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FRANZ NEUMAN
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: EL .E.STADO
1 DEMOCRATICO

f f!f EL ESTADO

¡; il!AUTORITARIO
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!t J1}.. . .
~ ~ -' }¡t;fJ'
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 PREFACIO
12
Deseo agradecer a Julian Franklin y Peter Gay, ambos de la Univer- •.I ,

iclad de Columbia, por revisar y u·aclucir "Nota·s sobre la teoría de la

dictadura" Uulian Franklin), "Libertad -jntelectual y libertad política"
(Peter Gay) y "Economía política en el siglo xx" (Peter Gay) .
Se agradece a los siguientes editores su amable autorización para
publicar el ~uiente material: a la Columbia Law Review por "El con-
cepto de libertad poHtica", 1953; a la Universidad de Columbia por "So-
bre Ja teoría del Estado federal", J955; a Hafner Publishing Company por CAPÍTULO I
"Intrnducción al Espíritu de las leyes de Montesquieu", 1949; a Harper
and Brothers por "Sobre los límites de la desobediencia justificable", ex-
traído de Conflict of Loyallies, por R . M . Mclver, comp., 1952; a Political
Sc1ence Qiiarterly por "Enfoques para el estudio def poder político", 1950, ENFOQUES PARA EL ESTUD~O DEL PODER P_QL
y a la Universidad de Chicago por "El cambio en la función de la ley
en la SC'ciedad moderna". 1939.
HERBERT MARCUSE
Resulta diHcil; .quizás i~posib le, agregar alguna idea nue
del pod~r pohtico. Es. indudable que existen pocos libro e
pero casi todo lo escrito en el <:ampo ele las ciencias pollu

expo~
manera se , ocupa del tema. Este ensayo no se pro ne
nueva teona del P?der políticC:>, sino más bien lo di
ques para su estudio, con particular destino ::i: los estudian te ro

. . • Artícu lo publicado orin-inariament . . .

]Unto d e 1950, p:\gs. U>l -l BO. " e en Po/¡.tilcal Sete11ce Quart

ffi"En cuan to al rrobierno e

aq uellos d os res p ttos "en qu e '1ass c~na par~e d el conocimiento, nreta
cre tas porque resultan difíciles d sas se ¡uzga n secretas; pu<'S al un
sa rlas. Vemos qu e todos los: gob · _e conocer, y algunas porque no ap
ie1nos son oscuros e invisible .

. Totamqua in fusa per artu.i

mens ag itat molem et magno se corpo1~ mi;~t'l

(El alma , penetrando a través d 1 .

mezcla con el enorm e cuerpo) e as arucula iones , a ita to<l.i 1
Tal es la descri · · .. .
edició?n , E.veryman, pá~~~;4. de los g.'Ob1ernos ." ...B..a.c.ao. Th ,1<1 •cwc i •t
~ La relación entre ambos se analiza1·'" más adelante.

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 FRANZ NEUMANN EL ES1 AUO !JI Oí 1 Tl y L

brtÚ) Este conocimient~ acumulado es el que forma la base ele la pro- mejor el e los casos, es golJ(:lfl da
ductividad en cualquier sociedad dada. 'Es te E._ocler es impotente. No o sea l a buena o mala suerte de
entraña el control de otros hombres .
-- --- --.

El pod~ _p_Qlític_o es_pºd~r-;.social f.QI!C(_!n_traclo en el Estado. Implica

el control de otros hombres a fm slL~Jerc.~r influencia sobre la conducta
del Estado y sus activiclades legislativas, ad~~i_!listra_tiva.~ y judiciales. Puesto
que el poder pohtico (en contraposición con el poder sobre la natura-
leza exterior) eS el control de otros hombres, siempre representa una·
relación bi.facética. 4 El hombre no es un mero fragmento de la naturaleza
exterior; es un organismo dotado de razón, aunque con frecuencia se
muestra. incapaz, o se halla impedido, de actuar racionalmente. Por tanto,
1'?'5 que esgrin:ien el poder ROlítico se ven 'fQ~~go~ a cr~ar resp~stas~~_?­
oon~les Y. ~ac10nales en aquellos a q~ernan, incitándolos a acep_-
tar, imphota o explícitamente, las órdenes de los gQPP~ Cuand_o _
el gobernante no logra pro-yocar r.~spl!~~tas emociorn.Ves o intelec;tu~lc;:i; .eJl
los gobernados, se ve llevado a .r!!_cµ.rür a .l<! _~i.!Ilp.le viole.ncia y por último
al exterminio. ··
--- - -
El carácter bifacético del' poder politi co lo separa ya de la ciencia
natural. Ello hace imposible (aun cuando fuera deseable) medir las rela-
ci_on.es_cle_p:o le.L.Q>J!!.Q...~e miele el CO'lilJ;:!Ortamiento de Ja naturaleza exte-
rior. Las variedades de relaciones de poder son innumerables. Es posible
clasificarlas y describirlas, pero no -se las puede medir.
El P-9.Qg:_J;:!.Qliti._cu.....n.o_ei;_ co_111p.ar'ª'~~ con Ja categoría de la energía
en física . Ni el poder es tampcco la única categm:ía._de...la_cienci.a...p.olítica. 5
La políu-ca no constituye tan sólo el arte de ob tener algo de cierta roa·
nera, haciendo caso omiso del qué y del' .cóm.o.6 La tendencia a igualar
la política y el poder político se remonta a Maquiavelo y parece ha?erse
convertido en el rasgo P-redominante de la ciencia política nmteamencana
y, qmzá, de la ciencia política moderna en general. La polí~ca se con-
sidera un asunto puramente técnico. Los "valores" (el térmmo_ se usa
sólo en forma provisional) wn, por consiguiente, meras pr~ferenc1as per- d) Lis on e ucncias e.le esta conoepci6 11 de la l11sto1ia lVllll
la suert s • rcv !un i:on claric.lail en la siguiente exposu.:jón de 1
sonales: tienen validez, si surten efecto y carecen de ella, s1 fracasan .. _La do ahora sobr el curso d los asun.tos humanos pienso qUL· 1
historia, por lo tanto, no posee sign.ificado alguno; es una repetiaón permanece en gr.111 me<liila en la misma condición , y lo bu, n qu
indiferente de la interminable lucha de los "grupos internos" contra los lo malo , pero lo bueno y lo malo cambian entre un país y olio T
U , !ntroducción . l..::l fortuna, empero, no es el árbitro de 1 1 1 t 1
"grupos externos". Se reduce así a una mera cronologí~, a u~ archivo m "lt 1tl .. Dio y 1.1 naturuleza han arrojado todas las fu1t11lla hu 1 l
de materiales ilustrativos para elaborar las así llamadas h1pótes1·s o, en el humanitl. el : y el este modo es más fácil alcanLarlas po1· 1 i 1 1
tri a, por acciones malvadas que por acciones buenas, a ' < L n
G)~te criterio es esencial para el método científico, y Ba~on lo f?nnula de ma - mentan los unos ele los otros . .. " History of Ffor1m1 . d1 t n ii l
nCTa clásica : .. La ciencia y el poder son idénticos porqu e la igno~ancia de l_a caus~ Library, Wnshington y Lond1·es. 1901, Libro 3, cap 3 1>·111' 1- .
pone fuera de alcance el efecto. Pues la nacurale2a sólo se conqu19ta obede'Cléndola. @Sería muy interesa.me demostrar la fa lsc<l.id dd a 1 to 1 • 11 11
y aquell o qu e, en la contemplación, constituye el equivalente de una causa, es en la que constituye un caso de poder absoluto con u11.1 e 11 upCL n 1
acción el equ ivalente de una regla ." Works, Boston, 1859. Vol. 1, pág. ~41. que la de un monarca constimdional del siglo ·v111 , u ni l • q11
Harold Lasswell , Power and Personality, Nueva York, 1948, especialmente Intro· joven totalmente conupto y fue esclareciéndo e a 111 hda q11 1 1
ducción pág. 10. . . el Papado, muy corrupto en el siglo xvt (cu.indo d1 ¡ "' de 111 ¡n
~ En estos términos se e,_presa Bertrand Russell, Power, A New Social Analyns, conupto después del Concilio Vaticano que l<>r111.11i o 11 '"" •1 1 1
reimpresión, Londres, 1948, págs. 10·11 . en cuestiones teológicas.
Harold D Lasswell, Politid: Who Gets What, Wlien, How, Nueva York, 1936. 9 Harold Lasswell, The Analyst' o/ Pofiti.:<1/ l'c>1v r, I < nd r

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 16 FRANZ NEUMANN .E.L L~1 IJ(J llLMO< f!!

