El Ministerio Pastoral

Escuela de Ministerio Módulos I
El Ministerio Pastoral
PREPARANDONOS PARA EL MINISTERIO PASTORAL
PRIMERA LECCIÓN
INTRODUCCIÓN AL MINISTERIO
Jeremías 3:14,15,19
14
Convertíos, hijos rebeldes, dice Jehová, porque yo soy vuestro esposo; y os tomaré uno de cada
ciudad, y dos de cada familia, y os introduciré en Sion; 15y os daré pastores según mi corazón,
que os apacienten con ciencia y con inteligencia.
19
Yo preguntaba: ¿Cómo os pondré por hijos, y os daré la tierra deseable, la rica heredad de las naciones?
Y dije: Me revelaré como Padre, y no os apartaréis de en pos de mí.
Dios prometió para estos tiempos preparar pastores según su corazón para que apacienten su
grey con ciencia e inteligencia. Siendo la familia uno de los requisitos más importantes de todo
ministro. En tal sentido durante este módulo estaremos analizando:
1. Orientación para el mentor del futuro pastor.
2. Consejos a los futuros pastores.
3. Requisitos bíblicos para el consejo pastoral.
4. Tipos de pastores que fracasan en alcanzar su potencial ministerial.
5. Qué hacer cuando un ministro cae en adulterio.
6. Su familia es mas importante que su ministerio.
1. ORIENTACIÓN PARA LOS MINISTROS QUE FORMAN OTROS MINISTROS

Proceso de adiestramiento de los nuevos ministros
Al comienzo del proceso de adiestramiento de un nuevo convertido, seguimos una forma bien
estructurada por el hecho de que su necesidad más apremiante es la de recibir información con
respecto a la fe.
También nos esforzamos en encontrarnos con el nuevo creyente en una forma no estructurada,
a fin de establecer una estrecha amistad con él.
A medida que él continúa creciendo y se mueve hacia la fase del ministerio, la forma de
nuestros encuentros llega a estar crecientemente orientada hacia el consejo. Este tipo de
adiestramiento es el necesario para la transferencia del carácter.
La forma de aconsejar debe estar ajustada para estimular el desarrollo del carácter. Esto
significa que hay que… "Ayudar al futuro pastor, para que detecte aspectos en su vida a los
cuales debe hacer frente para obtener creciente madurez”
El estímulo y la animación también se incluyen. Esto exige que el maestro del futuro pastor,
esté comprometido en el asunto y destine tiempo a ello.
El mentor tiene que hacerse aplicaciones de la Palabra de Dios constantemen te a su propia
vida a fin de ser efectivo cuando trata de ayudar a otro para que haga lo mismo.
1
El carácter del mentor del futuro pastor

Puesto que la clave para la transferencia de vida, consiste fundamentalmente en pasar tiempo
con el individuo y permitir que ocurra la transferencia, la madurez del maestro que formará al
nuevo pastor es extremadamente importante.
Se aprende más del ejemplo que verá de su maestro que de la enseñanza, y tenemos que
tener el cuidado de no contagiar a los futuros pastores de nuestros defectos. Es necesario
entonces que el maestro del nuevo pastor esté en un punto de madurez (y aun más allá) al cual
queremos que lleguen los nuevos pastores.
En esto de formar futuros pastores, hay que tener en cuenta que éstos serán como su maestro.
Cristo tenía esto claramente en su pensamiento cuando dijo: (Lucas 6:40)
El discípulo no es superior a su maestro; mas todo el que fuere perfeccionado, será como su maestro
Formación teológica Vs Formación de carácter

Por lo antes descrito vemos que la formación que nos brinda un Seminario Teológico, dista
mucho del requerimiento necesario para formar el carácter de un pastor conforme al corazón de
Dios, pues son muchos los profesores que vienen y van, con diferentes cualidades y muchos
defectos, cuya vida familiar ni siquiera es conocida por el Cuerpo directivo del Seminario.
Los profesores del Seminario pueden proporcionar información teológica, pero no pueden
impartir cabalmente el carácter de Cristo, puesto que esto requiere de compartir tiempo y dinero si
fuere necesario para impartir la vida del mentor en la vida del discípulo.
2. CONSEJOS A LOS QUE ANHELAN EL PASTORADO

El llamado al ministerio del nuevo pastor
Ustedes no forman parte de este entrenamiento por pasar el tiempo que les sobra, o por no
tener nada que hacer. Están aquí porque Dios les llamó para capacitarse para ejercer un
ministerio eficiente.
Este concepto tiene que prevalecer al desaliento o al deseo de abandonar. Si Dios te ha
llamado Él te dará los recursos, de una u otra forma, para que llegues a la meta que te has
propuesto. No permitas que nada ni nadie te desanimes o te desvíe del camino trazado por tu
creador.
Todas las personas que aceptan y permanecen en la Visión Celular en el Modelo de los Doce,
tienen un llamado al liderazgo ministerial, y en la medida que nos vamos capacitando vamos
descubriendo nuestro llamado específico a un ministerio particular de acuerdo a lo establecido por
el Señor Jesucristo en Efesios 4:11-13.
Ser llamado a un ministerio (apóstol, profeta, evangelista, pastor o maestro) es algo muy grande
y de mucha honra de parte de nuestro Dios y Señor Jesucristo, hacia uno de sus hijos. Un
ministro de nuestro rey y Señor Jesucristo, es un servidor, un embajador de su reino, reino este
que está por encima de cualquier otro gobierno sea natural o sobrenatural.
Siendo hijos de Dios, el llamado a uno de estos ministerios es algo que vamos anhelando,
cuando vamos descubriendo el gran amor de nuestro Padre Celestial por nosotros y el bienestar
que nos desea entregar, y crece cada día nuestro deseo de servirle y honrarlo.
2
Cuando un hijo de Dios confirma el llamado ministerial, entra en una nueva dimensión
revelacional, porque el Señor se complace en aquellos hijos que deciden entregar su vida por el
bien de otros. “He aquí a mi hijo amado en quien tengo complacencia… a él oíd”.
El Señor se deleita tanto en su corazón que lo defiende a capa y espada y dedica toda su
atención para capacitarlo y adiestrarlo por medio de un mentor, esperando de él lo mejor. Esto es
tanto así, que no permite que otros murmuren de él o lo desobedezcan, quien ofende a un
ministro del Señor, lo ofende a Él.
¡Valore y no menosprecie la oportunidad que se le ofrece y procure con diligencia honrar al Señor¡
¿Cómo debe ser la vida del nuevo pastor, para que sea digna de reproducirse?
La vida del pastor debe ser digna de reproducirse en sus discípulos. La clave para responder a
esta pregunta está en examinar lo que la Palabra de Dios identifica como características o
cualidades del dirigente espiritual.
Puesto que la Biblia destaca claramente el papel del ejemplo y sus efectos ineludibles, los que
asumen la dirección espiritual deben reflejar ciertas características para asegurar una positiva
transferencia.
Cuatro aspectos en la vida del nuevo ministro:

1.- Requisitos bíblicos para el ministerio.
2.- Tipos de pastores que han fracasado en alcanzar el potencial ministerial
3.- Qué hacer cuando un ministro cae en adulterio.
4.- Su familia es más importante que su ministerio.
“No se desanime si detecta que usted no está cumpliendo con estas normas, lo que se
desea es que usted descubra aspectos en su vida a los cuales debe hacer frente para
obtener una creciente madurez”
Así que, para nuestro propósito de formar nuevos pastores, durante el adiestramiento para el
ministerio, debemos enfocar ciertas características que le permitirán orientar su atención para
comenzar a corregir y aceptar la ayuda de su mentor:
Es interesante observar que los dones, nunca se mencionan en relación a escoger dirigentes
en la iglesia primitiva. Los pasajes que se refieren a las características de los dirigentes
espirituales, como los obispos, diáconos y ancianos, nunca los mencionan. En todos los casos,
lo importante es la madurez espiritual, no los dones.
Hay tres pasajes principales que se refieren a tales características.

