Exoslius
Exoslius
Exoslius
Queridos hermanos:
Presento a todos mis saludos y respeto. Aunque sé del foro alquímico desde hace bastante
tiempo, no he tenido oportunidad de participar hasta ahora. Llevo unos cuantos dias leyendo
los diferentes comentarios y, al fin, después de la extensa pero magnífica intervención de
ORCIS+, he decidido enviaros mi aportación como una contestación matizada a la misma.
Para que a lo largo de este escrito (y en futuras intervenciones) nadie se llame a engaño,
quiero aclarar algunos puntos respecto a mi condición de alquimista, ya que pienso que si
somos realmente hermanos y nos mueve un afán común, es imprescindible un cierto
conocimiento mutuo (aunque hay gran temor en algunos por ser más o menos, o por saber
más o menos, considero que la verdadera humildad no estriba en ocultarse, si no en supeditar
el personal albedrío en pro de un designio superior. Somos seres evolucionarios y creedme si
os digo que la diferencia entre el primero y el último de nosotros no es mayor que el grosor
de un cabello):
Llevo estudiando Alquimia treinta años y he realizado la Gran Obra en tres ocasiones. Quizá
penseis: ¡He aquí un Adepto, que ha llegado a la cima de nuestras ilusiones...! Ciertamente,
he trabajado mucho y he aprendido mucho más pero, en verdad, os digo que la verdadera
transmutación se produjo en mi interior y la Luz recibida me ha hecho ver cuánto camino aún
debe ser recorrido.
Soy poco dado a escribir elucubraciones filosóficas y mi estilo es brusco y directo, por lo que
rar vez participaré en discusiones como las que hasta ahora he venido observando en el foro.
De vez en cuando abriré una nueva página relativa a trabajos y experiencias.
Contestando ya a ORCIS+,
Comparto tu criterio de la "via interior y la via operativa" y, ciertamente, no existen las vias
fáciles.
Queridos, no se puede hacer la Obra en grupo, por que aquella parte del Fuego que surge del
operante se distorsionaría. Entre dos es factible, entre tres muy difícil y no creo que pueda
conseguirse para cuatro o más.
Dicho esto, diré que me parece positiva la cooperación en grupos de nivel similar,
intercambiando experiencias o discutiendo técnicas. Y digo de nivel similar, por que la
experiencia ha demostrado que los conocimientos de estudiosos de nivel superior
distorsionan y perjudican a los que deben realizar por sí mismos el camino.
No lo tomeis a mal, la responsabilidad es terrible y fue dicho que "mas valiera que se atara
una piedra de molino al cuello y se sumergiera en el más profundo de los mares...".
Aunque no es normal en estos casos, yo os ofrezco una dirección de e-mail donde podeis
contactar conmigo. Aquellas cosas que se consideren de interés general pasarían al foro.
En cualquier caso, en unos dias os citaré algunas líneas de investigación que se están
siguiendo en la aplicación de la Alquimia a los problemas de nuestro tiempo.
Paz y bien.
S. Omar Exoslius
0533 CIENCIA
Queridos hermanos:
Si la Ciencia (o ciencias) es el conocimiento de todo lo creado, así como de las leyes que
rigen su comportamiento y evolución, la Alquimia es la CIENCIA de las ciencias, ya que
enseña que todas las cosas se producen por milagro de la adaptación (evolución) de una sola
cosa, indica la relación analógica entre el microcosmos y el macrocosmos, establece la fuerza
fuerte de toda fuerza o energía primigenia como fluido conductor de la adaptación y
determina el origen divino de todo el Universo.
Lo que llamamos las ciencias (que yo diferenciaré de la CIENCIA) han ido desarrollándose
en su bagaje conceptual con bastante lentitud y de forma discontínua, a diferencia de los
grandes avances tecnológicos (no confundamos lo científico con lo tecnológico, la
arquitectura con la albañilería...), convergiendo y aproximándose a la CIENCIA.
- La medicina, cada vez mira con mayor interés a las terapias vibracionales que
potencian la energía curativa interna de los seres humanos. A este respecto, hay expectación
por los resultados de la Medicina del Maestro Simón H..
Y todo ello (y mucho más...) se recoge en los textos de Adeptos Alquimistas de todos los
tiempos.
0541 Principio
Queridos hermanos:
- Pero, sobre todo, quiero rendir homenaje a mi único Maestro vivo, que me enseñó
Alquimia de verdad, que tuvo la paciencia de guiar a un discípulo ofuscado y torpe durante
muchos años y cuya labor en pro de nuestra Ciencia aún no ha sido totalmente reconocida:
Un abrazo a todos.
S. Omar Exoslius
0552 Laboratorio
Queridos hermanos:
Ante las preguntas de algunos de vosotros, dejadme deciros que el concepto alquímico de
Laboratorio no es necesariamente igual a lo que comunmente se cree. Sé que algunos de
vosotros disponeis de laboratorios excelentemente dotados y muy modernos. Estas palabras
son para aquellos que desean iniciarse en la operatoria y les desanima la idea de una
infraestructura cara y especializada.
4) Los gases extraidos salen al exterior; por consiguiente, no es aconsejable que dicha
salida pueda afectar a otras viviendas o personas.
5) Como la campana no extrae todos los gases que se producen (salvo que se instale una
cámara de cierre hermético, lo que es caro y no facilita otras operaciones), es conveniente una
buena aireación del local, por lo que hay que evitar sótanos mal aireados o habitaciones
interiores.
6) El operante debe, a su vez, actuar sin interrupciones y sin que sus manipulaciones
queden expuestas a la vista de otros. En conclusión, es conveniente que el Laboratorio esté
ubicado en una casa de campo tranquila y discreta o en un ático o buhardilla.
7) Aunque resulte trivial, hay que mencionar las elementales normas de seguridad: El
Laboratorio debe quedar cerrado con llave cuando el operante no está. La limpieza y orden
son funciones exclusivas e indelegables del alquimista. La presencia de personas ajenas a la
Obra debe reducirse a situaciones circunstanciales de muy corta duración (ni que decir tiene
que, en ciertos momentos que no es preciso especificar, esta presencia está totalmente
prohibida).
Queridos hermanos:
Hubiera querido deciros algo sobre mobiliario e instrumental del Laboratorio alquímico, pero
permitidme que exprese unas consideraciones previas, dejando para otro dia estas cuestiones.
En primer lugar, se que algunos se impacientan por que estos conocimientos que expreso son
excesivamente elementales. Si vosotros no teneis paciencia con quienes empiezan y a los que
todo parece muy complicado, ¿por qué iba yo a ponerme a vuestra altura y tener paciencia
con vosotros...? Si no teneis caridad, amor y ternura, en verdad os digo que jamás hareis la
Obra...
En segundo lugar, permitidme que, salvo algún caso puntual, no comente ni haga referencia a
textos de otros alquimistas pasados o presentes. Fue dicho que, una vez realizada la Obra, se
podían romper los libros... ¡ pero yo les debo mucho y les tengo mucho cariño para realizar
tal cosa...! Yo sólo hablaré de mi propia experiencia y lo que yo he hecho no ha menester de
ratificación en base a interpretaciones de viejos textos. Quien quiera que lo crea, quien no,
que lo rebata, pero que miren en sus manos y vean si tienen la Piedra o un montón de
palabras...
Tercero: Las descripciones del mobiliario e instrumental dependen del tipo de obra y del tipo
de vía. Como no quiero ser más claro de lo que me es permitido, mezclaré cosas de tres obras
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diferentes, advirtiendo por anticipado que, dada una obra y una vía concretas, cada alquimista
ha encontrado soluciones operativas diferentes acordes con sus querencias, conocimientos,
medios y posibilidades.
Cuarto: A veces (pero no siempre...) una imagen vale más que mil palabras. Yo podría mandar
algunos dibujos o fotografías si alguien me dice como. En cualquier caso, nunca (repito:
nunca) se dirán, o se verán, o se harán ciertas cosas por otro medio que no sea la relación
estrictamente personal. A las posibilidades que algunos apuntais (y que me parecen bien en
una primera etapa) hay que añadir otras:
9) Si lo anterior no es posible, pero un grupo puede reunirse en una zona concreta (por
ejemplo, sudamérica...). Pagarle entre todos una o dos semanas de "vacaciones" a un maestro
que se preste a ello. Puede haber alguna otra solución. Usad la imaginación y confiad en
Dios. El proveerá.
S. Omar Exoslius
0568 Atanor
Queridos hermanos:
Tal como os prometí voy a decir algunas palabras sobre el mobiliario y el atanor, en sus
expresiones más elementales:
Respecto al mobiliario del Laboratorio alquímico, hay una inmensa variedad de soluciones
que permiten compaginar la necesidad operativa con el estilo de cada cual. En general, es útil
disponer de:
- Una mesa de trabajo de, al menos, un metro cuadrado de superficie útil, lo más pesada
posible. Resulta muy conveniente el mármol (natural o artificial).
Hay que evitar los objetos de metal que no estén recubiertos de una capa protectora ya que la
mayoría de los gases producidos atacan los metales.
Todo esto se complementa con varias sillas y un recipiente donde alojar materias desechables
de forma que queden bien cerradas. Así mismo, es conveniente disponer de un pequeño
frigorífico.
Por tradición y respeto se sigue dando el nombre de Atanor al dispositivo productor del fuego
externo en la Obra, aunque éste sea un vulgar y simple hornillo o cocina de gas. En los
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tiempos antiguos, el diseño del Atanor, sus medidas, peculiaridades y materiales de
construcción, así como el tipo y tratamiento del combustible eran secretos de cada alquimista,
tan celosamente guardados como las materias y procesos de la Obra.
