SINDROME CONFUSIONAL AGUDO en GERIATRIA Texto Puc
SINDROME CONFUSIONAL AGUDO en GERIATRIA Texto Puc
SINDROME CONFUSIONAL AGUDO en GERIATRIA Texto Puc
INTRODUCCION.
El síndrome confusional agudo, llamado también delirio corresponde a una alteración en
el estado mental que se caracteriza por ser aguda y reversible. El delirio es uno de los
desórdenes cognitivos más importantes en el adulto mayor, tanto por su prevalencia como
por su implicancia pronóstica.
El desarrollo de un síndrome confusional agudo no rara vez es el primer signo de
compromiso de la función cerebral, además puede ser la forma clínica de presentación de
una enfermedad física grave o aparecer como complicación seria de una enfermedad o
de su tratamiento. La falta de diagnóstico y tratamiento oportuno pudiera resultar en daño
cerebral permanente o muerte.
El delirio tiene también consecuencias importantes en los aspectos económico y social.
Los enfermos con confusión requieren mayor atención del personal de salud, mayor y
más cuidadoso manejo de enfermería, y generalmente tienen una estadía intrahospitalaria
más prolongada. El enfermo agitado es de difícil manejo y está en riesgo de caídas y
fracturas.
Por otro lado, aquellos pacientes que al momento del alta no han recuperado su estado
mental previo, requieren mayor cuidado en su domicilio o incluso institucionalización, todo
lo cual implica un mayor costo.
La prevalencia de delirio en los adultos mayores hospitalizados se ha estimado en 1060%.
Al momento del ingreso se diagnostica s.confusional agudo con una frecuencia de 11-
24%; otro 5- 35% de los adultos mayores desarrollará el problema durante su estadía en
el hospital. Un estudio reciente reportó que el 40% de los pacientes con demencia
presentaba delirio a su ingreso al hospital, mientras que del total de enfermos con delirio,
solo el 25% tenía demencia. El delirio, no rara vez es el primer indicador de una demencia
subyacente, y a la inversa, la demencia es un factor de riesgo para el desarrollo de delirio.
En los enfermos de cirugía general se reporta una incidencia de delirio de 10- 15%; en los
operados de corazón de 30%, y en aquellos con cirugía por fractura de cadera, mayor a
50%. Esta frecuencia es mucho menor en los adultos mayores en la comunidad.
Aunque es poco frecuente en gente joven, puede aparecer síndrome confusional agudo
en relación a enfermedades graves, tal como tifoidea, neumonía o malaria.
En el anciano el umbral de confusión es mucho menor que en el joven, y en los enfermos
con demencia este umbral es aún más bajo. Con frecuencia las personas mayores,
especialmente aquellos con cierto grado de demencia, desarrollan delirio en relación a
una patología aguda, muchas veces infecciosa (Bronconeumonía, Infección urinaria, etc).
A veces, un estado confusional es la única manifestación de un infarto en el anciano. El
subdiagnóstico es frecuente lo que conlleva un gran riesgo, ya que se afectan
principalmente los más viejos y más enfermos.
El delirio en el anciano es un síntoma, y por lo tanto, obliga a buscar la enfermedad
de base desencadenante.
Se debe tener especial cuidado en el diagnóstico en aquellos ancianos con deterioro,
pues es fácil caer en la simpleza de atribuir un mayor deterioro mental a sólo progresión
de la enfermedad de base. Hay que sospechar delirio ante todo paciente que presenta
un rápido deterioro en su estado mental. El retraso en el diagnóstico puede traer
consecuencias incluso fatales.
CUADRO CLINICO.
Por definición, se trata de un proceso agudo, de comienzo en horas, días o hasta 3
meses. Característicamente presenta fluctuaciones a lo largo del día (muchas veces están
tranquilos durante el día, pero al comenzar a oscurecer se agitan, fenómeno conocido
como “sundowning”).
Es frecuente que se presente con un pródromo caracterizado por intranquilidad,
hipersensibilidad a los estímulos visuales y auditivos, e inversión del ritmo sueño- vigilia
(también insomnio y pesadillas).
Es muy importante hacer un diagnóstico precoz, porque con un tratamiento adecuado la
mayoría de los pacientes logran recuperarse satisfactoriamente. La edad avanzada y una
mayor duración de la enfermedad ensombrecen el pronóstico, llegando a una mortalidad
hasta de 30%
Factores predisponentes a delirio: Multifactorial.