Origen Histórico Del Fideicomiso
Origen Histórico Del Fideicomiso
Origen Histórico Del Fideicomiso
Fiducias
La fiducia era un contrato de buena fe que consistía en la transmisión de un bien
originada por un acto entre vivos. Esta transmisión estaba acompañada de un pactum
fiduciae por el cual quien recibía la propiedad del bien (fiduciario) se obligaba a su vez
frente al transmitente (constituyente), a devolverle la propiedad o transmitirla a un
tercero (fideicomisario, o en ciertos casos al constituyente).
Con el tiempo al fiduciario se le fue acortando su facultad de abuso sobre los bienes
adquiridos para convertirse en un titular jurídico con potestades limitadas, limitaciones
que se dieron por las normas dictadas y por la priorización de la voluntad del
constituyente y los derechos de los beneficiarios por sobre el derecho de la propiedad
del fiduciario.
Fideicomisos Testamentarios
También llamado fideicomisum, fue utilizado cuando un testador quería favorecer a una
persona que era incapaz de sucederlo por los parámetros establecidos en las leyes de esa
época, por lo cual el testador le pedía a un heredero capaz de sucederlo que fuese el
ejecutor de una encomienda cuyo objeto era darle al incapaz un bien determinado o
parte del acervo hereditario. Al heredero gravado se lo llamó fiduciario y a la persona a
quien éste debía transmitirle los bienes fideicomisario.
En esta etapa se contemplaba un negocio fiduciario puro en donde la confianza es
absoluta puesto que, quedaba todo en la buena fe y conciencia del heredero fiduciario.
El fideicomiso en la actualidad es la manifestación del negocio fiduciario, que no es otra
cosa que todos aquellos supuestos en los que una persona transmite a otra, derechos
para que los ejerza en beneficio de sí misma o de un tercero, constituyendo la confianza
depositada en el fiduciario.
Intervienen tres partes en este negocio:
a) Fiduciante, Constituyente, Fideicomitante: es la parte que entrega los bienes
fideicomitidos, para que sean administrados o a enajenados.
b) Fiduciario, Mandatario: es quien recibe, administra, enajena los bienes.
c) Beneficiario, Fideicomisario: a quien se le entrega la cosa, o puede ser el mismo
fiduciante.
Bibliografía
Arturo Alessandri, M. S. (1998). Derecho Reales Tomo II. En Breve noticia histórica del
fideicomiso y las sustituciones fideicomisarias (págs. 52-55). Chile: editorial jurídica de
chile .
Ponce, J. D. (1998). Origenes y cuadro historico del fideicomiso. Chile: Pontificia Universidad
Católica de Chile.