La técnica actual ha permitido simplificar enormemente este concepto con gran ahorro de
tiempo y dinero y, lo que es más importante, un mayor rendimiento y seguridad. El gas
butano es cómodo y eficiente. Las placas eléctricas son muy interesantes por su seguiridad y
facilidad de regulación y son útiles para ciertos procesos. Pero he comprobado que, en
general, la Obra no progresa adecuadamente en estos calentadores (quizá es debido a que, aún
siendo resistivos, siempre hay campos electromagnéticos y la Obra parece ser muy sensible a
éstos; quizá un estudio futuro nos dé mayor conocimiento y puedan ser empleados con
eficacia. Por supuesto, a la vista de ésto no se me ha ocurrido emplear hornos de
microondas...).
Yo utilizo una sencilla cocinita de dos fuegos a gas butano con un manoreductor variable
desde el que regulo la temperatura de ambos (el ajuste fino se realiza desde el propio
regulador de cada fuego). El Atanor de doble fuego es muy útil en el régimen de Mercurio, ya
que permite elaborar dos Aguilas a la vez y reducir así el tiempo empleado ( ¡ huy, cuánto he
dicho...! ).
Dios os guarde.
S. Omar Exoslius
Queridos hermanos:
Después de un tiempo en que me tuvo apartado del foro el ruido excesivo, vuelvo para lo que
verdaderamente me interesa: Hablar y oir hablar sólo de Alquimia.
A este respecto, dejadme que os manifieste, una vez más, mi criterio de que nuestro Arte es
una labor personal en la que el grupo sólo se entiende en asuntos de iniciación y orientación
previa, reparto de trabajos auxiliares y una cierta estructura colegial o gremial.
Yo, particularmente, soy un investigador solitario, sin ánimo de protagonismo alguno y que
no se suscribe a grupos contendientes. Seguiré aportando mi granito de arena (muy medido y
pensado) en este foro mientras sus caritativos administradores lo permitan.
Cuando un alquimista escribe un libro, debe cuidar sus palabras, ya que no sabe quién lo
leerá. El foro tiene la ventaja de que se pueden recoger las opiniones de los lectores de forma
inmediata, pero el cuidado ha de ser el mismo...
Aunque en mi anterior comunicado prometí hablar de utensilios y artilugios varios, dejaré ese
tema para otra ocasión y os haré alguna consideración sobre las materias de la Obra:
Mirad, la principal materia de la Alquimia (única en todas las vías) es el propio alquimista,
cuyo espíritu debe evolucionar y transmutarse a un plano superior, más perfecto. Si alguien
os dijese: "toma esto y aquello, mézclalos así y haz tal cosa...", para encontrar la Piedra,
¿dónde se produciría vuestra elevación...? ¿creeis, realmente, que por el hecho de poner a
hervir o destilar una materia en un matraz o fundir en un crisol unas piedras, vuestro espíritu
va transcender a planos superiores...?
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La búsqueda, la limpieza y preparación de las materias, la elección del momento cósmico
adecuado de cada operación a fin de que las materias y el propio alquimista alcancen el punto
de resonancia vibracional que permita evolucionar la Obra, son los pasos adecuados de este
Arte.
Lo contrario es una receta que bien pudiera aplicarse de forma industrial y que no daría
resultado. Ciertamente, hay "particulares" en los que se producen transmutaciones (yo mismo
he descubierto en Internet un procedimiento para obtener oro de cierto tipo de plomo, con un
rendimiento bastante interesante...), pero eso no es Alquimia.
Las materias fundamentales de la Obra son siempre las mismas. Las vías y los materiales
auxiliares para llegar a ellas difieren. Seguiré hablando de ellas en los próximos dias (si el
ruido de los que discuten y/o se lamentan me lo permite...)
S. Omar Exoslius
Queridos hermanos:
Extiendo mi felicitación a todos aquellos que trabajan en la vía más sutil, delicada y difícil
que existe. Es la vía cósmica y espiritual por excelencia y su gran dificultad radica
precisamente en su delicadeza. Os deseo suerte.
Permitidme, en mi deseo de comunicar principios elementales, que diga algo relativo a las
distintas vías: Para aquellos que, para no desesperarse, gustan de mantener ataduras entre
nuestra Ciencia y las ciencias modernas, diré que los principios generadores internos de las
materias sólo se convierten en activos en determinadas condiciones de vibración energética,
uno de cuyos efectos evidentes es la ionización molecular. Esto se consigue en tres estados de
agregación activa: La disolución, la fusión y el plasma.
De esta forma se da origen a las tres vías (clásicamente, sólo se habla de las dos primeras, yo
haré un comentario de la tercera): La vía húmeda, la vía seca y la vía solar.
Hace algún tiempo, realicé la traducción de un texto italiano que reproducía "Un librillo de
Alquimia grabado sobre láminas de plomo en el siglo XIV". Son 36 láminas que he
escaneado agrupándolas en 19 imágenes (gif) y dos textos (uno con la traducción y otro con
algunos comentarios mios). A quien le interese se lo enviaré por e-mail (por trozos). En este
texto se describe la Vía seca de los Caballeros y hace referencia a la Vía del Mercurio
Espiritual y a la Vía Sutil del Rocio.
Saludos.
S. Omar Exoslius
Por otra parte, aun disponendo de los fondos e infraestructuras necesarias para impartir los
conocimientos necesarios (así como de los profesores y adeptos de contrastado saber ...),
opino que una cosa es ser alquimista y otra un erudito de la alquimia (de igual manera, una
cosa es ser un artista y otra un licenciado en la historia del arte).
La Alquimia, como erudición, puede obtener una cátedra en alguna universidad de amplias
miras (las otras disciplinas: Hebreo, griego, latín, teología, etc., ya tienen cátedras asentadas
en muchas universidades). Pero la Alquimia como via personal y realización de la Gran Obra
es una labor personal e intransferible. Un maestro puede mostrarte donde se halla la puerta,
pero el abrirla, franquearla y recorrer el camino es labor de cada uno, para la cual no es
necesario saber, latín, griego, hebreo, numerología, teología ni física ni química.
En cualquier caso, si alguien tiene a bien realizar una iniciativa al respecto y desea contar con
mi humilde colaboración, no dude en que apoyaré el proyecto con todas mis fuerzas, dentro
de los límites de mi ética y compromiso herméticos.
Aprovecho la ocasión para desear a todos los participantes del foro, paz y bien de todo
corazón.
S. Omar Exoslius
Queridos hermanos:
Durante un largo tiempo en nuestro querido estanque no han dejado de caer piedras que
enturbian las aguas y levantan el cieno del fondo. A este pequeño pez la turbiedad llena los
ojos de lágrimas que inducen al silencio y aumentan la salinidad del entorno. Con ilusión y
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esperanza de que, en adelante, las aguas se aquieten y la transparencia y alegría vuelvan a
reinar en este foro me decido a enviaros unos pequeños comentarios:
En la otra cara de la moneda, para decir que una Vía es falsa no basta con argumentar que los
trabajos realizados por uno (o varios) no han conducido al resultado deseado. No hay que
olvidar que la Alquimia no es Química. En Química, cualquier proceso o reacción entre
componentes estequiométricamente determinados, en las condiciones especificadas, produce
siempre el mismo resultado. En Alquimia, habeis leido muchas veces que aún teniendo las
materias, el vaso y los regímenes, sólo uno entre muchos obtiene el camino. Nuestra Ciencia
es un Don que Dios da a quien quiere. Nadie tiene más ventajas para realizar la Obra aún
siendo muy intelectual, erudito, doctor de esto o aquello, trabajador en el arte durante muchos
años, devoto rezador, ateo materialista, lector ávido de incunables, etc., etc.
Respecto a la interpretación de los textos y figuras de las obras de los Maestros, os diré tres
consideraciones que en otros aportes puedo ampliar:
1º) No todos los que tenemos por Maestros lo fueron (en el sentido de haber realizado la Gran
Obra completamente). Incluso hubo algún caso de que el alquimista realizó la Obra varios
años después de escribir sus libros (que ya no se molestó en corregir...).
2º) En general, la realización de la Obra (en sus distintas vías) es bastante sencilla. Las
descripciones verdaderas son cabalísticas en tres (normal) o cuatro capas. Esto quiere decir
que la primera interpretación (literal) del texto no enseña nada al lector ocasional o
indocumentado, pues suele venir en lenguaje alegórico o metafórico, con alusiones
mitológicas o inventadas. Casi todos los alquimistas o espagiristas conocen suficientemente
estas alegorías para poder penetrar en la segunda capa. Y aquí viene el error y perdición de
casi todos, pues aquí se describen procesos y materias perfectamente reales y coherentes,
pero que conducen (alquimicamente) a callejones sin salida. Para penetrar en la tercera capa
es necesario disponer del texto original (no traducido) o utilizar métodos de transposición
muy complicados y que sólo dan resultados parciales (que ya es algo...). Aquí las materias y
los procesos son claros y algunos autores incluyen también las proporciones reales, que otros
introducen en una cuarta capa basada en la cábala geométrica.
3º) Las materias principales deben estar vivas. Esto hay que entenderlo en el sentido
alquímico. Y como todo ser vivo, no todos los indivíduos tienen las mismas propiedades,
salud y carácter. La misma materia recogida en diversos lugares, en tiempos diferentes y en
condiciones distintas dará seguramente resultados aparentes muy diferentes.
