Para los dos corceles que hacen mi vida un 20% más genial: Gareth y JM

CAPÍTULO 1

El último y más grande

Era casi medianoche en Ponyville pero aún ningún poni estaba en la cama y
todos tenían la misma razón para quedarse hasta más allá de su hora de dormir:
sólo faltaban cuatro míseros minutos para que llegase la hora.

Hora de la aventura más épica jamás lanzada “¡Daring Do y el Volcán del

Destino!”— ¡No puede ser, no puede ser, no puede ser! —dijo Rainbow Dash,
una pegaso azul con una melena multicolor como el arcoíris, se mordió los labios
y empezó a caminar alrededor del césped, afuera de la librería de Ponyville.

A pesar de que tendría el precioso libro en sus cascos en menos tiempo del que le
tomaba a su amiga Pinkie Pie hacer una fiesta (su récord actual era de cuatro
minutos, diecisiete segundos), Rainbow Dash todavía se sentía tan nerviosa por
la anticipación qué podría explotar –se vería tan impresionante como un arcoíris
de fuegos artificiales, Sin embargo, no tenía tiempo para eso, no ahora, no en la
noche de lanzamiento del libro de aventuras más increíble de todos los
tiempos. Además, si explotaba, perdería su lugar en la fila.

Tres minutos más, pensó, ¡casi nada! Sin embargo, parecía una eternidad para la
mayor fan de Daring Do en toda Equestria— ¡¿podrían ponis apurarse allí?!
—Rainbow grito mientras miraba por la ventana de la librería— ¡Necesito el
libro ahora mismo! —la luz estaba encendida y había un poco de movimiento en
el interior, pero por el momento el cartel de CERRADO no se voltearía a
ABIERTO.

Posters gigantes de Daring Do adornaban las ventanas de la tienda, mostrando a

la famosa pegaso aventurera vistiendo su atuendo característico -un casco safari
color caqui y una camisa color verde oliva. En la nueva portada del libro se la
mostraba parada en la entrada de un volcán con burbujeante lava al rojo vivo, las
palabras superiores llevaban el título del libro: Daring Do y el Volcán del
Destino y debajo de la cubierta, el cartel leía:

¡VENTA DE MEDIANOCHE!
¡OBTEN TU COPIA ANTES QUE CUALQUIER OTRO PONI!

Rainbow rió mientras miraba la multitud detrás de ella, en pocas horas había
crecido tanto qué parecía que doscientos ponis estaban allí y ¡Gracias a Celestia,
ella era la primera en la fila! Ningún otro poni amaba a Daring Do tanto como
ella y para demostrarlo había estado acampando desde la mañana, traía todos los
libros de Daring Do con ella y había pasado el día releyéndolos por lo que podría
tener las historias extra-frescas en su mente y cuándo la medianoche llegase, no
tendría que esperar ni un sólo tic del reloj para averiguar qué pasaría con Daring
Do ¡Esto, iba, a, estar, genial!

La serie de libros de Daring Do se había vuelto muy popular últimamente y

Rainbow sospechaba que era mayormente debido a ella, después de todo, ella era
la creadora de tendencias más importante de Ponyville y no por nada los demás
ponis la buscaban por cualquier cosa asombrosa o genial, era natural que la
librería decidiese que fuese un evento especial, incluso había cerrado temprano
para preparar las festividades.

Algunos de los ponis en la fila llevaban trajes de Daring Do hechos en casa y

algunos masticaban los dulces de la carreta de Applejack, pero todos ellos tenían
una cosa en común: estaban más allá de la emoción por continuar leyendo sobre
Daring Do y sus emocionantes aventuras.

— Lleven sus buñuelos de manzana... ¡del destino! —Applejack dijo y trotó a

través de la fila con una bandeja de golosinas a la venta— frescas manzanas con
caramelo... ¿de la perdición?

— Hey, ¿Applejack? —Rainbow le pregunto a su amiga, para ella se veían sólo

como golosinas normales— um... ¿Qué estás haciendo?

— Supuse que podría tratar de hacer que mis delicias de Sweet Apple Acres
sonaran como a Daring Do tanto como fuera posible —explicó Applejack, agarro
un mini pastel de manzana y se lo pasó a Rainbow— ¿Pie de manzana del
Destino? ¡Es el último!
— Gracias, pero no —dijo Rainbow empujando lejos el bocadillo— ¡Ya casi es
hora!

Plot Twist, una poni terrestre color amarillo con una melena naranja quien era
dueña de la librería, empujó su cabeza por la puerta para contar a los ponis en la
fila— ¡Sí que hay muchos lectores!—observó con deleite, era divertido ver a
tantas jóvenes potras y potros interesados en la lectura— ¡Ponis, estamos casi
listos! —Plot Twist le gritó a la fila y se alegró de haber reclutado a Pinkie Pie
para ayudarla con la fiesta, esperaban una gran multitud pero nada como esto,
necesitaba toda la ayuda que pudiera conseguir.

— ¡Oh, no! — Rainbow replico— ¡Esto está tomando una eternidad!

— Hola, Rainbow —la llamo Pinkie Pie asomando su espesa melena fucsia por
la ventana.

— ¿Estás muy emocionada, tanto que sientes como si fueses a estallar como un
arcoíris de fuegos artificiales por la feliz y súper burbujeante alegría, ya que
ahora serás la primera en conseguir el nuevo libro de Daring Do?! ¿Lo estás?
¿Estás?

— ¡Así es! — Rainbow asintió— ¿ahora podemos continuar con este

espectáculo? ¡Tengo una historia que leer, tengo que saber lo que pasa con el Dr.
Caballeron! ¿Es el Volcán del destino su guarida secreta? ¿O es sólo un señuelo
para distraer a Daring de encontrar el establo Secreto de Crickhowell? —con
cada palabra Rainbow se acercó más a la cara de Pinkie como si estuviese
interrogándola.

Pinkie se encogió de hombros y sonrió ampliamente— no lo sé, pero no pasará

mucho tiempo antes que lo sepas. Sólo le estamos dando los toques finales a la
réplica del templo de Ahuizotl que hicimos ¡está construido completamente de
libros! ¿No es eso totalmente lectorifico? —sus ojos brillaban de alegría.

— Sí, sí, muy genial pero dense prisa —Rainbow dijo trotando en su lugar, había
estado esperando por tanto tiempo que sus piernas y alas estaban empezando a
acalambrarse y puesto que había estado esperando sola, ni siquiera había tenido
una oportunidad para un vuelo de descanso.

Había intentado que sus amigas fueran pero ninguna de ellas había querido
esperar todo el día, Fluttershy y Rarity habían pasado a visitarla pero tenían que
atender a algunas cabras recién nacidas y terminar de coser sombreros
respectivamente, Twilight también amaba a Daring Do (ella fue quien la había
introducido en la serie originalmente), pero había decidido esperar hasta que su
copia llegara en el correo de la mañana siguiente, murmuró algunas tonterías
acerca de la necesidad de dormir para poder levantarse temprano y estudiar antes
de que su libro llegara, dijo que la lectura iba a “distraerla” así que lo mejor sería
terminar su trabajo en primer lugar.

¡Era una tontería! ¿Qué podría ser más importante que esto? Al menos Applejack
y Pinkie estaban allí, incluso si se trataba trabajo— ¡Sólo falta un minuto! —
Rainbow Dash le gritó a la fila, su llamada fue recibida con aplausos y el sonido
de la multitud provocó algo dentro de ella ¿cientos de ponis observándola? ¿Fans
emocionados? ¿Un minuto en el reloj? ¡Era más que suficiente para hacer una
gran entrada a la LIBRERÍA! Sí volaba a la puerta justo en el ángulo correcto...
si, si podía hacer eso y ¡lo haría por Daring Do!

Rainbow se volteó hacia el hermano mayor de Applejack, Big McIntosh, quien

estaba en la fila detrás de ella, llevaba un sombrero de Daring Do y masticaba un
pedazo de heno, tendría que confiar en él para mantener su lugar— ¡Cuida mi
lugar, Big Mac! — gritó.

— Síííp —dijo, asintiendo con su crin color naranja claro.

— Hey, fans de Daring Do ¡Vean esto! —gritó Rainbow.

Todos los ponis comenzaron a murmurar ¿ahora qué locura iba a hacer Rainbow
Dash? ¡La tienda estaba a punto de abrir!

Rainbow giro en el aire batiendo sus alas tan fuerte como podía y salió disparada
hacia la distancia con un arcoíris detrás de ella, tan brillante que era visible en el
cielo nocturno, sucedió tan rápido que sí un poni parpadeó se lo perdió.

— Hey, ¿a dónde fue? —preguntó Apple Bloom, apuntando al cielo— no la veo

por ningún lado.

— ¡Ahí está! —chilló Sweetie Belle con su pequeña vocecita— ¡se dirige
directamente hacia la puerta!

Arriba en el cielo, Rainbow Dash podía ver el cartel en la puerta, esta seguía
cerrada, pero si había calculado el tiempo correctamente, todo saldría
perfectamente. Ella sería la primera en conseguir el libro y lo haría con estilo.

— Daring Do ¡ahí vooooooy! —Rainbow gritó mientras completaba un perfecto

giro triple a través del cielo dejando tras de sí una estela arcoíris y se abalanzó
como un piloto kamikaze, todos los ponis en la fila contuvieron el aliento ¡estaba
peligrosamente cerca de la tienda!

¿Va a chocar contra la puerta? Apple Bloom y Sweetie Belle protegieron sus ojos
con sus cascos. Varios ponis quedaron boquiabiertos cuando Rainbow se
precipitó hacia adelante a punto de chocar y en el último segundo ¡la puerta se
abrió!

— ¡Voooy a entraaar! —Rainbow Dash gritó cuando se lanzó a través, pasando

muy cerca de Plot Twist, quien había ido a saludar a los ansiosos fans.

¡Bang! ¡Boom! ¡Crash!

Cuando el polvo se asentó, todo lo que quedaba de la gran réplica de la torre del
templo de Ahuizotl era una gran pila de libros con una pegaso arcoíris en el
centro. Aunque el truco de Rainbow había arruinado la pantalla, era una buena
noticia que los libros estuviesen allí para suavizar su aterrizaje, al menos eso se
dijo mientras miraba la destrucción. A veces era necesario un pequeño sacrificio
para lograr algo impresionante, por lo que la compensación valía totalmente la
pena.

Plot Twist frunció el ceño, era evidente que no estaba de acuerdo— ¡Mi pantalla
está arruinada! —Plot Twist gritó, lanzando sus cascos al aire, Rainbow río
débilmente mientras se levantaba y los libros caían de ella— vaya, lo siento por
eso, sé que se veía genial —entonces recogió un libro, dejó caer sus bits en el
mostrador y despegó hacia Cloudsdale para leerlo durante la noche.
 CAPÍTULO 2

La paciencia es un problema

— Y entonces, ¿qué con la parte donde Daring se precipitó a través de la enorme

barricada que los secuaces habían construido? ¡No puedo creer que lo hizo!
Incluso cuando estaban bloqueando la ruta de la piedra secreta que abriría las
puertas ocultas que llevaban al camino del Volcán del Destino —Rainbow gritó y
extendió sus alas de par en par con entusiasmo, su voz era tan fuerte que
cualquier poni dentro de un radio de cinco kilómetros en el Parque de Ponyville
podría haberla escuchado, las únicas veces que había gritado tanto fue cuándo
había realizado la Reimplosión sónica o cuándo vio a uno de los Wonderbolts
hacer un maravilloso truco nuevo.

— ¡Alerta Spoiler! La, la, la... —Twilight cantó mientras sostenía sus cascos
sobre sus orejas, sacudió la cabeza hacia atrás y hacia delante en señal de
protesta.

— Uh, ¿Twilight? ¿Qué estás haciendo? —Rainbow preguntó, levantando una

ceja escéptica— ¡¿No quieres hablar de cuan impresionante es el libro?!
Especialmente la parte donde-

— ¡No!—Gritó Twilight, suavizó su tono y añadió— lo siento, quiero decir no,

no más spoilers, ¿por favor?

