Impugnacion de Costas Reynaldo Henriquez

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AL : MAGISTRADO JUEZ PRESIDENTE DE LA SEGUNDA SALA PENAL

DEL JUZGADO DE PRIMERA INSTANCA DEL DISTRITO JUDICIAL DE SANTIAGO.

PETICIONARIOS: LIC. REYNALDO H. HENRIQUEZ LIRIANO Y MANUEL ANTONIO


SANCHEZ.

ABOGADOS : RUDY MERCADO Y FELIX D. OLIVARES G.

ASUNTO : PRESENTACION DE ESCRITO EN SOLICITUD DE REVISION DE


ESTADO DE COSTAS Y HONORARIOS.

MATERIA : PENAL. APROBACION DE COSTAS Y HONORARIOS


ADMINISTRATIVA

IMPUGNADOS : LICDOS. WANDER SILVESTRE PEÑA, PABLO CORNIEL,


GRIMALDI RUIZ, CINTHIA MERCEDES PAEZ NAVARRO Y SANDRA ALTAGRACIA KOURY
VENTURA.

AUTO
IMPUGNADO : EL AUTO ADMINISTRATIVO S-N DE FECHA 16 DE OCTUBRE DEL AÑO
2015, RENDIDO GRACIOSAMENTE POR LA SECRETARIA ENCARGADA DE LA UNIDAD DE
PRIMERA INSTANCIA DEL JUZGADO DE PRIMERA INSTANCIA DEL DISTRITO JUDICIAL DE
SANTIAGO.
Honorable Magistrado:

El exponente, LICENCIADO REYNALDO H. HENRIQUEZ LIRIANO, dominicano, mayor de


edad, casado, abogado, con cédula de identidad y electoral número 031-0187633-6,
domiciliado y residente en la calle Boy Scout, número quince(15), Suite uno (01), tercera
planta, de esta ciudad de Santiago de los Caballeros, Municipio y Provincia de Santiago,
quien tiene como abogados constituidos y apoderados especiales a los Doctores RUDDY
MERCADO y FELIX D. OLIVARES G., abogados de los tribunales la República Dominicana,
debidamente matriculados y al día en el Colegio de Abogados de República Dominicana,
bajo los números 7533-149-89 y 17045-45-96, respectivamente, y con estudio profesional
abierto en la calle Ucho Álvarez Bogaert, Edificio La Magdala, marcado con el número
cinco (5), suite 202, altos, Web site: www.abogado-notario.net; dirección electrónica:
[email protected], de la Ciudad de Santiago de los Caballeros, República
Dominicana, donde el peticionario hace formal elección de domicilio para todos los fines
y consecuencias legales de la presente instancia, tiene a bien EXPONEROS Y SOLICITAROS,
lo siguiente:

I.-Auto objeto de solicitud de revisión.

1.- Que en virtud de una instancia contentiva de Solicitud de Homologación y Liquidación


de Estado de Costas y Honorarios presentada en fecha 14 del mes de septiembre del año
2015, por los LICDOS. AMBIORIX ENCARNACIÓN MONTERO, HERACLE ANTONIO
PEGUERO Y HECTOR F. CRUZ PICHARDO, QUIENES ACTÚAN EN CALIDAD DE ABOGADOS
REPRESENTANTES DE LOS SEÑORES CINTHIA MERCEDES PÁEZ NAVARRO, WANDER
SILVESTRE PEÑA, PABLO CORNIEL, GRIMALDI RUIZ Y SANDRA ALTAGRACIA KHOUNI
VENTURA, imputados de violar los arts. 367 y 371 del cp, en el proceso No. 031-016-01-
2015-00154, acción esta intentada por los peticionarios, los LICDOS. REINALDO H.
HENRÍQUEZ LIRIANO Y MANUEL ANTONIO SÁNCHEZ, por intermedio de su representante
legal la LICDA. TEODORA CONTRERAS MORA, como consecuencia de dicha acción a
petición de parte la secretaria de este Órgano rindió el auto administrativo s-n, de fecha
16 de octubre del año 2015, rendido graciosamente por la secretaria encargada de la
unidad de primera instancia del juzgado de primera instancia del distrito judicial de
Santiago, el cual omite la descripción de los actos procesales agotados, así como también
los honorarios de los abogados (los cuales son inexistentes),.- El exponte, LIC. REYNALDO
H. HENRIQUEZ LIRIANO, por medio del presente escrito somete la consideración de la
presidencia de este honorable Tribunal, formal recurso de Revisión contra el referido auto
administrativo, la cual nos fue notificada en fecha 14 de Diciembre del 2015 y cuya parte
dispositiva, copiada textualmente, dice así:

