Recordando a los clásicos: Notas sobre Weber y el protestantismo ascético

Alberto Noé (ISEP)

Introducción

Para Weber los representantes históricos del protestantismo ascético son: Calvinismo,

Pietismo, Metodismo y el Movimiento Bautista

Estos movimientos religiosos tuvieron alguna relación porque, además de ser

Inglaterra el escenario de sus génesis, tienen en común el tronco calvinista, con la

excepción de los bautistas. El Metodismo surgió en la primera mitad del siglo XVIII

dentro de la iglesia oficial, la iglesia anglicana. Su postura no era la de crear una

nueva iglesia, sino la de renovar el espíritu ascético. El pietismo, surge en el interior

del calvinismo ingles y se identifica con la ortodoxia, su teórico principal fue Spener. A

pesar de que en sus comienzos, bautistas y calvinistas se encontraron en oposición

permanente, a fines del siglo XVII mantenían relaciones estrechas. El movimiento

ascético que Weber denomina Puritanos, se refiere a los movimientos religiosos de

Inglaterra y Holanda, sin distinción de dogmas ni programas de constitución

eclesiásticas e incluye, por lo tanto, a congregacionistas, bautistas, menonitas y

cuáqueros.

Para Weber lo importante es señalar el carácter racional del ascetismo. Como recurso

metodológico utilizará el método de sistematización en tipos ideales.

Weber dice que es justamente la imposibilidad de trazar contornos precisos en la

realidad que supone la exclusiva investigación en sus formas mas consecuentes,

como medio de captar de modo mas seguro sus efectos específicos.

La primera doctrina religiosa que Weber analizará será el Calvinismo, aclarando que

desde el punto de vista metodológico no interesa el origen, los antecedentes y la

evolución histórica, sino que se acepta como dado su contenido ideológico.

Y comienza por el Calvinismo por haber sido la determinante de las luchas religiosas

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en los países civilizados mas progresivos desde el punto de vista del capitalismo

(Inglaterra, Holanda y Francia) durante los siglo XVI y XVII.

Dogma característico del calvinismo ----------------> La predestinación

Weber aclara sobre la esencialidad de los fenómenos históricos: enfatiza su influencia

sobre otros fenómenos históricos y hay que apreciar los efectos historicos-culturales

del dogma. La lógica expositiva weberiana no se refiere a las opiniones personales de

Calvino, sino al Calvinismo, durante los siglos XVI y XVII en el escenario de la

civilización capitalista. Para el Calvinismo, la predestinación supone que una minoría

está llamada a salvarse a través de la “divina gracia” que es inasible para el que le ha

sido concedida y como inalcanzable para el que le ha sido negada. Los efectos de

esta doctrina será el desarrollo de una inaudita soledad interior en el hombre.

En la época de la Reforma, lo mas importante era conseguir la salvación para la

felicidad eterna, para ello, el ser humano se veía condenado a recorrer solitariamente

su camino hacia un destino ignorado, prescrito desde ala eternidad. Nadie podía

ayudarlo ( ni el predicador, ni los sacramentos).

Este brutal abandono, encontró un escenario posible: “el desencantamiento del

mundo” que rechaza la búsqueda de medios mágicos para conseguir la salvación.

Es decir, ni medios mágicos, ni otros medios eran capaces de otorgar la gracia a quien

Dios había resuelto negársela. La doctrina de la Predestinación supone encontrar las

raíces del individualismo. Weber cita a varios autores, entre ellos a Baxter quien

aconsejaba a desconfiar del amigo mas intimo y a Bailey quien afirmaba que no se

debía confiar en nadie y no comunicar a nadie nada que sea comprometedor para

uno.

Dios debe ser el único confidente del hombre, era la síntesis del pensamiento de estos

autores.

Esto puede explicar porque el Calvinismo eliminó la confesión privada y las

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consecuencias fueron: a) Relación con Dios = profundo aislamiento interior y

b) A pesar de pertenecer a ala verdadera iglesia para lograr la salvación.

Weber sostiene que esta combinación es muy importante para entender las bases

psicológicas del Calvinismo, basado en motivaciones individualistas, en la

consideración de la racionalidad de un fin o un valor.

