Leccion 2
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Leccion 2
En esta lección veremos otro aspecto muy importante de la obra de Dios a tu favor por medio del Señor Jesucristo.
Para que tu nueva vida se desarrolle, y pueda establecerse una relación de amor y comunión espiritual con Él sin
barreras, es necesario que no tengas dudas respecto a tu aceptación por parte de Dios.
Dios hace esto precisamente en lo que la Biblia llama JUSTIFICACIÓN. En el nuevo nacimiento recibiste UNA
NUEVA VIDA Y NATURALEZA; en la justificación recibes UNA NUEVA POSICIÓN delante de Dios.
Podemos ilustrar la diferencia entre el nuevo nacimiento y la justificación, con lo que sucede con un recluso de una
cárcel que sale al cumplir su condena. Una cosa es salir a la libertad al cruzar las rejas de la cárcel, lo que equivale al
nuevo nacimiento, y otra cosa es que la sociedad acepte de nuevo a ese ex recluso, olvidándose de sus delitos
pasados, por los cuales ya cumplió una condena, lo trate como a una persona justa, y que él mismo se sienta una
persona justa. Esto equivale a la justificación.
Generalmente el mundo nunca perdona a un ex recluso, y éste siente por el resto de su vida la humillación de su
culpa pasada.
No sucede así con Dios, quien hace una obra completa dándonos libertad de la condenación y la vida eterna como
hijos suyos, pero también solucionando el problema de nuestra culpa y aceptación por parte suya por medio de la
justificación.
A. ¿QUÉ ES LA JUSTIFICACIÓN?
JUSTIFICACIÓN es un acto judicial de Dios, por el que declara que el pecador está ya libre de condenación, y le
restaura al favor divino al confiar en Cristo y en sus méritos para obtener la salvación.
Los términos justificar y justificación en la Biblia, tienen una connotación jurídica, mostrándonos que tiene que ver
con la posición legal del cristiano delante de Dios; es decir, con su situación ante la ley moral de Dios.
Dicha ley surge de la misma naturaleza santa de Dios, y nos obliga porque somos creados por El, y por lo tanto
somos sus criaturas, que debemos vivir en armonía con El.
B. NECESIDAD DE LA JUSTIFICACIÓN
Tu posición (sin Cristo) delante de Dios era la de un reo condenado a muerte por haber violado la ley de Dios. Por
medio de la justificación, Dios te da UNA NUEVA POSICIÓN: la de absuelto, libre de condenación, porque Cristo,
siendo justo y sin mancha, pagó por ti muriendo en tu lugar en la cruz del Calvario. Sin esto sería imposible que
pudieras tener paz en tu corazón y comunión con Dios.
Descubre por ti mismo cuál es la condición del hombre sin Cristo, según la Palabra de Dios
1. Isaías 59:2
R. El, hombre estaba separado y destituido de la gloria de Dios. Las personas sin cristo, pecando, obrando mal,
ocultan su rostro entre ellos mismos y también se ocultan del padre celestial, por lo tanto, su consecuencia es, alejarse
del padre, y entre ellos mismos.
2. Juan 3:36
R. Estábamos sin vida. Las personas que no creen que cristo murió en la cruz por ellos, los que no creen que cristo es
el hijo del Dios viviente, están condenados a morir por siempre en espíritu y no ver el reino de los cielos, al momento
del juicio, Dios revelará la ira contra aquellos que no quisieron estar con él, los destituirá de su gloria y de su reino.
3. Romanos 3:23
R. Sin cristo, estábamos condenados a la muerte. Todas las personas sin excepción, son pecadoras y cometen pecado
tras pecado al día, esas personas no verán el reino de los cielos, pero hay una diferencia entre una persona sin cristo, y
otra persona con cristo, las personas sin cristo, el pecado es normal para ellos y piensan que no hay ninguna condena
, mientras que las personas con cristo luchan día a día por no pecar, es decir tratan de vivir en santidad luchando
contra el pecado.
4. Romanos 5:12
R. Adán y Eva cuando pecaron, ese pecado trajo muerte y destitución del reino de Dios, por lo tanto, este pecado de
muerte pasó de generación en generación hasta llegar hoy en día a todos.
5. Romanos 6:23
R. En el juicio final, si una persona que nunca creyó en Cristo Jesús, nunca creyó que su obra por nosotros
pecadores fue morir por nosotros, pagando cada uno de nuestros pecados, y nunca lo llegamos a aceptar como
nuestro señor y salvador, pues ese es el pecado más grande que nos lleva a la condena, y la condena es muerte
espiritual por el resto de la eternidad, pues nunca veremos el reino de los cielos, y nunca viviremos en eternidad,
pues su amor es tan grande, que el ofreció su vida por nosotros dándonos un regalo tan especial y grande que nadie
más puede dártelo.
La Palabra de Dios es enfática al afirmar que la condición del hombre sin Cristo es sin esperanza, sin capacidad para
vivir una vida justa conforme a las normas santas de Dios, y por lo tanto está caminando a una condenación eterna.
Sólo acogiéndose a la obra de Cristo cambia esta condición del hombre delante de Dios.
La justificación es completamente gratuita. No depende de ningún mérito nuestro, porque todo lo que hacemos no
tiene valor para pagar nuestra deuda con Dios. La obra de Cristo sí es más que suficiente para ello.
Es por eso los creyentes pueden vivir en "plena certidumbre de fe" (Hebreos 10:22), y "manteniendo sin fluctuar la
profesión de nuestra esperanza" (Hebreos 10:23), sabiendo que son "irrevocables los dones y el llamamiento de
Dios" (Romanos 11:29).