Tito 1:5-9; 1 Timoteo 3:1-7; y 1 Pedro 5:1-3.
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LECCIÓN 2
CARACTERÍSTICAS DE ALGUIEN QUE ANHELA PASTORADO
Según la carta a tito 1:5-9
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Por esta causa te dejé en Creta, para que corrigieses lo deficiente, y establecieses ancianos en cada
ciudad, así como yo te mandé; 6el que fuere irreprensible, marido de una sola mujer, y tenga hijos
creyentes que no estén acusados de disolución ni de rebeldía. 7Porque es necesario que el obispo sea
irreprensible, como administrador de Dios; no soberbio, no iracundo, no dado al vino, no pendenciero,
no codicioso de ganancias deshonestas, 8sino hospedador, amante de lo bueno, sobrio, justo, santo, dueño
de sí mismo, 9retenedor de la palabra fiel tal como ha sido enseñada, para que también pueda exhortar
con sana enseñanza y convencer a los que contradicen.
(Parte I)
1. QUIEN ANHELA PASTORADO DEBE SER IRREPRENSIBLE.
Es decir una conducta “incuestionable, irreprochable”. No que tiene que ser perfecto, pero
hay un gran abismo entre querer vivir una vida que agrada a Dios y una vida que sencillamente
poco le interesa agradar a Dios.
Nos escandalizamos cuando un pastor cae en pecado. En realidad eso no ocurre de la noche
a la mañana. Eso es un proceso que empezó en algún momento y que poco a poco vamos
permitiendo que ese pecado, esa forma de vida pecaminosa, forme parte de nosotros. Cuando al
fin se descubre nuestro pecado nos damos cuenta que en realidad no fue algo ocasional, fue un
proceso que ya tenía mucho tiempo.
Estas preguntas son para auto examinarse y para abrir su corazón a fin de aceptar la
corrección.
 ¿Alguien comúnmente tiene causa para acusarte de mal proceder?
 ¿Alguien te ha denunciado o te ha acusado judicialmente por algo?
Hay acusaciones falsas que nos hacen pero que tragedia cuando son verdaderas.
 ¿Has sido culpado en los últimos tres años de una violación al reglamento de
tránsito, o alguna ofensa criminal? Tenemos que examinarnos.
 ¿Eres un buen ejemplo para tus hijos, tu esposa, y tu iglesia?
 ¿Piensas que alguien en tu iglesia se ofendería o tropezaría si tú fueras pastor?
¿Quién? Hay personas que su opinión no tiene peso, pero hay personas que definitivamente
aman al Señor y quieren vivir para Dios y tienen algo que enseñarnos.
 ¿Has estado en banca rota? Creemos que uno de los problemas que tenemos es
que somos malos administradores. ¿Cómo podemos enseñarle a los miembros de nuestra
iglesia a ser ordenados en sus finanzas, si nosotros mismos no somos ordenados en
nuestras finanzas?
 ¿Haces promesas que no cumples? Eso se llama mentira.
 ¿Exageras y Mientes? Todos estamos en esa batalla. Pero que terrible es cuando
un pastor definitivamente ya está yendo cuesta abajo y ya no le importa, y su justificación es:
“Díganme: ¿Quién es perfecto?, díganme ¿Quién no peca?”
Si esa es nuestra justificación entonces se vale que los hermanos vivan como quieran.
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2. QUIEN ANHELA PASTORADO DEBE TENER UN MATRIMONIO CONSAGRADO
(Marido de una sola mujer)
Este pasaje hace relación al divorcio, el matrimonio en Cristo es para toda la vida. La biblia
enseña que para casarse de nuevo debe haber muerto el otro conyugue, de lo contrario adultera.
Sin embargo muchos llagan a los caminos del Señor habiéndose divorciado y casado
nuevamente y anhelan el obispado. Estas personas que han restaurado sus vidas en Cristo y los
solteros deben entender que de aquí en adelante, esta regla debe ser aplicada a su ministerio.
Un dirigente espiritual tiene que demostrar a los demás, consagración y devoción en su relación
matrimonial para contagiar a otros, estos rasgos en la relación de ellos con Cristo. No hay nada
que mate la efectividad y la credibilidad de un dirigente como una relación matrimonial frívola.
¿Puede un soltero anhelar ministerio? La respuesta es sí, pero debe estar dispuesto a levantar
su hogar en cualquier momento. No olvide que el reino se debe manifestar primero en mi hogar
para impartirlo luego a la iglesia.
3. TIENE QUE SER RESPETADO POR SU FAMILIA.

(Que tenga hijos creyentes)
Esta característica se refiere al tipo de relación que debe haber entre el pastor y sus hijos.
Estamos ante una característica que no es de aplicación universal, por cuanto no todos los
pastores son casados, ni tienen hijos. Las enumeraciones bíblicas de características tienen que
incluir todas las cualidades importantes, para que los que se hallan en diversas circunstancias
puedan aun así ser evaluados.
Los hijos del dirigente espiritual deben ser creyentes. Una mejor traducción sería: "que
tiendan hacia la fe".
Esto indicaría el cumplimiento del mandamiento y de la promesa que hallamos en Proverbios
22:6: “Instruye al niño en su camino, Y aun cuando fuere viejo no se apartará de él.”
La idea no es la perfección en los niños, sino su tendencia hacia la fe en Cristo.
Los hijos tampoco deben ser acusados de disolución ni de rebeldía.

La idea clave de esta expresión es la de que sean respetuosos hacia sus padres. Si los hijos no
respetan sus padres, algo anda seriamente mal. El hijo conoce a sus padres mejor que cualquier
otra persona. Si este conocimiento es la causa del irrespeto, o por lo menos no lo detiene,
“generalmente” hay algo malo en la vida por lo menos de uno de los padres.
Es posible que los padres hayan fallado en cumplir fielmente su responsabilidad, y por tanto, su
maestro debe procurar restaurar esta relación.
Por lo menos, se debe hacer una investigación para determinar si la vida del niño, en lo que
respecta a su estilo rebelde, se puede atribuir a fallas de los padres. Estas son palabras duras, sin
embargo, son claras. No obstante esto, es importante comprender que la idea de estas palabras
no es la perfección. Todos los hijos carecen de respeto para sus padres de vez en cuando. El
problema que aquí se discute es un estilo de vida constante en que falta el respeto.
Los hijos del pastor se deben caracterizar por la obediencia a sus padres.
Aunque el pastor no debe poner a su familia como ejemplo. Debe ser un ejemplo. No cometa
el error de algunos pastores de estar hablando siempre de sus hijos. ¡Que son los mejores, o que
usted tiene unos excelentes hijos¡ Usted estaría poniendo una carga tremenda sobre sus propios
hijos. No lo haga por su propio bien y el de sus hijos. No es justo para ellos.
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4. EL QUE ANHELA PASTORADO NO DEBE SER ARROGANTE.
(No soberbio)
El pastor no debe caracterizarse por la soberbia, sino por la humildad. La expresión griega (no
soberbio) en este caso significa "No ser dominado por el interés propio".
Este término implica que una persona es arrogante y dogmática en aspectos en que no debiera
serlo. Lo que ella (la persona) deduce que es cierto, tiene que ser lo correcto y no hay más discu-
sión. Por causa del ejemplo, los efectos de tal arrogancia pudieran ser devastadores para el
crecimiento cristiano.
“Recuerdo en particular a un pastor que podía hablar con autoridad sobre muchos temas a
causa de su preparación académica. Pronto comenzó a hablar con igual dogmatismo sobre temas
para los cuales la Escritura no nos da el derecho de ser dogmáticos. Y pronto también forzó a
todos para que estuvieran de acuerdo con él hasta en el detalle más mínimo o arriesgarse a ser
despreciados o echados de la iglesia. Las personas que asistían a esa iglesia comenzaron a
reflejar ese dogmatismo arrogante” Hay una gran necesidad de determinar dónde debe ser uno
rígido y dónde no debe serlo.
Lamentablemente este discernimiento se aprende por ensayo y error. Tales errores pueden ser
beneficiosos, si manifestamos una actitud de humildad mediante la admisión de nuestros errores y
el cambio. Esto ayudará al discípulo que está creciendo para que él también sea más flexible en
su vida.
5. TIENE QUE MANEJAR LA IRA EN FORMA CORRECTA (No iracundo)

No debe ser iracundo. Esta expresión significa "No ser inclinado a la ira". El cuadro que se
nos presenta es el de alguna persona que tiene el hábito de recurrir a la agresión (verbal o física)
rápidamente, cuando las cosas no cuadran perfectamente bien con sus circunstancias.
El problema está en que es habitualmente rápido para utilizar la ira al hacer frente a los
conflictos. Este problema se manifiesta a menudo en la manera como un individuo se ruboriza y
explota cada vez que alguien le discute algo. Si tal individuo logra una posición de dirección
espiritual, levantará una completa banda de iracundos en la iglesia. Así comprendemos la
seriedad de este asunto para aquellos que están envueltos en el adiestramiento para formar
pastores.
6. TIENE QUE PRACTICAR LA TEMPERANCIA (Abstinencia - No dado al vino)

"No dado al vino". La idea de la palabra en griego es “la temperancia”. Dios quiere que
seamos un pueblo que practique la temperancia. Este pasaje se refiere no solo a la abstinencia de
alcohol, y se aplica a más cosas que simplemente al alcohol. Es posible llegar a ser un borracho
o adicto a otras cosas. Los cristianos pueden ser presa de la embriaguez en la búsqueda del
dinero, adictos a la televisión, a la comida, al celular y a muchas otras cosas. El pastor debe
demostrar el papel de la temperancia en todas las cosas. El que anhela obispado, tiene que
reconocer los peligros de la esclavitud a diversas actividades en su vida. El siguiente versículo
nos repite este desafío: (1Corintios 6:12)
“Todas las cosas me son lícitas, más yo no me dejaré dominar de ninguna”
6
LECCIÓN 2 (Parte II)
Según la carta a tito 1:5-9
1. EL QUE ANHELA PASTORADO NO DEBE SER PENDENCIERO.