— ¡¿Todavía no lo has terminado?! —Rainbow se quejó haciendo un giro

dramático antes de caer al suelo— ¡esto es lo peor! pensé que de todos los ponis
en Equestria ¡tú ya estarías terminando de leerlo! de todas formas, ¿Qué no los
cerebritos cómo tú miran los libros y absorben lo que hay en ellos? —ella
suspiró.
Twilight sonrió, a veces Rainbow decía cosas que sonaban duras pero en el fondo
realmente eran cumplidos, cada vez que llamaba a Twilight una cerebrito,
realmente quería decir que pensaba que Twilight era inteligente.

— Bien, puedo acelerar la lectura, pero este es un libro qué realmente quiero
saborear y disfrutar —Twilight levantó su copia— ya sabes no todos los días sale
uno nuevo.

¡Por supuesto que lo sabía! sólo había estado esperando esta aventura de Daring
Do ¿por cuánto? ¿Meses?— ¡Hey! ¿Qué es eso y por qué no tengo uno? —
Rainbow señaló el marcador de Daring Do atrapado entre las páginas, atravesaba
alrededor de un tercio del libro y tenía la forma de la famosa reliquia del primer
libro de la serie, la Piedra de zafiro, realmente era muy lindo— los venden en la
librería, puedes tener este si quieres —ofreció Twilight pasándoselo a Rainbow,
claramente tratando de compensar su decepción.

— Nah, está bien —dijo Rainbow, devolviéndole el marcador, era un bonito

gesto pero su problema número uno todavía no estaba resuelto, ahora necesitaba
encontrar a algún poni que hubiese terminado de leer el libro, para poder ir por
todo el increíble material nuevo que había sucedido en la historia— ¿Cómo se
supone que voy a hablar de las partes más dinámicas de la historia si nadie lo ha
terminado todavía? —se quejó.

— Lo siento, Rainbow —dijo Twilight tomando asiento en su banco favorito del

parque— pero me voy a tomar mi tiempo —abrió su libro y se acomodó para una
lenta y relajada sesión de lectura— supongo que la lectura es otra de las cosas
que muestra lo rápida que soy y lo lento que es cualquier otro poni —Rainbow
murmuró antes de despegar hacia las nubes— la historia de mi vida.

Fluttershy, quien lideraba un grupo de patitos hacia el estanque del parque, paso
delante justo cuando Rainbow despegó y pudo notar la mirada de consternación
en el rostro de Twilight, por lo que hizo un pequeño desvío— alto ahí, queridos
—la pegaso amarilla arrulló a sus seguidores emplumados— sólo voy a estar un
pequeño momento y luego iremos por ese pequeño chapoteo como prometí —los
patitos respondieron con pequeños y felices cuacks.

— Hola, Fluttershy —dijo Twilight, sin dejar de mirar al cielo con preocupación,
arriba en el cielo, Rainbow pateo una nube con tanta frustración que desapareció
en un poof, frunció el ceño y miró a otro cumulo esponjoso para descargar su
enojo— ¿hay algo malo con Rainbow Dash? — Fluttershy preguntó, mirando
hacia el cielo— parece... un poco decaída.

— Ella quiere hablar sobre el nuevo libro de Daring Do, pero ningún poni ha
terminado de leerlo todavía —Twilight explicó frunciendo el ceño con
preocupación.

— Oh, yo apenas empecé a leerlo —dijo Fluttershy— pero tuve que dejar de
leerlo para cumplir con los deberes diarios de mis patitos. ¡Es bastante bueno
hasta ahora!

— Sólo deseo que hubiera algo que pudiéramos hacer para ayudarla, es
grandioso ver a una poni tan emocionada por la lectura —Twilight suspiró —si
fuese a mi manera, los ponis leerían todo el tiempo y después tendríamos
reuniones y discusiones sobre lo que hemos aprendido mediante un intercambio
de ideas.

— Entonces, ¿por qué no haces eso? — Fluttershy preguntó— ¡parece divertido!

— Fluttershy, ¡es perfecto! —Twilight respondió poniéndose de pie— vamos a

planear un club de lectura sobre Daring Do y podemos realizarlo en la biblioteca,
entonces Rainbow podrá hablar de los libros tanto como quiera.

Rainbow voló tan rápido que ni Fluttershy ni Twilight la vieron llegar— al fin
¡eso es de lo que estoy hablando!—celebró realizando una pequeña voltereta
hacia atrás— por cierto, estaba escuchando toda la conversación.
 CAPÍTULO 3

Sociedad de la Biblioteca Golden Oak

Unos días insoportablemente largos después, el deseo de Rainbow Dash estaba a

punto de hacerse realidad con el ¡Club de Lectura Nocturno! No sería nada más
que hablar de Daring Do toda la noche. Para el momento en que Rainbow llegó,
la casa de Twilight Sparkle ya estaba estallando en sus ramas con los ponis que
recientemente habían terminado de leer Daring Do y el Volcán del Destino.

Todos habían venido preparados para la primera reunión de la recién creada

Sociedad de la Biblioteca Golden Oak, uno a uno, se presentaron en la biblioteca
agarrando sus copias del libro y charlando animadamente sobre su contenido.

Rainbow Dash se sentó en la parte delantera, observando cómo se llenaba la

habitación. Esto iba a ser asombroso.

Plot Twist y Berry Punch caminaban juntas, seguidas por sus amigas Lyra
Heartstrings, Bon Bon y Wild Fire, todas llenaron sus tazas con sidra de la mesa
de refrescos de Applejack y tomaron asiento.

— ¡Daring Do es una heroína tan emocionante! ¡La amo! —dijo Berry Punch.
— ¡Ha sido el mejor libro hasta el momento!—dijo Plot Twist— vendimos
completamente todo en la primera hora de ventas —Bon Bon asintió con la
cabeza— el próximo lanzamiento del libro tendrá que ser aún más grande.

—Totalmente —agregó Wild Fire con voz monótona, la poni de melena marrón
llevaba un flequillo de bordes rectos que colgaban sobre sus ojos y ocultaban su
expresión y aun así era lo más emocionada que alguna vez la hubiesen visto.
Pinkie Pie apareció de la nada— etiquetas para su nombre, ¡¿alguien?! —le pasó
a cada asistente una pequeña etiqueta roja que decía:

HOLA, YO SOY... _________

Pinkie ya llevaba uno, pero en lugar de su propio nombre, había escrito:

HOLA, YO SOY EMOCIONADA...!

— ¿Estás emocionada?—preguntó Bon Bon, rascando confundida su melena azul

y rosa— ¡Seguro lo estoy! —Pinkie respondió con una sonrisa— ¿tú no?

— Estoy confundida—Bon Bon respondió, ella ya conocía a Pinkie Pie— eres-

—Estoy emocionada de que estés aquí, confundida —dijo Pinkie pasándole a ella
y a Lyra algunas etiquetas para su nombre. Ambas ponis se encogieron de
hombros.

— ¡Siento llegar tarde, queridas! no estaba segura de que debía llevar a una
sociedad de biblioteca — Rarity anunció apareciendo por la puerta— pero me las
arreglé para encontrar algo —llevaba un conjunto colegial, que consistía en un
suéter sobre una camisa de cuello, gafas de montura y su alforja estaba llena de
plumas y cuadernos, sin duda podría haber pasado por una estudiante de la
Mythica University— nunca he probado el aspecto libresco, pero creo que
realmente funciona en mí, ¿no?

— Creo que te ves muy bien, Rarity —dijo Spike, sacando su cabeza fuera de
otra habitación, antes que Rainbow pudiese añadir sus dos bits sobre el atuendo
de Rarity, Fluttershy entró y un pequeño gusanito verde la siguió, llevaba gafas y
un pequeño casco de Daring Do, se escabulló adentro moviéndose casi más lento
que Tanque “la tortuga mascota de Rainbow Dash”— espero que este bien traer a
mi amigo William Wormsworth —dijo con tono suave— es un gusano de los
libros, ama tanto los libros que me rogo que lo trajera —William sonrió y escalo
a la parte superior de una pila de libros de Daring Do.

—Por supuesto —Rainbow dijo ansiosamente— es un placer conocerte, pero por

favor ¡siéntate ya para que podamos seguir con esto! —se sentía como si todos
los ponis se moviesen lento y a propósito para frustrarla ¿Dónde estaba el
ajetreo? pero aun así, Rainbow estaba feliz de ver que todas sus amigas se
hubiesen presentado a la reunión.
La discusión estaba obligada a ser realmente ardiente y no sólo porque iban a
hablar del Volcán del Destino sino porque iba a impresionarlos a todos con su
nueva teoría. Rainbow estaba bastante segura de que el volcán del Destino se
convertiría en la guarida secreta del profetizado incondicional corcel de
Neighples en el próximo libro.

Seguramente, nadie más había hecho la conexión entre el recién recuperado

antiguo mapa de la fortaleza subterránea del Monte Vehoovius en el capítulo
cuatro y su similitud con el mencionado en Daring Do y cáliz del Grifo. ¡Tenía
que ser el mismo! lo sabía.

— Muy bien, ¡todos encuentren un asiento y vamos a empezar! —Twilight

anunció, tenía un tic en su ojo, claramente anticipar una noche entera hablando
sobre libros con sus amigas la había llevado a casi el mismo nivel de entusiasmo
que Rainbow Dash.

Twilight ciertamente había trabajado duro para hacer del evento algo muy oficial,
la habitación estaba dispuesta de manera que los ponis podían sentarse en un
semicírculo como en un salón de clases pero más informal, las ahuecadas paredes
del árbol cubiertas de libros y una gran pizarra con la lista del orden del día
creaban un ambiente agradable.

— ¡Bienvenidos! —Twilight hablo— estoy muy contenta de que estén aquí para
compartir la alegría de la lectura conmigo, en mi opinión, no hay suficientes
eventos en Equestria puramente creados en celebración de los libros y
especialmente de la serie de ¡Daring Do! —por una vez, Rainbow Dash estuvo
plenamente de acuerdo y ni siquiera le importaba si eso la hacía una cerebrito.
 CAPÍTULO 4

El reto doble

Pinkie Pie se retorció en su asiento junto a Rainbow Dash como si estuviera

sentada en un montón de hormigas, excepto que tenía una enorme sonrisa en su
rostro— ¡Oh increíble, Rainbow! ¡Debes estar tan emocionada! quiero decir,
Daring Do es como que tu personaje poni favorito de siempre y estamos a punto
de pasar horas hablando de ella ¿Qué estás pensando ahora mismo? ¿Qué estás
siiintiiiendooo? —se inclinó hasta que estuvo a unos centímetros de la cara de
Rainbow.

— Estoy pensando que quiero hablar de Daring Do y me siento molesta porque

todavía no lo hacemos —dijo Rainbow sin expresión— genial, genial, bueno, eso
es genial —Pinkie asintió mientras escribía algo en una libreta— ¿Y eso
cómo te hace sentir?—apoyó la barbilla en su casco—¡Pinkie!— la regañó
Twilight— ¡Estamos empezando! Shhhh.

— ¡Considera mis labios sellados! —Pinkie saco una cremallera de la nada y se

la pego a la boca.

— Así que...— Twilight señalo su pizarra que estaba llena de toneladas de letras
y diagramas— realice una pequeña investigación sobre cómo dirigir una reunión
en un club de lectura —explicó con entusiasmo— el número uno en la agenda
debe ser la introducción de cada miembro del grupo.

— Creo que ya todos nos conocemos — Rainbow replicó— ¡cambiemos de

tema!
— ¡No-oh! —Pinkie dijo y la cremallera cayo de su boca, señaló a Bon Bon—
¡¿todavía no conoces a Confundida?! — Bon Bon negó con la cabeza derrotada.

Twilight ignoró el intercambio— estaaa bieeen, así que si nos saltamos esa
parte... lo siguiente debe ser un rápido resumen de cada capítulo del libro para
refrescar la memoria del todos, luego pasaremos a las interpretaciones generales
del texto y su significado y por último pasaremos una lista de preguntas para su
discusión con un descanso de diez minutos a la mitad, así que por favor esperen
hasta entonces para visitar mesa de bocadillos de Applejack.

Rainbow Dash miró alrededor de la habitación, una revisión rápida a las caras
escépticas confirmó que no era la única que pensaba que el horario de Twilight le
quitaba toda la diversión, Rarity estaba ocupada inspeccionando su nueva
pedicura, Bon Bon miraba por la ventana y Lyra Heartstrings estaba encorvada
sobre su silla con sus cascos traseros colgando al frente de ella y mirando con
indiferencia.

Rainbow saltó antes de que las cosas se pusieran peor— creo que hablo en
nombre de todos aquí cuando digo que deberías saltar directamente a la discusión
sobre las ridículamente impresionantes secuencias de acción —Plot Twist asintió
con su ondulada melena naranja.

Applejack intervino, tratando de ser un poco más suave— creo que lo que ella
quiere decir es que tal vez deberías tranquilizarte y dejar que esta cosa fluya sola
—Twilight tenía la mejor de las intenciones, pero a veces era demasiado
perfeccionista y ahora parecía bastante decepcionada de que su programa para la
sociedad de la biblioteca no había funcionado.

Fluttershy se sintió mal, así que levantó un casco y dijo— Twilight, si está bien
contigo, a William Wormsworth y a mí nos encantaría quedarnos al final y
discutir todos los temas de conversación, por lo general el pequeño parlanchín
tiene mucho que decir —William se sentó en su silla, sonriendo pero sin decir
esta boca es mía, de hecho todavía no había dicho una sola palabra e inclinó su
casco safari hacia Twilight, como todo un caballero.

— Está bien —Twilight suspiró— tal vez deberías tomar el relevo Rainbow Dash
—encontró un asiento vacío, era una buena amiga por intentarlo pero Rainbow
estaba más que feliz por tomar las riendas de esta reunión ahora que en realidad
podrían llegar a alguna parte.
— Lo primero es lo primero: ¡no puedo creer el movimiento que Daring Do hizo
cuando se montó en la espalda de ese dragón y lo dejo ir justo cuando estaba en
el centro del campamento de Ahuizotl! Y no puedo esperar a probarlo en algún
momento. Por supuesto, voy a necesitar ayuda para encontrar a un dragón...

— ¡A tu servicio! —Spike dijo con orgullo.

Era una tontería, porque todavía era sólo un bebé, y demasiado pequeño para
realizar un truco como ese, era mejor cambiar de tema antes de que lastimara sus
sentimientos— Biien —Rainbow junto sus cascos— de cualquier manera ¡¿qué
si les digo a todos mi increíble y totalmente genial teoría sobre el antiguo mapa
del Monte Vehoovius?! —este era su momento para dejarlos con cara de ¡wow!

— Así que, como saben en el libro dos -en la página ciento sesenta y tres para ser
precisa- Daring Do está buscando la copa del grifo cuando pasa sobre una tablilla
que hace referencia a un antiguo mapa? Creo que eso —Wild Fire levantó su
pata, interrumpiendo el flujo de Rainbow— um, ¿disculpa?

— ¿Si? —respondió Rainbow, tratando de ocultar su molestia, no le gustaba ser

interrumpida y especialmente cuando estaba a punto de decir algo tan épico que
noquearía la mente de todos.

— Me gusta Daring Do tanto como a cualquier otro poni, pero ¿realmente crees
que todas las cosas atrevidas que ella hace son realistas? —Wild Fire hojeó su
copia del libro con el ceño fruncido— ¡no hay manera en que un poni realmente
pueda hacer eso en la vida real!

— Ella tiene un punto —dijo Lyra, ella asintió e inclinó su melena verde
menta— algunas cosas son bastante descabelladas —añadió una unicornio azul
sentada en la parte posterior y un par de otros ponis murmuraron en acuerdo.

— Como la parte en la que su ala está recién lesionada, ¿así que tiene que salir
por un puente de cuerda invisible para cruzar el cañón? — Bon Bon dijo,
volteando a la página de la escena en su libro— no hay forma en que un poni se
arriesgue a eso —claramente estaban perdiendo el punto de una divertida historia
aventurera, Twilight intervino con un serio contrapunto— no creo que el
propósito de los libros sea a-

— ¡¿Están bromeando?! —Rainbow gritó interrumpiendo a Twilight, sus ojos se

abrieron tanto como un par de las gigantes y preciadas zapa manzanas de la
abuela Smith— ¡por supuesto que todo lo que ella hace puede ser real! Daring
Do es la poni más valiente de la historia y no me sorprendería si fuese real—
Rainbow se hinchó de orgullo.

Twilight, Applejack, Rarity, Fluttershy y Pinkie Pie cada una le disparó una
mirada de advertencia, si no tenía cuidado, iba a hablar de más— supongo que
tendría que verlo para creerlo, es todo— dijo Wild Fire, encogiéndose un poco de
hombros.

—Bueno... tal vez tú puedas— dijo Rainbow Dash, caminando hasta Wild Fire,
la expresión en la cara de Rainbow tenía una determinación muy familiar, tenía la
misma mirada que cuando salvó a Rarity realizando una reimplosión sónica en el
concurso del mejor volador de Cloudsdale y al igual que nada se había
interpuesto en su camino para salvar a su amiga de caer, ahora nada la detendría
de probar su punto.

— ¿Ah sí?— Respondió Wild Fire de pie y desafiándola— ¿Y cómo vas a hacer
eso?— Applejack se levantó y se colocó entre las dos ponis—está bien ahora,
todos ¿por qué no simplemente nos detenemos por un segundo? Esto es sólo un
club de lectura— Rainbow Dash y Wild Fire se miraron la una a la otra. A pesar
de que las cosas se estaban calentando, ese había sido un desafío amistoso.

— ¡Oooooh, siento un reto acercándose! esta reunión ya es mucho más

emocionante de lo que esperaba —Pinkie dijo saltando— Y yo ya estaba
emocionada —señaló su nombre en la etiqueta— ¿Ves?

Rainbow se giró hacia el resto de los ponis en la habitación y se subió a una silla
para un mayor efecto dramático— Yo... ¡yo reto a cualquier poni aquí a que me
rete a hacer cualquier cosa que Daring Do podría hacer! —puso sus cascos en sus
caderas triunfalmente.

— Y yo... ¡te reto a hacerlo! —Wild Fire respondió y entrecerró los ojos— no,
¡te reto al doble! —todos jadearon, para Rainbow Dash un reto era irrompible
¿pero un reto doble? Eso era como una nueva carreta de manzanas— anotado —
dijo Pinkie.
 CAPÍTULO 5

El marcador de Daring Dash

Al día siguiente había un gran revuelo en la plaza de Ponyville, todos lo ponis se

reunían alrededor del centro, tratando de ver algo. Pinkie había tomado la
iniciativa para ayudar a Rainbow a llevar a cabo sus retos.

Pinkie permanecía con orgullo al lado de un marcador arcoíris gigante, haciendo

grandes movimientos con sus cascos y animando a todos los ponis para a ir y
escribir sus desafíos en él.

El marco estaba envuelto en brillantes nubes decorativas de algodón y decía:

MARCADOR DE DARING DASH con burbujeantes letras en la parte superior.

Las orgullosas expresiones en los rostros de las Cutie Marks Crusaders (Apple
Bloom, Scootaloo y Sweetie Belle) indicaba quien había ayudado a hacerlo,
aquellas tres pequeñas amaban los proyectos de artes y oficios, y su maestra
Cheerilee, quien tenía muchas tarjetas hechas a casco de ellas en su casa, podía
dar fe de ello.

Rainbow Dash troto y esperó a que los ponis comenzaran su lluvia de alabanzas y
adoración, pero estaban tan ocupados admirando el marcador-Dash que ni
siquiera habían notado que la invitada de honor había llegado, Rainbow se aclaró
la garganta con fuerza para llamar su atención—Umm, ¿chicos? La poni más
valiente de Ponyville presentándose, ya pueden relajarse porque ya estoy aquí—
elevo su nariz hacia el cielo y cerró los ojos.

—Oh wow, ¡es Rainbow Dash!—gritó una pequeña unicornio verde, saltando
emocionada— ¿realmente vas a hacer cualquier cosa a la que te reten?
— ¡Está aquí! ¡Está aquí! —gritó Scootaloo, ella era la fan número uno de
Rainbow Dash; llevaba un sombrero arcoíris sobre su corta melena rosa—
¡Vamos Rainbow!

— O pueden volverse locos —dijo Rainbow despreocupadamente— también está

bien conmigo —todos vieron cómo se separaba de la multitud trotando
confiadamente y se colocaba junto a Pinkie.

Rainbow vio que el marcador tenía un montón de líneas para que los ponis
pudiesen escribir sus nombres, sus retos y un lugar para marcar, verificando por
si Rainbow completaba el reto con éxito, sin embargo y a pesar de que no había
leído ninguno de los retos, no tenía duda de que pronto cada fila tendría una
marca junto a ella, no tenía miedo, después de todo sería igual a su heroína,
¡Daring Do!

— ¡Gracias por venir! —Rainbow grito a la multitud— estoy impresionada de

verlos a todos reunidos aquí para verme hacer algunas cosas increíbles —se dio
cuenta de que Twilight, Rarity, Fluttershy y Applejack entraban a la plaza del
pueblo, todas tenían miradas divertidas en sus rostros ¿Cuál era el problema?
sólo trataba de demostrar lo valiente que era.

— Pssst, Pinkie, ¿quieres tener el honor de leer el primer reto? — Rainbow

susurró— es que parece más genial si tengo un ayudante.

— Claro que sí, Rainbow —dijo Pinkie y se enfrentó a la multitud— ¡Yeguas y

corceles! la increíble Daaaaaring Dash tomará todos estos retos extremadamente
difíciles y probara que su héroe Daring Do también podría realizar las mismas
proezas que ella va a hacer!— Pinkie hizo un gran movimiento hacia el tablero
de retos.

— ¡Entonces va a defender su título como la poni más valiente, la más atrevida y

más DARING de todo Ponyville¡ —los ponis del pueblo la vitorearon y Rainbow
sonrió— el primer reto de Daring Dash es... —Pinkie hizo una pausa de efecto
dramático— cruzar el cañón letal... —Rainbow rodo los ojos, eso difícilmente
era un desafío y si ella iba a demostrar su punto estos ponis tenían que ser un
poco más creativos que eso.

—... en la cuerda floja... —Pinkie continuó, haciendo un cara dramática—¡Sin

usar sus ALAS y fuera de la guarida de las anguilas gigantes!
— ¡Muy bien! —Rainbow gritó, volando por los aires—eso es de lo que hablo,
¡todos sígueme al cañón! —Rainbow salió disparada a la cabeza a través del
cielo azul.

La multitud obedientemente la siguió, trotando a continuación. ¿Sería Rainbow

una cobarde y usaría sus alas? ¿O daría un paso en falso y correría el riesgo de
caer en las garras de una aterradora anguila gigante?

Twilight, Applejack y Fluttershy la siguieron pegadas a la parte trasera del

grupo— ¿es todo esto realmente necesario? —Twilight le pregunto a sus amigas
mientras caminaban lentamente— todos ya sabemos lo valiente que Rainbow es,
aunque a veces llegue demasiado lejos —recordó la época en que Rainbow se
había vuelto presumida después de salvar a algunos habitantes del pueblo
convirtiéndose en una heroína local. Ellas habían ideado un plan para recordarle
a mantener sus cascos en el suelo y ser modesta, claramente, esa lección
comenzaba a desaparecer.

— No te preocupes, terroncito —le aseguró Applejack trotando a su lado— creo

que hará un par de retos y todo esto habrá terminado en un dos por tres. Ahora
¡vamos!

Rarity trotó hasta unirse a ellas— bueno, si alguien entiende el atractivo de la

atención esa soy yo. Pero deberían decirle que si va a ser famosa, debería verse
diferente y un traje realmente le añadiría un toque especial.

— Rarity, no creo que eso sea muy útil para disuadirla de todo el asunto —la
regañó Twilight— sólo estaba diciendo —Rarity resopló— además, no se ve que
vaya a renunciar a su nuevo personaje en poco tiempo —en la delantera,
Rainbow estaba regresando a través de la multitud chocando cascos con todos los
ponis a su paso, hizo un giro triple y voló hacia la parte delantera del grupo—
¡cañón letal, ten cuidado!

—Parece que se está divirtiendo —dijo Fluttershy caminando junto a sus

amigas— yo sólo espero que sea cuidadosa.

— Yo también, Fluttershy —Twilight dijo preocupada, viendo como Rainbow

volaba en picado directamente al suelo y en el último segundo hacia un giro de
ciento ochenta grados y volaba a toda velocidad hacia el cielo— yo también.
 CAPÍTULO 6

Calentamiento

Había sido un día muy ocupado para Rainbow Dash y los ponis qué la seguían en
sus retos habían ido por todo Ponyville, viendo como Dash tomaba una gran
cantidad de locos desafíos. Algunos eran totalmente emocionantes -cómo cuando
Snips y Snails la habían retado a nadar hasta el fondo del asqueroso pantano
Froggy Bottom, Rainbow había terminado completamente cubierta de limo y
moco verde, pero había impresionado a todos.

Otros no eran tan emocionantes -cómo cuando Pinkie reto a Rainbow a cuidar su
globo amarillo favorito por una hora (— ¡Hay tantas cosas que podrían sucederle
si se le deja solo! Es muy arriesgado —había insistido) pero aun así, Rainbow
había completado cada tarea, sin importar el nivel de dificultad.

Rainbow despegó en el aire y sintió la frescura del viento en su melena— ¿Qué

otra cosa tienen para mí? —le gritó a los ponis de abajo, sólo faltaba una hora de
luz diurna antes de que la Princesa Luna bajara la luna sobre Equestria, pero ese
tiempo era más que suficiente para realizar algunos retos más.

Sus amigas la habían estado siguiendo todo el día, pero a medida que pasaban las
horas estaban cada vez más y más preocupadas, ya había demostrado su
punto; ¿por qué todavía no ponía fin a esta locura?

— ¿Otra vez, qué fue lo que dijiste? —Twilight miro a Applejack— ¿unos
cuantos retos y ella estará satisfecha? Mírala ¡ha pasado todo el día haciendo
cosas atrevidas como Daring Do! —Applejack se encogió de hombros— tal vez
podamos intentar un enfoque diferente para conseguir que renuncie —trotó hasta
Pinkie y le susurró algo al oído. Pinkie asintió y garabateó un nuevo reto en el
tablero.
Rainbow Dash aterrizó y trotó al centro de la pequeña multitud, apuntando su
nariz al cielo— Pinkie Pie, vamos a repasar todas las increíbles hazañas que he
completado hasta ahora.

— Oooh, suena divertido —Pinkie giró hacia el tablero de Daring Dash y señaló
cada elemento con una larga y brillante varita— primero, la cuerda floja
caminado sin alas a través del hogar de las anguilas gigantes en el cañón letal
—la multitud murmuró su aprobación.

— ¡Cómo comer un pedazo de pastel!—dijo Rainbow, chocando cascos con un

poni cercano— entonces, entraste al terrorífico y viejo granero abandonado que
está lleno de murciélagos... — Pinkie apunto el reto— ¡yo no estuve asustada ni
por un solo segundo! —Rainbow le aseguró a sus fans— en todo caso, los
murciélagos eran los que me temían.

— Awww — dijo Fluttershy, pensando en los pobres murciélagos— espero que

estén bien.

— Entonces... — Pinkie tomó un largo y profundo suspiro y luego hablo muy

rápido— ...nadaste en el pantano, cuidaste mi globo, diste vueltas en círculos
doscientas veces hasta que estuviste totalmente mareada, le distes un baño a Opal
la gatita de Rarity, llamaste a la puerta de Cranky Doodle durante su juego de
cartas, realizaste un reimplosión sónica a través de la carrera de obstáculos de los
árboles en Sweet Apple Acres y ahora, ¡estás a punto de comer los chiles más
picantes en toda Equestria!

— ¡Ooooh, siii! —Rainbow sonrió, satisfecha con su éxito y entonces registro la

última parte— espera, ¿dijiste algo acerca de chiles? —Rainbow odiaba los
chiles más que cualquier otro alimento y sólo existía una poni a la que le había
contado ese secreto: ¡Applejack!

— Si, ella seguro lo hará —dijo la poni amarilla, dando un paso adelante— chiles
de Sur-Amareica, acabo de recibir unos cuantos del mercado de Fillydelphia la
semana pasada cuando realizaba mis entregas de pasteles y el poni que me los
vendió los llevó a través del desierto de San Palomino, dijo que un par de estos
chicos alrededor del huerto mantendría lejos a los parásitos —explicó Applejack,
se inclinó cerca de Rainbow Dash y la miró fijamente a los ojos— también dijo
que un pequeño mordisco a uno de estos te haría disparar fuego directamente de
las orejas.
— ¡Al GRANERO! — Pinkie gritó, saltando emocionada— ¡Vamos por los
chiles de fuego!

— Pero... pero... —Rainbow Dash comenzó a protestar y gotas de sudor

comenzaron a formarse en su frente ¿Qué iba a hacer?— yo no como…

— ¿Siiiii? — Dijo Applejack, dando un pequeño guiño a sus amigas, Twilight

parecía esperanzada, tal vez su plan para sacar a Rainbow de todo esto de los
retos podría funcionar ya qué no había forma en que Rainbow Dash volviese a
comer un chile.

Rainbow miró a su público, de pronto sus rostros parecían estar dirigiéndose

hacia ella, como si supieran que estaba a punto de ser derrotada por algunos
pequeños, diminutos e insignificantes chiles ¡pero eso no sucedería! No ahora, no
después de haber hecho todas esas otras cosas, rendirse ahora reprobaría
totalmente su punto.

— Lo que quería decir era... —Rainbow se obligó a verse un poco más alta—
¡No me gusta el tiempo que estás tardando en darme esos chiles! —sonrió
nerviosamente y miró a su alrededor, eso pareció satisfacer a los espectadores.

— ¡¿Qué?! —Applejack respondió— ¿Estás segura? Bueno, ¡píntame la sorpresa

y llámame Golden Russet! —Applejack se sentía un poco tonta ahora que su plan
literalmente iba a ser contraproducente.

— ¡Ella va a hacerlo! — una pegaso amarilla de melena azul gritó— ¡Vamos,

Rainbow! —añadió Bon Bon— ¡Rain-bow, rain-bow! —cantó y no pasó mucho
tiempo antes de que todo el público comenzara a incitarla.

— Eso no salió como lo planeé —Applejack le admitido a Twilight, ahogando

una risa nerviosa. Al parecer, Rainbow Dash estaba tan enrolada que no dejaría
su genialidad por cualquier cosa, ni siquiera por un chile extra picante.

Tan pronto como Rainbow mordió el chile, todo tipo de cosas extrañas
comenzaron a suceder. En primer lugar, sintió como si su boca estuviese en
llamas, luego podría haber jurado que vio a la misma Daring Do entre la
multitud, por último sus orejas comenzaron a sentirse calientes y oyó la risa
maniática de Ahuizotl diciéndole que nunca podría derrotarlo, en cierto modo era
algo impresionante, tosió y unas cuantas llamas multicolores estallaron.
— ¡Miren eso! —Spike rió, aplaudiendo con sus garras— ¡ahora Rainbow puede
enviar todas las cartas a la Princesa Celestia! —le resultaba especialmente
divertido ya que él era el único que podía respirar el fuego, así como utilizar su
magia para entregar mensajes a través de Equestria.

— Muy bien, ahora, eso es todo ¡bebe terroncito! —Applejack palmeó a

Rainbow Dash en la espalda. Ella había insistido en traer a Rainbow al
interminable suministro de agua y sidra para calmar su lengua, obviamente se
sentía muy culpable por desafiarla y su plan había fallado.

— Gracias —dijo tomando un buen trago, todo parecía casi normal otra vez, de
no ser por el hecho de que su lengua ahora era un 20% más genial— nunca he
visto algo como eso —Fluttershy sacudió la cabeza con incredulidad— ¡Tu cara
se puso roja como una manzana! —añadió Applejack.

— Yo diría que se trataba más de una tonalidad de carmesí profundo —dijo

Rarity— pero era terrible.

— ¡¿Qué con esas llamas arcoíris que disparaste por las orejas?! —Pinkie
chilló— ¡Eso fue maravitastico!

— ¿Lo fue? —Rainbow replico, bebiendo de su taza— al menos impresione a

todos ¡porque los chiles eran brutales! —Twilight le dio a Rainbow una mirada
severa— eso es lo que nos preocupa ¡tus retos están comenzando a ponerte en
peligro! —Rarity, Fluttershy y Applejack observaron a Rainbow con
preocupación y Pinkie se dejó caer al comprender qué ella había estado
animándola todo el tiempo.

— ¿Qué? —Rainbow Dash tomó otro sorbo de sidra— estoy bien y además vivo
del peligro, ¡soy Rainbow 'Peligro' Dash! Ahora déjame salir a saludar a mis
fans.

— Rainbow, querida —Rarity intervino— creo que lo que está tratando de decir
es que ningún poni espera que seas tan valiente como Daring Do y tal vez sólo
deberías centrarte en ser Rainbow Dash ¿Hmm? —Rarity batió sus largas
pestañas y agitó su púrpura melena, desafortunadamente su encanto no
funcionaba en Rainbow, quien ya estaba de pie y sacudiéndose.
— Uhh, como sea fue lindo chicas, pero creo que me queda ser la poni más
valiente del pueblo y ser la mejor —Rainbow trotó hacia la puerta— pero gracias
por toda la sidra, ahora estoy lista para aún más acción.

— Me gustaba más todo esto de Daring Do cuando sólo se trataba de leer libros
—dijo Twilight con un suspiro, Rainbow Dash podría estar utilizado ese
marcador de la Piedra de Zafiro ahora mismo pero en su lugar estaba empezando
a perder el suelo de su lugar.
 CAPÍTULO 7

El asunto del día

A la mañana siguiente, Rainbow Dash se despertó con el sonido de un fuerte

trueno y asomó la cabeza por la ventana de su casa en Cloudsdale, todos los
demás pegasos estaban hechos un manojo de nervios mientras saltaban sobre las
gruesas y grises nubes para escurrirlas, con cada pulsación, grandes gotas de
lluvia comenzaban a caer en el paisaje de abajo. ¡Estaba lloviendo!

—Que gracioso —dijo Rainbow, todavía un poco aturdida— no recuerdo que

estuviese programada una gran tormenta para el día de hoy —por lo general, ella
conocía todos los cambios climáticos que se suponía ocurrirían, pero hoy estaba
distraída y fuera de onda.

Glitter Dew un pegaso púrpura de crin azul y una nube en forma de estrella como
Cutie Mark la escucho y la sobrevoló— hemos cambiado el horario de ayer, pero
ningún poni pudo encontrarte —y salió corriendo a unirse a los esfuerzos— es
sólo una lluvia matinal.

— ¿Qué estaba haciendo ayer que fuese tan importante como para perderme la
programación del tiempo? —se preguntó Rainbow rascándose la cabeza. Su
cerebro se sentía un poco borroso, había tenido un sueño extraño sobre caminar
en la cuerda floja y luego comer unos chiles increíblemente picantes, a menos...
¡que fuese real! se tapó la boca con su casco, su lengua aún se sentía un poco
entumecida. ¡Oh, no puede ser! pensó.

Los acontecimientos del día anterior le llegaron de golpe— eso no fue un sueño,
¡fue lo que hice! —dijo en voz alta, ella había pasado todo el día saltando de un
lugar a otro a través de Ponyville, mostrándole a todos que era la más valiente de
la historia y ahora era conocida como Daring Dash: sin lugar a dudas,
¡incuestionable... imparable!— ¡Gran trabajo, yo! —se dijo dándose palmaditas
en la espalda con su ala derecha.

De repente, Rainbow no podía esperar ni un segundo más para dirigirse a

Ponyville a saludar a todo el mundo y especialmente a sus amigas. A pesar de
que antes Twilight, Applejack, Rarity y Fluttershy habían sido escépticas, no
había manera que ahora no hubieran entrado en razón.

Tendrían que admitir que le había pateado el flanco a todos esos retos y nada
malo había pasado. Realmente podían ser un grupo de ponis exageradas y ahora
todo lo que tenía que hacer era sentarse y esperar a que se disculparan, y mientras
tanto disfrutaría de las alabanzas que venían junto con el título de la más valiente
de todo Ponyville.

— Lo siento, chicos —Rainbow le grito al otro pegaso— ¡tengo que ir a un

lugar! —Rainbow extendió sus alas, se alisó su melena multicolor y se entregó
un guiño rápido en el espejo, a continuación salió rumbo a Ponyville, descendió
del cielo e inmediatamente se dio cuenta de lo llena que parecía la plaza del
pueblo, al parecer la voz de sus asombrosas hazañas como Daring Dash se habían
extendido como el fuego.

Había el doble de fans que el día anterior y todos estaban reunidos con
entusiasmo, charlando y recordando sus retos favoritos, incluso algunos de ellos
vestían los disfraces de Daring Do que habían llevado a la preventa del libro pero
añadiendo pelucas arcoíris, Vaya , pensó Rainbow Seguramente tantos ponis
están aquí para verme.

— ¡¿Están emocionados por Daring Dash?! —Pinkie Pie le gritó a la multitud,

estaba de pie frente a la plataforma del tablero, su atuendo elegido era una camisa
multicolor de “ Daring Dash” y un sombrero que parecía un chile gigante,
algunos otros ponis también lo llevaban, por lo que en alguna parte debía haber
un carro con mercancía.

Por alguna extraña razón, Rainbow estaba comenzando a sentir un poco de

miedo, era confuso, la escena sin duda tenía un montón de cosas que amaba –una
multitud vitoreando su nombre, sus mejores amigas viéndola y nuevos y
emocionantes desafíos aun por realizar- pero tal vez sería mejor mantener su
entrada discreta por esta vez. Aterrizó en un callejón y se deslizó hacia el
escenario pasando desapercibida.
Unos cuantos ponis trotaron a su lado y rápidamente se lanzó detrás de una tienda
para escuchar su conversación— voy a retar a Daring Dash a una pelea a casco
con Snowflake -¡el Pegaso más fuerte de Cloudsdale! —dijo una poni rosa de
melena rizada.

— Bueno, yo voy a retarla a luchar contra una manticora —añadido un unicornio

naranja con un cactus de Cutie Mark— ¡con sus cascos desnudos!

— ¿Qué tal desafiarla a hacerse una pedicura? —sugirió con una risita su
compañera, una poni de tierra color púrpura.

Rainbow se encogió, no le gustaba como sonaba, si había algo que odiaba más
que el picante eran los tratamientos de belleza del Spa de Ponyville.

— Ooooh, ¡¿una pedicura?! —Pinkie susurró en la oreja de Rainbow— ¿Cómo

vas a hacer eso, Rainbow? ¡Odias el Spa de Ponyville!

— ¡Aaaa! ¿De dónde saliste? —gritó Rainbow, saltando hacia atrás en estado de
shock y aterrizando en la plaza del pueblo, miró confundida la plataforma, a
veces Pinkie Pie parecía moverse más rápido que ella, Pinkie se encogió de
hombros.

— ¿Ocurre algo? —dijo Fluttershy, descendiendo para unirse a ellas— hoy

pareces un poco nerviosa, Rainbow Dash.

— ¡Por supuesto que no! —Rainbow replicó a la defensiva— ¡todo es

perfecto! Mira este lugar, ¡todos me aman! —y despegó hacia el escenario,
dejando un rastro arcoíris detrás de ella, pero tan pronto como aterrizó una gran
masa de nubes negras se situaron sobre la plaza del pueblo e inmediatamente un
brillante choque de luz zigzagueo a través del cielo, la lluvia cayó y empezó a
empapar a los ponis.

— Aw ¡vamos, chicos! —Rainbow grito al cielo— ¿No podrían esperar un poco

más para hacer eso? Estamos casi en medio de algo aquí.

— ¡Lo siento, Rainbow Dash!—grito Silverstream, un pegaso gris de crin azul—

¡continua!

— ¡Gracias! —le gritó a su vez con satisfacción, incluso el Pegaso hacia lo que le
pedía, finalmente las nubes se abrieron, un fuerte rayo de sol atravesó a la
multitud y un punto en la plaza fue inmediatamente iluminado, llamando la
atención de todos los ponis.

De pie en medio no había otra que la chamán residente de Ponyville –¡Zecora!

vestía un montón de collares de oro y un conjunto de aros brillantes en sus orejas,
su pata delantera izquierda estaba adornada con brazaletes y llevaba su melena
corta a rayas color blanco y negro.

— ¿Qué ocurre, Zecora? —dijo Rainbow Dash casualmente, en verdad, estaba un

poco nerviosa acerca de la mirada preocupada en el rostro de Zecora, pero no
podía dejar que ningún poni viera eso. Zecora tenía un gusto por lo dramático y
con todas las nubes abriéndose ante sus asuntos personales no ayudaba a la
situación.

Tal vez lo que Zecora tenía que decir no sería nada del otro mundo—
¡ciudadanos de Ponyville! —exclamó con su rica y profunda voz he hizo una
pausa, como si estuviera luchando por encontrar la fuerza para seguir adelante.

— ¿Está todo bien? —Twilight se adelantó, su voz ocultaba un poco su alarma.

Zecora continuó— hoy vengo a convocar a la poni que ha demostrado ser la más
valiente...

— Oh, bueno, en ese caso, creo que estás buscándome a mí, la poni más valiente
de todo el pueblo —Rainbow se señaló a sí misma henchida de orgullo

— ¡...porque sólo ella podrá salvarnos!

Por sus cascos, tal vez era el momento de entrar en pánico, los dorados
pendientes de Zecora brillaban mientras asentía con la cabeza—Por supuesto,
Rainbow Dash debes ser la elegida, pues tus habilidades y coraje son
inmejorables.

La cebra se dirigió hacia la plataforma y unos ponis saltaron fuera de su camino

asustados: era una tontería, Rainbow Dash y sus amigas sabían que Zecora en
realidad no era una hechicera malvada como habían pensado originalmente,
podía hacer un montón de cosas-místicas, mágicas, y misteriosas- pero
maliciosas definitivamente no era una de ellas, lástima que algunos ponis
obstinados todavía se aferraban al miedo.
— Cualquier cosa que necesites, Daring Dash lo hará —le aseguró con un
saludo— así que... eh, ¿qué es lo que voy a hacer?

Zecora miró a su alrededor al grupo de ponis, con sus ojos azules llenos de
preocupación— un amuleto que nos ofrece protección fue robado para otra
colección.

— Está bien —Rainbow Dash asintió —estás diciendo que es bastante

importante y esas cosas. Lo tengo ¿Qué es?

— La preciosa reliquia de un tono dorado se asemeja al gancho de un zapato para

caballo —Zecora indicó con su casco hacia la multitud y una imagen
tridimensional de la reliquia apareció en medio de un tenue humo verde, dio la
vuelta lentamente en el aire para que todos los ponis pudiesen verlo. Un lado de
la herradura era completamente dorada y el contrario parecía oxidado y
destartalado.

Twilight Sparkle abrió la boca y dio un paso adelante— ¡¿No puede ser la
misteriosa herradura Half-Gilded?!

Rainbow Dash miró a su alrededor para ver si alguien más sabía de lo que
Twilight estaba hablando, pero sus rostros estaban en blanco. Twilight sabía
mucho acerca de una amplia gama de temas sobre sus estudios de historia de la
magia.

— ¿El qué? —Applejack ladeó la cabeza hacia un lado— ¿acaba de decir algo
acerca de zapatos dorados? —Rarity trinó— ¡ahora tienes mi atención!—ella
trotó hasta la imagen rotante de la herradura y comenzó a quejarse cada vez que
veía la cara dorada, Rarity no podía evitarlo alrededor de algo brillante.

— No es realmente un zapato, es... es, la misteriosa herradura Half-Gilded, es

como una especie de llave para el circulo Espiritual —explicó Twilight— el mito
dice que el poni que la desbloquee encontrará una habitación llena de tesoros,
pero a un gran precio.

— ¿Tesoros? —Spike preguntó con ojos brillantes— ¿cómo gemas de las

grandes?
—Tal vez... pero ningún poni sabe realmente —dijo Twilight— honestamente,
realmente pensé que todo el asunto era un viejo cuento poni.
—Gran parte de la leyenda es un enigma y la mayoría lo considera como historia
antigua —dijo Zecora— pero, yo he fracasado como protectora de la llave y por
lo tanto para enfrentar esos espectros debo prepararme.

— ¿Me estoy perdiendo algo aquí?—preguntó Rainbow Dash— una vieja y

oxidada herradura fue robada y ahora algún poni va a obtener algún tesoro —ella
levantó una ceja con escepticismo— y ¿cómo exactamente nos pone en peligro?

Zecora golpeó lejos el humo verde con su casco— los fantasmas libres serán,
cuando la llave se logre completar. Si deseas a Ponyville salvar, ¡vuela rápido y
no te desvíes!

Rainbow no estaba muy segura sobre las leyendas o los fantasmas, pero si había
algo que ella sabía, eso era volar a gran velocidad, se adelantó sin nada más que
pensar— ¡Lo haré!

La chamán suspiró y le dio una palmadita en el hombro— es un gran consuelo

que nuestra mejor voladora sea la que apague este fuego.

— ¡Por supuesto! no tengas miedo Ponyville ¡Daring Dash está aquí!— gritó
volando hacia el cielo.

Finalmente Daring Dash tendría su propia aventura digna del protagonismo de un

libro y todo lo anterior sólo había sido la práctica.
 CAPÍTULO 8

Muy adecuado

La boutique de carrusel era un absoluto caos, había muestras de tela verde tiradas
por todas partes, piezas de hilo y cintas cubrían el suelo, vasos de té a medio
beber se apoyaban sobre la mesa de costura, pero era hora de la verdad.

Rarity paseaba alrededor de Rainbow Dash profundamente concentrada— otra

vez, extiende tu ala izquierda y por favor ya deja de moverte tanto —Rainbow
suspiró e hizo lo que le pedía pero quedarse quieta no era lo suyo.

— No veo por qué tienes que añadirle algo —Rainbow se quejó— ¡mi traje de
Daring Do de la noche Nightmare es perfecto tal y como está! De hecho, no
puedo esperar para llevar a este bebé en mi búsqueda para recuperar esa tal
herradura Half-Gilded —se miró en el espejo de cuerpo entero y con su camisa
verde y su casco de safari, era la viva imagen de su heroína. Bueno, casi.

— Porque yo insisto —dijo Rarity, midiendo la camisa otra vez— si no vas a

dejar que cualquiera de nosotras vaya contigo, por lo menos tienes que dejar que
te ayudemos a prepararte para tu viaje, enserio careces de sentido común
— estremeciéndose, Rarity negó con la cabeza—¡esa es una frase que nunca
pensé que diría!

— Ya sabes, Rainbow — intervino Applejack— todavía puedes cambiar de

opinión acerca de todo esto, estamos listas para ir contigo en un santiamén, sólo
tienes que decirlo —Fluttershy, Pinkie Pie y Twilight asintieron.

— ¡Sí! Será como una fiesta —agregó Pinkie Pie— pero en lugar de serpentinas
y globos ¡habrá enormes bestias y tenebrosos arbustos espinosos! —Pinkie se
levantó y agitó sus patas alrededor como si estuviera tratando de asustarlos— y
voy a traer pastelillos, siempre hay espacio para pastelillos.
— Gracias chicas — Rainbow respondió— no es nada personal pero si voy a
mantener mi imagen como la más rápida y valiente no puedo tener un montón de
otros ponis retrasándome.

— Bueno, en ese caso, será mejor que repases toda mi investigación sobre el
Círculo Espiritual —Twilight usó su cuerno para traer mágicamente una gran pila
de libros que aterrizaron frente a Rainbow con un ruido ensordecedor— creo que
podrías estar interesada en lo que descubrí.

— Así que déjame ver si lo entendí —dijo Rainbow mirando sobre uno de sus
libros de Daring Do con la esperanza de memorizar algunos de sus movimientos
más asombrosos.

