Trabajo de Neuro
Trabajo de Neuro
Trabajo de Neuro
Neuropsicología
7. Reinserción: acciones llevadas a cabo con el fin de que el individuo diagnosticado con
trastorno de personalidad, luego del tratamiento y rehabilitación, pueda reinsertarse a la
sociedad como sujeto adaptado a ella, es decir, pueda llevar a cabo una vida "saludable" y con
un funcionamiento general adecuado para todas las funciones que tenga que llevar a cabo en
el ámbito social. Son muy importantes en este sentido, los talleres de entrenamiento de
habilidades, los talleres de reinserción laboral o talleres de relajación. El objetivo aquí es
devolverle al sujeto su capacidad adaptativa, para que pueda llevar a cabo sus funciones
sociales, más allá de una posible continuidad de su trastorno.
Rol del psicólogo en la demencia
Función de asesoramiento
Igualmente, el psicólogo actuará como orientador y consejero con la familia del enfermo,
durante el proceso diagnóstico, informando sobre prognosis, medidas profilácticas a
adoptar en diferentes fases de la enfermedad, dando pautas de actuación ante las
alteraciones conductuales, las emocionales, y de estimulación cognitiva para
compensar, así como derivando hacia otras redes de apoyo socio-sanitarios, y
organizaciones de ayuda mutua. De similar forma, en sentido asesor podrá actuar
también con otros profesionales que atiendan el caso, y con la dirección del centro o
entidad, gracias a sus conocimientos desde la Psicología.
Función de intervención
Función de investigación
Formación Psicogerontologica
Las terapias psicológicas para el tratamiento de la demencia suelen ser más eficaces
en las fases tempranas. Esto es así porque la base de la intervención neuropsicológica
se centra en las habilidades del paciente que aún conserva, ya sea de manera total o
parcial. El objetivo es que el deterioro sea lo más lento posible
La Terapia de la Reminiscencia
Es una terapia que trata de potenciar la memoria episódica y autobiográfica del paciente.
Con ella se consigue sensación de control y estabilidad emocional en los pacientes en
base a los recuerdos. Recuerdos en los que es protagonista y que de alguna manera
configuran su identidad. Para ello se utilizan fotografías, música, noticias antiguas, entre
otras cosas, que ayudan a que el paciente pueda responder a una pregunta clave -
¿quién soy? -, sin que otra persona se lo cuente.
Rol del psicólogo en la esquizofrenia
Debido que los esquizofrénicos carecen de manera típica de habilidades sociales, casi
siempre se incluye un programa de entrenamiento para contrarrestar esta carencia como
parte de la terapia conductual. La terapia enfatiza las habilidades de comunicación y el
entrenamiento del asertividad. El paciente es colocado de manera repetitiva en
situaciones sociales que tiende a evitar. Esto disminuye la ansiedad del paciente al punto
de que las buscará en lugar de evitarlas. Este tipo de terapia también ha sido usada para
reducir el impacto de delirios, alucinaciones y otros trastornos del pensamiento, por
medio de explicaciones desestigmatizantes de sus síntomas y entrenamiento para
cuestionar los síntomas psicóticos. Se les explica que el estrés a menudo produce
reacciones comunes como ideas de referencia, paranoides e interpretaciones
equivocadas de los eventos. Los pacientes son enseñados a analizar sus síntomas,
llegando a concluir que sus creencias no son realistas.
Este programa identifica las deficiencias cognoscitivas específicas mostradas por los
esquizofrénicos e implica:
Apoyo Familiar
Ya que la mayoría de los pacientes recuperados regresan a vivir con sus familias, las
nuevas intervenciones psicológicas se han enfocado de tratar de mejorar la interacción
entre el paciente y los miembros de la familia, evitando así posibles recaídas. Esto
implica difundir información acerca del trastorno entre las familias e esquizofrénicos y
enseñar a éstas y al esquizofrénico cómo modificar sus patrones de comunicación. Para
esto se identifican las interacciones estresantes y se realiza un entrenamiento en
métodos de comunicación alternativos. Se enfatiza habilidades específicas, tales como
escuchar, hacer peticiones claras, enfocar el reforzamiento positivo.
El papel del psicólogo en el abordaje de la esquizofrenia es muy importante. En el campo
de la intervención, siempre se ha pensado que el profesional que debía tratar estos
casos era el psiquiatra. A comienzos de la reforma psiquiátrica esto era así, pero con la
inclusión de los psicólogos clínicos (y evidentemente, otros profesionales) aportaron
otros elementos importantes en el tratamiento: por una parte, instrumentos de
evaluación válidos y fiables para la medición de variables clínicas, neuropsicológicas,
de habilidades y funcionamiento social, satisfacción, calidad de vida, etc. Por otro lado,
los psicólogos clínicos han aportado un arsenal de técnicas terapéuticas muy
importante.
Los psicólogos también tienen una formación metodológica que les permite entrar en
estas cuestiones de investigación con una solvencia que otros profesionales no tienen,
los psicólogos como expertos en el comportamiento humano, pueden aportar nuevas
formas de gestión y organización de los recursos sanitarios y de los programas de
actuación a un nivel más molar. La evaluación de programas, por ejemplo, es un
instrumento muy interesante que pueden aportar para la mejora de la gestión sanitaria.
Todo esto tiene que ver con los aspectos técnicos y pragmáticos, pero también los
psicólogos están aportando un aspecto filosófico e ideológico en el abordaje de la
esquizofrenia. Consiste en organizar sus actuaciones considerando a la persona como
el centro de la intervención. No se trata “esquizofrénicos”, sino a personas que, en un
momento de sus vidas, por diferentes motivos, están teniendo una serie de experiencias
que les hacen sufrir. Interesan, por tanto, sus vivencias, conocer sus valores, sus
necesidades y, en general, qué es lo que quieren hacer con sus vidas. Por esto, si no
se tiene en primer plano la idea de persona (y no la de paciente), difícilmente se podrá
llegar a hacer actuaciones relevantes y significativas. Esto último, es un aspecto que los
psicólogos están aportando a la intervención de la esquizofrenia y de los trastornos
mentales graves en general.
El papel del psicólogo en las adicciones
Un equipo multidisciplinar
Trabajar sobre problemas concretos
Establecer relaciones con la comunidad, con sus técnicos y políticos, y
hacerles ver la importancia de este tipo de intervención (en ocasiones, son
estos actores los que incapacitan una buena puesta en marcha de estos
programas)
Adaptarse y resolver los problemas que surgen en torno a los presupuestos y
cambios institucionales que afectan a los programas de intervención
Como hemos visto, la cuestión del consumo de drogas es un problema que implica a
toda la sociedad y como tal no está exento de actitudes, valoración o corrientes de
opinión. El psicólogo que trabaja en esta materia debe tener en cuenta varias premisas: