Chi Kung - Ba Duan Jin - Las 8 Piezas Del Brocado (Doc)
Chi Kung - Ba Duan Jin - Las 8 Piezas Del Brocado (Doc)
Chi Kung - Ba Duan Jin - Las 8 Piezas Del Brocado (Doc)
Existen dos formas de ejercicios de ba duan jin, una sentado y otra de pie . Es una forma de Chi Kung
externo. La energía se crea en el exterior, brazos, cintura, con objeto de activar la circulación del Qi y alimentar
los órganos internos.
Diversos autores atribuyen el origen de estos ejercicios a Zhong Li (Chung-li Ch'üan) de la dinastía Tang
(618-907). (Catherine Despeux - La Moelle du Phénix Rouge, Thomas Cleary - Vitality Energy Spirit: A Taoist
Sourcebook) .
La descripción del grupo de 8 ejercicios sentado, aparece por primera vez en el Zhongli Baduanjinfa,
apéndice del Xiuzhen Shishu (Diez Textos para el Estudio de la Realidad), incluido en el Canon Taoísta
(Daozang, TT 263, fascículo 125, juan 19), fechado hacia el s. XII. El origen de estos ejercicios lo indica una
introducción escrita por Zeng Zao, letrado muerto alrededor de 1150 y autor de una enciclopedia sobre alquimia
interna (el Daoshu): "Los 8 ejercicios de Zhong Li fueron, dice él, grabados sobre un muro de piedra de la mano
del Maestro Lü (Lü Dongbin); así fueron transmitidos al mundo".
Zhong Li se dice que fue el maestro del Ancestro Lü. Este, a su vez, fue el precursor del Taoísmo de la
Realidad Completa, escuela de la que formó parte Chang San-feng a quien se atribuye el origen del Tai chi
chuan.
Los ejercicios de las 8 piezas del brocado se han de considerar como un sincretismo de técnicas
gimnásticas, de absorción del hálito, de visualización y de alquimia interna. Es una serie sencilla que supone una
transición de una parte a las técnicas de absorción del hálito y los diversos procedimientos psicofisiológicos de
los Tang y por otra al sistema de alquimia interior de los Song.
"La leyenda atribuye a Yue Fei (1.103 d.c.) la puesta a punto del Baduanjin de pie en la época Song,
aunque en esa dinastía, todo parece que fue inventado por este personaje (artes de lanza, bajiquan, garra del
águila, qinna, xingyiquan, etc.). Lo que si es cierto es que el Baduanjin taoísta penetró en el monasterio de
Shaolin en tiempos de los Song, a partir de un texto conocido como She Sheng Yaoyi. Cabe decir que en la
tradición budista Shaolin, el Baduanjin pasó a llamarse yijinjing shi’er duanjin (12 ejercicios de seda según el
clásico de transformación de tendones), pero que es solamente una manera distinta de contar las acciones y
gestos rituales. No puedo asegurarlo, pero creo que la sucesión fue más o menos así: en el año 1624 pasó de
manos taoístas a budistas, gracias al continuo intercambio de conocimientos entre ambas escuelas. Durante la
dinastía Qing (1644-1911) se fue transmitiendo entre maestros budistas en forma de manuscrito titulado
“yijinjing” (Clásico de la transformación de los tendones). Contenía los siguientes capítulos: teoría general de
yijinjing; tratado de fortalecimiento interior; fortalecimiento interior del héroe místico; ocho ejercicios de seda para
el fortalecimiento externo del héroe místico; gráfico de las doce posturas. En 1854, un hombre llamado Wang
Zuyuan, quien residió durante 3 meses en Shaolin, vio este texto y reconoció en él los ejercicios taoístas del
Baduanjin. Renovó el texto y publico el Neigong Tushuo (explicaciones y gráficos del ejercicio interno). De aquí
se extrajeron los ocho ejercicios de pie que se han transmitido casi intactos hasta nuestros días.
El Baduanjin de pie se hizo muy famoso a partir de 1926, cuando W.C. Wang y Gunsun Hoh lo
publicaron en un periódico de Shanghai y causó un furor excepcional entre los practicantes de Taiji y wushu.