(No pendenciero)
Esto quiere decir que no debe ser violento. Otras traducciones dicen: "No un peleador";
también usan la palabra pugnas, pero todas se refieren a lo mismo: Una de las características del
dirigente espiritual es que no debe ser contencioso. La idea es similar a la de no ser iracundo,
sin embargo, le agrega una dimensión: “No debe andar con rencores”.
Tal vez se trate de un asunto de poca importancia doctrinal, y de repente esa persona se
vuelve contenciosa. Rápidamente se lanza contra las personas involucradas, bien física o
verbalmente, para hacer frente al asunto. Lo que expresa esta idea es precisamente lo que se
prohíbe en este pasaje. Se advierte, no sólo contra la acción de la violencia, sino contra el
intento de hacer violencia.
Recuerdo al director del programa juvenil en una iglesia local que manifestaba esta
característica de la violencia. El mantenía a sus muchachos en la línea amenazándolos con
darles un golpe en la nariz. A menudo actuaba como si estuviera a punto de hacer eso, y los
que estaban alrededor de él tenían que detenerlo. Tenía un grupo de jóvenes que se portaba
bien, ¿Pero cuánto era el precio? La vida cristiana no tiene lugar para los pendencieros ni para
los peleadores.
2. EL QUE ANHELA PASTORADO NO DEBE SER CODICIOSO.

(No codicioso)
Se advierte que no deben codiciar ganancias deshonestas. El enfoque particular de esta
palabra griega está en las ganancias económicas o materiales. Se refiere a la idea de permitir
que la vida sea dominada por el deseo del éxito en lo económico o material.
Cuando la ganancia económica llega a ser la meta principal de la vida, uno no puede impedir
que este objetivo se reproduzca en otros. El sometimiento al señorío de Cristo ciertamente será
difícil reproducirlo cuando el dinero llega a ser el dios. Esta actitud no sólo se refleja en la
búsqueda de las ganancias económicas en el mundo secular, sino también en una preocupación
no saludable con respecto a la economía de la iglesia. Es posible reemplazar la confianza que
debemos tener en la continua provisión de Dios, por la tangible seguridad de una cuenta
bancaria. Tal cambio sería rápidamente aceptado y copiado por el cristiano que va en
crecimiento, que está teniendo problemas para confiar en Dios con respecto a la provisión
económica en primer lugar.
¡Qué mortal sería que el pastor dé un ejemplo de esa naturaleza!
3. EL PASTOR DEBE SER HOSPEDADOR.

(Sino hospedador)
"Hospedador" significa "estar dispuesto a ofrecer hospitalidad". ¿Le encanta a usted ser
hospitalario con la gente? La idea de la palabra no es que uno ya esté practicando la hospitalidad,
7
sino que a uno le encante ofrecerla. Se implica la hospitalidad sin nin guna idea de recibir
recompensa de ninguna clase.
El principio básico que respalda la práctica de la hospitalidad es el deseo de ayudar a las
personas sin esperar alguna recompensa. Obviamente, ésta es una característica de la vida que
vale la pena transmitir, ya que es una importante actitud para reproducir en el nuevo cristiano. La
disposición para salirse uno de lo ordinario y hacer cosas en favor de otros es la misma
característica que tuvo el llamado buen samaritano a que Cristo se refirió en su parábola.
Tenemos que salirnos de lo ordinario para ser hospitalarios.
Otras maneras de manifestar hospitalidad consisten en invitar a personas para una comida
especial, o proveer hospedaje para los visitantes. Algunos comentaristas piensan que esta
palabra en particular también implicaba en la iglesia primitiva la disposición a abrir el hogar de uno
para los cultos. El cuerpo de creyentes se movía de hogar en hogar para las diversas reuniones
que tenían. El principio consiste en estar uno dispuesto a ofrecer las cosas con las cuales Dios lo
ha bendecido. Pudiera ser la casa, el alimento, el dinero.
4. TIENE QUE SER AMANTE DE LO BUENO (Amante de lo bueno)

En griego, la palabra que se tradujo “Lo bueno" tiene una connotación más bien activa que
pasiva; no sólo significa tener una buena disposición, sino “también pensar activamente en
hacer el bien”. Creo que en Filipenses 4:8 se nos presenta este mismo principio para una mente
activa: “Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo
puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si algo digno de
alabanza, en esto pensad.”
Tiene que desarrollar correctamente la mente de tal modo que no sólo esté puesta en las cosas
específicamente espirituales, sino también en las buenas cosas en general. La idea es la de llenar
nuestras mentes con pensamientos honorables, edificantes, que den como resultado la gloria para
Dios.
5. DEBE TENER UNA MENTE SOBRIA. (Sobrio)

Ser dueño de sí mismo. Algunos traductores usan aquí la palabra "sobrio", otros, la palabra
"sensible". El término griego significa "una mente sobria". La persona debe tener dominio de sí
misma en su mente. Esta idea ciertamente está vinculada a lo de tener la mente puesta en lo
bueno, que ya explicamos, pero también incluye la idea adicional de la sabiduría.
La palabra significa que una persona se caracteriza por la sabiduría en el uso de la mente y el
cuerpo. La idea es la opuesta a la frivolidad, o al hecho de llevar la vida de uno sin preocupación.
El principio es que la persona debe ser sabia en todos los aspectos de su vida para así
demostrar el dominio propio del cristiano como principio de la vida integral.
La regeneración afecta a la persona en su totalidad. El creyente que está creciendo tenderá a

imitar la vida del que lo adiestra en todos los aspectos, no sólo los espirituales.
¿Ha pensado usted en forma completamente seria lo que significa ser cristiano en todos los
aspectos de la vida, o es frío y despreocupado con respecto a la total mayordomía de su tiempo y
de su vida?
8
6. EL QUE ANHELA PASTORADO HA DE SER SANTO Y JUSTO. (Justo)

Muchos piensan: ¿Por qué pierdo tan rápidamente la fortaleza del Señor? Será porque soy un
fracasado, o quizás porque no tengo la preparación que necesito?
Hermano, cuando hay pecado en nuestros corazones, aunque sea un 1%, puede llegar a
destruir cada gramo de devoción en nuestras vidas. Nadie compraría agua cuya etiqueta diga:
“ 98% de agua mineral pura y 2% de agua cloacal” *
*Nota de Sergio Scataglini “El fuego de su Santidad”
7. EL PASTOR DEBE TENER DOMINIO DE SÍ MISMO.

(Dueño de sí mismo)
Ciertamente, un número de las características que ya hemos mencionado, tienen implicaciones
de dominio propio, pero el pasaje que estamos estudiando usa esta expresión de una manera
específica. Es la misma expresión, que se usa en Gálatas 5:22, 23, con respecto al fruto del
Espíritu: “Más el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre,
templanza; contra tales cosas no hay ley.”
Ser uno dueño de sí mismo significa mantener las cosas firmes en la mano, tener poder sobre
las cosas malas, y dominio sobre las buenas, mantenerse uno en control. La idea que aquí se nos
presenta es “la victoria sobre los deseos pecaminosos, y dominio sobre el cuerpo y sobre
las emociones”.
8. EL PASTOR DEBE SER CONOCEDOR DE LA PALABRA.

(Retenedor de la palabra fiel)
Obviamente, para podernos aferrar a la Palabra de Dios tenemos que conocerla. La idea es
“Comprenderla realmente, estar uno sometido a su verdad y a su autoridad”. En el
ministerio pastoral no hay lugar para aquellos que no están sometidos a la autoridad de la
Palabra de Dios. Porque, a menos que los pastores estén sometidos a la fe de que la Biblia en
realidad es verbalmente la inspirada e infalible Palabra de Dios, el ejemplo de ellos actuará como
un cáncer que destruirá la fe objetiva del cuerpo de creyentes.
Así que esta característica de conocer la Palabra de Dios y aceptar su autoridad y fidelidad es
algo que usted definidamente debe reproducir. La Palabra de Dios es la norma de vida. Cuando la
Palabra de Dios dice que usted haga alguna cosa, hágala obedientemente; y cuando dice que no
la haga, no la haga. Usted debe desarrollar ese sometimiento a la autoridad de la Biblia en la vida
del discípulo. Por todas las razones que ya hemos señalado con respecto al discipulado, este
sometimiento a la Biblia tiene que estar presente. Sin él no crecerá el cristiano.
Si usted acepta la Palabra de Dios como final y autorizada en todo lo que dice, si así se aferra a
la Palabra de Dios, entonces debe tener las dos cualidades que se mencionan a continuación,
que también son características del pastor.
9. HA DE SER SANO EN LA ENSEÑANZA

(Primera cualidad: Que pueda exhortar con sana doctrina)
Para tener una vida que sea digna de transferir, usted tiene que ser capaz de dar instrucción
(o exhortar) con sana doctrina. Tiene que conocer la doctrina y ser capaz de comunicarla. Para el
9
pastor Implica conocer la doctrina hasta poder usarla a nivel personal, para aconsejar y corregir a
otra persona.
Para enseñar efectivamente con sana doctrina, usted tiene que poderse comunicar claramente,
y saber mucho más de lo que está comunicando en cualquier momento. Este es el mecanismo de
seguridad para saber si lo que uno está comunicando es en realidad sana doctrina.
10. DEBE TENER SABIDURIA PARA DE REFUTAR EL ERROR

