Este documento describe el concepto de "feedforward" como una alternativa al feedback tradicional. El feedforward se enfoca en dar sugerencias para mejorar el futuro en lugar de comentarios sobre el pasado. Se basa en tres pasos: 1) pedir sugerencias prácticas para mejorar el comportamiento y desempeño, 2) escuchar activamente las ideas sin hacer juicios, y 3) decidir qué sugerencias implementar. El feedforward abre posibilidades para mejorar el desempeño al enfocarse en un futuro positivo en lugar de errores pasados.
Este documento describe el concepto de "feedforward" como una alternativa al feedback tradicional. El feedforward se enfoca en dar sugerencias para mejorar el futuro en lugar de comentarios sobre el pasado. Se basa en tres pasos: 1) pedir sugerencias prácticas para mejorar el comportamiento y desempeño, 2) escuchar activamente las ideas sin hacer juicios, y 3) decidir qué sugerencias implementar. El feedforward abre posibilidades para mejorar el desempeño al enfocarse en un futuro positivo en lugar de errores pasados.
Este documento describe el concepto de "feedforward" como una alternativa al feedback tradicional. El feedforward se enfoca en dar sugerencias para mejorar el futuro en lugar de comentarios sobre el pasado. Se basa en tres pasos: 1) pedir sugerencias prácticas para mejorar el comportamiento y desempeño, 2) escuchar activamente las ideas sin hacer juicios, y 3) decidir qué sugerencias implementar. El feedforward abre posibilidades para mejorar el desempeño al enfocarse en un futuro positivo en lugar de errores pasados.
Este documento describe el concepto de "feedforward" como una alternativa al feedback tradicional. El feedforward se enfoca en dar sugerencias para mejorar el futuro en lugar de comentarios sobre el pasado. Se basa en tres pasos: 1) pedir sugerencias prácticas para mejorar el comportamiento y desempeño, 2) escuchar activamente las ideas sin hacer juicios, y 3) decidir qué sugerencias implementar. El feedforward abre posibilidades para mejorar el desempeño al enfocarse en un futuro positivo en lugar de errores pasados.
Descargue como DOCX, PDF, TXT o lea en línea desde Scribd
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 14
¡Olvídate de dar feedback!
Utiliza el feedforward
Complementario o alternativo al feedback, ha surgido hace algunos
años el concepto de “feedforward” (avance), creado por Marshall Goldsmith y Jon Katzenbach, y consiste en una retroalimentación hacia el futuro. El término en sí proviene de la ciencia y de los procesos de distinto tipo. Aquí ha sido adaptado para la gestión del talento, el coaching y otras disciplinas de desarrollo humano.
Se trata de dar retroalimentación acerca de un tema en particular, y no
se basa en aspectos a mejorar, puesto que aquello del futuro no ha sucedido aún. Para hacer feedforward hay que seguir tres pasos:
1. Basarse en pedir sugerencias e ideas prácticas que ayuden a lograr
una mejora en el comportamiento y en el desempeño. El enfoque está en crear instancias de futuro. Esto sirve para despertar oportunidades de desarrollo del potencial de cualquier persona.
2. Escuchar empáticamente las ideas, registrarlas tomando notas, y
evitar hacer valoraciones sobre las mismas (por ejemplo “eso será imposible de lograr”) ya que se anulará el valor del feedforward y pasarías a estar enfocado en juicios e interpretaciones de las cosas.
3. Cada persona decidirá si utiliza o no estas sugerencias, y
determinará cuáles pondrá en acción, descartando las que no, o bien haciendo ensayo de prueba y error para descartar opciones en ese futuro que se empieza a co-crear al tomar las ideas y llevarlas a la práctica.
Una de las principales revelaciones del feedforward es que abre
espacios para pensar el futuro en términos más prácticos; no como algo abstracto en la línea del tiempo, sino con oportunidades concretas que una persona puede aprovechar para mejorar, aunque no sepa bien por dónde conducirse.
Otra clave de su utilidad es que se busca que no haya presión para
que el otro acepte esas ideas futuras que se le proponen. La clave está en que haga foco sólo en lo que sí va a poner en marcha.