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S. Omar Exoslius
1181 Matices
Queridos hermanos:
Alguien me ha indicado que mi comunicado anterior (1161) puede dar lugar a que sea
recibido como una crítica a determinadas obras o personas. A este respecto, no me canso de
repetir que yo jamás entraré en polémicas, ni de tipo operativo, filosófico y, mucho menos, de
tipo personal. Mis opiniones y experiencias JAMAS se refieren a nadie en concreto. Incluso
me cuido de hacer referencias a autores clásicos. Mis opiniones pueden ser o no compartidas
y matizadas, aceptadas o rebatidas en el foro, pero yo siempre hablaré de forma general, pues
ya he visto que las referencias particulares pueden molestar a algunas personas y ello está
muy lejos de mi intención.
Las experiencias de quien lleva tantos años dedicado al estudio y práctica de la Alquimia
están llenas, en su mayor parte, de ensayos fallidos, frustraciones e, incluso, de amarguras y
accidentes. Es a ello que me refiero en mi anterior comunicado. Sin embargo, gracias a Dios,
también hay momentos de luz y gloriosa emoción que compensan con creces tanto esfuerzo...
Como ya indiqué en (1161) la multiplicidad de las vías y, por ende, la multiplicidad de las
materias me llevó a experiencias fallidas. Quizá, en estos caminos, otros tendrían más exito o
suerte, pero a mí me sirvieron (y no es poco...) para reflexionar en torno a los textos
alquímicos y mi propia ingenuidad.
Si todos los Adeptos, sin excepción, reiteran la necesidad del secreto y que nuestra Ciencia es
un Don que Dios da a quien quiere, es iluso pensar que figuras obvias que cualquier
individuo con una cultura media (sobre todo en la época en que fueron escritas) puede
interpretar con facilidad indiquen las materias y operaciones de la Obra. Y por mi ingenuidad
trabajé duramente con el rocío, con el lobo gris o antimonio, con el oro metálico, con el
mercurio vulgar, con el tártaro del vino, con el vitriolo de venus y marte realizado a partir del
verdete y tantas otras cosas; obtuve sales y cristales maravillosos, volatilicé el tártaro, destilé
e hice la separación del vitriolo, obtuve el régulo marcial estrellado, sublimé el mercurio, hice
las múltiples amalgamas del oro, tragué humos, quemé las cejas y destrocé mis manos...
Y al final, comprendí aquello que otros ya habían advertido: los Adeptos son verdaderamente
caritativos cuando esconden en oscuras alegorías las materias. Aquello que parece claro o es
falso o esconde una alegoría más profunda y sutil. La verdad eterna está en el matrimonio del
hombre rojo y su mujer-hermana blanca.
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1189 Caracter
Queridos hermanos:
El Mercurio y el Azufre proceden de una sola materia bruta. Quien trate de casar un Mercurio
y un Azufre de orígenes diferentes, se enzarza en una lucha inútil, transitando por un camino
lleno de espinas, pues pocos han conseguido materializar dicho matrimonio.
La materia básica principal es el hombre rojo, nuestro Príncipe, hijo predilecto del Rey y las
más preciada de sus criaturas. Otros hijos tiene el Rey, pero ninguno tan hermoso y lleno de
virtud.
Pocas son las novias con las que nuestro hombre puede desposarse, todas de su familia (yo
sólo le conozco cuatro) y según aquella que se elija, así será el lecho nupcial (vaso de la
naturaleza, fuego secreto). De todas esas nupcias os hablaré algún día. Pero ahora sólo me
referiré a la más común de las blancas mujeres.
Os contaré las propiedades de nuestros esposos (pero para no faltar al juramento no indicaré a
quien de los dos corresponden):
- Una es fija (soporta el fuego sin inmutarse) y otra volátil. Una es densa y pesada y la
otra acuosa.
- Una se encuentra en todas partes y la poseen ricos y pobres y otra está encerrada y es
necesario Visitar el Interior de la Tierra y Remover Intensamente para Obtener la Luz.
- Una posee en su vientre una serpiente mortal y sin la otra no habría vida sobre la
tierra.
- Una es agua y aire, frio y húmedo y otra es tierra y fuego, calor y color.
Podría seguir con esta dicotomía pero no quiero cansaros. Aquellos que no posean el
conocimiento mediten con serenidad mis palabras, porque poco más se puede decir. Aquellos
que opinen que estas descripciones no concuerdan con lo que ellos saben, mediten también y
miren si en sus manos está la Piedra de los Sabios, por que quizá sea necesario olvidarse de lo
que se sabe y comenzar por el principio.
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1224 Respuestas
Queridos hermanos:
Espero que mi anterior comunicado 1189 haya despejado las dudas surgidas en el 1181; esto
forma parte de las características del foro y que lo diferencian de un chat, pero que permite
meditar con calma lo que uno lee y escribe.
Dicho esto (y por una vez) faltaré a mi propia norma: Sobre todo por que quiero agradecer a
los hermanos E. Gregorio, Sérgio Nunes y Lupus Cinereus sus atentas y amables
contestaciones.
Hermano Lupus Cinereus, el Maestro Valentín no fue en su Testamento más "caritativo" que
en Las Doce Llaves, sino todo lo contrario. Explicó muy claramente el trabajo del vitriolo (es
uno de los hijos menores del Rey al que me referí en un comunicado anterior) que es duro,
muy difícil y pocos han realizado. El mismo dice que el vitriolo natural de Marte y Venus es
el adecuado, pero si no se está seguro de la calidad del que traen de Chipre o de Hungría
propone extraerlo del verdete. Cierto que el primero es un sulfato doble y el segundo un
acetato, pero el ácido receptor no es lo que posteriormente se utiliza en la separación
alquímica (en eso consiste el secreto de esta vía). Si el hermano desea avanzar por ese camino
puede informarse del Maestro Fulcanelli, quien en Las Moradas Filosofales (LIBRO
PRIMERO - VII ) dice:
Hermano Sérgio Nunes, gracias por sus palabras. ¿Comprende ahora que no se deben
contestar indicaciones particulares ni desviarse de lo que uno quiere exponer?
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Dejaré para otro día la continuación de mis aportes sobre las materias iniciales, no sin antes
reiterar que cuando describo alguna propiedad o característica lo hago con la necesaria
indefinición alquímica. Podría decir su color, su peso específico, punto de fusion y ebullición
etc., pero entonces más valdría decir su nombre real. Si digo que una materia es esencial para
la vida, es una propiedad que, por supuesto, comparten otras muchas, pero en eso consiste el
trabajo y la búsqueda de un alquimista. El que no tenga paciencia debe dedicarse a otra
cosa....
Dejaré para otro día mis consideraciones sobre las materias básicas de la Obra, ya que creo
haberme extendido hoy mucho (aunque espero haber sido claro y clarificador).
Queridos hermanos:
Ya indiqué en un aporte anterior que sólo hablaría de aquello que realmente conozco y he
experimentado por mí mismo. Excluyo, a conciencia, mis títulos y estudios académicos, las
conclusiones sacadas tras muchos años de lectura de buenos (y malos) libros de alquimia e,
incluso, lo que he oido que otros han hecho... No me canso de reiterar que NINGUN Adepto
explicará con palabras claras la Obra.
Cualquiera puede o no creer lo que ponen los libros de este o aquel maestro pero, vuelvo a
insistir, que para asegurar que un camino es correcto hay que haberlo realizado HASTA EL
FINAL.
Conozco a bastantes alquimistas (algunos en este foro) con muchos años y experiencia, tanto
teórica como práctica (no sólo en alquimia, sino en otras ciencias afines...). Hoy por hoy los
tratados y las traducciones circulan con rapidez y de modo amplio, sobre todo en círculos de
iniciados de alto nivel; cuando uno de estos textos "caritativo" o "claro" cae en sus manos,
casi todos se lanzan a experimentarlo. ¿No creéis que entre tanto experto alguno tendría éxito,
si el texto es tan claro...? ¿No habéis pensado que, con los medios operativos de tiempos
pasados (Filaleteo llevava un hornillo portátil y María hacía la Obra sobre las brasas en una
tienda del desierto...) la cosa no puede ser tan complicada...? Lamentablemente, el olvidar lo
que "se sabe" y ver todo con ojos de ñiño es muy difícil, debido a nuestro propio ego... En
general, los alquimistas solemos criticar la ceguera con que la ciencia oficial contempla
nuestro Arte, pero nosotros, en lo nuestro, somos más intransigentes, retrógrados y
envidiosos.
Hemos visto muchas veces escrito por los maestros aquello de que "donde no hay, no se
puede sacar" y que "una cabra no puede parir un pollo". Si no se sabe lo que se quiere
conseguir, dificilmente se puede acertar con el origen y, mucho menos, saber los procesos
intermedios y determinar los signos. Sé de varios casos de hermanos que han seguido al pie
de la letra un cierto tratado "caritativo" en el que las materias eran bastante correctas (digo
bastante porque el tratadillo sintetizaba una de las materias que debía ser natural...) y
abandonaron la obra porque no obtenían los signos que el autor indicaba como necesarios
para evidenciar el progreso de la misma.
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Muchos esperan de mis aportes la indicación de nombres, fórmulas y recetas. Esperan en
vano. Antes de operar HAY QUE ENTENDER. Por eso describiré la Filosofía con la mayor
exactitud (y con ello daré por cumplido el óbolo que el viajero debe pagar al barquero). Para
aquellos impacientes que piensan que de filosofía hermética ya lo saben todo, decirles que un
alquimista es, ante todo, un Filóso del Fuego y para aquel que sabe la filosofía la Ciencia no
tiene secretos...
