El Movimiento Del Segundo Advenimiento

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UNIDAD I: PRIMERA PARTE

El movimiento del Segundo Advenimiento

Introducción
¿Por qué estudiar historia de la iglesia adventista del séptimo día?
¿Qué es la historia?
No es simplemente la acumulación fiel de datos, una crónica, o un relato; sino la
interpretación científica de esos datos. Los datos ocurrieron en el pasado, pero la
interpretación es más bien ocurre en el presente.
Podemos caer en errores:
 Enseñar datos.
 Interpretar la historia parcialmente y hacer mitad historia y mitad mito.

La base de la Sagradas Escrituras la encontramos en: 1 Cor. 10:1-13.


 Es nuestra historia: Identifíquese con las experiencias de nuestros
antepasados espirituales (1-4).
 El propósito de estudiar la historia de la iglesia: Para nuestra instrucción
(vv. 6, 11)
 Aprenda las lecciones de sus victorias y de sus fracasos.
 Evite repetir sus errores (5-10).
 La promesa de historia de la iglesia: “Dios es fiel” y dará esos que confían
totalmente en Él (vv. 12-13; Compare 2 Crónicas 16:9).

El objetivo.
 Todo país usa la historia para socializar y crear ciudadanos que van a ser
ordenados, es decir para que sean gente de bien y que van a contribuir al
desarrollo de la sociedad.
 Además, mediante la historia, toda organización explica sus orígenes, y la
esencia y el propósito de su existir.
 Nuestra Iglesia Adventista del Séptimo Día también tiene su historia.
Mediante la historia, que ha sido narrada por muchos, podemos conocer sus
raíces y la manera cómo Dios ha conducido a este movimiento a través de
sus 163 años de peregrinar en este mundo.
 Pero también la historia cumple un fin pedagógico, trasmite enseñanzas a
los que están apercibidos de la misma. Se sacan lecciones de los aciertos,
así como de los desaciertos cometidos por los mortales sujetos de la
historia.
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Elena White en una carta al Presidente de la Asociación General A.G. Daniells
expresó:

“Una y otra vez me ha sido mostrado que las experiencias pasadas de


las personas de Dios no son para ser contados como hechos muertos.
No debemos tratar el registro de estas experiencias como trataríamos
el almanaque de un año pasado i.e. fuera de lugar e irrelevante. El
registro debe ser recordado, pues la historia se repetirá a sí misma”.

“Como he participado en todo paso de avance hasta nuestra condición


presente, al repasar la historia pasada puedo decir: "¡Alabado sea Dios!
"Al verlo que el Señor ha hecho, me lleno de admiración y de confianza
en Cristo como director. No tenemos nada que temer del futuro, a
menos que olvidemos la manera en que el Señor nos ha conducido, y lo
que nos ha enseñado en nuestra historia pasada”

Consideraciones sobre Hebreos 1:1-3.


Profetismo bíblico y Don profético.
Idea básica: Dios habló. Lo ha hecho muchas veces y de muchas maneras en el
pasado, ahora (presente), y lo hará de seguro en el futuro. La cumbre de la
revelación, según Pablo, es Jesucristo.
“Muchas veces”
 La idea básica es “en porciones”, en “fragmentos”.
 La realidad de la revelación progresiva, aumentativa.
 Dios no ha revelado todo su plan de una vez, sino que lo ha hecho de
manera tal que no abrume al ser humano, esto es, según el momento y la
necesidad histórica de su pueblo.
 Diferentes hombres: Moisés, Jeremías, Ezequiel, Isaías, Amós.
“Muchas maneras”
 Las idea básica es: “Cuando quiere”, “por medio de quien quiere”, “lo que
quiere”, la manera como él quiera.
 No existe un método fijo, único, determinado, constante por parte del
Espíritu Santo.
 Personalmente, cara a cara. (Núm. 12:8)
 Voces desde el cielo. (Mat. 3:17; Juan 12:28)
 Sus actos en la historia. (Rom. 15:4; 1 Cor. 10:11)
 Sus obras creadas. (Rom. 1:20; Sal. 19:1; Hech. 14:17)
 Elementos objetivos. (Jer. 18.)
 Ángeles. (Gén. 19:15; Mat. 1:18-25)
 Espíritu de Profecía. (Isa. 30:21; Mat 10:19, 20)
 Profetas. (Amós 3:7; 2 Crón. 36:16; Núm. 12:6; Heb. 1:1-3)
 Visiones- profeta en estado de vigilia. (Núm. 12:6)
 Urím y Turín. (Exo 27:20)
 Palabra escrita: prosa, poesía, parábolas, salmos, leyes, inspiración
musical (Asaf, Jedutum, Hemán, 1 Cro. 25, David)
 Jesús, la suprema revelación (Heb 1:1-3; Juan 14:9)
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El movimiento Millerita (1830–1845)

I. Marco histórico del movimiento del Segundo Advenimiento.

El movimiento Adventista no ha sido algo que nació alrededor de un hombre


eminente que consiguió atraer a su alrededor numerosos grupos de seguidores
que dependieron de la capacidad de su dirigente para formarse, unificarse, y
propagarse.

Aunque muchos nombres notables de hombres y mujeres piadosos y capacitados


figuran en la historia del movimiento Adventista, la expansión de este movimiento
no se debe a que está relacionado con ellos, sino que la notabilidad de ellos
sobresale porque han estado relacionados con el movimiento adventista.

La Biblia nos enseña en Tito 2:13, que existe una esperanza bienaventurada, y
define claramente en qué consiste esa esperanza: la manifestación gloriosa del
gran Dios y Salvador Jesucristo. Tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento
se hace énfasis en la promesa del regreso del Señor en gloria y majestad. Fue la
nota tónica de los mensajes de Cristo y los apóstoles. Y a través de los siglos
constituyó la esperanza de la Iglesia Cristiana.

Llegó un momento histórico en las marcas de las profecías: el año 1798. Ese año
era un punto específico en la marcha del tiempo:
 En él terminaba el período de 1260 años de supremacía papal.
 En el comenzaba el tiempo del fin.

