujari, Muslim, Abu ‘Auaana, Tajaui y Ahmed
59
Abu Daud & Sajmi (64-65); Hakim lo declaró sajíj y Dájabi lo confirmó. Se da en Irwá (343). Abu
Amer a-Dáni lo escribió en al-Muktafaa (5/2) y dijo: “Este hadiz tiene muchas bifurcaciones y es
dependiendo de lo que se considera; muchos de los imams y recitadores del pasado preferían pausar al
algunas veces él recitaba:
Maliki yaumi dín
(Rey del Día del Juicio] o en su lugar:
final de cada verso, aún si algunos lo fuesen (en significado)” Yo digo: Esta es una sunna que ha sido
ignorada por la mayoría de los recitadores de esta era, dejando en paz a los otros.
60
Tammaam a-Rázi en al-Fauaa’id, Ibn Abi Daud en al-Masaajif (7/2), Abu No’aim en Ajbaar Isbaján
(1/104) & Hakim quienes lo declararon sajíj y Dájabi lo confirmaron. Ambas recitaciones son mutauátir.
61
El primer capítulo o sura se llama fatihat-ul-kitab, capítulo de apertura o simplemente Fatiha. Se le
llama también suratu nafiya, el capítulo que completa a los demás; a-surat-ul-kifaya, el capítulo
suficiente, es decir, que sustituye a los otros; surat-ul-hamd o surat-ul-shukr o a-dúa, el capítulo de la
alabanza o de las acciones de gracias o de la súplica; suratu shafíya, el capítulo que cura o simplemente
a-shafíya; assás, la base; surat-ul-kanz, capítulo del tesoro. Se le llama también umm-ul-Qur’an, madre
del Corán; umm-ul-kitab, madre del Libro. Conviene no confundir la acepción que este nombre tiene aquí
con el de los demás pasajes del Corán, que advertiremos en su momento.
62
ibídem
63
ibídem
64
Ibídem
65
Baachi dijo: “él se refiere al dicho de Alá el Exaltado: “Y te Hemos otorgado siete de la Reiteración
y la Magnífica Recitación” (Al-Hichr 15:87). Es llamado siete porque contiene siete versículos, y es
Él (Salallahu alehi wa salam) ordenó a “quien rezaba deplorablemente”
recitarla en cada oración; pero dijo a quien no la podía recordar: Di : Subjana
lá, ua aljam du lilá, ua la ilája íla lá, ua Alá juákbar, ua la jaulá ua la cú-
ata íla bilá [Alabado sea Alá, glorificado sea Alá, y no hay más Dios que Él y
Él es el Más Grande; y no hay poder sino el de Alá] 67
Él había concedido una vez aquellos que rezaban detrás del imám, recitaran
sura la fatiha en las oraciones en voz alta, cuando sucedió que:
“Él estaba rezando fayer, volviéndose la recitación más difícil para él (cada
momento que pasaba). Al terminar dijo: Es posible que recitéis detrás de
vuestro imám. Dijimos todos “Sí, con rapidez, ¡Oh Mensajero de Alá!” A lo
que dijo: No lo hagáis así, sino en la Apertura del Libro, puesto que la oración
no vale para aquél que no la recita” 69
“Él terminó una oración en la cual él estaba recitando fuertemente (en otra
narración: en la oración del crepúsculo) y dijo: ¡¿Acaso alguno de vosotros
estaba rezando (al unísono) conmigo justo en este instante?! A lo que contestó
un hombre: “Sí, era yo ¡Oh Mensajero de Alá!”. Respondiéndole: Y digo yo
¿Por qué me siento tan contrariado? [Abu Huraira continúa diciéndonos:]
Entonces la gente detuvo sus recitaciones junto con el mensajero de Alá (P. B.
E) cuando él estaba recitando fuertemente después de escuchar aquello que
“Reiteración” porque se repite una y otra vez en cada oración. Ha sido llamada “la Magnífica Recitación”
para especificar tal nombre para la sura, aunque cada parte del Corán es magnífica en recitación; de igual
modo, la Caaba es “La Casa de Alá”, aunque todas las demás casas pertenezcan a Alá; esto viene a
colación para especificar y enfatizar su importancia”.
66
Nasái & Hakim lo declararon auténtico y Dájabi estuvo de acuerdo con ellos.
67
Abu Daud, Ibn Juzaima (1/80/2), Hakim, Tabaráni & Ibn Hibbaan, éste último de acuerdo con el
tercero, lo declararon auténtico y Dhabi asintió. Se encuentra en Irwá (303).
68
Abu Daud & Tirmídi, que lo declararon bastante bueno; su cadena de transmisión es auténtica (Sajij
Abu Daud No. 807)
69
Bujari en su panfleto, Abu Daud & Ahmed. Tirmídi y Daracútni lo declararon bastante aceptable.
dijo [sin embargo, ellos continuaron recitando calladamente cuando el imám
no estaba recitando fuertemente]” 70
En cuanto a las oraciones en voz baja, él los instaba a que recitaran durante
ellas; Yábir dijo, “Nosotros solíamos recitar detrás del imám en dohor y ázar,
sura la Fatiha y otra sura en las dos primeras rakás, y sura la Fatiha en las
últimas dos”. 72
Él también solía decir: Cualquiera que recitó una letra del Libro de Alá, le
valdrá como una buena acción, y una buena acción vale diez veces más. Yo
no digo que “alif lam mim” es una letra, sino que “alif” es una letra, “lam”
es una letra y “mim” es una letra. 74
70
Málik, Humaidi, Bujari en su panfleto, Abu Daud y Mahámali (6/139/1). Tirmídi lo proclamó bastante
aceptable; Abu Hátim a-Rázi, Ibn Hibbán & Ibn Cayyim lo proclamaron auténtico.
71
Ibn Abi Cheiba (1/97/1), Daracútni, Ibn Maya, Tajáui y Ahmed por numerosas rutas, musnad y mursal.
Sheij-ul-Islam Ibn Taimiya lo declaró convincente, al igual que en al-Furú de Ibn Abdúl Hádi (48/2).
Busairi proclamó alguna de sus cadenas de transmisión auténticas. Lo he discutido e investigado con
sumo detalle las rutas de narración en una versión manuscrita y en el Irwá al-Galíl (No. 500)
72
Ibn Maya con un isnád sajij. Se da en el Irwá (506)
73
Muslim, Abu ‘Auána y Sirách
74
Tirmídi & Ibn Maya con un isnád sajij. Transmitido también por Aajuri en Aadaab Haml al-Curán. En
cuanto al hadiz “Aquél que recite detrás del imám, su boca está llena de fuego” es un dicho fabricado
(maudú) y esto se explica en Silsíla al-hadiz a-daífa (No. 569) – véase apéndice 5.
SOBRE EL AAMÍIN Y SU FUERTE RECITACIÓN POR EL IMÁM
También solía decir: los judíos no os envidian tanto por nada como os
envidian por la salutación y el aamíin (detrás del imám).
Anas ibn Malik dijo: “Él (Salallahu alehi wa salam) la hizo (o sea, la
recitación) corta un día en la oración del crepúsculo” (en otra narración: él
rezó la oración de la mañana y recitó las dos suras más cortas del Corán). Así
que dijeron: “¡Oh Mensajero de Alá!¿Por qué la acortaste?” Él respondió:
75
Bujari en Yuz al-Quirá y Abu Daud con un isnad sajij.
Escuché el llanto de una criatura, así que supuse que su madre estaba
rezando con nosotros, de modo que quise liberar a su madre para él.
Él solía decir: Dad a cada sura su parte del rukú y suyúd. En otra narración:
Cada sura debe tener una raká.
Algunas veces él (Sallahu alehi wa salam) solía dividir la sura en dos rakás y
otras veces él solía repetir toda la sura en la segunda raká.
Él solía combinar las suras pares del Libro, así que solía recitar alguno de los
siguientes pares de suras en una raká:
Cuando él recitaba:
Y cuando él recitaba:
Mu’ad ibn Yabal solía rezar el Ishá con el Mensajero de Alá (Salallahu alehi
wa salam) y después regresaba con su gente para dirigirla en la oración. Una
noche en que volvía para rezar con ellos, un joven (llamado Sulaim, de Banu
Saláma) del pueblo rezó. Sin embargo, cuando se prolongó, aquél rezó aparte
(en una esquina de la mezquita). Salió, tomó las riendas de su camello y
partió. Cuando Mu’ad había terminado de rezar, le fue mencionado el hecho,
a lo que dijo: “¡Seguramente tiene algo de hipócrita! Informaré de ello al
Mensajero de Alá (Salallahu alehi wa salam)”. Y también a su vez dijo el
joven: “…E informaré al Mensajero de Alá (Salallahu alehi wa salam) de lo
que él hizo”.Así que ambos (el joven y Mu’ad) en la mañana llegaron con el
Profeta y Mu’ad le informó de lo que el joven había hecho. El joven
respondió: “¡Oh Mensajero de Alá! Él permanece contigo mucho tiempo y
regresa con el fin de prolongarla”. Así que el Mensajero de Alá (Salallahu
alehi wa salam) dijo: ¡¿Acaso eres tú el que causa tal, Mu’ad?! Y él (Mu’ad)
replicó al joven: ¿Qué es lo que tú haces cuando rezas, hijo de mi hermano?
Él le contestó de frente al Profeta: “Yo recito la Fatiha, después pido a Alá
por el Jardín (del Paraíso), y busco refugio en Él del Fuego (del Infierno). ¡Ni
siquiera conozco tu bisbiseo 76 ni el bisbiseo de Mu’ad!” Así que el Mensajero
de Alá (Salallahu alehi wa salam) dijo: En esto Mu’ad y yo nos parecemos.
El narrador continúa: El joven respondió: “Pero Mu’ad sabrá (de mí) cuando
vaya con la gente y haya sido informada de cuando el enemigo haya llegado”.
Y continúa diciendo el narrador: Así que el enemigo llegó y el joven
permaneció en shajada (murió mártir). Así que después el Mensajero de Alá
(Salallahu alehi wa salam) al enterarse dijo a Mu’ad: ¿Qué fue lo que hizo
quien argüía contigo y conmigo? A lo que le dijo: “¡Oh Mensajero de Alá! Él,
quien era sincero hacia Alá, que lo acusé falsamente, murió como mártir.
También recitaba en voz alta en la oración del viernes y en las dos oraciones
del áid; en las oraciones de la lluvia y en las de eclipse.
“Él salió para encontrarse con Abu Baker, quien rezaba en voz baja, y pasó
por donde Omar ibn al-Jatab, quien estaba rezando en voz alta.
Posteriormente, cuando ambos se reunieron con el Profeta (Salallahu alehi wa
salam) éste dijo: ¡Oh Abu Baker! Pasé por donde estabas ¿Acaso rezabas en
voz baja? Él le contestó: “A Él (Alá) es a quien mi consulta dejo escuchar ¡Oh
Mensajero de Alá!” Y él dijo a Omar: Pasé por donde estabas ¿Acaso estabas
76
Bisbiseo: acción de bisbisar/ Bisbisar: fam. Musitar, decir entre dientes.- Academia.
rezando en voz alta? Y él le contestó: “¡Oh Mensajero de Alá! Repelo así la
somnolencia y mantengo alejado al Diablo”. El Profeta (Salallahu alehi wa
salam) dijo: ¡Oh Abu Baker, eleva tu voz un poquito más! Y tú Omar: ¡Atenúa
tu voz un poquito más!
Él (Salallahu alehi wa salam) también solía decir: Aquél que recita el Corán
fuertemente es como el que da caridad alardeando, y aquél que recita el
Corán en silencio es como aquél que da caridad calladamente.
El Profeta solía recitar las suras más largas del Libro y por ello “él (algunas
veces) recitaba al-Uaquía (56:96) y suras similares en las dos rakás”.
Otras veces “recitaba sura Kaaf (50:45) o algo similar (en la primera raká)”.
Algunas otras “él recitaba las suras más cortas del Libro, tales como “Cuando
el sol sea obscurecido” (A-Takwír 81:29)”.
Una vez que recitó: “Cuando sea sacudida la Tierra” (Zilzál 99:8) en las
dos rakás, el narrador nos señala: “No sé si el Mensajero de Alá olvidó recitar
otra o lo hizo a propósito”.77
Una vez en un viaje, él recitó: “Di: ‘Me refugio en el Señor del alba’” (Falac
113:5) y “Di: ‘Me refugio en el Señor de los hombres’” (Los hombres
114:6). También dijo a Úcba ibn ‘Amír: Recitad mu’awadatein 78 en vuestra
oración, porque ninguno que busque el refugio ha buscado refugio por medio
de algo semejante a ellas (dos). 79
77
Abu Daud y Baijáqui con el isnad sajíj. En apariencia es que él (Salallahu alehi wa salam) lo hizo a
propósito para marcar su validez.
78
Significa: “las dos por las cuales el refugio es buscado”, o sea, las dos últimas suras del Corán que
empiezan con “Di: Me refugio en...”
79
Abu Daud y Ahmed, con isnad sajíj.
Algunas veces él solía recitar algo más que eso: “él recitaba 60 aleyas o más”
–otro narrador dice, “No sé si era en cada raká o todo”.
Él solía recitar sura Rum (30:60) y en otras ocasiones sura Yaa Sin (36:83).
Una vez que “rezó el Subj (o sea, la oración del fayer) en Meca, comenzó a
recitar sura al-Mu’minún (23:118) hasta que, cuando llegó a la parte en que se
menciona a Moisés y Aarón, o menciona a Jesús 80 – el narrador no está
seguro- él comenzó a toser y aún así hizo el rukú ”. 81
“En el fayer de los viernes, el recitaba a-Sachda (32:30) (en la primera raká) y
a-Dahr (76:31)(en la segunda).”83
80
Moisés es mencionado en la aleya 45: “Luego, enviamos a Moisés y su hermano Aarón con
Nuestros signos y con una autoridad manifiesta”; Jesús es mencionado poco después en la aleya 50:
“Hicimos del hijo de María y de su madre un signo y les ofrecimos refugio en una colina tranquila y
provista de agua viva”.
81
Muslim y Bujari en forma ta’lík. Se da en el Irwá (397).
82
Ahmed y Abu Ya`laa en sus respectivos Musnaad, y Macdisi en al-Mujtára.
83
Bujari & Muslim.
84
Ibídem.
85
Ahmed, con isnad sajíj
86
Bujari y Muslim.
87
Muslim, Ibn Juzaima y Hakim.
88
Muslim y Abu Daud
89
Ibídem.
Él escuchó a un hombre recitar la sura del principio, anteriormente
mencionada, en la primera raká, así que dijo: Este es un esclavo que cree en
su Señor. Entonces el hombre recitó la última sura, anteriormente mencionada
en la segunda raká, así que dijo: Este es un esclavo que conoce a su Señor. 91
“Él (Salallahu alehi wa salam) solía recitar la Fatiha y dos suras en las
primeras dos rakás, prolongando más la primera que la segunda”.
Algunas veces él la prolongaba hasta tal punto que “una vez iniciada la
oración del dohor, alguien podía ir hasta un llano (al-Baquí), realizar sus
necesidades, (regresar a su lugar), hacer su ablución, y después regresar (a la
mezquita) mientras el Mensajero (Salallahu alehi wa salam) estaba aún en la
primera raká, que era muy larga.” También “solían pensar que él lo hacía así
para que la gente pudiera alcanzar al primera raká”.
“Él solía recitar en cada una de las dos rakás como 30 aleyas, tal como que
sura a-Sachda (32:30) le seguía a la Fatiha”.
Algunas veces “él recitaba ‘¡Por el cielo y el astro nocturno’ (Corán 86),
‘Por el cielo con sus constelaciones’ (Corán 85), ‘¡Por la noche cuando
extiende su velo!’ (Corán 92) y suras similares”.
“Ellos podían decir que estaba recitando en dohor y ázar por el sólo agitar de
su barba”. 92
“Él solía hacer las dos rakás últimas como la mitad de largas que las dos
primeras, cerca de 15 aleyas, 93 y algunas veces él solamente recitaba la Fatiha
en ellas”.
90
Ibn Maya & Ibn Juzaima.
91
Tajaui, Ibn Hibban en su Sajíj & Ibn Bushrán; Ibn Hayar lo declaró jásan en al-Ajadiz al-‘Aaliyaat
(No. 16)
92
Bujari y Abu Daud
93
Ahmed y Muslim. El hadiz contiene evidencia de que recitando algo más que la Fatiha en las últimas
dos rakás es sunna. Así es como lo hicieron Los Compañeros, de entre ellos podemos mencionar a Abu
Baker Siddiq. Igual opina el imám Chafeí, ya sea para dohor u otras; igualmente eruditos posteriores
como Abul Hasanát al-Lucnoui, de quien reproducimos un fragmento de su libro Notas sobre la Muwatta
de Mohámed (p. 102) :
Algunas veces “los dejaba oír una aleya o algo así”.
Algunas veces “él recitaba ¡Por el cielo y el astro nocturno!’ (Corán 86),
‘Por el cielo con sus constelaciones’ (Corán 85), y suras similares”.