1 relaciones de poder, en un instrumento de manejo de las masas por rroborando Jo dicho, <.in mlJ;llgtJ, 1 pr 1
pMte de la éli te.10 por igual la exigencia ele Ja de ap 111 uón 1......... .'"'•••t ..
La exclusión del enfoque psicológico imr-lica en su ~~- positivo establecimiento de un Reino de D H, El mcr.1rn.,...,t,.,.
':! 0terio ele que la política (y por lo tanto la histo'fia) ~n sólo quizá Ja manifestac~ón más notable d el 1e h /
una lu~l~_ por_tl.E.QfkU.ill!LgmP-os de 12oder, sino un intento de plasmar ([) ~l_I_adicalismo _c!e _§_a_!l Agustiri e ,
e el mundo segiln la pro12ia imagen, de impri~ir en él el_12unto d~ Santo To.m ás introduce lo que puede ll amar
personal. El proceso hist_9rico 12osee un significado. "..Provisionalmente _s¡¡ ·cbmún hacia· el pod~!:.... Pº'.!ític_<;>· El poder no
po ~ ble aceE~.!:.E. fq_qnulación tradicional pre positivista ele q~~í­ J~s r_ela~~º!l~s_je_!:árquicas ya existían entrt lo
tica--- __ ele las -ideas tanto como de la fuerza.
es la lucha..____ titud positiva con respecto al poder político n o e
No sólo se lo rodea de muchas restricciones, mo q
muy poco clara, se lo subordina al poder e pir iLU l
mente a través de divenos niveles ~ales .
4.· Este clima .es el que preparó el- camino p
Todo estudioso de la política adopta; consciente o inconscientemente, una Su único interés consiste en levantar vallas en torllli_
actitud específica ante el poder polítiw. Ella es la que determina el pro- del cual pretende desconfiar. Su objetivo es la di o!u
pio enfoque para todos loo problemas de ciencia política. Es preciso acla- relaciones legales, la eliminació~~ elemento de l_ .!!_l r
rar las premisas valorativas de modo de hacer posibles los análisis obje- su suHÍt:!:!fi9P. . E~r:. la_ ~l_oriclad ele la _ley, en la cual t
tivos. La empeñosa búsqueda del especialista en ciencias políticas puede han de- adquirir un carácter intencional-racional, es d
verse facilitad a por una clasificación de las diversa,s actitudes presentes calculable. Por cierto que, en realidad, se trata en "r n
en la hi tciria de la teoría política . La clasificación que ofrecemos tiene ideología que tiende (con frecuencia sin intención deh_b
sólo el car ácter de una sugerencia y no significa suponer que no existan que s~ averigüe dónde reside el poder político y a lmnd r
otr a mejores y más convincentes. rielad a sus verdaderos clueüos. El pod_er ...!!9 puede di h r
Q) Para ~ y *tóLeles, el poder político es más que ~!1.1!_ Íl,!n- 5.) No debe confundir e rnn el Iiberafüm9_!¡L .;!ª!Mi~~¡..¡,¡;-';:
~ión _~_aracla de la comu~:i:g_anizada. Es la coml}gidad _ ~- El re~pe~to a la política . Ésta, en contraste con b concepun n p
poder políti co C:S el poder total ele la _cpm.ifilill, distinguible de las demás totehca, es un asunto separado ele la socied:i.d, claramtnt d1~tl1n~1~1dlo
r elaciones sólo por sus técnicas. No existen dif<;rencias, ~~<'.!.~i~-~o distingui ble ele todas la demá actividades. Pero tómo
de vi-s t:i., entre Estado y sociedad;-ecC:iñ:omía y. 120Títica, moraL.y_ política, quién la ejerce y para qué fine e la utiliza son wt u n
r eligió n y política, cultl.rra y política. E.l hombre y el ciudadano son la indiferente,. Se justifica c~alquier_ poder que manten" 1 1
misma cosa . Toda actividad de la comunidad y de sus ciudadanos e& de den externo de la sociedad capa~_~<; permitir_al indi' 1d uo 11
índole políLica. El ciudadano sólo puede realizarse a través de la acción su vida.
política y sólo a través de ella se convierte en hombre. ~--Alguna ve e el epicureísmo se relaciona íntim m
® A ésta se opone radicalmente la que llamaré posición ag~~¿l­ toca a sus conse u encias psicológicas, con el ~Pf<?que 111
L a política es mala ; el poder eolítico entr~~c;._q_erción, ~~_!l!~lU anarquista <:I~..P..?lítico _~rp.alQ y_ !~e~l;1 l lru
o rigen y su finalidad. Es "antinatural" gue el hombre gob1e:n~ _<).1. J:~­ posible organizar una sociedad s!~.......PQlítica. Las con
J bre. Sólo al cabo de la historia, con el advenimiento del Remo de D10s, el caso le la doctrina ag'u tiniana , pueden ser el l0nl tlrm1 m
~ puede y debe presci ndirse de la coacción. De esta filosofía ~~_Qgs chismo . El onformismo: no hay que ensuciar-e l.t" m.u t
~ acti tudes en un todo distintas y aun así íntimamente relacionadas: la del
en política; el putschismo: es posible establecer un.t e' 1 d
r: COñIOññlsmo total y la de la total oposición al poder político. Si la po- cual~1ier momento que el hombre lo desee. .
t lítica es mala, es preciso apartarse de ella. Las formas de gobierno y los (.J) El marxismo comparte con el anarquism o ' ti .i u tin
~ objetivos del p oder polí ti co se vuelven improcedentes. La salvación puede ~.cía el!_ que ·el poder polític~!.º. ~ un fenómeno ll .ll! 1 :
11< alcanzarse por medio ele la fe y la vida terrena debe ser una mera pre- !órico. Sin embargo, en contraste con el anarq1mm . ) e n
paración para aquélla. La primera consecuencia es el mol!!quism__::. Co-
@"Aun cuando las leyes nunca sean má qu.e mera' dcd .u wu
lO E.sus tendencias son particularmente notables en las obras de los psicólogos in- leriores, no obstante ti ene suma importancia que Sl' esn iba to<.111 cu ni pu
duunales como Ellon Mayo. Véase Reinhard Bendix y Lloyd Fisher, "The Perspective en toda constitución , por cierto, siempre hay algo que 110 puc d< '' b
of Elton Mayo .. , en The Review of Economics and Statist ics, Vol. XXXI, NQ 4, no- permanecer en u.na nube oscura y venerable, so pi:na 11~ dt1 1<11ar 1
embre de 1949, pág. 312. de Maistre, Considérations sur la Franct~ cap . Vl

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 FRANZ NEUMANN
E L E ST A DO DEMOCRÁTIC.O Y L ,l A ) A

nismo, considera que es un fenóme n o his tórico necesario, pero la necesi- para el liberali smo como para el absol utismo, tanto p
dad se ~imita (en con traposición con el agustinianiSlllo) ~~fase histó- como p ara un Estado intervencionista. Nada ha l'r
ri~~~fk la _cual _ d~ga_§ ar la :humanidad an tes de gu~ p l}ega vicio a la ciencia política como la afirmación de q ue el I

