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Las Tormentas Pasajeras

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NOTAS DEL SERMÓN

De En Contacto con el Dr. Charles Stanley

Las tormentas pasajeras de la vida


PASAJE CLAVE: Salmo 107.23-32 | LECTURAS DE APOYO: 2 Samuel 11.1-5 | Salmo 103.19
Isaías 55.8-11 | Jonás 1.1-17


INTRODUCCIÓN Existen tres clases de tormentas.

Todos enfrentamos tormentas en la vida, momentos Tormentas naturales. Los huracanes, inundaciones y
de sufrimiento, dolor o pérdidas. tornados caen en esta categoría.
Tormentas emocionales. A menudo son peores que
En los tiempos difíciles vienen a nuestra mente preguntas las tormentas naturales, e incluyen las siguientes
como: ¿Dónde está Dios? ¿Por qué ha sucedido esto? ¿Es mi situaciones:
culpa? ¿Fue el Señor quien lo causó? De ser así, ¿por qué? • Mala salud.
Solo en la Palabra de Dios podemos encontrar respuestas • Problemas financieros. Las crisis económicas y la
en los tiempos de tempestad. pérdida de un empleo nos desafían a creer en las
enseñanzas de la Biblia y a confiar en que Dios nos
DESARROLLO DEL SERMÓN sostendrá y proveerá.
• Problemas familiares. Tanto los problemas en el
El fundamento que nos ayuda a entender las tormentas de hogar como los sentimiento de rechazo pueden cau-
la vida lo encontramos en Salmo 103.19: “Jehová estableció sarnos estrés y una gran carga emocional.
en los cielos su trono, y su reino domina sobre todos”. Y Tormentas espirituales. Desobedecer a Dios y
en Salmo 107.23-32 nos da un ejemplo explícito de una escoger nuestro propio camino trae como resultado
tormenta y de la manera en la que Dios actúa en medio turbulencias espirituales por la convicción de su Espí-
de ellas. La escena se trata de un barco que batalla contra ritu Santo. El vivir fuera de su voluntad afecta nuestra
las olas y el fuerte viento del mar. En medio de la angustia conducta, conversación y carácter, lo cual nos hará
los marineros claman a Dios por ayuda y Él los libera de estar en desacuerdo con el deseo del Señor.
las aflicciones, calma la tempestad y los guía a tierra firme.
Por eso agradecen al Señor por su amor, por su maravillosa ¿De dónde provienen las tormentas?
salvación y lo exaltan ante todos.
De nosotros mismos. Los problemas llegan cuando
¿Estaba Dios en la tormenta? desobedecemos a Dios de manera deliberada. Como
resultado nos podemos sentir atemorizados, ansiosos y
De acuerdo al versículo 25, la respuesta es sí: “Porque alejados de Dios, culpar a otros, dejar de ser útiles para
habló, e hizo levantar un viento tempestuoso, que encrespa el Señor, o dañar nuestro testimonio.
sus ondas”. En ocasiones el Señor interrumpe nuestra Del diablo. Satanás puede traer una tormenta por medio
vida al permitir turbulencias; pero, otras veces, nosotros de la tentación. El pecado de David que se menciona en
creamos esas condiciones caóticas con nuestras decisiones 2 Samuel 11.1-5 nos muestra el desarrollo de la tentación.
pecaminosas. Nuestros problemas también pueden ser el • David estaba donde no debía haber estado. Cuando
resultado de sucesos naturales. Sin importar cuál sea la su ejército fue a la batalla, David se quedó en casa en
causa, Dios está en cada situación, pues es soberano sobre lugar de haber ido con sus tropas.
todo lo que existe. • Vio lo que no debió haber visto. Al pasearse por su

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terrado vio a una mujer bañándose. En vez de voltear tragara. Después de cierto tiempo el pez lo vomitó en la
su mirada, se quedó mirándola. orilla y se dirigió a Nínive para proclamar lo que el Señor
• Su mirada se tornó en lujuria y mandó a traerla. le había encomendado. Pero aún así, se molestó porque
• Su lujuria dio paso a un acto de pecado. esas personas se arrepintieron y ya no tendrían que sufrir
el castigo que merecían por su maldad.
David estaba en el lugar equivocado en el momento
equivocado, con la mirada donde no debía estar, con malos De igual manera, nos metemos en problemas cuando
pensamientos y con el poder de actuar por lujuria. El resul- tratamos de huir de Dios. Al igual que Jonás, nos daremos
tado fue un embarazo, una cadena de acciones pecamino- cuenta de que Dios siempre está con nosotros, aun en
sas y consecuencias dolorosas que duraron toda la vida. nuestra desobediencia. Su deseo es que nos arrepintamos
y regresemos a sus caminos.
De Dios. En ocasiones el Señor trae tormentas a nuestra
vida de acuerdo a su divino propósito. Aunque son Para conformarnos a su imagen. Dios está dispuesto a
dolorosas, Dios actúa así por amor a nosotros. quebrantarnos por medio del sufrimiento para glorifi-
carse al hacernos más como su Hijo.
¿Por qué Dios permite las tormentas? Para prepararnos para su servicio. Al pasar por tor-
mentas nos volvemos más capaces de ayudar a otros.
Para captar nuestra atención. El Señor nos habla con Para demostrar su poder en nuestra vida. El Señor usa
dulzura, pero si no le prestamos atención, alzará su volu- las pruebas para hacernos más útiles.
men al enviarnos una tormenta. Por amor, nos reprende Para revelarnos quién es Él. Las tempestades nos dan
para impedir que nos destruyamos a nosotros mismos y una nueva perspectiva del Señor y de la manera en que
a los demás con nuestra desobediencia. actúa. Por lo general, después de las tormentas, reflexio-
Para que nos arrepintamos. En el caso de Jonás usó una namos en lo que hemos vivido y recordamos cómo el Se-
tormenta de verdad (Jon 1.1-17). Aunque le había enviado ñor nos sostuvo. Entonces podemos entender mejor que
a ir a Nínive a predicar contra el pecado que estaban su fortaleza es suficiente y que su propósito es bueno.
practicando, Jonás decidió abordar un barco con el pro- Para demostrarnos su amor. Al comprender que los ca-
pósito de huir de la presencia de Dios (vv. 2, 3). Pero nadie minos de Dios son más altos que los nuestros, también
puede huir del Señor, pues todo está ante su presencia. entendemos que las tormentas que permite son motiva-
das por su amor.
Mientras Jonás dormía en el barco, Dios hizo levantar una Para recordarnos quién tiene el control. Como Dios
gran tempestad (v. 4). Todos los marineros comenzaron todo lo sabe, nunca se equivoca. Nada sucede sin su
a clamar a sus dioses, con la esperanza de que alguno permiso. Su buena voluntad, su poder infinito y su amor
interviniera. Cuando decidieron echar suerte, para des- incondicional siempre gobiernan todas las tormentas.
cubrir cuál de ellos había causado ese mal, la suerte cayó
sobre Jonás. Neciamente había intentado huir por mar REFLEXIÓN
de la presencia de Dios, pero tanto el mar como la tierra
fueron creados por Él. Para que el barco no naufragara, les ¿De qué manera reacciona usted ante los problemas?
dijo que lo lanzaran al mar. Justo al instante en el que lo ¿Cómo se siente al saber que Dios está en control?
hicieron, la tormenta cesó. Al reflexionar en las tormentas del pasado, ¿qué le ha
enseñado el Señor acerca de Él y de su manera de obrar?
Aunque Jonás intentó huir del Señor, Dios nunca le aban-
donó. Incluso lo rescató, al enviar a un pez para que se lo

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