(Segunda cualidad: Convencer a los que contradicen)
Esto de refutar significa convencer hasta el punto de producir la confesión. Es decir “Tener
éxito en convencer a una persona acerca de la verdad”. De modo que es necesario que uno
conozca bien la Palabra de Dios para refutar a los que la contradicen. Significa que uno debe
saber hacer frente al ocultismo, al ateísmo, etc.
Al error hay que hacerle frente de una manera objetiva, y no a través de razonamientos y
especulaciones subjetivas. También debemos darnos cuenta que esta refutación no se haga de
un modo ofensivo. Veamos lo que nos dice 2 Timoteo 2: 24 “Porque el siervo del Señor no debe ser
contencioso, sino amable para con todos, apto para enseñar, sufrido.”
Este versículo destaca una confrontación amable y directa, en la cual la comunicación es de tal
naturaleza que la verdad queda clara, y lo que se rechaza también queda claro. Pero si uno se
acerca a los que están en error de un modo insolente, ellos levan tarán sus defensas y no
entenderán lo que uno esté diciendo. Si esto sucede, nunca se arrepentirán, ni llegarán al punto
de comprender la verdad, por cuanto nunca la han entendido.
Nuestra meta debe ser la misma de Pablo, tal como se ve en 2 Co 10:5 “Derribando
argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevando cautivo todo pensa-
miento a la obediencia a Cristo.”
Mediante esta comprensión tal vez Dios les conceda la oportunidad de acudir a la verdad.
Algunos pueden continuar en rebelión contra Dios y su Palabra, pero por lo menos comprenderán
claramente que están en rebelión contra ella. Esta refutación es un convencimiento tal que lleva a
la persona al punto del arrepentimiento.
No hay manera de hacer esto a menos que uno conozca la Palabra de Dios y esté capacitado
para enseñarla, sólo entonces puede uno aplicarla a problemas específicos.
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LECCIÓN 3
Según la primera carta a Timoteo 3:2-7
En este pasaje se repiten algunas características que ya examinamos en Tito 1:5-9. Así que nos
enfocaremos en las nuevas que se añaden en esta porción bíblica:
“Pero es necesario que el obispo sea irreprensible, marido de una sola mujer, sobrio, prudente,
decoroso, hospedador, apto para enseñar; no dado al vino, no pendenciero, no codicioso de ganancias
deshonestas, sino amable, apacible, no avaro; que gobierne bien su casa, que tenga a sus hijos en sujeción
con toda honestidad (pues el que no sabe gobernar su propia casa, ¿Cómo cuidará de la iglesia de Dios?);
no un neófito, no sea que envaneciéndose caiga en la condenación del diablo. También es necesario que
tenga buen testimonio de los de afuera, para que no caiga en descrédito y en lazo del diablo.”
1. QUIEN ANHELA PASTORADO DEBE SER CALMADO. (Sobrio)

La primera de las nuevas características que se mencionan para un dirigente espiritual es que
sea "Sobrio". Esta palabra describe en griego a una persona que es “Calmada y prudente para
apasionarse”. Implica que habitualmente utiliza una cautela prudente. Esta cautela es la que
hace surgir la calma y la temperancia (Abstinencia).
Una idea similar se halla en el mandamiento bíblico a ser uno tardo para airarse. Esta causa
trae consigo tales cosas como ser uno tardo para hablar, lento para actuar, y estar uno seguro
de pensar antes de hablar. Es importante pensar uno antes de moverse, en vez de pensar
cuando ya se ha movido, para deplorar lo que hizo.
La sobriedad en este caso no es lo mismo que la temperancia, temperancia significa no
sobrepasarse uno en algo como la comida, la bebida, etc. La sobriedad tiene la idea de equilibrio,
balance, calma y acciones prudentes. Esta es una buena actitud que debe impartirse al nuevo
discípulo. Esto no significa un enfoque torpe, sino más bien un enfoque en que la persona utiliza
el tiempo, las palabras y otras cosas similares de una manera sabia.
2. EL QUE ANHELA PASTORADO DEBE SER AMABLE. (Sino amable)

Ser amable, no violento. El significado de la palabra "Amable" es “Ser paciente, equitativo o
justo”. Ser uno amable significa ser considerado. Una manera de ser amable consiste en
considerar razonablemente los hechos de una situación, y no basarse sólo en la emoción.
Una persona que es violenta, usualmente no considera todos los hechos; simplemente hace un
rápido juicio y actúa basada en él. Un dirigente espiritual no debe hacer rápidos juicios sobre las
cosas. De algún modo, esta idea está vinculada con la sobriedad. El propósito es el de hacer que
la persona sea lenta y sabia para juzgar, que no pierda fácilmente los estribos.
3. EL QUE ANHELA PASTORADO TIENE QUE SABER GOBERNAR.

(Que gobierne bien su casa)
Debe ser capaz de manejar su casa. La palabra que se tradujo "gobierne" es la traducción de
un término griego que significa “efectiva administración o supervisión”. La idea es que la
persona ha demostrado ser un supervisor efectivo de su propia casa. Su hogar y su familia están
en orden, y no en una situación caótica que se distingue por la confusión. También implica que
los hijos sean razonablemente sumisos, respetuosos y obedientes.
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El tipo de atmósfera que usted permita que Dios produzca en su hogar, es el que producirá en
la iglesia. De esto se nos habla en 1 Corintios 14:40, donde Dios dice: "Pero hágase todo
decentemente y con orden".
Yahew, no es un Dios de confusión, sino de paz. Dicho esto en otras palabras, los propósitos de
Dios se reflejan, se desarrollan en una situación ordenada y bien organizada, no caótica. El que
hace discípulos debe tener gran cuidado en no desarrollar un enfoque caótico en su vida. Para el
cabeza de familia, el orden dentro de ella debe ser el criterio de juicio. Para aquellos que no son
cabezas de familia, el principio de no ser caóticos ni desorganizados ha de ser el criterio. El
hecho de ser uno bien organizado es algo que ciertamente quiere que se reproduzca en la vida
de la persona con la cual está trabajando.
4. NO DEBE SER UN NUEVO CONVERTIDO. (No un neófito)

¿Por qué no debemos ungir al ministerio a un nuevo convertido? Porque puede envanecerse
con orgullo y caer en la condenación del diablo. Todos tenemos la inclinación hacia el orgullo.
Pero el nuevo convertido está en condiciones más adecuadas para tener un problema con el or -
gullo, por cuanto no es capaz de diagnosticarlo justamente. Esto se debe a que su discernimiento
es mínimo.
En Hebreos 5:14 se describe a la persona madura como la que por el uso, tiene ejercitados los
sentidos para hacer tales decisiones más fácil y rápidamente. Así que, aunque todos somos
propensos al orgullo, los que son maduros pueden reconocerlo más rápidamente, antes que se
convierta en un problema mayor.
Lo que a menudo sucede en la iglesia es que todos quedan impresionados por el testimonio del
nuevo cristiano. Entonces pensamos: “Bueno, cualquiera que ha tenido esa clase de experiencia
de conversión no le fallará al Señor. Démosle tal responsabilidad".
Comenzamos a pensar que saben algo cuando saben poco, y llegan a estar en buenas condi-
ciones para la caída.
Hay varios niveles del adiestramiento para el discipulado, el cristiano que está en vías de creci-
miento no podrá reproducirse hasta que logre cierto nivel de madurez en su propia vida.
Reproducirse uno, es algo más que seguir ciertos métodos; es más que simplemente impartir
información; es impartir mi vida a otra persona. No sería provechoso que una persona haga esto
hasta que su propia vida llegue a ser madura.
¿Por cuánto tiempo tiene que ser una persona cristiana, antes de poder ser un dirigente?
Es imposible un límite definido de tiempo, ya que algunos pueden ser cristianos durante 40
años y aún no estar listos. El cristiano que aún es desobediente, que todavía está envanecido,
que todavía no está creciendo constantemente, no está listo.
Alguna otra persona pudiera haber sido cristiana sólo durante nueve meses o un año, y
realmente estar ya en condiciones de reproducirse en otras personas. Obviamente, no ha logrado
la plena madurez, pero ha crecido suficientemente hasta el punto en que puede reproducirse en
otros.
Es difícil decir definidamente cuándo llega la persona al punto en que puede re producirse, pero
estimamos que después de un año de haber recibido a Cristo como Salvador personal, uno
12
debiera estar en condiciones de reproducirse en otras personas. Tal vez no sea aun totalmente
independiente, pero aun así está en posición en que puede asumir la dirección espiritual.
5. DEBE TENER UNA BUENA IMAGEN PÚBLICA.

(Que tenga buen testimonio de los de afuera)
Es decir, el que anhela pastorado debe tener buen testimonio de los de afuera.
¿No es incongruente que uno de los criterios para el dirigente espiritual, para tener una vida digna
de transferir, tenga algo que ver con personas que están fuera del cuerpo de creyentes en Cristo?
La Biblia dice que el mundo nos odiará y nos perseguirá, precisamente así como lo hizo con
Cristo. ¿Cómo puede reconciliarse esto?
Si los de afuera no dan buen testimonio de un cristiano, hay algo seriamente malo en él. Si bien
el mundo pudiera odiarnos, nunca desconfiaría moralmente de nosotros. Este principio implica
que debemos mantenernos sin reproche delante de todos. Dicho esto en otros términos
equivalentes, aun cuando Cristo fue crucificado, Pilato tuvo que decir: "Ningún delito hallo en
este hombre". Es decir: "No ha hecho nada malo". Los romanos no lo crucificaron porque la
sinceridad de Él o su moralidad estaban en tela de juicio. Así que si el mundo no confía en
alguno, es mejor que nosotros tampoco confiemos en él, a pesar de la madurez que
parezca tener en la vida espiritual.
Si el mundo no confía en él, generalmente hay buenas razones por las cuales no confía. Si los
de afuera no piensan bien de una persona, es mejor que nosotros tengamos cuidado.
Nuestras vidas deben ser de tal naturaleza que alimenten la confianza en otras personas, en
vez de alimentar la desconfianza. Como cristianos debemos tener el cuidado de no actuar de tal
manera que al mundo le parezca raro lo que está ocurriendo. Lo que es importante es la idea de
la confianza. ¿Su manera de vivir es de tal naturaleza que las personas de afuera pueden confiar
en usted?
13
LECCIÓN 4
Según la primera carta enviada por Pedro 5:1-4
“Ruego a los ancianos (pastores) que están entre vosotros, yo anciano también con ellos, y testigo de los
padecimientos de Cristo, que soy también participante de la gloria que será revelada: Apacentad la grey de
Dios que está entre vosotros, cuidando de ella, no por fuerza, sino voluntariamente; no por ganancia
deshonesta, sino con ánimo pronto; no como teniendo señorío sobre los que están a vuestro cuidado, sino
siendo ejemplos de la grey. Y cuando aparezca el Príncipe de los pastores, vosotros recibiréis
la corona incorruptible de gloria”
1. DEBE TENER EL DESEO DE SERVIR A DIOS.