En su estructura no contiene la “oportunidad para mejorar” (que a
veces viene disfrazada de un juicio que alguien hace sobre determinado proceder de la persona a quien se le entrega feedback), sino ideas para que el otro decida, y por eso el feedforward es muy bien recibido y amplía el universo de posibilidades de elevar el desempeño en cualquier aspecto que se aborde.
A continuación 5 positivas razones por trabajar en el Feedforward
1. Enfoque en un futuro positivo: Cuantas veces no hemos
escuchado la frase “el hubiera no existe”, es decir , el pasado no lo podemos cambiar, pero si podemos cambiar el enfoque que le damos al futuro que queremos, y podemos generar ideas en conjunto para que los resultados sean alcanzados y superados. Por lo tanto al tener un enfoque de futuro positivo estaremos centrando nuestros esfuerzos en soluciones no en problemas pasados. El Feedforward nos permitirá trabajar en la construcción de un futuro prometedor. 2. Anticipar vs. reaccionar: Mientras que el Feedback se fundamenta en reaccionar y corregir lo que se hizo mal, el Feedforward se centra primordialmente en la anticipación de sucesos, comportamientos, etc. (incluso en ocasiones provenientes de aprendizajes pasados) que permiten establecer al líder y al colaborador un plan de acción futuro, la clave es la planeación de acciones. 3. Comunicación asertiva y positiva: Aún cuando el Feedback es una buena herramienta, no todas las personas están preparadas y abiertas para recibir retroalimentación basada en errores, fallas y/o problemas. Suele suceder que el Feedback se convierte entonces en una comunicación basada en: “mostrarle al otro que está equivocado”, generando tensión para ambas partes. El Feedforward se basa en una comunicación asertiva y positiva que ayuda a los colaboradores a hacer lo correcto sin necesidad de defenderse o emitir juicios. 4. Baja autoestima vs felicidad y motivación: ¿Cuántas veces has salido de una evaluación donde se te dio Feedback deprimido, triste, desmotivado? El Feedforward no pretende emitir juicios ó críticas sobre la persona sino buscar su desarrollo a través del aprendizaje y la reflexión. 5. No te lo tomes personal: Aunque en teoría el Feedback debe estar basado en el rendimiento, los objetivos, resultados y no directamente en el estilo de cada persona, la realidad es que siempre estarán involucradas las emociones y será difícil no tomar la retroalimentación de forma profunda y personal. A diferencia del Feedback, el Feedforward no involucra críticas ni juicios personales porque está basado en el futuro, en algo que no ha sucedido. Sin importar tu título universitario o tu puesto jerárquico, en el ámbito laboral serás bien valorado por la capacidad que tengas de dar los resultados y cumplir las expectativas que se han puesto en ti. Las empresas están constantemente midiendo y evaluando resultados, y esto se traduce en el establecimiento de indicadores que permiten tener una evaluación más precisa de tu desempeño laboral. Sin embargo la forma en como comunicamos las cosas, damos retroalimentación y sobre todo apostamos por el desarrollo profesional de nuestro personal es fundamental para el buen funcionamiento de la empresa.
Marshall Goldsmith, creador de la herramienta de Feedforward dice:
“No al feedback del pasado, no puedes cambiarlo, por lo tanto déjalo ir. No quieras cambiar todo, elige sólo un comportamiento, para hacer una diferencia positiva en tu vida” yo digo que la mayoría de las personas hará cualquier cosa para vivir a la altura de la fe que otro depositó en ella.
