Sermón Temático Estudio

Tema: Sin santidad nadie vera el Señor.
Texto: hebreos 12:14 Seguid la paz con todos, y la santidad, sin la cual nadie vera al
Señor.
Introducción:
Desde la antigüedad Dios siempre dio instrucciones a su pueblo las cuales

siempre debían cumplir, para poder obtener bendiciones y ver el cumplimento de las
promesas, dentro de esas instrucciones el Señor siempre hizo énfasis en la santidad, esto
sigue vigente hoy en día para la Iglesia, Dios demanda a su puedo a ser santo como él es
santo.
La etimología de la palabra hebrea santidad es "amputar" o "excluir". Se

utilizaba para denotar lo que se separaba del uso cotidiano y metódico con el fin de
reservarlo para los servicios sagrados. El ser santo implica tener una vida en obediencia
a Dios y su palabra, en comunión y servicio a sus propicitos, apartándose de toda
contaminación e inmundicia que se pueda arraigar en nuestros corazones, es importante
entender que hay instrumentos que se necesitan limpios para ser utilizados un ejemplo
de ello puede ser el cepillo dental que como sabemos es utilizado única y
exclusivamente para la limpieza de nuestros dientes, nosotros lo cuidamos siempre de
que no se ensucie con nada, lo ponemos en lugares seguros donde no lo alcance ningún
animas o algo que lo pueda ensuciar, y si en algún momento se llega a contaminar con
alguna sustancia repulsiva lo desechamos, así mismo debemos mantenernos limpios
para Dios y que él nos vea útiles y dignos de participar de su eternidad en el cielo.
La santidad de Dios está ligada a su justicia, amor, bondad, misericordia y

gracia, por lo tanto todo lo que es opuesto a todo esto como: la maldad, el orgullo, la
soberbia, rebeldía y la insujecion, no tiene parte con Dios en su reino, es por ello que
satanás fue desechado del reino de Dios, así mismo como iglesia de Cristo debemos
seguir la justicia, amor, bondad, misericordia y gracia, para no ser desechados, y que
podemos alcanzar el reino de los cielos eternamente.
Proposición: Es importante reconocer que sin santidad no podemos ver a Dios, por esta
razón debemos:
I. Mantener una vida en comunión con Dios:

a) Tener hábitos de oración: La oración es uno de los alimento espirituales
del hijo de Dios, nuestra santidad dependerá de que tan cerca este yo de
Dios en oración, por que el resultado del que ora, es ser purificado y
fortalecido para toda tentación y prueba, Jesús dijo en Mateo 26:41: Velad y
orad, para que no entréis en tentación; el espíritu a la verdad está dispuesto,
pero la carne es débil.
La palabra oración significa rogar fervientemente, en otras palabras es pedir

algo a Dios con intensa súplica, la oración incluye respeto, amor, súplica y
fe, al orar expresamos nuestras necesidades, adoración, emociones e
impotencia y entregamos a la voluntad de Dios cualquier situación, orar nos
beneficia a nivel de acción, pensamiento y actitud.
Este tipo de habito nos ayuda a conocer más a Dios, y aclara nuestro oído
espiritual para discernir su voz en nuestra conciencia, pues la comunión con
Dios no se enmarca en que le hablemos a Dios, sino que aprendamos a
escuchar lo que él también nos quiere decir, de esta manera viviremos
rectamente y en santidad.
b) Practicar los ayunos y las vigilias: El ayuno tiene beneficios fisiológicos