1238 Perspectiva
Queridos hermanos:
Decía en mi anterior aporte que era muy difícil iniciar y recorrer un camino del que no se
sabe el final. No pretendo ahora comentar cual es el fin de la Alquimia, sino la posible
naturaleza y estructura de la Piedra Filosofal, en el convencimiento de que un conocimiento
(aunque sea aproximado) del resultado esperado redundará en una necesaria comprensión de
las materias iniciales y de los diferentes procesos.
Del aspecto, color, fusibilidad y propiedades de aplicación del Rubí de los Sabios hay escritos
muchos textos en los que se describe sin ocultación ni metáfora. Hablaré de su estructura
interna y del mecanismo que produce tan espectaculares efectos. Sin embargo, no me es
posible describirlo exactamente, por lo que utilizaré un símil muy aproximado. Los antiguos
Maestros utilizaron también símiles para describir sus enseñanzas; muchos emplearon la
Mitología clásica, otros procesos similares o análogos (lo que sigue engañando a muchos...) y
otros tergiversaciones de palabras o juegos idiomáticos (jeroglíficos) o una combinación de
todo. Cada técnica acorde con los tiempos en los que se vivía. Cualquier método que yo
utilice desencadenará las iras y desesperación de muchos. Creedme que lo lamento.
Utilizaré la analogía y la físca cuántica (la ciencia oficial más afín a nuestro Arte), en
términos lo más sencillos posible. Y, en este campo, analizaré la estructura general de los
superconductores de tipo II y, en especial, la perovskita.
Estos superconductores, en general, están formados por un metal muy pesado, un sustrato no
metálico y dos o más metales de estructura compensada que actúan como impurezas de
equilibrio o aceleradoras. En la perovskita, el metal pesado es el Ytrio (Y), el sustrato el
Oxígeno (O) y los metales complementarios el Bario (Ba) y el Cobre (Cu), todo ello también
conocido como YBa2Cu3O7-x.
El proceso consiste en enlazar estos átomos entre sí para formar un sólido siguiendo una
estructura tridimensional repetitiva o red cristalina, de manera que su vibración (como un
instrumento afinado) produce focos generatrices energéticos (conocidos como "fonones")
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enlazados entre sí de tal manera que la energía (pares de electrones) puede circular por estos
enlaces sin rozamiento o pérdida alguna.
1255 Trabajos
Queridos hermanos:
Parece ser que el foro se anima con las aportaciones cuánticas; lo cual me llena de
satisfacción, por que el Objeto de nuestros desvelos está muy cerca del símil que os mostré.
Ya decían muchos antiguos Maestros aquello de que "...el que es capaz de hacer la Obra con
solo Mercurio es un verdadero sabio...". Es nuestro Mercurio, que llevamos a un estado tal de
exaltación que deja de ser "materia" y "energía" para ser algo más, que transciende las
dimensiones de la percepción cotidiana.
Ya que hice una pequeña referencia a Filaleteo y a María la Judía en un aporte anterior, un
pequeño consejo: Leed con detenimiento los "Experimentos de preparación del Mercurio de
los Sabios" y el "Diálogo de Maria y Aros". Allí está todo y nunca lo encontraréis más
sencillo ni más claro. Yo jamás daré fórmulas ni recetas, pero aquellos que sigan con mente
abierta mis comentarios encontrarán un camino verdadero para realizar la Obra, "SI TE FATA
VOCANT".
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Todos hablamos mucho de las vías húmedas, secas, mixtas.... Pero eso son calificativos
superficiales. No hay vía seca que no trabaje con líquidos, ni vía húmeda que no necesite
calcinar y desecar la materia. La mayor verdad está en la vieja máxima: "Una sola Materia,
un solo Vaso, una sola Vía...".
Claro que nuestra Materia no existe en la naturaleza y debe ser preparada por el Arte. De ahí
proceden lo que llamamos vías, pues hay varios métodos para realizar la cosa. Algunos
hablan de Primera, Segunda y Tercera materias, pero eso está bien para su propia tribu, ya
que otros deciden que la Primera es lo que aquellos llamaban Segunda. Por ello, yo no caeré
en el error de priorizar las materias a fin de evitar confundir a otros.
La operación inicial consiste en localizar en qué tierra o mineral, nuestro Mercurio está
escondido, vivo y activo. Los trabajos preliminares (que algunos llaman de Hércules...) están
encaminados a disponer esta materia para la adecuada extracción, sin producir la muerte
prematura de la semilla mercurial. También es necesario preparar las materias
complementarias y de aquí viene la variedad de "vías". Yo conozco cuatro y no coinciden
ninguna de las materias que forman las cuatro parejas. Como dato en clave para buscadores,
os diré que las cuatro sales son de elementos contíguos en la tabla peródica y los cuatro
fuegos correspondientes tienen la fuerza adecuada a cada caso: Fuerte como una mula, como
marte, como venus...
Los trabajos de Hércules pueden variar según las materias, pero siempre son triturar y tamizar
muy fino, eliminar sin violencia humedades supérfluas o impurezas impropias (algunas
impurezas silíceas no vale la pena pasar el duro trabajo de eliminarlas, ya que no perturban el
proceso; aunque su peso debe ser tenido en cuenta al preparar las proporciones...). Mezclar
íntimamente. Algunas materias hay que evitar que reciban la luz del sol y, otras, por el
contrario, deben isolarse hasta que cambien significativamente su color (lo que indica que
han recibido la magnetización cósmica adecuada...).
1263 Amalgamas
Queridos hermanos:
Aunque mis comentarios al foro siguen una línea directa y coherente, con una cierta amplitud
a fin de que quien quiera pueda descubrir las diferentes variaciones que el camino permite, en
base a las experiencias que he recogido a lo largo de los años. Sin embargo, en algún aporte
realizo alguna excursión a temas complementarios o realizo comentarios relativos a trabajos
diferentes.
Hoy (debido a que surgió el tema en el foro) voy a explicaros con detalle y abiertamente mis
experiencias en la llamada "Vía de las amalgamas", aparentemente descrita en el Testamento
de Flamel y en varios escritos de Filaleteo.
Siguiendo las descripciones de estos filósofos y, sobre todo, del antiguo Curso de Química de
Nicolás Lemery (hay una versión en español en la Biblioteca Nacional, en donde conseguí
que me lo fotocopiaran íntegramente), realicé el régulo marcial estrellado de antimonio a
partir de estibina natural. Es un trabajo pesado (y de muchos humos...) pero con el que no
tuve dificultad.
16
Otra materia fácil fue el mercurio (azogue vulgar), que también conseguí sin problemas y a
buen precio en la sociedad estatal Minas de Almaden y Arrayanes.
La tercera materia (¡ay...!) :-) fueron 10 onzas de oro purísimo, que, casualmente, valía su
peso en oro. En la Sociedad Española de Metales Preciosos se adquiere con una pureza
garantizada del 99,99%, por lo que no son necesarias las purificaciones que describen los
antiguos (con lobos grises y otros bichos...).
Realice los trabajos respetando las proporciones descritas en los textos (sobre todo el
Testamento...), así como la operativa indicada, por lo que no os las voy a repetir. Sólo os
mencionaré los detalles particulares operativos.
Realmente, el intentar casar el régulo finamente pulverizado con el mercurio es cosa difícil,
por lo que empleé el oro, tal como dice Flamel. La cosa funciona. Según van avanzando el
número de águilas, el mercurio incorpora al régulo que, después de lavada la negrura con
agua limpia hasta que la masa aparezca clara y resplandeciente, se comporta cada vez más
como una masa compacta y manejable, parecida en su textura a la mantequilla (yo la manejo
con una pala pastelera de goma...). Realicé nueve águilas antes de preparar el huevo
filosófico.
Cierto que medité ampliamente en como fabricar la retorta de acero que recomienda Flamel.
Pero, como sucede siempre, las mejores ideas suelen ser sencillas: Compré una cafetera de
acero inoxidable de tamaño mediano (creo de de marca Magefesa...). Hay que cuidar que sea
de acero inoxidable y no de aluminio. Como sabéis tiene dos cuerpos principales: el depósito
y el cazo superior que rosca en el anterior. Retiré el filtro, gomas y la tapa del cazo. Después,
busqué en las Páginas Amarillas de la Telefónica un taller que se dedicara a la soldadura en
acero inoxidable y allí llevé el cazo. Les pedí que cortaran el pitorro de salida del café y en su
lugar soldaran un tubo en forma de U inclinada. Realizaron el trabajo rápido, bien y barato. Y
mi cafetera parecía una retorta. Las pruebas realizadas demostraron que la idea había sido
muy buena. Todavía hoy utilizo esta "cafetera" para destilar materias a alta temperatura
(vitrilolos, mercurios, etc...).
Bueno. Ahora tenía que fabricar el horno. "Trabajo de mujeres y juego de niños...". Compré
una olla (tambien de acero inoxidable) del tamaño adecuado para que la cafetera cupiera en
ella, pero de manera que el tubo sobresaliera. Estas ollas se vende con tapa, tambien de acero.
Con un soplete corté todo el fondo de la olla y realicé un pequeño rebaje en la tapa (para que,
una vez cerrada, pudiera salir el tubo). Llené la olla de lana fibrocerámica y sujeté el fondo
con rejilla de hierro, de forma que la lana no pudiera caer pero el fuego pudiera entrar. En la
destilación, coloco la cafetera en el interior de la olla, rodeada de fibrocerámica (que impide
que el calor se disipe), con la materia dispuesta. Tapo la olla y coloco el conjunto en una
sencilla cocina de gas butano.
