Importancia de La Lactancia Materna
Importancia de La Lactancia Materna
Importancia de La Lactancia Materna
Alimentación en la lactancia
La alimentación de la mamá durante la lactancia tiene algunos secretos para
que todo funcione a la perfección, tanto para la mujer como para el bebé. Es
importante saber que lo que comemos afecta la composición de la leche
materna.
Cómo se produce la leche materna
La buena producción de leche materna comienza dentro de las 48 a 96 horas
siguientes al parto, cuando suben los niveles de una hormona llamada prolactina.
A medida que el bebé succiona el pezón, se produce una estimulación de la
glándula pituitaria y ésta segrega oxitocina y prolactina, disparando el proceso de
“preparación” de este mágico alimento natural.
Conocer algunos datos sobre la composición de la leche materna, ayuda a entender
por qué:
Grasas: en cada 100 mililitros de leche hay 3,5 gramos de grasa, aunque la
cantidad que recibe el lactante varía a lo largo de la toma. La grasa se
concentra especialmente al final de la toma, por lo que la leche presenta una
textura más cremosa que al inicio. Las grasas de la leche materna son
importantes para el desarrollo neurológico del niño.
Carbohidratos: el principal es la lactosa, cuya presencia es más alta que en
otro tipo de leches y sirve como fuente de energía. Otros hidratos de carbono
presentes en la leche materna son los oligosacáridos, importantes para
combatir infecciones.
Proteínas: la leche materna contiene una menor concentración de proteínas
que la leche normal, lo cual la hace más adecuada para los lactantes.
Vitaminas y minerales: la leche materna ofrece la cantidad adecuada de la
mayoría de las vitaminas, a excepción de la vitamina D. Para corregir esa
carencia, se debe exponer al bebé a la luz del sol para que la genere de
manera endógena, o si no, mediante suplementos vitamínicos.
Componentes anti-infecciosos: entre ellos se encuentran las
inmunoglobulinas, los glóbulos blancos, las proteínas del suero o los
oligosacáridos.
Componentes bioactivos: Algunos de ellos son la lipasa, que ayuda a la
digestión de la grasa en el intestino delgado; o el factor epidérmico de
crecimiento, que estimula la maduración de las células de la mucosa del
intestino para mejorar la absorción y digestión de los nutrientes.
Además, muchas mujeres producen más leche que la que el niño toma, sobre todo
los primeros meses, y extraerla es clave para para evitar problemas como la
ingurgitación en el bebé o la mastitis en la madre.