Riscos de Contaminação - Donado - 1999
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Riesgo de Contaminación
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TABLA DE CONTENIDO
Pág.
1 INTRODUCCION 2
5 CASOS DE ESTUDIO 14
6 REFERENCIAS 19
2 CAPÍTULO 13 — RIESGO DE CONTAMINACIÓN
11 IIN
NTTR
ROOD
DUUC
CCCIIO
ONN
Teniendo en cuenta la escasez de recursos económicos en América Latina, la determinación del riesgo de
contaminación de acuíferos, es una herramienta importantísima para la toma de decisiones acerca de la
destinación de estos recursos para el monitoreo y remediación.
Foster (1988) definió el riego de contaminación como la relación de interacción entre la carga contaminante (que
es, será, o pudiera ser aplicada al subsuelo como resultado de la actividad humana) y la vulnerabilidad del
acuífero a la contaminación (debido a las características naturales de los substratos que se cubren y se separan
de la superficie). Es decir que el Riesgo de Contaminación es la probabilidad de que las aguas subterráneas se
contaminen a concentraciones por encima de los valores recomendados para la calidad del consumo humano.
2
2 M
MAAP
PAAS
SDDE
EVVU
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CUUIIFFE
ERRO
OSS
Los métodos utilizados para la predicción de la vulnerabilidad a la contaminación del agua subterránea, pueden
ser clasificados en tres grupos (Otalvaro, 1996):
§ Métodos basados en procedimientos: utilizan modelos matemáticos para analizar y simular los procesos que
gobiernan el transporte de contaminantes en la subsuperficie.
El hecho de analizar este factor de manera independiente a la carga contaminante, sólo es justificable en pro de
obtener un método válido para escenarios con información escasa. Al obtener o analizar mapas de
vulnerabilidad de acuíferos, nunca hay a perder de vista que “La vulnerabilidad general a un contaminante
universal, en un escenario típico de contaminación, es un concepto sin validez científica” (Foster, 1988). Por el
CAPÍTULO 13 — RIESGO DE CONTAMINACIÓN 3
contrario, “a la larga todos los acuíferos son vulnerables a contaminantes persistentes no degradables,
generados por una actividad contaminante ampliamente distribuida”. Adicionalmente, la remediación de un
acuífero de baja vulnerabilidad, es en términos generales, más difícil.
* el término acuiperm es usado aquí para estratos no saturados encima del nivel freático que permiten un libre movimiento vertical de infiltración.
Los datos idealmente requeridos para la evaluación de estas componentes, se muestran en la tabla 1 La
metodología GOD, se basa en aquellos datos que son fácilmente recolectados, y por consiguiente están
normalmente disponibles.
§ G: [Groundwater]: La ocurrencia del agua subterránea. Se refiere al grado de confinamiento del acuífero.
§ O: [Overall]: Las características, en términos de litología y grado de consolidación, de los estratos encima
de la zona saturada.
§ D: [Depth]: La profundidad del nivel freático o techo si es un acuífero confinado
La metodología empírica propuesta por Foster, se sintetiza en la Figura 1. Involucra indexar éstos parámetros en
tres fases discretas: G.O y D, con valores entre 0 y 1.
La segunda es la caracterización de los estratos encima de la zona saturada del acuífero, en la que se debe tener
en cuenta: el grado de consolidación, que determina la presencia o ausencia de conductividad hidráulica por
fisuración. En caso de existir fisuración, la caracterización va acompañada de un sufijo (F, ó FF) y el carácter
litológico, que indirectamente determina la porosidad eficaz, la conductividad hidráulica y la retención de
humedad de los estratos suprayacentes al acuífero analizado. Si este es libre el estrato suprayacente es la zona
vadosa. Si la litología conlleva a una baja capacidad de atenuación, la caracterización va acompañada de un
sufijo (A ó AA).
La última fase es la determinación de la profundidad del nivel freático en el caso de acuíferos no confinados, o la
profundidad del techo del acuífero, en acuíferos confinados.
El producto de los tres factores anteriores, en cada zona del acuífero, arroja su vulnerabilidad que puede ir
acompañada de uno o dos sufijos (F, FF, A o AA).
4 CAPÍTULO 13 — RIESGO DE CONTAMINACIÓN
Figura 1. Sistema GOD para la evaluación del Índice de Vulnerabilidad del Acuífero. Foster, 1988
Una vez se determina el índice de vulnerabilidad en cada zona del acuífero, el método determina que grado de
vulnerabilidad posee el acuífero. Está clasificación es la siguiente:
§ Vulnerabilidad Alta: acuífero vulnerable a muchos contaminantes, excepto a aquellos muy absorbibles o
fácilmente transportables. IV=[0.5,0.7)
§ Vulnerabilidad Despreciable: las capas confinantes no permiten un flujo significativo al acuífero. IV=[0.0,0.1)
La variación espacial de la vulnerabilidad del acuífero analizado, se sintetiza en mapas de vulnerabilidad, que
siguen convenciones como las mostradas en la Figura 2.