Aumenta la productividad de tu equipo, con este mas
rápido y eficiente modelo Por Marshall Goldsmith El dar feedback ha sido considerado durante mucho tiempo como una herramienta esencial para líderes. Mientras se esfuerzan por cumplir con sus metas de la organización, los empleados necesitan saber cómo lo están haciendo. Necesitan saber si su rendimiento se ajusta a las expectativas de sus líderes. Necesitan saber qué es lo que han hecho bien y qué es lo que necesitan cambiar. Tradicionalmente, esta información se daba bajo la forma de “feedback descendente” de jefes a empleados. Así como los empleados necesitan feedback de sus jefes, éstos también pueden beneficiarse con un feedback de sus empleados. Los empleados pueden aportar información útil en los procesos y procedimientos, así como contribuir a hacer más efectivo el liderazgo de los gerentes. Este “feedback ascendente” se ha extendido mucho con la herramienta 360°. Pero hay un problema fundamental con todos los tipos de feedback: se enfocan en el pasado, en lo que ya ocurrió—y no en la infinita variedad de oportunidades que ofrece el futuro. El feedback puede limitar en lugar de ser expansivo y dinámico. Feedforward En años pasados, he observado más de diez mil líderes mientras participaban en un ejercicio experimental fascinante. En el ejercicio se les pide a los participantes actuar en dos roles. En un rol se les pide que den feedforward —esto es, darle sugerencias a otra persona para su futuro y ayudarlo tanto como pueda. En el segundo rol, se les pide que acepten el feedforward—esto es, escuchar las sugerencias para el futuro y aprender tanto como puedan. El ejercicio por lo general dura entre 10 y 15 minutos, y el promedio por participante es de 6-7 sesiones de diálogo. En el ejercicio se les pide a los participantes: • Escoger una conducta que desearían cambiar. Cambiar esta conducta que marcaría una diferencia significativa y positiva en sus vidas. • Seleccionar compañeros al azar y describir esta conducta. Esto se hace en un diálogo uno por uno. Se puede hacer de una manera simple, tal como, “Quiero ser un mejor oyente.” • Solicitar feedforward—pidiendo dos sugerencias que en el futuro puedan ayudarles a lograr un cambio positivo en su comportamiento. Si los participantes han trabajo juntos antes, no se les permite dar feedback de hechos sobre el pasado. Sólo pueden dar ideas para el futuro. • Escuchar atentamente las sugerencias y tomar nota de ellas. A los participantes no se les permite comentar las sugerencias. No se les permite criticar, ni tampoco hacer comentarios como “Es una buena idea”. • Agradecer al otro participante por sus sugerencias. • Preguntar al otro participante qué le gustaría cambiar. • Dar feedforward – dos sugerencias dirigidas a ayudar a que la otra persona cambie. • Decir, “muchas gracias” Cuando agradezcan las sugerencias. El proceso de dar y recibir feedforward por lo general toma dos minutos. • Encontrar otro participante y repetir el proceso hasta que el ejercicio termine. Cuando el ejercicio termina, pido a los participantes que digan una palabra que describa lo mejor de esta experiencia. Les pido que completen la oración, “Este ejercicio fue…”. Las palabras que dicen son casi siempre muy positivas, tales como “grandioso”, “energizante”, “útil” o “de ayuda.” La más común es “¡divertida!” ¿Cuál es la última palabra que la mayoría de nosotros piensa cuando recibimos feedback, coaching y desarrollo de ideas? ¡Divertido! Once razones para intentar el Feedforward Se les pregunta a los participantes porqué este ejercicio les pareció divertido y de utilidad en lugar de penoso, embarazoso e incómodo. Sus respuestas nos dan una explicación sobre el porqué el feedforward puede ser más útil que el feedback, como una herramienta de desarrollo. Podemos cambiar el futuro No podemos cambiar el pasado. El Feedforward ayuda a la gente a focalizar en un futuro positivo, no un pasado lleno de errores. Los atletas son casi siempre entrenados usando el feedforward. A los corredores de autos se les enseña “A mirar el camino, no la pared” A los jugadores de baloncesto se les enseña a visualizar el balón en la cesta e imaginar un tiro perfecto. Podemos aumentar las opciones de éxito en el futuro, dándole a la gente ideas de cómo pueden ser más exitosos. Es más productivo ayudar a la gente a hacer lo “correcto” que probar que estaban “equivocados” El feedback negativo casi siempre se vuelve un ejercicio de “déjame probarte que estás equivocado”. Esto tiende