La Batalla de Armagedon J La Última y Gran Guerra

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“LA BATALLA DE ARMAGEDÓN, LA ÚLTIMA Y GRAN

GUERRA”
“la guerra de Armagedón, el final de la tribulación y el retorno de Jesús a
la tierra”
“He aquí, el día de Jehová viene, y en medio de ti serán repartidos tus despojos.
Porque yo reuniré a todas las naciones para combatir contra Jerusalén; y la
ciudad será tomada, y serán saqueadas las casas, y violadas las mujeres; y la
mitad de la ciudad irá en cautiverio, más el resto del pueblo no será cortado de
la ciudad. Después saldrá Jehová y peleará con aquellas naciones, como peleó
en el día de la batalla. Y se afirmarán sus pies en aquel día sobre el monte de
los Olivos, que está en frente de Jerusalén al oriente; y el monte de los Olivos
se partirá por en medio, hacia el oriente y hacia el occidente, haciendo un valle
muy grande; y la mitad del monte se apartará hacia el norte, y la otra mitad
hacia el sur. Y huiréis al valle de los montes, porque el valle de los montes
llegará hasta Azal; huiréis de la manera que huisteis por causa del terremoto
en los días de Uzías rey de Judá; y vendrá Jehová mi Dios, y con él todos los
santos” Zacarías 14:1-5.
Introducción
Libro que pertenece a los profetas menores escrito entre los años 520-470 a.C.
Zacarías no solo fue un gran profeta sino también un sacerdote que sirvió a
Jerusalén después del exilio, contemporáneo del profeta Hageo. El tema central
es la terminación del templo después del exilio y las gloriosas promesas
mesiánicas. El libro esta dividido en dos partes; la primera que se centra en la
reconstrucción del templo en tierra santa, Dios usa a este santo varón para
animar a los judíos a terminar la obra y construir el templo de Jerusalén
(Llamado El segundo templo) y para confirmarles que Dios mismo estaba en el
asunto, y que el les daría todos los medios para lograr la restauración del templo.
La segunda parte del libro de Zacarías contiene extraordinarias y llamativas
profecías apocalípticas para los tiempos finales, que incluye grandes promesas
de salvación mesiánicas, anunciando la venida del Mesías, su sufrimiento y
repudio por parte del pueblo de Dios, enfocando el odio antisemita del mundo
gentil, agudizado en los tiempos postreros, y revelando la salvación poderosa
por parte del Mesías en favor de los judíos, reinando como rey sobre Jerusalén,
la capital del milenio, y sobre toda la tierra durante la teocracia.
A. La extraordinaria profecía del capítulo 14

El profeta menciona “el día de Jehová” que es un tiempo de juicio y


restauración, que se inicia con el rapto de la iglesia continua con el terrible
periodo de siete años llamado la “gran tribulación”, donde el anticristo reinará
con poder y gran furor sobre la tierra (Daniel 7:24-25, 2ª. Tesalonicenses 2:8-
9, Apocalipsis 13:4) y culminará con el retorno de Jesús en gloria junto a sus
santos para reinar 1.000 años sobre la tierra.
En los días de la tribulación reinará la bestia (Apocalipsis 13:1), pero junto a la
bestia (el anticristo), estará confabulado con su imperio, un gran y poderoso
líder religioso conocido en las escrituras como el falso profeta o la 2ª. Bestia
(Apocalipsis 13:11, 19:20), el cual liderará la más unida y poderosa religión
que el mundo haya conocido; la Gran Ramera Babilonia que será la religión
oficial del gobierno del anticristo (Apocalipsis 17). El Espíritu del Señor
muestra a Zacarías que en los días terribles de la tribulación, que durará siete
años (llamada también “angustia de Jacob”), se unirán todas las naciones aliadas
al anticristo para invadir Jerusalén y tomar la ciudad, morirán miles de judíos y
un remante muy pequeño escapará al desierto para cumplir la profecía de
Apocalipsis 12 “la mujer que huye al desierto”.
“Y vi salir de la boca del dragón, y de la boca de la bestia, y de la boca del
falso profeta, tres espíritus inmundos a manera de ranas; pues son espíritus de
demonios, que hacen señales, y van a los reyes de la tierra en todo el mundo,
para reunirlos a la batalla de aquel gran día del Dios Todopoderoso. He aquí,
yo vengo como ladrón. Bienaventurado el que vela, y guarda sus ropas, para
que no ande desnudo, y vean su vergüenza. Y los reunió en el lugar que en
hebreo se llama Armagedón” Apocalipsis 16:13-16.
Los judíos enfrentarán esta sin igual batalla en un antiguo valle llamado
Armagedón en tierra santa, satanás y sus demonios juntarán muchas naciones
dirigidas por el anticristo para hacer guerra contra Israel (Salmo 83:1-5). Esta
guerra es la gran y última guerra, la batalla de las batallas, llamada “la guerra
de Armagedón”. Armagedón está localizada en la parte central del norte de la
tierra santa (“valle de megido” o más bien “valle del corta cuello”), allí al final
del periodo de la tribulación se producirá esta terrible y destructiva guerra, será
el centro de “La batalla de aquel gran día del Dios Todopoderoso”. Según lo
descrito por Juan en el Apocalipsis, el diablo usando al anticristo, tratará como
lo ha pretendido siempre en forma infructuosa, destruir totalmente a los judíos
de la faz de la tierra. Será entonces que Jesús mismo cumplirá esta gran profecía
y aparecerá del mismo cielo en lo que se conoce como su “segunda venida en
gloria” al mismo lugar de donde partió al cielo hace más de 2.000 años atrás
(Lucas 24:50-51, Hechos 1:9-12), volverá como dice el evangelio; “ Porque
como el relámpago que sale del oriente y se muestra hasta el occidente, así será
también la venida del Hijo del Hombre” Mateo 24:27, “ Entonces verán al Commented [AT1]:

Hijo del hombre, que vendrá en las nubes con poder y gran gloria” Marcos
13:26, destruirá totalmente al anticristo y su satánico imperio, salvando al
amado pueblo de Israel que hasta ese entonces lo había rechazado (2ª.
Tesalonicenses 2:8, Apocalipsis 19:11-16) y dando por finalizado el periodo
de la gran tribulación. Se cumplirá al pie de la letra la profecía de Juan; “Y vi
a la bestia, a los reyes de la tierra y a sus ejércitos, reunidos para guerrear
contra el que montaba el caballo, y contra su ejército. Y la bestia fue apresada,
y con ella el falso profeta que había hecho delante de ella las señales con las
cuales había engañado a los que recibieron la marca de la bestia, y habían
adorado su imagen. Estos dos fueron lanzados vivos dentro de un lago de fuego
que arde con azufre” Apocalipsis 19:19-20. Será el gran momento de salvación
y conversión para los Judíos que por fin reconocerán que Jesús es su Mesías,
pues la profecía dice que mirarán al que traspasaron Apocalipsis 1:7, Pablo
mencionó la conversión de Israel para los últimos tiempos; “y luego todo Israel
será salvo, como está escrito: Vendrá de Sion el Libertador, Que apartará de
Jacob la impiedad. Y este será mi pacto con ellos, Cuando yo quite sus
pecados” Romanos 11:26-27.
B. Jesucristo pisa el monte de los Olivos y establece su glorioso reino

Jesús pisará el monte de los olivos que está al frente de Jerusalén, con tal
potencia divina que el monte se partirá por la mitad, una mitad queda hacia el
norte y la otra hacia el sur, y se formará una gran valle de oriente a occidente,
será una día singular y extraordinario, la venida de Cristo y el establecimiento
de su poderoso reino será precedido por un gigantesco terremoto y el Señor
establecerá su esperado reino en la tierra; “Cuando el Hijo del Hombre venga
en su gloria, y todos los santos ángeles con él, entonces se sentará en su trono
de gloria” Mateo 25:31. El Hijo de Dios luego de este evento se sentará en el
trono de Jerusalén para reinar junto a su amada iglesia sobre toda la tierra
(Salmo 2, Daniel 2:44, Zacarías 14:5, Lucas 1:31-33, Apocalipsis 20:4) y dar
inicio a la gloriosa era del milenio llamado también el reino justo del Mesías.
C. Una extraordinaria profecía que está cercana a cumplirse

Los primeros versos de este escatológico capítulo 14 del libro de Zacarías,


anuncian en detalles los extraordinarios acontecimientos que sucederán en los
últimos días del periodo de la gran tribulación, la destructiva 3ª guerra mundial
centrada en el valle de Armagedón, la victoria poderosa y definitiva de Dios
sobre el anticristo y su satánico gobierno, y por último la impactante venida de
Jesús en gloria con sus santos para reinar sobre la tierra por mil años.
¡Las señales se han cumplido! Jesucristo el Señor está a las puertas! Y en
cualquier momento viene por su santa iglesia; “El que da testimonio de estas
cosas dice: Ciertamente vengo en breve. Amén; sí, ven, Señor Jesús. La gracia
de nuestro Señor Jesucristo sea con todos vosotros. Amén” Apocalipsis 22:20-
21.

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