CAPÍTULO 13 — RIESGO DE CONTAMINACIÓN 5
Figura 2. Leyenda para mapas de vulnerabilidad del acuifero. (Tomado de Foster, 1988)
Este método involucra siete parámetros, determinados en forma de acróstico en su sigla, los cuales son:
A cada parámetro se le asignan dos valores: el primero llamado peso (W), representa la importancia relativa de
cada parámetro, dependiendo del tipo de contaminante analizado. W varía entre 1 y 5 de acuerdo a criterios
establecidos, como es mostrado en la Tabla 2, donde a cada parámetro se le asigna una calificación (R) con
valores de 1 a 10, como se presenta en la Tabla 2. Para el cálculo del Índice de Vulnerabilidad se usa siguiente
ecuación:
El índice de vulnerabilidad del método DRASTIC, puede alcanzar valores que van desde 23 hasta 226; será
menor en cuanto más contribuya a la atenuación de la contaminación. En el medio latinoamericano, este método
tiene inconvenientes porque usualmente so se disponen de los datos que se necesitan para producir los
resultados.
§ La presencia y naturaleza del suelo suprayacente y su potencial de lixiviación. En la tabla 3 se clasifican los
suelos según su potencial de lixiviación, basados en las propiedades físicas de los mismos. Con este
parámetro se clasifica el suelo por su propiedad de atenuar los tres tipos de contaminación: Difusa con
retención (como los pesticidas), difusa sin retención (como los nitratos) y líquidos (como derrames).
§ La naturaleza del estrato. Las rocas subyacentes son clasificadas como acuíferos principales, acuíferos
menores y no acuíferos; de acuerdo a las características hidráulicas y a propiedades hidrogeológicas tales
como permeabilidad y coeficiente de almacenamiento.
La Tabla 3 muestra la vulnerabilidad relativa del acuífero a la contaminación de los tres grandes grupos de
contaminantes (difusos con y sin retención y líquidos). La Tabla 3 exhibe el índice de vulnerabilidad del acuífero de
acuerdo a los parámetros establecidos. El valor de 11 es otorgado a los menos vulnerables, mientras que el 1 para los
más vulnerables.
CAPÍTULO 13 — RIESGO DE CONTAMINACIÓN 7
I1 b b b
I2 b b x
L x x x
b Aumento del riesgo de contaminación x Vulnerabilidad despreciable
3
3 M
MAAP
PAAS
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EPPO
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ALL C
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NTTE
E
La otra componente para la determinación del riesgo de contaminación de acuíferos, es la evaluación de la carga
contaminante. Foster (1988), propone clasificar los contaminantes según su aplicación en el terreno, así:
§ Fuentes dispersas. Incluye aquí saneamiento in-situ en áreas residenciales urbanas y el uso agrícola del
suelo.
La información mínima para calcular el peligro potencial de cada carga contaminante, se muestra en la tabla 4,
donde también aparece la información adicional requerida para cuantificar la carga contaminante en etapas
posteriores de la investigación.
Para cada actividad contaminante Foster (1988), propone establecer cuatro características semi-independientes,
sintetizadas en la Figura 3:
§ C. El modo de disposición del contaminante al subsuelo. Los parámetros relevantes son: la carga hidráulica
asociada con el contaminante y la profundidad bajo la superficie a la que es descargado.
La carga contaminate queda clasificada como un factor del potencial de contaminación, el cual es determinado
por la siguiente ecuación:
Así se llega a clasificar el peligro potencial de contaminación de aguas subterráneas. Alto cuando el potencial
sea mayor de 0.6; medio cuando se encuentra entre 0.3 y 0.6; y bajo cuando se encuentra entre 0 y 0.3.
La metodología GOD implica hacer un mapa de peligro potencial por cada actividad contaminate existente en la
zona de estudio; para su representación se emplearon las convenciones mostradas en la Figura 4.
