ESCRITORES DE LA LIBERTAD Resumen
ESCRITORES DE LA LIBERTAD Resumen
ESCRITORES DE LA LIBERTAD Resumen
Basado en una historia real, el relato está situado en el año 1995, en el marco de los
conflictos raciales ocasionados por el incidente de Rodney King, taxista negro
golpeado brutalmente por la policía mientras estaba esposado, grabado por un video
aficionado que envía el video a los medios de comunicación. El video circula por
todos los medios del mundo y da lugar a una serie de reclamos y protestas raciales.
La película comienza con imágenes de archivo de los disturbios en varios suburbios
de Los Ángeles, lo cual coloca la violencia racial y la discriminación como telón de
fondo, y sirve para enmarcar uno de los problemas principales que plantea la
película.
El colegio donde debe enseñar Erin tiene un programa de integración, que implica
aceptar alumnos/as “problemáticos/as” provenientes de sectores desfavorecidos,
en su mayoría pertenecientes a minorías étnicas. Debido al ingreso de estos/as
nuevos/as estudiantes, el colegio modifica su promedio académico y, según plantean
las autoridades y profesores/as, esto perjudica la imagen de la institución. Al ir
transcurriendo su trabajo en el establecimiento, Erin comienza a notar que el
colegio repite los mismos prejuicios y estigmatizaciones con los cuales la sociedad
margina a esos/as alumnos/as. Las mismas faltas de oportunidades y posibilidades
se reflejan en el trato diferenciado que tienen las autoridades con respecto a los/
as estudiantes “menos favorecidos/as”, desde la selección de material didáctico
hasta las expectativas de logros de estos sujetos (casi nulas por parte de los/as
profesores). Gruwell percibe que la institución, que debería darle herramientas
para revertir los prejuicios que condicionan su desarrollo tanto social como
emocional, es precisamente la que los refuerza y multiplica. Los/as profesores/ as
se niegan a enseñar, esperan que estos/as estudiantes se cansen y abandonen la
escuela (“lo van a hacer de todas maneras”); las autoridades no brindan materiales
didácticos para que “no los arruinen”: estos materiales son para el “resto de los
alumnos”.
EL OTRO Una de las primeras dificultades con las que se encuentra Erin Gruwell
(interpretada por Hilary Swank) es ver que las diferencias y divisiones entre los/as
alumnos/as están tan arraigadas en sus comportamiento, que se repiten dentro del
ámbito de la clase. Los distintos grupos que se arman en el salón son reflejo de las
segregaciones que se ven en las calles, esas calles violentas, teñidas de prejuicios
raciales. Hay fronteras dentro del colegio, y cruzarlas puede ser peligroso incluso
para el profesor. El colegio no sólo enseña contenidos específicos (ya sea geografía,
historia, matemáticas o cualquier otra materia) sino modos de relacionarse y
vincularse con los/as otros/as. Establece relaciones de poder que serán repetidas
luego de finalizada la educación formal. Erin ve que esta manera de vincularse con el
otro es imposible de modificar sin transformar la manera en que ella (y por ende la
institución que ella representa) se relaciona con sus estudiantes.
En la primera entrevista que tiene con su supervisora, esta le sugiere que baje un
poco el nivel (o las pretensiones) de su programa de estudios. Según las autoridades
del colegio, sus alumnos/as no van a poder entender el vocabulario de muchos de los
textos. Las autoridades habían decidido de antemano no apostar al desarrollo
educativo de estos sujetos “problemáticos” provenientes de programas de
integración, sin escuchar previamente sus problemas, ni intentar medir sus
potencialidades reales (en caso de que eso fuera posible). Habían decidido no
brindar herramientas para intentar modificar su condición de marginalidad tanto
económica como étnica. En definitiva, reforzaban aquello que los/as jóvenes vivían
en sus diferentes contextos sociales. Al notar esto, ellos/as sentían un desinterés
difícil de desarraigar. ¿Para qué estudiar si no va a modificar nada? ¿Dónde
encontrar motivación si aquellos/as que deben inspirar confianza y estimularlos ya
los condenaron de entrada? ¿Cómo reconciliarse con el otro, si el otro refuerza de
manera violenta esa distancia? Lo primero que intenta la profesora al notar estas
fronteras dentro del aula es romperlas, y lo hace de un modo práctico: los/as
cambia de lugar, hace que se sienten junto a compañeros/as que, por propia
decisión, no elegirían. Este sencillo acto de cambiar de lugar a los/as estudiantes,
acto común a cualquiera que alguna vez haya estado frente a un aula, provoca un
primer movimiento entre los/as alumnos/as y pone en evidencia uno de los
principales problemas con los que trabaja la película: la falta de tolerancia hacia el
otro.
En el tratamiento que da la película a este tema (entre otros), radica su importancia
como elemento disparador de reflexión dentro del aula. La profesora Gruwell lejos
de dar por sentado estas divisiones o de imponer una convivencia en base a una
autoridad irreflexiva, intenta que los estudiantes modifiquen su forma de pensar.
En un momento de la trama, Erin descubre que sus alumnos/as están haciendo
circular un papel entre ellos. El papel tiene dibujada la caricatura de uno de los
alumnos: el dibujo de un joven negro con los labios hinchados, resaltando los típicos
rasgos étnicos. En base a este incidente Erin Gruwell se da cuenta de que sus
estudiantes no son conscientes de las consecuencias de este tipo de actos. Entiende
cómo estas acciones estigmatizan a los/as destinatarios/ as de estas burlas,
creando estereotipos que luego se fosilizan en el imaginario colectivo, segregando a
las distintas minorías, caricaturizando sus características tanto físicas como
socioeconómicas. Este tipo de acciones producidas por grupos sociales dominantes y
repetidas de manera natural por el resto de la sociedad, fomentan una serie de
prejuicios que son el fundamento de un tipo de violencia latente e invisible.
Otro de los momentos de Escritores de la libertad en donde se puede ver este tipo
de estrategias, es el pasaje en el que Gruwell selecciona un libro, en tensión con las
autoridades del colegio, que por la temática y el lenguaje utilizados, logra interesar
a los/as alumnos/as. El libro relata la vida de un pandillero que cae preso y cuenta
su experiencia en la cárcel. Los/as estudiantes se encuentran con una concepción
nueva de la literatura. Una literatura que los/as incluye, con un lenguaje y una
problemática más cercana a ellos/as.