Principio básico de la ética puritana ---- Carácter utilitarista

Habría que recordar que las preguntas mas importantes de la época eran:

¿pertenezco al grupo de los elegidos? ¿y como estaré seguro de que lo soy?

Calvino sostiene que esto no es un problema ya que se sentía un “instrumento” de

Dios y estaba seguro de tener la gracia de Dios. También afirmaba que había que

“afianzarse” en la propia profesión para conseguir en la lucha diaria la seguridad

objetiva de la propia salvación. Surgen así los “santos” seguros de si mismo, en

“estado de gracia” como una especie de cualidad profesional o de clase y Weber da

como ejemplo, ciertos hombres de negocios en la era heroica del capitalismo.

Además, para conseguir la seguridad en si mismo, se inculcó la necesidad de recurrir

al trabajo profesional incesante, único medio de ahuyentar la duda religiosa y de

obtener la seguridad del propio estado de gracia.

En relación a la “cura de almas”, Weber afirma que había dos consejos:

1) Se prescribe como un deber, el considerarse “elegido” y rechazar, como una

tentación del demonio, toda duda.

2) Para conseguir la seguridad en si mismo, se inculcó la necesidad de recurrir al

trabajo profesional, que es el único medio adecuado para neutralizar la angustia

religiosa.

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Diferencias entre Lutero y Calvino

Para Lutero, la vida del hombre debe estar dirigida a cultivar el sentimiento místico,

mientras que Calvino propone el obrar ascético, y en relación al “estado de gracia”,

Calvino afirma que es un patrimonio de los elegidos (¿y el pueblo judío?).

La salvación supone que el calvinista crea su propia seguridad de la salvación y que

también supone un control sistemático de si mismo porque permanentemente lo acosa

una duda: “¿elegido o condenado?”.

Weber sostiene que el Dios calvinista no exigía de sus fieles la realización de “buenas

obras”, sino lo que exige es una vida planificada y metódica. Para conseguir el “estado

de gracia, es necesario que la vida del hombre sea racionalizada y que esté dominada

por la idea de aumentar la gloria de Dios. En lo que se refiere al ascetismo puritano,

propone una educación de la personalidad y para esto se manifiesta contrario al goce

despreocupado de la espontaneidad vital y el medio mas adecuado es el orden en la

conducta de los ascetas. Además, Weber propone la hipótesis de que la metodización

de la vida humana es la base del poder liberador del ascetismo.

Tanto Lutero como Calvino, rompieron con el ascetismo monástico, propio de la Edad

Media, y también con las indulgencias y Weber, apoyándose en Sebastián Franck,

sostiene la metáfora de que “lo especifico de la Reforma Protestante era la de

convertir a cada cristiano en un monje para toda la vida”. Particularmente, el

calvinismo adicionó la necesidad de comprobar la fe en la vida profesional. De esta

manera, los impulsaba a ala practica del ascetismo y fundamentaba la ética

profesional en la “Doctrina de la Predestinación”, desplazando así a la aristocracia de

los monjes, situados fuera y por encima del mundo y en su lugar estarían los

predestinados en el mundo.

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Lo que tienen en común las religiones ascéticas es la doctrina del “estado religioso de

gracia”, cuyos efectos apartan al hombre del mundo y cuya posesión no puede

alcanzarse por medios mágicos-sacramentales, ni por el descargo de la confesión, ni

por cualquier otro cato de piedad, sino tan solo por la comprobación de un cambio de

vida, claramente diferenciada del “hombre natural”, por eso el individuo debía tener el

impulso para controlar metódicamente su conducta en su estado de gracia y por lo

tanto ascetizar su comportamiento en la vida. Weber reitera varias veces que este

nuevo estilo de vida significaba: la racionalización de la existencia de acuerdo a

preceptos divinos. El ascetismo era una condición sine-qua-non para todo aquel que

tenia como objetivo conseguir la salvación y destaca que estas condiciones no se

proyectaban fuera del mundo, como ocurría en las comunidades monásticas, por el

contrario, esto debía ser realizado fuera de los monasterios, es decir, en el mundo.

La racionalización de la conducta en el mundo con fines ultramundanos fue el efecto

de la concepción que el protestantismo ascético tuvo de la profesión.

