Bateria de Plomo y Acido
Bateria de Plomo y Acido
Bateria de Plomo y Acido
Las aplicaciones y características de las diferentes baterías de plomo son las siguientes:
En el interior de los acumuladores hay una serie de placas constituidas por un armazón de
aleación de plomo en forma de rejilla, en cuyos huecos se introducen óxidos de plomo
bien prensados. Todo esto queda formando un solo cuerpo, duro y compacto. De las
placas que hay en un acumulador, unas son positivas y otras negativas, diferenciándose
entre sí por su color, ya que las positivas tienen un color marrón, debido al dióxido de
plomo (PbO2 (s)), mientras que las negativas, al estar menos oxidadas, toman un color
plateado, más parecido al del plomo (Pb (s)). Todas las placas positivas y negativas se unen
entre sí por mediación de sendos puentes y están intercaladas unas entre las otras. En
todos los acumuladores hay siempre una placa más negativa que positiva (si hay cinco
placas negativas, debe haber cuatro positivas).
Entre cada dos placas se interpone un separador ③ para evitar el contacto eléctrico
entre ellas, impidiendo así la conducción metálica entre las placas de distinta polaridad y
permitiendo la conducción electrolítica libre. Los separadores se fabrican de distintos
materiales aislantes, básicamente polímeros (mezclas de PVC y PE) y vidrio. El conjunto de
las placas positivas y negativas va metido en el acumulador y cubierto por una tapa con
dos agujeros, uno en cada extremo, para que por ellos pase el borne de cada uno de los
puentes de conexión entre placas. El orificio central del tapón de llenado da salida a los
gases que se producen en el interior de los acumuladores, como consecuencia de las
reacciones que sufre la batería con las cargas y descargas. Si no lo tuviera, o estuviese
tapado por la suciedad, podría explotar la batería a causa de los gases sometidos a
excesiva presión. El orificio no es vertical, sino inclinado, para evitar que con los
movimientos del vehículo pueda salir líquido por él.
La tapa que cubre el acumulador va sujeta por una pasta que se echa por sus bordes.
Encima de la tapa van los puentes de conexiones entre los elementos; estos puentes
deben colocarse de tal manera, que queden conectados todos los acumuladores en serie,
para lo cual, el negativo de un acumulador debe estar unido al positivo del siguiente,
sumándose de esta forma la tensión de todos los acumuladores.
Los acumuladores llevan en su interior, en contacto con las placas, un líquido denominado
electrolito ④, compuesto por tres partes de ácido sulfúrico (H2SO4) y ocho partes de
agua destilada. El electrolito debe tener un nivel de un centímetro por encima de las
placas y su densidad máxima admisible deberá ser de 1.3 kg / L. Al entrar en la batería la
corriente eléctrica producida por el generador, esta corriente pasa desde el borne positivo
hasta las placas positivas y, de éstas, a través del electrolito, hasta las negativas, saliendo
por el borne negativo. Este paso de corriente eléctrica produce una reacción química
entre el ácido sulfúrico del electrolito y el plomo de las placas, quedando en éstas la
energía de dicha corriente. Cuando no hay corriente que cargue el acumulador, ésta
deshace la reacción química y se produce una corriente eléctrica de descarga.
Ambas semirreacciones producen iones Pb2+ (aq) debido a la oxidación del plomo
esponjoso Pb (s)) en el ánodo, y a la reducción del ión Pb4+ (aq) del dióxido de plomo
(PbO2 (s)) en el cátodo. Estos iones se unen a los aniones sulfato (SO42- (aq)),
precipitando la sal PbSO4 (s), que es muy poco soluble. El potencial de la reacción global
es ligeramente superior a 2 V, lo que explica que entre los seis acumuladores de una
batería de plomo se obtenga una tensión de trabajo de 12 V.
4.2. CARGA DE LA BATERIA DE PLOMO
Para cargar el acumulador se hace pasar una corriente eléctrica en sentido contrario al de
la descarga, con lo que vuelven a formarse el plomo esponjoso y el dióxido de plomo en
las placas. Por tanto, aparece nuevamente entre ambas diferencia de potencial. Las
reacciones químicas de la carga son exactamente las inversas a las de la descarga, siendo:
Estos son rangos generales de voltaje para baterías de 6 celdas de plomo y ácido:
Circuito abierto (inactivo) a plena carga: 12,6 V ~ 12,8 V (2,10 ~ 2,13 V por celda).
Circuito abierto a plena descarga: 11,8 V ~ 12,0 V.
Cargado a plena descarga: 10,5 V.
Umbral de gaseado: 14,4 V.
Después de plena carga la tensión de terminales caerá rápidamente a 13,2 V y
luego lentamente a 12,6 V.
Esto ocurre cuando el alternador ofrece de vuelta energía eléctrica a la batería. En una
batería nueva, los denominados componentes activos (plomo esponjoso y dióxido de
plomo) están en una proporción 1:1, pero los sucesivos procesos de carga y descarga
alteran está proporción, así como la concentración de ácido sulfúrico en el electrolito.
Debido a este deterioro paulatino, la batería de plomo deviene inservible con los años, al
no ofrecer electricidad a un voltaje suficiente. Se estima que dura entre 250 y 750 ciclos.
Existe la posibilidad de cargar la batería de plomo externamente, mediante una fuente de
corriente, pero este proceso suele llevarse a cabo tan sólo en aplicaciones de mucho
consumo de energía eléctrica.