10 CAPÍTULO 13 — RIESGO DE CONTAMINACIÓN
Tabla 4 Requerimientos de datos para evaluar las actividades contaminantes en terminos de rango del peligro potencial
y de carga contaminante al subsuelo
(Adpatada de Foster, 1988)
(el peligro potencial será clasificado como bajo, moderado o alto de acuerdo al criterio de la columna izquierda, pero la información
adicional de la columna derecha se requiere para estimar la carga contaminante)
INFORMACION MÍNIMA PARA CALCULAR INDICE DEL INFORMACION ADICIONAL PARA ESTIMAR CARGA
PELIGRO POTENCIAL CONTAMINANTE AL SUBSUELO
1. FUENTES DIFUSAS
LAGUNAS DE EFLUENTES
* donde es aplicable
CAPÍTULO 13 — RIESGO DE CONTAMINACIÓN 11
cultivo agrícola
actividad industrial
laguna de efluentes
4
4 M
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ERRIIE
ESSG
GOOD
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NTTA
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CIIO
ONN
Para la determinación del riesgo se deben tener en cuenta una estrategia abiertamente definida. La Figura 5
muestra con más claridad tales eventos. El procedimiento de determinación de riesgo de contaminación, es
requerido para priorizar las investigaciones posteriores en campo. Esta determinación es una herramienta
administrativa, para la destinación de recursos en el estudio del recurso hídrico subterráneo. Los dos primeros
niveles de evaluación mostrados, el reconocimiento preliminar y la evaluación sistemática del riesgo culminan con
la elaboración de mapas de riesgo de contaminación, el cual es el objetivo del presente capítulo.
El Riesgo es determinado, por las actividades propias que se den en la región de estudio. Según la Agencia
Ambiental del Reino Unido (1998), el riesgo está asociado a la naturaleza de la carga contaminante, la
vulnerabilidad del acuífero y las medidas preventivas propuestas.
CAPÍTULO 13 — RIESGO DE CONTAMINACIÓN 13
La existencia de una categoría de peligro potencial alto o moderado en áreas con vulnerabilidad media, alta o
extrema, sirve para dar una indicación preliminar del riesgo de contaminación del agua subterránea. El riesgo de
AF
contaminación debe ser evaluado actividad por actividad, contaminante por contaminante, resaltando los
altamente móviles y/o persistentes y los que son dispuestos bajo el nivel freático.
En la metodología GOD, se deben sobreponer el mapa de vulnerabilidad del acuífero y el de peligro potencial de
contaminación para encontrar el mapa de riesgo de contaminación del acuífero, analizando la actividad
contaminante estudiada. Encontrando así las zonas de bajo, moderado y alto riesgo de contaminación, como se
manifiesta en la Figura 6.
FN
ASPECTOS ESCALA DE DOCUMENTOS
NIVEL DE EVALUACION
CLAVES TRABAJO DE CEPIS
I. Reconocimiento normalmente
Preliminar. estado/provincial
(existencia del riesgo) 1:250.000 a
1:500.000
(datos 10 km)
Sistematica. urbana/municipal
S
A
1:100.000
(datos 1-2 km)
P
J
III. Reconocimiento
NE
local
del Campo. urbano/municipal
1:25.000 a
1:50.000
(datos 200-500 m )
R I
G
V. Investigacion
R
local
M
1:10.000 a
E
1:25.000
(datos 50-100 m)
E
Figura 5. Niveles de Evaluación de Riesgo de Contaminación del Agua Subterránea. (Tomado de Foster, 1988)
A partir de mapas de riesgo, se deben asignar prioridades a programas de seguimiento con investigación y
S
E
monitoreo de campo apropiado para las condiciones hidrogeológicas y la naturaleza de la carga contaminante al
E N
subsuelo.
U
E
D
C
RR
SE
Las metodologías DRASTIC y NRA, obtienen el mapa de riesgo de manera integrada entre vulnerabilidad y la
G
carga contaminate, lo cual sólo es justificable si se dispone de la suficiente información. Para las condiciones
latinoamericanas, el disponer de mapas de riesgo con la metodología GOD, sería un gran paso hacia el manejo
adecuado del recurso hídrico subterráneo.
A
X
A
Q
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A
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14 CAPÍTULO 13 — RIESGO DE CONTAMINACIÓN
5
5 C
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UDDIIO
O
El agua subterránea de esta región, mostrada en la Figura 7, es una alternativa para solucionar el déficit de agua
superficial de buena calidad, aceptable par el consumo humano, el riego y las actividades industriales,
Vargas (1993), realizó la evaluación del riesgo de contaminación de la zona Muña – Sibaté. Como primera
medida se determinó la vulnerabilidad de los acuíferos cretácico y cuaternario, se precisó también con el método
GOD, y como conclusión se obtuvo que el índice de vulnerabilidad indica una clasificación de mínima a
moderada, en los acuíferos cretácicos y baja en los cuaternarios, como se indica en la tabla 5.