Weber subraya la diferencia entre el ascetismo católico y el ascetismo protestante:

a) ascetismo católico: proponía una huida del mundo y se refugiaba en la soledad;

dominaba el mundo desde sus claustros y demostraba así su carácter despreocupado

por la vida en el mundo.

b) ascetismo protestante: invierte estas características , propone la entrada en el

mercado de la vida; cierre de los claustros y con este método transforma la vida

racional en el mundo.

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La acsesis y el espíritu del capitalismo

En este capitulo, Weber apela al recurso metodológico de utilizar fuentes

documentales para analizar las conexiones de la teología del protestantismo ascético

con las máximas de la actividad económica, es decir, tomará al protestantismo

ascético globalmente y particularmente analizará el puritanismo ingles, que surgió del

calvinismo y que fue quien mejor fundamentó la idea de profesión.

Concretamente, utilizó como referencia la obra de Richard Baxter, fiel representante

de la ética puritana, su principal obra es el “Catalogo Cristiano”, según Weber un

verdadero compendio de la moral puritana.

Sorpresas y paradojas de la lectura de Baxter

a) Reprobación moral por el descanso en la riqueza;

b) No al goce de los bienes porque la consecuencia inevitable son: sensualidad y

ociosidad, que son los desvíos de las aspiraciones hacia una “vida santa”

¿Porque es condenable el descanso en la riqueza?. Baxter, responde que el descanso

eterno del “santo” está en la otra vida, aquí en la tierra hay que realizar las obras que

fueron enviadas por Dios para quien la actividad es lo único que puede aumentar su

gloria, no así el goce ni el ocio. El pecado principal es la dilapidación del tiempo (!

perder el tiempo!).

Habría que recordar los trabajos de Le Goff cuando distingue el tiempo de la Iglesia

Católica (torre de campanarios y reloj anunciando las misas y festividades) del tiempo

del empresario capitalista, cuyo reloj estaba en la puerta de la fabrica, y cuya

producción depende del tiempo socialmente necesario para producir mercaderías.

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c) Recomendaciones sobre la duración del sueño (entre 6 y 8 horas) porque dedicar

mas horas al sueño seria condenable desde un punto de vista moral. Es importante

comparar esto con la frase de Benjamin Franklin, “el tiempo es oro (dinero)” que

aparentemente serian diferentes lecturas pero que en realidad significa esencialmente

que cada hora perdida es una hora que se roba al trabajo en servicio a la gloria de

Dios.

d) Reprueba la contemplación inactiva cuando se realiza en perjuicio del trabajo

profesional, ya que para eso existe el día domingo.

e) Baxter afirma que los ociosos en su profesión son los que nunca tienen tiempo para

Dios cuando llega la hora de dedicarse a Él.

f) Las ciudades, el escenario del lucro racional, son para Baxter el lugar de las virtudes

ascéticas.

g) En relación al concepto del trabajo, Baxter se manifiesta a favor del trabajo duro y

continuado, corporal o espiritual. El trabajo constituye la prevención mas eficaz contra

las tentaciones de la vida deshonesta. En este sentido, Weber señala que las

diferencias entre la ascesis sexual puritana y el ascetismo monástico es de grado y no

de principios y afirma que el Dios puritano ha asignado a cada cual una profesión que

el hombre debe conocerla con el objetivo de honrar a Dios.

Otra dimensión importante es la que se refiere a la división del trabajo y a la

estructuración profesional de la sociedad. La concepción puritana de las profesiones

especializadas, sostiene que la especialización produce un aumento cualitativo y

cuantitativo del trabajo que sirve para el bien común. Baxter critica a quienes carecen

de profesiones porque no tiene el carácter metódico y sistemático que exige la vida

ascética en el mundo.

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La relación sexual es licita, incluso en el matrimonio, como un medio querido por Dios

para aumentar su gloria de acuerdo al precepto: “creced y multiplicaos”.1

Recomendaciones contra la tentación sexual: utilizar los siguientes remedios:

a) dieta sobria

b) régimen vegetariano

c) baños fríos

d) trabajar duramente en la profesión.

Continuando con la cuestión del trabajo, Baxter afirma que quien siente o no trabaja a

gusto en la profesión es señal que ele falta el estado de gracia.

