Informe Bitcoin
Informe Bitcoin
Informe Bitcoin
¿Qué es eso?
El Bitcoin es una entre muchas divisas digitales conocidas como criptomonedas. Sus
dos principales características son que, diferencia de las monedas tradicionales, se
puede realizar transacciones directamente entre particulares, sin intervención de
terceros (como los bancos) y que su funcionamiento no depende de una institución
central, sino de una base de datos distribuida.
“Un acuerdo voluntario entre sus usuarios para utilizar 21 millones de fichas
cifradas, y matemáticamente seguras, como moneda. Es decir: como unidad de
cuenta, medio de pago y reserva de valor”.
Desde un punto de vista más jurídico, Pablo Fdez. Burgueño (abogado fundador de
Abanlex, bufete especializado en Bitcoins) define así esta criptomoneda:
3.- Características.
A) Open Software
De la misma manera que nadie controla la tecnología detrás del correo electrónico,
Bitcoin tampoco tiene propietarios. Bitcoin lo controlan todos los usuarios de Bitcoin
del mundo. Aunque los programadores mejoran el software, no pueden forzar un
cambio en el protocolo de Bitcoin porque todos los demás usuarios son libres de elegir
el software y la versión que quieran. Para que sigan siendo compatibles entre sí, todos
los usuarios necesitan utilizar software que cumpla con las mismas reglas. Bitcoin sólo
puede funcionar correctamente si hay consenso entre todos los usuarios. Por lo tanto,
todos los usuarios y programadores tienen un gran aliciente en proteger dicho
consenso.
B) Cómo funciona:
Estos algoritmos son los que aportan a cada dato que se sube a la red Blockchain una
prueba de existencia, integridad, etc. Permitiendo que terceros comprueben la
legalidad de los mismos en caso de necesidad. Otra de las virtudes de la cadena de
bloques es la de poder vincular unívocamente a cada usuario, y que el identificador de
cada usuario esté vinculado a una persona real, como si fuera una cuenta bancaria
Quizás el mayor logro del creador del Bitcoin sea el de haber resuelto el problema del
doble gasto en un sistema descentralizado, que tanto ha desvelado a economistas y
programadores. Para evitar que un mismo Bitcoin sea gastado más de una vez por la
misma persona (en otras palabras, para evitar la falsificación), la red se vale de un
“servidor de tiempo distribuido”, que identifica y ordena secuencialmente las
transacciones e impide su modificación. Esto se logra por medio de pruebas de trabajo
encadenadas también conocidas como POW por sus siglas en inglés (Proof of work)
Dicho trabajo es realizado por los “mineros”.
Pero esta moneda ha recibido múltiples ataques de hackers. El problema que todavía
no ha resuelto el protocolo Bitcoin es su vulnerabilidad más común: el fallo del usuario.
Los archivos de la cartera Bitcoin que almacenan las necesarias claves privadas
pueden ser borradas, perdidas o robadas por los hackers. Para intentar paliar el
problema se han creado algunas características que aportan mayor seguridad a ese
punto, como la encriptación del monedero, monederos offline, monederos físicos y
transacciones multi-firma.
E) Los mineros
Los servicios que ofrecen los mineros es el de procesar las transacciones y asegurar
la red usando un hardware especializado. Ellos son los que llevan a cabo las pruebas
de trabajo encadenadas (POW) que en su conjunto forman el conocido Blockchain
asegurando la veracidad de las transacciones y el correcto funcionamiento de todo el
protocolo Bitcoin.
Al contrario de lo que pueda parecer, ser minero no es fácil. No basta con tener un
ordenador, es necesario tener un hardware especializado con un poder de
computación fuera de lo normal. Ser minero conlleva una gran inversión además de
que cuantos más mineros acceden a la red, más incrementa la dificultad para obtener
beneficios y los mineros deben buscar la mayor eficiencia para reducir sus costes
operativos.
Su actividad se recompensa por dos vías. Primero, con la entrega de los Bitcoins
creados por ellos a partir de la solución de bloques; segundo, con las comisiones por
acelerar las transacciones realizadas entre particulares. Estas dos vías de ingresos se
complementan entre ellas de forma que con el paso del tiempo se crean menos
Bitcoins pero habrá más en circulación y se harán más transacciones.
F) Creación de Bitcoins y su límite.
