Conclusiones Finales Oliva Fernandez

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EXP.

: 05452-2013-0-1801-JR-LA-74
ESPC.: JIMMY EDUARDO VILLANUEVA SOLANO
ESC. N°: CORRELATIVO
SUMILLA: ALCANZO CONCLUSIONES FINALES Y
OTROS.

SEÑOR(A) PRESIDENTE(A) DE LA DÉCIMA SALA LABORAL DE LA CORTE SUPERIOR DE


JUSTICIA DE LIMA. –

ISABEL HAIDEE OLIVA FERNANDEZ, en los


seguidos por ESSALUD sobre Nulidad de Resolución
Administrativa, a Ud. Con respeto digo:

Que, en mérito a lo notificado en la Resolución N° 16 de fecha 12 de septiembre de 2019


por el cual se señala VISTA DE LA CAUSA para el día 09 de enero de 2019, a efectos de ilustrar
al colegiado respecto de la infundabilidad de la demanda interpuesta; CUMPLO con alcanzar las
conclusiones finales de la defensa, peticionando que las mismas sean tomadas en cuenta al
momento de resolver.

En consecuencia, sirva usted, señor Juez, tener presente estas conclusiones y conforme a
ley y al mérito del proceso, declarar fundado el recurso de apelación, y en consecuencia revoque
la sentencia de primera instancia. En merito a los siguientes fundamentos:

1. RESPECTO A LA AUTONOMÍA DE LA REFERIDA IPSS (HOY ESSALUD):

En principio la Constitución de 1979 fue la primera que otorgó autonomía constitucional a


una institución encargada de la seguridad social en el país: “Artículo 14. Una institución autónoma
y descentralizada, con personería de derecho público y con fondos y reservas propios aportados
obligatoriamente por el Estado, empleadores y asegurados, tiene a su cargo la seguridad social
de los trabajadores y sus familiares”. Como vemos la Constitución de 1979 no precisa
taxativamente el nombre de esa institución, pero aún así se sobreentiende que se trata del IPSS, y
además de ello da las pautas generales para su organización autónoma.

Al respecto, toca hacer memoria, y remontarnos también a la CASACIÓN Nº 174-99, LIMA.


DIARIO OFICIAL EL PERUANO. SENTENCIAS EN CASACIÓN. MIÉRCOLES 1 DE
SEPTIEMBRE DE 1999, en la cual IPSS hoy Essalud basa el carácter de su “autonomía” en el
artículo 1º de su Ley Orgánica, Ley N° 24786; según la cual establece que dicho organismo es
una institución autónoma y descentralizada con personería pública de derecho interno, con
autonomía técnica, financiera, presupuestal y contable, fiscalizada por su propios organismos y de
control del Estado conforme a Ley; esta precisión dada en el proceso circunscrito a la Casación
referida, se dió con el fin de acreditar que le es aplicable la exoneración de costos y costas en la
litis que derivo a esa instancia extraordinaria.

La Sala Civil Transitoria de la Corte Suprema de Justicia de la Republica declaro FUNDADO


el Recurso de Casación interpuesto por el IPSS basándose en que al iniciarse el
proceso(5/NOV/1995) el IPSS todavía no había sido adscrito a los órganos del Poder Ejecutivo
(Presidencia del Consejo de Ministros, 3/FEB/1998; y Ministerio de Trabajo y Promoción
Social,18/JUN/1998); es decir la Corte sostuvo que el IPSS entró al proceso como una institución
autónoma de derecho público y considero ese estatus inamovible para sus fines procesales, aun
perdiéndolo en el transcurso del proceso. Es decir, la Corte Suprema señala que si bien, es a
partir del año 1995 que tal entidad pierde dicha autonomía, se infiere que antes de esto, esta si
gozaba de autonomía; en consecuencia, podemos afirmar que los incrementos remunerativos
señalados en los Decretos Supremos que contemplan el periodo comprendido entre julio de 1988
y agosto de 1992, como bien lo recoge el Tribunal Nacional del Servicio Civil, debieron sr
aplicables a la señora ISABEL HAIDEE OLIVA FERNANDEZ.

2. RESPECTO A CALIDAD DE EMPRESA NO FINANCIERA DE IPSS.

Se encuentra probado que, la señora ISABEL HAIDEE OLIVA FERNANDEZ, le corresponde