RESOLVEMOS:

PRIMERO: Aprobar y Acoger como bueno y valido el presente Estado de Costas y


Honorarios sometido y fija como suma acorde con la Ley de la Materia QUINCE MIL
SEISCIENTOS CINCUENTA Y CINCO PESOS (RD$15,655.00), a favor de los LICDOS.
AMBIORIX ENCARNACION MONTERO, HERACLE ANTONIO PEGUERO Y HECTOR F. CRUZ
PICHARDO.

2.- Fundamentos de la decisión objeto de revisión.- Que, a los fines de establecer la correcta
interposición de la acción de que se trata, nos permitimos transcribir aquí las disposiciones del
artículo 74. De Nuestra Norma Fundamental, y el articulo 254 del Código Procesal Penal, y de
manera subsiguiente, el procedimiento que para el caso de la especie ha establecido nuestro
más alto Tribunal de Justicia, en este caso, veremos la decisión de la Segunda Sala de la
Suprema Corte de Justicia, respecto a la materia que nos ocupa, la cual, después de tener a la
vista la Constitución de la República, y Jurisprudencias de principio, y a los fines de establecer el
orden para revisar o impugnar autos como el de la especie, mediante su decisión de fecha 22
de diciembre de 2010, en sus páginas 11 y 12 estableció, como fundamento de su decisión, lo
siguiente:
Artículo 74.- Principios de reglamentación e interpretación. La interpretación y
reglamentación de los derechos y garantías fundamentales, reconocidos en la presente
Constitución, se rigen por los principios siguientes: 1) No tienen carácter limitativo y,
por consiguiente, no excluyen otros derechos y garantías de igual naturaleza; 2) Sólo
por ley, en los casos permitidos por esta Constitución, podrá regularse el ejercicio de los
derechos y garantías fundamentales, respetando su contenido esencial y el principio de
razonabilidad; 3) Los tratados, pactos y convenciones relativos a derechos humanos,
suscritos y ratificados por el Estado dominicano, tienen jerarquía constitucional y son de
aplicación directa e inmediata por los tribunales y demás órganos del Estado; 4) Los
poderes públicos interpretan y aplican las normas relativas a los derechos
fundamentales y sus garantías, en el sentido más favorable a la persona titular de los
mismos y, en caso de conflicto entre derechos fundamentales, procurarán armonizar
los bienes e intereses protegidos por esta Constitución.

Art. 254.- Liquidación y ejecución. El secretario practica la liquidación de las


costas en el plazo de tres días, regulando los honorarios que correspondan y
fijando los gastos judiciales. Se puede solicitar la revisión de la liquidación
dentro del plazo de cinco días, ante el juez o tribunal que tomó la decisión o
ante el ministerio público en su caso.