Todo el mundo hablaba de él y lo incluía en los currículos de artes marciales. De ahí su fama. Por cierto, en la
década de los 30 y 40 hubo un grupo de taoístas relacionados con la tradición alquímica y de energética que
publicaron dos periódicos con poemas, explicaciones, metodologías, etc. sobre “estudios inmortalistas”, dirigidos
por Chen Yingning, un maestro taoísta de especial trascendencia, todavía bastante desconocido en Occidente.
En fin, Baduanjin llegó a ser tan famoso que se dice que era el Qigong que practicaban el propio Mao Zedong y
Zhou Enlai. De hecho fue uno de los primeros ejercicios rehabilitados en la década de los 50 si bien despojado
de su contenido taoísta y adaptado al mensaje socialista de la China del momento."
Hay muchas variaciones de los ocho ejercicios, en especial de la forma de pie que es la más popular. Es
importante entender la intención de los mismos, su raíz. Si comprendemos esta intención entenderemos
cualquiera de sus variantes y su ejecución será efectiva. La práctica de los ejercicios requiere relajación,
suavidad y cierta perfección. La respiración debe ser ligera y acompañar a los movimientos. Las variaciones
practicadas deben ser acordes a nuestra capacidad para avanzar gradualmente (uno, dos o tres años).
La descripción que sigue de las ocho piezas del brocado de pie se adapta a la forma sencilla publicada
por la Comisión de Deportes Nacional de China que explican muy bien, con diferentes matices, los autores Sifu
Sebastián González quien lo enseña según tradición e Yves Requena.
Según nuestro nivel u objetivos acentuaremos unos u otros aspectos en su práctica, gimnástica,
visualización, etc,.
Nos agachamos ligeramente, con la espalda recta y sin sacar las nalgas.
Cruzamos las manos delante del abdomen con las palmas mirando hacia arriba.
Elevamos al mismo tiempo las manos y el cuerpo. La respiración desciende hasta
el abdomen. Los pulmones se llenan al tiempo que ascendemos aspirando. Al
llegar al pecho las palmas giran hacia nosotros para orientarse hacia el cielo.
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Seguimos levantando las palmas al tiempo que elevamos los talones. Finalmente sostenemos el cielo
totalmente extendidos, mientras hundimos las puntas de los pies en la tierra.
Cuidaremos que, al elevar las manos, lleguen a quedar en ángulo recto en relación a los brazos y que
los brazos estén rectos. Relajamos la musculatura de los hombros, brazos y cuello. La pelvis ha de estar
basculada y la espalda recta.
Haremos la intención de empujar hacia arriba y abriremos despacio los brazos hacia los lados como si
fuésemos un pájaro que despliega sus alas, en un círculo amplio; mientras espiramos lentamente vaciando los
pulmones de arriba hacia abajo al ritmo de los brazos.
Repetiremos este ejercicio un número fijo de veces, 6, 9, 12, 24, 36 según la planificación de la sesión.
La respiración nunca debe ser forzada por lo que la velocidad del ejercicio dependerá de la respiración y
no lo contrario.
Este ejercicio activa la circulación del triple calentador ( Sanjiao ), un órgano definido en la MTC, sin
correspondencia física, cuyo objeto es sintetizar y distribuir la energía (Qi) en el cuerpo. El triple calentador tiene
tres áreas o calderas, el quemador superior, situado encima del diafragma y relacionado con la respiración, el
quemador medio, situado en la zona del estómago y relacionado con la digestión, y el quemador inferior situado
en la zona pélvica y relacionado con la eliminación.
También efectuamos un estiramiento del tejido conjuntivo que sujeta a los órganos internos que reciben
una masaje suave, y de los tendones y notamos como se liberan los bloqueos producidos por la tensión
acumulada, gracias a la acción integral de huesos, tendones, músculos y órganos.
Variación 1
Existe una forma más sencilla de realizar este ejercicio. Partimos de una posición de firmes y elevamos
las manos por los costados hasta enfrentar las puntas de los dedos encima de la cabeza. Las muñecas en el
exterior. No elevamos los pies ni cruzamos los dedos.
Desarrollo
2 - Apuntar a un águila lejana vigoriza la cintura y los riñones También los músculos y tendones de brazos y
hombros y aumenta la capacidad pulmonar
(Abrir el arco a derecha e izquierda para darle al halcón)
Damos un paso a la izquierda y doblamos las rodillas para adoptar la posición de un jinete. Mantenemos
derecha la parte superior del cuerpo, con los muslos paralelos al suelo. La pelvis girada, mantiene recta la
columna, sin flexionar las vértebras lumbares. Las rodillas no han de sobrepasar la punta de los pies, caso
contrario podemos hacernos daño.