¡
~!:~!J.~_9~.§~d . ~in clas~_():lna sociedad §i!!_p~lítica),. El reme- u n Estado "d ébil". Ft~e ]?_re~isa~ent<: ~a~_f~Ete ...Cº!D-º e:
dio contra el J:?.Qdei:_P-Ql1J_i ~(otra vez contra _los 3 riarqm stas) es u n poder las circuns tancias que fo rodearon . ~dq_u i:_ió_ i_!!l~ri o col
polí tico mayor y m ás,a_ltame_n te concentrado, u ti~zado con h~):?ilida<:!_J~~a sostuvo gue~as, soLocó _ 9-_<:sórd!~s i~t~ores y se estab1hz
~plastar el p oder pol1t1co (dictadura del P-roleta~'!_do) : El marxista ofrece gos períodos.
así un enfoque posi tivo del poder político hast'!:_ el esta~~1m1e~~~
sociedad sin clases. - - P ern, desde luego, varían los métodos aplicados p or quie
~~ Marx_c~~~..!~- ~s~~- enfog_~pQsitiv_o cq_i:i )-/{':.s_s~~~- · Para este ~1-
el pocler_y_ el alcan c:e _desu aplicaaón. ?
este es prec:isamem~ el
de significación mayor para el estud10so de c1enaa _POl lllca
i..' tJ.mo, el poder poht1co es a la vez COII!P-rehens1vo e inexisten te. Lo in-
punto de vista formal, los métod~s van del caso ma.rgm al de 1
;;_cluye todo porq ue la comunidad organizada (como en P latón y Aristó te-
al caso marginal ele la educación.1!' El gr u po dueño del p oder t
:_ -1 les) abarca todas las <1ctividades del hombr<;: ~onomia!_ cultu~a!... reli~n ;
dispos.ición tres métodos b ásicos : _p~~. 1:J en«:_~ios _ n;::r n
,_ es inexisten te en razó n de la pretenc!,!d '!__i§entidad de goberna_!l tes X...Z..?· lencia. La vi.Q~ es probablemente mas efec uva como metooo _
~
. b ernados en la vo lu ntad general . E:sta actitud dual h acia el poder polí- =arc.ailce, pero poco efectiva como _método princi pa1:_.Eara ~~n~var el
y tico es precisamente la que vuelve comprensibles l'a teoría y las acciones
d e Robespierre . dur_a~~ ~!29dos rol~g_~do!, pu~sto q':1~ compele al grupo (en _P
en las condiciones modernas) a rn tens1 hcar 19s método d e io
.s¿ ® .!f.!_sle~comparte con el demócra ta total una actitud a ex tenderlos a sectores más amplios de los gobernados. _!¿__p
p~para_ _cQ!L.rl_p.fill ~r político, que a p arece en su esen cia como...IDl por supuesto, consti tu ye la for ma ~.ás eficien_t~ (es cle_cir, l.1 m
,
~ instrumen to racional uti lizable par a fin es deseados y d eseables. Con todo, ·mica) . Con todo, las tres, persuasrnn, ben eh_ao y v 1 ~lena ~ _
- el recelo del liberal le impide aceptar l.a p olitización; to tal d e la vida y le siempre presentes en todas las forma de gobierno. 13 _'\' pit.:u :..__
hace i nsistir en el carácter separado del poder polí tico. P ero el demó- ·mezcla de los tres elementos encierra otro problema fundament
crata. liberal consecu ente no está ni p u ed e estar interesado únicamente en el especialista en ciencias p olíti_ca .. T ra taré _de ~ clarar su cn tido
l_ levantar vallas en torno d el poder político. L e interesan cada vez m ás las formulación de alguna generah zac10nes soaológ1cas .
potencialidad~ d e un uso raaonal de éste.
E ta (o cualquier otra) tipología ele las a cti tudes frente al p oder po-
_Gen e7:_alización sociológira 1 : El ign ificaclo d e la per5u..1~'.·111 1
lítico no permite descubr ir afirmaciones contradictorias de índole a m e-
con la con1ple jiélaCl c:reaente Cle la ocied ad . Qu1z3: sea. 1cgTtun 1)
nudo hipócrita o demagógica y llegar a un enfoque coherente p ara el
rar que, por lo general, la p er u asió n es una mera forrn ~ d 1
estudio del fenóme no del poder. Si un estu dioso o un polític? . exi~~n " violencia cometida conu·a el alma", segú n la form uló el lu ... to11 >i.l
simuháneamente q ue los disidentes sean excluidos de la partiop aaon
cés de la Ino-latena ca tólio cuan do E nrique VIII. H Por m eu1 ' ti
política y que la propiedad p rivada tenga er carácter de i nviola:b le fre nt_e
a la intrusión gub ernamen tal, n os hallam.os an te una mezcla d e dos act1-
gobern ante~ alca n zan un notable grado de h abitu , ción de lo" '
ele modo tal qu las reaccione;; de éstos a u men u n car,1de t u
tudes: la de Pla tón-Rousseau y la del lib eralismo.
máti w . El éxito el la p er ua'5ión dependerá, sin erobargt) tld 1 n
El resultado no es u n a " nueva" actitud •h acia el poder, sino una m a-
la dura ión ele la ¡ ropaga nda y de la habilidad_ con que . pr
nifestación propagandística. N uestra tipología de las acti tudes revela fá-
estereo ti pos. Poca clud ~ ~a~L..9.U~l a persua ión e. un ~
cilmente que contiene po ici ones contradictorias. El inv ~stiga dor c_ritico
pQ_cle¡- olíti cQ_más eficiente y barato gue el empleo d ..1 1
tiene el deber de extirpar tales inconsecuencias de su propw pensanuento,
polic iales, ejér ci tos y milicias.
de denunciarlas cuando aparecen en las afirmaciones de los demás y de
h acerse consciente de las premisas de su pr opia posición.
@Es to no quiere decir que deba considerarse la cducac1on u n H 1111 01 ~
tru mcnto pa ra conservar el poder; también debe consjd~ d. 1> J ,1 1111.i l< Llll 1
l?.QI....tl_E.QQer. . • . , 1
@ La signilicación del poder político
- - ~ ·--·...:=::..=-:.__ - - =-=- -===~
- i s CE:r;Iax 'Weber, "Politics as a Vocat ion". en fu•aw 111, ~<>< 11 '" !1' , cm 1f 1
H . H . Gerth y C. Wright Milis, Nueva York, 1946, págs. 80-81 . 1 urú 11.il.1r
Una vez completado este autoexamen debe considerarse con honradez la me nte qu e el grupo gobern ante, -a,un Ct1 ?~do confl~ sobn: tod1> n l'.1 ' '
q uizá deb a slL propia cohesión a los benef1aos ma tcna l e~ y a la pe1 u.1 ' "
ignificaoón del poder político. Ninguna sociedad , según constancias his- H P ierre J anelle, L'Anglet•erre. ca t/1 1>l i q11e <l la i•nlle <111 ic/11 me, ''
tóncas, ha po~~ jamás prescillaiiClel poder p olí tico. Esto vale tanto gina 185.