3.- Nuestra Suprema Corte de Justicia, para el caso que nos ocupa, ha dispuesto lo siguiente:

“Considerando, que para la mejor comprensión de lo que se decidirá, se impone expresar, que,
en el caso de la especie se han violentado los derechos fundamentales del exponente, toda vez
que se ha irrespetando el contenido esencial y el principio de razonabilidad, que consagra la Norma
Sustantiva para aplicación de la Ley; así como también la naturaleza de las disposiciones combinadas

del artículo 11 de la Ley núm. 302 sobre Honorarios de los Abogados, modificada por la Ley
núm. 95-88, y el artículo 254 del Código Procesal Penal, la manera como opera la aprobación
de un estado de gastos y honorarios es la siguiente: Cuando la solicitud se presenta por ante
un tribunal de primer grado, la aprobación está a cargo de la secretaria del tribunal que
conoció del asunto, cuyo resultado está sujeto a revisión por parte del Juez del tribunal que
tomó la decisión, si es solicitada (artículo 254 del Código Procesal Penal) y por último, si hay
motivo de quejas, se puede impugnar ante el tribunal inmediato superior, (artículo 11 de la Ley
núm. 302) que es la Corte de Apelación del Departamento Judicial correspondiente; por otro
lado, cuando la solicitud se interpone por ante una Corte de Apelación o la Suprema Corte de
Justicia, la aprobación corresponde a la secretaria, y la revisión de la misma al presidente de
esa corte, mientras que la impugnación presentada debe ser conocida por el pleno, es decir,
por los miembros que conforman la corte de que se trate; que en el caso del Distrito Nacional,
por estar la Cámara Penal de la Corte de Apelación divida en Salas, el pleno lo forman todos los
miembros de las diferentes Salas, al igual que ocurre en la Suprema Corte de Justicia;
Considerando, que en la especie, como se ha dicho, las dos primeras fases fueron agotadas en
el Primer Tribunal Colegiado de la Cámara Penal del Jugado de Primera Instancia del Distrito
Nacional, por ende, al ser impugnado el mismo corresponde examinar el asunto a la Cámara
Penal de la Corte de Apelación del Distrito Nacional, pero dado la particularidad de que este
tribunal colegiado está dividido en Salas, el Presidente de la misma aleatoriamente puede
elegir una de ellas, como ocurrió;.”

4.- Trámite precedente.- El auto administrativo s-n, de fecha 16 de octubre del año 2015,
rendido graciosamente por la secretaria encargada de la unidad de primera instancia del
juzgado de primera instancia del distrito judicial de Santiago, se acoge a la Resolución número
4-2015, de fecha 16 de Marzo del año 2015, evacuada por este mismo tribunal, la cual decreta
la inadmisión de la Querella presentada por el exponente en contra de los beneficiarios del
auto a revisar, y la secretaria, ab-initio y sin examinar los méritos de dicha decisión, sin tener a
manos ni siquiera un solo acto procesal agotado por la parte beneficiaria del estado, donde se
advierta el gasto en costas, o la existencia de una decisión firme que contenga exposición de
debates y conclusiones, de donde vino a resolver la aprobación de un estado de costas sin
sustentación de ninguna especie, en franca violación de las disposiciones mandatorias del
artículo 253 del Código Procesal Penal y el artículo 9 de la Ley No. 302, sobre honorarios de los
Abogados, los cuales de manera taxativa disponen que los abogados después del
pronunciamiento de sentencia condenatoria en costas, depositarán en secretaría un estado
detallado de sus horarios y de los gastos de la parte que representen; a luz de dichos textos
leemos lo siguiente:

Art. 253 del C.P.P.- Acción privada. En el procedimiento de acción privada, en caso de
absolución o abandono, las costas son soportadas por el querellante. En caso de condena son
soportadas por el imputado. El juez puede decidir sobre las costas según el acuerdo que hayan
alcanzado las partes. (El subrayado nos pertenece).