Una serie de eventos habían llamado la atención de los estudiosos de las profecías
de la Biblia, especialmente las relacionadas con la segunda venida de Cristo:
 El terremoto de Lisboa (1 Noviembre de 1755).
 El día oscuro (19 de Mayo de 1780).
 La cautividad del papa por los republicanos franceses (1798), el Papa Pio VI
es apresado por el General Berthier de Francia.
 Caída de la estrellas (meteoros) el 13 de Noviembre de 1833. (Lluvia de las
Leónidas).
 La expansión misionera en los países paganos.
 La revolución industrial y la facilidad en los medios de comunicación.
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Era indudable que había llegado una etapa nueva para la humanidad. Se notaba
un reavivamiento en la interpretación de las profecías de la Biblia. Para hacer
frente a la amplia demanda de Biblia en los principales idiomas de Europa, se
fundaron Sociedad Bíblicas que difundieron el Libro Santo en muchos idiomas de
África y Asia:
 1804. Sociedad Británica y  1816. Americana.
Extranjera / Sociedad Bíblica  1818. Francesa.
Suiza.  1819. Griega.
 1809. Sociedad Bíblica Sueca.  1826. Rusa.
 1814. Alemana.

El gran movimiento misionero mundial.


A fines el siglo XVII Dios despertó en un ministro Bautista inglés el deseo de ir a
los paganos y anunciarles a Cristo. Ese fue Guillermo Carey, quien en 1773 llegó a
la India. A Guillermo Carey se le conoce como el padre de las misiones modernas.
Siguiendo su ejemplo, otros se alistaron y fueron a países lejanos:
 Adoniram Hudson  Birmania
 Roberto Morrison  China
 Roberto Moffat  Sudáfrica
 David Livingston  África central
 John Patton  Polinesia del Sur

Para ayudar a los misioneros, se establecieron las Sociedades Misioneras que


proveían fondos para sostenerlos en países lejanos.

Los misioneros así equipados, apoyados y sostenidos, afrontaron con valor y


denuedo toda clase de vicisitudes. No les importó las candentes arenas del
desierto, ni los mosquitos en las regiones tropicales, ni los caníbales en las islas
Sur. Sufrieron cárceles, torturas y muerte, pero no se atemorizaron y salieron
victoriosos.

Europa religiosa.
Podríamos decir que la iglesia europea, aún los movimientos protestantes, no eran
el medio propicio para el desarrollo de un movimiento religioso como lo sería el
movimiento adventista.
La iglesia estaba infestada por la tradición. Había una iglesia unida al estado que
era dominante. La densidad de la población ofrecía pocas oportunidades a los
inconformes el escapar de la persecución. Así que se necesitaba buscar una salida
a un lugar dónde se pudiera con libertad pensar y adorar a Dios.
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Los padres peregrinos: La situación en Inglaterra con Jaime I.
Los separatistas o heterodoxos huyen a Holanda con su pastor John Robinson,
viven allí 12 años y emigran a América (6 de sept.) y llegan en noviembre de
1620. Hacía mucho frío y antes de desembarcar firmaron un pacto de libertad. El
25 de diciembre empezaron a construir su primera casa, pero la lluvia fría y el
viento se los impide. El tardarse en construir una casa les costó caro, pues se
enfermaron, sufrieron hambre, ya que su ración diaria de comida eran cinco
granos de maíz y cuando llegó la primavera casi la mitad de los que habían
desembarcado habían muerto.
Este remanente creía en la libertad religiosa, pues prometieron fundar un estado
sin rey, y una Iglesia sin papa.

Los puritanos.
En Inglaterra existían unos que se hacían llamar Puritanos, los cuales fueron
perseguidos por la iglesia oficial y estos también decidieron emigrar a América.
Llegaron, pero no creían en la libertad religiosa como los primeros que llegaron.
Ellos fundan Bay Colony, y forzaban a los habitantes a aceptar su religión.

Roger Williams llega a América en 1631 junto con su esposa, asentándose en


Massachusetts, donde lo reciben bien, pero como tenía ideas muy radicales sobre
la libertad, luego le declaran persecución, y huyendo fue a refugiarse con los
padres peregrinos. Los ideales de Roger Williams y de los primeros colonos
ingleses fueron consolidados más tarde cuando las trece colonias, se
independizaron de Inglaterra.
La primera enmienda de la Constitución de los Estados Unidos concede a cada
ciudadano la libertad de practicar la religión de su elección. El Estado no legislará -
dice el texto- en manera alguna sobre la facultad de cada individuo de practicar
libremente su credo. Se garantiza el pleno ejercicio de la libertad de conciencia.

Estados Unidos de Norteamérica: Una nueva nación.


La constitución y la declaratoria de Derechos civiles, ratificada 1789, garantizaban
algunas libertades que eran claves:
 Separación entre la iglesia y el estado.
 Todas las denominaciones religiosas son iguales delante de la ley.
 El efecto de estos dos puntos fue que las iglesias se vieron forzadas a
competir por prosélitos.
 Debido a que era un país con un bajo índice de población, eso proveía
refugio y puerta de salida para los que eran inconformes en algún punto.
 La mayoría de los ciudadanos eran culturalmente favorables al cristianismo,
pero no pertenecían a ninguna iglesia organizada.
Todo esto proveyó un campo fértil para el levantamiento de una nueva
denominación cristiana.
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II. Heraldos del Segundo Advenimiento. Movimiento mundial.
En muchos países comenzó en forma simultánea un movimiento de predicación
basado en las profecías acerca del segundo advenimiento de Cristo.

 Manuel Lacunza, un sacerdote jesuita chileno, publicó un libro titulado: El


retorno del Mesías en Gloria y Majestad con el seudónimo de Rabí Juan Josafat
Ben-Ezra. (1801).

 Luis Gaussen. El mensaje del primer ángel fue proclamado en Francia y


Suiza de Génova, Suiza. Él se interesó particularmente en estudiar las profecías
de Daniel cuando entró al ministerio y declaró que eran la clave de la historia
mundial. Por medio del estudio combinado de la historia y las profecías, quedó
convencido de que el fin del mundo estaba cerca.