(No por fuerza, sino voluntariamente)
¿Tiene usted realmente un entusiasmo de corazón por el hecho de ser obediente a la voluntad
del Padre? ¿Está usted dispuesto a ser obediente, o no? ¿Le está sirviendo usted a Dios por el
hecho de que alguien le está torciendo el brazo, o por causa del amor de Dios que está en su
corazón? El principio que aquí se enfoca es la actitud que usted tenga hacia la obediencia.
Esta actitud de disposición tiene que estar presente, si usted quiere estar en guardia contra el
surgimiento de una actitud legalista en la vida de la persona de la cual usted está tratando de
hacer un discípulo. Una efectiva salvaguardia contra el legalismo consiste en destacar la
motivación correcta. Y la motivación se comunica mejor por medio del ejemplo.
2. NO DEBE ESTAR MOTIVADO POR EL ORGULLO.

(No por ganancia deshonesta)
La característica de no dirigir por ganancia deshonesta, se centra en el sentido del ego. ¿Le
tienen reverencia a usted los cristianos que lo rodean por el hecho de que usted es muy
ingenioso en esta posición de dirección? ¿Le agrada a usted cuando ellos le manifiestan que
usted realmente es un cristiano tremendo? ¿Por qué hace usted lo que hace?
Si lo hace con el propósito de fomentar su orgullo, entonces está mal. Tenga el cuidado de que
no sea ésta su motivación. Cuando se convierte en una motivación mayor, entonces hay
realmente problemas.
3. EL QUE ANHELA PASTORADO NO DEBE SER DOMINANTE.

(No como teniendo señorío sobre los que están a vuestro cuidado)
La idea de ser dominante se ve mejor en el señorío que se ejerce sobre otros. Esta no es una
prohibición contra la actitud de ser una persona de autoridad, ya que éste es claramente el papel
del dirigente. Más bien se refiere a la forma de expresar su autoridad.
Para ser dirigente, uno tiene que tener autoridad. A Dios lo que le preocupa la manera en que
uno usa tal autoridad. Uno tiene que ser un dirigente, pero no una persona dominante. El pastor
guía el rebaño, no lo empuja.
Lo que aquí se destaca es el hecho de que uno esté seguro de que está dirigiendo, no
empujando. El hecho de ejercer señorío sobre otros, sólo da como resultado la perpetua
dependencia del joven cristiano en el pastor. Si usted recuerda algunas de las otras enseñanzas
14
sobre el discipulado, una de las cosas por las cuales debe esforzarse es por lograr la
independencia en la vida del cristiano que está creciendo, por llevarlo hasta el punto en que sea
independiente de usted y dependa de Dios. Uno puede impedir el cumplimiento de este objetivo si
la dirección la ejerce obligando a las personas a hacer lo que usted le ordena. Si usted ejerce
señorío sobre el nuevo convertido, sólo reforzará la tendencia de él a depender de usted.
4. EL QUE ANHELA PASTORADO TIENE QUE SER EJEMPLO.

(Sino siendo ejemplo de la grey)
Este hincapié final en ser un ejemplo del rebaño, resume todos los otros principios, los une a
todos. Cada una de estas características tiene el propósito de ser modelada y reproducida. En
realidad, la transferencia de la vida ocurre a través del ejemplo.
Si leemos las epístolas del apóstol Pablo, hallaremos que él constantemente respaldaba la idea
de ser un ejemplo. Este es el modo de transferir la vida. Todos los demás principios se dan para
asegurar que el ejemplo de uno sea lo que debe ser, de tal modo que uno pueda reproducir lo que
quiere reproducir. Por supuesto hay muchas otras cosas pertinentes a la autoridad espiritual que
no se identifican específicamente en esta lista de características. Pero cada una de éstas se
aplica claramente y en forma muy directa a la idea de la dirección espiritual para que sea efectiva
en la formación de discípulos. ¿Cómo llega uno a tener una vida digna de ser transferida?
Desarrollando fiel y constantemente estas características en la vida.
La Biblia es muy práctica. No sólo nos dice cómo se desarrolla una buena vida, sino que pasa
a decirnos qué es lo que específicamente quiere darnos a entender con ese término. A medida
que usted estudie más la Palabra de Dios, verá que la Biblia se hace aún más específica en
cuanto a cómo adquirir estas características. En realidad es algo solemne el echar una mirada a
nuestra responsabilidad de ser maduros en todos estos aspectos. A la luz de esto, tal vez la mejor
manera de terminar este capítulo sea haciendo una oración.
Señor, es solemne pensar en estas cosas, y realmente conocemos y sentimos profundamente la

responsabilidad que tenemos de reproducirnos, la responsabilidad de producir vida. Señor,
ayúdanos a confiar en ti, a serte obedientes, a mantenernos motivados en nuestras propias vidas,
y a crecer en estos aspectos, para que seamos efectivos en la transferencia de la vida. Señor,
permite que seamos efectivos en nuestra tarea de multiplicación, y sobre todo, que la gente con
la cual trabajamos sea motivada a crecer en ti. Señor, deseamos que tu recibas el honor y la
gloria. Te pedimos esto en el nombre de Jesús. Amen.
15
LECCIÓN 5
TIPOS DE PASTORES QUE FRACASAN EN ALCANZAR SU POTENCIAL MINISTERIAL

Lamentablemente, es bastante fácil el pensar en algún atleta, músico o actor talentoso que
mostró un potencial inicial en sus carreras, pero que lamentable se opacaron prematuramente.
“Parecía que a fulano de tal le iba muy bien, ¿cómo es que no tuvo éxito?”. Usualmente
pensamos que hubo falta de disciplina, de enfoque, o de humildad, lo que les llevó a perder una
gran oportunidad?”.
Así mismo, los pastores son susceptibles a no vivir de acuerdo con su potencial. Las
habilidades naturales o las bendiciones de ministerios previos no son suficientes para hacerlo
llegar a la meta final del ministerio. Cada pastor debe ser sabio tanto en seguir a Cristo como en
evadir las artimañas del diablo que quieren hacerle caer (1 Tim. 3:6-7). Debe hacer todo lo
posible para evitar ser el tipo de pastor que fracasa en alcanzar su potencial ministerial.
¿Cómo se ve esto? Aquí hay diez ejemplos.
1. El pastor enfocado solamente en su futuro.

¿Estás siempre pensando sobre tu siguiente posición ministerial o soñando con otros roles? No
permitas que tus deseos futuros te roben la oportunidad que Dios te está dando en el presente. El
Señor te tiene donde estás ahora por una razón. El césped siempre está más verde cuando es
regado (Lucas 16:10) “El que es fiel en lo muy poco, es fiel también en lo mucho; y el que es injusto en lo
muy poco, también es injusto en lo mucho”,
2. El pastor propenso a la ira.

Los pastores muchas veces se enfrentan con situaciones estresantes y con personas difíciles
y son propensos a agotarse en el ministerio. La combinación correcta de personas y de cosas
estresantes pueden ser peligrosas para el pastor que se enoja fácilmente. Jóvenes rebeldes y
miembros de la congregación que discuten constantemente no deberían de darle al pastor una
razón para perder su compostura, ni siquiera por un momento. El permitir que la ira te controle
puede llevarte a agredir físicamente a alguien y a ser considerado no apto para el ministerio.
“Un obispo debe ser, pues, irreprochable, marido de una sola mujer, sobrio, prudente, de conducta
decorosa, hospitalario, apto para enseñar, no dado a la bebida, no pendenciero, sino amable, no
contencioso, no avaricioso”, 1 Timoteo 3:2-3.
3. El pastor que lo hace todo solo.

