Responsabilidad Patrimonial Genérica
Responsabilidad Patrimonial Genérica
Responsabilidad Patrimonial Genérica
Escuela de Derecho
Sección: 3D-1S
RESPONSABILIDAD PATRIMONIAL
GENÉRICA
Profesor: Bachilleres:
PRINCIPIOS GENERALES:
d.- La acción Pauliana requiere que el crédito sea anterior al acto fraudulento
mientras que en las acciones oblicua y de simulación no importa si el crédito es
anterior o posterior.
En el código civil Venezolano se encuentran dos clases de garantías:
Clases de Acreedores
Como bien sabemos, los acreedores son personas físicas o jurídicas que
han entregado un determinado crédito o un bien a otra persona (que se le llama
deudora) y que, a cambio de esto, espera recibir un pago. Sin embargo,
aunque la regla es la igualdad, no todos los acreedores tienen idénticos
derechos o privilegios.
“El obligado personalmente está sujeto a cumplir su obligación con todos sus
bienes habidos y por haber.”
Análisis
El patrimonio está formado no solo por los bienes y derechos que el deudor
tenga en un momento dado, sino también por los que en el futuro entren a
formar parte de su patrimonio siendo así, es obvio que el acreedor tenga un
marcado interés en la conservación del patrimonio de su deudor, pues mientras
ese patrimonio se conserve, mientras aumente, mayor garantía tendrá el
acreedor de ser satisfecho en su respectiva acreencia. Para proteger ese
legítimo interés del acreedor, el legislador le confiere determinados derechos y
acciones destinados a impedir que un deudor doloso (o culposo, negligente o
imprudente) sustraiga, oculte, enajene o disipe ese patrimonio y disminuya o
haga desaparecer así las garantías de su crédito.
Artículo 1864
"los bienes del deudor son la prenda común de sus acreedores, quienes tienen
en ellos un derecho igual, si no hay causas legítimas de preferencia".
Análisis
El deudor responde con su patrimonio del cumplimiento de sus obligaciones, y
este patrimonio es la garantía del crédito del acreedor, esto según lo que
establece nuestro ordenamiento jurídico
Artículo 1929:
Análisis
ACCIÓN OBLICUA.
“Los bienes del deudor son la prenda común de sus acreedores, quienes tienen
en ellos un derecho igual, si no hay causas legítimas de preferencia…” (Artículo
1.864 del CCV ). Y dicho patrimonio está formado no solo por los bienes y
derechos que el deudor tenga en un momento dado, sino también por los que
en el futuro entren a formar parte de su patrimonio esto de conformidad con lo
establecido en el artículo 1863 del Código Civil “El obligado personalmente está
sujeto a cumplir su obligación con todos sus bienes habidos y por haber.”
(Artículo 1.863 Código Civil Venezolano)
FUNDAMENTO LEGAL
1. El acreedor, actuando con derecho propio que le consagra la ley, ejerce las
acciones de un deudor y no las suyas propias. De este efecto surgen estas
consecuencias:
a) El tercero demandado por el acreedor puede alegar contra éste todas las
excepciones que tenga contra su acreedor.
b) El acreedor que intenta la acción oblicua actúa en nombre del deudor
c) El acreedor demandante puede obtener una sentencia condenatoria por un
valor mucho mayor al monto de su propio crédito
d) La acción oblicua se dirige directamente contra el deudor del deudor, no es
indispensable hacerlo parte en el juicio.
Acciones de Protección del Crédito
Esos derechos y acciones con los cuales el legislador faculta al acreedor para
asegurar su crédito, son de la más variada índole, pero la doctrina los ha
sistematizado en tres categorías: Las Acciones o medidas ejecutorias o
ejecutivas: por las cuales el acreedor a través de los órganos jurisdiccionales
del Estado, y una vez obtenida una sentencia definitivamente firme y
ejecutoriada o un acto equivalente, aprehende parte del patrimonio del deudor,
para cobrarse con su valor el respectivo crédito. Es el caso de la ejecución
forzosa de la obligación equivalente; Las Acciones Cautelares o preventivas:
son aquellas que no tienen como fin inmediato la ejecución del patrimonio del
deudor sino la aprehensión de parte del mismo para asegurar su existencia o
impedir que el deudor pueda disponer de sus bienes, para poder así en lo
futuro preparar la respectiva ejecución; y por último las Acciones
Conservatorias, estas acciones con las cuales el legislador faculta al acreedor
para impedir el perjuicio que pueda causarle un deudor que disipe o enajene
fraudulentamente su patrimonio, o no ejerza las acciones legales contra sus
respectivos deudores. Son llamadas acciones reparadoras o conservatorias,
pues tienden a reparar el perjuicio que sufriría el acreedor al ver disminuido el
patrimonio del deudor por dolo o culpa de éste, y además procuran la
conservación de dicho patrimonio, única garantía de su acción de crédito.