 Johann Albrecht Bengel, ministro luterano, predicó la segunda venida en


Alemania antes de Wolff o Miller. El creía en la libertad religiosa y preparo a
Jóvenes para el ministerio. Pero su gran influencia en cuanto a la segunda
venida la ejerció por medio de sus libros que fueron leídos hasta en Rusia.

 H. Heintzpeter. En Holanda, H. Heintzpeter, director del museo real, tuvo


un sueño en que vio que la venida de Cristo estaba cerca. Ello contó
gozosamente a sus amigos usando varios textos bíblicos para probar su
afirmación. Entre los años 1830 y 1842, escribió varios folletos sobre el tema
"Un Gran Suceso Mundial", en los cuales explicaba en forma bastante
independiente la luz que había recibido. El conocimiento de las doctrinas de
Guillermo Miller no le llegó hasta doce años después de haber empezado a
publicar esos folletos.

En Inglaterra se formó un grupo para estudiar las profecías. En 1826 se celebró la


primera Conferencia Profética en Albury Park, el propósito era comparar las
conclusiones a que habían llegado un grupo de notables heraldos del segundo
advenimiento. Dirigía la reunión Hugo Mc-Neile. Asistían Henry Drumond, dueño
de la casa, José Wolf, que se distinguió predicando el segundo advenimiento a
muchos países del Oriente, Daniel Wilson, que fue después obispo anglicano de
la India, y el principal de los predicadores del advenimiento, Edward Irving.

 José Wolf. Al mismo tiempo que en Estados Unidos Guillermo Miller


estudiaba y sentía que debía predicar el mensaje del primer ángel, Wolff estaba
empezando a proclamarlo en Europa. De 1821 a 1845 Wolff viajo por África,
Siria, Persia, India, la isla de Santa helena y los Estado Unidos, predicó en
Nueva York y muchas otras grandes ciudades.
Considerado como uno de los estudiantes de idiomas y misionero ambulante
más notable del mundo, llegó a ser conocido como "el misionero a todo el
mundo". Nació en Bavaria, hijo de un rabí judío. A los once años salió de su
casa en busca de una educación para llegar a ser misionero. Fue bautizado en la
iglesia católica romana, pero muy pronto desafió la autoridad de la iglesia en
doctrinas y dogmas. Wolff hablaba 14 idiomas y visito a gobernantes de muchos
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países. Sus viajes en Asia y África implicaron muchos peligros y escapadas
milagrosas. Fue golpeado, le hicieron pasar hambre y lo vendieron como
esclavo. Tres veces fue condenado a muerte. Pero a pesar de todas estas
vicisitudes y muchas enfermedades, él llevaba su Biblia y anunciaba a muchas
razas el próximo reino del Mesías. Fue un gran predicador del segundo
advenimiento y aprovechó cada oportunidad para dar el mensaje del juicio
inminente llamando a hombres y mujeres al arrepentimiento.

 Enrique Drummond. Banquero inglés, miembro del Parlamento, dedicó su


vida al servicio cristiano. Por cierto número de años él hizo arreglos para dictar
una serie de cinco conferencias anuales sobre profecías. A ellas asistían unos
veinte miembros de distintas denominaciones religiosas, entre ellos, José Wolff.
En esas conferencias estudiaban las profecías de Daniel y Apocalipsis. Estas
conferencias proféticas añadieron gran interés a la predicación del mensaje del
primer ángel en Inglaterra y en otras partes del mundo.

 Edward Irving. Un destacado predicador adventista en las Islas Británicas


En cuanto se convirtió en evangelista escocés, empezó a estudiar las profecías
de la Biblia y prestó especial atención a las señales de la segunda venida. Un
clérigo de París que lo escucho predicar, le envió una copia del libro de Lacunza,
La Venida del Mesías en Gloria y Majestad. Irving fue cautivado por el mensaje
del advenimiento y siguió predicándolo con fervor.

 Roberto Winter. Escuchó la doctrina del segundo advenimiento mientras


asistía a un campestre durante una visita a Estados Unidos. En 1842 regresó a
Inglaterra donde se dedicó de todo corazón a predicar el advenimiento. En sus
frecuentes cartas a Estados Unidos, él relataba sus progresos. En una de ellas
decía: "Yo predico en las calles con mi diagrama levantado en una vara...
Nuestros libros vuelan y están haciendo una gran conmoción en esta enorme
ciudad". Dios bendijo sus humildes esfuerzos con el bautismo de varios miles de
conversos.

 Los Niños Predicadores: Para anunciar la segunda venida, Dios usó


también a los niños, especialmente en Suecia. Allí sólo podían predicar los que
eran ministros de iglesia del estado y cuando el mensaje del advenimiento llegó
a Suecia a principios de 1840, los clérigos del estado rehusaron predicar la
segunda venida. Entonces niños y jóvenes, algunos de los cuales todavía no
sabían leer, predicaron el mensaje de la hora del juicio y las profecías
concernientes al regreso de Jesús. Las autoridades hicieron todo lo posible por
impedir que los jóvenes siguieran predicando, pero no pudieron. Las
acusaciones de locura y enfermedades físicas también probaron ser inútiles.
Hubo muchos arrestos; algunos hasta fueron golpeados. Dos oradores
jovencitos, Ole Boquist y Eric Walbon, defendieron su fe en la Biblia y
finalmente fueron puestos en libertad por orden del rey. Ellos siguieron
predicando el advenimiento hasta 1844.
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Todos se veían compelidos por una fuerza incontrolable que los inducía a seguir
adelante. Pronto iba a producirse lo que era lógico esperar: un pueblo definido,
con una doctrina definida y una proclamación definida que sería conocido como el
Gran Movimiento Adventista.

III. Guillermo Miller, sus raíces, conversión y ministerio.

En el Estado de Massachusetts, específicamente en el pueblo de Pittsfield, la


familia Miller (esposo, esposa y cuatro hijos) habían sido por varias generaciones
agricultores. Cuando el mundo comenzó a cambiar alrededor de ellos, tuvieron que
abandonar la tierra, pues no podían conseguir los impuestos que los dueños de las
tierras demandaban.