Algunas veces “él recitaba ‘¡Por la noche cuando extiende su velo!’ (Corán
92) y suras similares”.
“Él (Salallahu alehi wa salam) solía recitar la Fatiha y otras dos suras en las
primeras dos rakás, haciendo la primera más larga que la segunda” 94 , y “ellos
solían pensar que él lo hacía así para que la gente pudiese alcanzar la raká”. 95
“Él solía recitar cerca de 15 aleyas en cada una de las dos rakás, cerca de la
mitad de las que él recitaba en cada una de las primeras dos rakás de dohor, y
solía hacer las dos últimas rakás cerca de la mitad de lo que eran las primeras
dos”. 96
“Él (Salallahu alehi wa salam) solía recitar (a veces) las suras mufassal
cortas” 99 , de modo que “cuando ellos habían terminado de rezar con él,
Pero ciertas ocasiones él recitaba las suras mufassal medias o largas, por ello
“recitaba ‘A quienes no crean y aparten a otros del camino de Alá
(Mahoma 47:1)’ ” 102 ; o sura a-Tur (52:49) 103 ; o sura al-Mursalat (77:50),
ésta última la recitó en la última oración que rezó. 104
Otras veces, “él recitaba la más larga de las dos suras largas (A’raaf 7:206)[en
dos rakás].” O también solía recitar al-Anfaal (8:75) en dos rakás.
En esta oración “él solía recitar ‘Di: “¡Infieles!”’ (Los Infieles 109) y ‘Di:
“¡Él es Alá, Uno!” ’ (La Fe Pura 112)”.
Él recitaba las suras medianas mufassal en las primeras dos rakás, por lo que
“él solía recitar ‘Por el sol y su esplendor’ (El Sol 91) y similares”.
También “él solía recitar ‘Por el higo y el olivo’ (El Higo 95) [en la primera
raká] durante un viaje”. 105
Mu’aad ibn Yabal dirigió a su gente en la oración del ishá, pero la hizo tan
prolongada, que uno de los ansares se fue para rezarla aparte. Cuando Mu’aad
fue informado de ello, les dijo: “Seguramente es un hipócrita”. Cuando el
interpelado escuchó esto, fue hacia el Mensajero de Alá (Salallahu alehi wa
salam) y le dijo lo que Mu’aad había dicho, de manera que el Nabí (P. B. E) le
dijo: ¡¿Acaso eres tú, Mu’ aad, quien causa revuelo?! Cuando dirijas a la
100
Nasái y Ahmed, con isnád sajij
101
Tayálisi y Ahmed, con isnád sajij.
102
Ibn Juzaima (1/166/2), Tabaráni y Macdisi, con isnád sajíj.
103
Bujari y Muslim.
104
Ibíd.
105
Ibíd
gente, recita ‘Por el sol y su esplendor’ (El Sol 91) o ‘¡Glorifica en el
nombre de tu Señor, el Altísimo!’ (El Altísimo 87) o ‘Lee en el nombre de
tu Señor’ (‘Alaq 96) ó ¡Por la noche cuando extiende su velo! (La Noche
92) [porque los ancianos, débiles e incluso quienes tienen la necesidad de
cumplir la oración detrás de ti]” 106
6.- El Tajayud
“Una noche que recé con el Profeta (Salallahu alehi wa salam) y siguió parado
por tanto tiempo, me asaltó un mal pensamiento”. Y le preguntaron: “¿Cuál
era ese pensamiento?” A lo que contestó: “¡Pensaba en sentarme y dejar al
Profeta (Salallahu alehi wa salam)!” 108
“Recé con el Profeta (Salallahu alehi wa salam) aquella noche cuando inició
con sura La Vaca. Así que me dije: “él hará rukú después de cien aleyas”.
Pero él continuó, así que pensé: “la terminará (la sura) en dos rakás”. Pero él
continuó, y pensé: “él hará rukú cuando la haya finalizado’. Entonces
comenzó con la sura de Las Mujeres y la recitó toda, luego comenzó con sura
al-Imrán y la recitó toda. Él recitaba lentamente, cuando llegaba a una aleya
en la cual se glorifica a Dios, lo glorificaba; en alguna aleya en la cual tenía
que rogar, él rogaba por ello; al mencionar que buscaba Su refugio, él lo
buscaba. Y es entonces que hizo el rukú...” y así continuó el hadiz hasta
finalizarlo de tal modo. 109
También se dice que: “una noche cuando él estaba enfermo, recitó las siete
suras largas” 110
Y también: “él recitaba (a veces) una de éstas suras en cada raká” 111
Por esta razón, “él (Salallahu alehi wa salam) no recitaba todo el Corán en
menos de tres días”. 121
Él solía decir: Quien sea que en la noche reza recitando 200 aleyas, será
anotado como uno de los devotos sinceros. 122 También, “él solía recitar sura
Bani israíl (17) y sura Zumar (39) cada noche”. Él también solía decir: Quien
sea que en la noche reza recitando 100 aleyas, no será anotado como uno de
112
Muslim y Abu Daud
113
Bujari y Muslim
114
Nasái & Tirmídi, quienes lo declararon auténtico
115
Bujari y Ahmed
116
Darími & Saíd ibn Mansur en su Sunnan con cadena de transmisión auténtica.
117
Darími & Tirmídi, que lo declararon auténtico.
118
En ár. Shirra: entusiasmo, aprehensión o arrebato. La shirra de la juventud es de por sí un principio de
fervor devocionario. Imám Tajaui dice:
“Esto es el fervor devocionario de los musulmanes en sus acciones; los acerca más a su Señor.
Sin embargo están tan cerca de abandonar algunas acciones (las cuales iniciaron debido a su fervor) por lo
que las acciones más amadas hacia el Mensajero (P. B. E) fueron hechas ineludiblemente con
persistencia, de modo que él les ordenó llevaran a cabo actos justos que fueran capaces de continuar
haciendo hasta encontrarse con su Señor –el Excelso, el Poderoso. Hay una narración de él (P. B. E) que
aclara el asunto: las acciones más amadas por Alá son aquellas que son las más asiduas, aún si son
modestas.
Yo digo: Este hadiz que antepone las palabras “se narra”, “es narrado” es auténtico y reconocido por
Bujari & Muslim, de una narración de Aixa (A. S. E).
119
En ár. Fatra: intervalo, descanso, lapso; aquí se refiere al período de reducido entusiasmo.
120
Ahmed & Ibn Hibbán en su Sajij.
121
Ibn Sa’ad (1/376) & Abu Sheik en Ajlaaq Nabí (281)
122
Darími & Hakím, quienes lo declararon auténtico y Dahabi concordó.
los negligentes. 123 Algunas veces “él recitaba como 50 aleyas o más en cada
raká” 124 , o que “él recitaba tanto como la sura Muzzammil (73)”. 125
“Él (Salallahu alehi wa salam) no rezaba por toda la noche” 126 excepto que
una vez:
“Abdulá ibn Jabbáb ibn al-Arat –quien estuvo presente en la batalla de Bader
con el Mensajero de Alá (Salallahu alehi wa salam)- permaneció toda la noche
con el Mensajero de Alá [en otra versión: una noche cuando él permaneció
rezando en ella) hasta que fue el amanecer. Así que cuando él terminó su
oración, Jabbáb le dijo: “¡Oh Mensajero de Alá!¡Por mi padre y madre,
quienes se sacrificaron por ti! Esta noche ¿Acaso has rezado una oración de
un modo jamás antes visto?” A lo que le contestó: Sí, era una oración de
temor y esperanza; [ciertamente] pedí a mí Señor, poderoso y sublime, tres
cosas; me concedió dos, y me rechazó una. Le pedí a mi Señor que no nos
destruyera del modo que lo hizo con naciones anteriores a nosotros (en otra
versión: Que no destruyera mi umma con hambruna) y él me lo concedió; le
pedí a mi Señor magnífico y sublime que no nos antepusiera un enemigo
extraño a nosotros, y me lo concedió; más le pedí a mi Señor que no nos
cubriera con el manto de la confusión en las rivalidades, y Él me lo negó”127
También, una noche que permaneció (en oración) repitiendo una aleya hasta
que fue el amanecer:
“Si los castigas, son Tus siervos. Si los perdonas, Tú eres el Poderoso, el
Sabio” (La mesa servida 5:118)
[Con ella se inclinaba, con ella se prosternaba, y con ella suplicaba]. Así que
en la mañana Abu Darr le dijo: “¡Oh Mensajero de Alá! No cesaste de recitar
esta aleya hasta que amaneció; tú te inclinaste con ella y te prosternaste con
123
Ahmed & Ibn Náser con cadena de transmisión auténtica.
124
Bujari & Abu Daud.
125
Ahmed & Abu Daud con cadena de transmisión auténtica.
126
Muslim & Abu Daud. Este hadiz y otros consideran el hecho de permanecer despierto toda la noche
makrú (deleznable), aunque fuera a veces o siempre, porque es contrario al ejemplo del Profeta (Salallahu
alehi wa salam); porque de ser bueno, él (Salallahu alehi wa salam) lo hubiese hecho; y como la mejor
guía es la guía de Mohámed, no tomamos otra. Así que no os dejéis engañar por lo que narró Abu Hanifa,
de que ¡¡el Nabí rezaba Fayer con la ablución del Ishá por 40 años!! (ADVERTENCIA: REVISEN EL
LIBRO TABLIQUI NISAB: LAS VIRTUDES DE EL ZALÁ de MAULANA ZACARÍAS KANDHALVI, YA QUE ELLOS DAN
EJEMPLOS DE ESTE TIPO) Dicha narración es totalmente infundada; de hecho Álama al-Fairuzabádi nos
dice en su libro Ar-Rad ‘alá al-Mu’tarid (44/1):
“Esta narración es una clara mentira y no puede ser atribuida al imám, porque no hay nada de
bueno en ello, ya sea que fuera del gusto del imám hacer mejor las cosas; no hay duda que el renovar la
purificación para cada oración es lo mejor, lo excelso, lo completo y deseable. Y así es aunque fuese
correcto el permanecer despierto a lo largo de la noche y por cuarenta años consecutivos (con la misma
ablución). Este relato parece más bien un vil cuento chino, y es más bien la invención de alguien
extremadamente ignorante y fanático quien dice algo así semejante de Abu Hanifa y otros sabios; no es
sino pura mentira.”
127
Nasái, Ahmed & Tabaráni (1/187/2); Tirmídi lo declaró auténtico.
ella -y suplicaste con ella, siendo que Alá te enseñó todo el Corán-; si
cualquiera de nosotros fuera hacer esto, ¿debemos ser firmes en él?” Y él
(Salallahu alehi wa salam) contestó: En verdad solicité a mi Señor,
Magnánimo y Omnipotente, interceder por mi umma: Él me lo concedió así, y
de ser posible, si Alá lo permite, para cualquiera que no asocie nadie con
Alá. 128
Un hombre le dijo: “¡Oh Mensajero de Alá! Tengo un vecino que está parado
(en oración) toda la noche y no recita nada excepto “Di: ‘Él es Alá, el
Único’” (112), y eso cuando lo considera poco”. Así que el Profeta dijo: ¡Por
quien en Sus manos está mi alma! Ello vale un tercio del Corán. 129
Una vez “él recitó cien aleyas de sura Las mujeres (4:176) en la tercera
raká”. 132
En cuanto a las dos rakás después del uiter, 133 él solía recitar “Cuando se
sacuda la tierra...” (El terremoto 99) y “Di: ‘¡Infieles!’” (Los infieles 109)
en ellas. 134
128
Nasái, Ibn Juzaima ( 1/70/1), Ahmed; Ibn Násser & Hakim, quienes lo declarar
129
Ahmed & Bujari.
130
Nasái & Hakim, quienes lo declararon auténtico al hadiz.
131
Tirmídi, Abul Abbás al-Asamm en su obra al-Hadiz (vol. 2 #117), & Hakim, quienes lo declararon
sajíj (auténtico) y Dájabi estuvo de acuerdo.
132
Nasái & Ahmed con un isnad auténtico.
133
La evidencia de estas dos rakás la hallamos en Sajij Muslim y en otros escritos como una práctica del
Profeta (Salallahu alehi wa salam); sin embargo, aún enfrentamos oposición a su dicho: haced la última
de vuestras oraciones en uiter (noche impar). Transmitido por Bujari y Muslim. Los eruditos han tenido
problemas en conciliar los dos hadices, que a mi parecer, ninguno me convence, por lo que es más
prudentes es abandonar las dos rakás para cumplir con la orden del Profeta (Salallahu alehi wa salam); y
Alá conoce mejor.
Posteriormente, tuve frente a mí un hadiz auténtico donde se ordena las dos rakás después del
uiter, de modo que la orden del Profeta antes mencionada, concuerda con su acción, y las dos rakás son
válidas para todos; la primera orden es así una recomendación, sin negar las dos rakás. El segundo y
último hadiz lo pueden hallar en la obra Silsilat-ul-Ahadiz a-Sajija (Cadena de Hadices Auténtica) 1993 –
véase el apéndice 7.
134
Ahmed & Ibn Náser & Tajáui (1/202) e Ibn Juzaima & Ibn Hibbán con cadena de transmisión
auténtica.
8.- Oración del Viernes
“La sunna es recitar la Fatiha 138 (y otra sura) en ella”. 139 También “estaba en
silencio por un rato, después del primer takbír”. 140
135
Muslim & Abu Daud
136
Ibíd.
137
Ibíd.
138
Esto lo dijo Imám Chafeí, Ahmed e Isaac, y uno de los hanefitas tardíos quien investigó acerca de ello
y lo apoyó. En cuanto a la sura que se recita después de ella (la Fatiha), es opinión de los chafeítas y es la
correcta [N. T. : Ello no quiere decir que el autor mantenga afiliación chafeíta o malequita, etc., sino que
apoya una declaración con bases, datos e investigaciones fidedignas para declarar (por decirlo así):“esto
es lo más objetivo, lo auténticamente cercano a la verdad” dejando entrever que con posteriores
revisiones surjan hechos que lo renueven o contradigan, sin dejar ello duda que ha sido hecha con la más
pura, sincera y honesta de las causas, la causa por Alá: el Islam]
139
Bujari, Abu Daud, Nasái & Ibn al-Yaarud. El resto no es shádd (incongruente) como Tuwaidyiri
piensa.
140
Nasái & Tajaui con isnád sajíj.
diferenciada” 141 , tanto que “podía recitar una sura en tal tono con ritmo lento
que la sostenía lo más prolongada posible”. 142
Él también solía decir: se dirá al almocrí (en el Día del juicio): ‘Recitad y
ascended; recitad lentamente y rítmicamente como lo solías hacer en el
mundo previamente; tu lugar será donde recites la última aleya’. 143
Él “solía prolongar su recitación –en una letra que podía ser sostenida- como
en bismilá, en rajmán y en rajím”, y en “nadid” (Qāf 50:10) 144 y similares.
Algunas veces “recitaba en un tono 146 vibrante atractivo, como hizo en el Día
de la Conquista de Meca, cuando sentado sobre su camella, recitó sura al-Fath
(48:29) (muy suave) 147 , y Abdulá ibn Mugáfal narró describiendo tal tono
atractivo como: ♪ ¡aaa ! ♪ ”.
Embelleced el Corán con vuestras voces (pues una bella voz aumenta la
belleza del Corán) 148 . Y en verdad quien tenga una de las voces más bellas de
entre la gente para entonarlo, es quien teme a Alá cuando lo oyes recitar. 149
141
Ibn al-Mubarak en a-Zuhd (162/1 de al-Kawakib 575), Abu Daud & Ahmed con isnád sajíj.
142
Muslim y Malik.
143
Abu Daud & Tirmídi, quienes lo declararon sajíj.
144
Bujari en su obra Af’aal al-‘Ibaad con un isnád sajíj.
145
Ver la sección “Recitación de un verso a la vez”.
146
Taryí –explicado como un tono vibrante por Ibn Hayar; Manáui dijo: “Se eleva con un sentimiento de
gozo y felicidad, del cual él (P. B. E) se sintió bien tras el día de la conquista de Meca”.
147
Bujari y Muslim.
148
Bujari como Ta’lik, Abu Daud, Darimi, Hakim y Tammám al-Rázi con dos cadenas de transmisión
auténticos. NOTA: de dicho hadiz hay una opinión contraria de uno de los narradores, quien lo
anotó como “embelleced vuestras voces con el Corán”. Esto es error en la narración y en su
entendimiento, y cualquiera que lo haya declarado auténtico está en un absoluto error, porque con ello
contradice las narraciones esclarecedoras verdaderas en dicha porción. De hecho, es el primer ejemplo
de un hadiz maklub, de cuyos detalles se dan en la obra Silsila al-Ahadiz a-Da’ifa (No. 5328)
149
Un hadiz auténtico transmitido por Ibn al Mubarak en a-Zuhd (162/1 de al-Kawakib 575), Darimi, Ibn
Náser, Tabaráni; Abu No’aim en su obra Ajbar Isbaján; y Diyá en al-Mujtára.
150
Darimi & Ahmed, con cadena de narración auténtica.