Art. 9 de la Ley No. 302, sobre honorarios de los Abogados.- Los abogados después del
pronunciamiento de sentencia condenatoria en costas, depositarán en secretaría un estado
detallado de sus horarios y de los gastos de la parte que representen, el que será aprobado
por el Juez o Presidente de la Corte en caso de ser correcto, en los cinco días que sigan a su
depósito en secretaría. Párrafo I.- La liquidación que intervenga será ejecutoria, tanto frente a
la parte contraria, si sucumbe, como frente a su propio cliente, por sus honorarios y por los
gastos que haya avanzado por cuenta de éste. Párrafo II.- La parte gananciosa que haya pagado
los horarios a su abogado así como los gastos que éste haya avanzado, podrá repetidos frente a
la parte sucumbiente que haya sido condenado al paso de los gastos y honorarios. Párrafo III.-
Cuando exista pacto de cuota litis, el Juez o el Presidente de la Corte a quien haya sido
sometida la liquidación no podrá apartarse de lo convenido en él, salvo en lo que violare las
disposiciones de la presente ley. El pacto de cuota litis y los documentos probatorios de los
derechos del abogado estarán exonerados en cuánto a su registro o trascripción del pago de
todos los impuestos, derechos fiscales o municipales. Art. 10.- Cuando los gastos y honorarios
sean el producto de procedimiento contencioso administrativo, asesoramiento, asistencia,
representación, o alguna otra actuación o servicio que no puedan culminar o no haya
culminado en sentencia condenatoria en costas, el abogado depositará en la Secretaría del
Juzgado de Primera Instancia de su domicilio un estado detallado de sus honorarios y de los
gastos que haya avanzado por cuenta de su cliente, que será aprobado conforme se señala en
el artículo anterior. Los causados ante el Tribunal de Tierras, serán aprobados por el Presidente
del Tribunal de Tierras. (El subrayado nos pertenece).

A que, su señoría, de conformidad con las disposiciones del artículo 130 del Código de
Procedimiento Civil vigente, solo la parte que sucumba estará obligada a pagar las costas
generadas en la instancia, y en el caso que nos ocupa, pese a que se tomó como basamento
una resolución que lo condeno en costa, la misma deviene en incomprensible, toda vez que
ninguna de las partes tuvo oportunidad de presentar ningún alegato de defensa, mucho menos,
presentar conclusiones de ninguna especie; de donde, no existe ni la una ni la otra; es decir, esa
condenación en costa no tiene sustento material, por ello debe ser anulado el auto de
aprobación de costas y honorarios que por esta instancia se solicita su revisión; como podemos
observar en el caso expresa que: “Toda parte que sucumba será condenada en las costas…”. De
igual forma, tal concepción se deriva que “El vencido ha de pagar necesariamente al vencedor
los gastos o costas del juicio”. Es decir, que la condenación en costas es una carga que se le
impone a aquel accionante que habiendo acudido a pleitear fue aplastado por la defensa de su
opositor, y como podrá observar su señoría en el presente caso eso no existe.

Su señoría, las disposiciones combinadas de los artículos 253 del C.P.P.- y 130 del Código
de Procedimiento Civil, implican dos requisitos esenciales, que son: 1) Ser parte en el
proceso y 2) Sucumbir. Para ser condenada en costas es preciso que la persona física o
jurídica sea parte, esto es, que tenga un interés personal en el proceso, como
demandante, como demandado, o como interviniente, y que la acción se haya conocido y
una de las partes haya sucumbido. En caso de pluralidad de partes perdidosas entre las
cuales no existe la solidaridad, la condenación en costas se divide entre ellas, conforme al
derecho común, puesto que se trata de una deuda personal y divisible. Pero, si por el
contrario, las partes condenadas son deudores solidarios la condenación en costas
también tiene un carácter solidario.
Es de ahí que, su señoría, las costas nunca el operador de justicia puede disponerla de
oficio, sino, a petición de parte, y en el caso de la especie al no haber contradicción ni
debates, ninguna de las partes pudo en juicio solicitar condenación en costas, pues es de
derecho que dicha distracción, según lo dispone el artículo 133 del Código de
Procedimiento Civil, debe pronunciarse en la misma sentencia que condene al pago de
ellas, y su liquidación será realizada en nombre del abogado que obtuvo ese beneficio.
Pues es sabido que, éstas nunca pueden ser pronunciadas de oficio, sino a petición de
parte, según criterio de la Suprema Corte de Justicia, al establecer lo siguiente:
“Considerando, que ha sido juzgado que la distracción de las costas sólo procede cuando
la parte qua ha obtenido ganancia de causa así lo haya solicitado, no pudiendo dicha
condenación ser impuesta de oficio por el tribunal por constituir un asunto de puro
interés privado entre las partes; que al proceder la Corte a la distracción de las costas en
favor del recurrido sin haberle sido solicitada incurrió en este aspecto en la violación
señalada por el recurrente, por lo que procede casar en cuanto a este punto la sentencia
impugnada.  (S.C.J. 26 de abril del año 2000, decisión No. 11, B.J. 1073, página 194,
segundo considerando) (El subrayado es nuestro).