a que la parte receptora esté a la defensiva y a crear cierta incomodidad por parte de la persona que le evalúa. Aún cuando los feedback entregados sean constructivos, casi siempre son vistos como negativos, si incluye errores y problemas del pasado. Por otro lado el feedforward, es casi siempre recibido como positivo porque se focaliza en soluciones – no en problemas. El Feedforward está especialmente diseñado para gente exitosa A la gente exitosa le gustan las ideas enfocadas a ayudarles a lograr sus metas. Se resisten a recibir juicios negativos. Todos tendemos a aceptar feedback que sea consistente con la manera en que nos vemos a nosotros mismos. Igualmente, tendemos a rechazar o negar feedback que sea inconsistente con esto. La gente exitosa suele tener una auto-imagen positiva. He observado muchos ejecutivos de éxito responder (y hasta disfrutar) de un feedforward. No estoy seguro de que esta misma gente tenga esta misma reacción positiva ante un feedback. El Feedforward puede venir de cualquiera No requiere de experiencia personal con la persona. Una de las reacciones positivas más comunes en el ejercicio antes descrito, es que los participantes se asombran de cuánto pueden aprender de gente que no conocen. Por ejemplo, si desea ser un mejor oyente, casi cualquier compañero suyo puede darle ideas de cómo mejorar. No tienen que conocerlo. El Feedback requiere conocer a la persona. El Feedforward requiere tener buenas ideas para cumplir una meta. La gente no toma el feedforward tan personalmente como el feedback En teoría, el feedback constructivo se supone que “focaliza en el rendimiento, no la persona” En la práctica, casi todos los feedback son tomados personalmente (no importa la manera cómo es entregado). El sentido de identidad de la gente exitosa está altamente conectada a su trabajo. Mientras más exitosos sean, más tienden a creerse en lo cierto. Es difícil dar un feedback profesional que no sea tomado personalmente. ¡El Feedforward no involucra críticas personales, ya que se conversa sobre algo que aún no ha sucedido! Las sugerencias positivas tienden a ser vistas como consejos objetivos – las críticas personales son casi siempre vistas como ataques personales. El Feedforward refuerza la posibilidad de cambiar El Feedback puede reforzar el estereotipo personal y los sentimientos negativos. El Feedback puede reforzar el sentimiento de fallar. Cuántos de nosotros hemos sido “ayudados” por nuestras parejas, o algún amigo que parece tener una memoria fotográfica de nuestros “pecados” anteriores y que aprovecha para relatarnos la historia de nuestros defectos. El feedback negativo puede ser usado para reforzar el mensaje “es que así eres”. El Feedforward se basa en que el que recibe las sugerencias puede hacer cambios en el futuro. No nos gusta dar feedback negativo ¡Asúmelo! Muchos de nosotros odiamos recibir un feedback negativo y no nos gusta darlo. He revisado resúmenes de informes de feedback 360° de más de 50 compañías. Los ítems, “da feedback a tiempo” y “anima y acepta la crítica constructiva” casi siempre están últimos en lo que se refiere a la satisfacción del colaborador con sus jefes. El entrenamiento tradicional no parece marcar una gran diferencia. Si los líderes dieran feedback cada vez que se hacen evaluaciones, todo sería perfecto. Pero, los líderes no son buenos dando o recibiendo feedback negativo y no aparenta que esto vaya a cambiar en el futuro. El Feedforward puede cubrir todo lo que cubre el feedback Imagínate que ha hecho una mala presentación frente al comité ejecutivo. Su gerente está en la sala. Antes de hacerle “revivir” esta experiencia humillante, su gerente puede darle sugerencias para futuras presentaciones. Estas sugerencias pueden ser muy específicas y aún así efectuadas de manera positiva. En este punto, su gerente puede “cubrir los mismos puntos” sin hacerle sentir avergonzado ni humillado. El Feedforward tiende a ser más rápido y eficiente que el feedback Una excelente técnica para dar ideas a la gente exitosa, es decir “Aquí tienes cuatro ideas para el futuro. Por favor, acéptelas tal como las recibes. Si tan solo puedes usar dos de estas ideas, tienes dos más. Simplemente ignora lo que no tenga sentido para ti. De esta manera, no perderás tiempo juzgando la calidad de las ideas o “probando” que las ideas están “equivocadas”. Este tiempo de “debate” es normalmente negativo, puede tomar mucho tiempo y por lo general no es productivo. Eliminando el prejuicio, el proceso se vuelve