Dicha limitación es una medida anti-inflacionista. Sin embargo, esto nunca será una
limitación a su intercambio entre agentes de mercado pues los Bitcoin pueden dividirse
hasta en 8 cifras decimales (0.000 000 01 BTC) e incluso unidades mas pequeñas si
es que así se lo requiere en el futuro. Conforme el tamaño promedio de transacciones
decrece, estas pueden ser denominadas como sub-unidades de Bitcoin, como por
ejemplo el milliBitcoin (1 mBTC o 0.001 BTC).
4.- Ventajas y oportunidades.
6.- Legal.
A) Naturaleza Jurídica
No es dinero electrónico. Lo primero que se puede pensar sobre una divisa digital es
acudir a la Ley 21/2011, de 26 de Junio, de Dinero Electrónico. Sin embargo, al leer la
definición de dinero electrónico de su artículo 1.2 podemos ver que la naturaleza del
Bitcoin no encaja con la misma:
"Todo valor monetario almacenado por medios electrónicos o magnéticos que
represente un crédito sobre el emisor, que se emita al recibo de fondos con el
propósito de efectuar operaciones de pago según se definen en el artículo 2.5
de la Ley 16/2009, de 13 de noviembre, de servicios de pago, y que sea
aceptado por una persona física o jurídica distinta del emisor de dinero
electrónico".
Una vez establecida esa premisa, hay que buscar la naturaleza jurídica del Bitcoin:
B) IVA
Por ahora es lo más claro que tenemos respecto a los efectos legales del Bitcoin. El
Informe de la consulta Nº V1029-15 (30 marzo 2015) del Ministerio de Hacienda,
mencionado anteriormente, no deja duda al respecto.
Las monedas virtuales Bitcoin actúan como un medio de pago y por sus
propias características deben entenderse incluidas dentro del concepto «otros
efectos comerciales» por lo que su transmisión debe quedar sujeta y exenta del
Impuesto.”
Esta decisión del gobierno español de calificar Bitcoin como un medio legal de pago, y
por tanto no estar sujeto a IVA, coincide con la de países vecinos como Alemania,
Reino Unido o Finlandia.
Todas las cantidades deben mostrarse en una moneda de curso legal (euros o
dólares, por ejemplo), y, al menos, el importe del Impuesto (IVA o IGIC) tiene que
mostrarse en euros, según indica el RD 1619/2012 (art. 12.1). Las permutas en las
que el Bitcoin es objeto de cambio, están sujetas al IVA y constituyen un gasto
deducible, según indica la Ley 37/1992 (art. 79.1).
Imaginemos que queremos vender una mesa por 100€. La factura podría ser de la
siguiente forma:
Concepto…………………100,00€ (0.6396BTC)
IVA (21%)………………….21,00€ (0.1343BTC)
Total………………………..121,00€ (0.7739BTC)
C) Fiscalidad
Este campo es uno de los retos más difíciles que plantea el Bitcoin y su Protocolo
Blockchain.
El Bitcoin se puede considerar un verdadero peligro para los Estados en la medida que
su sistema, descentralizado y completamente anónimo, puede dejar sin sentido el
sistema fiscal tal y como lo conocemos. Gracias a las propiedades ya explicadas de
esta divisa digital, un usuario puede actuar de tal forma que sus operaciones sean
completamente anónimas e irrastreables. De este modo es imposible calcular el IVA,
IRPF, IS, etc. Estamos ante una autopista para la defraudación tributaria.
Otro importante problema causado por las características del Bitcoin es que, en un
hipotético caso en el que un sujeto haya sustituido su todo su dinero tradicional por
unidades Bitcoin, hace más tedioso y complicado ejecutar las sentencias
condenatorias de pago o cobrar las multas de toda clase.
“El art. 7.r de dicha ley es tajante cuando dice que si los bancos no pueden llevar a
cabo de forma diligente esa comprobación, no establecerán relaciones de negocio ni
ejecutarán operaciones o podrán fin a las mismas. Se trata de un mandato legal
imperativo que se impone a la voluntad de las partes”
Dadas las características del Bitcoin, resultará muy difícil que las empresas dedicadas
a la compraventa de esta criptomoneda cumplan al pie de la letra las disposiciones
legales a las que se refiere, por lo que no es descartable la necesidad de actualización
de la Ley PBC/FT.
E) Regulación Internacional.