Él también solía decir: Quien no recita el Corán en un tono placentero no es
uno de nosotros 151 . Y también decía: Alá no escucha cosa alguna como
cuando escucha a un profeta [con buena voz. Otra narración: con una melodía
hermosa] que recita el Corán en un tono (fuerte,)placentero.
AMONESTANDO AL IMÁM
Otmán ibn Abil Ás le dijo al Profeta: ‘¡Oh Mensajero de Alá! ¡El Diablo llega
a mí en la oración y me confunde al recitar!’ Así que el Mensajero de Alá
(Salallahu alehi wa salam) dijo: Ese es un diablo llamado Jinzab. Así que
cuando lo detectáis, busca refugio en Alá de él, y escupe ligeramente sobre tu
izquierda tres veces. Aquél le dijo: ‘Así que cuando lo hice, Alá hizo que se
alejara de mi’. 156
151
Abu Daud y Hakim, quienes lo declararon sajíj; Dájabi concordó.
152
Los estudiosos han dicho que ‘el instrumento de viento musical’ alude a la voz en canto; la frase ‘la
familia de David’ se refiere al mismísimo profeta David (Alehi salam), quien durante su existencia, solía
cantar loas al Señor, por lo que a la parte de ‘familia’ no es en sentido literal, sino más bien es alusivo a
quien con hermosa voz recitando el Corán, se asemeja al profeta o como uno de su prole que hereda tal
virtud latu sensu. Esto es mencionado por Nauauí en sus comentarios al Sajij Muslim.
153
Abdu Razác en al-Amaali (2/44/1), Bujari, Muslim, Ibn Náser y Hakím.
154
Abu Daud, Ibn Hibbán, Tabaráni, Ibn Asákir (2/296/2) & Diyá en al-Mujtára con un isnád sajíj.
155
En árabe tafl: soplar con un mínimo de saliva-Nihaaya.
156
Muslim y Ahmed. Nauauí dice, “este hadiz contiene una recomendación para alejarnos del Diablo
cuando nos tienta, junto con el escupir levemente a la izquierda tres veces”.
EL RUKÚ (LA INCLINACIÓN)
“Él (Salallahu alehi wa salam) colocaba las palmas de su mano sobre sus
rodillas” 162 , y “les ordenó hacer lo mismo” 163 , al igual que lo ordenó “al que
rezaba deplorablemente” en el ya mentado hadiz.
“Él colocaba sus manos firmemente sobre sus rodillas [como si estuviera
asiéndolas ]” 164 , y “separaba sus dedos” 165 ordenando “a quien rezaba
deplorablemente” hacer lo mismo, diciendo: cuando hagáis rukú, colocad
vuestras palmas sobre sus rodillas, después separad lo dedos, después
permaneced (así) hasta que cada miembro tome su (apropiado) lugar.166
157
Abu Daud & Hakim, quienes lo declararon sajíj & Dájabi estuvo de acuerdo.
158
Bujari & Muslim. Tal “alzar de manos” se reporta como mutauátir por él (Salallahu alehi wa salam), al
igual que elevar las manos al incorporarse después del rukú. Ello es el mad-jab de los tres imams: Malik,
Chafeí y Ahmed, al igual que el de los maestros de Hadiz y Fiq. Imám Malik lo hizo así hasta su muerte,
reportándolo así Ibn Asákir (15/78/2). Algunos de los hanefitas escogieron hacerlo así, entre ellos ‘Isám
bin Yusuf Abu ‘Asama al-Balji (m. 210), un estudiante del Imám Abu Yusuf, como se ha explicado en la
introducción de este libro. Abdulá bin Ahmed reportó de su padre en la obra Masá’il (p. 60): “Se relata de
Ucba Ibn ‘Aamir, quien dijo acerca de un hombre elevando las manos durante la oración, ‘él obtiene diez
actos buenos por dicho movimiento’”. Esto se sustenta por el hadiz cudsi “Aquél que pretende hacer un
acto bueno y luego lo efectúa, Alá lo toma en cuenta como de diez hasta setecientos actos buenos”,
transmitido por Bujari & Muslim. Consulten la obra Sajíj a-Targuíb, No. 16.
159
Ibíd.
160
Ibíd.
161
Abu Daud & Nasái. Hakim lo declaró sajíj y Dájabi lo confirmó.
162
Bujari & Abu Daud.
163
Bujari & Muslim.
164
Bujari & Abu Daud.
165
Hakim lo declaró sajíj; Dájabi & Tayálisi lo confirmaron. Se encuentra en el libro Sajíj Abi Daud
(809).
166
Ibn Juzaima & Ibn Hibbán en sus respectivos libros Sajíj.
“Él solía esparcirse (o sea, no estar en una posición apretada], y mantenía sus
codos separados de sus costados”. 167
“Cuando hacía rukú, él expandía su espalda y la ponía plana” 168 , “de modo
que si el agua era vertida sobre ella, ésta (el agua) se estancaría (o sea, no
correría)”. 169 Él también dijo a “quien oraba deplorablemente”: cuando hacéis
rukú, poned las palmas sobre vuestras rodillas, ensanchad vuestra espalda
(en plano) y sosteneos así en rukú. 170
“Él nunca hubiese estado cabizbajo ni cabeza arriba (o sea, por encima de la
espalda)” 171 sino más bien entre ambos. 172
Él solía estar cómodo en su rukú, y así lo ordenó “al que rezaba deplorable
mente”, como se indicó en la primera sección de rukú.
Él solía decir: Completad el rukú y el suyúd, pues por Quien en Sus manos
tiene mi alma, en verdad os veo tras de mi 173 cuando hacéis el rukú y el
suyúd. 174
“Él (Salallahu alehi wa salam) vio a un hombre rezar sin completar su rukú
apropiadamente, y ‘picoteando’ (como ave) en el suyúd. Así que le dijo:
estuviese este hombre a punto de morir, moriría en una fe que no es la de
Mohámed; quien no hace rukú completamente y picotea en su suyúd, es como
un hambriento que come uno o dos dátiles, los cuales no le son de beneficio
alguno. 175
167
Tirmídi lo declaró sajíj junto con Ibn Juzaima.
168
Bujari & Baijaqui, con isnád sajíj.
169
Tabaráni en su Mu’yam a-Saguír; Abdulá bin Ahmed en su Zauaíd al-Musnad; e Ibn Maya.
170
Ahmed & Abu Daud con isnád sajíj.
171
Abu Daud & Bujari en Yuz’ al-Quira con isnád sajíj
172
Muslim & Abu ‘Auána.
173
Esto es literal y uno de los milagros de Mohámed que sucedió en la oración del hadiz. No hay
evidencia de que ello haya sido frecuente.
174
Bujari & Muslim
175
Abu Ya’laa en su Musnad (340/3491/1), Aachuri en al-Arba’ín, Baijaqui, Tabaráni (1/192/1), Diyá en
al-Muntacá (276/1), Ibn ‘Asákir (2/226/2,414/1,8/14/1,76/2) con un isnád jásan & Ibn Juzaima lo declaró
auténtico (1/82/1). Ibn Batta posee una narración mursal que sustenta la parte primera del hadiz, menos la
adición, en al-Ibána (5/43/1).
Abu Huraira (dijo: “Mi querido amigo (Salallahu alehi wa salam) me prohibió
‘picotear’ en mi oración como un pollo, de fisgar como un zorro, y de
agazaparme 176 como un mono”. 177
El Mensajero (Salallahu alehi wa salam) solía decir: No hay peor ladrón sino
el que roba algo de su oración. Ellos exclamaron: “¡Oh Mensajero de Alá, ¿Y
cómo es que roba algo de su oración?” Y les contestó: Cuando no completa su
rukú y suyúd. 178
Una vez, “él estaba rezando, cuando atisbó con un ojo que un hombre no
colocaba su columna (vertebral) en rukú y en suyúd. Cuando hubo terminado,
él dijo: ¡Oh musulmanes aquí reunidos! En verdad que la oración no es
válida para quien no coloca su espinazo en rukú y en suyúd.” 179
EL RECORDATORIO EN RUKÚ
¡Alabado sea el Señor Magnífico! Decirlo tres veces. 181 Pero algunas veces,
la repetía más de tres.
Una vez, en la oración nocturna, lo repetía tanto, que su rukú se volvió tan
largo al igual que su posición de firmes y en la cual había recitado tres de las
suras largas: La vaca, Las mujeres y la Familia de Imrán. Dicha oración
estuvo llena de súplicas y lamentación, lo cual se narra en un hadiz previo
(Recitación en la oración de la noche).
176
Agazaparse: ponerse en cunclillas.- N. T.
177
Tayálisi, Ahmed & Ibn Abi Cheiba; es un hadiz bueno, como lo he justificado en mis pies de página a
la obra al-Ahkaam (1348) de Abdúl Jac Ishbéli.
178
Ibn Abi Cheiba (1/89/2),Tabaráni & Hakim, quienes lo declararon sajíj junto con Dájabi.
179
Ibn Abi Cheiba (1/89/1), Ibn Maya & Ahmed, con un isnád sajíj.
180
Abu ‘Auána, Abu Daud & Sajmi (6!); Daracutni lo declaró sajíj.
181
Ahmed, Abu Daud, Ibn Maya, Daracutni, Tajaui, Bazzár & Tabaráni en Mu’yam al-Kabir, en
autoridad de Los Siete compañeros. Es por ello que se refuta a aquellos que no aceptan el hecho de
glorificar tres veces, tales como Ibn al-Cayyim y otros.
Alabado y loado sea el Señor Magnífico, tres veces 182 .
¡Oh Alá, alabado y loado Seas! ¡Oh Alá, perdóname! Solía decirlo mucho
en su rukú y suyúd, cumplimentando la orden del Corán. 184
5.- Alájuma laka rak’atu, ua bika amantu, ua laka aslamtu [anta rabí],
kjasha’a laka sam’ íi ua basarí, ua mují ua ádmii (ua fi riuaya: ua idamíi) ua
ásabíi [ua ma istacalat biji cadamí lilá rabil al alamín]
6.- Alájuma laka rak’at, ua bika amant, ua laka aslámt, ua ‘aleika tauakalt,
anta rabí, jash’a samií bassarí ua damí ua lajmí ua ‘adamí ua ‘assabí liláji
rabil alamín.
182
De un hadiz sajíj, transmitido por Abu Daud, Daracútni, Ahmed, Tabaráni y Baijaqui.
183
Abu Isaac dijo: subúj(un) significa “el que esta libre de cualquier defecto”, mientras que cuddus(un)
significa “el Bendito” o “el Puro”. Ibn Saída dijo: Glorificado y Bendito son atributos de Alá, porque Él
es glorificado y santificado por los demás (Lisán al-‘Arab)
184
Bujari y Muslim. “Cumplimentar el Corán” se refiere al dicho de Alá: “Entonces, ¡celebra las
alabanzas de tu Señor y pide Su perdón! Es indulgente.” (Corán 110:3)
185
Muslim, Abu Auána, Tajáui & Daracútni.
186
Nasái con un isnád sajíj.
NOTA: ¿Acaso hay pruebas de que podemos combinar dos o más recordatorios en un rukú? Los
académicos han disentido al respecto. Ibn al-Cayyim estaba inseguro acerca de esto en su libro Zaad al-
Ma’aad. Nauaui escogió la primera posibilidad en su libro al-Adhkár, diciendo: “es mejor combinar todos
los recordatorios (adhkár) si es posible, y de igual modo los ádhkár correspondientes a otras posturas.”
Abu a-Tayyib Sidík Hássan Kan difirió de él, escribiendo en Nuzul al-Abraar (84): “Se narra de uno de
ellos aquí, otro allá, y otro acullá. Sin embargo, no veo evidencia para combinarlos. El Mensajero de Alá
(Salallahu alehi wa salam) no los hubiese combinado de un “tirón”, sino que algunas veces decía una,
otras veces otra; hacer esto es mejor que empezar hacer algo nuevo”. Esta última opinión no es la
correcta, Dios queriendo, sino que esta confirmado en la sunna el alargar dicha posición, al igual que
otras, en tanto dure de la posición de firmes; de aquí, si el rezante desea imitar a Nabí (Salallahu alehi wa
salam) en esta sunna, es combinar los recordatorios, como Nauauí dijo, y como Ibn Násser ha narrado en
7.- Subjána díil yabaruti ual malakúti ualkibría-i ual ‘ádáma.
PROLONGANDO EL RUKÚ
“Él solía prohibir la recitación del Corán en rukú y en suyúd.” 188 Además, él
solía decir: “En verdad, se me ha prohibido el recitar el Corán en rukú o
suyúd. En el rukú, por lo tanto, glorificad al Señor en Su Supremacía,
Omnipotencia; en cuanto al suyúd, esforzáos en la súplica de aquello por lo
cual es más querido y seréis correspondidos” 189
su Quiyám a-Lail (76) de Ibn Yuraij como lo hizo ‘Ataa, o repetir uno sólo de los dikers para los cuales se
permite la repetición continua, y esto es lo más cercano a la sunna, pues Alá sabe más.
187
Nasái con isnád sajíj.
188
Muslim y Abu ‘Auána. La prohibición es general. Aquí se cubre tanto en las oraciones obligatorias
como las voluntarias. El comentario agregado de Ibn Asákir (17/299/1) dice: “en cuanto a las oraciones
voluntarias, entonces no hay daño” lo cual es shaad o munkar – Ibn ‘Asákir recalcó un error en ello- así
que no es permisible actuar acorde a ello.
189
Ibíd..
190
Bujari & Muslim.
191
Abu Daud & Hakim, quienes lo declararon sajíj y Dájabi lo confirmó.
Cuando él alzó su cabeza, el permanecía parado derecho hasta que cada
vértebra de su espalda regresaba a su posición. 192
Él también solía decir: el imám está para ser seguido... cuando él ha dicho
‘Alá escuche a quien lo alaba’ entonces decid, ‘[¡Oh Alá!] nuestro Señor,
para Ti toda alabanza’; Alá os escuchará, porque en verdad, Alá, bendito y
exaltado, a dicho por medio de la lengua de Su Profeta (Salallahu alehi wa
salam): Alá escuche a quien lo alaba’ 195
Él también dio razones para tal ordenanza en otro hadiz diciendo... para aquél
cuya palabra coincide con la de los ángeles, tendrán sus pecados pasados
perdonados. 196
Él solía elevar sus manos cuanto se incorporaba 197 , en la forma descrita bajo
el título La Apertura de Takbír.
192
Bujari & Abu Daud; Ár. Faqaar: vertebra: “los huesos conforman la espina, desde la base del cuello
hasta la cóccix” de acuerdo al diccionario árabe; ver también Fath al-Baari (2/308).
193
Bujari y Ahmed
194
Íbid.
195
Muslim, Abu ‘Awána, Ahmed & Abu Daud.
NB: Este hadiz no prueba que el seguir a los imams implica no seguirlo en el dicho: Alá escuche a quien
lo alaba, así como tampoco prueba que el imám no comparta con aquellos que lo siguen el dicho: nuestro
Señor, a Ti todas las alabanzas. Esto es porque el significado del hadiz no pretende exactamente que el
imám y sus seguidores lo deban decir en esta posición; más bien explica que el tajmíd de los rezantes
debe decirse después del tasmí del imám. Esto tiene bases en el hecho de que el Profeta (Salallahu alehi
wa salam) solía decir el tajmíd cuando era imám, y también porque por lo general su dicho: “rezad como
me habéis visto rezar” dicta que el rezante debe decir lo que el imám diga, i. e. Tasmí, etc. Los hermanos
más respetables que nos han expedido tal asunto deben considerar tal cosa, y tal vez lo que hemos
mencionado es satisfactorio. Quien quiera investigar más en el tópico deberá remitirse al artículo del
Hafiz Suyuti al respecto en su libro al-Háui lil Fataui (1/529)
196
Bujari & Muslim; Tirmídi lo declaró sajíj.
197
Bujari & Muslim. El alzamiento de manos se narra en un mutawatir del Mensajero (P. B. E) y la
mayoría de los escolásticos lo han apoyado, incluyendo algunos hanefitas. Vean la nota anterior con la
palabra Rukú.
Nuestro Señor, y a Ti la alabanza 198 ; o
3,4.- Alájuma
Él solía ordenar a otros decir esto, diciendo: Cuando el imám dice “Alá
escuche a quien le alaba”, entonces decid: “¡Oh Alá! Nuestro Señor, a Ti
todas las alabanzas”, ya que aquél que lo diga coincidiendo con los ángeles
tendrá sus pecados pasados perdonados.201
... Llena los cielos, la tierra y lo que sea que venga a Tu deseo, 202 o
6.- Mil-a samauát, ua mil-al ard u ma beina jumá ua mil-a ma shí-ta min
shein baád.
... Llena los cielos, la tierra, lo que hay entre ellas y llena lo que venga a Tu
deseo. 203
198
Ibíd.
199
Ibíd.
200
Bujari & Ahmed. Ibn al-Cayyim erró en este punto en el libro Zaad al-Ma’aad, rechazando la
combinación de “¡Oh Alá!” con “y”, a pesar del hecho que se encuentra Sajíj al-Bujari, Musnad Ahmed,
Nasái & Ahmed a través de dos rutas de narración de Abu Huraira, en Darimi como un hadiz de Ibn Omar
en Baijaqui de Abu Saíd al-Judri & en Nasái otra vez como un hadiz de Abu Musa AL-Ash’ari
201
Bujari & Muslim; Tirmídi lo declaró sajíj.