17
El mercurio pasa totalmente. El águila ha volado... Apagado el fuego y, una vez enfriado el
conjunto, se encuentra en el depósito de la "cafetera" la saturnia, sólida, dura y quebradiza,
que debe ser retirada a golpe de cincel (o viejo destornillador...), triturada finamente e
incorporada al mercurio destilado con nueva adicción de régulo, tal como explica el texto.
Este mercurio se va preñando y arrastrando consigo parte del oro y del régulo, hasta hacerlo
adecuado para la Obra.
Los que lleguen hasta aquí, ya no tendrán dificultades en seguir. Si así no fuese, estoy a su
disposición para continuar la descripción del proceso.
Sé que al leer esto algunos rasgarán las vestiduras y me acusarán de traidor y perjuro. Quizá
otros me tachen de mentiroso. Yo os prometo que lo que os he relatado sin metafora,
crudamente, es la pura realidad de mis experiencias. Deseo de todo corazón que os sean de
provecho.
Paz y Luz.
S. Omar Exoslius
Altus:
Exoslius
1283 Recapitulacion
Queridos hermanos:
El texto en el que basé mis trabajos fue el Testamento de Nicolás Flamel que yo traduje de un
viejo libro italiano que descubrí en una librería de viejo en el centro de Milán.
La operación que indico que debe hacerse al finalizar cada águila, ya digo que se haga según
el texto; es decir, con un cincel se despega el residuo saturnial y se funde en crisol con 4
partes de régulo. Después se muele muy finamente y se amalgama con el mercurio obtenido,
igual que la primera vez ("...ahora se enlazarán como mantequilla y queso. Lava ahora y
relava hasta que haya salido toda la negrura seca, tal como te he dicho...").
Volviendo al tema de la búsqueda y trabajo con las primeras materias, algunos en este foro
saben muy bien cuales son, por lo que deduzco de sus comentarios. Sin embargo, no os
olvidéis que el saber las materias es condición necesaria, pero no suficiente. Un caso concreto
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es la llamada vía de Kamala Jnana, quién legó un importante conjunto de fotografías de una
de las variantes correctas de la Obra. Sin embargo, casi todos los que intentaron ese camino
se guiaron por las descripciones de Roger Caró. Yo desconozco si el señor Caró realizó
realmente la Obra de Kamala Jnana, pero sus caritativas y claras descripciones están bañadas
en una falsedad tan sutil (consistente en mezclar muy bien lo cierto con lo falso, sin fisuras)
que hace que ese camino sea impracticable.
Antes dije lo de "casi todos", por que hay quien ha realizado esa vía (tenéis que pensar que
hay alquimistas que no están suscritos al foro, ni publican libros...)
En mis descripciones filosóficas sobre el hombre rojo y su mujer blanca, ya indiqué que el
mismo hombre podía elegir diferentes consortes y que ello marcaba la vía y el lecho nupcial
(léase fuego secreto...). Y hablé, sobre todo, de una de ellas. Hoy, sin embargo, quiero
comentar la filosofía hermética de ese "casamiento", que es independiente de la mujer elegida
y válido para todas. Esta filosofía también es cuántica y ello enlaza con mi aporte anterior
sobre superconductividad por que, básicamente, es lo mismo.
La primera operación consiste en proveer un agente que se apodere del azufre, suavemente y
sin violencia, permitiendo a otra materia (limpia y pura, verdadero Azufre) presente en el
acto, introducirse en su lugar y dejar al Mercurio liberado y vivo. Convertido así en Mercurio
Doble (ya que esta materia es de su misma naturaleza) o Filosófico, que ya puede (por sí
mismo o con ayuda) evolucionar hacia la perfección.
1296 Objetivo
Queridos hermanos:
En mi aporte anterior hablaba del Testamento de Flamel porque así lo traduje del texto
italiano al que me refería. Esto ha podido confundir a algunos. Este Testamento fue escrito
por Flamel, utilizando criptogramas, en los márgenes de su Breviario de Misa y dirigido al
sobrino de su esposa, Perrenelle. Lo que yo traduje como Testamento, ha sido publicado
como Breviario por algún editor; sin embargo, yo creo que es un testamento (el Breviario no
tiene nada que ver en esto y sólo sirvió de soporte). En cualquier caso, ahí queda la
aclaración.
Vuelvo a insistir que mi descripción del proceso inicial, conocido en algunos tratados como
Separación, es general para todas las vías, filosóficamente hablando. Aunque en unas se hace
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de una manera y en otras de otra muy diferente. Matizaré para cada vía concreta en futuros
comunicados al foro, pero hoy quiero hacer unas reflexiones sobre el objetivo de la Alquimia.
Como siempre, lo que digo sólo representa mi opinión y el resultado de mis vivencias y
experiencia. Reitero ésto, ya que es posible que lo que diga a continuación no sea
comprendido o aceptado por muchos.
Pocos Adeptos ha habido a lo largo de los siglos. Pero, que yo sepa, no ha habido época en la
que no se haya producido el paso de un Adepto. Sólo con ello hubiera sido suficiente para que
este mundo se hubiese visto libre de la enfermedad y la miseria.
Pero la lucha contra los cuatro jinetes del Apocalipsis es una labor colectiva de toda la
Humanidad, en la que no caben atajos ni panaceas. Como ser humano con un altísimo grado
de evolución, el Adepto (mientras está aquí...) ayudará a su prójimo en sus necesidades, pero
NUNCA pondrá directamente en sus manos los resultados de la Obra.
Todo ser humano tiene la obligación de elevar su nivel espiritual hasta alcanzar el nivel de
transferencia, aunque ello le lleve un gran número de vidas. Pocos son los que tienen el nivel
espiritual para sentir la vibración de la Alquimia, menos aún los que logran penetrar en la
profundidad de los Arcanos en su total transparencia y aún muchos menos aquellos que
alcanzan el umbral de la Puerta.
A partir de aquí, ya no depende de uno. Sino de leyes que escapan a nuestra comprensión.
Pero sé que, cada cierto tiempo, alguno de los que esperan es llamado...
No pretendo que nadie crea lo que digo, ya que es algo indemostrable. Ni tampoco cómo sé
estas cosas. Creedlas o no. Liberad vuestro espíritu de todo condicionamiento, poned la
mente en blanco y SENTID si lo que digo es cierto. Luego, obrad en consecuencia...
1308 Comprender
Queridos hermanos:
Me sucede constantemente que conceptos o ideas que para mí son nítidos y claros, no lo son
para los demás. Ello, muy probablemente, sea debido a un fallo personal mío a la hora de
comunicarme. Lo lamento, por que hago perder el tiempo a todos y lo pierdo yo también.
En cualquier caso, a aquellos que de alguna manera quieran responder a mis comentarios les
rogaría que, antes de lanzarse a emitir una posible "corrección" a lo por mí expuesto, se
molesten en releer con más atención mis escritos.
Tampoco podemos pensar que aquellos Maestros, tan admirados y admirables, llegados a un
nivel evolutivo superior, se volvieron avariciosos, envidiosos y se desentendieron del resto de
los mortales...
He vuelto a hablar sobre este asunto por que me parece fundamental tener el concepto muy
claro sobre el verdadero Objetivo de la Alquimia.
¡Benditas sean todas las iniciativas encaminadas a aliviar y curar los males de las gentes...!
Pero la Alquimia se cuida a sí misma y, aunque lo lamentemos, no tergiversará su Camino...
En cualquier caso si, como se dice, la genética curará casi todas las enfermedades y la física
energética abrirá las puertas del universo ¿para qué queréis la Alquimia, si su medicina no
será superior a las que se están desarrollando (que incluso prolongarán la duración de la vida)
ni sus transmutaciones son de utilidad práctica...?
Parafraseando un poco a Filaleteo: Cuando el oro no tenga más valor que las piedras del
camino y la salud no sea un problema, será cuando la Alquimia sea buscada sólo por aquello
que le es consustancial...
1325 Operativa
Queridos hemanos:
La paciencia y el tesón son la verdadera materia prima para forjar un alquimista. No hay
muchos que se sientan llamados por nuestro Arte y aquellos que sienten en su interior la
llama alquímica desearían ver inmediatamente cumplidos sus deseos (antes de que el fuego se
extinga). Todos conocen el "Ora, Lege, Lege, Lege, Relege, labora et Invenies", pero el
mucho leer y releer necesita tiempo. Si los textos fuesen "caridosos", no sería necesario tanto
leer y releer, dicen los impacientes. ¿Por qué ese empeño de los Adeptos en jugar con nuestra
paciencia...?
Hay que pensar que si todos los Sabios (sin excepción) insisten en eso, será por algún motivo
pertinente. Y si alguno dice: "Hay un texto de Basilio, o de Flamel, en donde se explica todo
abiertamente...", pues, ¡Enhorabuena!, ¡Adelante...!, en breve sereis Adeptos y ya no
necesitáis más información.
Para los que no lo tienen nada claro, unos consejos de amigo: En otros aportes al foro he
llegado a comentar asuntos relacionados con el "Ora" y el "Lege, Lege, Lege, Relege". Hoy
voy a seguir matizando el asunto del "labora".
Para hacer la Obra siguiendo las indicaciones exactas de un Maestro personal, sólo hace falta
tener fé absoluta en el Maestro y seguir cuidadosamente y con aplicación sus enseñanzas. El
proceso no es contínuo ni lineal; llega un momento en que se está suficientemente preparado
21
para iniciar la verdadera Senda y, llegado a ese punto, el Maestro se retira y el discípulo (a
partir de aquí, verdadero alquimista) debe continuar solo, sin ninguna ayuda.