pues el cuerpo comienza a quemar grasas y desintoxica la sangre, también
tienes beneficios espirituales para nuestro crecimiento y fortaleza en Dios,
cuando ayunamos y vigilamos nuestros deseos carnales son reprimidos y
debilitados, por lo tanto los frutos de la carne que son: Ira, lascivia, envidias,
contiendas etc… son sustituidos por los frutos del espíritu que son: Amor,
paz, bondad, Gozo, Mansedumbre etc… atraves del ayuno se rompen
cadenas espirituales Isaias 58:6 El ayuno que he escogido, ¿no es más bien
romper las cadenas de injusticia y desatar las correas del yugo, poner en
libertad a los oprimidos y romper toda atadura?.
Ayunar es un hábito que práctico Jesús en su ministerio en la tierra y
seguidamente los apóstoles lo hicieron parte de su comunión eclesiástica en
la iglesia primitiva. Tener la práctica de ayunar como parte de nuestra
comunión con Dios nos guiara mucho más fácilmente hacia la santidad, un
cristiano que ayuna y vigila en oración constantemente, tiene muy poca
probabilidades de que caiga en una tentación maligna, Jesús nos aconseja a
velar en oración para que no nos pase algo así en Mateo 26:41 Velad y orad,
para que no entréis en tentación; el espíritu a la verdad está dispuesto, pero
la carne es débil.
Mantener estas prácticas espirituales del ayuno y la vigilia nos mantendrá
firme ante cualquier ataque del enemigo en tentaciones y lazos.
II. Obedecer sus mandamientos:

a) Vivir conforme a su palabra: La biblia es nuestro manual de fe y conducta,
ella nos guía hacia la manera de vivir que a Dios le agrada y nos confirma a
través de sus testimonios el resultados de obedecer a Dios, Jesús dijo en Juan
5:39 Escudriñad las Escrituras; porque a vosotros os parece que en ellas
tenéis la vida eterna; y ellas son las que dan testimonio de mí. La vida eterna
la alcanzaremos viviendo conforme a lo que está escrito en la palabra de
DIOS.
La biblia es un alimento para nuestro desarrollo integral como creyentes, en

ella aprenderemos lo que es malo y bueno, con este conocimiento y
llevándolo a la práctica, pasaremos de ser niños espirituales a creyentes
maduros y sólidos en la fe, Hebreos 5:12 dice: Porque debiendo ser ya
maestros, después de tanto tiempo, tenéis necesidad de que se os vuelva a
enseñar cuáles son los primeros rudimentos de las palabras de Dios; y habéis
llegado a ser tales que tenéis necesidad de leche, y no de alimento sólido. Y
todo aquel que participa de la leche es inexperto en la palabra de justicia,
porque es niño; pero el alimento sólido es para los que han alcanzado
madurez, para los que por el uso tienen los sentidos ejercitados en el
discernimiento del bien y del mal.
b) Hacer su voluntad: Hacer la voluntad de Dios implica negarnos a nuestra
voluntad eso quiere decir que nuestros gustos, deseos y planes deben ser
cambiados por los que Dios quiere para nuestras vidas, eso determinara
nuestra aprobación delante de Él. El Señor Jesús dijo en Mateo 7:21: “No
todo el que me dice: ‘Señor, Señor’, entrará en el reino de los cielos, sino el
que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos. Confesar a Jesús con
nuestra boca es el primer paso para tener la salvación, pero el segundo paso
es vivir en la voluntad de Dios.
No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación

de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de
Dios, agradable y perfecta. Romano12:2. Como parte de la vida de santidad
del creyente, Pablo aconsejo a la iglesia de Roma buscar la voluntad de Dios,
pero hay que también saberla discernir, es decir el Espíritu Santo nos
ayudara a separar la verdadera voluntad de Dios, del error que nos puede
perjudicar.
II. Permanecer limpios:

a) Apartar de nuestros oídos de lo que pueda contaminar nuestros
corazones: Dios nos manda a cuidar nuestros pensamientos de deseos que
no vayan acorde a su santidad, estos deseos puedes ser introducidos por
medio de los que escuchamos, nuestras mentes son alimentadas por medio de
nuestros sentidos y si no nos cuidamos el pecado se gestará y crecerá en
nuestro interior hasta darse a luz y manifestarse en nuestra vida pública, todo
pecado comienza con un deseo interno, Jesús dijo en Mateo 15:17-19 “¿No
entendéis, aún, que todo lo que entra en la boca va al vientre y es echado en
la letrina? Pero lo que sale de la boca, del corazón sale; y eso contamina al
hombre. Porque del corazón salen los malos pensamientos, los homicidios,
los adulterios, las fornicaciones, los hurtos, los falsos testimonios y las
blasfemias.”
No erréis; las malas conversaciones corrompen las buenas costumbres. Velad