202
Muslim & Abu ‘Auána.
203
Ibíd.
¡Gloria y Majestad a Dios! Nadie puede sostener de lo que tu das garante y
nadie puede garantizar lo que tu sostienes ni puede hacer que los
bienes de cualquiera lo beneficie frente a Ti. 204
Llena los cielos, llena la tierra y llena lo que venga a Tu deseo. ¡Gloria y
Majestad al Señor!- lo más verdadero que un esclavo ha dicho, y todos
nosotros somos esclavos Tuyos [¡Oh Alá!] Nadie puede sostener de lo
que tu das garante y nadie puede garantizar lo que tu sostienes ni
puede hacer que los bienes de cualquiera lo beneficie frente a Ti. 205
Un hombre que rezaba atrás de él (Salallahu alehi wa salam) dijo esto después
que él (Salallahu alehi wa salam) había alzado su cabeza desde el Rukú y dijo:
Alá escuche a quien lo alaba. Cuando el Mensajero de Alá había terminado su
oración, él dijo: ¿Quién ha hablado? El hombre dijo: “Fui yo ¡Oh Mensajero
de Alá!” Así que el Mensajero de Alá (Salallahu alehi wa salam) dijo: Vi a
más de treinta ángeles apresurándose a ser los primeros para registrarlo. 207
204
Yadd: riqueza, poder; i. e., quien es tiene riqueza, hijos, influencia y poder en este mundo, rodo esto,
no lo beneficiarán ni dan seguridad ante Dios; sus posesiones no lo salvarán de Dios: sólo los actos justos
los salvarán o a ninguno.
205
Muslim & Abu ‘Auána.
206
Muslim, Abu ‘Auána & Abu Daud.
207
Malik, Bujari & Abu Daud.
Él (Salallahu alehi wa salam) solía hacer su posición erguida tan larga como
su Rukú, como se mencionó anteriormente. De hecho, “él estaba parado (por
mucho tiempo) varias veces, que algunos decían ‘él ha olvidado’, (porque su
posición parada duraba mucho) 208 ”.
EL SUYÚD (PROSTERNACIÓN)
Después “él (Salallahu alehi wa salam) decía takbír y bajaba a sachda ” 211 , y
ordenó “a quien rezaba deplorablemente” hiciera así, diciéndole Ninguna
oración es completa excepto... él dice: Alá escuche a quien lo alaba y
permanece de pie rectamente, entonces dice: Alá es el Más grande, y se
prosterna de modo que sus uniones estén en descanso. 212
208
Bujari, Muslim & Ahmed. Esta escrito en Irwá (no. 307)
209
Bujari & Muslim (la primera oración, nada más), Darimi, Hakim, Chafeí y Ahmed. Por ‘huesos’
entendamos aquellos que conforman las columna vertebral, las vértebras, como lo hemos venido
manejando.
210
Ahmed y Tabarani en Mu’yam al Kabir, con un isnad sajíj.
211
Bujari y Muslim.
212
Abu Daud & Hakim, quien lo declaró sajíj y Dájabi confirmó.
213
Abu Ya’lá en su Musnad (284/2)
214
Nasái, Daracútni & Mujlis en el libro al-Fawá-id (1/2/2) con dos isnades sajíj. Este levantamiento de
manos ha sido reportado por los Compañeros, y varios salafís lo confirmaron, entre ellos Ibn Omar, Ibn
Abbas, Hasán Basri, Tawus, su hijo Abdulá, Náfi el Esclavo liberado por Ibn Omar, Salim el hijo de Ibn
Omar, Cásim bin Mohámed, Abdulá bin Dinar & Áta. También Abd el-Rahmán bin Majdi dijeron: “esto
es de la sunna”, que fue practicado por el Imám de la sunna, Ahmed bin Hambal, y ha sido anotado de
Malik y Chafeí.
“Él solía colocar sus manos en el suelo antes que sus rodillas”.215
DESCRIPCIÓN DE LA SACHDA
“Él se apoyaba sobre las palmas (y las extendía)” 217 , “ponía sus dedos
juntos” 218 y “los apuntaba hacia la quibla” 219
También “él las colocaba (sus palmas) a la altura de sus hombros” 220 y
algunas veces “a la altura de sus orejas” 221 .”Él ponía su nariz y frente sobre el
suelo firmemente”. 222
También solía decir, “no hay oración para aquellos cuya nariz no toca el piso
al igual que la frente”. 225
“Él solía poner sus rodillas y pies abajo con firmeza”226 , “apuntaba los dedos
de los pies hacia la quibla” 227 , “juntaba sus talones” 228 , “ponía sus pies
derechos” 229 y “ordenó hacerlo del mismo modo”. 230
215
Ibn Juzaima (1/76/1), Daracútni y Hakim, quienes lo declararon sajíj y Dájabi lo confirmó. Todos los
hadices que lo contradicen son falsos. Este modo ha sido respaldado por Malik, e igualmente se reporta de
Ahmed en el libro a-Tajquic (108/2) de Ibn al-Yauzi. También al-Maruazi lo anotó con un isnad sajíj,
imám al-Auzái en su Masáil (1/147/1) al decir, “encontré a la gente posar sus manos antes que sus
rodillas”.
216
Abu Daud, Tammám en al-Fauáid & Nasái en Sunan a-Sugra y Sunan al-Kubra (47/1) con un isnad
sajíj. Abdul Jac lo declaró sajíj en al-Ajkám (54/1), y lo continuó en Kitáb a-Tajayud (56/1) diciendo:
“tiene un isnad mejor que el previo”, o sea, el hadiz de Uá-il el cual lo dice de modo contrario (las
rodillas antes que las manos). De hecho, el último hadiz, al ser contradictorio a este que es sajíj y al
precedente, ni es auténtico en el isnád ni en el significado, como he explicado en mi libro Silsíla al-
Ahadiz a-Daífa (No. 929) y en al-Irwá (357).
217
Abu Daud & Hakim, ambos lo declararon sajíj y Dájabi concordó.
218
Ibn Juzaima, Baijaqui & Hakím lo declararon sajíj y Dájabi concordó.
219
Baijaqui con un isnad sajíj. Ibn Abi Cheiba (1/82/2) y Sirách relataron el apuntar los dedos de los pies
en una narración aparte.
220
Abu Daud & Tirmídi, quienes lo declararon sajíj, como lo hizo Ibn al-Mulaquin (27/2), dado en el
libro titulado Irwá (309)
221
Abu Daud y Nasái, con isnád sajíj.
222
Ibíd. 219
223
Abu Daud & Ahmed con isnád sajíj.
224
Ibn Juzaima (1/10/1) con isnád jásan.
225
Daracútni, Tabaráni (3/140/1) & Abu No’aim
De aquí se deduce eran siete los miembros que prosternaba el Profeta: las
palmas, las rodillas, los pies, la frente con la nariz-considerando a estos dos
últimos como un solo miembro de prosternación- como dijo el Profeta: Me ha
sido ordenado prosternarme (en otra narración: se nos ha sido ordenado...)
sobre siete huesos: sobre la frente...., y luego lo recalcó al mover sus mano
alrededor de su nariz,... las manos (en otra versión: las palmas), las rodillas y
los dedos de los pies, y no arremangar 231 las túnicas y no recogerse el
cabello.232
Acerca del hombre que rezó atrás de él con su cabello atado 234 , dijo: su
ejemplo seguramente es como aquél que reza con sus manos atadas (atrás de
su espalda) 235 . También dijo que es la montura del diablo, o sea, donde el
diablo se sienta, refiriéndose a los nudos en el cabello. 236
“Él no apoyaba sus antebrazos sobre el suelo”237 , pero “los (dos los] alzaba
por encima del piso, y los mantenía lejos de sus costados de modo que la
blancura de sus sobacos pudiera ser vista desde atrás” 238 ; también “ de modo
que si un corderito o cabrito quería pasar por debajo de sus brazos, estos lo
podrían hacer así”.239
226
Baijaqui con isnád sajíj. Ibn Abi Cheiba (1/82/2) & Sirach han relatado el apuntar los dedos de los
pies en una narración diferente.
227
Bujari & Abu Daud. Ibn Sa’d (4/157) contado por Ibn Omar
228
Tajaui, Ibn Juzaima (No. 654) & Hakim, quienes lo declararon sajíj y Dájabi concordó.
229
Baijaqui con isnád sajíj.
230
Tirmídi & Sirách; Hakim lo declaró sajíj y Dájabi concordó.
231
O sea, halar y meter la ropa para que no se expanda, significando que se debe recoger la ropa o el
cabello con las manos para el rukú y suyúd (Nihaya). Esta prohibición no se limita a no hacerlo en la
oración; sino que la mayoría de los sabios que arremangarse la ropa o recogerse el cabello antes de la
oración también es prohibido. Esto es patente cuando ellos prohíben a los hombres rezar con el cabello
atado.
232
Bujari y Muslim. Se recoge de al-Irwá (310).
233
Muslim, Abu ‘Auána & Ibn Hibán.
234
O sea, amarrado o trenzado.
235
Muslim, abu ‘Auána & Ibn Hibbán. Ibn al-Azir dice al respecto: “El significado de este hadiz es que si
el cabello esta suelto, debe este dejarse caer en el suelo en el momento de la sachda, por lo que la persona
recibiría recompensa por la postración de tal cabello. Empero, si el cabello es atado, es como si no se
hubiese prosternado, porque es parecido a quien cuyas manos son esposadas, ya que estas no pueden
ponerse sobre el suelo en sachda”.
Esto solo se limita a los hombres, no a las mujeres, ya que Shaucani lo citó de Ibn al-‘Arabi.
236
Abu Daud & Tirmídi, quienes lo declararon jásan; Ibn Juzaima & Ibn Hibbán lo declararon sajíj.
Consulte Sajíj Abbi Daud (653)
237
Bujari & Abu Daúd.
238
Bujari y Muslim. Consulte el Irwá (359)
239
Muslim, Abu ‘Auana & Ibn Hibbán.
El practicaba tal cosa hasta tal grado que uno de los Compañeros dijo,
“solíamos tener lástima del Mensajero de Alá (Salallahu alehi wa salam) por
la manera en que tenía sus manos apartadas de sus costados”. 240
He aquí algunas de las súplicas y recordatorios que hacia Alá decía el Profeta
(Salallahu alehi wa salam) en esta posición:
240
Abu Daud & Ibn Maya con isnád jásan.
241
Muslim & Abu Áuana.
242
Bujari, Muslim, Abu Daud & Ahmed
243
Ahmed & Tirmídi, quienes lo declararon sajíj.
244
Ibn Juzaima (1/80/2), al-Macdisi en su obra al-Mujtára & Hákim, quienes lo declararon sajíj y Dájabi
concordó.
Alabado sea el Altísimo: lo decía tres veces. 245 Aunque “él lo repetía más de
tres”. 246
Una vez lo repitió tantas veces que el suyúd se vuelve casi igual en tiempo a
su posición erguida, la cual duró lo que recitó sura la Vaca, las Mujeres y al-
Imrán. Dicha oración estuvo llena se súplicas y peticiones de perdón, como
señalamos en las sección “Oración nocturna”.
Alabado Seas ¡Oh nuestro loado Señor! ¡Oh Alá! Perdóname: lo cual era
dicho a menudo en Rukú y suyúd, cumpliendo así una orden del Corán. 249
5.- Alájuma sayádtu, ua bika amantu ua laka aslamtu, [Ua anta rabí], sayada
uachji liladí jalácaju ua ssauáraju, [fa ájsana ssuáraju], ua shaqa sam’aju ua
bassaraju, [fa] tabáraka láju ájsanul jáliquín.
¡Oh Alá! Perdona todos mis pecados; los mayores y los menores; del
primero al último; y los públicos y secretos. 251
7.- Sachada laka sauadí ua jabalí, ua ámana bika fu-adí, abu-ú bin’imatika
‘alaiia, jadaiia yadaiia ua ma yanaitu ‘ala nafsí.
245
Ahmed, Abu Daúd, Ibn Maya, Daracútni, Tajaui, Bazzár & Tabaráni en su Múyam al-Kabír en base a
siete diferentes Compañeros. Consúltelo también en este libro la sección de Rukú respecto al diker.
246
Consúltelo también en este libro la sección de Rukú respecto al diker.
247
Sajíj, transmitido por Abu Daúd, Daracútni, Ahmed, Tabaráni & Baijáqui.
248
Muslim & Abu ‘Auána.
249
Bujari & Muslim.
250
Muslim, Abu Áuana, Tajaui & Daracútni.
251
Muslim y Abu ‘Auána.
Ante Ti prosterno mi persona y mi sombra; creo en Ti con todo mi
corazón; reconozco tus favores hacia mí; he aquí mis manos y lo que he
obtenido contra mi (deseo). 252
Alabado y exaltado Seas [ ¡Oh Alá!], y no hay más dios sino Tú. 253
11.- Alájuma ich-al fi calbi núran, ua fi lisáni núran, ua ichal fi samí núran,
ua ich-al fi bassarí núran, ua ich-al min tajtI núran, ua ich-al min fauquí
núran, ua ‘an yamíni núran, ua ‘an yasaarí núran, ua ich-al amamí núran, ua
ich-al jalfi núran, ua ich-al fi nafsí núran, ua ídam lí núran.
¡Oh Alá! ilumina mi corazón, mi (forma de) hablar; ilumina lo que escucho;
ilumina por encima y debajo mío; a mi derecha y a mi izquierda; ilumina (mi
camino), atrás y adelante, ¡ilumíname con Tu luz grandiosa!
252
Ibn Násser, Bazzar y Hakim, quienes lo declararon sajíj pero Dájabi no, pero tiene bastante
fundamento por una versión manuscrita mencionada.
253
Muslim, Abu ‘Auána, Nasái e Ibn Násser.
254
Ibn Abi Cheiba (62/112/1) & Nasái; Hakim lo declaró sajíj y Dájabi también.
El Profeta acostumbraba prohibir la recitación del Corán en rukú y en suyúd,
y ordenó en lo posible que dijeran súplicas en dicha posición, como
explicamos en el capítulo del “Rukú”. También acostumbraba decir: el siervo
esta lo más cercano a su Señor cuando se prosterna, así que incrementa sus
súplicas. 255
ALARGANDO LA SACHDA.
“El mensajero de Alá (Salallahu alehi wa salam) vino hacia nosotros para una
de las dos últimas oraciones (dohor y Ázar) junto con Hassán o Hussein. El
Profeta (Salallahu alehi wa salam) entonces, se puso al frente y lo colocó
abajo (al lado de su pie derecho), dijo el takbír para la oración y comenzó a
rezar. Durante la oración, el realizó una prosternación prolongada, así que
levanté la cabeza (por encima de los demás asistentes) y ahí estaba el niño,
sobre la espalda del Mensajero de Alá (Salallahu alehi wa salam), quien
estaba en prosternación. Entonces regresé a mi posición (prosternado).
Cuando el Mensajero de Alá (Salallahu alehi wa salam) había terminado la
oración, la gente dijo: ‘¡Oh Mensajero de Alá! A la mitad de la oración, haz
realizado una postración muy larga, y tanto, que pensamos que sucedió algo o
recibiste una revelación!’ A lo que contestó: Nada de eso; sucedió que mi hijo
se montó a mi espalda, de modo que no quise apresurarlo sino hasta que
cumplió se deseo”.
En otro hadiz: “Él (Salallahu alehi wa salam) estaba rezando. Cuando llegó a
la sachda, al-Hassán y al-Hussein brincaron a su espalda. Cuando la gente
trató de detenerlos, les hizo una cara para que los dejaran en paz. Tras
completar la oración, los colocó en su regazo y dijo: Cualquiera que me ame,
deberá amar a estos dos.” 256
LA EXCELENCIA DE LA SACHDA
255
Muslim, Abu ‘Auána y Baijáqui. Se puede leer en Irwá (456)
256
Ibn Juzaima en su obra “Sajíj”, con un isnád jásan de Ibn Masúd (887) y Baijáqui en la forma mursal.
Ibn Juzaima lo establece así: “Capítulo: evidencia de gesticulación que se sobreentiende no invalida ni
merma a la oración”- ¡esta acción es una de las cuales la gente de la Opinión (los Críticos) han prohibido!
Al respecto, hay otros hadices en Bujari, Muslim y otros.
Él (Salallahu alehi wa salam) acostumbraba decir: no habrá nadie entre mi
umma que yo no conozca en el Día de la Resurrección. Y dijeron: ‘¿cómo los
reconocerás, Oh Mensajero de Alá, de entre la multitud de seres de la
creación?’ A lo que respondió:¿Acaso no hay entre vosotros alguno que entre
a una cerca en la que se encuentran un negro corcel y un caballo con blancas
patas y frente blanca? 257 ¿Acaso no reconoceríais al segundo del primero?