El Dios puritano no exige trabajar por trabajar, lo que ele interesa es el trabajo racional

en la profesión. Este carácter metódico es el factor mas importante para la concepción

puritana de la profesión. La utilidad de la profesión a Dios se determina de acuerdo a

criterios éticos y además la importancia que tiene en relación a la comunidad, pero el

mas importante es el provecho económico que produce el individuo (aquí aparece lo

substancia: el concepto de lucro). Baxter dice lo siguiente:

“Podéis trabajar para ser ricos, pero no para poner vuestra riqueza al servicio de

vuestra sensualidad y vuestros pecados, sino para honrar con ella a Dios”.

Apuntes: principio de placer=goze (Freud)

principio de realidad=reproducción del capital

Baxter también afirma que “como ejercicio del deber profesional ser rico no solamente

es licito sino que es obligatorio y querer ser pobre es querer estar enfermo”.

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Sobre este enfoque es muy importante los aportes de Freud sobre todo en lo que se refiere al papel de
la libido y a la neurosis obsesiva

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POBREZA=ENFERMEDAD

Critica a la mendicidad por parte del hombre capacitado para el trabajo y esto lo

relaciona como uno de los pecados capitales: la pereza. (preguiça).

El puritanismo elogia a la figura del self made man y critica a ala ostentación del nuevo

rico como así también a la despreocupación señorial.

Relación judios-puritanos

Para Weber, la mentalidad judía coincide mas con la etapa del capitalismo

“aventurero” de tipo especulativo. Su ethos era el del capitalismo del paria, por el

contrario, el capitalismo puritano estaba basado en la industria racional burguesa y en

la organización racional del trabajo. Por otra parte, Weber intenta dar otros puntos

para entender como la concepción puritana de la vocación y la exigencia de un

comportamiento ascético va a tener influencia en el desarrollo del estilo capitalista, e

insiste nuevamente que la acsesis se orientaba contra el disfrute espontaneo de la

vida y todo lo que eso significa. Históricamente, el “Libro de los deportes” que los

reyes Carlos I y Jaime I transformaron en ley, toma entre otros objetivos, combatir al

puritanismo. La oposición enérgica de los puritanos al Rey, se debía a que esta

reglamentación permitía el desarrollo de juegos populares los días domingo. la

disposición real estaba orientada a neutralizar la tendencia anti-autoritaria del

ascetismo, que ponía en riesgo al estado. La aversión del puritanismo al deporte no se

debía a una cuestión de principios: para los puritanos, el deporte tenía que servir a

una finalidad esencial: el restablecimiento necesario para la eficiencia del cuerpo, pero

era condenado porque podría despertar impulsos irracionales. Estaban en contra de

asistir a salas de juegos y bailes.

Weber llama la atención sobre la relación de los puritanos con la cultura y señala un

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aspecto fundamental:

a) erudición alienada

b) discursos bien articulados

c) valorización religiosa del conocimiento.

Y afirma la riqueza de los graduados universitarios en la primera generación de los

EE.UU. Por otra parte, elabora la hipótesis de que la tendencia contemporánea para la

uniformidad de la vida que contribuye para la padronização capitalista de producción,

tenia su fundamento ideal en el repudio de la idolatría de la carne. Esto no significa

que el puritanismo preconizaba una lucha contra el enriquecimiento, sino contra el uso

irracional de la riqueza. El puritanismo ascético condenaba también a la

deshonestidad en el escenario de la producción privada como así también a los

deseos de riqueza, puesto que así ésta era una tentación. Weber denomina “espíritu

del capitalismo” a la evaluación religiosa del trabajo vocacional secular, principal

instrumento de la acsesis y el mas importante medio para la preservación de la fe,

combinando esa restricción del consumo con la liberación de la búsqueda de riqueza,

el resultado será: acumulación capitalista a través de la compulsión ascética para el

ahorro.

En relación a los pobres y a los operarios, Calvino afirmaba que si el pueblo, la masa

de artesanos y obreros fuese mantenida en la pobreza, eso significa que ellos se

conservan obedientes a Dios. Thomas Adams, importante teólogo calvinista, afirma en

relación a esto: “Dios permite que tanta gente permanezca pobre porque sabe que

ellos no estarían aptos a resistir las tentaciones de la riqueza”.