Pero para llegar a este punto de forma autodidacta (leyendo textos), no son suficientes los
libros de alquimia en los que, como he dicho, toda receta clara es engañosa y donde es un
verdadero problema discernir lo verdadero de lo falso. Hacen falta ciertos conocimientos de
química, de física, de mineralogía, de metalurgia y, respecto de la química, es muy
reconmedable (yo diría imprescindible) hacerse con viejos textos anteriores a 1870 y tratados
más antiguos, como el de Lemery, que ayudan a entender los conceptos y procedimientos en
vigor en la época en que fueron escritos los textos alquímicos. Ponerse a la práctica sin eso
conduce al fracaso, cuando no al accidente o al desastre.
De igual manera, para la realización de la Obra hace falta un lugar adecuado y unos medios.
Obtenerlos puede, también, ser labor incesante de muchos años.
Cierto que el Mercurio Doble y el Azufre de los filósofos son las materias con que se hace la
Gran Obra, pero pueden obtenerse de diferentes maneras. Unas requieren medios sofisticados
o dispendiosos e instalaciones adecuadas, otros son sencillos y sutiles. Los primeros son más
directos y permiten ahorrar tiempo, los otros contienen un sin fin de operaciones intermedias
y su tiempo puede ser de meses o años. Pero para quien la paciencia debe ser virtud obligada,
el tiempo no es inconveniente y los únicos criterios son el conocimiento, los medios
disponibles, el entorno...
Ya describí en otros aportes las características del mineral principal y de como podía ser
tratado con otros para retirar las terrestreidades y el azufre impuro que acompañan al
Mercurio, sustituyendo su lugar por otro elemento más manejable que mantenga al Mercurio
abierto o utilizando ciertos artificios para el mismo fin. Queda así el Mercurio preparado para
la primera conjunción con otro Mercurio de su mismo origen. Ambos, perfectamente unidos,
forman el Mercurio Doble de los Filósofos.
Como siempre, habrá quien tenga objeciones de que esta descripción no se adapta a lo dicho
por este o aquel Adepto, o que su experiencia con lo que interpretaron de mis comunicados
no funciona. Reitero lo que ya dije en otra ocasión, no voy a entrar en polémicas por ello. Si
alguien solicita alguna aclaración que pueda ser interesante para el ámbito general, lo haré
muy gustoso. Igualmente, y con el mayor deseo de ayuda para quienes tengan dificultades
para obtener algún procedimiento o método, no tengo inconveniente en describirlo (como ya
lo he hecho con la famosa "vía de Flamel"...) con toda minuciosidad, copiándolo de textos o
en base a mi propia experiencia.
1344 Filosofía
Queridos hermanos:
Contemplo con agrado que el foro va, poco a poco, alcanzando su punto de equilibrio
ponderado, llegado al cual la materia puede ser introducida y sellada en el huevo filosófico y,
por sí misma y un poco de calor, llegar a la perfección.
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No olvidéis que, ante todo, los Adeptos son también llamados Filósofos por el Fuego.
Nuestras materias son filosofales y el objetivo la Piedra Filosofal.
Está equivocado aquel que piensa que la Alquimia es operativa y maestría de laboratorio,
conocimiento de las materias y profundidad de las ciencias, y la filosofía un "bla, bla, bla..."
de quien nada sabe o de quien algo quiere ocultar.
También se equivocan grandemente los que creen que la Alquimia es un simil místico,
espiritual y puramente filosófico que busca la accesis sublime bajo las metáforas del
laboratorio y reniegan del trabajo físico, el estudio de los métodos y el ensayo.
Ese es el motivo de la "falta de caridad" de los que Saben. La Alquimia no es (como muchos
creen) un antigua ciencia que los antepasados encriptaron para su preservación en épocas de
persecución. Es la Senda que conduce a la Gran Puerta.
¿Entendéis, pues, por que las religiones dominantes la persiguen, o la menosprecian (y, sin
embargo, sus más preclaros guías la practican y buscan en secreto...)?
¿Entendéis que la ciencia no puede creer en la Ciencia (a pesar de que sus bases fueron
extraidas de Ella...)?
¿Entendéis, por fin, que nadie puede llegar ante la Puerta si no cree en ella ni conoce el como
y el porqué...?
Creo que todos los que, de verdad, desean recorrer esta Senda debemos reflexionar y buscar
la Primera Piedra, Piedra de la Filosofía, que es el conocimiento filosófico (pensad que los
textos de los verdaderos Adeptos comienzan todos por exponer razones filosóficas antes de
describir la operativa). Después, hay que obtener con búsqueda, estudio y trabajo la Segunda
Piedra, Piedra de los Filósofos. Esta evoluciona con el crecimiento de nuestro espíritu hasta
convertirse en la Tercera Piedra, Piedra Filosofal...
1350 Tranquilidad
Queridos hermanos:
Cada cierto tiempo, por motivos desconocidos (quizá astrológicos...:-) existe en el foro una
tendencia fraticida (¿sómos o no hermanos...?). Esta vez utilizando mis aportes y mi persona.
Otras veces por otros motivos o personas.
Yo os rogaría que no siguiéseis por ese camino, que os hace retroceder en vuestra evolución
lo cual, creedme, me produce gran tristeza. Ya dije muchas veces que yo no entraré en
polémicas. Parafraseando de nuevo a Filaleteo: "...Que me crea aquél que quiera, que me
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desapruebe aquél que pueda, que se me censure incluso, si alguien lo desea: sólo se irá a
parar a una profunda ignorancia...".
Sí, señor Lupus, sólo hay una Materia para hacer la Obra y con las que usted dice se puede
realizar. Lo que pasa es no forman parte de la misma vía y la que utiliza el método del volcán
de Lémery es muy delicada y sólo sale bien una de cada cien veces. La verdad es más simple
de lo que parece, un niño lo descubriría (pero los niños no hacen alquimia...).
Reitero que no tengo inconveniente en describir abiertamente ningun proceso, siempre que se
me pregunte abiertamente (en el foro si considero que puede ser de utilidad general o por e-
mail si así se me dice). Pero no responderé a preguntas de procesos alquímicos. Es decir,
jamás describiré con palabras claras cómo se obtiene el Mercurio Filosófico, pero si alguien
desea saber, por ejemplo, cómo se obtiene cinabrio artificial a partir de azufre y azogue, o
cómo se obtiene la potasa caústica a partir del nitro, etc. puedo indicarlo "con pelos y
señales" por procedimientos lo más sencillos posibles.
Paz y Luz.
S. Omar Exoslius
1364 Mercurio
Queridos hermanos:
Me permitiré resaltar una serie de puntos claves para que todos reflexionemos, antes de
proceder a realizar descripciones que pueden llevar a engaño y conducir a caminos no
recomendables:
1º) Nuestra Ciencia, es una ciencia natural, según las Leyes Universales de la Naturaleza. No
realiza ninguna operación contraria o extraña a la Naturaleza. Una de estas leyes, conocida
desde muy antiguo, se denomina en filosofía la "Navaja de Ocam". En resumen dice que,
cuando la Naturaleza tiene que elegir entre varias alternativas posibles, elige siempre la más
sencilla.
2º) En las primeras fases de la Gran Obra, los procesos y las materias, además de sencillos,
son comunes; es decir, conocidos. Mi mayor respeto para todos aquellos investigadores y
buscadores de elementos maravillosos (rocío recogido en ciertos lugares a determinadas
24
horas y dias, piedras o materiales cuya obtención es muy dificultosa o a los que hay que
realizar verdaderos procesos rayanos en la mística, etc, etc...), pero os aseguro que las
materias con las que se puede trabajar están al alcance de cualquiera.
4º) Es posible que alguno se rasgue las vestiduras por lo que acabo de decir en el punto
anterior, como si hubiese cometido sacrilegio. Pero también os diré algo que ya indicaba en
un aporte anterior: No se puede por métodos químicos saber si una cinta de vídeo está
grabada o no (y mucho menos decodificar su información por ese procedimiento).
5º) Dicho lo anterior, os aconsejo que no déis demasiada importancia al maravillosismo de las
descripciones de materias y procesos realizados por alquimistas medievales o renacentistas.
Ellos utilizaban los conocimientos de su tiempo. Así vemos descripciones "herméticas" para
la obtencíón de agua regia (Alberto Magno), del antimonio puro (Basilio Valentín, Nicolás
Flamel), del sublimado corrosivo (Filaleteo, Ripley), etc, etc...
6º) Cierto que existen energías sutiles que, como en el caso de la cinta de video, la química
no detecta y que son las que, en las fases finales del proceso, producen algo nuevo cuyas
propiedades han sido descritas por los Adeptos, al conseguir estados y comportamientos de la
materia que no serían posibles en las condiciones comunes. Algunas de estas energías están
ya contenidas en las materias naturales. Otras son energías cósmicas cuyo conocimento es
esencial para situar la Obra de forma que éstas penetren e impregnen adecuadamente la
materia. Otras hay, no menos importantes, que emanan del propio operador, que debe estar en
la disposición adecuada si quiere que el proceso evolucione favorablemente. De todas y cada
una de ellas hablaré en otras ocasiones.
