Migracion en Las Pequeñas Comuidades Rurales

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MIGRACION EN LAS PEQUEÑAS COMUIDADES RURALES

Planteamiento del problema


Para comenzar primero tenemos que tener bien definido que es la migración;
según http://conceptodefinicion.de/ : “La Migración es el traslado o
desplazamiento de la población de una región a otra o de un país a otro”, con el
consiguiente cambio de residencia; dicho movimiento constituye un fenómeno
geográfico de relevante importancia en el mundo.
Según el lugar del destino, la migración puede ser interna, cuando se realiza
dentro de un mismo país; por ejemplo, del campo a la ciudad (éxodo rural); y
externa, cuando se da de un país a otro. Tanto en el caso de las migraciones
internas como las externas nos encontramos con los aspectos de: inmigración y
emigración.
La inmigración está representada por aquella población que ingresa a un país o
territorio en el cual no ha nacido; supone la entrada de población. Y la emigración
está representada por la población que abandona una región o país y se
residencia en otra; representa salida de población.
Los migrantes son llamados inmigrantes por los ciudadanos residentes del país
o región que los acoge, y emigrantes por los naturales del país que se abandona;
todo migrante es inmigrante y emigrante a la vez.
Con esto podemos concluir que entonces en las pequeñas comunidades rurales
la gente emigra a otros lugres pero, ahora; ¿por qué ocurre esto?
(1) Causas políticas: Migraciones debido a las crisis políticas presentes en
ciertos países. En estos casos las personas huyen de venganzas o
persecuciones abandonando su residencia e incluso perdiendo la vida en
el intento cuando se tratan de regímenes totalitarios. Cuando las personas
emigran por persecuciones políticas en su propio país se habla de
exiliados políticos.

(2) Causas socioeconómicas parte 2: Existe una relación directa entre


desarrollo socioeconómico e inmigración y, por ende, entre subdesarrollo
y emigración. La mayor parte de los que emigran lo hacen por motivos
económicos, buscando un mejor nivel de vida, mejores condiciones de
trabajo y remuneración, o en casos más críticos, el acceso a un empleo.
La situación de hambre y miseria en muchos países subdesarrollados
obliga a muchos emigrantes a arriesgar su vida (y hasta perderla en
multitud de ocasiones), con tal de salir de su situación.

(3) Causas culturales: La base cultural de una población determinada es un


factor muy importante a la hora de decidir a qué país o lugar se va a
emigrar. La cultura (religión, idioma, tradiciones, costumbres, etc.) tiene
mucho peso en la decisión, por ejemplo, las posibilidades educativas
suelen ser muy importantes a la hora de decidir las migraciones de un
lugar a otro, hasta el punto de que, en el éxodo rural, este factor es a
menudo determinante, ya que quienes emigran del medio rural al urbano
suelen ser adultos jóvenes con probabilidades de tener hijos/as en un
futuro.

(4) Causas familiares: Los vínculos familiares también resultan un factor


importante en la decisión de emigrar, sobre todo, en los tiempos más
recientes, en los que cualquier emigrante de algún país subdesarrollado,
necesita de mucha ayuda para establecerse en otro país de mayor
desarrollo económico.

(5) Causas bélicas y otros conflictos internacionales: Constituyen una


verdadera fuente de migraciones forzadas que han dado origen a
desplazamientos masivos de la población, huyendo del exterminio o de la
persecución del país o ejército vencedor. La Segunda Guerra Mundial en
Europa (y también en Asia), así como guerras posteriores en África
(Biafra, Uganda, Somalia, Sudán, etc.) y en otras partes del mundo, han
dado origen a enormes desplazamientos de la población o, como
podemos decir también, migraciones forzadas.

(6) Catástrofes generalizadas: Los efectos de grandes terremotos,


inundaciones, sequías prolongadas, ciclones, tsunamis, epidemias y otras
catástrofes tanto naturales como sociales (o una combinación de ambas,
que es mucho más frecuente) han ocasionado grandes desplazamientos
que se han venido agravando en los últimos tiempos por el crecimiento de
la población y la ocupación de áreas con mayor riesgo de sufrir catástrofes
naturales.

(7) Lo que la gente dice: En México y Latinoamérica se habla mucho de “el


sueño americano” que consiste en emigrar a los estados unidos de
américa y en su mayoría se comenta que es por el desempleo y lo difícil
que es buscar otro y que en su defecto en las comunidades pequeñas se
puede dar por la baja de cosechas la falta de industrias en general de la
falta de infraestructura, también se platica de que se gana en dólares y
que si se toma en cuenta que cada dólar está a $20 pesos mexicanos que
en cierta forma es verdad pero también se debe tomar en cuenta que se
gasta en dólares y la manera de enviar dinero a sus familias es insegura
y nunca llega completo por distintas razones ya sea las comisiones por
envió, la conversión que al final no es del todo favorable o simplemente la
gente gandaya por lo que el dinero no puede ser cobrado.