Consúltese en igual sentido:

Jurisprudencia en Dalloz, Nouveau, Code de Procedure Civile, 1983, Petit


codes, art. 132 a 136. Especialmente: respecto de los documentos
producidos y no contestados,- Civil, 2ª., 29 de abril de 1975, Bull. Civ. II,
p. 102; 7 de enero de 1976; ibid. II, p. 6; 12 de junio de 1976, ibid. II, p.
153; 20 de mayo de 1978, ibid II, p. 105; Rev. Trim. de derecho civil, 1979,
430, obs. de Perrot: 5 de julio de 1978, Bull. Civ. II, p. 138; Civ. 1ro. 4 de
febrero de 1979, ibid. I, p. 44. Civ. 3ª; 20 de noviembre de 1979, Bull civ.
III, p. 163; Respecto del alegato sobre irregularidad de la producción;
Com. 9 de octubre de 1973, Bull. Civ. IV, p. 246; Respecto de la
regularidad de la comunicación: Civ. 2º. 26 de octubre de 1978, Bull. Civ.
II, p. 175; 26 de octubre de 1978, Bull. Civ.II, p. 175; 17 de octubre de
1979, ibid. II, p. 165; Civ. 2 de febrero, 1977; IR p. 272; Rev. Trim. Dr. Civ.
2 de febrero, 1977, 820; 1980, 808, 1982, 466, Obs. Perrot; Respecto de la
regularidad de la producción de piezas: 9 de octubre de 1973, Bull Civ. IV,
p. 246;

Es bueno destacar honorable y noble Juez que existe una diferencia manifiesta entre lo
que son las costas y lo que debe entenderse cuando se trata de honorarios de los
abogados. El legislador ha previsto el procedimiento a seguir para el reclamo de la
liquidación en uno u otro caso, y en caso que nos ocupa no existe ni lo uno ni lo otro, a la
luz de la misma decisión que sirvió de basamenta para que la secretaria aprobara el
estado de costas y honorarios que se os solicita su revisión.

Decimos esto su señoría, puesto que cuando los gastos y honorarios sean el producto de
procedimientos contencioso-administrativo, asesoramientos, asistencia, representación o
alguna otra actuación o servicio que no puedan culminar o no hayan culminado en
sentencia condenatoria en costas, el abogado, depositará en la secretaría del juzgado de
primera instancia de su domicilio, un estado detallado de sus honorarios y de los gastos
que haya avanzado por cuenta de su cliente, no por cuenta de la contra parte, y entonces
este le será aprobado conforme se señala en el artículo 9 de la ley 302 de 1964.