debidamente, y no pequéis… 1 Corintios 15:33-34, para cuidar de la santidad
que Dios nos demanda, hay que cuidarse de las conversaciones que llegan a
nuestros oídos, si lo que escucho no va acorde a lo que a Dios le agrada, no
debemos aceptarlo ni participar en ella.
Para que Eva pecara comiendo del fruto, santanas se dedicó a comunicarle
un pensamiento atraves de una conversación, esta conversación le hizo caer
en un pensamiento errado trayendo como consecuencia el pecado, nosotros
también debemos saber qué es lo que contribuye a nuestra santidad y que es
lo que no.
b) Apartar de nuestros ojos de lo que pueda dañar nuestros pensamientos:
Dependiendo de lo que vemos contantemente dependerán nuestros
pensamientos durante todo el día, e incluso se pueden reflejar en nuestros
sueños. Las imágenes se pueden convertir en imaginaciones internas las
cuales pueden ser pecado si no nos apercibimos de ello, Jesús dijo en Mateo
5:28 “Pero yo les digo que todo el que mire a una mujer para codiciarla ya
cometió adulterio con ella en su corazón”, para mantener la santidad que
Dios quiere en nuestras vidas, debemos cuidar nuestros ojos de lo que traiga
deseos perversos y dañinos a nuestras vidas.
La lámpara del cuerpo es el ojo; así que, si tu ojo es bueno, todo tu cuerpo
estará lleno de luz; pero si tu ojo es maligno, todo tu cuerpo estará en
tinieblas... Mateo 6:22-23. Nuestro cuerpo será lleno de aquello que vemos,
sea de tinieblas para pecado o de luz para santidad, Job en su integridad
cuido sus ojos de ver el mal, e incluso hizo pacto con Dios Job 31:1 “hice
pacto con mis ojos: ¿cómo pues había yo de pensar en virgen?”.
Aplicación: La santidad conviene a la casa de Dios, hay que entender y reconocer el

gran valor que tiene el practicar una vida en santidad, lo beneficios de ella son eternos y
hacerlo nos distingue como hijos de Dios en un mondo corrupto y malo, así que
animémonos y esforcémonos a cumplir este gran mandamientos todos los días de
nuestras vidas.
Conclusión: Este tema de la santidad en ocasiones se mal interpreta, con la idea de que
para ser santo nunca se debe fallar y nunca equivocar, y muchos toman esto como
pretexto para no acercarse a Dios, pero en realidad no es así, porque todo vamos en
caminos a la perfección, e ir de camino no hace entender de que a pesar de nuestras
debilidades y errores Dios con su espíritu Santo siempre nos ayudara a mejorar más
cada día, pero es importante perseverar y reconocer el error, levantarse y seguir en el
camino de la santidad hacia la eternidad.
Estudiante: Elvis Laguna
CI: 19.617.387

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Desde la antigüedad Dios siempre dio instrucciones a su pueblo las cuales

La etimología de la palabra hebrea santidad es "amputar" o "excluir". Se

La santidad de Dios está ligada a su justicia, amor, bondad, misericordia y

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La palabra oración significa rogar fervientemente, en otras palabras es pedir

b) Practicar los ayunos y las vigilias: El ayuno tiene beneficios fisiológicos

II. Obedecer sus mandamientos:

La biblia es un alimento para nuestro desarrollo integral como creyentes, en

No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación

II. Permanecer limpios:

No erréis; las malas conversaciones corrompen las buenas costumbres. Velad

Aplicación: La santidad conviene a la casa de Dios, hay que entender y reconocer el

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