Históricamente de generación en generación la gente ha esparcido la idea o tal


vez por experiencias propias que cabe aclarar algo exageradas que en estados
unidos de américa se vive bien.
En México hay unos 6.5 millones de migrantes internos recientes, es decir que
se fueron a vivir a otro estado o municipio del país, mientras que en Estados
Unidos hay aproximadamente 6.8 millones de migrantes mexicanos no
autorizados.
Con motivo del Día Internacional del Migrante, este 18 de diciembre, el Instituto
Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) señaló que cifras censales de 2010
indican que en México unos 3.3 millones de personas (3.3%) que tienen 5 años
o más viven en una entidad distinta a la que residían en 2005.
En tanto que tres de cada 100 (3.2%) cambiaron de municipio sin salir de la
misma entidad federativa, es decir, en total 6.5% de la población de 5 años y
más (unos 6.5 millones) cruzó algún límite administrativo dentro del territorio
nacional (estatal o municipal) para ir a vivir a otro lugar.

En un comunicado el INEGI refirió que en 2010 en más de 1.4 millones de


hogares, el jefe o jefa de familia declaró ser migrante reciente (en otra entidad
federativa o país); mientras que en 68 de cada 100 hogares el desplazamiento
se hizo al interior del territorio nacional.

Mencionó que de acuerdo con estimaciones publicadas por el Departamento de


Seguridad Interna de Estados Unidos, hasta enero de 2011 aproximadamente
11.5 millones de personas son inmigrantes no autorizados.

De estos, 59% (6.8 millones) nacieron en México, esta cifra representa 57.1%
del total de población nacida en territorio mexicano residente en la Unión
Americana, añadió.

Indicó que de cada 100 mexicanos que residen en Estados Unidos en 2011,
cinco son niños de entre 0-14 años, 24 jóvenes (15-29 años), 61 adultos (30-59
años) y 10 adultos mayores (60 o más años).

Puntualizó que hay más varones (53.3%) que mujeres (46.7%); esta
preponderancia masculina se mantiene en casi todos los grupos de edad, con
excepción de los adultos mayores, entre quienes más de la mitad son mujeres
(53.2 por ciento).

El INEGI expuso que del total de viviendas habitadas en 2011 en Estados


Unidos, en 4.7% (5.4 millones) reside al menos una persona que nació en
México.

De las 5.1 millones de viviendas en Estados Unidos, en las que se incluye al


menos a una persona que nació en México en el núcleo familiar principal, en
63.8% existe el riesgo de separación de la familia por la situación migratoria de
sus miembros, refirió.
Comentó que el gobierno mexicano está consciente de la importancia que tiene
en la actualidad la migración como un factor determinante en el desarrollo de un
país.

Por ello, ha formulado desde hace varias administraciones estrategias y líneas


de acción que buscan responder a las problemáticas sociales, económicas, de
seguridad, de derechos humanos y otras más, que son resultado de la movilidad
de las personas tanto nacionales como extranjeras dentro y fuera del territorio
nacional.

Así, señaló, el más reciente Plan Nacional de Desarrollo 2013-2018 consigna


una serie de estrategias y líneas de acción que abordan entre otros temas la
defensa de los derechos humanos de los migrantes.

Asimismo, procurarles seguridad a estos grupos y en especial a los vulnerables


que intervienen en los flujos migratorios como los niños, indígenas, mujeres, y
adultos mayores, para evitar que sean víctimas de delitos como la trata de
personas, la delincuencia y la explotación en sus variadas formas.

OBJETIVOS
En este ensayo inicialmente delimitaré el concepto de migración, mencionaré las
causas y los diversos tipos de migración que existen, con estas definiciones
estudiaré en particular el caso de la migración mexicana, también analizaré los
factores sociales que llevan a un ciudadano mexicano a emigrar así como
algunos de los problemas con los que se encuentran como la segregación social.
Respecto a la pobreza me referiré a los diferentes tipos de pobreza y su relación
con la migración desde el punto de vista económico, tanto en efectos
macroeconómicos como microeconómicos y sus resultados sociales.
HIPOTESIS