Es importante destacar que la ética profesional, específicamente burguesa partía de la

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premisa de que el empresario capitalista, mientras permanecía dentro de los limites

de:

a) corrección moral; b) conducta moral sin manchas y c) uso inobjetable de la riqueza

podía actuar de acuerdo a sus intereses pecuniarios.

Además, el poder de la acsesis puritana ponía a su disposición, trabajadores sobrios,

conscientes y dedicados a su labor, que se aferraban al trabajo como una meta

deseada por Dios. La distribución desigual de la riqueza era obra de la “Divina

Providencia” y sus fines eran desconocidos por el hombre.

Críticas a Weber

Tawney, historiador ingles, sostiene en su libro “A religião e o surgimento do

capitalismo” (uno de los mas importantes textos sobre la relación entre religión y teoría

social), que Weber intenta explicar a través de influencias éticas e intelectuales, el

surgimiento del capitalismo cuya principal motivación está determinado por factores

completamente distintos. Tawney dice que no faltaba “espíritu capitalista” en el siglo

XV en Venecia, Florencia o Flandes, que eran los principales centros comerciales y

financieros de ala época, a pesar de que fuesen nominalmente católicos. Para este

autor, el desarrollo del capitalismo en Holanda e Inglaterra en los siglos XVI y XVII se

debe a los grandes movimientos económicos y a los descubrimientos científicos que

se procesaban en esos países y no por el hecho de que eran potencias protestantes.

No niega la importancia de que los cambios materiales y psicológicos anduvieron

juntos, pero le parece muy artificial sostener la hipótesis de que la empresa capitalista

no podría haber surgido hasta que la evolución religiosa hubiese producido el “espíritu

capitalista”. Al mismo tiempo, critica como parcial a la hipótesis: los cambios religiosos

fueron meros resultados de los movimientos económicos.

Weber no consideró las tendencias ideológicas favorables al crecimiento de los

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emprendimientos comerciales y al individualismo en las relaciones económicas que

poco tenían que ver con la religión. El pensamiento político del Renacimiento y

particularmente de Maquiavelo, eran tan críticos a las limitaciones de la ética

tradicional como lo fue también Calvino. Además, Tawney critica a Weber de simplificar

el calvinismo, para ello se apoya en diversas fuentes históricas para afirmar que el

puritanismo ingles del siglo XVII era muy heterogéneo en lo que se refiere a la política

social. O propio Cronwell que no existía en la formula que pudiese unir aristócratas,

puritanos y partidarios del igualitarismo, mercaderes y artesanos en torno de una

misma ideología social. Estos grupos luchaban en el interior del movimiento puritano.

Obviamente unos perdieron y otros ganaron. Lo que es importante en el trabajo de

Weber es que ala burguesía comercial inglesa del siglo XVII eran portadores de una

concepción de éxito social muy diferente de los grupos conservadores, tales como:

campesinos, artesanos y la pequeña aristocracia agraria, y que esta concepción

encontró su expresión el puritanismo. Para Weber, la cuestión de la libertad está en el

acto de su elección y a partir de allí tiene que representar su acción.

Paradojalmente, no es la Alemania de Weber el escenario de la modernidad

capitalista, sino Holanda, Inglaterra y EE.UU. Otro punto importante es la

convergencia de Weber con Marx quienes sostienen que la cuestión del poder supera

a la esfera económica.

Por otra parte, para Weber, los tipos-ideales son construidos a través de elementos

que tienen en cuenta a la dimensión colectiva, en el capitalismo moderno los actores

son portadores de la ideología del éxito social. Y la ética utilitarista es la ética

predominante, es decir, la maximización utilitaria. El utilitarismo egoísta se da en la

forma de producción de dinero.

Finalmente, Tawney se refiere a la buena ética en la sociedad capitalista cuando

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afirma que en el siglo XVI se produce la explosión originaria de la modernidad,

porque emergen el Estado y la primacía del Príncipe sobre la Iglesia Católica y la

Reforma Protestante fundamenta el nuevo orden.

Se generalizan las relaciones mercantiles y se disuelven las relaciones financieras.

Así, surgen el Estado soberano, la reforma religiosa y el mercado.

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