Condiciones de Posibilidad de La Revelación Cristiana
Condiciones de Posibilidad de La Revelación Cristiana
Condiciones de Posibilidad de La Revelación Cristiana
¿Cuáles son las condiciones de posibilidad de la revelación? Para que haya revelación de
Dios al ser humano es necesario que Dios quiera manifestarse, darse a conocer. Hay una
condición primera, la voluntad de Dios, la posibilidad por parte nuestra de acogerle y
entenderle. Hablar de revelación es dar por supuesto que el ser humano está en disposición
de entender lo que Dios quiere decirle. ¿Está o no el ser humano en disposición de
encontrarse con Dios? Se trata de encontrar en la existencia humana las disposiciones o
estructuras que hacen posible dicha relación. Si el ser humano no estuviera en disposición
de abrirse a Dios, la revelación no tendría sentido, pues el ser humano no sería capaz de
escucha o acoger a Dios.
El ser humano es deseo de Dios es afirmar su radical orientación hacia Dios. Tomás de
Aquino habla del deseo natural de ver a Dios para indicar la aspiración que hay en el
espíritu humano a la felicidad y a la verdad. La existencia humana, siempre abierta más allá
de sí misma.
Los seres humanos como seres racionales tienen dos facultades: la inteligencia y la
voluntad. Buscan la felicidad que no poseen y descansan cuando la ha encontrado. Tomás
asocia la plenitud del hombre con la perfección de Dios. Muchos seres humanos desean su
perfección y su felicidad, hay un deseo natural de Dios. El ser humano si no alcanzase su
perfección, sus deseos más profundos quedarían frustrados.
Presentamos dos consideraciones, una filosófica y otra teológica. La primera, si Dios existe
el hombre puede alcanzar la plena realización de sus aspiraciones encontrándose con él, y
1
GELABERT BALLESTER, M., «El ser humano abierto a la trascendencia», en Id., La revelación. Acontecimiento fundamental,
contextual y creíble, Sala- manca/Madrid, San Esteban/Edibesa, 2009, p. 29-65.
otras que de los deseos del ser humano Dios debe existir. En Sartre diría que el hombre es
una pasión inútil, una aspiración imposible. Y Dios es un absurdo como último del deseo
imposible del hombre. En Tomás de Aquino no prueba que el apetito del hombre
desemboque en Dios, dado que toda criatura intenta unirse a Dios en la medida en que esto
le resulta posible. La segunda observación, si el hombre es un deseo natural de Dios,
pudiera parecer que Dios es una exigencia natural del hombre o que lo sobrenatural dimana
lógicamente de lo natural, así la revelación como acto libre y gratuito de Dios queda
anulada en beneficio de una ley interna de la naturaleza.
La revelación cristiana responde a las necesidades y deseos del ser humano. El ser humano
puede alcanzar la revelación a condición de no limitarse a la razón, dado que posee el
conocimiento intuitivo y el corazón como el centro espiritual de la persona. De tal modo
que, conocemos la verdad no solamente por la razón, sino también por el corazón.
5. La potencia obediencial
Karl Rahner presenta dos aspectos en nuestra temática. El primero, el análisis del sujeto que
le convierte en oyente de la Palabra debido a su potencia obediencial. Se identifica con la
esencia espiritual y personal del hombre y también con su capacidad de preguntar
ilimitadamente, en caso que se diera una revelación divina, el hombre tendría capacidad
para escucharla.
Dios sólo puede revelar lo que el hombre puede entender, la revelación que darse en la
historia, dado que el ser humano sólo conoce a base de fenómenos, sólo puede conocer lo
que se manifiesta espacio-temporalmente.
6. Antropología trascendental
Rahner se muestra sensible al hecho de que el hombre sólo puede entender aquella que el
hombre sólo puede entender aquello que tiene relación con su propia experiencia previa. Lo
revelado viene de fuera, no es una creación humana, para que la revelación encuentre
sentido tiene que poder relacionarse con la experiencia humana. Si se presenta con sentido
puede ser aceptada. Una pre comprensión de la revelación, denomina una antropología
trascendental, es decir, buscar las condiciones de posibilidad a priori en la estructura del
sujeto que conoce que hagan posible la experiencia de la revelación.
7. La pre-comprensión de la revelación
El teólogo español Juan Alfaro planeta la aparición de la cuestión de Dios en la vida del
hombre y su apertura a la revelación. Alfaro se muestra preocupado por fundamentar
antropológicamente la posibilidad de la auto comunicación de Dios al hombre y su
correspondencia. Para ello, se esfuerza por mostrar la inconsistencia radical del hombre,
clausurado en los límites de la inmanencia. El punto de partida es la cuestión del hombre
sobre sí mismo y el sentido de su vida.
Alfaro al analizar la situación del hombre frente al mundo, los otros, la muerte y la historia,
constata dos datos fundamentales: el ser humano trasciende la realidad mundana y no tiene
sentido en sí mismo su propio fundamento. El hombre no tiene en sí mismo su propio
fundamento: no es su propio origen y no tiene la capacidad de mantenerse en el ser. El
hombre se ha encontrado con su vida, lo que implica que su fundamento está fuera de sí. El
hombre no puede vivir sin preguntarse, por qué y para qué vive, mientras haya este último,
habrá la cuestión de Dios.
El hombre sólo puede reconocer a Dios y recibirlo como Gracia Absoluta, como auto
donación y autor revelación, lo que significa que el hombre está abierto a la gratuidad
absoluta de la auto comunicación de Dios.