Ellos respondieron “por supuesto”. Y les dijo: Pues así, mi umma ese día
poseerá rostros blancos 258 por el suyud, y pies y brazos 259 por la ablución.260
También solía decir,: cuando Alá tiene misericordia sobre quienes quiere de
la gente del fuego, Él ordena a los ángeles sacar a quienes hayan adorado a
Alá; y ellos lo harán, reconociéndolos por sus marcas de suyud, porque Alá
ha prohibido que el fuego devore a los marcados por el suyud. Así ellos serán
alejados del fuego, porque el fuego devora a todos los hijos de Adán, excepto
los que tienen la marca del suyúd. 261
LA SACHDA SOBRE EL SUELO Y SOBRE ESTERAS 262
LEVANTÁNDOSE DE LA SACHDA
"Él tendría su pie derecho verticalmente " 275 , y "pondría sus dedos del pie
hacia la quibla". 276 [Vea el diagrama]
266
Bujari y Muslim.
267
Ibid.
268
Ibid.
269
Muslim & Abu ‘Auána.
270
Bujari & Muslim.
271
Abu Daúd & Hakim, que lo declararon Sajíj y Dájabi concordó.
272
Bujari en su Yuz’ Raf’ al-Yadain, Abu Daud con isnaad sajíj, Muslim y Abu ‘Auána. Esta dado en el
Irwá (316).
Al elevar las manos aquí, y en cada takbír, tanto anunciado por Ahmed como en el Badaaí (3/89) de Ibn
al Cayyim: “Azram lo citó de él (Imám Ahmed) al ser cuestionado sobre la elevación de las manos, a lo
que dijo: ‘con cada movimiento hacia arriba y hacia abajo’. Azram dijo: vi a Abdulá (o sea, Imám
Ahmed) elevar sus manos en la oración con cada movimiento hacia arriba y hacia abajo”.
273
Ahmed & Abu Daud, con isnád bueno.
274
Bujari & Baijáqui.
275
Nasái con isnád sajíj.
276
Muslim, Abu ‘Auána, Abu Sheik en Maa Rauaju Abu az-Zubair ‘an Gair Yaabir (Nos. 104-6) &
Baijáqui.
“Él algunas veces practicaba ‘ic-á (descansando sobre ambos talones y (sobre)
sus dedos del pie)”277
“Él (Salallahu alehi wa salam) no reposaba hasta que cada hueso regresaba a
su posición (apropiada)” 278 , y él ordenó “a quien rezaba deplorablemente”
hacerlo del mismo modo, y le dijo: la oración de cualquiera de vosotros no
esta completa hasta que la realiza así. 279
OBLIGACIÓN DE ESTAR CÓMODOS ENTRE LAS DOS SÁCHDAS
"Él (Salallahu alehi wa salam) se ponía cómodo hasta que cada hueso
recuperaba su posición (apropiada) 280 ”; y ordenó a " quien rezaba
deplorablemente" hacer lo mismo diciéndole que la oración de cualquiera de
vosotros no esta completa hasta hacerla así 281
1.
277
Ibid. Ibn al-Cayyim revisó tal cosa, tras mencionarse el iftirásh del Profeta entre las dos sáchdas, aquél
dijo: “Ninguna otra manera de sentarse así de él se registra” Pero cuán correcto puede ser, si el ic-á nos ha
llegado por vía del hadiz de Ibn Abbas en Muslim, Abu Daud y Tirmídi, quienes lo declararon sajíj, con
otros(véase Silsila al-Ajadiz a-Sajíja 383); el hadiz de Ibn Omar con un isnád jásan en Baijáqui, fue
declarado sajíj por Ibn Hayar. También, Abu Isaac al- Harbi lo cuenta en Garib al-Hadiz (5/12/1) de
Táwus, quien vio a Ibn Omar e Ibn Abbás practicar el ‘ic-á; sus isnades son sajíj. Tenga Alá misericordia
del Imám Malik, quien dijo: “cada uno de nosotros puede refutar y ser refutado, excepto el que ya ocupa
una tumba”, y señaló la tumba del Profeta. Esta sunna fue practicada por muchos Compañeros, Sucesores
y otros, y esto yo lo he extendido en mi obra al-Asl.
278
Abu Daúd y Baijáqui con isnád sajíj.
279
Abu Daud & Hakim, quien lo declaró sajíj y Dájabi estuvo de acuerdo.
280
Abu Daud y Baijáqui, con isnád sajíj.
281
Abu Daud y Hakim, declaráronlo sajíj y Dájabi concordó.
282
Bujari & Muslim.
283
Ibid. Ibn al-Cayyim dijo: “esta sunna la abandonó la gente después del tiempo de los Compañeros.
Pero para quien se atiene a la sunna, y no mira a los lados con lo que la contradiga, que se despreocupe de
lo que se opone a la guía (recta)”.
¡Oh Alá! (en otra narración: ¡Oh Señor mío!) Perdóname; ten piedad
de mí; [fortaléceme;] [elévame;] guíame; [dispénsame;] dame
sustento. 284
2.
LA SEGUNDA SÁCHDA.
Después “él decía takbír y se postraba por segunda vez” 287 Ordenó también a
"quien rezaba deplorablemente" hacerlo así; diciéndole después de haberle
dado la orden de estar cómodo entre las sáchdas: entonces di 'Alá es el más
Grande' y prostérnate hasta que tus uniones estén tranquilas [y hazlo así
en todas tus oraciones]. 288 Él realizaba esta sáchda exactamente como
284
Abu Daud, Tirmídi, Ibn Maya & Hakim, declaráronlo sajíj y Dájabi concordó.
285
Ibn Maya con un isnad jásan. Imám Ahmed solía suplicar con esta dúa; Isaac bin Rajáuai dijo: “aquél
que lo desee, puede decirlo 3 veces, o decir ‘¡Oh Alá! Perdóname…’ ya que ambos (recordatorios) han
sido reportados del Profeta (Salallahu alehi wa salam) entre las dos sáchdas” (Masaíl del Imám Ahmed &
Isaac Rajauai tal como lo contó Isaac al-Marwazi, p. 19)
286
Esto no niega la validez de las expresiones en las oraciones obligatorias debido a la ausencia de algo
que diferencie entre aquello y las oraciones voluntarias. Este es el punto de vista de Chafeí, Ahmed &
Isaac, sostuvieron que esto era permitido tanto en las oraciones obligatorias como las voluntarias, ya que
Tirmídi lo ha narrado. Imám Tajáui lo apunta en Mushkil al- Aazaar (problemas con la tradición). El
análisis apropiado apoya este argumento, porque no hay un punto de vista en la oración donde un
recordatorio no sea válido, y por lo tanto apropiado como es en este caso.
287
Bujarí y Muslim.
288
Abu Daud y Hakim, declaráronlo sajíj, y Dájabi concordó; lo adicional es de Bujari y Muslim.
realizaba la primera. Además, “él elevaba sus manos con dicho takbír”
algunas veces. 289
SENTADOS EN DESCANSO
Después, "se levantaba para la segunda raká, apoyándose sobre el suelo." 295 O
"él (Salallahu alehi wa salam) cerraba sus puños 296 en la oración: apoyándose
con sus manos cuando se incorporaba." 297
289
Abu ‘Auána y Abu Daud con dos isnades sajíj. Ahmed, Malik y Chafeí apoyan el elevar las manos en
sus propias narraciones. Ver nota previa en suyúd.
290
Bujarí y Muslim.
291
Abu Daud y Hakim declaráronlo sajíj; Dájabi concordó.
292
Ahmed y Tirmídi declaráronlo sajíj.
293
Véase pie de nota #10
294
Bujarí y Abu Daud. Esta manera de sentarse es conocida por los sabios de Fiq como yálsa al-istirája
(sentada de descanso). Chafeí lo confirma, al igual que Ahmed en su Tajquíc (111/1) quien además lo
defendió firmemente, ya que era bien sabido que él instigaba mucho en seguir una sunna en la que no
había nada de contradictorio. Ibn Jáni escibió en su Masaail acerca de Imám Ahmed (p.42): “Ví a Abu
Abdulá (o sea, Imám Ahmed) algunas veces apoyarse sobres sus manos cuando se incorporaba para la
siguiente raká, y algunas veces se sentaba erecto y se incorporaba (directamente)”. De Imám Isaac bin
Rajáuai se dice que él dijo –anotado en el Masaail de Marwazi (1/147/2)-: “El ejemplo fue puesto por el
Profeta (Salallahu alehi wa salam) al apoyarse con sus manos al levantarse, ya sea que estuviese viejo o
jóven” véase también Irwá (2/82-3).
295
Bujarí y Chafeí.
296
En árabe dice “como uno que amasa con las manos”.
297
Abu Isaac al-Harbi sin ningún sanad equivocado, y su significado se encuentra en Baijáqui, con un
isnad sajíj. En cuanto al hadiz que dice: “solía levantarse como una flecha, sin apoyarse con las manos”
es un hadiz inventado (maudú), y todas las narraciones del mismo corte os on muy débiles o también
LA SEGUNDA RAKÁ.
Ordenó a " quien rezaba deplorablemente" recitar la Fatiha en cada raká; tras
decírselo (recitarla en la primera raká) 299 , después le ordenó: Hazlo así en
toda tu oración 300 (en otra narración: en cada raká). 301 También solía decir,
a cada raká, su recitación. 302
inventados. Esto lo explico en mi obra “Colección de hadices falsos” (Silsila al- Ahadiz a-Da’ífa; pp.
562, 929, 968)
298
Muslim y Abu ‘Auána. La falta de interrupción que afirma este hadiz no se refiere a la dada en la du’a
de apertura, por lo cual no incluye la pausa para recitar la isti-áda, o puede tener un significado más
amplio: lo primero es lo acertado. Hay dos puntos de vista entre los escolásticos del Islam con respecto a
la isti-áda y sólo consideramos lo correcto concernientemente a lo dicho en cada raká; los detalles de
todo esto lo encontrarán en al-Asl.
299
Abu Daúd & Ahmed con isnád fuerte.
300
Bujarí & Muslim.
301
Ahmed, con isnád jásan.
302
Ibn Maya; en el Sajíj de Ibn Hibban; y por Ahmed , de la obra Masáil (1/52)de Ibn Jáni. Yabir bin
Abdulá dijo: “Quien rece una raká en la que no recite la Madre del Corán, no ha rezado nada, a menos
que este detrás den imám”- relatólo Malik en su Muwatta.
EL PRIMER TACHÁJUD.
Después, él (Salallahu alehi wa salam) se sentaba para el tachájud
después de terminar la segunda raká. En la oración de dos rakás (el
fáyer), "se sentaba en muftarishan" 303 , y ya que solía sentarse entre las
dos sáchdas, "se sentaba de igual modo en el primer tacháhjud" 304 en la
oración de tres –y cuatro-rakás. [Véase diagrama].
"Una vez sentado en tachájud, colocaba la palma derecha (de su mano) sobre
su muslo derecho (en otra narración: rodilla); y la palma izquierda (de su
mano) sobre su muslo izquierdo (en otra narración: rodilla, extendiéndola
sobre la misma)" 307 ; O "colocaba el extremo de su codo derecho sobre su
muslo derecho." 308
"Él (Salallahu alehi wa salam) extendía la palma izquierda (de su mano) sobre
su rodilla izquierda, cerraba el puño derecho de su mano derecha, apuntando
303
Nasái (1/173) con isnad sajíj.
304
Bujarí y Abu Daúd.
305
Abu Daud y Baijáqui, con isnád jásan.
306
Tayálasi, Ahmed e Ibn Abi Cheiba. Sobre el ic-á, Abu Ubeida y otros dijeron “que cuando un hombre
presiona sus posaderas contra el suelo, mantiene sus canillas rectas, y apoya sus manos sobre el suelo, lo
hace igual que un perro.” Esto es diferente al ic-a entre sáchdas, lo que sí esta aprobado en la sunna,
como se hablo en la sección ic-á.
307
Muslim, Abu ‘Auána y otros. Se encuentra en el Iruá (316).
308
Muslim y Abu ‘Auána.
309
Baijáqui y Hakim, quienes lo declararon sajíj y Dájabi concordó. El siguiente es semejante a éste;
ambos se encuentran en Irwá (380).
310
Ahmed y Abu Daud, con isnád sajíj
311
. Abdu Razác; Abdúl Jác lo declaró sajíj en su Ahkam (no. 1284-con mi propia corroboración).
con el dedo adyacente al pulgar en dirección de la quibla, y fijaba su mirada
sobre éste. (o sea, el dedo índice)." 312
Por otro lado, "cuando apuntaba con su dedo, colocaba su pulgar sobre el dedo
medio" 313 ; y en ocasiones “él formaba un círculo con estos dos (dedos)." 314
"Cuando alzaba su dedo, lo movía y suplicaba con él" 315 , También solía decir
que "es mucho más poderoso que el acero contra el diablo, refiriéndose al
dedo índice." 316
312
Muslim y Abu ‘Auána e Ibn Juzaima, Humeidi (13/1) y Abu Ya’la (275/2) adscribieron un isnád sajíj
en base a lo que dijo Ibn Omar: “y esto es un tiro hacia el Diablo; nadie olvida esto cuando lo hace”, y
Humeidi alzó su dedo. Humeidi dijo también que Muslim bin Abi Mariam dijo: “un hombre me contó que
en una iglesia de Siria observó imágenes de profetas pintados como éste”, y Humeidi alzó su dedo. Esto
es una anécdota bastante extraña, pero el isnád que se recorre hasta dicho “hombre” es correcto.
313
Muslim y Abu ‘Auána e Ibn Juzaima, Humeidi (13/1) y Abu Ya’la (275/2) adscribieron un isnád sajíj
en base a lo que dijo Ibn Omar: “y esto es un tiro hacia el Diablo; nadie olvida esto cuando lo hace”, y
Humeidi alzó su dedo. Humeidi dijo también que Muslim bin Abi Mariam dijo: “un hombre me contó que
en una iglesia de Siria observó imágenes de profetas pintados como éste”, y Humeidi alzó su dedo. Esto
es una anécdota bastante extraña, pero el isnád que se recorre hasta dicho “hombre” es correcto.
314
Muslim y Abu ‘Auána .
315
Abu Daud, Nasái, Ibn al-Yarúd en al-Muntacá (208); Ibn Juzaima (1/86/1-2) e Ibn Hibban en su Sajíj
(485) con un isnád sajíj. Ibn al-Mulaquin también lo declaró sajíj (28/2), y tiene un narrador confiable en
la persona de Ibn ‘Adi (287/1).
316
Ibíd. Sobre las palabras “suplicaba con él”, el Imám Tajáui dijo: “Esto es evidencia de que lo hacía
hasta al final de la oración”. De aquí se constata que la sunna es apuntar y mover el dedo continuamente
hasta el taslím, por lo que la súplica termina ahí. Esta es la posición de Malik y otros. Imám Ahmed fue
cuestionado: “¿Debe un hombre apuntar con su dedo durante la oración?” A lo que respondió firmemente
que “Sí”. (mencionado por Ibn Jáni en su obra Masaail del Imám Ahmed, 1/80). De aquí, es claro que
mover el dedo en tachájud es una sunna comprobada del Profeta (Salallahu alehi wa salam), la cual
practicaba Ahmed y otros imames de la sunna. Por lo tanto, los que piensan que no tiene sentido y es
irrelevante y no tiene que ver nada con la oración, deben temer a Alá, y por lo mismo no mueven sus
dedos aún sabiendo que es una sunna establecida. Y tienen una falta de entendimiento para interpretarlo
(porque son unos necios), lo que es inconsistente con el modo árabe de expresión y contrario al
entendimiento de los imames con respecto a eso.
Lo sorprendente es que algunos de ellos defienden a los imames en otros asuntos que, aunque
contradigan claramente la sunna, con el argumento de que el señalar los errores de los imames implica
faltarle al respeto y vilipendiarlos. Sin embargo, caen en contradicción porque a la vez que rechazan las
sunnas poco o nada conocidas del Profeta, comienzan a mofarse de aquellos que las practican. Sea que lo
hagan conciente o inconcientemente, sus burlas también “se llevan entre las patas” tanto a los imames a
quienes a menudo defienden estúpidamente y los que practican las sunnas correctas: todo al mismo
tiempo. Pero en realidad a quien realmente están denigrando es al Profeta (Salallahu alehi wa salam)
mismo, porque él es quien verdaderamente nos trajo la Sunna, por lo que hacer escarnio de esto equivales
a denigrarse uno mismo.
<<Más cuál es la recompensa de aquellos de entre vosotros que se comporta así excepto…>>
En cuanto a descansar el dedo después de apuntar o dejar de moverlo tras la afirmación: lá ilája … (no
hay Dios…); con la negación: … íla lá (excepto Alá), no tiene fundamento en la sunna. En realidad, es
contrario a la sunna dejar de moverlos, como lo prueban los hadices.
Más aún, el hadiz que menciona no mover su dedo no tiene un isnád auténtico, como he explicado en Daíf
Abi Daúd (175). Y aún si esto fuese cierto, es negante, ya que el hadiz precedente es afirmativo: lo
afirmativo precede a lo negante, como bien saben los ulemas.