Aunque no se le reconozca como tal, México es un país de emigrantes; el más


importante del mundo en la actualidad. Si bien los flujos laborales al norte
datan de fines del siglo XIX, en las últimas décadas cobran un dinamismo sin
precedentes asociado a una modalidad de integración económica con Estados
Unidos (EU) profundamente asimétrica. La integración que tiene lugar bajo el
influjo de las reformas económicas liberalizadoras y que se profundiza con el
Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), se sustenta en
cierto dinamismo exportador que acentúa los vínculos dependientes de la
economía mexicana a la estadounidense. Los discursos liberalizadores de
factores productivos y flujos dinerarios no se correspondieron con los severos
controles al movimiento de la fuerza de trabajo. No obstante, contra lo que
pregonaban los artífices del TLCAN, los flujos migratorios se exacerbaron, se
hicieron más calificados y fueron parte de las reestructuraciones de ambas
economías.

La hipótesis central que sustenta el argumento es que la fuerza de trabajo


mexicana desempeña un papel estratégico en la reestructuración industrial
estadounidense, tanto la que labora en el interior del país como la que se
ocupa allende las fronteras. En el caso de México, la exportación de mano de
obra se convierte, paradójicamente, en soporte fundamental de los equilibrios
macroeconómicos y en pilar de la estrategia de subsistencia de vastos sectores
sociales.

LA INTEGRACIÓN ECONÓMICA: ¿FRENO O ESTÍMULO A LA MIGRACIÓN?

La migración internacional, sea forzada o voluntaria, es un fenómeno histórico


que entraña razones múltiples de índole económica, política, social y
cultural.Los movimientos poblacionales fronterizos son comunes y, en tiempos
de paz y fuera de catástrofes climáticas, tienen que ver con la demanda y
oferta de factores productivos, las estrategias de control fronterizo y las
modalidades de integración económica entre los países implicados.

En la primera etapa de expansión capitalista (1870-1913), América Latina y el


Caribe (ALC) fue receptora neta de población, en especial desde Europa;
mientras que hacia fines del siglo XX, los movimientos se invirtieron: son EU y
Europa los destinos preferidos de los nacidos en la región. En este último
periodo, los controles a los movimientos poblacionales se hicieron más
radicales; empero, y paradójicamente, adquieren mayor dinamismo. La idea de
"crisis migratoria" se expande por Europa con la supuesta amenaza de
crecientes contingentes poblacionales provenientes de los países
subdesarrollados.

Castles se pregunta: "... ¿existe una 'crisis de la migración'?... Actualmente hay


una crisis en las relaciones Norte Sur y la migración es una faceta de esta
crisis". Los movimientos poblacionales contemporáneos entre el Norte y el Sur
son expresión de esa crisis de relaciones y se deben a "...la erosión de la
soberanía del Estado-nación en la era de la globalización". Las reformas
económicas que alentaron los movimientos de capitales (flujos de inversión en
todas sus formas: productivas, financieras, comerciales y especulativas) se
opusieron tajantemente a la libre circulación de mano de obra; sin embargo, no
la controlaron. Estos flujos poblacionales coadyuvaron a emprender
reestructuraciones económicas y cambios culturales, tanto en las sociedades
de origen como en las de acogida.

Los procesos de integración llevados a cabo con especial énfasis a partir de los
años ochenta se planteaban "Contribuir al desarrollo y la expansión armoniosa
del comercio mundial y servir de catalizador para una cooperación internacional
más amplia", acotaba explícitamente el TLCAN de 1992. Aun cuando se
buscaban la creación y el fortalecimiento de los respectivos bloques
económicos, la modalidad de integración de América del Norte es muy
diferente de aquella que tuvo lugar en Europa. En la primera, más allá de los
objetivos económicos explícitos, existe una prioridad implícita de control
fronterizo y seguridad nacional de EU. En cambio, el anhelo de la segunda es
formar una Comunidad que permita el libre tránsito de factores, incluyendo
fuerza de trabajo, que adquieran la categoría de ciudadanos europeos por
encima de su nacionalidad.

La experiencia del TLCAN, que pretende ser un molde para un Acuerdo de


Libre Comercio para las Américas (ALCA), constituye un espejo de la
modalidad de integración prefigurada por EU. William Clinton, siendo
presidente de Estados Unidos, resaltaba el papel de la integración en cuanto
"prosperidad y estabilidad" que "contribuyó a la rápida recuperación de México"
y a "una transformación democrática de proyecciones históricas". No obstante,
las reformas económicas no tuvieron los efectos buscados.

