Los Presocráticos

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Los presocráticos, por Jonathan Barnes

Introducción

“Todos los hombres tienen opiniones, pero pocos hombres piensan” Berkeley

Las Fuentes de la Razón


La lógica es un descubrimiento griego. Las leyes del pensamiento fueron observadas por primera
vez en la antigua Grecia, y fueron expresadas y codificadas por primera vez en los Analíticos de
Aristóteles. Aunque los predecesores de Aristóteles no estudiaran el arte del raciocinio, fueron
expertos en su práctica. Aunque no fueran lógicos, fueron pensadores profundos y poderosos. El
hombre aristotélico es un razonador. Y antes que Platón y Sócrates, hubo un grupo de hombres que
colaboró en el desarrollo de la filosofía y el pensamiento. El rotulo presocráticos es exagerado:
algunos de los pensadores que se abordarán fueron contemporáneos de Sócrates, no antecesores.
Los filósofos presocráticos tenían en común una característica de gran importancia: eran racionales.
Voy a aclarar brevemente mi afirmación de que los presocráticos eran hombres racionales:
i. En primer lugar, esta afirmación no implica que los griegos, como pueblo, fueran
especialmente proclives a la razón ni que carecieran especialmente de supersticiones.
Los filósofos presocráticos no eran iguales a los demás: se elevaban por encima del
vulgo. (Los griegos no carecían de supersticiones, y los filósofos presocráticos se
elevaban por encima del vulgo)
ii. Es un error pensar que la racionalidad es una prerrogativa de las ciencias naturales. Los
presocráticos fueron los primeros científicos empíricos, pero la razón es omnívora: me
ocuparé de su metafísica no de su meteorología (La racionalidad no es una
prerrogativa de las ciencias naturales, y la razón es omnívora: metafísica, no
científica).
iii. No se ha de suponer que los hombres racionales deban rechazar lo sobrenatural. Con
razón los estudiosos comparan la cosmogonía naturalista de los filósofos milesios
con historias mitológicas como las que encontramos en la Teogonía de Herodoto. Lo
significativo no es que la teología se convierta en ciencia ni los dioses en fuerzas
naturales, sino que unas fabulas no razonadas fueran sustituidas por una teoría
razonada, que el dogma diera el paso a la razón. (Del dogma a la razón. Sin embargo,
el rechazo a las vacuas aseveraciones de la piedad y de la poesía, no supone descartar
lo divino y los sobrehumano).
iv. Los hombres racionales no están obligados a crear para sí mismos, apartados,
independientes, impermeables a la influencia. (Los presocráticos, como todo hombre
racional, tomaron muchas ideas ya expresadas por otros)
v. (Lo racional no siempre es verdadero. Las ideas de los presocráticos, sin embargo, se
caracterizan por un argumento, reforzadas por la razón y basadas en pruebas). Pocas
opiniones presocráticas son verdaderas. Pero a pesar de todo son, en un sentido vago
aunque significativo, racionales: se caracterizan por estar apoyadas en el argumento,
reforzadas por la razón y basadas en pruebas.

Tales, los imanes y el agua

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