Este texto argumenta que el viajero moderno está más interesado en hacerse selfies durante sus viajes y publicarlas en Instagram para ganar prestigio social, en lugar de enfocarse en las experiencias del viaje en sí mismas. El autor contrasta al viajero tradicional, que se enfocaba en paisajes y momentos significativos, con el viajero actual obsesionado con compartir su vida a través de fotos. El propósito del viaje ahora es exhibir públicamente que uno está viajando a través de una serie de imágenes, más que el viaje
Este texto argumenta que el viajero moderno está más interesado en hacerse selfies durante sus viajes y publicarlas en Instagram para ganar prestigio social, en lugar de enfocarse en las experiencias del viaje en sí mismas. El autor contrasta al viajero tradicional, que se enfocaba en paisajes y momentos significativos, con el viajero actual obsesionado con compartir su vida a través de fotos. El propósito del viaje ahora es exhibir públicamente que uno está viajando a través de una serie de imágenes, más que el viaje
Este texto argumenta que el viajero moderno está más interesado en hacerse selfies durante sus viajes y publicarlas en Instagram para ganar prestigio social, en lugar de enfocarse en las experiencias del viaje en sí mismas. El autor contrasta al viajero tradicional, que se enfocaba en paisajes y momentos significativos, con el viajero actual obsesionado con compartir su vida a través de fotos. El propósito del viaje ahora es exhibir públicamente que uno está viajando a través de una serie de imágenes, más que el viaje
Este texto argumenta que el viajero moderno está más interesado en hacerse selfies durante sus viajes y publicarlas en Instagram para ganar prestigio social, en lugar de enfocarse en las experiencias del viaje en sí mismas. El autor contrasta al viajero tradicional, que se enfocaba en paisajes y momentos significativos, con el viajero actual obsesionado con compartir su vida a través de fotos. El propósito del viaje ahora es exhibir públicamente que uno está viajando a través de una serie de imágenes, más que el viaje
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COMENTARIO DE TEXTOS 2º BACHILLERATO TEXTO Nº 1
Los viajes, ¿ilustran?
Cada viaje tiene un propósito: hay quien viaja para emprender un negocio y quien lo hace para entrar en contacto con otras culturas; hay viajes para ver a la familia o para asistir, en una ciudad lejana, a un concierto o a un partido de fútbol; hay multitud de viajes, pero en el siglo XXI hay uno que empieza a definir al viajero de nuestra época: el viaje donde el mayor estímulo es hacer fotos con el teléfono para colgarlas en Instagram. Así como el viajero de hace dos siglos, o de hace veinticinco como es el caso de Demócrito, se extasiaba ante una puesta de sol en el desierto, el viajero de hoy le da la espalda para hacerse un selfie y más tarde publica la fotografía de la puesta de sol cuyo centro es él mismo, para que se extasíen sus seguidores. Es verdad que ya había en el siglo XX colecciones de fotografías de viajes que iban a parar a un álbum; había hasta el cliché del turista japonés, armado con su aparatosa Nikon, que en lugar de contemplar un paisaje lo fotografiaba, para contemplarlo más tarde, una y otra vez, en un álbum de consumo personal que ocasionalmente compartía con sus amigos. Pero el viaje para hacer fotografías en la era de Instagram tiene otra orientación: la colección de fotos que antes era privada se ha hecho pública y lo público ha añadido el deseo de prestigio social que dan los viajes. Ya no se fotografía un paisaje o un monumento, como hacía el turista japonés del cliché, sino a uno mismo dentro del paisaje; más que el viaje lo que importa es el testimonio público de que se está viajando. También es verdad que no es necesario estar de viaje para hacerse selfies y publicarlos; una buena parte de la vida empieza a convertirse en eso, en la construcción pública de un rastro fotográfico de la cotidianidad, por insulsa que esta sea. El viajero de Instagram ve en el viaje el medio para conseguir su propósito, como lo haría el que viaja con el objetivo de hacer un negocio, o para encontrarse a sí mismo, con la diferencia de que el viaje de estos converge en un acontecimiento concreto, mientras que el instagramer lo que busca es el viaje diseminado, de principio a fin, en una serie de imágenes con las que se nos insinúa: yo estoy aquí, y tú, no.
JORDI SOLER, El País, 1 septiembre de 2018
COMENTARIO DE TEXTOS 2º BACHILLERATO TEXTO Nº 1
1- Identifique las ideas del texto y exponga esquemáticamente su organización.
El texto se organiza del siguiente modo: El párrafo 1 plantea la tesis central del texto, en torno a la transformación que define al viajero de nuestra época: viajamos para hacernos fotos y subirlas a Instagram. Idea de apoyo: contraste entre el viajero tradicional, centrado en las experiencias propias del viaje, y el actual, solo preocupado por autorretratarse. Los párrafos 2 y 3 son el desarrollo argumentativo: a) Distinto uso de la fotografía de viaje en el siglo XX y en la actualidad: - Fotografías de viaje del siglo XX: reducidas a un uso personal. - Finalidad actual de la fotografía: deseo de prestigio social, hacer público que se está viajando. b) Generalización de la idea: vivimos obsesionados por difundir imágenes de nuestra vida privada. El párrafo final sirve de conclusión al texto, describiendo el nuevo perfil del “viajero de Instagram”: aquel que solo viaja para exhibir ante los demás su propia imagen viajando.
Tipo de organización: el texto tiene un carácter argumentativo, y está organizado de forma
encuadrada, pues en el primer párrafo formula la tesis central, posteriormente la argumenta, y finalmente la reformula.
2- Explique la intención comunicativa del autor.
3- Pregunta…Texto argumentativo. 4- Explique el sentido de las siguientes palabras y expresiones del texto: ilustran, se extasiaba, cliché, (el viaje) diseminado.