7º) La Obra Perfecta se realiza con Mercurio Triple únicamente, situado en el huevo
filosófico. Esta denominación es fruto de la nomenclatura hermética medieval, ya que del
Mercurio Filósofico se obtiene otro Mercurio, hijo del anterior, que es esposado con la
materia que le dió origen y forman, por consiguiente, el Mercurio Filosófico o Mercurio
Doble, del cual se obtiene, por intermedio del primero, un azufre mercurial que, casado con el
segundo, forma el Mercurio Triple. Esta es la materia inicial de la Obra que evoluciona sin
más manipulación hasta alcanzar el grado de Piedra Filosofal.
8º) La dificultad de la obtención del primer Mercurio, estriba en que hay que antenerlo vivo.
Hay múltiples descripciones en los textos químicos, pero casi todas "matan" la materia (el
motivo es que se busca la eficacia y el rendimiento productivo y los métodos que son válidos
para nuestro Arte son poco rentables). Sin embargo, he visto descripciones a título de
ejemplo, en ciertos textos algo antíguos. Para eludir este camino, algunas vías (como la vía
húmeda universal) utilizan un proceso capaz de llegar al Mercurio Filosófico, sin pasar por el
primer Mercurio (más largo y trabajoso, pero más seguro).
Todas estas cosas las iré comentando con más amplitud en otros comunicados.
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1540 Materia viva
Queridos hermanos:
Dicho esto, ¿cuál es, entonces, la diferencia entre, por ejemplo, sulfuros naturales como la
blenda, pirita, galena, estibina, etc. y los obtenidos en el laboratorio a partir del metal
correspondiente?
Químicamente ninguna. Físicamente..., casi ninguna. Hay ciertas propiedades naturales que
son imposibles de reproducir en los compuestos artificiales y la ciencia no sabe muy bien
porqué.
Volví a realizar el régimen de Mercurio con el mineral vivo, pero no por el procedimiento
canónico sino por un camino que la luz de mi espíritu intuyó y que jamás he visto en ningún
tratado. Y gracias a Júpiter, padre de los dioses, pude obtener la maravillosa panacea que
evolucionó adecuadamente según los régimenes marcados, sin necesidad del gran trabajo y
gasto que producen Diana, sus cuernos lunares y sus tediosas palomas (a quienes, para no ser
descortés, agradezco los servicios prestados durante mucho tiempo...).
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De todo esto os hablaré, quizá, mañana.
Salud y Suerte
S. Omar Exoslius
Queridos hermanos:
Como ayer decía, el secreto esencial de la Obra es mantener la vida del ser mineral y
conducir de modo natural su evolución hacia el estado de suprema perfección.
Por ello nuestras manipulaciones no son químicas (la Química no reconoce la vida mineral...)
y todas aquellas "vías" o procesos que no tengan en cuenta esta filosofía vital no podrán
conseguir el resultado propuesto (a pesar de conseguir "productos" espectaculares o colores
maravillosos...).
Es asombroso, pero en ello juegan con gran importancia la calidad y tratamiento de las
materias complementarias (en especial el Fuego Secreto), así como su correcta proporción. El
tamaño y forma del vaso..., etc.
Pero sobre todo hay dos factores primordiales: la distribución y dosificación del fuego
externo y la configuración del circuito de condensación.
Todo ello forma una extraordinaria máquina termodinámica que produce la apertura suave y
natural de la materia prima sin elevar la temperatura interna por encima de los límites
marcados por la red nodular energética que configura la esencia vital del mineral.
Los ciclos térmicos, cuya duración y grado se adaptan, sorprendentemente, a las estaciones
climáticas anuales, producen inicialmente, de un caos (mezcla homogénea de materias) seco,
una abundante humedad que se condensa en las paredes del vaso y gotea desde la estructura
central superior al centro de la materia creando una circulación generadora y vital.
Esta agua (verdadero espíritu fecundador de toda la obra) es extraida poco a poco por el
circuito y, antes que la sequedad eleve la temperatura de la materia peligrosamente, la cúpula
se abre permitiendo la sublimación fria de la materia inicial sobre el caos. Esta es la materia
inicial viva, llamada de muchas maneras por los filósofos (Mercurio inicial, arsénico, saturnia
vegetal, pájaro de Hermes, etc...). Lo que se sublima en las paredes del matraz está muerto y
no tiene valor alguno (hay quien lo utiliza como fermento activo para obtener un mejor
rendimiento en la exaltación del mercurio utilizando las palomas de Diana....).
Nada de lo que aquí os comunico es nuevo. Está descrito (incluso con más detalle) en
diferentes tratados, sobre todo en los libros del maestro y muchos de los que lean este aporte
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en el foro lo han experimentado por sí mismos. Mi intención ha sido, como ya indiqué,
explicar la imprescindible necesidad de mantener la vida de la materia si se quiere que
evolucione hasta la perfección.
Os hablé tambien de otros dos procedimientos, pero son más tediosos y complicados. Uno es
la obtención de la materia por vía húmeda, sustituyendo a Marte por Venus como Fuego
Secreto y en la que la llave salina es una disolución de principios activos de equilibrio muy
delicado. La otra se basa en la disolución del mineral en un disolvente apropiado en
condiciones neutras (esto es muy difícil pues el disolvente es fuertemente ácido y es preciso
trabajar en las proximidades de la neutralización) y su posterior tratamiento. No entro en más
detalles ya que el descrito es más sencillo, rápido y fiable.
Ahora, parafraseando a Filaleteo, este Mercurio inicial presenta una malignidad arsenical, una
hidrofobia, que lo hace inadecuado y es necesario exaltarlo y purificarlo hasta convertirlo en
el Azoth, Mercurio de los Filósofos, Mercurio Doble, etc.,.
Este proceso puede ser realizado de forma natural por las palomas de Diana y por otras vías
(siempre que no se alimente al niño recien nacido con cadáveres...). Pero de ello, si me es
posible, os hablaré mañana.
Un abrazo fraternal.
S. Omar Exoslius
Queridos hermanos:
Continuando con mi exposición, hoy trataré de explicar como se realiza la exaltación del
Mercurio inicial a fin de que resulte adecuado para la conjunción con el Azufre perfecto.
Este Mercurio incial (niño recien nacido, en algunos textos) vivo necesita crecer, fortalecerse
y purificarse en su vitalidad. Como ejemplo a "escrutadores", os diré que alimentando esta
materia con su metal de origen se obtiene un cuerpo de parecidas propiedades..... pero
muerto. Hemos alimentado al infante con carne prutrefacta que ha deshecho su vitalidad.
Me detendré un poco en este punto para demostraros que mi afirmación no es gratuita. Podría
pensarse que si la estructura vital formada por la red de nodos energéticos en el interior de los
núcleos del Mercurio inicial está bien establecida, la combinación (química) con otros
núcleos desactivados no tendría que perturbar la red nodal existente. Podría..., pero la
realidad es diferente. Estos nodos energéticos no han nacido por sí mismos en el núcleo
atómico, sino que su activación parece que es producida por la resonancia vibracional de la
red cristalina. La rotura de esta red cristalina (efecto térmico) elimina el receptáculo
resonante y los nodos vitales se dispersan. Pero aún manteniendo la temperatura dentro de los
límites vitales, si se produce una reconfiguración de la red cristalina (por inserción de nuevos
núcleos), el habitáculo se amplía y los nodos energéticos se reparten no disponiendo ahora de
la energía suficiente para establecer la red vital. Y perdida la sintonía resonante la vida
desaparece...
Es algo farragoso y espero no haberos aburrido..., pero así son las cosas, tal como yo las veo.
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Entonces, ¿de qué manera puede alimentarse al delicado infante? ¿dónde encontrar un
alimento vivo y adecuado a su carne delicada? Aunque suene macabro..., el mejor alimento es
su propia carne. Así que tendrá que comerse a sí mismo... Esto ha sido representado a lo largo
de los siglos por un sin fin de alegorías, todas ellas, como digo, bastante macabras (cada cual
investigue los textos...).
Pero está claro que todos tenemos una cierta animadversión a comer nuestra propia carne
(aunque algunos podamos estar sabrosos...:-)) Pocas vías hay para conseguir esto. La más
clásica es la denominada por Filaleteo "Palomas de Diana" que han producido (y todavía
producen) gran confusión en muchos artistas.
Quizá el origen de esta confusión se base en que los investigadores han ido más a desentrañar
las metáforas de forma semántica en lugar de considerar la filosofía del proceso. Ya se ha
hablado en este foro de que cada adepto llama a las cosas según le place y, muchas veces, el
símil elegido no tiene otra lógica que ciertas similitudes subjetivas, la vena poética del autor o
aspectos parciales del proceso. Por consiguiente, el asunto no es dilucidar si Diana tiene o no
cuernos, se abraza con Venus y si sus palomas ya han nacido sin alas o es necesario
cortárselas... Mirad que tenéis y que quereis conseguir y, posiblemente, entendereis mejor el
proceso.
En esta via el procedimiento es muy similar al utilizado para la obtención del Mercurio
inicial, con sus ventajas de limitación de la temperatura que garantiza la continuidad y
mantenimiento de la vida. El Mercurio inicial constituye ahora la materia prima y las
materias complementarias realizan una función similar. Desgraciadamente, el proceso solo es
parcial y es necesario reiterarlo unas siete (o mejor nueve) veces antes de conseguir que el
Mercurio pueda ser considerado como Filosófico.
Este método es seguro, eficaz y fiable, pero tedioso (para preparar una cantidad sufiente de
Mercurio Filosófico es necesario repetir muchas veces cada reiteración que, sumado a que
siempre se pierde materia, exige realizar un número muy elevado de sublimaciones).