Puedes ser tentado a ver el ministerio de la iglesia como algo que tú posees y de lo que eres
responsable. Los pastores no deben buscar controlar cada aspecto del ministerio sino más bien
buscar capacitar a otros para realizar el ministerio bíblico (Efesios 4:11-13). Por eso en la Visión
Celular M12, equipamos a pastores para leer y predicar la Palabra de Dios con el corazón de
Dios, y a poder entrenar a otros también (2Timoteo 2:2).
“Y El dio a algunos el ser apóstoles, a otros profetas, a otros evangelistas, a otros pastores y maestros,
a fin de capacitar a los santos para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo”
(Efesios 4:11-12).
2
Lo que has oído de mí ante muchos testigos, esto encarga a hombres fieles que sean idóneos para
enseñar también a otros” (2Timoteo 2:2).
16
4. El pastor insubordinado.
El pastor insubordinado puede preferir su visión personal sobre la visión de su cobertura directa
y rehusarse a someterse a su autoridad. Esta actitud puede causar división en la iglesia, y ser de
irrespeto de la visión de los demás pastores.
¡Pastor, Dios te ha llamado a modelar la sumisión que Cristo mostró a sus superiores en frente del rebaño¡
“Obedezcan a sus pastores y sujétense a ellos, porque ellos velan por sus almas, como quienes han de dar
cuenta. Permítanles que lo hagan con alegría y no quejándose, porque eso no sería provechoso para
ustedes” Hebreos. 13:17.
5. El pastor que ama el dinero.

El dinero es una de las tres grandes estratégias que Satanás usa más frecuentemente para
hacer que los pastores caigan (juntamente con el sexo y el poder). Las tentaciones financieras
abundan, y van desde tomar de los fondos de la iglesia para uso personal hasta las apuestas.
Guarda tu corazón contra el amor al dinero, y ora que Dios te ayude a modelar la piedad
acompañada de contentamiento (1 Tim. 6:6).
6. El pastor que no es feliz.

Este tipo de pastor ve la vida y el ministerio como un vaso medio vacío. Un pastor debería ser
capaz de administrar bien su vida espiritual y sus afectos espirituales. La carencia del gozo
cristiano le roba al pastor de una de las más grandes armas (lee Nehemías 8:10;
Deuteronómio…) y hace muy difícil motivar una pasión por Dios en aquellos que están bajo su
cuidado. La falta de gozo puede ser un resultado de la falta de una perspectiva robusta del poder
de Dios. “Regocíjense en el Señor siempre. Otra vez lo diré: ¡Regocíjense!”, Fil 4:4
.
7. El pastor con intereses muy particulares.
Tener un interés especial en ciertos temas o doctrinas puede llegar a ser un problema cuando
esos intereses particulares dominan todo lo que el pastor dice y hace. Pastor, resiste el deseo de
tomar un “caballito de batalla” y descuidar de tu rebaño. Ministra fielmente la Palabra a tu
congregación.
“Porque nada me propuse saber entre ustedes excepto a Jesucristo, y este crucificado”, 1 Corintios
2:2.
“Predica la palabra. Insiste a tiempo y fuera de tiempo. Amonesta, reprende, exhorta con mucha
paciencia e instrucción”, 2 Timoteo 4:2.
8. El pastor sin límites para el contacto físico.

En cuanto al contacto físico, los pastores caminan en una línea muy fina, mucho más que en
otras épocas. Sin definir límites apropiados y salvaguardas, un pastor se puede encontrar
ofendiendo a un miembro de la congregación, perdiendo su trabajo, o yendo a prisión. No
permitas que caigas ni siquiera en la idea de conducta sexual inapropiada, o permitir expresiones
o contacto físico que puedan ser malentendidos, ministra en pareja con tu conyugue.
“Pero que la inmoralidad, y toda impureza o avaricia, ni siquiera se mencionen entre ustedes, como
corresponde a los santos”, Efesios 5:3.
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9. El pastor que administra mal.
Con una variedad de responsabilidades y papeles que cumplir, los pastores necesitan ser
capaces de administrarse a sí mismos, su calendario, y su familia. Los pastores que no pueden
administrarse a sí mismos no terminan lo que comienzan ni cumplen con lo que se les pide hacer
en el tiempo acordado, y por lo tanto no pueden alcanzar su potencial en el ministerio. Cuando
Pablo le explicó a Timoteo los requisitos de los líderes en la iglesia, mencionó la administración
tres veces (especialmente en relación con su hogar). ¿Por qué? “…Pues si un hombre no sabe cómo
gobernar su propia casa, ¿cómo podrá cuidar de la iglesia de Dios?” 1 Tim 3:5.
10. El pastor perezoso.

Muchos pastores (especialmente aquellos en iglesias pequeñas) disfrutan de horarios flexibles
con supervisión limitada. La combinación puede transformarse en pereza si no se mantiene bajo
supervisión, y puede llevar a varios pecados. El descuidar tu pastoreo del rebaño, el ser flojo en la
administración del dinero, o ser perezoso al estudiar las Escrituras, te dañará a ti y a tu
congregación a largo plazo. No seas descuidado con tu pastoreo que ha sido ordenado por Dios
mismo; guía con celo.
”…Pastoreen el rebaño de Dios entre ustedes, velando por él, no por obligación, sino voluntariamente,
como quiere Dios; no por la avaricia del dinero, sino con sincero deseo”, 1 Pedro 5:2.
Pastor: haz todo lo que puedas para no caer en estas tentaciones. Mantente comprometido
con Dios en oración y alimentándote de Su Palabra. Acompáñate de gente que te pueda animar
en la fe, con aquellos con los que puedas ser abierto y honesto y con quienes puedas buscar al
Señor juntos. Da gracias a Dios por tu salvación, por tu familia, y por tu ministerio.
18
LECCIÓN 6
LA INMORALIDAD SEXUAL EN EL MINISTERIO.
¿Qué se debe hacer cuando un ministro cae en adulterio?
Introducción:
“Procura con diligencia presentarte a Dios aprobado, como obrero que no tiene de qué avergonzarse,
que usa bien la palabra de verdad”. 2Timoteo 2:15
Durante las últimas décadas y en forma repetida, la iglesia del Señor, se ha tambaleado, con la
conducta desleal e inmoral por parte de sus ministros y líderes que la guían.
Es muy común ya, oír de ministros cristianos que han caído en el adulterio, ya sea con la
secretaria, con algún miembro de la iglesia, con alguna joven del coro, o puede ser que ande con
alguien que no sea de la congregación.
Un ministro activo que cae en adulterio o inmoralidad sexual, ¿Puede ser restaurado en
el ministerio?
De esto se tratará esta lección.
Objetivo: Alertar a los que anhelan ser pastores y servir en un ministerio para Dios.
1. SI UNA PERSONA QUE ESTÁ EN EL MINISTERIO CAE EN PECADO

¿DEBEMOS MANEJARLO SECRETAMENTE?
Sabemos que ante Dios nada se esconde, todo sale a la luz. Marcos 4:22
“Porque no hay nada oculto que no haya de ser manifestado; ni escondido, que no haya de salir a luz”.
Le existencia de pecado ministerial en una iglesia será evidente, aunque el ministro no lo

señale, será manifiesto cuando se deja al pecado actuar libre y deliberadamente, será evidente
cuando el ministro frena las predicaciones respecto al pecado o lo encubre.
Cuando el ministro habla de solo bondad, amor y misericordia y no toca temas de reprensión o
de disciplina, es probable que algo ande mal, que haya cosas secretas.
Los ministros vinculados al pecado sexual, tratarán de permanecer siempre en el
ministerio, estarán latentes a no perder su ministerio, se aferrarán a él. Son muy pocos los que
reconocen personalmente su pecado, porque la mayoría tratarán de ocultarlo. Definitivamente el
ministerio empezará a decaer, poco a poco irá yendo al fracaso moral, hasta que el pastor
inmoral confiese su pecado.
Este pecado una vez conocido por las autoridades, debe hacerse público ante la congregación
del ministro, pues es muy probable que muchos creyentes lo sepan, y no debe ocultarse el
pecado para que los demás teman, no se debe de encubrir nada, debe exponerse para advertir a
la congregación del hecho. El dolor es generalizado, la esposa, los hijos, de igual manera la
iglesia han sido ofendidos. Todos, la esposa, los hijos, la iglesia y el ministro desleal, deben entrar
en un tiempo de restauración.
La iglesia se verá seriamente dañada, por la inmoralidad sexual de su pastor, líderes o
servidores.
¿Qué se puede hacer con un pastor adúltero? ¿Cómo responder a los miembros de la
iglesia que se sienten ofendidos y que les han causado vergüenza?
19
2. ¿SE DEBE RESTAURAR EL MINISTERIO DE UN PASTOR QUE ADULTERÓ?
Si bien cada situación debe manejarse con la sabiduría del Espíritu Santo en el consejo
pastoral, hay casos de pecado (como el adulterio) donde no se debería reestablecer en el
ministerio pastoral.
Lo que comúnmente ocurre, es que el pastor adultero en determinado tiempo es restaurado al
ministerio, creemos que esta situación es incorrecta, porque puede ser dañina para la
congregación donde hay matrimonios jóvenes con deseos ministeriales y que han visto algo
irregular y no se tomó en cuenta la ofensa contra el Cuerpo de Cristo por parte de su máximo
representante.
Lo que se recomienda es lo siguiente: Cuando el pastor es acusado de un pecado sexual y se