Una vez "vio a un hombre suplicar con los dos dedos, así que dijo: hacedlo
uno, [con uno]" y lo indicó señalando el dedo índice (de su mano)." 318
"Cuando (una vez) olvidó realizar el tachájud después de las dos primeras
rakás, él se postraba (dos veces) por (dicho) olvido." 322
"Él (Salallahu alehi wa salam) les enseñaba el tachájud del mismo modo que
les enseñó las suras del Corán"325 , y "la sunna es decirlo calladamente." 326
317
Ahmed, Bazar, Abu Yapar al-Bujtirí en al-Amaali (60/1), Abdúl Gani al-Macdisí es su Sunan (12/2)
con el isnad sajíj, Ruyáni es su Musnad (249/2) y Baijáqui.
318
Ibn Abi Cheiba (2/123/2) con isnád jásan.
319
Ibn Abi Cheiba (12/40/1;2/123/2) y Nasái. Hakim declarólo sajíj y Dájabi concordó, y hay la narración
que apoya a Ibn Abi Cheiba.
320
Nasái & Baijáqui, con isnád sajíj.
321
Muslim y Abu ‘Auána.
322
Baijáqui lo transmitió como una narración de Aixa con isnád sajíj, corroborado por Ibn al-Mulaquin
(28/2).
323
Nasái, Ahmed & Tabaráni en Múyam al Kabír (3/25/1) con un isnád sajíj. El significado literal del
hadiz es evidencia para la validez de suplicar en cada tachájud, incluyendo el que no esta próximo al
taslím, y es el punto de vista de Ibn Hazm.
324
Nasái con isnád sajíj
325
Bujari & Muslim.
326
Abu Daud & Hakim, quienes lo declararon sajíj y Dájabi concordó.
48
Del ár. Tajiyát, o sea: “todas las palabras que implican paz, soberanía y eternidad, que son de Alá”
(Nijáya).
49
Del ár. Salauát, o sea, “todas las súplicas que se usan para glorificar la majestad de Alá, porque Él tiene
todo el derecho de ellas, y nadie más es merecedor de ellas excepto Él”. (Nijáya)
1. Ibn Masúd, dijo: "El Mensajero de Alá (Salallahu alehi wa salam) me
enseñó el tachájud (con) mi palma entre sus palmas y el modo que me
enseñó las suras del Corán (fueron):
Las devociones 327 , los ruegos 328 y halagos 329 son para con Alá. La
paz 330 sea contigo, ¡Oh Profeta!, junto con las bendiciones 331 y
misericordia de Alá. La paz sea con nosotros y para con los
honestos siervos de Alá. [Al decir esto, esta incluyendo a los siervos
justos en los cielos y en la tierra.] Testifico que no hay más dios que
Alá; y testifico que Mohámed es Su siervo y mensajero.
[Y así fue mientras habitó entre nosotros; pero después que se fue,
decíamos:
329
Del ár. Tayibát, o sea, “todas las palabras que son buenas y puras para la alabanza de Alá y no aquellas
(que ofenden y ) que no comparten los atributos con los cuales reyes (y dignatarios) merecen.” (Fath al-
Bári)
330
Significa buscar refugio en Alá y sentirse fuerte por Él; ya que as-salaam (paz) es uno de los nombres
de Alá. De aquí, que los saludos efectivamente signifiquen: Alá es un guardián y salvaguardador de ti.
Igualmente se dice que “Alá esté contigo”, o sea, que te salvaguarde, te ayude y te favorezca.
331
Un término que significa todo lo bueno continuamente dimana de Alá.
332
Bujarí, Muslim, Ibn Abi Cheiba (1/90/2), Sirách & Abu Ya’la en su Musnad (258/2). Lo pueden
encontrar en Irwá (321).
Dijo Ibn Masúd : “Dijimos: Paz sea con el Profeta”, y aclara que los Compañeros solían decir
“Paz sea contigo, ¡Oh Profeta!” en el tachájud mientras el Profeta (Salallahu alehi wa salam) estaba vivo;
pero cuando murió, dejaron de hacerlo, y en su lugar decían “la paz sea con el Profeta”. Indudablemente
esto fue hecho con el permiso del Profeta (Salallahu alehi wa salam), lo que apoya firmemente Aixa de
igual modo enseñaba el tachájud en la oración con “paz sea con el Profeta”, como lo transmitió Sirách en
su Musnad (9/1/2) & Mujáis en al-Faua’id (11/54/1) con dos isnádes sajij de Aixa.
Ibn Hacher dice: “esta añadidura demuestra claramente que ellos solían decir ‘la paz sea contigo,
Oh Profeta’, dirigiéndose directamente a él mientras vivía, pero cuando él (Salallahu alehi wa salam)
murió, dejaron de dirigirse a él directamente y en su lugar lo mencionaban en tercera persona diciendo ‘la
paz sea con el Profeta’.” También dice más adelante: “Subki dijo en Shar al-Minjach, después de contar
la narración de Abu ‘Auána, solamente ‘si esto es contado autenticamente por los los Compañeros, prueba
que después de su tiempo, no es obligatorio dirigirse al Profeta (Salallahu alehi wa salam) directamente
2. El tachájud de Ibn Abbás: "El Mensajero de Alá (Salallahu alehi wa
salam) solía enseñarnos el tachájud de la manera que nos enseñó [las
suras del] el Corán; y solía decir:
Las devociones, oraciones y halagos son para con Alá. La paz sea
contigo, ¡Oh Profeta!, junto con la misericordia de Alá - Ibn Omar
en las zalemas, así que uno dice ‘la paz sea con el Profeta’. (Ibn Hayar continúa:) Ésto es auténtico sin
duda (porque esta asentado en Sajíj Bujari), y también he hallado fuerte apoyo a esto: - Abdú Razác dijo;
Yureich me informó: Ata me informó que los Compañeros solían decir ‘la paz sea contigo ¡Oh Profeta!’
mientras éste esta vivo, pero después que murió, decían ‘la paz sea con el Profeta’ y esto es un isnád sajíj.
En cuanto a la narración de Saíd bin Manssur de Obeida bin Abdulá bin Masúd, quien lo dijo de su padre
que, el Profeta (Salallahu alehi wa salam) les enseñó el tachájud, y que él (Abdulá bin Masúd) lo dijo (el
tachájud); Ibn Abbás dijo: ‘solíamos decir ‘la paz sea contigo ¡Oh Profeta!’ sólo mientra estaba vivo; a lo
que Ibn Masúd respondió: ‘Es así como fuimos instruidos, y es así como lo enseñamos’, parece ser que
Ibn Abbas lo señaló como un asunto polémico pero Ibn Masúd no lo aceptó. Sin embargo, la narración de
Abu Ma’mar (de la narración de Bujari) es más auténtica, ya que Abu Obeida no escuchó (los hadices) de
su padre, sino que, el isnád que llega hasta Abu Obeida es inconsistente.” (fin de la cita de Ibn Hacher).
Las palabras de Ibn Hayar han sido registradas por muchos sabios en sus análisis, o sea, Cataláni,
Zarcáni, Lucnoui, etc. , quienes decidieron dar fe de sus palabras sin más comentarios. Dicha olémica se
trata más a detalle en la obra al-Asl.
333
Muslim , Abu ‘Auána, Chafeí & Nasái.
dijo, "Y añado:" 334 ... y Sus bendiciones. – La paz sea con nosotros y
con los siervos justos de Alá. Testifico que no hay más dio que Alá -
Ibn Omar dijo “Y añado:” 335 ... exclusivamente Él sin que se lo
asocie; - Testifico que Mohámed es Su siervo y mensajero. 336
Las devociones, halagos y ruegos son para con Alá. La paz sea
contigo ¡Oh Profeta!, junto con la misericordia de Alá y Sus
bendiciones. La paz sea con nosotros, y con los siervos justos de
Alá. Testifico que no hay dios más que Alá [exclusivamente Él sin
que se lo asocie]; y testifico que Mohámed es Su siervo y mensajero
– siete frases, y todas ellas son las salutaciones." 337
Las devociones son para con Alá; los más puros elogios para con
Alá; los halagos [son para con Alá]; los ruegos son para con Alá. La
paz sea contigo, ¡Oh Profeta!, junto con la misericordia de Alá y
Sus bendiciones. La paz sea con nosotros y con los siervos justos de
Alá. Testifico que no hay más dios que Alá; Testifico que no hay
334
Véase la siguiente nota.
335
Éstas dos adiciones han sido verificadas como partes del tachájud del Profeta (Salallahu alehi wa
salam). Ibn Omar no las añadió a su parecer (lejos de ello esta de tal aberración); en realidad las aprendió
de otros Compañeros que las registraron del Profeta (Salallahu alehi wa salam) y después él las añadió al
tachájud que escuchó directamente del Profeta (Salallahu alehi wa salam).
336
Abu Daud & Daracútni, declarándolo sajíj.
337
Muslim, Abu ‘Auána, Abu Daud e Ibn Maya.
dios más que Alá y testifico que Mohámed es Su siervo y
mensajero. 338
338
Malik & Baijáqui con isnades Sajíj. Aunque éste hadiz es maucúf, que efectivamente es marfú, ya que
se sabe que este tipo de cosas no pueden ser de opinión personal, ya que si lo fuera, no sería mejor que los
otros dicen acerca del diker, como Ibn Abdúl Barr ha dicho.
*NB: en ningunos de los tachájud se encuentra la añadidura: ua magfiratuju (…”y Su perdón”), así que
uno no debe acostumbrarse a decirlo. De aquí, los que siguen a los auténticos antepasados musulmanes
(salaf) lo censuraron, como lo demuestra las siguientes narraciones:
Tabaráni (3/56/1) reportó con un isnád sajíj de Talha bin Musarrif, quien dijo: Rabí bin Jaitam añadió
durante el tachájud, “… y sus bendiciones, y ¡Su perdón!” así que ‘Alcama dijo: “nosotros nos
detenemos hasta donde nos fue enseñado: la Paz sea contigo,¡Oh Profeta!, y también la misericordia de
Alá y Sus bendiciones”; ‘Alcama estaba siguiendo el ejemplo de su maestro Abdulá bin Masúd de quien
se registra fielmente que estaba una vez enseñando a un hombre el tachájud, y cuando llegó a “testifico
que no hay Dios excepto Alá…” el hombre agregó: “solamente Él sin asociado”, a lo que Abdulá lo
corrigió: “Él es así (como tú dices), pero nosotros nos detenemos hasta donde nos fue enseñado”.
(transmitido por Tabaráni en Múyam al-Ausat, no. 2848, con isnád sajíj).
338
Abu ‘Auána es su Sajíj (2/324) & Nasaí.
338
Han dicho: “Oh mensajero de Alá, se nos ha enseñado cómo enviarte zalemas (en el tachájud), pero
¿Cómo te enviamos salutaciones? A lo que dijo: ‘¡Oh Alá! Honra a Mohámed…” etc. Así que no
especificó un solo tachájud excluyente de otro, así que hay evidencia para establecer que puede
enviarsele salutaciones (u honrarlo) en el primer tachájud también. Esta es la opinión de Chafeí, como lo
manifiesta en su libro al-Umm, y es apoyado por sus compañeros, como Nauaui explicó en al-Machmú
(3/460) y confirmado en Rauda Talibín (1/263). También es el punto de vista de Visir bin Hubaira al-
Hambali en al-Ifsa; e Ibn Rayab lo ha acotado en Dail Tabacát (1/289). Muchos hadices existen para
enviar salutaciones al Profeta (Salallahu alehi wa salam) en tachájud; en ninguno de ellos hay detalles
mencionados. En realidad estos hadices son generales, por lo que incluye cada tachájud, los cuales he
sacado en al-Asl como ta’lic, pero no en el texto principal, porque estos no satisfacen nuestras
condiciones de autenticidad. Pero no son mutuamente auxiliares en significado, y aquellos que rechazan y
se oponen a esto no tienen evidencia para usarlo como prueba, como lo he afirmado en al-Asl. De igual
modo, el decir que se puede añadir algo a la frase “¡Oh Alá! Honra a Mohámed” es makrú y es
inconsistente en la Sunna, para lo cual no hay prueba convincente. En realidad vemos quien dice esto no
esta implementando las instrucciones del Profeta (Salallahu alehi wa salam): “decid: ‘Oh Alá! Honra a
Mohámed y a la familia de Mohámed…”; hay más de ésta discusión en al-Asl.
339
Abu ‘Auána es su Sajíj (2/324) & Nasaí.
340
Han dicho: “Oh mensajero de Alá, se nos ha enseñado cómo enviarte zalemas (en el tachájud), pero
¿Cómo te enviamos salutaciones? A lo que dijo: ‘¡Oh Alá! Honra a Mohámed…” etc. Así que no
especificó un solo tachájud excluyente de otro, así que hay evidencia para establecer que puede
enviársele salutaciones (u honrarlo) en el primer tachájud también. Esta es la opinión de Chafeí, como lo
manifiesta en su libro al-Umm, y es apoyado por sus compañeros, como Nauauí explicó en al-Machmú
1.
2.
(3/460) y confirmado en Rauda Talibín (1/263). También es el punto de vista de Visir bin Hubaira al-
Hambali en al-Ifsa; e Ibn Rayab lo ha acotado en Dail Tabacát (1/289). Muchos hadices existen para
enviar salutaciones al Profeta (Salallahu alehi wa salam) en tachájud; en ninguno de ellos hay detalles
mencionados. En realidad estos hadices son generales, por lo que incluye cada tachájud, los cuales he
sacado en al-Asl como ta’lik, pero no en el texto principal, porque estos no satisfacen nuestras
condiciones de autenticidad. Pero no son mutuamente auxiliares en significado, y aquellos que rechazan y
se oponen a esto no tienen evidencia para usarlo como prueba, como lo he afirmado en al-Asl. De igual
modo, el decir que se puede añadir algo a la frase “¡Oh Alá! Honra a Mohámed” es makrú y es
inconsistente en la Sunna, para lo cual no hay prueba convincente. En realidad vemos quien dice esto no
esta implementando las instrucciones del Profeta (Salallahu alehi wa salam.): “decid: ‘Oh Alá! Honra a
Mohámed y a la familia de Mohámed…”; hay más de ésta discusión en al-Asl.
341
Uno de los puntos de vistas más antiguo sobre el significado de “Honra al Profeta” es el de Abu al-
Aliya (con referencia a la sura al-Ahzáb 33:56): “‘Alá, Honra al Profeta’ significa que lo cubre de gloria,
lo asciende de puesto; las salutaciones de los ángeles y otros implica que buscan esto de Alá, y lo que se
busca es que las salutaciones sean incrementadas, más no se pide por la primera.” Ibn Hayar anotó esto en
Fath al-Bári, y continuó refutando la falsa idea de que la salutación del Señor sobre alguien es por
misericordia; Ibn al-Cayyim también lo aclaró en Yalá al-Afjaám, dando poco margen a malentendidos.
342
De baraca: aumento en creces. Por ello ésta súplica asegura a Mohámed el bien que Alá le ha
garantizado a la familia de Abraham de continuo, de bienestar seguro, al mismo tiempo que su
incremento y multiplicidad.
343
Ahmed y Tajáui con isnád sajíj.
¡O Alá! Honra a Mohámed y a la familia de Mohámed, como
honraste a [Abraham, y a] 344 la familia de Abraham; En verdad
eres alabado, glorioso. ¡Oh Alá! Bendice a Mohámed y a la familia
de Mohámed al igual que bendijiste a [Abraham, y a] 345 la familia
de Abraham; en verdad eres alabado, glorioso. 346
3.
4.
344
Véase la nota siguiente.
345
Estas dos añadiduras se encuentran en secuencia en Bujari, Tajáui, Baijáqui, Ahmed y Nasái. También
se encuentran por medio de otras narraciones dentro de diferentes dúplicas (vea nos. 3, 7), y no
confundirse con el punto de vista de al-Cayyim en Yalá al-Afjam (p. 198), en la tónica de su gran maestro
Ibn Taimiya en al-Fatawa (1/16): “No hay hadiz auténtico con las palabras ‘Abraham’ o ‘la familia de
Abraham’ juntas’”; por lo que nosotros les hemos mostrado los hadices auténticos. El error de Ibn
Cayyim se debe al hecho de que él declaró al no. 7 sajíj, ¡el cual contiene lo que él ha negado en lo
anterior!
346
Bujari, Muslim , Humaidi (138/1) & Ibn Manda (68/2), quienes dijeron: “Hay consenso sobre este
hadiz de que es auténtico”.
347
Ahmed, Naasái & Abu Yála en su Musnad (44/2) con isnád sajíj.
348
Muslim, Abu ‘Auána, Ibn Abi Cheiba (2/132/1) & Abu Daud; Hakim lo declaró sajíj.
5.
6.
¡Oh Alá! Honra a Mohámed y [a] sus esposas y prole, así como
honraste a [la familia de] Abraham. Y bendice a Mohámed, y [a]
sus esposa y prole, así como bendijiste a [la familia de] Abraham;
en verdad eres alabado, glorioso. 350
7.
349
Bujarí, Nasái, Tajáui, Ahmed & Ismael al-Cadi en Fadl a-salá alá Nabí salaláju aléiji ua sálam (p. 28
1ª ed., p. 62; 2ª ed. Con mi corroboración)
350
Bujarí, Muslim & Nasái.