más positivo tanto para el que lo hace como para el que lo recibe. La gente exitosa tiende a tener una alta necesidad de auto-determinación y aceptarán ideas que “compran” mientras reflejen ideas que sientan que los “refuerza”. El feedforward puede ser una herramienta útil de aplicación para todo el equipo Bien o mal, el feedback se asocia al juicio. Esto puede ser muy negativo – o limitante- y traer consecuencias no intencionales cuando se aplica a gerentes o compañeros. El feedforward no implica superioridad, ni juicios. Está enfocado a ayudar a ser un “compañero de viaje” y no un “experto”. Como tal, puede ser fácil escuchar a una persona que no tiene una posición de poder o autoridad. Un excelente juego para equipos es que cada miembro del equipo pregunte, “¿Cuál es la mejor forma en la que puedo ayudar al equipo en el futuro?” y solicitar el feedforward de los compañeros del equipo (en diálogos uno por uno) La gente tiende a escuchar con más atención el feedforward que el feedback Un participante del ejercicio de feedforward dijo, “¡Pienso que escucho con más atención durante este ejercicio, de lo que lo hago en el trabajo!” Cuando le pregunté “¿por qué?”, respondió, “normalmente, cuando otros hablan, estoy enfocado en la respuesta que voy a dar, y no estoy prestando total atención a lo que la otra persona me está diciendo. Durante el feedforward la única respuesta que se me permite es “gracias”. No tengo que preocuparme de estructurar una respuesta inteligente, y puedo enfocar mi energía en escuchar a la otra persona”.
En resumen, este artículo no intenta insinuar que los líderes no deben dar feedback nunca o que la evaluación de desempeño debe dejarse de lado. Mi intención es mostrar cómo el feedforward puede ser muchas veces preferible al feedback, en el día a día. Aparte de su efectividad y eficiencia, el feedforward puede hacer la vida más entretenida. Cuando se les pregunta a los gerentes, “¿Cómo te sentiste la última vez que recibiste feedback?” la respuesta más común es negativa. Cuando se les pregunta a los gerentes cómo se sintieron luego de recibir un feedforward, responden que el feedforward no sólo fue útil, sino divertido. La calidad de la comunicación —entre gente de todos los niveles, departamentos y divisiones- es lo que mantiene unida a la organización. Usando el feedforward—y alentando a otros a que lo usen—los líderes pueden mejorar dramáticamente la calidad de comunicación en su organización,asegurando que llegue el mensaje correcto y que quienes lo reciban lo hagan de la forma correcta. El resultado es dinámico, una organización más abierta, en la que los empleados se enfocan en el futuro y no en vivir de los errores del pasado.
¿Tienes claro qué es lo que se espera de ti y del equipo?
¿Tiene tu equipo el hábito de consensuar los resultados que se desean y cómo conseguirlos? ¿Ve tu equipo la retroalimentación como una oportunidad de aprendizaje? Los líderes de las organizaciones a menudo tienen que iniciar conversaciones para crear más transparencia, desarraigar la disfuncionalidad en equipos o procesos y ayudar a las personas a desarrollar su potencial . En alguna ocasión, todos hemos experimentado los efectos de una retroalimentación equivocada, por ejemplo, en casos en los que la crítica personal generó resentimiento y provocó la renuncia a aprender y a desarrollarse. Curiosamente, los elogios inespecíficos, como decir ¡gran trabajo!, no siempre producen los efectos positivos que esperamos – este tipo de elogios hacen que el receptor se sienta bien, pero generan poco aprendizaje. Y aún más importante, el elogio sin la profundidad de cualquier emoción de apreciación real es probable que sea contraproducente – ¿alguna vez te ha dado las gracias tu manager con una sonrisa falsa en su cara? Según el psicólogo de comunicación Paul Watzlawick, no es posible NO comunicar – muchas de nuestras interacciones se desarrollan en nivel inconsciente. De hecho, estamos constantemente en retroalimentación, enviando y recibiendo señales de aprobación, indiferencia o desaprobación, ya sea con o sin intención. Por eso es tan importante tomar conciencia y mejorar continuamente nuestras habilidades de comunicación. Toda comunicación es bidireccional y multidimensional, por lo que debemos ser conscientes de que estamos co-creando un diálogo que incluye no sólo lo que decimos sino también nuestra presencia física, el espacio emocional que estamos transmitiendo y la intención con la que estamos teniendo la conversación.
