La Colonizacion Española en America
La Colonizacion Española en America
La Colonizacion Española en America
Durante el proceso de colonización cada una de las metrópolis colonizadoras implanto nuevas
formas de vida. Las actividades económicas, la religión y las condiciones políticas cambiaron para
los pueblos americanos. La vida en la colonia se centralizo en los intereses económicos de la
colonizadora, cuya finalidad principal fue acumular riquezas para la madre patria y para si misma.
La administración de las colonias españolas, portuguesas y francesas reflejo, a través del siglo
XVI, las costumbres y la forma de vida de las monarquías mas centralizadas de Europa. La
organización política y administrativa, también, fue una copia de las instituciones prevalecientes
en estos paises. claro está sufriendo los cambios y las adaptaciones necesarias para obtener los
resultados deseados.
Otros sistemas de explotación indígena fue la mita (turno en quechua), que se uso en Perú. Esta
consistía en la obligación que cada población indígena tenía de enviar a las empresas españolas
(minas, plantaciones agrícolas, obras públicas) un número determinado de trabajadores durante
una temporada del año.
Terminada la conquista del vasto territorio americano, era necesario establecer la forma como
serian administradas las tierras conquistadas.
Los reyes de España, conocedores de que era una tarea difícil, decidieron establecer dos grupos
de organismos. Uno que funcionara en España; y otro, en las colonias.
Los organismos que funcionaban en España estaban presididos por el propio rey, y era los
siguientes:
La casa de contratación
Este organismo controlaba toda la actividad comercial entre España y los territorios conquistados.
Todos los buques que salían para América debían obtener la aprobación de este organismo en lo
que se refería a pasajeros y tipos de mercancía que trasportaban.
De la de s misma manera, todo barco procedente de América vía entregar los metales y
mercancía que trajera.
El consejo de indias
Este organismo jugo un papel muy importante en la organización de las colonias en América.
Proponían las personas que debían realizar las funciones de gobernadores, virreyes y otros
cargos importantes. Estas propuestas debían ser aprobadas por los reyes.
El consejo de indias también presentaba a la consideración de los reyes los proyectos de leyes
(cedulas reales) que debían ser observadas en las colonias y emitían los juicios decisivos de los
conflictos originados entre funcionarios de la colonias.
Varios factores contribuyeron a que así sucediera. Inglaterra, al igual que España y Portugal
estaba gobernada por reyes.
Los reyes españoles y portugueses ejercían el poder en forma absoluta, es decir, en forma
personal y sin límites.
En Inglaterra el rey gobernaba, pero sus acciones estaban reguladas por la carta magna o
constitución.
La carta magna aseguraba a los ciudadanos ciertos derechos que debían ser respetados por los
gobernantes.
El gobierno lo ejercía el rey en colaboración con el parlamento, que era una asamblea integrada
por representantes de las diferentes clases sociales y el clero.
Toda medida de importancia que el rey se proponía realizar, como creación de impuestos,
declaración de guerras en otras naciones, etc., debían ser aprobada por el parlamento.
La economía de las colonias americanas se baso en minería del oro y la plata, sobre todo en el
norte de México y en Potosí (Bolivia), la agricultura y la ganadería, trabajada por indígena o por
esclavos negros traídos de África.
El comercio con América era un monopolio real que se efectuaba a través de las flotas de indias,
que zarpaban anualmente con protección militar.
En 1543, se creo una flota de barco para proteger los cargamentos de oro y piedras preciosas que
se enviaban a España desde América. El comercio se realizaba a través de unos puercos
designados por la corona, lo que dio origen a un estricto sistema mercantilista en todo el imperio.
El monopolio comercial de los puertos de Sevilla y Cádiz, en la península, y de Veracruz y puerto
bello, en América, regulo la actividad comercial indiana
REPARTIMIENTOS Y ENCOMIENDAS
En los dos primeros siglos coloniales la encomienda reguló la fuerza de trabajo y la distribución
de la mano de obra. "La encomienda era una vieja institución de carácter feudal, que establecía
servidumbre a los señores a cambio de protección para los siervos. Se estableció entregando
una comunidad de indios a un español (benemérito) a cambio de los servicios prestados
por éste", explica Lucena Salmoral.