¡Alá! Honra a Mohámed, y a la familia de Mohámed, y bendice a
Mohámed, y a la familia de Mohámed, así como honraste y
bendijiste a Abraham y la familia de Abraham; en verdad eres
alabado, glorioso. 351
"las bendiciones de Alá sean sobre vosotros, gente de la casa" (Hud 11:73).
Por ende, Abraham esta inserto en “la familia de Abraham".
351
Nasái, Tajáui, Abu Saíd bin al-Arabi en al-Múyam (79/2) con isnades sajíj. Ibn al-Cayyim dio su
fuente de Mohámed bin Isaac a-Sirách en Yála al-Afjam (pp. 14-15) y luego lo declaró sajíj. Sus palabras
incluyen tanto a ‘Abraham’ y ‘la familia de Abraham’, algo que pasó por alto Ibn al-Cayyim y su maestro
Ibn Taimiya, como expliqué anteriormente.
Además, existe una cuestión bien sabida entre la gente del conocimiento: la
cuestión básica en la afirmación, "así como honras a...", es verdad ya que el
sujeto de comparación es por lo común superior al objeto comparado; pero
éste no es el caso, ya que Mohámed (Salallahu alehi wa salam) es superior a
Abraham; tanto es así que dicha superioridad dicta que la petición en las
salutaciones son las más preferibles que cualquier otra recibida o futura a
recibir. La gente del conocimiento nos ha provisto muchas respuestas al
respecto, y éstas pueden encontrarse en Fath al-Baari y Yalaa' al-Ifhaam.
Estas suman un total de diez puntos de vista, los cuales son inconsistentes,
unos más que otros, excepto un punto de vista bien fundamentado - el cual
adoptaron Shaijul-Islam Ibn Taymiyyah e Ibn al Cayyim – que es: "la familia
de Abraham incluye muchos profetas; pero ninguno semejante a ellos se
encuentra dentro de la familia de Mohámed. Por lo cual, cuando se recurre por
igual los azaláes sobre el Profeta (Salallahu alehi wa salam) y su familia como
a los de Abraham y su familia, estamos incluyendo a todos los profetas: la
familia de Mohámed recibe por añadido lo que es propio para ella; ya que la
familia de Mohámed no alcanza el rango de los profetas. Las bendiciones
extra y los beneficios dados a los profetas, incluyendo a Abraham, son para
Mohámed (Salallahu alehi wa salam). Por lo que ocupa una posición de
distinción que los otros no tienen."
Hafiz Mohámed ibn Mohámed ibn Mohámed al-Gurabili (790- 835 AH), un
compañero de Ibn Hayar dijo, acotando de su manuscrito 354 :
Él (o sea, Ibn Hayar), fue cuestionado por las características del azalá del
Profeta (Salallahu alehi wa salam), si esto era dentro o fuera de la oración;
obligado o recomendado: ¿Acaso una de sus condiciones era que el Profeta
(Salallahu alehi wa salam) se le atribuyera la sayyáda (liderazgo), o sea, ‘¡Oh
Alá! Honra a sayyidina (nuestro jefe) Mohámed…’ o ‘el más sobresaliente de
la creación’, o ‘jefe de los hijos de Adán’, etc.?¿O debería uno sólo atenerse a
‘¡Oh Alá! Honra a Mohámed!’?¿Cuáles de estas dos formas es mejor: el
incluir la palabra sayyid por ser un atributo per se del Profeta (Salallahu alehi
wa salam) o dejarlo porque no se hace mención de la palabra en ninguna frase
narrada? Él (Ibn Hayar) contestó: "Sí, atenerse a las frases narradas es mejor,
pues no podemos afirmar, ‘tal vez el Profeta (Salallahu alehi wa salam) no lo
dijo porque era muy modesto pues al momento no dijo que lo
mencionáramos, aunque su umma sí debe hacerlo por respeto, etc.’ – porque
si vamos a decir que esto otro es superior, tendría que venir acompañado de la
narración verdadera de los Compañeros a través de sus sucesores, pero no hay
nada que lo ratifique en ninguna de las narraciones de los Compañeros y sus
sucesores. Y muy a su pesar con la enorme cantidad de citas al respecto.
Tenemos que el Imám Chafeí, quien ha rendido un gran tributo al Profeta
353
Un gramático y filólogo del árabe del s. II H.
354
Que es preservado en la Biblioteca Zaahiriya de Damasco.
(Salallahu alehi wa salam) en el prefacio de su libro, el cual es el nec plus
ultra de quienes crearon el mad-jab a su alrededor, dice: "¡Oh Alá! Honra a
Mohámed ..." etc. hasta que acabó cuando lo juzgó conveniente, dictaminó:"...
cada vez que uno lo recuerda, lo recuerda a él (Salallahu alehi wa salam), y
cada vez que un atolondrado no lo recuerda, se equivoca", lo que parece lo
dedujo del hadiz auténtico en que se narra como el Profeta (Salallahu alehi wa
salam) vio a la Madre de los creyentes (Aixa) ocupada con numerosas y largas
alabanzas, de modo que le dijo: “Has dicho palabras que si se pesaran con lo
que vendrá, habría equilibrio: alabado Alá, tantas veces como la cantidad de
Su creación es”; él (Salallahu alehi wa salam) gustaba suplicar sólo con lo
necesario, lo explícito, pero detallado en lo implícito. Cadi Iyad sacó un
capítulo del azalá sobre el Profeta (Salallahu alehi wa salam) en su libro ash-
Shifaa' (El Libro de la Cura), acotando narraciones del Profeta (Salallahu alehi
wa salam) con el aval de muchos de los Compañeros y sus sucesores; y en
ninguna de ellas aparece mencionada la palabra sayyid:
a) El hadiz de Alí, con el cual solía enseñarles la manera de hacer azalá sobre
él (Salallahu alehi wa salam) diciéndoles: ¡Oh Alá!, Proveedor de llanuras,
Dador de cumbres, envía la más sobresalientes de Tus salutaciones, la
más fértil de de Tus bendiciones y demás atenciones sobre Mohámed, Tu
siervo y mensajero, el que divulga lo que es secreto.
b) De Alí, nuevamente, quien solía decir: "los ruegos para Alá, el Bendito, el
Misericordioso; para los ángeles (cercanos a Alá); para los Profetas; para los
sinceros; para los testigos; para los justos; para lo que te glorifica ¡Oh Señor
de los mundos!, acompaña a Mohámed hijo de Abdulá, el Sello de los
profetas; Imám de los temeroso, ... etc."
c) En palabras de Abdulá ibn Masúd, quien solía decir: "¡Oh Alá! Honra,
bendice y ten misericordia de Mohámed; Tu siervo y mensajero; el imám de la
bondad; el Mensajero de la misericordia, ..." etc.
d) De al-Hasan al-Basri, quien solía decir, "quien quiera beber de la copa que
refresca; de la fuente de Mustafá, deberá decir: ¡Oh Alá! Honra a Mohámed, y
a su familia, sus Compañeros, sus esposas, sus hijos, sus descendientes, su
familia, sus parientes políticos, sus defensores, sus seguidores, y a todos
aquellos que lo aman." Esto es lo que (Cadi Iyad) ha escrito en su ash- Shifaa'
en lo que concierne al modo de salutaciones al Profeta, con el aval de los
Compañeros y aquellos que los siguieron, mencionando otras cosas dentro su
libro. Se cuenta en el hadiz de Ibn Masúd que en sus salutaciones al Profeta
(Salallahu alehi wa salam), decía: "¡Oh Alá! Honra con lo mejor de Tus
ruegos, perdón y bendiciones al jefe (sayyid) de los mensajeros, etc. ...",
transmitido por Ibn Maya, pero su isnád es inconsistente (daíf) de modo que el
hadiz de Alí transmitido por Tabaráni con isnád fuerte lo precede. Dicho
hadiz contiene un léxico especial, el cual es patente en el libro Fadl an-Nabi
(la Excelencia del Nabí (Salallahu alehi wa salam)") de Abul Hasan ibn al-
Fáris. Algunos chafeítas han llegado al extremo de decir que si un hombre
promete enviar la mejor salutación al Profeta (Salallahu alehi wa salam), el
modo de cumplir la promesa es que diga: "¡Oh Alá! Honra a Mohámed cada
vez que quien recuerde lo haga o el atolondrado olvide recordarlo". Nauauí
dijo: "La única manera que es la apropiada y consignada como correcta y lo
que uno debe decir es: ¡Oh Alá! Honra a Mohámed, y a la familia de
Mohámed, así como honraste a Abraham..." Muchos de los eruditos tardíos
han contestado a esto diciendo que ninguna de las dos formas mencionadas
anteriormente no tiene nada que pruebe cual es superior conforme a la
narración, pero conforme al significado, lo previo es claramente superior. Este
tema es bien sabido en los libros de fiq, y de todos los eruditos de fiq que
tocaron el tema, sin excepción; en ninguna de sus expresiones hallamos la
palabra sayyid. De haber sido esta palabra recomendada, ésta no hubiese
escapado a su vista y dejándolos con un desconocimiento de tal. Lo único
bueno y aceptable es lo que aparece en las narraciones (hadices auténticos), y
Alá sabe mejor."
El punto de vista de Ibn Hayar es rechazar la categoría de sayyid cuando
mencionamos al Profeta (Salallahu alehi wa salam) durante sus salutaciones
conforme a la orden coránica, la cual es acatada por la escuela hanefita y es el
punto de vista al cual deben suscribirse todos, porque es indicativo de
verdadero amor hacia él (Salallahu alehi wa salam):
"Di: Si amáis a Alá, ¡seguídme! Alá os amará." (la Familia de Imrán 3:31)
Es por esto que el Imám Nauauí señaló en su Rauda at-Talibin (1/265), "La
salutación más completa al Profeta (P. B. E.) es: ¡Oh Alá! Honra a
Mohámed..." etc., correspondiente al no. 3 ya dado anteriormente, ¡¡EN EL
CUAL JAMÁS SE MENCIONA LA PALABRA SAYYID!!
4) Las salutaciones nos. 1 y 4 son las que el Mensajero de Alá (Salallahu alehi
wa salam) enseñó a sus Compañeros cuando le preguntaron sobre el modo de
hacer salutaciones a él, de modo que esto sirve de evidencia para mostrar que
estas formas son las mejores para hacer las salutaciones a él, porque él jamás
hubiera elegido algo para sí o para ellos excepto lo mejor y lo más noble.
Imám Nauauí, como se mencionó, avaló (en Rauda at- Talibin) fuese hacer
una promesa para cumplir en lo posible con la salutación del Profeta
(Salallahu alehi wa salam), esta no podría ser cumplida excepto por los modos
ya descritos.
Subki arroja otro motivo: cualquiera que envíe salutaciones con las formas ya
dichas ya ha hecho salutaciones sobre el Profeta (Salallahu alehi wa salam), y
cualquiera que las haya hecho con otras palabras diferentes entonces no
sabemos si ha o no realizado las disposiciones de la oración. Esto viene a
colación porque dicen (en el hadiz): "¿Cómo hemos de honrarte?" A lo que
respondió: "decid: ...", definiendo así la salutación sobre él mismo al igual que
han de decir tal y tal. Esto fue mencionado por Haitami en ad-Darr al-
Mandud (25/2); diciendo después (27/1) que el objetivo es llevado a cabo con
todas las formas descritas en los hadices auténticos.
6) Alama Sidic Hasan Khan dice en su libro Nuzul al- Abraar bil 'Ilm al-
Ma'zur min al-Ad'iya ual-Adkaar, después de sacar muchos hadices sobre la
excelencia de repetir la salutación del Profeta (Salallahu alehi wa salam) (p.
161):
"Es indudable que los más encomiables de los musulmanes en honrarlo en las
salutaciones son la gente de Hadiz y los narradores de la Sunna pura, porque
es uno de sus deberes en esta rama del conocimiento el hacer salutaciones a él
ante los hadices, de modo que sus lenguas estarán siempre ocupadas en su
memoria, que Alá sea misericordioso y les de paz. No hay ningún libro de la
Sunna o en las colecciones de hadices, ya sea yamí, musnad, múyam, Yuz, etc.,
excepto lo que ya esta comprendido en los miles de hadices; inclusive el
menos voluminoso (de los libros), el al-Yamí as-Saguir de Suyuti, que
contiene diez mil hadices, cuyas demás colecciones del género no difieren.
Así que esta es la Secta Salva: la Gente del Hadiz, que serán los que estén más
cerca de entre los hombres al Mensajero de Alá (Salallahu alehi wa salam) el
Día de la Resurrección, y los que obtendrán el beneplácito de él (Salallahu
alehi wa salam) para su intercesión. ¡Por la vida de mis padres! La excelencia
de la Gente del Hadiz no puede ser rebasada por nadie excepto que el que
haga más de lo que ellos hacen, lo cual es casi imposible. Por lo tanto, los
deseáis bien y buscáis la salvación sin importar qué, debéis convertiros en
mohadices; de no ser así… y muy independiente de esto, no hay nada más que
os beneficie."
Él (Salallahu alehi wa salam) nos enseñó también como hacer la súplica (du'a)
dentro del tachájud diciendo: cuando os sentéis después de cada dos rakás,
luego decid: Todos los elogios son para con Alá… (hasta el final de la
súplica, y después dijo:) ... luego debéis seleccionar algo de las súplicas que
más sean de su agrado. 355
"Cuando quería parares para la cuarta raká, él decía: Alá es el Más grande" 359 ,
y ordenó hacerlo así a "quien rezaba deplorablemente" como antes, y "él
(Salallahu alehi wa salam) levantaba sus manos" 360 algunas veces con dicho
takbír.
"Él se sentaba erguido sobre su pie izquierdo, en reposo, hasta que cada hueso
regresaba a su posición normal, luego se paraba, apoyándose sobre el suelo
355
Nasái, Ahmed & Tabaráni con varios isnades de Ibn Masúd – los detalles se dan en a-Sajija (878) – y
hay un hadiz de Ibn a-Zubair que lo apoya, en Machmá az-Zawáid (2/142).
356
Bujari & Muslim
357
Abu Yála en su Musnad (284/2) con isnad sajij. Lo doy en Silsila al-Ahadiz as-Sahiha (604).
358
Bujari & Abu Daud.
359
Ibid.
360
Abu ‘Auána & Nasái con isnad sajíj.
con los puños cerrados 361 : apoyándose a sí mismo son sus manos cuando de
levantaba." 362
"Él era conocido por realizar cunút en todas las oraciones " 368 , aunque "él sólo
realizaba cunút en ellas cuando suplicaba a favor de la gente o en contra de la
gente" 369 . Por ejemplo, dijo una vez, ¡Oh Alá! Rescata a al-Walid ibn al-
Walid, y a Salama ibn Hisham, y a 'Ayiash ibn Abi Rabía. ¡Oh Alá!
Aplica tu castigo a (la tribu de) Mudar, y causale los años (de hambruna)
361
Literalmente significa “como uno que amasa”.
362
Harbi en Garib al-Hadiz; su significado se encuentra en Bujari y Abu Daud. En cuanto al hadiz,
“prohibió a un hombre el apoyarse con su mano cuando se levantaba durante la oración” esto es munkar
(rechazado) y no es auténtico, como lo he explicado en Silsila al-Ahadiz ad-Da’ifa (967)
363
Cunút: contiene muchos significados, o sea, humildad, devoción, etc… lo que se quiere decir aquí es la
súplica especial cuando esta uno parado durante la oración.
364
Bujarí y Ahmed.
365
Ibíd.
366
Ahmed y Tabaráni con isnad sajíj. Levantar las manos en cunút es el mad-jab de Ahmed y de Isaac bin
Rajauai,cf. En Masáil de Marwazi (p. 23). En cuanto a frotar el rostro con las manos, no hay nada que
hable de esta posición, y esto es una innovación; y fuera de la oración, también no hay nada auténtico
registrado: todo lo que ha sido transmitido al respecto o es débil o muy endeble, como se demuestra en
Daíf Abi Daud (262) & Silsilat-ul-Ahadiz a-Sajija (597). Esto es el por qué ‘Izz bin Abdú as-Salaam dijo
en una de sus fatuas: “Sólo un ignorante lo hace” véase Apéndice 8.
367
Abu Daud & Sirach; Hakim lo declaró sajíj y Dájabi con otros concordaron.
368
Abu Daud, Sirach y Daracútni con dos isnádes jásan.
369
Ibn Juzaima en su Sajíj (1/78/2) & Jatib en Kitab al-Cunút con isnád sajíj.
como en los años de Yusuf. [¡Oh Alá! ¡Maldice a Lahyaan, y a Ru'l, and
Dakwan, y a 'Usayia, quienes desobedecieron a Alá y a Su mensajero!] 370
370
Bujari & Ahmed; el añadido es de Muslim.
371
Nasái, Ahmed, Sirach (109/1) & Abu Yála en su Musnad con isnades sajij.
372
Ibn Násser & Daracutni con isnad sajíj.
373
Hemos dicho, “…algunas veces” porque los Compañeros que narraron la oración del Uiter no
mencionaron el cunút en ella. Ya fuera que el Profeta (Salallahu alehi wa salam) lo haya hecho siempre,
ellos lo hubieran mencionado. Sin embargo, Ubayy ibn Ca’b también narró el cunút en uiter, de modo
que se constata que él lo hacía algunas veces. Esto es la evidencia de que el cunút en uiter no es
obligatorio (uayib), y esta es la opinión de la mayoría de los ulemas. Por esta razón, el investigador
hanefita Ibn al-Jumám, reconoció en Fath al-Qadír (1/306,359, 360) que el punto de vista obligatorio es
infundado y nada apoyado por la evidencia. Es bastante justo que lo diga un hanefita objetivo que carece
de espíritu partidista, porque esta afirmación que él hace y apoya contradice a su mad-jab.
374
Ibn Abi Cheiba (12/41/1), Abu Daud, Nasái en Sunan al-Kubra (218/1-2), Ahmed, Tabaráni, Baijáqui
& Ibn Asákir (4/244/2) narraron esto, junto con la súplica después de ella, con isnades sajíj. Ibn Manda
narró la súplica solamente en Taujid (70/2) con un isnád jásan diferente. Su disertación esta dada en Irwá.
"¡Oh Alá! Guíame de entre aquellos que Tu has guiado; y perdóname de
entre los que Tu has perdonado; y vuélveme de los amistosos como los
que Tu has vuelto de los amistosos; y bendíceme con lo que Tu quieras; y
sálvame del mal que Tu has decretado; [porque] es Tu decreto, y nadie
puede intimidarte; [y] no es humillado quien Tu has hecho amigo; [ni es
honrado quien es Tu enemigo.] Bendito Seas, ¡Oh Señor!, y Glorificado.
[No hay lugar seguro excepto en Ti.]" 375
EL TACHÁJUD FINAL
375
Ibn Juzaima (1/119/2) & Ibn Abi Cheiba, etc., en cuanto al último hadiz.
NB: Nasái añade al final del cunút: ua sali-Aláju ála-Nabí al-Ummí (“que Alá honre al Profeta iletrado”),
relatado con un isnád inconsistente; entre aquellos que lo declararon daíf están Ibn Hacher al-Ascaláni &
Surcan. Por lo tanto no lo hemos incluido en nuestro sistema combinatorio de narraciones aceptables. ‘Izz
bin Abdúl as-Salaam dijo en al-Fatawa (66/1, 1962): “el honrar al Mensajero de Alá (Salallahu alehi wa
salam) en cunút no es auténtico, y no es apropiado añadir salutación del Mensajero de Alá (Salallahualehi
wa salam) por ningún motivo”. Este punto de vista suyo demuestra que él no amplió el argumento con la
idea de decir bid’a jásana (“buena innovación”), idea que muchos sabios se precipitan en apoyar.
Sin embargo, se demuestra en el hadiz sobre Ubayy bin Ca’b quien dirigía a la gente en oración
durante las noches de ramadán, él acostumbraba honrar al Profeta (Salallahu alehi wa salam) al final del
cunút, y fue durante el gobierno de Omar– transmitido por Ibn Juzaima en su sajíj (1097). Igualmente está
comprobado de Abu Halima Mu’ad al-Ansarí, también solía guiarlos durante el califato de Omar-
transmitido por Ismael al-Cadi (no. 107) & otros, así que este añadido esta justificado por la práctica de
los salafí y no cabe ninguna afirmación categórica de que este añadido sea una innovación. Y Alá sabe
mejor.
376
Bujari
377
Ibid. En cuanto a las oraciones de dos rakás como el fáyer, la sunna es sentarse en muftarishan. Esta
diferencia lo documenta detalladamente el Imám Ahmed, cf.Masáil del Imam Ahmed de Ibn Jáni (p. 79)
378
Abu Daud & Baijáqui con isnád sajíj.
379
Muslim & Abu ‘Auána.
380
Ibid.
palma izquierda cubría su rodilla (izquierda), ladeándose sobre ella
fuertemente." 381 [Véase diagrama]
Una vez, "él (Salallahu alehi wa salam) Oyó a un hombre rezar en su oración
sin glorificar la majestad de Alá el Altísimo, ni honrando al Profeta (Salallahu
alehi wa salam), de modo que dijo: Éste hombre se ha precipitado."
Después lo llamó y le dijo con otros, "Cuando alguno de vosotros rece,
deberá empezar alabando al Señor, Poderoso y Sublime, y a exaltarlo;
después honrar (en otra narración: debéis honrar) al Profeta (Salallahu
alehi wa salam), y luego suplicar como él desea." 382
381
Ibid.
382
Ahmed, Abu Daud, Ibn Juzaima (1/83/2) & al-Hakim, quienes declaráronlo sajíj y Dájabi concordó.
Debe conocerse que este hadiz prueba que el azalá (salutaciones) al Profeta (Salallahu alehi wa
salam) en este tachájud es obligatorio, debido a la orden de hacerlo. Esta opinión fue aceptada por el
Imám Chafeí e Imám Ahmed en las últimas dos narraciones de él mismo, y antes que él por muchos
Compañeros, al igual que otra gente de conocimiento. Por ello, Ayuri dijo en Sharía (p. 415): “aquél que
no honre (salutaciones) al Profeta (Salallahu alehi wa salam) en el tachájud final, debe repetir la oración.”
De aquí, aquellos que soslayan al Imám Chafeí de ser disparatado en su opinión al respecto, no son justos,
como el faquí Haitami ha explicado en Darr al-Mandud (secciones 13-16).
Después, "escuchó a un hombre glorificar y alabar a Alá, y honrar al Profeta
(Salalllahu alehi wa salam) en oración, así que el Mensajero de Alá (Salallahu
alehi wa salam) le dijo: Suplica, y seréis respondido; pide, y te será
dado." 383
¡Oh Alá! En verdad busco refugio en Ti] del castigo del Infierno y del
castigo de la tumba; de las pruebas de vivientes y muertos; y de [las
pruebas de] el falso Mesías. [Entonces debe suplicar por sí mismo de lo que
le ocurra.]" 384 - " Para ello Él (Salallahu alehi wa salam) suplicaba con su
propio tachájud." 385
También, "solía enseñar a los Compañeros ésto del (mismo) modo que les
enseñó las suras del Corán."386
383
Nasái con isnád sajíj.
384
Muslim, Abu ‘Auána, Nasái & Ibn al-Yarud en al-Muntáca (27). Se da en Irwá (350).
385
Abu Daud & Ahmed con isnád sajíj.
386
Muslim & Abu ‘Auána.
387
No hemos dicho “… en su tachájud” porque el análisis es “…en su azalá”, sin especificar tachájud o
algo más. De aquí, cubre todas las posiciones apropiadas para la súplica, o sea, postración y tachájud; la
instrucción para suplicar en estas dos posturas ha sido mencionado.
388
Bujarí y Muslim. Azram dijo: “pregunté a Ahmed: ‘con cual(es palabras) debemos suplicar después
del tachájud?’ él contestó ‘como se ha narrado’. To le pregunté: ‘¿Acaso no dijo el Mensajero dealá
(Salallahu alehi wa salam): “Entonces que elija la súplica que más le plazca?” Y él contestó: ‘elegir de lo
que se ha narrado’”. Esto mismo acotó Ibn Taimiya (Machmú al-Fatawa 69/218/1) quien lo avaló,
añadiendo: “de aquí ‘cualquier súplica’ se refiere a las súplicas que Alá ama más, no cualquiera…”;
continuando dijo”por ello es mejor decir: (quien suplica) con las súplicas establecidas y aprobadas las
cuales han sido narradas y que son benéficas.” Esto es así, pero reconocer cuáles son las súplicas
verdaderamente benéficas depende del conocimiento auténtico, y esto es raro encontrarlo entre la gente,
1.
2.
¡Oh Alá! En verdad busco refugio en Ti del mal que has creado, y
del mal que no causo 392 [aún]. 393
3.
4.
por eso es mejor apegarse a las súplicas señaladas, especialmente cuando ellas incluyen a los deseos
solicitados del rezante. Y Alá sabe mejor.
389
Ma’zam: lo que origina que un hombre peque, o el pecado en sí.
390
Magram: carga; aquí significa deuda, como lo comprueba el resto del hadiz, en el que Aixa dijo:
“alguien le preguntó: ‘¿por qué buscas protección del magram tan a menudo ¡Oh Mensajero de Alá?’ Y él
le contestó: en verdad, cuando un hombre se endeuda, habla y miente, promete y no cumple.”
391
Bujari y Muslim.
392
O sea, del perjuicio de las malas acciones que he hecho, y del mal de no hacer buenas acciones.
393
Nasái con isnád sajíj & Ibn Abi ‘Asim en su obra as-Sunna (no. 370 – con mi corroboración); la
añadidura es del último.
394
Ahmed & Hakim quienes lo declararon sajíj y Dájabi concordó.
¡Oh Alá! [Pido] por Tu conocimiento de lo desconocido, y Tu
control sobre la creación: dame vida (si a)Tu juicio es lo mejor
para mi, y dame muerte si ésta es lo mejor para mí. ¡Oh Alá! Te
Pido también en temor a lo conocido y desconocido; Te ruego por
la Verdad(en otra narración: sabiduría) y justicia en la ira y la
felicidad ; Te pido moderación en la pobreza y caudal; Te pido el
gozo que no marchite; Te pido la alegría [que no perezca] ni que
cese; Te pido satisfacción ante Tu decreto; Te pido la frescura de la
vida después de la muerte; Te pido el deleite de observar Tu rostro;
y [Te pido] por las ansias de encontrarme contigo, indemne y sin
aflicciones. ¡Oh Alá! Atavíanos con el adorno del imán, y haznos de
los que guían y son guiados. 395
395
Nasái & al-Hakim, quienes lo declararon sajíj y Dájabi concordó.
piedad; ten misericordia de mi. En verdad eres El más Piadoso, El
más Misericordioso." 396
396
Bujari y Muslim.
397
Ahmed; Tayálisi; Bujari en al-Adab al-Mufrad, Ibn Maya & Hakim quienes lo declararon sajij y
Dájabi concordó. He dado su disertación en Silsilat-ul-Ahadiz a-Sajija (1542).
398
Dandana: bisbiseo, murmullo//hablas con cierta entonación audible, pero las palabras son
incomprensibles –en este caso, las palabras silenciosas de súplica, la afirmación final significa: “nuestras
palabras son como las tuyas.”
399
Abu Daud, Ibn Maya & Ibn Juzaima (1/87/1) con isnád sajíj.
"¡Oh Alá! En verdad Te pido Alá (en otra narración: por Alá), [el
uno], el único, el Entero, el que no engendra ni es engendrado, y
con quien nada se le compara –perdona mis pecados; en verdad
eres el Clemente, el Misericordioso.
A ésto el Profeta dijo: él ha sido perdonado, él ha sido perdonado. 400
400
Abu Daud, Nasái, Ahmed & Ibn Juzaima; Hakim lo declaró sajíj y Dájabi concordó.
(en otra narración: lo más majestuoso) 401 , y con lo cual si se suplica
y Él responde con lo que es solicitado, Él lo concede. 402 ]
10. Una de las ultimas cosas que decía entre el tachájud y el taslim era:
La paz y misericordia de Alá sean con vosotros [de modo que la blancura
de su mejilla derecha era visible], y a su izquierda:
La paz y misericordia de Alá sean con vosotros [de modo que la blancura
de su mejilla izquierda era visible]." 404
401
Esto es tawassul (buscar acercamiento) hacia Alá por medio de sus más bellos nombres y atributos, y
esto es lo que Alá el Excelso ordena: “Alá posee los nombre más bellos. Empleadlos…” (los Lugares
más Elevados 7:180). En cuanto al acercamiento Alá por medio de otras cosa, como por el amor de tal y
tal; que para la dignidad, estatus, derechos tales, etc . Hay un texto del Imám Abu Hanifa de que dichas
practicas son al menos despreciables (makrú); pero en general son prohibidas (jaram). Por lo tanto, es una
ena ver que uno vea a mucha gente, entre ellos a muchos sheiks, que niegan el tawassul aprobado –jamás
los escucharán acercarse a Dios de esta manera- pero eso sí, están bien al tanto de formas innovadas de
tawassul, las cuales son insignificantes, y que de otra manera no se permiten. Sheik-ul-Islam Ibn Taimiya
ha compuesto un ensayo detallado al respecto titulado Tawassul and Uasíla (“Acercamiento a Alá y los
Medios para ello”), el cual debe ser consultado, porque es muy importante, y existe muy poco que cubrir
aquí al respecto. También esta un artículo mío llamado Tawassul –sus tipos y sus reglas, el cual es
también importante en la materia y por su formato, y también refuta algunas de las últimas ideas erróneas
aprobadas por doctores de religión contemporáneos. Que Alá nos guíe y a ellos también.
402
Abu Daud, Nasái, Ahmed, Bujari en al-Adab al-Mufrad, Tabaráni & e Ibn Manda en Taujid (44/2,
67/1, 70/1-2) con isnades sajij.
403
Muslim & Abu ‘Auána.
404
Abu Daud, Nasái & Tirmídi, quienes lo declararon sajíj
Algunas veces añadía a los saludos de su derecha:
"Cuando dijo:
405
Abu Daud & Ibn Juzaima (1/87/2) con isnád sajíj. Abdúl Jac también lo declaró sajíj en su Ahkam
(56/2), como hizo Nauaui e Ibn Hacher. También fue transmitido por medio otra ruta por Abdúl Razzac
en su Musannaf (2/219), Abu Yála en su Musnad (3/1253), Tabaráni en Múyam al-Kabir (3/67/2) y
Múyam al-Ausat (no. 4476 –en mi numeración) & y Daracútni.
406
Nasái, Ahmed & Sirach con inad sajíj.
407
Ibn Juzaima, Baijáqui, Diyá en al-Mujtara & Abdúl Gani al-Macdisi en su Sunan (243/1) con isnád
sajíj; Ahmed, Tabaráni en Múyam al-Ausat (32/2), Baijáqui, Ibn al-Mulaquin (29/1) y Hakim, todos ellos
lo declararon sajij y Dájabi concordó. Su disertación esta dada en Irwá al Galíl en el hadiz no. 327.
de vosotros colocar vuestras manos sobre vuestros muslos, y luego
saludar a vuestros hermanos que están a la derecha y a la izquierda). 408
Él (Salallahu alehi wa salam) solía decir: ‘... (de) ésta (la oración) se sale con
el taslím. 409
Glorificado sea Alá, y alabado. Glorificado seas Tu, ¡Oh Alá alabado!.
Testifico que no hay más Dios excepto Tu. Busco el perdón en Ti y me
arrepiento ante Ti.
408
Muslim, Abu ‘Auána, Sirach, Ibn Juzaima & Tabaráni.
NB: los ibadíes han distorsionado este hadiz; su académico Rabí lo ha relatado en su nada auténtico
Musnad, con ideas diferentes para justificar su opinión de que levantar las manos con takbír invalida la
oración. Esta idea es falsa, como he explicado en ad-Da’ifa (6044)
409
Hakim y Dájabi lo declararon sajij; véase el capítulo de takbír.
410
La primera súplica es la forma más completa de duá conocida como Cafára al-machlis (expiación en
la congregación): “aquél que la diga en una reunión de recordatorio (de Alá), es como un sello que llegó
para quedarse; y aquél que diga palabras vanas en una reunión, esta será una expiación para ésta”. Relato
auténtico de Hakim y Tabaráni. La segunda súplica es por supuesto, la Sunna de dar paz y misericordia al
Profeta. Estas dos súplicas son la mejor manera de implementar las siguiente palabras como guía
islámica: “Nadie se sienta en una reunión en la que ellos no mencionen a Alá, ni envía azalaes al
Profeta, sin que sea un motivo de pena ajena para ellos; si Alá lo desea, los castigará, o si el desea él
los perdonará”- relato auténtico de Tirmídi, Hakim & Ahmed. Véase del Sheik Albani su Silsilat-ul-
Ahadiz a-Sajija (74-81) para más detalles.
Addenda
Así piensan Abraham an-Najíi, quien dijo: "las acciones de una mujer dentro
de la oración son las mismas que las del hombre" - transmitido por Ibn Abi
Cheiba (1/75/2), con isnades sajíj narrados por él.
Bujari registró en su obra at-Tarij as-Saguir (p. 95) con un isnád sajíj de
Umm ad-Dardá: "que ella (la mujer) solía sentarse en su oración igual que los
hombres se sientan, por lo que era una mujer de (gran) entendimiento."
411
Recogimiento: acto de recoger o recogerse// Recoger: encoger, estrechar o ceñir (Gran Sopena; Tomo
XV; p. 7264) Proviene del mad-jab hanefita diferenciar la oración del hombre con el de la mujer. Dicen
que la mujer debe pegar o ceñir los brazos y codos a los costados para diferenciarse del hombre, pues éste
los mantiene ambos separados. Pero como acabamos de ver, ¡NO HAY DIFERENCIA ENTRE LOS
DOS A LA HORA DE REZAR. DEBEN REZAR IGUAL!-N. T.