— La entrada al Círculo Espiritual sólo es posible encontrarla en... — Twilight

suspiró, ya habían hablado de esto un par de veces, estaba tratando de asegurarse
que Rainbow aprendiera todo lo que había encontrado en relación al Círculo
Espiritual pero la pegaso no sé lo ponía nada fácil— en la fortaleza Dual -sea lo
que sea- y sólo es visible una vez cada cinco temporadas... en el séptimo día de
la... tercera semana del año.

—Eso es tan al azar—dijo Rainbow fríamente, volteando una página de su libro.

— ¡Es mañana! —Twilight gritó, señalando el calendario en la pared— es muy

probable que quien tomó la herradura Half-Gilded este allí, esperando que
aparezca la entrada.

—Bueno, voy a estar lista con el movimiento que Daring Do utiliza en la escena
final del cuarto libro -el viejo cambiar 'y' volar ¡esto va a ser facilísimo! —dijo
evocando una imagen en su mente.

Se imaginó llegando a la entrada del Círculo Espiritual en el último momento,

entonces distraería al ladrón de la herradura Half-Gilded con un impresionante
truco, le arrebataría la reliquia cambiándola con un elemento de peso y tamaño
similar y luego saldría disparada hacia el cielo para volver a salvo con Zecora y
todo antes de que fuera hora de cenar, estaría a kilómetros de distancia del ladrón
para el momento en que esté se diera cuenta de lo que había pasado, no habría
problema.
—Rainbow, no olvides la parte más importante —advirtió Twilight— sí el que
tomó la herradura Half- Gilded abre la entrada ¡los espíritus saldrán!

—Sí, sí —Rainbow Dash respondió pero ya estaba pensando en su fiesta de

bienvenida y tal vez la alcaldesa le daría una medalla.

Twilight se acercó a Rainbow Dash y trató de mirarla a los ojos— y si lo hacen,

serán liberados por toda una temporada, tienes que asegurarte que la entrada este
cerrada, ¡no permitas que los espíritus salgan!

—Si, si... lo tengo... —Rainbow respondió sin pensar— cerrado y esas

cosas, todo está bien —pero por desgracia su cabeza todavía estaba en las nubes.
 CAPÍTULO 9

Entrada al Everfree

Las seis ponis, Zecora y Spike estaban en el claro que conducía al bosque
Everfree. Rainbow Dash estaba usando su nuevo traje, que gracias a Rarity, tenía
un montón de nuevos bolsillos y un nuevo juego de alforjas ligeras, además una
foto de su Cutie Mark (una nube con un rayo arco iris) estaba bordada en el
cuello de su camisa y la tela de su sombrero safari era de arcoíris.

Ciertamente estaba lista y ahora todo dependía de ella— ¿Segura que no quieres
compañía? —Applejack pregunto— me siento mal por enviarte fuera tu sola
—las seis habían estado en el Bosque Everfree más veces da las que a Applejack
le habría gustado, pero al menos habían estado juntas y era un lugar tenebroso e
impredecible.

—Por última vez, no —respondió Rainbow— ser la más valiente significa que no
necesito ningún tipo de ayuda.

—Todos necesitan ayuda a veces —ofreció Fluttershy.

—Yo lo sé —Applejack insistió— ¿Recuerdas la vez en que traté de cosechar
todos los árboles de Sweet Apple Acres yo sola?

Zecora inclinó la cabeza— Rainbow Dash ha llegado el momento y espero que

estés preparada, que tus aleteos sean fuertes y sus golpes constantes.

—Gracias y no te preocupes, Zecora —dijo Rainbow, palmeó el bolsillo que

Rarity había añadido para la reliquia— voy a traer de regreso la herradura Half-
Gilded en cualquier momento y ningún fantasma perseguirá a Ponyville sí Daring
Dash tiene algo que decir al respecto —y giró en una pose de acción (elevo su
pata derecha al cielo con las alas extendidas) Zecora parecía ligeramente
tranquila.
Rainbow Dash tragó saliva y dio un paso adelante— nos vemos más tarde,
chicas.

— ¡Espera! —Twilight gritó— ni siquiera llegamos a mostrarte tus herramientas.

— ¿Mis qué? —respondió Rainbow cada vez más impaciente.
—Cada uno de tus nuevos y prácticos bolsillos tiene algo de nuestra parte para
que te ayude en tu camino —Rarity explicó sonriendo cálidamente— vamos
fíjate.

Efectivamente, Rainbow Dash vació sus bolsillos para encontrar un trozo de

cuerda de Applejack, un mini oso de peluche de Fluttershy, algunos pastelitos
verdes (y uno una rosa) obviamente de Pinkie Pie, un par de herraduras de Rarity
y el marcador de la Piedra de Zafiro de Twilight, era el grupo más extraño de
“herramientas” aventureras que jamás había visto.

Rainbow Dash no estaba segura de cómo cualquiera de esas cosas iban a

ayudarla pero sus amigas se veían tan orgullosas, era un gesto tan bonito que
Rainbow les siguió el juego.

— ¡Te dije que siempre había espacio para los pastelillos! — Pinkie chilló— el
rosa es para ti.

—Gracias— dijo Rainbow, que ya estaba planeando deshacerse de los artículos

tan pronto como estuviese fuera de su vista, no era necesario llevar nada extra
que pudiese retrasarla -ya fuesen ponis o regalos al azar.

Metió los regalos de nuevo en sus bolsillos— ¡Ahora me voy de verdad! —

Rainbow anuncio, luego agitó sus alas y se elevó en línea recta hacia su destino.

Tan pronto como Rainbow Dash se perdió de vista, Twilight se giró hacia las
demás— ¿están listas para irnos?

— ¡Sí! —Applejack, Fluttershy, Rarity y Pinkie dijeron juntas.

Zecora se inclinó ante ellas y Spike les mando un pequeño saludo— ¡Tengan
cuidado ahí fuera y buena suerte! —dijo el dragón cuándo las cinco ponis
trotaron dentro del peligroso bosque. Estaba bastante seguro que iban a
necesitarla.
 CAPÍTULO 10

El calibre del mismo

Rainbow Dash tomó aire mientras volaba, la humedad del aire llenó sus
pulmones, era un día caluroso y el sol estaba bajo en el cielo, una suave luz
iluminaba cada roca, árbol y arbusto en el borde del bosque Everfree, era sereno,
pero sólo era una falsa sensación de calma.

En un segundo, Rainbow estaría muy dentro de él -el lugar más salvaje e

impredecible de toda Equestria, por supuesto después de la cabeza de Pinkie Pie.

Los misteriosos gusanos trinaron y las exóticas aves gritaron desde las copas de
los árboles, parecía casi como si dijeran— ¡No entres! — pero no había manera
en que Daring Dash le prestase atención a tal advertencia, ella era la más poni
valiente de todo el pueblo y estaba en una misión para salvar a Ponyville. Ahora
¿por dónde debía empezar? Rainbow miró su alrededor y contempló sus
opciones.

No había camino visible al frente y cada dirección tenía un denso follaje verde
que parecía desvanecerse en la obscuridad, se veía tan... oscuro y frío que
Rainbow se estremeció, pero rápidamente negó alejando sus dudas— ¡Soy
Daring Dash y absolutamente puedo con esto! —dijo en voz alta hacia ningún
poni.

Sus palabras cayeron planas contra los árboles y arbustos, y comenzó a darse
cuenta de lo sola que estaba, de repente, el sonido de una profunda risa hizo eco a
través de los árboles y envió escalofríos por la columna de Rainbow, tal vez no
estaba tan sola después de todo... no, probablemente sólo era un truco de su
imaginación y tenía que mantenerse en movimiento.

Sin embargo quince minutos más tarde, Rainbow Dash no había llegado más
lejos, cuándo vio el mismo árbol púrpura con raíces retorcidas se dio cuenta que
había estado volando en un gran círculo gigante.

Necesitaba un mejor plan si quería encontrar la entrada al Círculo Espiritual antes

que el ladrón de la reliquia, encontró un lugar seguro y aterrizó, no había oído la
risa tenebrosa otra vez y no había signos de nadie más, pero algo le decía que no
iba a seguir así por mucho tiempo.

— Ahora, ¿dónde puse ese mapa de Equestria? —se dijo a sí misma mientras
hojeaba su alforja— sé que esta por aquí con todas estas cosas —el par de
herraduras de Rarity cayo y aplasto uno de los pastelillos verdes.

¿En que estaban pensando sus amigas?— ¡Qué asco! —dijo Rainbow, tomó uno
de las herraduras y la arrojó detrás de ella sin cuidado, esperaba oír un ruido
sordo pero en su lugar se dio cuenta de un pequeño gorgoteo seguido de un fuerte
chasquido ¡casi sonaba como un gran conjunto de dientes¡ Rainbow Dash tuvo la
extraña sensación de que no estaba sola. Su cuerpo se congeló y lentamente se
dio la vuelta sin saber lo que el destino tenía reservado para ella, lo que vio fue
peor de lo que había imaginado.

— ¡Ahhh! —Rainbow le gritó a un enorme grupo de colossa-cocodrilos, tenían

brillosa y escamosa piel verde con grandes ojos rojos y cada uno era casi del
tamaño de un Ursa Menor.

Eran como cocodrilos normales, excepto que mucho más fuertes y muy
diferentes de Gummy, el cocodrilo chimuelo bebé de Pinkie, que estaba en su
hogar y era muy lindo.

Rainbow estaba completamente rodeada, se quedó paralizada en su lugar y

observó cómo se deslizaban hacia ella. Los Colossa-cocodrilos estaban muy
hambrientos; chasquearon sus enormes mandíbulas con dientes afilados y la
miraron a los ojos ¿Les gustaba comer ponis? No recordaba pero todas las
señales apuntaban a que si.

Finalmente tomo el control sobre ella y voló por los aires, pero la espesa cortina
que colgaba de los árboles le impidió conseguir suficiente espacio para ponerse a
salvo, todavía estaba al alcance de los cocodrilos.
— ¡Oh, no, no! —Rainbow gritó, comenzando a enojarse, voló alrededor
tratando de molestar a los cocodrilos como si fuese una diminuta y molesta
mosca.

¡Tal vez si pudiese marearlos lo suficiente, la dejarían en paz y podría escapar!

con cada zigzagueo a través de los troncos de los árboles, los cocodrilos mordían
y rompían todo a su alrededor, casi perdía su cola más veces de las que le
gustaría admitir.

— ¡Miren esto, feos cocodrilos! —gritó volando tan rápido a su alrededor como
podía. Parecía un tornado arcoíris con miembros de cocodrilo y escamas girando
de manera aleatoria en su interior.

— Eso les enseñará a no meterse con Daring Dash —aterrizó en la parte posterior
de un enorme cocodrilo para hacer una pequeña danza de la victoria— ¡Ahhh!
— gritó cuando un gran cocodrilo se dio la vuelta y la arrojó hacia las ramas de
un árbol cercano.

Se levantó e intentó despegar de nuevo pero su cola estaba atrapada. Trató de

zafarse pero nada funcionaba y el cocodrilo más grande de la manada se estaba
acercando, arrastrándose lentamente, como si estuviese saboreando su victoria,
si no se liberaba rápido pronto estaría saboreando su almuerzo – ¡una pegaso
arcoíris!

Rainbow miró a su alrededor buscando algo, cualquier cosa que pudiese

lanzarle, metió el casco en su alforja y agarró lo primero que encontró, uno de los
pastelillos verdes de Pinkie— Si estas tan hambriento ¡comete esto! —tiro el
postre horneado directo en su boca.

El cocodrilo se tragó el pastelillo, eructó y simplemente se alejó. Rainbow no

podía dar crédito a lo que veía ¡¿Qué había en esas cosas?! agarró otro y le dio
una mirada más cercana, tenía una cintilla que decía PASTELILLO
COCODRILO en ella.

Rainbow Dash lanzó otro a un cocodrilo diferente y sucedió lo mismo. Eran...

¡¿golosinas para cocodrilo?!