Eso llevó a que muchos tuvieran que viajar hacia lo que llama Sepúlveda, la
“región infestada”, una de las razones más poderosas para hacerlo, era que el
Estado de Massachusetts, había dictado varias leyes que protegía sus intereses con
muy poca consideración de los pobres. Los pobres eran considerados,
especialmente en Boston como laxos e irresponsable. Así que para finales del siglo
18, muchos de estos agricultores que rentaban tierra, entre los que estaban los
Miller, no tuvieron otra opción que abandonar la agricultura y salir de la región.

La familia Miller, se trasladó al Estado de New York, la región infestada, a un


pequeño pueblo llamado Low Hampton.

Otra de las razones por la que la zona se llamó la “región infestada” es que allí fue
el lugar de nacimiento de nuevas y a veces desconocidas conductas e ideas.
 Casamientos interraciales, considerados en Boston como indeseables y
corruptores de la sociedad.
 La apertura del “Erie Canal” (1825) atrajo más y más gentes a la región,
inmigrantes y emigrantes pobres, los que trabajaban por doquier y en
cualquier cosa.
 Todo este ambiente abrió la puerta a lo que los historiadores han llamado
“El Segundo Gran Despertar”

Es allí, al oeste de New York, dónde van a surgir nuevos movimientos cristianos y
protestantes. Estos movimientos y nuevas congregaciones del oeste de New York,
eran muy diferentes a las establecidas en las costas este. Los principales cambios
ocurrieron en:
 Los estilos de adoración, especialmente en las reuniones evangelísticas.
Considerados por los Unitarios de Nueva Inglaterra como incoherentes y
extravagantes. Se permitía aplaudir y alabar efusivamente, así que se
consideraron estos movimientos erráticos y emocionales, dejando detrás
completamente el sentido común y la razón.
 Los participantes en la adoración: A las mujeres se les permitió pasar al
frente para predicar y dar sus testimonios.
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Es también en esa zona donde surgen movimientos fanáticos que promovían
puntos de vistas anti-bíblicos y anti-cristianos.

Uno de los más fuertes y que ha llegado hasta nuestros días, fue el iniciado por un
joven llamado Joseph Smith en Palmyra, New York. Dijo haber encontrado un libro
de uno de los antiguos profetas hebreos, llamado Lehi, que había venido a América
para predicar a los Indios Americanos y creó una próspera civilización que
esperaba el retorno de Jesús. En 1827 terminó de traducir las sagradas tablas y
escribió el “Libro del Mormón”.

Es allí igualmente dónde aparece Anne Lee, la hija analfabeta de un herrero inglés,
con un movimiento conocido como los “Shakers- tembladores” en New Lebanon,
NY. Enseñaba que los deseos sexuales eran contrarios al plan de Dios y eran el
origen mismo de todo mal, así que instaba a sus seguidores a abstenerse de todo
contacto sexual pues la segunda venida de Cristo estaba cerca.

Es en medio de todos estos cambios que Dios escoge a Guillermo Miller, el “mejor
hombre disponible”, como le llama Mervyn Maxwell.

Guillermo Miller, nació el 15 de Febrero de 1782, en Low Hampton, NY. Su padre


un agricultor que también se había desempeñado como soldado en la Revolución
Americana procedía de una familia Bautista, y su abuelo había sido ministro de la
misma. Era creyente en la Biblia y asistía a la iglesia pero sin mucha relación con
Dios. Tenía muchas dudas acerca de puntos esenciales de la Biblia y cuando
preguntaba no recibía respuestas que le satisficieran. Así que desarrolló la idea de
que la Biblia era un libro que no se podía comprender.

Desde los primeros años de su vida dio claras evidencias de habilidades


intelectuales. A los 22 años se casó con Lucy Smith, el 29 de junio de 1803, y se
trasladó al pueblo de Poultney, Vermont. Comienza a leer libros Deístas y a asistir
a reuniones en su pueblo de personas deístas, y comienza a construir su propia
filosofía de la vida.

 La Biblia es sólo un libro más de creación humana.


 Dios es el creador y en alguna manera providente, pero ha abandonado su
creación y no se involucra en la historia y la vida de los hombres.
 “La felicidad es proporcional a la virtud de nuestras vidas en el presente”.

Debido a sus cualidades humanas, era un hombre juicioso, diligente, frugal,


amable y reconciliador, obtuvo varios puestos en el servicio público:

 Agente del sheriff.


 Juez de paz, un oficial público para casar y servir de mediador en la
comunidad.
 En la guerra durante 1812, fue un capitán del ejército comandando una
patrulla de 47 hombres. En esa guerra comienza a dudar del Deísmo, al
participar de la sangrienta y crucial Batalla de Plattsburgh, 1814, dónde se
enfrentaron 15,000 soldados ingleses bien entrenados y armados contra
1,500 soldados regulares y 4,000 voluntarios con precaria preparación y
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ganaron, comenzó a pensar junto a sus compañeros de lucha, “Dios nos
ayudó”.

Regresa a casa y se retira del servicio público, se fue a su granja junto a su


familia. Un día se encontró maldiciendo y se sintió pecador y no se podía liberar de
esa sensación de pecado por varias semanas. Comienza a ir a la iglesia, pero sólo
cuando predicaba el pastor, pues los sermones del diácono no le llamaban la
atención, así que decide mejor él leer los sermones.

En septiembre de 1816, lee un sermón de Alexander Proudfit, en una serie titulada


“Practical Godlines in Thirteen Discourses” allí se presentaba a Cristo cómo aquel
que había venido a salvarnos del pecado. En medio del sermón tuvo que sentarse
de la emoción, vio un salvador y se sintió después de meses de desesperanza
perdonado.

Entonces dijo con una firme convicción: “La Biblia llegó a ser mi “delicia” y Jesús
mi mejor amigo”.

Cuando sus amigos deístas supieron de su conversión al cristianismo, se


escandalizaron. Le recordaban que la Biblia estaba llena de contradicciones y de
crucigramas sin solución. Miller les dijo, que si la Biblia era inspirada entonces,
Dios podía hacer que él hombre la comprendiera, que iniciaría un estudio de la
misma, y demostraría que había un Salvador y que era comprensible, en caso
contrario prometió a sus amigos, regresaría con ellos y volvería a ser Deísta.

