Clase 2 EL PECADO
Clase 2 EL PECADO
Clase 2 EL PECADO
Clase 2
TEMA: EL PECADO
1. ¿QUÉ ES PECADO?
Nadie puede leer mucho la Biblia sin darse cuenta que un gran punto de atención es dado al
tema del pecado, su causa y su cura. Habitualmente pensamos en pecado en conexión con un
crimen o asesinato. Pero el pecado en la Biblia se refiere a todo lo que no alcanza la perfección
de Dios.
El pecado irrumpe la comunión con Dios. Para el creyente, nada puede ser más serio que el
pecado, porque a través de él, el enemigo trata de robarnos todo lo más preciado de nuestra
vida. Juan 10: 10; Santiago 1: 13-15.
En Romanos 3:23, leemos: «por cuanto todos pecaron, están destituidos de la gloria de Dios».
La «gloria de Dios» incluye el pensamiento de absoluta perfección. Pecado es por tanto quedar
corto en la marca. Todos los hombres son culpables de esto.
Las 2 naturalezas
Dentro del ser humano hay dos naturalezas en constante guerra, la una contra la otra. Una de
ellas se inclina a obedecer a Dios, y la otra a revelarse contra Dios.
Estas dos naturalezas, la Biblia las llama “EL ESPÍRITU” y “LA CARNE”.
La primera instancia de pecado en la tierra se describe en Génesis capítulo tres. Tuvo lugar en
el Jardín del Edén. Dios prohibió a Adán y Eva comer del fruto del árbol del conocimiento del bien
y del mal. Ellos desobedecieron a Dios, comieron el fruto prohibido y se convirtieron en
pecadores.
a. Necesita saber que su antigua naturaleza ha sido sacrificada con Cristo y sepultada
por el Bautismo. Romanos 6: 6.
b. Necesita considerar el hecho de que debido a que su vieja naturaleza está muerta y
sepultada, jamás tendrá domino sobre usted otra vez. Romanos 6:11.
c. Someterse completamente a Dios. Gálatas 2:20
La paga del pecado es muerte. Adán llegó a estar espiritualmente muerto en el momento en
que pecó. Quedó separado de Dios y fue expulsado de Su presencia. También llegó a estar sujeto
a la muerte física. Pese a que no murió inmediatamente, su cuerpo eventualmente fue
condenado a morir (Romanos 5:12).
La naturaleza pecaminosa de Adán fue transmitida a toda la raza humana. Cada niño nace de
padres pecadores, es un pecador por nacimiento, por elección y por práctica. Por eso el hijo de
Adán, Caín, fue un asesino, y el pecado comenzó su labor en la raza humana. Porque todos los
hombres nacen pecadores, todos están muertos espiritualmente, y todos condenados a morir
físicamente algún día. Leer Romanos 5:12-18 cuidadosamente.
El pecado del hombre acarreó la maldición de Dios sobre toda la Creación: el mayor de los hijos
de Adán fue un asesino; espinas y cardos, por ejemplo, son evidencia de esa maldición. Otras
evidencias son mencionadas en Génesis 3:14-19.
El hombre moderno trata de explicar que nuestra depravación es sólo fallas humanas y errores,
sin embargo debemos entender que definitivamente el pecado trae consecuencias, así que no
necesitamos pruebas del pecado teniendo cementerios, prisiones, hospitales y salas para
funerales. Podemos llamarlo como queramos, pero lágrimas, enfermedades, tristeza, dolor y
muerte son claras evidencias de los resultados del pecado.
Entonces, ¿Por qué el hombre peca? Leer Juan 8:44. La Palabra de Dios afirma que comenzó
en el cielo y terminará en el infierno (Apocalipsis 20:10).
5. LA PENA LEGAL POR EL PECADO
«La paga del pecado es muerte» (Romanos 6:23). Dios ha pronunciado a la muerte como
penalidad por el pecado. No hay manera que un hombre pueda perfeccionarse a sí mismo de
modo que sea aceptable ante Dios. “Por cuanto todos pecaron y están destituidos de la Gloria de
Dios” (Romanos 3:23). Ya hemos visto que esto significa muerte espiritual y muerte física. Esta
penalidad debe ser pagada. Dios debe juzgar al pecado o proveer una manera de limpiarnos y
perdonarnos de nuestros pecados.
Mientras un hombre vive en sus pecados, está muerto espiritualmente y propenso a morir
físicamente en cualquier momento. Si todavía él está en sus pecados al momento de morir, está
sujeto a la muerte eterna. Esto significa que será separado para siempre de Dios y sufrirá para
siempre en el lago de fuego. Esta es la muerte segunda de la que se habla en Apocalipsis 20:14.
Cuando una persona confía en Cristo, esa persona es salva de la pena y del poder del pecado.
Esto no significa que no cometerá más pecado, sino que quiere decir que todos sus pecados,
pasados, presentes y futuros han sido perdonados y que nunca más será juzgado por ellos.
Recuerda que todos tus pecados eran futuros cuando Cristo murió. En Cristo, cada persona tiene
el poder para vivir en victoria sobre el pecado en vez de vivir para los placeres, poder del pecado
y Satanás.
Por esto es que Cristo Jesús murió en la cruz. “Quien llevó él mismo nuestros pecados en su
cuerpo sobre el madero, para que nosotros, estando muertos a los pecados, vivamos a la justicia”
(I Pedro 2:24).