Vivienda Bioclimática en Tenerife
Vivienda Bioclimática en Tenerife
Vivienda Bioclimática en Tenerife
Arquitectos
Ruiz Larrea y Asociados
Ubicación
Autopista del Sur, 38619 Granadilla de Abona, Spain
Área
290.0 m2
Año Proyecto
2003
Fotografías
Cortesía de Ruiz Larrea y Asociados
+18
Ubicación
Instituto Tecnológico y de Energías Renovables S.A. - Pol. Ind. de Granadilla, s/n. Granadilla de
Abona, Tenerife, España
Instalaciones
3i Ingenieros
Promotor
Cabildo Insular
Construcción
CORSAN-CORVIAM S.A.
Descripción de los arquitectos. Los datos más relevantes de sostenibilidad tienen que ver con el
diseño de elementos pasivos proyectados.
La óptima orientación, la utilización de materiales del entorno y de nulo coste energético en origen:
Piedra Tosca volcánica, madera de riga reciclada, vidrio, hormigón abujardado y piedras basálticas
en jardinerías, aislamientos, impermeabilizaciones, etc.
Formas optimas para defenderse de una alta y constante presión del viento - el círculo –
optimización de orientaciones y materiales locales así como sistemas de inspiración conceptual en
las relaciones espaciales, compositivas y paisajistas de la pieza.
Unos muros estabilizados de doble hoja de piedra Tosca del lugar se apoyan directamente en el
terreno permitiendo que la cámara de aire interior funcione como distribuidor térmico del aire
fresco del terreno al interior mediante el succionamiento superior en cabeza por efecto venturi que
creamos al sobrecalentar por radiación esta última.
Cubierta de losa de hormigón con capa vegetal y plantas tapizantes autóctonas, que se mantiene
húmeda con sistema de goteo, favoreciendo la evaporización de la misma y por tanto garantizando
la temperatura constante de la masa del hormigón evitando el efecto de respuesta radiante al
interior de las masas de mucha inercia expuestos al soleamiento excesivo.
Forjado de madera con cámara directa ventilada sobre el suelo excavado y humidificado igualmente
por goteo.
Caja biotérmica con incorporación en un kit de diseño con voluntad de ser industrializado de un
paquete de deposito acumulador de 2000 litros de agua de lluvia para utilización de aguas grises.
Circuito de instalación de paneles de ACS, equipo de baterías y alternadores para equipo de paneles
fotovoltaicos incorporados a las marquesinas plegables del porche al sur (no se han instalado por
utilizar la vivienda la energía de los molinos eólicos del parque).
Puzolanas volcánicas como material aislante y de recubrimiento de las cubiertas higrométricas.
Madera tratada de morera canaria de tala controlada, plantaciones autóctonas en el espacio de la
geria ( Tabaibas, Cardones, etc.)
En realidad la vivienda es el espacio flexible y transformable que existe entre una huella geométrica
muy contundente en el terreno y los sistemas pasivos que intentan potenciar la renovación de aire,
dirigir y controlar las brisas frescas del mar, garantizar sombra fresca para evitar acumulación
térmica de los materiales y en realidad reproducir de una manera tremendamente natural las
condiciones de confort que nos suele proporcionar la naturaleza de un lugar cuando la sabemos
utilizar con sensibilidad.
VENTAJAS:
La autosuficiencia energética es una gran ventaja, sin duda, pues satisfacen el consumo propio e
incluso permiten generar un dinero si se tiene la posibilidad e infraestructura necesaria para su
venta. Es decir, en este caso sería necesario aprovechar las energías renovables, ya sea la eólica,
geotermal o la solar (turbinas, paneles fotovoltaicos en la fachada, etc.), dentro de lo que se conoce
como sostenibilidad activa.
Además de esa producción de energía limpia, el empleo de materiales ecológicos y otros recursos
de la misma arquitectura como su ubicación, distribución, diseño de grandes ventanales para
aprovechar la luz solar, cristales aislantes y demás dan como resultado una sostenibilidad pasiva.
Por una parte, se trata de un aspecto positivo por eficiencia y habitabilidad de la vivienda, pero
también es cierto que el coste inicial es elevado, por lo que la ventaja la encontramos con una
amortización que al cabo de unos años puede suponer un importante ahorro energético.
Todos estos aspectos nos ayudan a optimizar el consumo energético aprovechando esa doble
sostenibilidad, activa y pasiva, que a su vez deben intentar suponer un mínimo impacto paisajístico.
Lograrlo, por lo tanto, supone otra ventaja con respecto a las construcciones visualmente invasivas.
El objetivo de las viviendas bioclimáticas es conseguir una doble ventaja: ahorrar energía de forma
ecológica (las facturas serán mucho más reducidas e incluso se consigue la autosuficiencia y se
contamina menos) sin que ello suponga una menor calidad de vida, sino todo lo contrario.
DESVENTAJAS:
Aunque acabes amortizando la inversión, lo cierto es que son muy caras o, si se quiere, de coste más
elevado que las casas tradicionales. Al menos, así es actualmente, si bien en el futuro podría
popularizarse este tipo de construcciones y bajar sus precios. Hoy por hoy todavía se trata de un
mercado nuevo de carácter exclusivo.
Esta misma novedad es la que ha hace que sea difícil encontrar tanto los materiales como los
técnicos que entiendan al respecto. De hecho, los métodos de construcción sostenible tienen un
lado creativo e implican una serie de conocimientos que son ajenos a muchos arquitectos.
Por lo tanto, además del presupuesto, encontrar a los profesionales adecuados y el material idóneo
puede ser toda una odisea, no siempre con final feliz.
Y, por supuesto, por muy ideales que nos parezcan estas casas, no están hechas para todo el mundo
o, lo que es lo mismo, no todo el mundo quiere o puede adaptarse a ellas.