Historia Judia
Historia Judia
Historia Judia
Fue por esto que, a diferencia de otros sistemas legales que fueron declinando
conforme sus practicantes perdían su soberanía, la legislación judía experimentó
mayor creatividad y evolución estructural después del exilio, hasta llegar a conformar
un cuerpo masivo de literatura legal. Sin embargo, desde la Emancipación (siglo XVIII)
y la consecuente integración de los judíos a la vida política y nacional de las
sociedades en las que vivían, la autoridad de esta legislación se ha limitado a las
cuestiones religiosas.
Para las autoridades rabínicas, la ley no representaba un medio sino un fin en sí
misma. Creían que los mandamientos tenían el objeto de purificar al hombre y de
guiarlo hacia una vida recta y consideraban que existía una cierta satisfacción al
cumplir con preceptos religiosos, razón por la cual los preservaban y protegían. De
este modo la legislación se convirtió en el camino elegido para asegurar y perpetuar su
forma de vida.
La legislación judía más que un sistema constituye un conjunto de normas que regulan
la totalidad de las relaciones del hombre con Dios, con el prójimo y con la naturaleza.
Se caracteriza por su esencia religiosa. La revelación de las leyes divinas a Moisés en
el Monte Sinaí es su epicentro. En contraste con otras jurisprudencias en donde la
doctrina religiosa sólo constituye parte de la legislación, el derecho judío se mantiene
relativamente inmutable desde la época de su codificación. De hecho, el carácter
ético-religioso de su legislatura permitió a los judíos observarla sin notables
modificaciones aún a pesar de la pérdida de su independencia nacional y el
consecuente exilio. No obstante, la estricta adherencia a las prescripciones religiosas
no impidió que la influencia de ciertas costumbres locales y la conducta social
prevaleciente propiciaran el enriquecimiento del sistema legal.
Para los judíos, Dios es el único capaz de dar o quitar la vida. Por esto
mismo, hacen un proceso de "santificación" para sacrificar a los animales
que se llama shejitá. Un alimento cárnico es apto o puro (kosher) cuando
se ha seguido este proceso de forma rigurosa. Es esencial que se
extraiga la sangre porque es vida y donde está el espíritu, de ahí que no
puedan comer morcilla. En el caso de los crustáceos y el marisco, están
prohibidos por la Torá (uno de los libros sagrados del judaísmo).
Curiosamente, el Islam tiene, también, sus propias normas con respecto
a la carne. La carne halal, la que respeta estas normas, es
el equivalente a la carne kosher.
Cuándo tomar lácteos
Las leyes también hablan de cómo debe ser el duelo o cómo se deben
enterrar a los muertos. Para una parte de la comunidad judía, en este
caso para los ultraortodoxos (siguen al pie de la letra el camino marcado
por las leyes judías), aquellas personas que han muerto en atentados,
deben ser enterradas en su totalidad. Si han quedado desmembradas, se
debe buscar cada parte para el entierro.
Además, los 30 días posteriores a la muerte de una persona cercana, los
familiares no pueden salir de casa y hasta después de un año, no
pueden escuchar música. Tampoco se puede sepultar a los muertos en
altura, deben estar en contacto con tierra vírgen y no pueden ser
incinerados.
Zara se olvidó de que están prohibidas las prendas de lino y lana
PRINCIPIOS
son una serie de afirmaciones que sumarizan las creencias esenciales del judaísmo,
formulados por Maimónides1 en su comentario a la Mishná2 (Tratado Sanedrín, capítulo 10) y
compilados de varias fuentes talmúdicas. Hoy en día son considerados un resumen de las
creencias esenciales del judaísmo. 3 Estos principios son:
Januquiá
La Januquiá, conocida también como Menorá de Janucá, es un
candelabro de nueve brazos utilizado para celebrar la fiesta judía
de Janucá.
La Janucá es una fiesta de ocho días y ocho noches de duración, conocida
también como Fiesta de las Luces, que conmemora la rededicación del
Segundo Templo de Jerusalén durante la rebelión de los macabeos contra
el Imperio Seléucida.
Cada noche de la Janucá se enciende una nueva luz del candelabro
utilizando la luz central, conocida con el nombre shamash.
Januquiá
Kipá
La Kipá es una pequeña gorra circular de tela que visten los hombres
judíos. Los seguidores de tradiciones ortodoxas del judaísmo llevan puesta
la kipá durante todo el día, mientra que otros judíos la utilizan solo los
sábados o al entrar en la Sinagoga.
La obligación de llevar Kipá dentro de la Sinagoga se aplica también a
cualquier varón que entre dentro, aunque no sea judío.
El color, tamaño y material de la Kipá puede dar en algunas ocasiones
indicaciones sobre la corriente del judaísmo a la que pertenece una
determinada persona.
Kipá sobre el libro sagrado
Chai
El símbolo Chai es un símbolo creado con las dos letras del alfabeto
hebreo Chet ( )חy Yod ()י. La combinación de estas dos letras forma la
palabra chai, que significa vivo o vivir.
Es habitual crear medallones con este símbolo que pueden llevarse puestos
alrededor del cuello, de forma similar a como se hace con la estrella de
David o el Jamsa.
Algunas interpretaciones de este símbolo están relacionadas con el hecho
de que este grupo de letras equivale al número 18 según el sistema
de Gematría. Este número se relaciona con la buena suerte y esto hace
que muchas donaciones en el mundo judío se hagan como múltiples del
número 18 (18, 36, 54, …).
Jamsa
El Jamsa es un amuleto en forma de mano de uso común en Oriente
Medio y África del Norte. Este amuleto se conoce también con el nombre
de Mano de Fátima y su uso es extendido también entre los musulmanes.
Este amuleto suele colocarse en las puertas de las casas y se considera
un símbolo de protección y fuerza.
Dreidel
El dreidel es una peonza de cuatro caras utilizada para jugar durante
la Fiesta de las Luces o Janucá. Cada una de las cuatro caras tiene una
letra del alfabeto hebreo distinta: Nun ()נ, Gimel ()ג, Hei ( )הy Shin ()ש.
Estas cuatro letras se utilizaban como regla mnemotécnica para recordar
las reglas del juego. En el idioma Yiddish, la letra Nun puede representar la
palabra nisht (nada), la letra Hei representa halb (mitad), Gimel
representa gants (todo) y Shin representa shtel ayn (colocar). Actualmente
también se considera que las cuatro letras son un acrónimo de la frase nes
gadol hayah sham, que significa “un gran milagro pasó allí”.
Una posible interpretación de las cuatro caras del Dreidel es que representa
los cuatro exilios del pueblo judío: Babilonia, Persia, Imperio Seléucida y
Roma.