Estas condiciones conservatorias son la llamada acción oblicua, subrogaría o
indirecta; la acción pauliana, llamada también acción revocatoria o de fraude y
la acción por simulación. Las cuales son de gran importancia al momento de
proteger la acreencia del acreedor razón por la cual serán desarrolladas a
continuación.
Acción de Simulación y su Fundamento Legal
También puede decirse, que la acción de simulación o acción de declaración
de simulación, como también se le denomina es definida por la doctrina como
“aquella que compete a las partes del acto simulado o a los terceros
interesados, a fin de que se reconozca judicialmente la inexistencia del acto
ostensible, y con ello quedan desvanecidos los efectos que se imputaban a
dicho acto” (Emilio Calvo Baca. Comentario al Artículo 1.281 del Código Civil –
“Código Civil – Comentado y Concordado”).
Esta acción aparece consagrada en el mencionado dispositivo legal así:
Artículo 1.281.- Los acreedores pueden pedir la declaratoria de simulación de
los actos ejecutados por el deudor.
Esta acción dura cinco años a contar desde el día en que los acreedores
tuvieron noticia del acto simulado.
La simulación, una vez declarada, no produce efecto en perjuicio de los
terceros que, no teniendo conocimiento de ella, han adquirido derechos sobre
los inmuebles con anterioridad al requisito de la demanda por simulación.
Si los terceros han procedido de mala fe quedan no sólo sujetos a la acción de
simulación sino también a la de daños y perjuicios.
La simulación entonces supone la realización de dos actos o convenciones:
uno ficticio, aparente o simulado, y otro real o verdadero pero que es
mantenido en secreto por las partes. El acto simulado aparente y ficticio recibe
generalmente en doctrina la denominación de acto ostensible, mientras que el
acto verdadero o real se denomina comúnmente contradocumento.
Naturaleza Jurídica
Es una acción rescisoria con la que se busca evitar que el deudor, mediante
simulación de negocios jurídicos, defraude a su acreedor, para lo cual se
solicita al juez que declare la simulación del negocio
Supuesto de procedencia
Artículo 1.274.- El deudor no queda obligado sino por los daños y perjuicios
previstos o que han podido preverse al tiempo de la celebración del contrato,
cuando la falta de cumplimiento de la obligación no proviene de su dolo.
Análisis
El deudor solo queda obligado cuando los daños y perjuicios han sido
previsibles al momento de la celebración del contrato, si ha incumplido con su
obligación sin dolo. Es decir, su intención ha sido cumplir con la obligación,
pero queda obligado por los daños que ha sido previsibles al momento de la
celebración del contrato.
Análisis
Análisis
Si en el contrato se estipula que una de las partes por dejar de ejecutarlo deba
pagar una determinada cantidad por daños y perjuicios, debe respetarse esta
suma y las partes no la pueden modificar. Este artículo se aplica también
cuando se trata de determinación de daños y perjuicios bajo la fórmula de
cláusula penal o por medio de arras.
Artículo 1.277.- A falta de convenio en las obligaciones que tienen por objeto
una cantidad de dinero, los daños y perjuicios resultantes del retardo en el
cumplimiento consisten siempre en el pago del interés legal, salvo
disposiciones especiales. Se deben estos daños desde el día de la mora sin
que el acreedor esté obligado a comprobar ninguna pérdida.
Análisis
Cuando en una obligación cuyo objeto es una cantidad de dinero y las partes
no hayan estipulado convenio, los daños y perjuicios resultados del retardo en
el cumplimiento consistirán siempre en el pago del interés legal, desde el día
de la mora y el acreedor no está obligado a comprobar ninguna pérdida.