— ¡Pinkie Pie, eres una genio! —Rainbow gritó en el aire y Pinkie asomó su
espesa melena rosa por un árbol cercano— ¡Awww, gracias, Rainbow! —por
suerte, Rainbow estaba tan atrapada en la acción que no se dio cuenta que su
entusiasta amiga casi descubría a las demás, ¡Rainbow no debía saber que
estaban siguiéndola porque eso arruinaría todo el plan!

Después de que Rainbow Dash se había librado de todos los cocodrilos ya sólo
tenía el pastelillo rosa, así que se lo comió. Ni siquiera se había dado cuenta de lo
hambrienta que estaba hasta entonces. Tal vez Pinkie tenía razón sobre todo eso
de “hacer espacio para pastelillos”

Había sido una victoria menor, incluso si no estaba más cerca de encontrar la
herradura Half-Gilded, al menos en este momento una enorme criatura no se la
estaba comiendo para el almuerzo.

Sin embargo Rainbow tenía que apretarse el cinturón sí quería llegar al Círculo
Espiritual antes de caer la noche y sería de gran ayuda si tuviese alguna idea de a
dónde se dirigía, finalmente encontró su mapa de Equestria y comenzó a buscar
cualquier signo de algo llamado la Fortaleza Dual que Twilight había
mencionado pero todo lo que podía ver más allá del bosque eran las viejas ruinas
del castillo.

Rainbow de repente se encontró deseando que Twilight estuviese allí sin duda
ella tendría una idea de dónde encontrar la entrada o tal vez ella ya la tenía y
simplemente no la había escuchado... qué era lo más probable, de cualquier
manera ya era demasiado tarde, enrolló su mapa y siguió avanzando hacia lo
desconocido.
 CAPÍTULO 11

Una sensación de hundimiento

Hubo un atisbo de algo brillante y rojo a lo lejos, y Rainbow observo con

curiosidad cómo una masa resplandeciente flotaba y se arremolinaba a través de
las ramas antes de escapar detrás de un gran arbusto. Se parecía mucho al mágico
humo verde que Zecora había utilizado para mostrarle la herradura Half-Gilded.

¡Tal vez esto significaba que estaba en el camino correcto! Se apresuró en

dirección del humo con la esperanza de que la llevaría más cerca del Círculo
Espiritual— oye, ¡espera! —Rainbow gritó mientras volaba a su lado, aliviada de
tener una dirección que seguir, pronto encontraría la entrada, recuperaría la
reliquia y Ponyville estaría a salvo una vez más.

Rainbow llegó a un gran claro ovalado que parecía un lago pero en lugar de agua,
la tierra estaba cubierta de suave y blanca arena. Eso era extraño, Rainbow no
había visto arena como esa en ningún otro lugar excepto en la playa o en la
piscina natural.

Ciertamente nunca la había visto en un bosque pero el Everfree jugaba con sus
propias y misteriosas reglas, así que de alguna extraña manera tenía sentido.

El humo rojo se situó sobre la arena por un momento antes de continuar hacia
otro lado y desaparecer en el bosque. Rainbow estaba a punto de correr tras él
cuando le llegó la sensación de que no debía seguirlo, saltó en el aire batiendo
sus alas como siempre y salió disparada a través de la extensión.

— ¡Espera! —gritó, aunque no estaba segura de sí las manchas de humo rojo

siquiera podían escuchar algo, estaba a mitad de camino cuando de pronto ¡sintió
que caía! Era como si sus alas hubiesen sido congeladas en el aire, bajó la mirada
hacia el suelo arenoso.

Se acercaba rápidamente y no había nada que pudiese hacer, se preparó para el

impacto— ¡Rainbooow! —oyó a una voz gritar, sonaba como... ¿Applejack?
tenía que ser el bosque jugándole una mala pasada.

¡Paaaf! Rainbow Dash aterrizó en la suave arena, había sido un suave aterrizaje
y se encontraba hundiéndose lentamente, por lo que descansó un momento.

En seguida alargó su pata derecha y trato de jalar su cuerpo hacia arriba pero esta
desapareció entre los pálidos granos de arena, Rainbow lo intentó con su pata
izquierda y pasó lo mismo, cada paso que intentaba dar la hundía más y más en la
arena.

—No puede ser... — Rainbow dijo en voz alta— ¡¿...arenas movedizas?! —trató
de extender sus alas, pero no funcionó todavía seguían congeladas en su lugar por
algún tipo de magia.

Ahora, estaba a la altura de sus rodillas y si no actuaba rápido la arena pronto la

tragaría completamente— probablemente esta sea la única vez que voy a decir
esto, pero -¡Ojalá esto fuese más lento! —su anuncio fue recibido con los
familiares sonidos de la risa malvada, haciendo eco a través del claro de arena,
Rainbow miró a su alrededor desesperadamente buscando algo para sostenerse, el
borde de la arena estaba a unos diez trotes de distancia.

Recorrió el follaje y se concentró en un pequeño y resistente arbusto con fuertes

espinas, si sólo tuviese algo para llegar hasta él... tal vez podría tirar de sí misma
y mantenerse a salvo ¿Pero qué?

— ¡La cuerda de Applejack! —Rainbow gritó, brillante—por supuesto ¡es un

lazo! —por suerte la arena todavía no se había tragado su alforja, busco dentro,
agarró el lazo y lo levantó en el aire con todas sus fuerzas. Lo hizo girar en
círculos como había visto a su amiga hacer tantas veces.

Rainbow Dash gruñó mientras tiraba la cuerda hacia el arbusto, esta rebotó en las
ramas y cayó al lodo— ¡No! —Rainbow gritó, ahora estaba hasta la cintura de
arena, era mucho más difícil de lo que parecía, se hizo una nota mental para
felicitar a Applejack por sus habilidades con el lazo cuándo llegara a casa. Sí es
que regresaba.
La idea de no volver a ver a sus amigas la lleno con una nueva resolución ¡no
había forma en que ella permitiese que eso sucediera! sacó el lazo de nuevo y le
dio otra oportunidad, esta vez el lazo se enganchó en las ramas. Reunió todas sus
fuerzas y tiró, centímetro a centímetro, se tambaleó a sí misma de nuevo a tierra
firme, pero en el mismo instante en que llegó a los arbustos estaba tan exhausta
que se derrumbó en un montículo.

Esta pegaso nunca había sido tan feliz de tener sus cascos firmemente apoyados
en el suelo.
 CAPÍTULO 12

Encontrando tu lugar

Después de lo que le pareció una eternidad trotando por el bosque, Rainbow

Dash finalmente se detuvo, esto no la llevaba hacia ningún lugar y no tenía pistas
sobre cómo encontrar la Fortaleza Dual o el círculo Espiritual y estaba
empezando a preguntarse si realmente existían.

— Fortaleza Dual... —Rainbow se dijo en voz alta, mientras se sentaba en un

tronco cubierto de musgo— ¿Fortaleza Dual? Hmmm dual 'dos', así que... ¿dos
fortalezas? —Rainbow se rascó la cabeza ¿qué en Equestria era una fortaleza de
dos? Tal vez estaba más lejos de averiguarlo que antes.

Comenzaba a oscurecer y el tiempo se acababa, Rainbow estaba empezando a

sentirse cansada y muy sola, se preguntó que estarían haciendo sus amigas en
este momento.

Applejack probablemente estaba teniendo una deliciosa cena con Apple Bloom,
Big Mac y la abuela Smith, quizás Fluttershy estaba leyéndole a Angel un cuento
para antes de dormir, Twilight podría estar estudiando un nuevo hechizo con
ayuda de Spike, Rarity podría estar ocupada diseñando una nueva línea de
vestidos que involucraran bolsillos de utilidad y Pinkie Pie definitivamente estaba
horneando un pastel gigante para salir con su -sólo por diversión.

Todas esas cosas sonaban mejor que estar en medio de un bosque abandonada en
una misión sin rumbo para recuperar una reliquia de un ladrón desconocido.

Rainbow agarró el oso de peluche de Fluttershy y se acurrucó en bolita,

comenzaba a quedarse dormida cuando oyó una voz que le susurraba en voz baja.
— ¡No te rindas, Daring Dash!—, dijo— se supone que debes ser la poni más
valiente de Ponyville, no quieres hacer el ridículo, ¿o si?
— ¡No! —Rainbow se levantó y hojeó su alforja buscando su mapa. Sacó el
marcador de la Piedra Zafiro que Twilight le había dado y lo miró ¿Por qué esto
en lugar de algo útil como el lazo de Applejack o los pastelitos de Pinkie
Pie? Twilight generalmente era la más práctica del grupo.

Su regalo no tenía ningún sentido— ¡Me gustaría que esto terminara ya! —
Rainbow gritó, arrojando el marcador al suelo y bajó la mirada hacia el regalo de
Twilight— me gustaría estar de vuelta con mis amigas —sollozó, recogiéndolo y
acercándolo a ella. ¿Por qué otra vez las apartó? Si estuvieran ahí, esto habría
sido mucho más fácil, ya habría recuperado la herradura y Ponyville estaría
seguro, pero ahora estaba perdida y sola— ¡desearía... estar en la Fortaleza Dual
ahora mismo! —de repente, una luz blanca y brillante cegó a Rainbow.

Rainbow Dash parpadeó y se frotó los ojos con su casco, cuándo recobró la vista
vio qué mágicamente había sido transportada. En lugar de estar rodeada por
árboles oscuros y lianas, ahora se encontraba frente a una larga estructura de
piedra de gran tamaño.

¡Ella conocía ese lugar!— ¡El Castillo de las Dos Hermanas! —Rainbow
exclamó, así que este es el código para Fortaleza Dual. Fortaleza sólo era una
palabra elegante para “castillo” si se hubiera dado cuenta antes de eso, podría
haberse ahorrado una gran cantidad de tiempo llevando a Twilight y a su
marcador encantado al lado.

Pero ahora no había tiempo para lamentos y el Círculo Espiritual tenía que estar
cerca, Rainbow podía sentirlo, despegó hacia el castillo en busca de señales de
vida. Una nube del remolino rojo estaba justo delante— ¡Ajá! Ya te vi —
Rainbow gritó en señal de triunfo y despego tras ella, la siguió a través de un
laberinto de pasillos y sinuosas escaleras que ni siquiera sabía que existían.

Finalmente, salió a un claro cubierto de hierba y el humo se unió a una enorme

nube de la misma sustancia, que se revolvía y giraba como un lento tornado rojo.
— ¡Rainbow Dash! —gritó una voz
— Está aquí.
— ¡No te preocupes por nosotras! —exclamó otra.
— ¡Cierra la puerta!

— ¿Fluttershy? ¿Twilight? ¿Son ustedes? —Rainbow reconocería las voces de

sus amigas en cualquier lugar, sonaban como si estuvieran en problemas pero
¿dónde estaban?
— ¡Finalmente Daring Dash ha llegado!—bramó una voz profunda— no estaba
seguro de si lo habías conseguido.

Una figura dio un paso adelante, pero todavía estaba envuelto en humo rojo. La
oscura silueta exhaló entre risas y un escalofrío recorrió la espalda de Rainbow,
era la misma risa que había estado escuchando todo el tiempo— Muéstrate, tú...
tú... ¡cobarde! —Rainbow rugió.

—Prepárate para quedar sorprendida —la voz se rió y del humo rojo le abrió
paso una enorme cebra— porque con la presencia de Braze has sido bendecida—
tenía ojos rojos como la sangre y un pendiente amarillo y naranja hecho de
plumas de fénix. Tenía rayas al igual que Zecora, sólo que no eran blancas y
negras; sino de un color rojo, naranja y amarillo que parecían llamas de un voraz
incendio, era un poco intimidante.

— ¡No te tengo miedo! Braze —Rainbow Dash mintió, entrecerró sus ojos y se
ajustó su casco— ¿Quién eres tú y qué has hecho con mis amigas?

Braze dio un paso adelante y lentamente se acercó a Rainbow, él la miró con una
sonrisa malvada— consideré que serían útiles en este combate, abre la puerta o
mías serán por siempre —hizo un movimiento con su casco para revelar a
Twilight, Applejack, Fluttershy, Rarity y Pinkie Pie, todas juntas y atadas con
una cuerda roja de fuego mágico. Todas llevaban cascos de Safari y camisas
como la de ella, Rainbow jadeó y voló hacia ellas— ¡¿Qué están haciendo aquí
ponis?!