He descubierto una vía que produce idéntico resultado en una sola operación, sencilla y sin
gasto. Y la materia obtenida está viva y es perfecta. Doy gracias a Dios por esta Luz que me
ha sido revelada y que no he encontrado en ningún texto hermético. Mañana, si se me
permite, os lo describiré en términos de nuestra Ciencia y luego dejaré pasar algún tiempo
para permitir que mis palabras puedan ser "digeridas" por quienes tengan interés.
Cordialmente
S. Omar Exoslius
Queridos hermanos:
Ya os comenté ayer que la única manera de que el Mercurio crezca y se potencie en virtud y
vida es que se alimente de sí mismo. Puesto que es un Mercurio resultante de la unión de
Mercurio con Mercurio, el Mercurio Filosófico es llamado por algunos Mercurio Doble.
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Para materializar esta unión de forma rápida y eficaz es necesario disponer de un catalizador
o fuego interno que abra y excite esta materia para producir otra más evolucionada. Este
fuego secreto no existe en la naturaleza y el artista debe confeccionarlo con delicadeza y
cuidado pues se da la paradoja de que, aunque es muy incisivo y potente, es también
sumamente delicado. La temperatura lo descompone y corrompe; funde a la temperatura de
una fiebre fuerte y así es como ejerce su alta función, pero un incremento de este calor
destruirá su poder.
Su forma canónica más eficaz se obtiene elaborando este fuego secreto con el espíritu
fecundador (del que os hablaba en mi aporte 1551) sobre este cordero, hijo de Júpiter,
suavemente, de forma natural, al calor del cuerpo humano. Cuando el cordero haya sido
devorado por la fuerza del espíritu, filtraréis las aguas y calentareis sin llegar a hervir hasta la
perfecta cristalización. Usad pronto este fuego o cerrarlo herméticamente, pues su poder no
dura mucho.
Fundid esta materia como os he dicho y, gota a gota, incorporadla al Mercurio y no al revés
(si echais el Mercurio sobre este fuego, su excesivo poder matará al mercurio y dejará sus
huesos al aire...). Trabajad y ensayad con cuidado para no perder el esfuerzo y os aseguro que
en una sola operación tendréis todo el Mercurio convertido en Filosófico sin disminución y
capacitado para su conjunción con el Azufre.
Hoy voy a ascender a las montañas. Allí, en un bosque impresionante lleno de viejísimos
robles, castaños y otras variedades de grandes árboles, donde abunda el muérdago, el
arándano y el brezo, la luz del sol apenas llega y el entorno está poblado del poder y el
espíritu de los viejos troncos. Es una soledad llena de presencias (a veces no me asombraría
ver aparecer gnomos y elfos...), mágica y densa. Caminaré por senderos que pocos pies
humanos conocen y, después de muchas horas, el terreno se eleva y, en un claro, una mole
rocosa deja al descubierto una fuente singular. De forma inverosímil, de la misma roca,
surgen dos fuentes separadas entre sí unos tres metros. Una de las fuentes es de agua calcárea
y la otra ferruginosa. Ambas crean un entorno blanco y rojo, respectivamente, y, luego de
unos metros, las corrientes se juntan y se pierden por el bosque.
Todo lo que os he descrito es real. Comprenderéis mi particular emoción en ese lugar... Estaré
allí todo el fin de semana.
Hasta pronto
S. Omar Exoslius
Queridos hermanos:
Mucho se habla del Mercurio de los Filósofos, de sus orígenes y de los procedimientos o vías
que lo obtienen, pero sin el Azufre de los Filósofos (nuestro Azufre...) no es posible la
conjunción ni el crecimiento y evolución de la Obra.
Las referencias al Azufre son, si cabe, más oscuras y escasas que las del Mercurio y sucede
muchas veces que el artista, después de obtener éste con grandes esfuerzos, se empeña en
evoluciones sin sentido que, en la mayoría de los casos, conducen a callejones sin salida.
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Es cierto que se ha dicho que el perfecto Magisterio es realizar toda la Obra con sólo el
Mercurio... Y así es. Pero no hay que olvidar que nuestro Azufre se obtiene de forma natural
del Mercurio de los Filósofos.
Es importante que tengamos en cuenta el concepto que los antiguos tenían del azufre como
elemento constitutivo de la materia, porque de ahí se deriva la etimología de nuestro Azufre.
Lémery lo define como ese aceite o materia untuosa, que produce la conservación, color,
belleza o fealdad de los cuerpos y que en la destilación de los compuestos o mixtos sale
después del espíritu o mercurio... Al realizar esto en nuestra obra, se obtiene ese aceite rojo
inigualable al que no podemos llamar otra cosa que nuestro Azufre...
Hablando en términos más actuales, debemos entender que la red vital activa en el núcleo del
Mercurio (de la que os hable en anteriores aportes) sólo puede evolucionar y desarrollarse a
través de los canales de energía-fuerza de una red cristalina adecuada formada por un
elemento puente, muy estable en su configuración electrónica (hay dos elementos extremos
que sirven de contrapeso en la estructura, son imprescindibles a la hora de asegurar la
estabilidad total, pero no participan en el flujo evolutivo).
Hay que entender que ese enlace o conjunción sólo es posible si el Mercurio está vivo.
Podemos obtener sin dificultad una materia químicamente igual al Mercurio de los Filósofos
pero la conjunción con el Azufre no se consigue y, por tanto, todo sigue igual sin aparecer el
negro Saturno. Es más, aún si consiguiésemos por algún medio (que desconozco) realizar la
formación de la estructura cristalina y formar ese puente energético del que os hablo, sería un
puente vacío...
Sólo hay un elemento que sea capaz de realizar esta labor... Si llegáis al perfecto
conocimiento de nuestro Mercurio, el Azufre os será obvio... Para aquellos que llegan sin
haber profundizado, si alguna vez reciben el conocimiento del Azufre, darán un golpe en su
frente diciendo: ¡claro...!
Queridos hermanos:
La confección de nuestro Azufre, oro filosófico por excelencia, contiene algunas variantes
que, aparentemente, se contradicen. Y así podemos ver que hay significativas diferencias
entre las descripciones de los diferentes maestros e, incluso, varios de ellos (Filaleteo y
Flamel, entre otros) describen en un mismo tratado dos o más alternativas.
Sin embargo, si sabemos verdaderamente lo que es y sigifica nuestro Azufre, esa discrepancia
carece de sentido, por que lo que realmente difiere es la presentación o ropaje del Azufre y no
su naturaleza. De cualquier forma, la elección de una de estas modalidades va a incidir en la
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forma del Mercurio y en los preparativos de la Conjunción: No olvidemos que en ésta la
humedad radical debe propiciar la unión de los dos principios en una sola materia nueva y
especial, terriblemente endotérmica (realmente es un verdadero vampiro energético, al que no
se escapan ni las energías internas del propio operador...). Es el perfecto cuerpo negro (por el
estudio de sus leyes y su radiación obtuvo Einstein el premio Nobel y no por la teoría de la
relatividad como muchos creen...).
Esto viene a cuento para que no caigamos en el error de juntar el Mercurio y el Azufre en el
huevo filosófico y esperar a que la conjunción se produzca... Cada Mercurio tiene su Azufre y
viceversa.
Lo primero que dicen los filósofos es que la perfección está en obtener el Azufre a partir del
Mercurio Filosófico en virtud del espíritu volátil que es la sangre del león verde, en un
proceso lento y delicado que algunos realizan por una cohobación repetida del menstruo
coagulado después de una lenta digestión y fundiendo en cada repetición la materia blanca
hasta formar primero una materia amarilla (que indica el despertar de nuestro oro...) y luego
un aceite rojo como la sangre (es la sangre fija del león rojo, obtenida de la sangre no fija del
león verde...), casi pardo en su sequedad.
Con este Azufre, el húmedo radical debe ser incorporado aparte en la Conjunción sino, en el
calor del nido, las materias no exudarán la humedad suficiente para producir la evolución de
la que os hablé (si se aumenta la temperatura las flores se marchitarán y perderán la vida
antes de su licuación...).
Otros filósofos indican que en la Obra nada es despreciable y obtienen el Azufre del "caput
mortum" de la primera operación a partir de una digestión adecuada en su propio espíritu
volátil. Aquí una materia blanca o amarillenta se recoge con pelo de pluma de la superficie
del menstruo durante muchos días hasta que ya nada sale. Esta materia se circula según el
Arte con su Mercurio hasta obtener un Azufre similar al que os describí en el párrafo anterior.
Todavía conozco otros dos procedimientos para la obtención del Azufre, uno de ellos (para
mí el más interesante...) se realiza por una vía seca. Os lo contaré mañana, Si Dios quiere...
Queridos hermanos:
Esta nueva materia (que jamás se produciría combinando los elementos químicos "muertos"
de igual fórmula...) representa una verdadera transmutación material. En su confección, las
energías del enlace fluyen hacia el centro de una manera asombrosa: Absorbe toda la energía
sutil y de altas frecuencias que le circundan, inclusive los fotones de los cuerpos
constituyentes. Este Cuerpo Negro (no es un agujero negro sideral, ya que no posee la
atracción gravitatoria que caracteriza éstos, pero es idéntico su comportamiento en lo que
respecta a su radiación y absorción...), nuestro Cuervo es la antesala de la Obra Solar.
Los elementos de "contrapeso" no son determinantes en esta estructura, pero son necesarios
por que forman el vehículo de sustentación del Azufre y del Mercurio (algunos filósofos,
como Basilio Valentín, les dan nombre como si fuesen una materia independiente, con el
nombre de Sal...).
Sabed que me tenéis a vuestra disposición para amar a Dios y realizar su Obra.
S. Omar Exoslius
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