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 EL ESTADO DI M<>< kÁ Tll < V
~o FRANZ NEUMANN

Generalización soczológiw 1 La
. Generalización wciológica 2: , La complejidad creciente de la sociedad
el proceso soCl.al _au~.enta cou la u~ nt
C'" eXlgeguelo~ gobernantes utilicen arcanos y técnicas secretas de gobierno. ~on su industnahzac10n cacla . "..e~m~yr::: La <.v"'"'-''u""-''"··
~ r ' - ~~~ ~~~~m~º~~~;;fq~~l~~~l e~s~;c~o~u~~· t~~~~ la economía, la sociedad, la cultura) fav~~
viene un proceso de petrificación soc.ial que l p
_
11:1cha, sin embargo, las ,decisiones tácticas sólo pueden ser eficaces si se equilibrio semiautomáúco. Una vez rolo el e2c.;;.J.p.;;..._;;.:~~
blecerse a __gavés de la intervención a~tiva del pOder E?.'
uenen en. secreto .. Éste, a su vez, únicamente puede ser conservado por
una i:eduada ~r:t1da d de ~ersonas. Este mismo h edw e5- el que hace ne- del Estado se hace entonces más preoado que nu
cesano el surfJm1ento de oh~arguías dentro de los movimientos demasas.
i'v~ ~Ro~rt_Mic.beis 16 (y probablemente muchos más) han Generalización sociológica 5: La misma tende
iían-ladola
d atenci~sOT5're"'eSe
· Tenómeno ' y Max Weber , adema·s , 11 a acen- 1:lna mayor separac10n entre el poder político y el poc
tua o _con JU5-te~a la su~erioridad de los pocos sC'bre los mud1os en razón
que nos ocupará más aclelan_te ..
de la m1,portanc1a que u_e ne el secreto para cu alquier gobierno destinado· Algunas de estas generahzac10nes, o toda s, pueden
a ser mas que temporano. 17 Por esta razón precisamente el gobierno ele tenden ser exhaustivas, sino que se limitan a señal r e
l~s poco se hace notable de modo particular. er: aguellas organizaciones correcto estudio del poder político. Cabe esperar que 1.1....u ...u:~·"'"
e e. masas q ue, en ma or o-raclo ue otros movimientos, son esencialmente- siego. A prjroITa vist<Lparece difícil con iliarl.=!Uilll..L .!•·"'•-_ ...,,,_,
a<l.icta~ a la democracia: los sindicatos los aro os soaa Clemocráficos. cracia. Si por democracia se entiende esa mezcla de leme
pabonstas) . La razón de elle• es obvia. Los opositores e esos mov1m1en- LOclZe y de Rousseau, de San Agustín y de Santo Tom
tos son personas por lo general reducidas en número pero individualmente· mún recibe el nombre de "teoría democrática", re~ult1 im
po~e;osas, p or lo que se hallan en condiciones de mantener s~cretas sus una conciliación de aguellas tendencias realistas con t
dec1s10ne .estratégicas y tácticas. La organización de masas, enfrentada a_ nos interesa ahora el problema de la teoría uemOC'l,1t1
!~kLQP-OSI tores, ~~e b e re~rrir a SU vez a la invención de formas ae -go- basta-9.~ci.L.qµe una teoría <lemoq-át ica correcta ccndri que
b~erno q;1e tamb1e:n permitan el secreto. El gobierno aristocrático se con-
~roblemas,
v1~rte as1 en un~ ~nstrum e ntación sociológicam.ente necesaria de los movi-
1 m~entos democraticos. 18 N o es accidental, pues, que el desarrollo de las.
oli_garquías ler:~o de los movimientos de masa& haya sido estudiado por IV. Raíces del poder polit.ico
primera _v ez ut1l~za_ndo el ejemplo del partido socialdemócrata alemán .
. Lemn co nv1ruó en virt d esta necesidad . Su teoría vanguardista del j
lid zgo ro a car ente onc o mocratica tra icional or
(
~-
. _Generalización ~ociológica 3: A mayor grado de desarrollo tecnoló-
gico corresponde una mayor concentración del poder político. Nada tiene-
ro r .,, r que verJa_~oncepció n legal de la propiedad con un análisis ele este [enó-
1~eno. No importa quién sea el dueño de una unidad técnica : un -incli-
v1clu~, u~a c?.rpora~ón , un Estado o cualquier otra sociedad organizada.
~a orgamzaaon soa~l de las grandes unidades técnicas puede ser coopera-
uva, des~e l~ego. Sm embargo, en todo grupo social basado en la lucha
la ~rganuac~o~ ser~ necesariamente jerárquica. Cuanto mayor sea su ta-
mano, más Jerarqm_co se vuelve. Las crecientes tendencias jerárquicas ll e-
van,~ la concent~aaón del poder en la cumbre. La relación entre el poder
poht1co y el sooal se analizará más adelante.
IS Loe. cit ., págs. 102·103.
lG Political Parties, Glencoe, 111., 1949.
l , pa~:~~~:ts~'.•t1/t und Cesellschaft, Tercera Parte, "Typen der Herrschaft", capítulo-