El historiador Guillermo Céspedes del Castillo agrega que "el beneficiario (encomendero) cobra y
disfruta el tributo de sus indios, en dinero, en especie (alimentos, tejidos, etc.) o en trabajo
(construcción de casas, cultivo de tierras o cualquier otro servicio); a cambio de ello, debe
amparar y proteger a los indios encomendados e instruirles en la religión católica, por sí o por
medio de una persona seglar o eclesiástica (doctrinero) que él mantendrá".
Por lo tanto, la encomienda no implicaba la propiedad sobre los nativos; era una concesión no
heredable. Al quedar vacante (sin poseedor) ésta volvía al monarca, quien podía retener a los
indígenas bajo administración real o entregarlos a otro encomendero.
funcionó el sistema del repartimiento forzado, que consistió en el trabajo rotativo y obligatorio del
indígena en proyectos de obras públicas o trabajos agrícolas considerados vitales para el
bienestar de la comunidad. Esta modalidad de trabajo se basaba en reclutamientos laborales
precolombinos, como fueron el coatequitl mexicano y la mita peruana, que los españoles aplicaron
con un sentido diferente al que tenía en las sociedades nativas.
Las encomiendas paulatinamente fueron perdiendo su razón de ser, entre otros motivos, por la
caída de la población aborigen, la desaparición de los conquistadores ávidos de recompensa y la
paz que imperó en la mayoría de las provincias. En cambio, los repartimientos persistieron hasta
el fin del período colonial.
El Repartimiento era la asignación de indígenas como fuerza de trabajo gratuito para los
encomenderos de la América española o para la corona, que tuvo lugar durante la época de
dominio colonial español (siglos XVI-XIX). El repartimiento de indios, se convirtió en el principal y
más duradero mecanismo de dominio de los indígenas, el instrumento mediante el cual quedaron
definitivamente conquistados y que garantizó su sujeción, su explotación y su posición de
inferioridad; era un sistema laboral de adjudicación de mano de obra indígena en provecho de los
miembros de la casta de españoles, que a cambio de una remuneración ínfima obligaba
periódicamente a los indígenas a trabajar por temporadas, generalmente de ocho días por mes,
en las casas o haciendas de la población española. Una vez concluida la temporada, los indígena
debía volver a sus respectivas reducciones, a fin de que pudiesen trabajar en labores propias o en
reunir el tributo que debía pagar a la Corona o a los encomenderos, y eran sustituidos en el
repartimiento por otro grupo de indígenas. El sistema estaba basado en tres principios: la coerción
sobre los indígenas, la rotación semanal y la remuneración forzosa, de conformidad con una tarifa
establecida por las autoridades . Contrariamente a la creencia general, esta institución no tenía
vinculación jurídica ni práctica con la encomienda, aunque a vez se usasen indistintamente ambos
términos. En cambio, sí guarda cierta correspondencia, en sus elementos sustanciales, con
la mita que se desarrolló en el virreinato del Perú.
La encomienda, era propiamente un reparto de tierras que se efectuaba entre los conquistadores
y colonos españoles, entendidas como una recompensa a las personas que habían participado en
batallas y conquistas de pueblos originarios, la encomienda era una institución fundamental en la
primera parte de la etapa colonial, económica, social y religiosa.
El hecho de que los indígenas tuvieran que pagar tributos, fue la primera y fundamental convicción
españolas en el mundo colonial. En teoría, los indios pagaban el tributo como obligación de
"vasallos" de la corona(este término fue usado en el período colonial) a cambio de beneficios, o
supuestos beneficios, de la civilización española.
Bajo el sistema de encomienda, el indígena conservó sus vínculos con el pueblo y grupo al que
pertenecía, estableciendo con el encomendero una relación temporal, que consistía en un trabajo
estacional y sin especialización, que debido a su carácter político de súbditos no implicó
remuneración salarial alguna.
Desde el principio, la corona consideró la parte laboral de la encomienda como un expediente
temporal e insatisfactoria, pendiente del establecimiento de una mano de obra asalariada libre; fue
esta posición real la que tuvo como resultado la supresión del control de los encomenderos sobre
la mano de obra indígena.
