Félix Rubén García Sarmiento
Félix Rubén García Sarmiento
Félix Rubén García Sarmiento
Félix Rubén García Sarmiento, conocido como Rubén Darío (Metapa, hoy
Ciudad Darío , Matagalpa , 18 de enero de 1867 - León , 6 de febrero de 1916 ),
fue un poeta nicaragüense , máximo representante del modernismo literario
en lengua española . Es, posiblemente, el poeta que ha tenido una mayor y
más duradera influencia en la poesía del siglo XX en el ámbito hispánico. Es
llamado príncipe de las letras castellanas.
Fue el primer hijo del matrimonio formado por Manuel García y Rosa
Sarmiento, quienes se habían casado en León (Nicaragua) el 26 de abril de
1866 , tras conseguir las dispensas eclesiásticas necesarias, pues se trataba de
primos segundos. Sin embargo, la conducta de Manuel, aficionado en exceso al
alcohol y a las prostitutas, hizo que Rosa, ya embarazada, tomara la decisión
de abandonar el hogar conyugal y refugiarse en la ciudad de Metapa , en la
que dio a luz a su hijo, Félix Rubén. El matrimonio terminaría por
reconciliarse, e incluso Rosa llegó a dar a luz a otra hija de Manuel, Cándida
Rosa, quien murió a los pocos días. La relación se volvió a deteriorar y Rosa
abandonó a su marido para ir a vivir con su hijo en casa de una tía suya,
Bernarda Sarmiento, que vivía con su esposo, el coronel Félix Ramírez
Madregil, en la misma ciudad de León. Rosa Sarmiento conoció poco después a
otro hombre, y estableció con él su residencia en San Marcos de Colón , en el
departamento de Choluteca , en Honduras .
Aunque según su fe de bautismo el primer apellido de Rubén era García, la
familia paterna era conocida desde generaciones por el apellido Darío. El
propio Rubén lo explica en su autobiografía:
Según lo que algunos ancianos de aquella ciudad de mi infancia me han
referido, uno de mis tatarabuelos tenía por nombre Darío. En la pequeña
población conocíale todo el mundo por don Darío; a sus hijos e hijas, por los
Daríos, las Daríos. Fue así desapareciendo el primer apellido, a punto de que
mi bisabuela paterna firmaba ya Rita Darío; y ello, convertido en patronímico,
llegó a adquirir valor legal; pues mi padre, que era comerciante, realizó todos
sus negocios ya con el nombre de Manuel Darío [...]