el pago de los incrementos remunerativo, cuyo pago ya ha sido reconocido y ordenado por el
Tribunal Nacional del Servicio Civil, que los incrementos remunerativos ya reconocidos por el
Tribunal del Se, toda vez que como ya se ha expuesto IPSS (hoy Essalud) no constituyó una
empresa no financiera del Estado, tampoco tuvo como finalidad el desarrollo de actividades
comprendidas en el ámbito empresarial del Estado; por lo cual, se encontró fuera del ámbito de
supervisión, dirección y responsabilidad del CONADE; siendo incorrectas, por tanto, las
afirmaciones efectuadas por la demandante en el sentido de que el IPSS en virtud de las leyes
presupuestales correspondientes a los años 1988 a 1992, estuvo sujeta a las directrices para las
empresas estatales no financieras sobre las cuales el CONADE ejercía funciones de
representación y supervisión; y, menos que el IPSS haya regido su política remunerativa en
función a las Directivas que aprobada por la Corporación Nacional de Desarrollo – CONADE, en
tanto que como ya lo hemos acreditado, esta ha gozado de autonomía plena reconocida no sólo
en la Carta Magna de 1979, sino que esta “autonomía” ha sido reconocida por la misma entidad
(Ley Órganica) y por la Corte Suprema en la Casación ya citada.
RESPECTO A LA LEYES PRESUPUESTALES DE LOS AÑOS 1988 A 1992:

La Ley de Presupuesto del sector público consiste en una estimación financiera de los
ingresos y una autorización de los gastos para un año determinado. Existe porque es necesario
compatibilizar los recursos disponibles con el logro de metas y objetivos previamente
determinados, dicha ley está destinada a fijar los límites en el gasto de los poderes del Estado,
gobiernos regionales y locales, así como de los organismos constitucionalmente autónomos.

En lo concerniente al presente caso, la Ley N° 2476, la cual aprobó el presupuesto de los


Organismos del Sector Público para el año 1988 en su artículo 204 prevé: “Para la ejecución de
sus respectivos presupuestos, el Banco Central de Reserva, Superintendencia de Banca y
Seguros, el Instituto Peruano de Seguridad Social, la Comisión Nacional Supervisora de
Empresas y Valores, el Fondo de Promoción Turística y el Instituto de Comercio Exterior, deben
regirse obligatoriamente por las normas que se establecen en la presente Ley(…).” Se puede
inferir pues, que la norma establece una excepcionalidad, y dispone que la ley (que en la práctica
debe ser aplicada a las empresas del Estado) sea también de aplicación para los organismos
mencionados; a lo cual resaltamos que dichas instituciones a la fecha de vigencia de la norma
gozaban de autonomía, es por esto que la norma taxativamente prevé una excepción; la
aplicación de la norma la cual debía abarcar obligatoriamente también a dichos organismos
constitucionalmente autónomos, de los cuales apreciamos y señalamos está incluido el IPSS (hoy
Essalud).

Sin perjuicio de lo expuesto, señalamos que las leyes posteriores: Ley N° 24977, Ley D.L
N° 556, Ley N° 25293 y la Ley N° 26388, referidas también a la aprobación del presupuesto de los
Organismos del Sector Público, de los años 1989, 1990, 1991 y 1992, establecen un texto similar
en los artículos referidos a la excepcionalidad de la aplicación, esto es que: “Para la ejecución de
sus respectivos presupuestos (…) el Instituto Peruano de Seguridad Social y otros , deben regirse
obligatoriamente por las normas que se establecen en dicha ley”.

Por lo expuesto, resulta evidente que IPSS (hoy Essalud) no estuvo bajo supervisión del
CONADE, toda vez que como el mismo texto de su Ley Orgánica lo estableció, así como el art. 14
de la Constitución Política de 1974, dicha entidad si gozo de autonomía, y aún cuando Essalud
pretenda desconocer dicha característica, es la propia entidad que en la Casación citada en el
punto 1° quien reconoce tal autonomía, dejando en evidencia que la supuesta supervisión de
CONADE, solo es utilizada como argumento para desconocer la Resolución N° 06336-2012-
SERVIR-SEGUNDA SALA. Y aún cuando trate de aparentar que las leyes de presupuesto de los
años 1988 a 1992, la incluyen como empresa del Estado, queda claro que dicha entidad nunca
gozó de tal condición, toda vez que gozaba de autonomía propia.

POR LO EXPUESTO:
Sirva usted, señor Juez, tener presente estas conclusiones, en consecuencia provea
conforme a ley.

PRIMER OTROSI DIGO: Nombro como mis abogados a la letrada Gema Silva Escalante, con
Reg. ICAC N° 1092 y al Abogado Rafhael Cuzco Gomez con Registro CAL N° 39951, a quienes
les otorgo todas las facultades y prerrogativas procesales para el ejercicio de mi defensa técnica.

SEGUNDO OTROSÍ DIGO: Al haber tomado conocimiento de la Resolución N° 13 ,acudo a su


despacho a fin de señalar DOMICILIO PROCESAL POSTAL en la Casilla Judicial N° 21425 de
la central de Notificaciones del Poder Judicial de Lima y CASILLA ELECTRÓNICA N° 53467
asignada por el Poder Judicial, dónde se me deberá notificar las resoluciones pertinentes.

Trujillo, 14 de noviembre de 2019.

_______________________
ISABEL HAIDEE OLIVA FERNANDEZ
DNI N° 03855959

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