Estudio sistemático de la Biblia. (1816–1831)

A partir de 1816, comienza a estudiar la Biblia, texto por texto, sin ayuda alguna
excepto la “Concordancia de Cruden”. Hace una serie de descubrimientos, entre
los cuáles, los más cruciales eran las profecías de tiempo y que el mundo podría
terminar con la segunda venida de Cristo, alrededor de 1843.

Vio a lo menos 12 períodos proféticos ya cumplidos:

 120 años previos al diluvio. Gén. 6:3.


 7 días antes de iniciar la lluvia, 40 días de lluvia, Gén. 7:4.
 400 años en Egipto, Gén. 15:13.
 3 días: Sueños de canastos y sarmientos. Gén. 40:12 -20.
 7 años de abundancia/hambruna. Gén. 41.
 40 años de Israel en el desierto. Núm. 14:34, Eze. 4:6.
 3.5 años de hambruna en los días de Elías. 1 Rey 17:1.
 65 años previos a la destrucción de Efraín. Isa 7:8.
 70 años de cautiverio babilónico. Jer. 25:11
 7 años de enfermedad de Nabucodonosor. Dan. 4.
 70 semanas cortadas para Israel. Dan. 9.
 3.5 años/1260 días/42 meses. Dan. 7:25; Apoc. 12:6, 14; 13:5.
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Tres profecías de tiempo que aún no se habían cumplidos:

 2,300 días de Daniel 8:14.


 7 tiempos de 2520 años de Levítico 26:18-24, 28.
 1,335 días de Daniel 12:12

En el estudio de los tiempos proféticos, descubrió el principio de interpretación


profética de “día por año”.

Todo su estudio le llevó además a descubrir y enfatizar en 10 creencias


doctrinales:

 No milenio temporal. La corriente fuerte era el postmilenialismo.


 La segunda venida de Cristo es premilenial.
 La tierra será destruida por fuego en la segunda venida de Cristo.
 Dios creará una tierra nueva.
 Resurrección de los muertos y transformación de los justos vivos.
 Los malos serán destruidos.
 1000 años entre las dos resurrecciones de justos e injustos.
 El cuerno pequeño es el papado, será destruido en la segunda venida.
 No habrá una conversión mundial antes de la segunda venida.
 Cristo vendría en cualquier hora.

1818–1823: Más estudio, dónde se dedica en manera especial a examinar las


objeciones que podrían tener sus descubrimientos.

1823–1831: Más y más estudio, con el que va creciendo más fuertemente la


convicción de que estaba en lo correcto y la impresión en su mente de que “Ve y
dile al mundo su peligro”. (Eze. 33:8, 9).

Años de Predicación (1831–1844)

Es importante para comprender, el movimiento del advenimiento iniciado por Miller


en USA, que él resistió la convicción de predicar el mensaje por entre 9 y 13 años.
Él no era un fanático del fin del mundo, que pululaban en la “región infestada”. No
lo movía un sentimiento de auto-promoción sensacionalista.

En medio de su posición negativa a predicar, en el verano de 1831 le vino con más


fuerte convicción a su mente el mensaje “Dilo al mundo”. Pero continuó dando
más y más excusas. Dijo: “Yo soy tímido, no tengo habilidades de orador público,
no tengo educación formal. ¿Por qué Dios no me revela de este deber y llama a un
orador con talento y habilidades? Alguien que pudiera tomar esta verdad y ser
reconocida ampliamente”. Pero la mente seguía impresionada por el Espíritu
Santo, “Dilo al mundo”. Finalmente se rinde y le dice a Dios: “Bien pero alguien
tiene que invitarme a predicar”. Estaba convencido de que ninguna invitación le
llegaría para predicar. Una hora más tarde un jovencito desconocido de un pueblo
cercano llegó con el mensaje del pastor del lugar, que necesitaban que fuera a
predicar el miércoles. Enojado se fue al bosquecillo detrás de su casa y allí luchó
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con Dios, por horas, pero convencido de que no podía faltar a su palabra y al pacto
con Dios, aceptó y fue. Así que comenzó a predicar, de lo único que él habló en
sus mensajes, era de la segunda venida de Cristo. El impacto del mensaje fue
tremendo, cuantos le oían se convencían y se convertían. A partir de ese miércoles
hasta finales del verano de 1844 no dejó de predicar y tuvo tantas invitaciones que
se vio obligado a declinar algunas.

Líderes del movimiento.

En 1839 Joshua V. Himes, pastor de la Iglesia Conexión Cristiana, la misma a la


que pertenecía White y Bates; estaba en Boston e invitó a Miller a predicar a su
iglesia. Miller hacía grandes reavivamientos y ganaba a muchas personas, a él no
le importaba si el punto era verdad o no, le interesaba hacer crecer a su iglesia.
Pero en medio de los mensajes se percató de la verdad de los argumentos de
Miller, y le pregunta si realmente él creía eso que estaba presentando, la
respuesta fue sí. Himes entonces dice que ese mensaje debía ir a todo el mundo y
a las grandes ciudades como Filadelfia y New York.

Himes enérgico y talentoso, conocía además el trabajo de un agente de anuncios y


comienza a publicitar a Miller. Idea hacer un periódico el primero fundado por el
movimiento; fue a las imprentas y consiguió que se le imprimiese y luego pagada
después de venderlo, y le aceptaron; lo llamo “Signs of the Times” en marzo 20
de 1840, no es el mismo que fue fundado más tarde por los esposos White.

En 1834 escribe un folleto que llega a manos de Josías Litch, inmediatamente lo


aceptó y también en 1838 escribe apoyando la posición de Miller un libro de unas
200 páginas titulado “The Probability of the Second Coming of Christ About A.D.
1843”1 . Litch, es conocido como el 2do teólogo del movimiento adventista. Predice
la caída del Imperio Otomano, que rea Turquía y los musulmanes.

Estaban conquistando Europa para 1840 y ya estaba debilitada, así que la revista
“Signs of the Times” predice la caída del mismo el 11 de Agosto de 1840. Se basó
en el principio de Miller día por año, aplicandolo a Apoc. 9:5 y 15; cinco meses por
30 días es igual a 150 años.

Gibbon en su libro “Decadencia y caída del Imperio Romano” predijo que Turquía
jugaría un papel importante en el desmoronamiento romano y que entrarían a las
fronteras el 27 de Julio de 1299 y efectivamente así fue.