NEOCOLONIZACION EN AMERICA
Como neocolonialismo se denomina a una forma moderna de colonialismo, según la cual las
antiguas potencias coloniales del mundo, o las nuevas naciones hegemónicas, ejercen una
influencia determinante en materia económica, política y cultural sobre otras naciones
independientes o descolonizadas. La palabra, como tal, es un neologismo compuesto por el prefijo
“neo-”, del griego νέος (néos), que significa ‘nuevo’, y “colonialismo”, que se refiere al régimen de
dominación de un territorio por parte de un país invasor.
El neocolonialismo es el control indirecto que ejercen las antiguas potencias coloniales sobre sus
antiguas colonias o, en sentido amplio, los Estados hegemónicos sobre los subdesarrollados
LA OLIGARQUÍA
La oligarquía es, para las ciencias políticas, la forma de gobierno en la cual el poder es ejercido
por un grupo reducido de personas que pertenecen a una misma clase social. Por extensión, el
término se utiliza para nombrar al conjunto de empresarios y sujetos acaudalados que suelen
actuar en conjunto para la defensa de sus intereses.
Se entiende por oligarquía a un régimen o una forma de gobierno en que el poder reside en las
manos de unos pocos, generalmente pertenecientes a una misma clase o estrato social,
llamados oligarcas.
La oligarquía consiste en el control político del Estado por un sector minoritario, que bien puede
ser una élite política, económica, étnica o militar, siempre y cuando posea los instrumentos
para ejercer el monopolio del poder y perpetuarse en el mando.
ECONOMÍA NEOCOLONIAL
El neocolonialismo es el control y la tutela que siguen ejerciendo las potencias coloniales, sobre
sus antiguas colonias. La descolonización no supuso independencia económica para los países
denominados "subdesarrollados", sino que los estados imperialistas se encargaron de organizar la
economía y la política mundial, de manera que se conservase la explotación colonial. El
neocolonialismo sería la herencia del colonialismo histórico y a la vez, la continuidad del sistema
capitalista globalizador. Esta nueva fase, permite seguir con el sometimiento (hoy en día sin una
ocupación y control directo), sino más bien a través de complejas estrategias económicas y
políticas. “La tendencia profunda del capitalismo se ha abierto camino y hoy la expansión ya no
requiere la anexión de territorios y su cobijo dentro de fronteras nacionales. Hoy la expansión
capitalista “salta” las fronteras e invade los territorios sin necesidad de conquistarlos y
anexionarlos”. (Vidal Villa, 1998).
Algunas de las regiones del mundo que están actualmente bajo sistemas de dominación
neocolonial son África, principalmente bajo el dominio de potencias europeas, y América Latina,
bajo la influencia de Estados Unidos.
El neocolonialismo se puede evidenciar no solo en la parte del subdesarrollo, sino también en el
intercambio desequilibrado del comercio internacional, esto hace que los países desarrollados
tengan mayor ventaja sobre los subdesarrollados.
Es por esto, que para lograr el propósito de la globalización del régimen capitalista, las grandes
naciones han estructurado organismos que permitan el dominio económico, político y
militar, de una forma más sutil que durante la etapa del colonialismo. En la actualidad, aún se
sigue estableciendo la doctrina colonizadora con la excusa de una “misión civilizadora”. La
inclusión de los países en vía de desarrollo en los mercados mundiales tiene un formato
circundante, lo que quiere decir que, a pesar de que estos países cuentan con una abundancia en
recursos naturales, sus pueblos se encuentran en la total pobreza
En sus inicios el Imperialismo cultural recibió el nombre de "Gran Capital", título que le fue
impuesto por una corriente crítica que tuvo un gran auge durante las décadas de 1940 y 1970 en
Europa y América Latina y que se conoció como Teoría Crítica o Sociología Crítica-Ideológica.
Esta tendencia es lo que la Escuela de Frankfurt denominaba Industria cultural, donde se impone
de los países poderosos una forma ideológica de penetración de los productos culturales
enmascarados en diversos símbolos que tiene como objetivo dominar la conciencia de las
personas que viven en los países pobres