La Biblia es la Palabra de Dios puesta por escrito a través de la inspiración del Espíritu Santo. Fue escrita originalmente en hebreo, arameo y griego por autores humanos entre los siglos XV a. C. y I d. C. pero bajo la guía de Dios. Se formó a lo largo de casi 2000 años recogiendo la historia del pueblo de Israel y la vida y enseñanzas de Jesucristo.
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La Biblia es la Palabra de Dios puesta por escrito a través de la inspiración del Espíritu Santo. Fue escrita originalmente en hebreo, arameo y griego por autores humanos entre los siglos XV a. C. y I d. C. pero bajo la guía de Dios. Se formó a lo largo de casi 2000 años recogiendo la historia del pueblo de Israel y la vida y enseñanzas de Jesucristo.
La Biblia es la Palabra de Dios puesta por escrito a través de la inspiración del Espíritu Santo. Fue escrita originalmente en hebreo, arameo y griego por autores humanos entre los siglos XV a. C. y I d. C. pero bajo la guía de Dios. Se formó a lo largo de casi 2000 años recogiendo la historia del pueblo de Israel y la vida y enseñanzas de Jesucristo.
La Biblia es la Palabra de Dios puesta por escrito a través de la inspiración del Espíritu Santo. Fue escrita originalmente en hebreo, arameo y griego por autores humanos entre los siglos XV a. C. y I d. C. pero bajo la guía de Dios. Se formó a lo largo de casi 2000 años recogiendo la historia del pueblo de Israel y la vida y enseñanzas de Jesucristo.
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LA BIBLIA: LA PALABRA DE DIOS PUESTA POR ESCRITO
LA PALABRA DE DIOS SE ESCRIBE: Quiso Dios que su Palabra, grabada ya en el
corazón y en la vida de su pueblo, quedara escrita como testimonio de su amor, es decir expresión escrita de su voluntad.
¿DE DÓNDE VIENE LA PALABRA BIBLIA?
Del griego BIBLION, que significa libros. La Biblia es, como todos sabemos, un conjunto de libros, una verdadera biblioteca.
¿QUÉ ES LA SAGRADA ESCRITURA?
La Sagrada Escritura es: LA PALABRA DE DIOS PUESTA POR ESCRITO bajo la inspiración del Espíritu Santo. Al conjunto de los libros inspirados los llamamos Biblia.
¿QUÉ ES LA INSPIRACIÓN BÍBLICA?
La inspiración bíblica es una gracia específica que concede el Espíritu Santo, por la cual el escritor sagrado es movido a poner por escrito lo que Dios quiere comunicar a los hombres. (2 Pe 1, 21)
¿QUIÉN ES EL AUTOR DE LA BIBLIA?
El autor principal de la Biblia es DIOS. El autor secundario es el ESCRITOR SAGRADO O HAGIÓGRAFO. Por ejemplo, el profeta Isaías, San Mateo, San Pablo, etc.
¿CUÁNDO SE ESCRIBIÓ LA BIBLIA?
Los libros del AT fueron escritos entre el S. XV y II antes de Cristo. Los libros del NT fueron escritos a mediados del siglo I
MATERIALES DE LOS TEXTO ORIGINALES
Al principio se escribieron en papiro (planta que abunda en Egipto), y en pergamino (piel de cabrito que permite escribir por las dos caras). Originalmente la Biblia estaba en rollos, es decir, largas fajas de papiro o de piel unidas en los extremos a dos bastones en tomo a uno de los cuales giraba.
¿CUÁLES FUERON LOS IDIOMAS ORIGINALES DE LA BIBLIA?
Tres son las lenguas originales de la Biblia: HEBREO, ARAMEO y GRIEGO. En hebreo y arameo se escribieron: la mayor parte del AT. En griego se escribió: el NT, excepto el original de San Mateo.
¿CÓMO FUE EL PROCESO DE FORMACIÓN DE LA BIBLIA?
La Biblia recoge casi 2000 años de historia. Comienza con Abraham (1900 a C.), recoge toda la historia del pueblo de Israel, narra el nacimiento y vida de Jesús y termina con la vida de los primeros cristianos (s. I d.C.). En el proceso de formación distinguimos varias etapas: 1° Se produce un hecho histórico. 2° Sobre ese acontecimiento se reflexiona. Las personas religiosas lo hacen a partir de sus creencias y lo relacionan con Dios. 3° Esta reflexión se transmite oralmente. 4° Llega un momento en que estas tradiciones orales se ponen por escrito. 5° Todos los libros escritos se reúnen hasta formar la Biblia.
¡HAY QUE LEER LA BIBLIA!
La Iglesia nos recomienda a todos los católicos leer todos los días la Biblia, la palabra de Dios, pues esta lectura será el alimento para nuestra alma, nos ayudará a conocer lo que Dios quiere decirnos y lo que Jesucristo nos enseñó, incrementará nuestra fe, nos hará fuertes espiritualmente, capaces de vivir el mandamiento del amor a Dios y al prójimo.