Josías tomó esas fecha y dijo que los turcos castigaban y atormentaban a Roma, si
a 27 julio de 1299 se le suman 150 años llegamos a 27 de julio de 1449, en esa
fecha el emperador romano muere y el sucesor se niega a tomar el poder sin el
permiso de los turcos. Josías reconoce que para esa fecha los otomanos eran
superiores (Roma Oriental: Constantinopla, Grecia y Bizantina).

1
Richard W. Schwarz y Floyd Greenleaf, Portadores de luz: Historia de la Iglesia Adventista del Séptimo
Día (Buenos Aires, Argentina: Asociación Casa Editora Sudamericana, 2000), 32.
12
El verso 15 habla de hora, día, mes y año. Así que él dijo:

Año: 360 días.


Mes: 30 días.
Día: 1 día. = 391 años proféticos + 1449 = 1840.
Hora: 15 días. = + 15 días = 27 julio + 15 días = 11 de Agosto.

Muchos milleritas no deseaban que se publicará esa afirmación, pero se hizo y los
periódicos la pusieron en la primera plana. Los periódicos de Europa y del Nuevo
Oriente no comenzaron a llegas hasta Octubre, y sólo en noviembre se supo que
las predicciones de Litch se habían cumplido2. Muchos incrédulos le escribieron a
Litch, sobre lo acertado de su posición, algunos creyeron y se convirtieron en
predicadores.

En 1838 otro destacado líder y predicador se va a unir a la predicación del


advenimiento con Miller. Es Charles Fitch, un tímido y pasivo ministro
congregacionalista. Era un evangelista asociado del gran predicador Charles G.
Finney. Él llega a leer las conferencias de Miller y escribe: “No encuentro nada
sobre lo cual apoyar una sola duda con respecto a lo correcto de sus conceptos”.

Toma el tema y lo comparte con un grupo de ministros, los cuáles en lugar de


entusiasmarse como él, se burlan grandemente de la idea del advenimiento de
Jesús. Sacudido, abandonó toda predicación sobre la fecha de 1843, pero 3 años
más tarde encontrado por Litch y animado reafirmó su fe y llegó a ser uno de los
evangelistas más poderosos del movimiento.

Debido a un incidente de bautizos en agua helada el 8 y 9 de Octubre de 1844,


muere el 12 de Octubre de 1844. Se le conoció como un “enamorado de Jesús”.

En 1839 se une a la predicación del mensaje, el que llegaría a ser la persona que
mejor encarnaría el espíritu, el ideal y la fe del adventismo3, Joseph Bates, por
muchos años un respetable capitán de marina, profesión que abandonó después
de haber acumulado una considerable fortuna.

Habiendo escuchado la predicación de Miller, se entregó con todo entusiasmo a la


tarea de predicar la pronta venida de Cristo en 1843. Vendió todo lo que tenía,
casa y la mayoría de sus muebles, y dedicó el dinero a la proclamación del
mensaje.

2
Egipto estaba en guerra con Turquía, el Pasha de Egipto destruyó todo el ejército musulmán y tomó sus
barcos. Se negó a devolverlos y el Sultán turco recurrió a Europa para que intercedieran y le pidieran a Egipto
la devolución de sus barcos. Inglaterra, Austria, Rusia, Prusia se reunieron en London, acordaron que fueran
devueltos pero le pusieron la condición de devolver la tierras a Egipto. El embajador turco fue a buscar los
barcos y el Sultán escribió el 11 de Agosto de 1840 una carta solicitando protección de las potencias europeas,
reconociendo que había perdido su poder.
3
Enoch de Oliveira, La mano de Dios al timón (Buenos Aires, Argentina: Asociación Casa Editora
Sudamericana, 1986), 155.
13
En compañía del millerita H. S. Gurney, evangelista de canto, se dirigió a Maryland
y predicó en la Isla Kent, en la bahía de Chesapeake. Mucho público se reunió y un
gran despertar se produjo en esa ocasión y muchos se añadieron al mensaje del
advenimiento.

James White, llegaría a ser uno de los fundadores y líder principal de la Iglesia
Adventista del Séptimo Día, pero era uno de los predicadores menos conocidos del
movimiento millerita. Él es un ejemplo típico de aquellos que no predicaron en las
grandes ciudades, pero que se dedicaron a propagar el mensaje del advenimiento
en las casas y las escuelas.

A los 21 años, escuchó en una reunión campestre en Exeter, Maine, 1842, el


mensaje del advenimiento. Inspirado por el mensaje abandonó su posición de
maestro y se convirtió en predicador. Salió de casa en casa armado con tres
conferencias, un caballo prestado y su montura remendada. Pronto encontró a 70
personas que pedían bautismo, y buscó a un ministro para que los bautizara.
Muchas veces encontró resistencia, y estuvo en peligros físicos, pero persistió y
pudo informar más de 1000 conversos en la primavera entre la primavera de
1842-43. Su fervor condujo a que fuera ordenado al ministerio, por la Iglesia de la
Conexión Cristiana.

Surgió el interés de llevar la noticia y advertencia entre los norteamericanos de


color. El ministro millerita un joven negro conocido como John W. Lewis, se
mostró entusiasmado con la idea y decidió dedicar el tiempo completo para llevarla
a cabo. Antes que él, lo estaba haciendo un anciano ministro afro-americano
Charles Bowles, quien murió en Marzo de 1843.

Lewis escribió un libro biográfico acerca de su vida titulado: “The Life, Labors,
and Travels of Elder Charles Bowles, of the Free Will Baptist
Denomination”4. No se percataron de un problema básico: La mayoría de los
afro-americanos vivían en los estados del sur en condición de esclavos. Las ideas
abolicionistas de la mayoría de los predicadores del movimiento lo hacían en la
región personae non grata.

William Ellis Foy5 (c. 1818-1893), un norteamericano de la raza negra, ministro


bautista del grupo “libre albedrío” poseedor de excepcional capacidad que tenía
entonces algo más de veinte años, recibió varias visiones dramáticas en 1842,
algunos años antes de aquellas que recibieron Hazen Foss y Elena Harmon.