(inhalación) Doblamos los brazos hacia el cuerpo a la altura del pecho, el derecho por la parte exterior.
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Extendemos los dedos índice y pulgar de la mano izquierda y cerramos los otros dedos.
Empujamos hacia la izquierda con la mano izquierda y levantamos el codo derecho hacia
la derecha; mantenemos los ojos fijos en la mano izquierda y el codo derecho a la altura
del hombro. La mano derecha tensando el arco. La mirada apuntando a través del índice
a lo lejos.
Solo giramos el cuello y la cabeza. El torso permanece orientado al frente. La cintura no gira.
Los movimientos de las diferentes partes del cuerpo han de estar coordinados y poseer cierta simetría.
(exhalación) Volvemos al centro, los brazos cruzados, pero esta vez el antebrazo izquierdo por fuera. Al mismo
tiempo elevamos las rodillas hasta casi estirarlas. Seguimos con el ejercicio hacia la derecha, de forma
simétrica.
Este ejercicio mejora la respiración y las funciones circulatorias. Por el movimiento de los brazos y la
extensión de los dedos índice, el ejercicio tonifica los meridianos de los pulmones y del intestino grueso.
Tonifica el Qi de los riñones y el meridiano especial dai mai que pasa por el ming men.
3 - Separar las manos regula el bazo (yin) y el estómago (yang) y mantener la circulación de energía a
través de los órganos internos
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Este ejercicio regula los Qi del estómago, páncreas y bazo. Disminuye el yang del estómago y aumenta el yin
del bazo. Mejora la digestión, el tránsito y la circulación sanguínea..
La cabeza, el tronco y la pierna derecha quedan en línea; la vista se dirige a la punta del pie derecho,
pero no se inclina la cabeza. Mantener la postura un momento.
(exhalamos) Retornamos al centro para repetir el mismo ejercicio hacia el lado derecho.
5 - Volver la vista atrás previene las cinco debilidades y las siete llagas, fortalece músculos del cuello y
pecho y los pulmones
En la postura inicial y durante la inhalación la concentración se fija en el dantien. Mientras nos volvemos
exhalamos el aire y la concentración pasa del dantien al hui yin y luego a los yong quan. El espíritu dirige el Qi.
Derivamos el Qi de dantien a tierra con objeto de eliminar el qi contaminado por las cinco debilidades (las
enfermedades de los cinco órganos: hígado, corazón, bazo, pulmones y riñones perjudicados por las energías
climáticas del viento, el calor, la humedad, la sequedad o el frío, o las dietéticas de los sabores ácido, amargo,
dulce, picante o salado) y las cinco llagas (las siete emociones fundamentales: cólera, júbilo excesivo, pena,
tristeza, desesperación, temor y pánico).
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6 - Tocar los pies con ambas manos vigoriza la cintura y los riñones
Partiendo de la posición inicial nos agachamos ligeramente, con la espalda recta y sin sacar las nalgas.
(inhalamos) Elevamos los brazos lateralmente por encima de la cabeza hasta enfrentar las palmas de las
manos. Volvemos las palmas hacia adelante. La mente se dirige a hui yin (perineo). La espalda se ha de
mantener recta mediante la retroversión de la pelvis.
La energía vital jing se almacena en la región renal, punto ming men. Dirigimos la concentración
sucesivamente a ming men, hui yin y chang qiang, lo cual se describe como "invocarla en su lugar de residencia
y hacer que descienda.
(inhalación) Relajamos la mirada y los puños mientras el brazo regresa a la altura de la cintura. (exhalación)
Desplegamos el brazo derecho.
El qi del hígado "ensancha el yang y despliega el yin". Se regula la energía generada con los ejercicios
precedentes transmitiéndola a los músculos.
8 - Elevarse sobre la punta de los pies regula los seis meridianos mayores
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Se puede empezar con la repetición de tres ciclos y llegar a nueve.
Al concluir puede ser conveniente estirar los gemelos. Para ello levantamos algo una de las piernas y
estiramos los dedos de los pies hacia nosotros tanto como podamos, lanzando el talón hacia adelante. Después
hacemos lo mismo con la otra pierna.
Distribuye la energía por todo el cuerpo.