— Lamentamos haberte seguido, Rainbow —dijo Applejack— honestamente

sólo queríamos asegurarnos que estuvieses a salvo.

—Tratamos de que pudieses obtener tu aventura... —añadió Fluttershy— pero...

— ¡Pero entonces esta gran cebra maniática nos atrapó y nos trajo hasta aquí!
—Pinkie Pie hizo un mohín, retorciéndose alrededor. Su melena estaba más
desordenada de lo habitual tanto que sobresalía de su casco y se había pintado
líneas en sus mejillas como un guerrero

— Y también, nos quedamos sin pastelillos — su estómago gruño en voz alta—

¿Qué podría ser peor?

— ¡Esta cuerda de fuego realmente está friendo mi melena! —gritó Rarity,

tocando sus cabellos morados— ¡es horrible!
—No se preocupen, chicas ¡voy a liberarlas en un segundo¡ —Rainbow agarro la
cuerda de fuego pero le quemó el casco— ¡Ay! —Braze rió— ¿de verdad creíste
que lo lograrías tan fácilmente? Ven aquí, Daring Dash, esta elección fácil será
realmente.

La cebra agitó su casco y Rainbow se encontró siendo arrastrada hacia él, le dio
la vuelta para enfrentarla a una gran puerta independiente de piedra. Tenía todo
tipo de antiguas esculturas poni a través de ella y parecían contar una historia,
había una pegaso que se parecía mucho a Rainbow Dash, surcando las nubes con
un rastro de rayas detrás ella, hace tiempo que la pintura había desaparecido, pero
podría haber sido un arcoíris.

En el medio había una gran ranura en forma de “U” perfecta para una herradura,
la herradura Half-Gilded, la clave que podría desatar una tonelada de tenebrosos
espíritus en Ponyville, odiaba admitírselo pero realmente estaba nerviosa.

— ¡Suelta esa herradura, Braze! —Rainbow exigió, tratando de ocultar el

temblor de su voz— y libera a mis amigas ¡Esto es entre tú... y yo! —se puso de
pie para parecer un poco más alta y apretó los dientes, ningún poni o cebra se
metía con sus amigas.

Braze asintió con la cabeza y su pendiente de plumas se balanceo— si, querida

Dash ¡tú eres lo que necesito! es la única condición para que tus amigas sean
liberadas, los espíritus sólo abrirán la habitación para el único capaz de hacer una
Reimplosión sónica.

Arrojó la herradura Half-Gilded al aire para mostrárselo, esta giró alrededor al

igual que lo había hecho en las llamas verdes de Zecora, brillaba y centelleaba en
la luz, Rainbow notó que el borde tocaba una de las cuerdas de fuego y la cortaba
ligeramente, era sutil, pero le dio una idea a Rainbow.

— ¿Quieres que abra la puerta hacia el Círculo Espiritual para ti? —Rainbow
preguntó jugando— ¿Y entonces desataras las cuerdas de fuego y dejaras ir a mis
amigas? —Braze la rodeo y pequeñas llamas escaparon de sus cascos con cada
paso— ¡Sí! ¡Sí! Entonces voy a desaparecer con mi tesoro y tu podrás permitirte
un descanso —él sonrió, todo caía en su lugar perfectamente.

— ¡Trato hecho! —Rainbow asintió de acuerdo. Una expresión de horror cruzó

por la cara de Twilight, claramente sabía que era un truco pero Rainbow tenía un
plan.
— ¡Mira esto! ¿No estás lista? ¡Ahora inserta la llave y tira de la palanca! —
Braze babeo frotándose los cascos con avidez y le lazo la herradura Half-Gilded
a Rainbow.

Todos los ponis contuvieron la respiración cuando Rainbow la atrapó ¿Esto

realmente abriría la puerta? ¿Qué pasaría si los espíritus escapaban? Si tan sólo
pudiera distraer a Braze de alguna manera...

Rainbow guiñó un ojo sutilmente y Pinkie Pie pareció entender la indirecta—

Hey, ¿Sr. Braaaaaaze?—ella chillo— ¿tienes algún aperitivo? estoy muuuy
hambrienta—Braze se dio la vuelta y gruñó con rabia— ¡no sé nada de tu
dieta, deja de hablar de una vez y simplemente estate quieta!

Había pasado el tiempo justo para que Rainbow hiciera el cambio y deslizara la
Herradura Half-Gilded en su alforja.

— ¡Una habitación encantada llena de tesoros, viniendo directo! —dijo Rainbow,

insertando una herradura normal, el regalo de Rarity, en la ranura. Ella llevo sus
cascos a la palanca y la bajo lentamente.
 CAPÍTULO 13

La Dash de la Seguridad

— ¿Ves? Supongo que estabas equivocado —Rainbow se encogió de hombros

mientras empujaba hacia abajo la palanca otra vez— Esto no funciona —el plan
de Rainbow iba incluso mejor de lo esperado. Braze no había notado que la
herradura había sido cambiada.

— ¡No! ¡No! ¡Esto no puede ser! —Braze miró el cielo y dejó escapar un
profundo gruñido de furia— ¡tanto a la pegaso como a la llave aseguradas
debería tener!

— Tal vez deberías dejar que nos vayamos y dejarlo por ahora, Braze —
Applejack gritó, luchando en contra de la cuerda de fuego— parece que hoy no
se abrirá ninguna puerta espeluznante.

— ¡Admítelo, Braze! —Twilight gritó— la entrada va a cerrarse en cualquier

momento y no tienes nada.

— ¡No! —Braze gritó y empezó a caminar de un lado a otro y comenzó a

murmurar para sí mismo, presumiblemente en rimas. Era el momento perfecto
para que Rainbow hiciera su movimiento, se arrastró hacia sus amigas cuidando
de no dejar que Braze viera lo que estaba sacando de su bolso...— ¡la herradura
Half-Gilded! —Twilight exclamó— ¿ha estado en tu bolsa todo este tiempo?

— ¿Qué? —Braze galopo y se colocó entre Rainbow y sus amigas.

— ¡Sabía que era falsa! Dámela ahora, pequeña mentirosa —sobre el hombro de
Braze, Rainbow pudo ver que la puerta estaba empezando a bajar al suelo, sólo
tenía que comprar un poco más de tiempo y mantener la herradura lejos de él
hasta que desapareciera ¡entonces podría liberar a sus amigas y escapar!
— Nunca me voy a rendir ante ti, Braze —gritó Rainbow— y en caso de que lo
hayas olvidado, ¡Soy la pegaso más rápida por aquí! —salió disparada en el aire
al mismo tiempo que Braze le lanzaba una cuerda de fuego, casi chamuscando la
parte inferior de su cola, se lanzó de nuevo hacia sus amigas con la esperanza de
cortar la cuerda, pero Braze estaba en el camino extendiendo su casco hacia la
herradura, casi la conseguía, había estado demasiado cerca y Rainbow tendría
que hacer esto desde la distancia.

— ¡Hey, Braze! Observa esto —Rainbow sostuvo la herradura, entrecerró sus

ojos para apuntar y entonces la arrojó como un boomerang: directo hacia sus
amigas.

Braze se lanzó hacia ella, pero la herradura voló por el aire, aterrizando fuera de
su alcance y exactamente en la posición correcta para atravesar la cuerda de
fuego y regresando hacia Rainbow como si estuviera bajo su control.

Rainbow la atrapó con una sonrisa, sopló el humo residual de su superficie, y la

puso a salvo dentro de su bolsillo.

Las chicas se liberaron y vitorearon— ¡Muy bien, Rainbow! —Pinkie chilló

mientras saltaba— ¡Yuuujuu!

—Lo hiciste —dijo Fluttershy

—Gracias, querida —dijo Rarity alisando su melena que todavía parecía perfecta.

— Ahora salgamos aquí —dijo Rainbow— este tipo me está asustando —Braze
permanecía al lado de la puerta, que sólo se mantenía a unos centímetros por
encima del suelo antes de caer.

Él negó la cabeza con una expresión de dolor en su rostro y por último la puerta
fue absorbida por la tierra y desapareció. Ahora, sólo había hierba. Dejó escapar
un sollozo— Daring Dash tal vez has ganado esta vez... —Braze se levantó y
miró por encima de Rainbow con sus ojos en llamas— ¡pero para reclamar mi
escondite voy a regresar otra vez! y cuando la puerta regrese... ¡No me detendré
hasta que te encuentre! —Braze rió y desapareció en un estallido de llamas.

— Y yo voy a estar lista —dijo Rainbow, no iba a permitir que una cebra
codiciosa ponga a sus amigas o su ciudad en peligro otra vez. Pero tal vez la
próxima vez, se permitiría algo de ayuda para lograrlo, le sonrió a sus amigas—
Quiero decir, vamos a estar listas.
— Y así, con Braze derrotado y con la misteriosa herradura Half-Gilded
asegurada... —dijo Twilight, citando una famosa frase de los libros de Daring
Do— ¡Ponyville está sano y salvo una vez más, gracias a Daring Dash!

—... ¡y sus amigas! —Rainbow dijo con orgullo— gracias por estar ahí, incluso
cuando les dije que no podían acompañarme, además, no podría haberlo hecho
sin esos regalos ¿Y qué con ese marcador?

— Es un marcador de posición —Twilight se sonrojó— lo hechice para

localizarte.

— ¿No crees que los premios para cocodrilo son los mejores? —Pinkie suspiró—
Gummy los adora —Rainbow rió— chicas, realmente salvaron mi cola.

— Se ve un poco quemado para mí —comentó Rarity e inspeccionó el lugar

donde la cuerda de fuego la había quemado— pero un viaje al Spa de Ponyville
lo arreglará enseguida.

— ¡Cualquier cosa menos eso! —dijo Rainbow Dash sacudiendo la cabeza.

— ¿Y se supone que tú eres la valiente? —Twilight bromeó.

 CAPÍTULO 14

La cosa más valiente

El salón de clases de la señorita Cheerilee en la escuela de Ponyville estaba lleno

con estudiantes de toda la escuela. Las potras y potros eran un hervidero de
emoción por los visitantes del día.

Los héroes locales Daring Dash y sus leales amigas iban a hablarle a la clase
sobre su aventura del Bosque Everfree. Todo tipo de rumores locos habían estado
circulando sobre qué exactamente había pasado ahí, pero el día de hoy iban a
dejar las cosas claras.

— Applejack, mi hermana mayor estaba allí cuando Dash Daring derrotó a la

malvada cebra, Braze —Apple Bloom le jactó a Diamond Tiara, quien sólo giro
su nariz— ¡igual la mía! —dijo Sweetie Belle, la hermana pequeña de Rarity.

—Bueno, ¡yo conocía a Rainbow Dash antes de que se convirtiera en Daring

Dash! —aclamó Scootaloo, que iba vestida con su propio mini traje de Daring
Dash.

—Muy bien, vamos a calmarnos, mis pequeños ponis —dijo Cheerilee tomando
su lugar al frente de la habitación— vamos todos a darle una cálida bienvenida
a... ¡Daring Dash!

—Hey, chicos —Rainbow troto dentro y les dio un saludo nervioso a todos los
estudiantes.
Los cascos de todos los ponis se elevaron, todos tenían preguntas para la pegaso
más valiente de Ponyville, pero antes que le respondiera a cualquiera de ellos,
tenía algo importante que decir.

— Recuerden, puede parecer genial ser valiente y atrevido –y realmente es

impresionante– pero si hay una cosa que aprendí como Daring Dash, es que…

Rainbow observo a Rarity, Applejack, Twilight, Pinkie Pie y Fluttershy y ellas le

sonrieron de vuelta —... a veces la cosa más valiente que un poni puede hacer, es
aceptar la ayuda de sus amigos, incluso cuando piense que no los necesita
— Rainbow se puso su sombrero de explorador y los estudiantes aplaudieron.

— Ahora, ¡¿quién quiere escuchar directamente cómo estaba hasta las alas
sumergida en las arenas movedizas y use un lazo para sacarme de ahí?!

Fin

Traducción hecha por: Mogami kyoko Yuuri Ishtar

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