La primera (18 de enero) duró dos horas y media, y la segunda (4 de febrero),


¡doce horas y media! Su condición física durante las visiones se asemejaba al

4
Ver en http://docsouth.unc.edu/neh/lewisjw/lewisjw.html accesado 5 de septiembre de 2007, a las 2: 20 pm.
5
Herbert Douglas, Mensajera del Señor (Buenos Aires, Argentina: Asociación Casa Editora Sudamericana
ACES, 2000), 38.
14
estado de trance en que se hallaba Daniel.6 Jerry Moon concuerda con Delbert
Baker en considerarlo como “el profeta del pre-chasco”.

Ha habido una falsa concepción acerca de Foy, quizás relacionada con la similitud
con el nombre de Foss. Foy fue renuente y vacilante ante el llamado de relatar las
visiones, pero nunca declinó la comisión de relatar la visión ante grandes
auditorios en toda Nueva Inglaterra.

Loughborough, en su libro “Rise and Progress of Seventh-day Adventist, 1892”,


habiendo perdido el rastro de él, asumió que había muerto.

Schwarz and Greenleaf, dicen que él comenzó a contar la visiones pero que más
tarde principalmente por su condición racial y algunas presiones financieras y una
tercera visión que no podía comprender dejó de relatar los mensajes. Esta es la
perspectiva que han seguido la mayoría de los historiadores adventistas.

Delbert Baker, decidió investigar y llegó a la conclusión de que el tema recurrente


de las visiones de Foy era: “La segunda venida de Cristo podría no ocurrir tan
pronto como los milleritas esperan”.

Foy recibió un número limitado de visiones con un objetivo determinado y nunca


sugirió que su papel profético se extendería después de 1844, o que recibiría más
visiones. Nunca él agravió al Espíritu Santo y continuó siendo pastor de la iglesia
Bautista Libre Albedrío hasta su muerte.7

Así que declara: “Foy habló a los primeros adventistas, asegurándoles el interés
personal de Dios, animándoles a un mayor reavivamiento y reforma. Trajo a
consideración verdades oportunas que más tarde, si hubiesen sido comprendidas,
le habrían ahorrado a su pueblo el gran Chasco, o al menos los hubiese preparado
para el mismo”.8

Algún tiempo antes del 22 de octubre de 1844, Elena Harmon oyó hablar a Foy en
el Salón Beethoven, en Portland, Maine. Unas pocas semanas más tarde, poco
después de la primera visión de Elena en diciembre de 1844, Foy estuvo presente
en una reunión celebrada cerca de Cape Elizabeth, Maine, durante la cual ella
habló de su primera visión. “Cuando ella empezó, Foy se sintió absorto en lo que
ella estaba diciendo; se contagió con el entusiasmo y la expresión que
acompañaban a su presentación.

Ella habló de cosas celestiales—de guías, de luces, de imágenes—, asuntos


familiares a Foy… Arrebatado por el júbilo del momento, no pudo contenerse más.
6
Se sabe que él no respiraba, que tuvo significativa pérdida de fuerza, que ni era capaz de hablar. Para más
información sobre él consultar a Delbert W. Baker, The Unkown Prophet (Washington, D.C.: Review and
Herald Publishing Association, 1987).
7
“The Truth About "The White Lie” Ellen G. White Estate in cooperation with the Biblical Research
Institute and the Ministerial Association of the General Conference of Seventh-day Adventists, First
published August 1982. Revised January 1999. en http://www.whiteestate.org/issues/whitelie.html accesado
el 5 de septiembre de 2007 a las 8:05 pm.
8
Delbert W. Baker, “William Foy, Messenger to the Advent Believers”, Adventist Review, 14 de enero, 1988.
15
De repente, precisamente en el medio de la presentación de Elena, Foy emitió un
grito de gozo, se puso de pie, y excitadamente ‘saltó hacia arriba y hacia abajo’.
Como Elena lo recordó: ‘Oh, él alabó al Señor, alabó al Señor’. “El repitió vez tras
vez que la visión de ella era justamente lo que él había visto. Sabía que no había
manera de falsificar una experiencia tal; la de ella era legítima”.

En 1906 Elena de White rememoró sus conversaciones con William Foy. Recordó
que él había tenido cuatro visiones, todas antes de su primera visión. “Fueron
escritas y publicadas, y es… [extraño] que no puedo encontrarlas en ninguno de
mis libros. Pero nos hemos mudado tantas veces”. Luego dio de Foy una lisonja
muy significativa: “Él fue el portador de testimonios notables”.

Probablemente el más notable y conocido entre los pastores que aceptaron la fe en


el mensaje de la segunda venida fue Elon Galusha, hijo del gobernador de
Vermont. Era el pastor de la iglesia bautista de Lockport, NY y presidente de la
Sociedad Bautista Norteamericana contra la esclavitud, además de presidente de
la Asociación Bautista de Nueva York. Su influencia y liderazgo tuvo efectos
positivos en el movimiento, y su ejemplo animó a varios ministros tímidos a
seguirle y predicar el mensaje de la venida del Señor.

Se extiende el mensaje a un conocimiento nacional.

Publicaciones.

La obra de las publicaciones para propagar los mensajes de Miller y de los


predicadores del movimiento, debe mucho a las ideas y el esfuerzo de Joshua V.
Himes.

El primer periódico “Signs of the Times” se convirtió en todo un éxito y al final del
primer año ya tenía 1500 suscriptores regulares. Para la primavera de 1842 ya el
mismo se volvió una edición semanal. A este primer intento de publicar las ideas
se añadieron toda una hueste de periódicos milleritas.

En la ciudad de New York apareció en el otoño de 1842. “The Midnight Cry”, salía
una edición diaria durante cuatro semanas y se vendían los 10,000 ejemplares de
la misma, luego comenzó a ser semanal. Con el paso del tiempo y el creciente
interés en el tema, llegó a ser costumbre editar periódicos con los temas tratados
en las reuniones. Muchos de ellos duraban unas pocas semanas o meses, algunos
permanecieron hasta la fecha final.

Los más importantes entre ellos “The Voice of Truth” en Rochester, “The Western
Midnight Cry” en Cincinnati, “Trumpet of Alarm” en Filadelfia, “The Second Coming
of Christ” en Cleveland y “Voice of Elijah” en Montreal. Para ese tiempo llegaron a
circular unos 40 periódicos en el Noreste del territorio.

No sólo se publicaron periódicos, Himes también produjo la “Biblioteca del


Segundo Advenimiento” una serie de continuada de tratados y libros de Miller y
16
otros predicadores. Se les animaba a todos los conversos al movimiento a comprar
una y tomar una segunda para regalarla o prestarla a aquellos que no conocían. Se
produjo también hojas tipo estampillas navideñas con textos o pensamientos
claves de la segunda venida los que se podían usar como pegamento para pegar
cartas.

Se publicaron miles de folletos que contenían resúmenes de los mensajes de


Miller, los cuales eran empaquetados y enviados a las oficinas postales de todo el
país para ser distribuidos a dos o tres centavos, se le daban a los capitanes de
barcos para que los dejaran en cualquier puerto donde atracaran. Himes informó
que las publicaciones habían sido enviadas a todas las estaciones misioneras del
globo de las cuales tenemos conocimiento. El método de universalizar el mensaje
del advenimiento fue de esta manera y no con el envío de misioneros.

De mucha influencia fue la publicación para los predicadores el “Cartel Profético”


compuesto por Charles Fitch y Apollos Hall en 1842. También se imprimieron en
una medida de media hoja con espacio para que se pudiera escribir cartas en él
explicándolo y enviarlas a otras personas. Finalmente Himes, produjo un himnario
“The Millenial Harp”, que se usaba para cantar en todas las reuniones de estudios
milleritas. Cada centavo ganado fue reinvertido para continuar publicando la
noticia y las verdades bíblicas en cuanto al retorno de Jesús y la preparación para
encontrarse con él.

Conferencias y reuniones campestres.

Por idea del dinámico Himes, y debido a la enorme cantidad de intereses en el


movimiento, se hizo necesario hacer una reunión con todos aquellos líderes y
predicadores del mismo.

Se acordó la fecha del 14 de Octubre de 1840, en la capilla de la calle Chardon, en


Boston. Estaba previsto que Miller diera el discurso de inauguración pero debido a
que se enfermó en el transcurso del viaje hacia el lugar, no pudo llegar. En su
lugar, el rector episcopal, Henry Dana Ward dirigió la conferencia y el secretario de
la misma fue el ministro presbiteriano Henry Jones. Ambos acordaban con Miller en
que la venida estaba cerca, pero desalentaban la idea de poner una fecha.

Unos 200 clérigos asistieron, representando una gran variedad de iglesias. Se


validó el periódico Sings of the Times, como oficial del movimiento y se le dio
apoyo, se introdujo la “reunión social” una ocasión en que los asistentes a las
reuniones adventistas se acercaban a otro hermano y con breves expresiones de
fe y confianza en el advenimiento daba aliento, ánimo y sostén a su compañero de
fe.

Tanto éxito tuvieron estas conferencias que en los siguientes años se realizaron
unas 15 más de las generales desde Maine a Filadelfia. Pero en manera regional se
hicieron a lo menos 120 reuniones de este tipo, sólo que estas regionales tendían
a ser evangelísticas y de reavivamiento y no de intercambios eruditos como las
generales.
17
Miller enfatizó claramente que las mimas tenían el objetivo de llamar la atención al
advenimiento y de preparar a los oyentes para ese momento, y no la formación de
una nueva iglesia. Pero la tendencia a la separación creció mediante una circular
autorizada en 1841 por la Segunda Conferencia General. En la misma se les
aconsejaba a los creyentes adventistas que permaneciesen en sus iglesias, pero
que además formarán grupos de estudio de la Biblia y celebraran reuniones
sociales de estímulo mutuo. Así se desarrolló una especie de organización mínima.

Debido a todo este movimiento y crecimiento, los milleritas nombraron a Josiah


Litch, como su primer Agente General, pero debía de dejar su tarea pastoral, de
mala gana la Asociación Metodista Episcopal lo liberó de sus responsabilidades y
llegó a ser el primer obrero millerita y adventista sostenido con un sueldo de las
ofrendas y diezmos.

Así que ya la organización embrionaria era un hecho, y mucho más cuando Himes,
organizador nato, inició y alentó la formación de la Asociación General de
Cristianos que Esperan el Advenimiento, en Octubre de 1840, unas 15 más de las
mismas aparecieron más tarde9. Más tarde también comenzaron a aparecer
iglesias locales en la forma de Asociaciones de la Segunda Venida, la primera
organizada en la ciudad de New York, el 18 de mayo de 1842, veintenas de
asociaciones de este tipo se propagaron por doquier.

Otra idea de Himes, fue el desarrollo de las reuniones campestres. Comenzando en


junio de 1842 en East Kingston, New Hampshire, celebraron un total de 130
reuniones antes de octubre de 1844. Al principio era una pequeña carpa, pero
cuando hubo suficientes fondos, Himes encargó al fabricante de carpas adventista
Edgard Williams de Rochester NY, la carpa más grande del país, la cual fue
conocida como “Carpa Grande” medía 36 metros con un poste central de 16
metros. Fue levantada por primera vez en julio del 1842, en Concord, NH.

Material proporcionado por: Pr. Abner Francisco Hernández Fernández


Producción: UM Virtual

9
George Knigth, Una historia resumida de los Adventistas del Séptimo Día (Nampa, Idaho: Pacific Press
Publishing Association, 2005), 12.
18
Para más información consultar:

Richard W. Schwarz y Floyd Greenleaf, Portadores de luz: Historia de la Iglesia Adventista del
Séptimo Día. Buenos Aires, Argentina: Asociación Casa Editora Sudamericana, 2000.

Herbert Douglas, Mensajera del Señor. Buenos Aires, Argentina: Asociación Casa Editora
Sudamericana ACES, 2000.

George Knigth, Una historia resumida de los Adventistas del Séptimo Día. Nampa, Idaho: Pacific
Press Publishing Association, 2005.

Departamento de Educación Asociación General. La Historia de nuestra Iglesia.


Argentina: Asociación Casa Editora Sudamericana, 1963.

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