1~e~:~~nte nerse presente que puede convertirse, no en su ins trumentación , sin()

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 22 FRANZ NEUMANN EL ESTAJJO lll::MO<..RÁU< <J IL

visto obstaculizado por tabúes carentes de sentido. Las ideas más anti- La economía es un instrumento de 11 pr,J 1
-1 guas ~e han perdido u ocu l ~ado y raramente se las saca a plena luz. De es de la economía. La concepción m1tof.,• 1r
esa manera, el _en foq ue cl_ás1co se ha vue lto a form ular en tiempos mo- finalmen te que desaparecer.
r' dem_o~ por l'l..2Eterpr etac1ón que Marx hace de la h.i wria (él mismo ? Si se acepta este criterio general, la Lrar1eulórTT'-'""'n
admrnó qu~o fue su creador y que ella no es "marxi·s ta"). Sin embargo, { nómico en poder social y por ende en poder poi
como es de ·bu_en tono rechazar de cuajo el marxismo --sin, por así decirlo, { preocupación fundamental del especiafüta en cim
echarle una OJeacla-, el estudiante se priva de una compren sión clara d e
la relación entre el poder económico y el poder político. El~arúdo político. El instrumento concreto
E l enfoque se ve facilitado p.or el establecimiento ele ciertas ca teg:Q: Ja transformación del poder social~ pod~ __polínco
rías de relaciones. y co. L os m otivos de la posición suprema que ocupa e
CD La ,fppc;:epS,ó~~antigua. Aquí -y esto se infiere ya de lo dich0--, en la propia naturaleza de la democracia. El parudo
aunq ue la fuente del poder político es el poder económico, el primero _in ter eses p ar_t!.01_l~es y, en muchísimas ocasione5, extrem~.im.e::-:=
peneua todas las actividades sociales y todas las esfe ras de la vida. La tas, ap arezca n como de utilidad nacional. Al mi mo u
r-os ición en el poder económico proporciona simplemente el motor del total dominación de los intereses nacionales por parce d
poder político gue luego incluye todas las re l aciones...d.e.....~-. p ar ticul'ares. La función del partido político en la den
® ~~iQ_~~JU- El poder político no existe en la forma ambigua. E l proceso democrático compele a cada g1 upo
ideal típica. Es una mera función de una posición en el poder econó- zarse por lograr el apoyo de la masa. Cada grupo, por l
mi_<:Q.;__1ª__propieclad ele la tierra .. De ella surgen los poderes judicial, mi- prese rHar sus intereses egoísL.as como si fueran umve1 al
li1ª.!:, reli ·oso le ºslativo admin.isLrativo. craci a la p olítica, la lucha por el poder políL.ico, se hJ.cL 1
3 La concepción capitalista., Sólo ep.~e- per íodo.. ~ pare ce un pro- ideologica qu e en cualquier periodo anterior de la lmton
_Qlema rea l: la independencia del poder p olítico y no obstante, su interre- obvio para los an tiguos y claro para el istema leud.11
laci~11_con el poder económico. El poder políti co (la estructura teórica en el proceso d emocrático. Pero tampoco debe olvidar:.e el :1
fue perfeccionada por Hobbes) es una actividad separad a, cumplida en de este pr oceso. La mi ma nelesidad de apelar a grup
una institución separada: el .Estado. El Estado tiene el monopolio del amplios gue el grupo de intereses inmediato obliga aJ ~1.1_u te d
poder coercitivo ~jerce en un sistema institucional seP-arado. Al diverscl'l. La política se hace má clemocdtü3~~1
mismo tiempo in embargo esta institución 5eparada tiene una vincula-
ción inu-ínseca con la sociedad a cuyo servicio funciona. Esta concepción
fkL12ocler político es la que une a Locke y Hobbes y distino-ue a ambos
ele Rousseau. Ambos separan el poder político del poder social; ambos
lo vinculan. Hobbes considera necesario incrementar al roá..'Dmo el poder
político para servir a la sociedad : Locke sostiene que sólo puede servír-
sela si aquél se reduce al mínimo. Los dos, sin embargo, admiten excep-
ciones. En la teoría de Hobbes se producirá la destrucción del poder
político si éste no cumple su función social (el contrato social c~duc~);
Lock.e, a través de la instimción del poder privilegiado y fe derauvo, m-
cremema al máximo el poder político, si ello es nece:ario para el ~i en
de la cosa pública. Lo que Hobbes y Lock.e no estableaero.i:i con cl ~1dad
~ue ambos están vinculados no sólo desde el punto de vista funci onal,
sino también del uenético: es decir el poder económico es la raíz del_p~der
político. El primer análisis sj<temárjco de esta relación su:ge del ele la
Revolución francesa que realizó Sa.inr-Simon y luego se exuende con ra-
pidez a la historiografía y la sociología francesas e inglesas.
De esta idea general de Hobbes y de Locke se infiere que, cual- 21 Este es el h ech o q ue en genera l 'Pasan por
alto los m 1 1 t
q_uiera sea la libertad de qne disponga la sociedad y J!articularroente la R< nn<1, J e 1
22 El a n álisis más significa tivo es el de Karl
actividad económjc¡i <u objeto es mantener un orden político estable. No Law attd Their Social Funct ons, p ublicado originari.11nu11 1
existen, pues, el poder económico "puro" ni la actividad polí tica "p ura". O . Ka hn ·Freund, Londres, 19'!9.

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 24 FRANZ NEUMANN
EL ESTADO DEMOCRÁTICO Y El. LSIAJ>, ALIT

Enfrentados a la propiedad, los sindicatos (en Europa) procuran or-

ganizar los mercados de trabaj o y los mercados políticos mediante el
l/ poder colectivo de la mano de o b ra organizad.a en una o en varias orga-
nizaciones. Sin embargo, las cooperativas de productores y consu midores
sólo afecta n levemente el poder de la propiedad en el mercad o d e b ienes
de consumo.
Los esLUdios de estas organizaciones y de los recursos por los que
su poder se transforma en poder político son vitales para el estudioso de
ciencia polí licas. 23 Tenemos una gran cantidad de estudios ind ividuales
de los grupos de presión, pero aún carecemos de un análisis compara tivo
verdaderamemc depurado. La trasformación de estas posiciones dentro
del poder económico difiere entre un país y otro y entre una y o u·a
sHuación histórica. Para el análisis del poder político es m ucho m ás im-
portante Ja fuerza rel a tiva de los grupos económicos com p etido res que
el estudio de las instituciones políticas propiamente dichas. Hay p aises
(como Alemania e Inglaterra) en los cuales los rep resentantes y adminis--
tradores de las organizaciones econótnicas ingresan en forma directa a
los parlamentos; en otros (como Estados Unidos.) la infl ue n cia es m ás in-
directa. E. i ten países (como Alemania e Inglaterra) en que los sindica tos
son organismos tanto políticos como industriales, y o tr os (como Francia
y Estados Unidos en determinadas situaciones) donde a q uéllos se abstienen
al parecer de participar en política.
Los recursos y modos de trasformación d el p oder econ ótnico en po-_
_ le.[_f>olítico varían, pues, de manera considerable, p ero au n as_L_~§__ E,OSible
distinguir pautas que debel'án definirse con mayor p recisión . so~re una
b ase com.parativa. Al estudioso de las ciencias p olíticas le es m~1~pe~~a­
ble, pues, un conocimiento profundo de los problemas de la estra uficaaon
social y la organización econótnica.
El encumbramiento de la política y de las burncracias: La r elación
clá ºicn. en-treecoñOxiua y polmca cambia. En la actuaTillad par ecena
_que el poder político ha comenzado a emanciparse d e su s r aíces eco-
nómic~~ .!!_e_nde, por cierto, a convertirse en una base p ara el. 19?~
del poder económico. En general se considera que l~ buro crat1z~a on
pone de manifiesto la tendencia que culmina en las doctnnas del gobierno
de Jos directores: los directores privados y públicos eliminan a los dueñ os
ele propiedade y los parlamentos. La tendencia hacia la burocratizaci~n
tiene jndi cutiblemence dos raíces: la trasformación de la clemocraoa
parlamentaria en una demomcia de masas y la transición de una eco-
nomía en la que preclotnina la competencia a una econom~a predomi-
nantemente organizada. Si bien esas tendencias son con oadas y p ro-
gre an ante nuestros propios ojos, no implican de modo necesario upa
a ·unción del poder político por parte de las burocracias. El incremen to

!l3 R. A . Brady. Business as a System o[ POOJer, Nueva York, 1943, representa un

primer intento, aun cuando imperfecto y mecanidsta . En este punto debe m en cio narse
la monografía 9 26 del T .EC, Eco11omic Power and Political Pressures.

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 FRANZ NEUMANN
26
( razones para suponer que, de no h aber existido aquélla o de h aber resul-
tado victoriosos los nazis, hubi era prevalecido el esquema soviéúco.
Las reacciones ante el pap el crecien te del pader político son E_Qr
lo general hostiles. La más n otable es la tentativa de atribuir este fenó-
me~~ocraaa. Esto es, desde fUeSo, esencialmente conecto, p or
cuanto, tal como lo hemos indicado, la democracia tiene sin d uda u n a
actitud positiva hacia el poder político. Con todo, esa afirmación, ele
ningún modo meramente científica, sino cargada de tonalidades polí ticas
de gob1e~no p uede o no expresar con veracidad la distnb
definidas, po ee un significado más amplio. En ella está implícita la
no_ción de q}!_~._Eor su dinámica interna, el creciente p oder político será _
obj~t9 de abusos y_ en última instancia conducirá a un sistema totalitario.
La crítica moderna reanuda en este unto la crítica tradicional no al
__E9der _EOlítico, sino a Ja democracia. Se resucita a Maistre y a Bonald-.
gm n es su dueno o cuales son su s funcion es Todas •
Éstos, procedentes de la tambaleante psicología de la m aldad esencial del les tradicionales son negativas Limitan!. . .,.,_ellas concepa
hombre, afirman la inevitable trasformación de la democracia en el go- minan Est , . as act1v1u.a es pero n
bierno del populacho, que, unido a la tendencia m oder n a del interven- rnínim~ de ;roC:c~~~ a~eci~~a~:n~s [;~cirst~meednte ei que " r
cionismo estatal, debe cul'minar en el totalitarismo. El r emedio consiste la con e · ' d 1 · g e manera e pe
c pc10n e a soberanía ex terior término q 1 h
en algún tipo de gobierno aristocrático. _!]na segunda r eacción considera evitado. No indica quién es el d - • ue la ta a
que la burocracia es enemiga de la libertad y trata de rote er la demo- puede utilizarse o no ese pader- ra:en_ol ddell _p~der soberano ni P
. . • so o e 11IUta el pader de
cracia identificándola con la li ertad individu al contra el Estado.
terntona1 con respecto a cualquier otra L . t n
Ambas reacciones se basan en la llamada traCficiÓn de la civilizacióill se forma de manera exact . · _ a concepc:_ón_ d~ J>!_~
occidental (cuyo pretendido meollo es la hostilidad fren te al poder polí- giedad ni su función ~oci:f1~~te ¿}u al. N o revela el objeto de l
tico), tal' como se expreAA en el constitucionalismo. T rá tase d e una verdad ejerce sobre u~arte ext~o; ~e ~aP-rotege el control gue el
sólo parcial y, por lo tanto, falsa. La tradición d e la civilización occi-
dental e má compleja. Hemos aludido a su riqu eza cuando i ntentamos.
clasifi.car las diversas actitudes hacia el poder polí tico. Puede decirse,
por cierto, que _la~gría rousseauniana es un elemento d e la tradición
política de la democracia más importante que las doctrinas esencjalme~e
.aUWCoñtradíctOrias-y~-ITDitrar1asae Locke y del derecho n atural. J:!Q
cabe dud~ de c)üe-d-pocíer 2olíuco (sea democrático, aristocrático o·
monárquico) _puede_ser__q12jeto de abus~ perg_ <oS _dudos_Q_
24
qi±e ~L~gi.:­
tucionalismo pueda refrenar con eficacia los abusoo. El problema de
Ja democracia moderna estriba mucho menos en el cercamiento del poder
palítico que en su utiliza~ó_n ra~<?~l_y_~ la ad_oJ?_g.~ -~Erovi4_encias.
para que la masa participe de manera ~fect!-v~ !?_s_u ejercicio.