le declara culpable: Él se debe arrepentir con profundo dolor, y pedir perdón ante la iglesia y
autoridades en cobertura. (Por causas como estas todo ministro debe estar bajo cobertura de otro
ministerio, para poder atender las ofensas que un ministro pueda cometer contra la grey del Señor).
Los ministros de cobertura, deben respetar la decisión de la esposa, si desea divorciarse o
no, ella está en su derecho de decidir, pues bíblicamente el adulterio es causal de divorcio. Si la
esposa del ministro adultero decide perdonarlo y no divorciarse, los ministros de cobertura
determinarán cómo será la restauración del matrimonio, y cómo van a substituir al ministro que
pecó, por otro ministro con la capacidad de levantar nuevamente a la iglesia ofendida.
No es suficiente que el pastor que adulteró, pase un tiempo en disciplina por parte de sus
autoridades, y luego lo manden a otro lugar o a otra ciudad a pastorear otra iglesia. No obstante la
última palabra la tiene el Espíritu Santo, en cuyo caso debe haber confirmación por dos o tres
fuentes diferentes.
Imagine pues: ¡El ministro que hablaba de santidad ahora está manchado por el pecado, el
pastor que hablaba de fidelidad a Dios, fidelidad a la esposa, fidelidad a la iglesia, ahora está en
una posición delicada. Ahora debe pasar por un proceso de disciplina, y debe experimentar la
gracia restauradora de Dios¡
La disciplina debe llevarse a cabo, puesto que se cometió una ofensa hacia su esposa, hacia
sus hijos y hacia Dios, pues la Iglesia es la desposada de Cristo.
Si al pastor que adulteró se le apoyaba económicamente, parte de la ayuda debe de seguir
dándose a la esposa y a los hijos agraviados, hasta que el pastor obtenga un trabajo secular para
que siga sustentando a su propia familia.
La restauración implica sanidad interior de la esposa, de los hijos y de los integrantes de la
iglesia, quienes deben perdonar la ofensa contra ellos. Pero no debemos olvidar que hubo
también una ofensa contra Dios mismo.
3. LA OFENSA CONTRA DIOS.

Un pastor ungido y ordenado por un Presbiterio, ya no es una persona común, aunque fue
tomado de entre las personas comunes del rebaño, ahora ha pasado a representar la autoridad
del mismo Dios, por lo cual se le debe tratar con honra, y el mismo Señor no permitirá que nadie
le ofenda, quien ofende a un pastor, ofende al mismo Dios, tal es la posición de honra que el
20
Señor le ha concedido, por lo cual su comportamiento dentro del ministerio debe ser del más alto
nivel ejemplar. María y Aron murmuraron contra Moisés y Dios lo consideró una ofensa contra Él
mismo. (Numero 12:8,9)
“Por qué, pues, no tuvisteis temor de hablar contra mi siervo Moisés? 9Entonces la ira de Jehová se
encendió contra ellos; y se fue. 10Y la nube se apartó del tabernáculo, y he aquí que María estaba leprosa
como la nieve; y miró Aarón a María, y he aquí que estaba leprosa”
Toda desobediencia o rebelión contra un pastor, es considerada por Dios como una rebelión
contra Él, porque el pastor representa su autoridad, y según Romanos 13:1-3, solo Dios es
autoridad, y Dios mismo lo ha colocado en una posición de honra. Jehová dijo: …Yo honraré a los
que me honran, y los que me desprecian serán tenidos en poco. (1Sam 2:30)
Por lo tanto, Dios demanda más de un ministro que de cualquier otro hijo suyo. El Señor le dijo
a Moisés: “…Tendré misericordia del que tendré misericordia, y seré clemente para con el que seré
clemente”. (Éxodo 33:19)
Esto puede ser interpretado que cuando usted peca contra su hermano, la persona ofendida
deberá perdonarle en Cristo Jesús, pero cuando usted peca contra Dios, es Él quien tiene la
potestad de tener misericordia o no. Así cuando un pastor adultera, no solo comete ofensa contra
su esposa y sus hijos, sino que también ofende a Dios, porque ha ofendido a su novia y su propia
autoridad como representante de Dios. Por consiguiente no corresponde al hombre restituir el
ministerio que fue retirado a alguien por su mal comportamiento. ¡Él ha menospreciado lo que
Dios le dio!
Cuando un pastor cae en adulterio está despreciando el ministerio que Dios le ha dado, y está
deshonrando a aquel que lo colocó en posición de honra. Solo Dios podrá restaurar su ministerio,
esta no es una opción de ningún otro pastor o apóstol. (1Corintios 6:18-20)
18
Huid de la fornicación. Cualquier otro pecado que el hombre cometa, está fuera del cuerpo; más el que
fornica, contra su propio cuerpo peca. 19¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el
cual está en vosotros, el cual tenéis de Dios, y que no sois vuestros? 20Porque habéis sido comprados por
precio; glorificad, pues, a Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu, los cuales son de Dios.
4.- ¿QUÉ DICE LA LEY DE MOISES Y LA GRACIA AL RESPECTO?
a. La Ley de Moisés. Levíticos 20:10-14

“ 10Si un hombre cometiere adulterio con la mujer de su prójimo, el adúltero y la adúltera
indefectiblemente serán muertos. 11Cualquiera que yaciere con la mujer de su padre, la desnudez de su
padre descubrió; ambos han de ser muertos; su sangre será sobre ellos. 12Si alguno durmiere con su nuera,
ambos han de morir; cometieron grave perversión; su sangre será sobre ellos.
13
Si alguno se ayuntare (relación carnal) con varón como con mujer,(hombre con hombre, mujer con
mujer) abominación hicieron; (es repugnante, asqueroso, se define también como idolatría) ambos han de
ser muertos; sobre ellos será su sangre. (Ellos mismos son causantes de su propia muerte) 14El que tomare
mujer y a la madre de ella, comete vileza; (es un inicuo, lujurioso, depravado) quemarán con fuego a él y a
ellas, para que no haya vileza entre vosotros”.
b. La Gracia o Ley del Espíritu. Gálatas 6:1,2

“Hermanos, si alguno fuere sorprendido en alguna falta, vosotros que sois espirituales, restauradle con
espíritu de mansedumbre, considerándote a ti mismo, no sea que tú también seas tentado. 2Sobrellevad los
unos las cargas de los otros, y cumplid así la ley de Cristo”.
21
Romanos 6:11-13
11
Así también vosotros consideraos muertos al pecado, pero vivos para Dios en Cristo Jesús, Señor
nuestro. 12No reine, pues, el pecado en vuestro cuerpo mortal, de modo que lo obedezcáis en sus
concupiscencias; 13ni tampoco presentéis vuestros miembros al pecado como instrumentos de iniquidad,
sino presentaos vosotros mismos a Dios como vivos de entre los muertos, y vuestros miembros a Dios como
instrumentos de justicia”.
La obediencia a Cristo y a Su Palabra, somete los deseos carnales, y siempre nos induce a

buscar la santidad, y nos dará dominio para vencer la tentación y mantenernos en fidelidad a
Dios, a nuestra familia y a la iglesia.
Pablo determina en Romanos 6:22,23

22
Mas ahora que habéis sido libertados del pecado y hechos siervos de Dios, tenéis por vuestro fruto la
santificación, y como fin, la vida eterna. 23Porque la paga del pecado es muerte, mas la dádiva de Dios es
vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro.
Ser libertado del reino del pecado, y hecho siervo de Dios, no es cualquier cosa, es un hecho
de agradecimiento a Cristo quien nos puso en el ministerio.
Existe una lucha de forcejeo en un creyente genuino y puede haber una gran lucha de deseos,
pero el que es nacido de nuevo, no caerá, no se dejará dominar, puede ser que lo angustie, pero
no lo dominará. El ministro que comete adulterio, ha muerto para el ministerio, ya no debe volver
a un cargo espiritual, ha demostrado debilidad y falta de carácter para el cargo.
5.- CONCLUSIÓN
Debemos perdonar y no guardar rencor al ofensor. En estos casos lo mejor es enviarlo a otro
lugar para ser restaurado y que comience de nuevo, pero no asignarle nuevamente el cargo.
El ministro que ha caído en descredito, debe mostrar un verdadero arrepentimiento y por
vergüenza ante Dios no debería anhelar mantenerse en el cargo. Debería en todo caso poner de
su parte en aceptar la negativa, de que se le siga considerando ministro, solo debe bastarle la
gracia de Dios para el perdón, y para no ser consumido y desterrado, pero si persiste en pecar
debe de ser desechado.
Ha pecado no solo contra el prójimo, sino contra Dios. Su cobertura tiene la autoridad y la
responsabilidad de retirarlo del cargo asignado, pero no tiene autoridad para restituir su ministerio.
Solo Dios conoce los pensamientos y las intenciones del corazón, solo Él puede restaurarlo al
ministerio, en cuyo caso debe haber confirmación por dos o tres fuentes diferentes.
22
LECCIÓN 7
SU FAMILIA ES MÁS IMPORTANTE QUE SU MINISTERIO