Conversaciones para crear más transparencia, desarraigar la
disfuncionalidad en equipos o procesos y ayudar a las personas a desarrollar su potencial
Conciencia y preparación son clave
Comprueba tus propias creencias. ¿Cuáles son tus experiencias previas en conversaciones desafiantes? ¿Qué emociones y sensaciones corporales te surgen? Por ejemplo, si has tenido situaciones de confrontación o disputas insatisfactorias en el pasado, ahora puede ser que inconscientemente evites confrontaciones cuando algo no está funcionando. Para avanzar, concéntrate en co-crear una solución con la persona. Cambia tu intención hacia el aprendizaje y la apertura en lugar de convencerte de que tienes razón. Revisa tus creencias sobre la otra persona. Lo que crees que es «cierto» sobre una persona va a influir en cómo la percibes, cómo te comunicas, qué escuchas y cuáles son los resultados. ¿Cuáles son tus expectativas de la persona? Por ejemplo, tienes que decirle a un colaborador que valoras mucho que no es parte de una nueva y emocionante iniciativa y temes que esto pueda afectar a tu relación personal con él. Evita hacer suposiciones o, al menos, sé plenamente consciente de tus creencias y mantenlas al margen. Sé curioso y mantente abierto a escuchar la perspectiva de la otra persona. ¡Déjate sorprender! Las emociones alimentan la acción. Preguntar sobre las emociones y dejar que salgan a la superficie asegura que las personas sean valoradas por sí mismas y no sólo por su contribución intelectual. Si ignoras las emociones, te arriesgas a que no se haga nada, o en el peor de los casos a que la gente albergue resentimientos y empiece a manipular a tus espaldas. Además, a menudo racionalizamos nuestras acciones sin sentir y tener en cuenta el coste o el impacto de nuestras acciones o no acciones. Por ejemplo, es necesario abortar un gran proyecto por razones financieras, y mientras que en un nivel racional todo el mundo puede entenderlo, hay tristeza y enojo subyacentes, ya que la gente ha invertido mucha esperanza, tiempo y energía personal en el proyecto. Practica la respiración y la atención plena para gestionar tus propias emociones. Encuentra una «chispa» emocional positiva o un punto en común que te conecte con la otra persona.
“La calidad de tu atención determina la calidad del
pensamiento de la otra persona.” Nancy Kline
Mantente presente, atento y comprometido con la
conversación. Uno de los regalos más importantes que puedes darles a otras personas es la pureza de tu atención, no tus consejos. Ayudarás a catalizar las soluciones positivas y el progreso. La otra persona se responsabilizará a medida que le des el espacio para expresar lo que está sucediendo y formular sus propias soluciones. Elimina las interrupciones (teléfonos móviles, correos electrónicos). Elige bien el momento y el lugar. Maneja tu propio estado de ánimo y ten en cuenta que el estado de ánimo de la otra persona afectará la forma en que percibe las cosas. Escucha atentamente con la intención de comprender profundamente el punto de vista de la otra persona. Comprende la importancia del silencio. Algunas culturas utilizan el silencio como una gran parte de su código de comunicación interpersonal. Pero incluso cuando el silencio no es una preferencia cultural, es una importante herramienta de comunicación. Como pauta general, cuanto más cargado emocionalmente esté el sujeto, más silencio se requiere. Mucha gente necesita silencio para poder detectar lo que siente. Utiliza el silencio en la conversación para descubrir lo que está surgiendo, lo que la conversación realmente quiere ser.