y_._ ldent.ifi_~ación del p~olitico

En la Unión Soviética son pocas las dudas acerca de dónd e reside et

poder político. En la Alemania nazi, después de junio de 1934, era
igual mente claro que el partido monopolizador concentraba todo el poder
político. En una democracia liberal (y de manera general en los sistemas
"s v ·
rt>produci~:s~nmeist~nltr~:oucción a M ontesquieu , The S/n of th
constitucionales la identiEicación del oder olítico resulta e ·11

20 Car! Schmitt, Polit isch e Theologie, Leipz1'g, 1931 , p.íg, 11 .

2•1 Edwa rd S. Corw in , IJb erty against G01Jernment, Baton Rouge, 194B.

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 28 FRANZ NEUMANN
EL EnAoo DEMOCRÁllCO y fl. f-'ífAOO

-j Rohm, de los generales y de otros más, resultó perfectamente claro que

el partido había logrado monopolizar el poder pol!tico. . Charles S. Peirce, uno de los fiJó ,ofo, m , mt
r' Umdos, formuló ele manera notable .
Los estudios ele este tipo h an ~ido descuidados. Se los lleva a cabo Fixation of .BeJief". t:>t" c<m e1' n
sobre todo en términos ele derecho constitucional, pero raras veces se
utilizan en ellos ca tegorías polí tico-sociológicas.

VI. Po_d'er político y libertad

Al comienzo insis t í en que el poder político no es comparable con el
co ncep to ele energía en física ni constitu ye la única concepción de la
ciencia política. Con todo, la formulación originaria, poder contra idea,
es demasiado ideológica. Si la historia fuese un conflicto entre grupos
_ik__r-oder e ideas, éstas se verían invariablemen te derrotadas. La política
_ es, por cierto, el conflicto entr_e grupos~ ~_¡:r,_ y_ )os_Eonflictos _se
resuelven con la victoria y la derrota o con la conciliación, es decir, el
. compromiso ~ Pero:-e-n su ·lucha por. el p.oder, - un- grupo quizá represente
a lgo más que un in terés particular : puede muy bien representar la idea
d e~. idea decisiva ele la teoría política. Si se analizan las leyes de
inmigración, por ejemplo, y se llega a la conclusión de que los grupos
empresarios presionaron para liberalizarlas, a fin de asegurarse una mano
d e obra m:ís barata, se habrá cumplido sin duda una p arte, mas sólo
una , d e la carea que incumbe a los estl,!diosos de ciencias políticas.
lgu al importancia tiene el análisis del papel que representaron las leyes
de inmigración en el desarrollo histórico de los Estados Unidos. La tarea
ele la teoría política consiste pues en determinar el grado en que un grupo
d e poder trasciende sus intereses particulares y a boga (en términos hege-
liano) por los intereses universales.
Es ta determinación no es en modo a lguno fácil. De hecho, la dis-
tinción entre icleolmria y verdad se hace cada vez más dif;cil. . Parte d e
la dificultad esu·iba en el carácter ideológico (analizado a~
adquiere la r-olitica en una democracia, pero, en última instanci a, surge
del tremendo peso del poder en la llamada opinión pública. Cada sis-
tema político inculca en la población las costumbres del gru po gober-
nante. Cuanto mayores son las tensiones, más severas se hacen las im-
posiciones. El individuo recurre enconces a m u chas formas d e di simu!Q,
•, en ciertos peliodcs de la historia, el mentiroso ~e conv ierLe en héroe.~
La mentira (en sus múltiples formas) llega a constituir la protecció n
del indi viduo contra un sistema universalizado de propaganda. Por esta
razón soy e~céptico con respecto al valor de las diversas técnicas, a lta-
mente desarrolladas, para medir las actitudes y en particular a quell as
que pueden poner en cela de juicio los cimientos de una sociedad con-
temporánea. George Orwell, en 1984, su obra por otra parte brillante,
pa a por aJco el hecho de que la compulsión ac tú a donde quiera que
exista el poder político.
2S Ch arles Sanders Peirce 'The Fixation of . •
® Es10 e muy noiable en las novelas de Stendha l.
co~pila~o por Justus Buch ler'. Nueva York 1940B eüef ..., en- Tht• Pl11/1 "'
onginanameoie en P<>pultrr Scit:nce Mo111hly, 1877: pdg. -O FJ Jll 1 11lu ru

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