Lee los siguientes versículos y anota la forma en que Dios te justifica:
a. Romanos 3:23-26
R. Dios te justifica, porque cristo es justo y lleno de gracia, más él fue a morir por ti, para la limpieza y perdón de tus
pecados, por lo tanto, él espera a que tengas redención hacia él y arrepentimiento, reconociendo su obra, y abras tu
corazón para una vida eterna.
b. Gálatas 2:21
R. La persona que desecha el gran regalo que cristo dio por él, es decir, su muerte, y piensa que por obras y leyes será
salvo y tendrá vida eterna, pues está muy equivocado, pues, porque si fuera así, la muerte de cristo hubiera sido en
vano, en otro caso, si no fuera cierto, entonces cristo no hubiera muerto por nosotros.
c. Gálatas 3:24-25
R. Cuando cristo murió por nosotros, no solo la presencia de Dios alcanzo al mundo entero, si no, que el espíritu santo
se encargó de ponernos la fe y la verdad en nuestros corazones, por lo tanto, nosotros ya no dependemos de una sola
persona que pueda hablar de Dios y nos implante la fe y nos guíe completamente a cristo, si no, es decir, que ahora si
bien es por cobertura que nosotros conocemos a Dios en ciertos aspectos, pues, también depende de nosotros mismos
el conocerlo y seguirlo, y que nuestra fe crezca por medio de su palabra.
d. Tito 3:5
R. Las personas, antes de ser cristianas, estaban más que perdidas, en pecados de vicios, pecados de mal carácter y
personalidad, entre ellos aborrecían todo tipo de mala obras e incluso buenas obras, pero vino cristo y les mostro su
amor incondicional, puro y santo, un amor no humano, un amor que está fuera de este mundo, un amor diferente, que
es dado por gracia y misericordia no humana, este amor es luz para los hombres cristianos y no cristianos, muestra la
vida eterna y hace sentir el reino de los cielos para la salvación de todos. Este amor trabaja mediante el espíritu santo,
regenerando el alma y espíritu de cada persona.
D. RESULTADOS DE LA JUSTIFICACIÓN
La justificación te ha dado UNA NUEVA POSICIÓN que nunca se alterará, en tanto mantengas tu fe en Cristo. El
acto justificador de Dios no necesita repetirse, y las bendiciones son permanentes
Descubre por ti mismo los resultados de la justificación que Cristo logró para ti en la cruz del Calvario:
1. Hechos 13:38-39
R. Con creer de corazón y fe que el murió por ti, limpiando cada uno de tus pecados y aceptándolo en tu
corazón, ya puedes seguir el camino de los justos de Dios y ser justificado desde el corazón de cristo.
3. Romanos 5:1,10-11
R. Somos reconciliados por nuestros pecados por medio del hijo hacia el Dios padre, no importa lo que hayamos
hecho, ya hicimos las paces con el padre, y también podemos perdonar de corazón a quienes nos hicieron daño por
medio del amor de cristo, este perdón no es de humanos, si no de nuestro señor salvador, es un perdón verdadero y
eterno.
4. Efesios 1:7
R. La sangre y muerte de cristo está lleno de riquezas eternas, más su perdón es para siempre, y a cada día de nuestras
vidas, aunque no lo merezcamos.
5. Romanos 6:23
R. Nuestros pecados ya fueron perdonados, pero nosotros decidimos si queremos valorar su muerte y esa paga que el
dio por nosotros, pues si no lo hacemos, nuestros pecados nos llevarán a muerte eterna.
6. Hebreos 10:17-18
R. Cristo quiere que seamos como el, pues si nos cuesta seguir su camino, clamemos en auxilio para no ser tentados
por el enemigo y no alejarnos de él.
Isaías 61:10 nos da un hermoso cuadro de la obra salvadora de Dios y de la justificación como gracia divina. Nota
que es Dios quien nos rodea" con manto de justicia", que no es otra cosa sino la justicia de Cristo cubriendo nuestros
harapos de miseria y de pecado. Ahora Dios ve ese manto de la justicia perfecta e inmaculada de su Hijo en lugar de
nuestro pecado.
Además, el "manto de justicia" que te cubre te permite vivir con la actitud positiva de justicia, amando la justicia y
rechazando el pecado. La justicia de Cristo llega a ser una fuerza dinámica en tu vida.
ANSELMO, un hombre que vivió muy cerca de Dios, escribe un diálogo muy inspirador, y absolutamente bíblico,
en un folleto para consuelo de los moribundos:
- ¿Crees que el Señor Jesús murió por ti?
- Sí, lo creo.
- ¿Le agradeces por su pasión y muerte?
- Sí, le doy gracias.
- ¿Crees que no puedes ser salvo excepto por su muerte?
- sí, lo creo.
- Entonces, ven mientras haya vida en ti. En su muerte solamente pon toda tu confianza. Ninguna confianza
en ninguna otra cosa. Confía absolutamente en su muerte, y con ello cúbrete completamente.
"Y si el Señor, tu Dios, viniera a juzgarte, di: 'Señor, entre tu juicio y yo, presento la muerte del Señor Jesucristo. No
puedo contender contigo de otra manera'.
"Y si Él te dice que eres un pecador, dile: 'Señor, pongo la muerte de nuestro Señor Jesucristo entre mis pecados y
Tú; y sus méritos pongo por lo que debiera tener y no tengo'.
"Y si Él te dice que está airado contigo, dile: 'Señor, pongo la muerte de Jesucristo entre tu ira y yo'.
"Y cuando hayas completado de decir esto, di de nuevo: 'Señor, pongo la muerte de mi Jesucristo entre tú y
yo'."AMEN
Memoriza los siguientes versículos
Romanos 3:23-24
"Por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios, siendo justificados gratuitamente por su gracia,
mediante la redención que es en Cristo Jesús."
Romanos 5:1
“Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo."