LA FUNDAMENTACIÓN PERSONALISTA de La Bioetica
LA FUNDAMENTACIÓN PERSONALISTA de La Bioetica
LA FUNDAMENTACIÓN PERSONALISTA de La Bioetica
EN BIOÉTICA
Laura Palazzani
Istituto di Bioetica
Università Cattolica S. Cuore
Roma
Pero, aunque se puede observar una sustancial unanimidad en el ámbito del debate
actual sobre la afirmación de la necesidad de poner 'límites' a la investigación y
aplicación tecno-científica superando la ciega fe iluminista en el progreso (son bien
pocos hoy, por lo menos en el plano teórico, los que proclaman la absoluta libertad de
la ciencia y de la tecnología), no se puede encontrar la unanimidad en lo que respecta
a la elección del fundamento moral que constituya el punto de referencia último entre
lo lícito y lo ilícito, legítimo o ilegítimo. No se trata, pues, de justificar el estatuto de la
bioética, sino más bien el de la 'meta-bioética': no se puede por ello pararse sólo a
hablar 'de' bioética, sino que es necesario discutir también y en primer lugar 'sobre' la
bioética. La 'meta-bioética' es esfuerza así por explicar y dar razón del fundamento
ético de los valores y de los principios que orientan la conducta del hombre en el
momento en que interviene sobre la vida (1). Es evidente que si es diversa la meta-
bioética, es diversa también la bioética: si es diverso el fundamento teórico-moral,
diversa será la aplicación práctico-operativa.
He aquí por qué el interrogante central del debate actual no está en si es necesaria la
ética para la ciencia y la tecnología, sino en cuál ética es necesaria para la bioética. Y es
en este nivel de la meta-bioética en el que se delinea el papel de la filosofía en bioética:
se trata de fundamentar o justificar la perspectiva moral que delimita el bien y el mal
en el ámbito de la ciencia y que prescribe normativamente el deber del obrar en el
campo biomédico.
En el contexto flosófico moral actual caracterizado por el pluralismo, los valores y
principios propuestos en bioética están extremamente diversificados. Por
consiguiente, es más correcto hablar de 'bioéticas' (en plural) que de 'bioética' (en
singular). Hay tantas 'bioéticas' como 'meta-bioéticas' (2). Es ineludible, por tanto, la
pregunta: ¿qué fundamentación ética debe tener la bioética?
Con el adjetivo 'laico' se refiere a la imposición del discurso moral "etsi Deus non
daretur", como si Dios no existiese o en ausencia de Dios (3). Se trata, en otros
términos, de justificar los principios y los valores morales sobre la base racional
empírica rehusando la apertura a la trascendencia. La racionalidad 'laica' es una
racionalidad fáctica y 'calculadora' (para utilizar la terminología de Heidegger),
cerrada estructuralmente a la metafísica: el método racional coincide con la
verificabilidad empírica de los hechos o con la coherencia lógica de la argumentación.
El sociobiologismo, el no-cognitivismo, el utilitarismo y el contractualismo (por citar
sólo las concepciones más relevantes), presentan, desde una diversidad de
perspectivas, un rasgo común: la afirmación de la existencia de una sola dimensión
'física' y la negación de cualquier tentativa que trascienda la materialidad contingente
de lo real (4).
El hombre es más que sus actos, que su comportamiento: en otras palabras, se 'es'
persona, no 'si se comporta' como persona, los actos son 'del' sujeto, no son 'el' sujeto.
La persona 'es' persona, no 'deviene' persona cuando manifiesta determinados
comportamientos (12). De la constatación de la presencia de determinadas funciones
u operaciones no se infiere la existencia de la persona, aunque la persona es la
condición de posibilidad de las funciones u operaciones. En resumen, la persona es
infinitamente más que sus actos o que la suma de sus acatos: la persona no puede
reducirse a la manifestación de determinadas funciones u operaciones, por cuanto las
trasciende. La persona es unitotalidad física, psíquica y espiritual: la espiritualidad (o
sea, el elemento metafísico) es la condición y el fundamento de lo psíquico y lo físico
(13).
Es propiamente la concepción ontológica de la persona lo que distingue al
personalismo de todas las concepciones 'laicas' funcionalistas-antipersonalistas en
bioética. El personalismo ontológico justifica la identificación entre ser humano y
persona. La afirmación 'todos los seres humanos son personas' es aparentemente
obvia: en realidad requiere justificación filosófica por cuanto ha sido puesta en crisis
por las concepciones 'laicas'.
Para el personalismo ontológico todos los seres humanos son personas: es 'ya'
persona el zigoto, el embrión, el feto, el recién nacido, el niño, en cuanto poseen 'in
nuce' (o para utilizar la terminología aristotélica, 'potencialmente') los elementos que,
desarrollándose en ausencia de obstáculos externos, conducirán a la actuación
completa de la persona. Y al mismo tiempo, es 'todavía' persona el anciano, el
disminuido físico, el demente, el enfermo en coma, el paciente terminal, en cuanto son
seres humanos, aunque no puedan ejercitar 'de hecho' algunas funciones u
operaciones. El completo arco biológico de la vida humana (desde la concepción hasta
sus últimos instantes) es manifestación de la vida humana personal: toda
manifestación de la vida humana debe ser respetada y tutelada (14).
Notas:
(1) L. PALAZZANI, E. SGRECCIA, "Il dibattito sulla fondazione etica in bioetica",
Medicina e Morale 1992;5: 847-870; E. SGRECCIA, Manuale di bioetica I. Fondamenti
ed etica biomedica, Vita e Pensiero, Milano, 1991.
(2) M. STOCKER, Plural and conflicting values. Clarendon Press, Oxford, 1990.
(3) U. SCARPELLI, La bioetica. Alla ricerca dei principi. Biblioteca della Libertà 1987;
99: 7-32.
(4) L. PALAZZANI, Dall'etica "laica" alla bioetica "laica". Humanitas 1991; 46 (4): 513-
546.
(7) U. SCARPELLI, Etica senza verità. Bologna, Mulino, 1982. Similar es la concepción
del emotivismo (A.J.Ayer y C.L. Stevenson): esta corriente de pensamiento considera la
emoción como la base del juicio moral.
(9) T.H. ENGELHARDT, Foundations of bioethics. Oxford University Press, New York,
1986: J. RAWLS, A theory of justice, The Belknap Press, Cambridge (Mass.), 1971.
(12) A. RIGOBELLO (ed.), Il personalismo. Città Nuova, Roma, 1978: AA.VV., Persona e
personalismi, Gregoriana, Padova, 1992.
(14) Ibidem.