Hemos llegado a ser ministros porque tenemos esta gran pasión que nos lleva a preocuparnos
de las personas y de amarlos y conducirlos a Cristo. Estamos dispuestos a hacer lo que eso
requiera de nosotros. A veces estamos mal guiados y ponemos tanta energía en la obra de la
iglesia que no nos damos cuenta de lo que le estamos haciendo a nuestra vida y a nuestra familia.
La mejor estratégia de un mentor para estimular que haya matrimonios y familias fuertes en la
iglesia es “presentar un modelo fuerte en su familia”. Ser modelo de atención, de intimidad, de
padre y esposo amoroso, es lo primero.
Recuerde que su matrimonio y su familia son más

importantes que su ministerio.
Por lo cual usted no debiera sentirse presionado a ser un ejemplo perfecto de familia cristiana.
Eso no es lo que su iglesia necesita. En cambio, la gente necesita saber cómo aplicar la vida
cristiana a las luchas en su matrimonio y en su familia. Con frecuencia Dios desea usar los
fracasos de usted para manifestar a otros la manera de lograr recuperarse. La parte más
impactante de su ministerio puede provenir de su debilidad.
Su gente necesita ver cómo es el desarrollo de un matrimonio que honra a Cristo. Déjeles ver
que usted y su esposa están llenos de amor sacrificial y de perdón. Déjeles ver que usted busca
obedecer a Dios, procura ser honesto con respecto a los fracasos y los éxitos, y que glorifica al
Señor por medio de un matrimonio y de una familia llenos de amor.
En lugar de ver a la esposa, a los hijos, y las tareas de esposo y de padre como una carga para
su ministerio, considere a su esposa e hijos como un regalo de Dios. Una relación firme y
refrescante con su esposa y relaciones fructíferas con sus hijos fortalecerán su ministerio público.
Usted necesita el amor, el afecto, y el apoyo que vienen de su cónyuge. A causa de las
exigencias de su ministerio, usted puede necesitar esto con mayor razón. Si su matrimonio está
lleno de gozo y de estímulo, entonces usted será refrescado y fortalecido para ministrar con
mayor eficacia.
Pero si su matrimonio tiene tensión y disputas, eso le afectará emocional, física y
espiritualmente.
A veces una necesidad en la iglesia consumirá su tiempo y su energía. Pero si esto es lo que
sucede corrientemente y no la excepción, entonces al final las deudas que usted haya contraído
con el hogar va a tener que enfrentarlas, y el precio puede ser mayor de lo que sea capaz de
pagar.
En todas las iglesia hay personas que no entienden esto, y aun habrá algunos que tratarán de
hacer que la vida del pastor sea miserable, pues ellos insistirán en que usted debe dedicar tiempo
y energía para atender las necesidades solo de la iglesia. Manténgase firme. No abandone las
ovejas del hogar por causa de las ovejas de la iglesia.
Lo que más oímos de la mayoría de las esposas de pastores es que ellas no tienen tiempo
suficiente junto a sus maridos, y muchas veces la iglesia se ha convertido en la esposa del pastor.
23
Aun cuando el esposo es principalmente responsable de no permitir que las actividades
relacionadas con la iglesia hagan que su esposa se ponga celosa, también es importante que la
esposa trabaje con su esposo para ayudarle a evitar que llegue a tener un horario sumamente
recargado.
Los pastores debieran conceder a sus esposas libertad para decirles: “Querido, te amo lo
suficiente como para no permitir que hagas todo eso”. O “Estás haciéndolo demasiado duro para
ti mismo y también para tu familia”.
Aquí hay algunas ideas de cómo los pastores pueden mantener

un matrimonio saludable.
Deje tiempo para el romance. Ahorre algo de su creatividad, energía emocional, y de su
tiempo, para añadir algunos toques agradables a su relación. Deje algunas notas o pequeños
obsequios para cada uno … tengan algunas salidas nocturnas … envíe e-mails o mensajes de
texto diciendo lo mucho que anhela ver a su esposa esa noche.
Compartan todo. Haga de su ministerio algo verdaderamente compartido. Los consejos a la

grey no es una responsabilidad solo del pastor, ¿Dónde está la esposa? Tal vez su esposa no
necesita conocer los detalles de cada reunión de presupuesto. Pero ella necesita conocer su
corazón, sus sueños, sus luchas. Comparta también, abiertamente, cualquier tentación, y permita
que su esposa le advierta de cualquier problema potencial del cual usted pudiera no estar
prevenido.
Afronten juntos el sufrimiento. Sin la adecuada perspectiva, el sufrimiento puede conducir al

desaliento e irá obstaculizando el cumplimiento de su tarea. Un pastor y su esposa deben
“sobrellevar los unos las cargas de los otros”.
Oren juntos diariamente. Si usted está en busca de un método práctico para vivir su vida en
forma espiritual, no hay nada con mayores beneficios que esta disciplina.
Cultive una relación con enfoque en cada uno de sus hijos. Por el hecho de que usted
debe compartir tanto de su tiempo con personas que no son miembros de su familia, es
importante que sus hijos sepan que usted también dedica tiempo especial para atender a cada
uno de ellos.
Explique a sus hijos lo que usted hace y por qué lo hace. Sus hijos necesitan saber lo
importante que es su ministerio. También ellos necesitan verle ocupado (además del día del culto)
en ese ministerio. Comparta tareas, pasión, entusiasmo y sentido de urgencia con la familia. Ellos
tienen un deseo y un derecho de estar orgullosos de lo que usted hace.
Dedique algo de su cuidado pastoral para sus propias ovejas. Sus hijos también necesitan
a su pastor. Por alrededor de una década, usted debería estar dispuesto a declinar oportunidades
(por ejemplo) para dirigir estudios bíblicos en otras congregaciones además de su congregación,
o para atender hombres de negocios. A fin de no estar siempre corriendo para ayudar a otros a
conocer a Dios mientras desatiende la responsabilidad de introducir a sus hijos en el conocimiento
de Él.
Después de Dios su esposa y sus hijos. Ellos son sus discípulos más importantes.
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Escuela de Ministerio Módulos I

1. ORIENTACIÓN PARA LOS MINISTROS QUE FORMAN OTROS MINISTROS

El carácter del mentor del futuro pastor

Formación teológica Vs Formación de carácter

2. CONSEJOS A LOS QUE ANHELAN EL PASTORADO

Cuatro aspectos en la vida del nuevo ministro:

Hay tres pasajes principales que se refieren a tales características.

3. TIENE QUE SER RESPETADO POR SU FAMILIA.

Los hijos tampoco deben ser acusados de disolución ni de rebeldía.

5. TIENE QUE MANEJAR LA IRA EN FORMA CORRECTA (No iracundo)

6. TIENE QUE PRACTICAR LA TEMPERANCIA (Abstinencia - No dado al vino)

1. EL QUE ANHELA PASTORADO NO DEBE SER PENDENCIERO.

2. EL QUE ANHELA PASTORADO NO DEBE SER CODICIOSO.

3. EL PASTOR DEBE SER HOSPEDADOR.

4. TIENE QUE SER AMANTE DE LO BUENO (Amante de lo bueno)

5. DEBE TENER UNA MENTE SOBRIA. (Sobrio)

La regeneración afecta a la persona en su totalidad. El creyente que está creciendo tenderá a

6. EL QUE ANHELA PASTORADO HA DE SER SANTO Y JUSTO. (Justo)

7. EL PASTOR DEBE TENER DOMINIO DE SÍ MISMO.

8. EL PASTOR DEBE SER CONOCEDOR DE LA PALABRA.

9. HA DE SER SANO EN LA ENSEÑANZA

10. DEBE TENER SABIDURIA PARA DE REFUTAR EL ERROR

1. QUIEN ANHELA PASTORADO DEBE SER CALMADO. (Sobrio)

2. EL QUE ANHELA PASTORADO DEBE SER AMABLE. (Sino amable)

3. EL QUE ANHELA PASTORADO TIENE QUE SABER GOBERNAR.

4. NO DEBE SER UN NUEVO CONVERTIDO. (No un neófito)

5. DEBE TENER UNA BUENA IMAGEN PÚBLICA.

1. DEBE TENER EL DESEO DE SERVIR A DIOS.

2. NO DEBE ESTAR MOTIVADO POR EL ORGULLO.

3. EL QUE ANHELA PASTORADO NO DEBE SER DOMINANTE.

4. EL QUE ANHELA PASTORADO TIENE QUE SER EJEMPLO.

Señor, es solemne pensar en estas cosas, y realmente conocemos y sentimos profundamente la

TIPOS DE PASTORES QUE FRACASAN EN ALCANZAR SU POTENCIAL MINISTERIAL

1. El pastor enfocado solamente en su futuro.

2. El pastor propenso a la ira.

3. El pastor que lo hace todo solo.

5. El pastor que ama el dinero.

6. El pastor que no es feliz.

8. El pastor sin límites para el contacto físico.

10. El pastor perezoso.

1. SI UNA PERSONA QUE ESTÁ EN EL MINISTERIO CAE EN PECADO

Le existencia de pecado ministerial en una iglesia será evidente, aunque el ministro no lo

Lo que se recomienda es lo siguiente: Cuando el pastor es acusado de un pecado sexual y se

3. LA OFENSA CONTRA DIOS.

4.- ¿QUÉ DICE LA LEY DE MOISES Y LA GRACIA AL RESPECTO?

a. La Ley de Moisés. Levíticos 20:10-14

b. La Gracia o Ley del Espíritu. Gálatas 6:1,2

La obediencia a Cristo y a Su Palabra, somete los deseos carnales, y siempre nos induce a

Pablo determina en Romanos 6:22,23

SU FAMILIA ES MÁS IMPORTANTE QUE SU MINISTERIO

Recuerde que su matrimonio y su familia son más

Aquí hay algunas ideas de cómo los pastores pueden mantener

Compartan todo. Haga de su ministerio algo verdaderamente compartido. Los consejos a la

Afronten juntos el sufrimiento. Sin la adecuada perspectiva, el sufrimiento puede conducir al

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