Es así que, honorable Juez, que al respecto pueden surgir afirmaciones en sentido
contrario, puesto que la Ley No. 302, sobre honorarios de los abogados, establece que “…
cuando exista pacto de cuota litis, el Juez o el Presidente de la Corte a quien haya sido
sometida la liquidación no podrá apartarse de lo convenido en él, salvo en lo que violare
las disposiciones de la presente ley…”
Como se podrá constatar, Honorable y Probo Magistrado la decisión que sirvió de basamenta
para la aprobación del estado de costas y honorarios que se os solicita revisión, la parte
beneficiaria no pudo haber solicitado condenación en costas, pues no hubo juicio alguno para
que ellos sucediera; pero más aún su señoría es que tampoco existen actos procesales agotados
por la contraparte; de donde no se explica la aprobación del estado de costas que os
solicitamos revisión.

POR TODOS LOS MOTIVOS AQUÍ EXPUESTOS, así como los que Vuestra Señoría tenga a
bien suplir con los vastos e idóneos conocimientos que sobre el particular posee, los exponentes,
señores LIC. REYNALDO H. HENRIQUEZ LIRIANO Y MANUEL ANTONIO SANCHEZ , por
nuestro conducto y medio, tienen a bien SOLICITAROS, muy respetuosamente lo siguiente:

OS PLAZCA FALLAR:

PRIMERO: Que en consecuencia, y por imperio de las disposiciones constitucionales del

debido proceso artículo 69, 73 y 74 de la Constitución de la Republica, y 253 del


Código Procesal Penal, 130 y 131 del Código de Procedimiento Civil, y 11 de la Ley
302 sobre Honorarios de Abogado, tengáis a bien DECLARAR NULO de Nulidad
Absoluta y radical del auto administrativo s-n, de fecha 16 de octubre del año 2015,

rendido graciosamente por la secretaria encargada de la unidad de primera instancia del


juzgado de primera instancia del distrito judicial de Santiago, que aprueba el estado de
costas y honorarios a favor de los LICDOS. WANDER SILVESTRE PEÑA, PABLO CORNIEL,
GRIMALDI RUIZ, CINTHIA MERCEDES PAEZ NAVARRO Y SANDRA ALTAGRACIA KOURY
VENTURA, y en contra de los señores LIC. REYNALDO H. HENRIQUEZ LIRIANO Y MANUEL
ANTONIO SANCHEZ, al tenor de las razones, motivos y consideraciones
precedentemente expuestas, y a título de conclusiones principales.

SEGUNDO: A título de conclusiones accesorias o subsidiarias, y para el hipotético caso de que las
principales precedentemente vertidas no fueren acogidas, modificando parcialmente el auto
administrativo s-n, de fecha 16 de octubre del año 2015, rendido graciosamente por la
secretaria encargada de la unidad de primera instancia del juzgado de primera instancia
del distrito judicial de Santiago, en lo que respecta al monto contenido en dicho estado de
costas y honorarios, ya que el mismo contraviene el principio de razonabilidad, en el
sentido de que no se ajusta a la realidad de las supuestas costas generadas, y que el
monto a establecer sea de RD$500.00 (Quinientos pesos Dominicanos) , al tenor de las
razones, motivos y consideraciones precedentemente expuestas, y a título de conclusiones subsidiarias.

CUARTO: Condenando a los señores los LICDOS. WANDER SILVESTRE PEÑA, PABLO

CORNIEL, GRIMALDI RUIZ, CINTHIA MERCEDES PAEZ NAVARRO Y SANDRA ALTAGRACIA


KOURY VENTURA, al pago de las costas del presente recurso, ordenando su distracción en
provecho del DR. RUDY RAFAEL MERCADO RODRIGUEZ, quien afirma estarlas avanzando
íntegramente y de sus propios peculios.

BAJO TODA CLASE DE RESERVAS.-

ES JUSTICIA QUE SE OS IMPETRA Y ESPERA MERECER, en la ciudad de Santo


Domingo de Guzmán, Distrito Nacional, Capital de la República Dominicana, a los VEINTE (20)
días del mes de Diciembre del año dos mil quince (2015).

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DR. RUDY RAFAEL MERCADO RODRIGUEZ.
Abogado del peticionario.

_______________________________
Recibido conforme

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