Es aconsejable aprovechar todas las interacciones con tu
equipo como oportunidades de retroalimentación, tanto para reforzar como para redirigir el comportamiento
Hacia un mejor futuro: Feedforward
Los consultores Marshall Goldsmith y Jon Katzenbach notaron en su investigación que los procesos tradicionales de feedback eran más exitosos si incorporaban preguntas enfocadas en el futuro, dando lugar al término feedforward. Proponemos una herramienta de coaching sencilla que puede ser utilizada para este propósito, el modelo GROW desarrollado por Graham Alexander, Alan Fine y John Whitmore. GROW es el acrónimo de las palabras Goal (Meta), Current Reality (Realidad actual), Options (Opciones) y Way forward (Camino a seguir). Establece una META: Ayuda al miembro del equipo a formular una meta clara. En el caso de conversaciones de desempeño, podría ser un objetivo de mejora o desarrollo. Piensa en objetivos SMART (específico, medible, alcanzable, realista y temporalmente definido). Esto te permitirá establecer una dirección, que se comprobará en los siguientes pasos. Las siguientes preguntas pueden ayudarte: ¿Qué te gustaría lograr/cambiar y para cuándo? ¿Cuán alcanzable y realista es este objetivo? ¿Cómo sería un resultado exitoso? ¿Cuáles serían los beneficios si lograras esto? ¿Cómo encaja con los objetivos del equipo? ¿Cómo se medirá esto? Comprueba la REALIDAD actual: es importante explorar, tomar conciencia y aceptar todos los aspectos de la situación actual. Este paso invita a la autoevaluación, a la reflexión y a una mirada al sistema (equipo, organización, mercado) en el que opera la persona. Si tú (como manager) tienes alguna perspectiva sobre la situación, puedes preguntar: ¿ Me dejas que te diga lo que observo?, o ¿Puedo darte mi visión de lo que está pasando? Algunas preguntas que pueden ayudarte en esta reflexión: ¿Qué está pasando ahora? (¿qué, quién, cuándo y con qué frecuencia?) ¿Cómo está afectando esto a tu trabajo/equipo? ¿Qué crees que te lo impide? ¿Cuáles son tus fortalezas, dónde ves las brechas? ¿Qué has aprendido hasta ahora? Explora las posibles OPCIONES: Una vez que ambos tengan una clara comprensión del contexto, el siguiente paso es reunir ideas y posibles sugerencias para el cambio. Si tú (como gerente) deseas ofrecer tus propias sugerencias, hazlo cuidadosamente y espera hasta que el miembro del equipo haya agotado sus ideas. ¿Qué crees que tienes que hacer ahora? ¿Qué pasaría si no hicieras nada? ¿Qué más es posible? ¿Qué es lo peor que podría pasar? ¿Qué es lo mejor que puede pasar? ¿Con quién más podrías necesitar hablar? Comprométete a SEGUIR adelante. El paso final es que el miembro del equipo se comprometa con una opción específica y clarifique la acción a través de planes concretos y realistas con escalas de tiempo (SMART). Utiliza este paso para establecer un estándar de rendimiento claro o hacer un nuevo acuerdo. Acuerda los seguimientos regulares, esto aumentará enormemente el impacto. ¿Qué opción eliges y por qué? ¿Cuál es tu primer paso después de esta conversación? ¿Qué apoyo/recursos necesitas y cómo los obtendrás? ¿Cómo sabrás que lo has conseguido? ¿Cómo y con quién harás el seguimiento de esto? Aunque no siempre es posible (o necesario) tener conversaciones completamente estructuradas, con la práctica y la experiencia este tipo de comunicación consciente se convierte en una actitud. El rol del manager se convierte en un rol de servicio. No olvidemos que la retroalimentación viene de «alimentar», se supone que debe generar crecimiento y desarrollo. Si puedes proporcionar un contenedor seguro y estructurado para que los miembros de tu equipo reflexionen, hablen abiertamente, se enfrenten a sus sentimientos o comportamientos, entonces estarás en camino de crear una fuerte cultura organizacional.