La Comisión Económica para América Latina y El Caribe (CEPAL) señala que


"20 millones de latinoamericanos y caribeños viven fuera de su lugar de
nacimiento. La mitad de ellos emigró en la década de los noventa,
principalmente a EU, y en menor medida a Europa". A su vez, el flujo de
remesas migratorias da cuenta de la magnitud e importancia económica
creciente que para los países de origen reviste el fenómeno y pone en tela de
juicio la supuesta "prosperidad" de la modalidad de integración económica. Tan
contundente es el crecimiento de las remesas, que hoy resulta la fuente de
financiamiento al desarrollo por excelencia, dejando atrás las que prevalecieron
en AL durante los años ochenta y noventa: la deuda externa y la inversión
extranjera directa. De acuerdo con el proyecto Fomin-BID, el aporte de los
trabajadores migrantes latinoamericanos a sus economías de origen fue de 46
000 millones de dólares en 2004, posicionándose como el principal flujo de
remesas en el mundo seguido por los países del sur de Asia. En AL, México,
República Dominicana, El Salvador, Colombia, Brasil y Ecuador se ubican entre
los 20 países que reciben la mayor cantidad de remesas del orbe.

Guillermo Perry acota: "La inversión extranjera directa y las remesas son vitales
para ALC, ya que esta región es más sensible que otras a las perturbaciones
externas debido a su vulnerabilidad ante los reveses en los flujos de capital...
En momentos en que disminuyen las flujos de crédito del exterior, las remesas
representan una de las fuentes más estables de ingresos para la región".
MARCO TEORICO

1 Desde distintas perspectivas puede verse: Pedro Aspe, El camino mexicano


de la transformación económica, México, Fondo de Cultura Económica,
1993; [ Links ] Nora Lustig, Mexico: The Remaking of an Economy,
Washington, The Brookings Institution, 1992; [ Links ] Héctor Guillén, La
contrarrevolución neoliberal, México, Era, 1997; [ Links ] José C.
Valenzuela Feijóo, Crítica del modelo neoliberal: el FMI y el cambio estructural,
México, UNAM, 1991. [ Links ]

2 Comisión Económica para América Latina (CEPAL), Globalización y


desarrollo, Santiago de Chile, cEPAL/ONU, 2002. [ Links ]

3 Stephen Castles, "La política internacional de la migración


forzada", Migración y Desarrollo, núm. 1, Zacatecas, Doctorado en Estudios del
Desarrollo, UAZ, octubre de 2003, pp. 74-90. [ Links ]

4 Andrés Solomino, "Globalización y migración internacional: la experiencia


latinoamericana", Revista de la CEPAL, núm. 80, pp. 55-72, agosto de 2003,
Santiago de Chile, CEPAL, p. 1. [ Links ]

5 Myron Weiner, The Global Migration Crisis: Challenges to Status and Human
Rights, Nueva York, Harper Collins, 1995. [ Links ]

6 Castles, 2003, op. cit., p. 89.

7 Ibid., p. 89.

8 Tratado de Libre Comercio de América del Norte, Texto Oficial TLCAN,


México, Miguel Ángel Porrúa, 1994. [ Links ]

9 Francisco Alba y Paula Leite, "Políticas migratorias después del 11 de


septiembre: los casos del TLC y la UE", ponencia presentada en el Primer
Coloquio Internacional sobre Migración y Desarrollo, Zacatecas, 2003.
Disponible en: http://www.migracionydesarrollo.org (acceso el
14/04/2004). [ Links ]

10 William Clinton, "Carta al Congreso de los Estados Unidos", julio de 1997,


citado por Maurice Schiff y L. Alan Winters, Integración regional y desarrollo,
Colombia, Banco Mundial/Alfaomega Colombiana, p. 8. También disponible
en: http://www.WorldBank.org [ Links ]

11 CEPAL, "Explosivo aumento de remesas que emigrantes latinoamericanos


envían a sus familias de origen", Notas de la CEPAL, núm. 33, Santiago de
Chile, CEPAL/ONU, pp. 1-3. [ Links ]

12 Fondo Multilateral de Inversiones (Fomin) del BID, "Remesas a América


Latina" Comunicado de Prensa, Washington, BID, marzo de 2005. Disponible
en: <http://www.iadb.org> (acceso el 13/03/2005). [ Links ]

13 Guillermo Perry, "Flujos mundiales de financiamiento para el desarrollo 2003


(Global Development Finance 2003)", presentación del tr1 Desde distintas
perspectivas puede verse: Pedro Aspe, El camino mexicano de la
transformación económica, México, Fondo de Cultura Económica, 1993; [
Links ] Nora Lustig, Mexico: The Remaking of an Economy, Washington, The
Brookings Institution, 1992; [ Links ] Héctor Guillén, La contrarrevolución
neoliberal, México, Era, 1997; [ Links ] José C. Valenzuela Feijóo, Crítica

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