Tabla 5. Caracterización de la Vulnerabilidad de los Acuíferos de Muña Sibaté. (Tomado de Vargas, 1993)
Condición Acuífero Confinado Libre (Zona de Confinado y Libre (Cubierto) Semiconfinado Libre
Recarga) Semiconfinado Arcillas, arenas
Sustrato Litológico Arcillolitas Areniscas y Arenisca y y gravas Arcillas, arenas Suelo residual,
Limolitas Arcillolitas Limolitas y gravas arcillas y limos
Liditas
Evaluación del Índice de
Vulnerabilidad de Acuíferos
Luego se caracterizó la carga contaminante al subsuelo. Esta evaluación condujo a que las actividades que
potencialmente generan contaminación en los acuíferos son los vertimientos líquidos industriales de la zona, el
embalse del Muña, la quebrada Chusacá y el Río Bogotá, siendo este último el que abastece el embalse para
generación eléctrica. Este procedimiento se llevó a cabo con el método propuesto por Foster. Se concluyó que
los contaminantes que presentaban más riesgo para el acuífero superficial son la DQO, el NH4+ y las bacterias.
El potencial de contaminación obtenido está clasificado de medio a bajo.
El inconveniente que presentó la elaboración del mapa de vulnerabilidad, estuvo en presentar un mapa superficial
y no uno por cada formación acuífera, además de no usarse la simbología propuesta por Foster. Otro problema
presente es que aunque se suponía que el fin último del proyecto era la generación de los diferentes mapas de
riesgo, en ningún momento se presentan, ni se evalúa el riesgo.
Dentro de la hoya del Río Maipo se han establecido diversos centros urbanos, entre los
que se encuentran la ciudad de Santiago, capital del país que agrupa más del 40% de la
población total. La cuenca presenta dos cauces principales: el Río Maipo y el Río
Mapocho y afluentes secundarios. Las aguas del sistema tienen una utilización
amplia y diversificada, entre las que se cuentan: fuente de agua
potable, regadío, recreación, estética uso industrial y otros.
Para el análisis de calidad de aguas se usaron isótopos ambientales, de lo cual se concluyó que el agua de los
Ríos Maipo y Mapocho presentan contenidos isotópicos promedio de deuterio de 107 y de Oxígeno 18 de –14.5.
Se definieron claramente cuatro grupos de aguas subterráneas:
§ Sector Maipo
§ Sector Mapocho
§ Aguas de mezcla
§ Aguas parciales (Chacabuco, Colina y Angostura)
Los estudios hidroquímicos llegaron a la conclusión que el contenido de sulfatos y nitratos excede los límites para
consumo humano y uso agrícola de la norma chilena (INN, NCh 409 y INN, NCh 1333) en la zona del valle. Se
advierte un aumento gradual en los cloruros y el magnesio desde la zona alta hasta el valle, pero sin sobrepasar
la norma. En la actualidad deben estar efectuándose los estudios de medición de metales pesados y
compuestos orgánicos.
Se determinó mediante una el método GOD modificado (DICTUC, 1996), mostrado en la Figura 9, donde además
de evaluar los parámetros G, O y D, se analiza un cuarto parámetro, S, que identifica el tipo de suelo (agrológico)
suprayacente del acuífero.
Figura 9. Método GODS, propuesto por DICTUC (1996). (Tomado de Vargas, 1997)
Las áreas de vulnerabilidad alta y extrema que se obtuvieron como resultado de este estudio son en general de
poca extensión y son: El sector Norte de los cerros de Chena en la comuna de Maipú, el sector de Huechuraba,
el cerro de San Luis y el sector Estero Los Patos.
Para la evaluación de la carga contaminante determinaron las posibles fuentes de contaminación, para así
generar mapas de carga contaminante. Las principales actividades contaminantes son: el saneamiento in situ,
las actividades industriales (estaciones de servicio, descargas en el suelo), disposición de residuos sólidos y los
cursos superficiales potencialmente contaminados. El informe estudiado realizó análisis de las posibles fuentes
contaminantes que pueden entrar al acuífero, teniendo en cuenta las zonas de captura de cada pozo, pero no se
realizó un a cuantificación de estas cargas. Al igual que el análisis de la Sabana de Bogotá, este trabajo, no
determinó el riesgo.
La isla de San Andrés, localizada en el Mar Caribe (Figura 10) presenta gran importancia, para Colombia, pues
desde 1953 es puerto libre e importante lugar turístico. Desde esa época la isla sufrió un proceso de
densificación de la población, llegando a ser la zona más densamente poblada del país.
18 CAPÍTULO 13 — RIESGO DE CONTAMINACIÓN
Figura 10. Localización General de San Andrés Isla. (Tomado de Vargas, 1997)
Vargas (1997) empleó el método propuesto por el DICTUC (1996), para determinar la vulnerabilidad del acuífero
(Método GODS). La información utilizada fue obtenida de estudios realizados por INGEOMINAS con
anterioridad Las dos más importantes formaciones presentes en el acuífero son la formación San Andrés
(acuífero libre cubierto) y la formación San Luis, ambas cársticas. La evaluación de los parámetros de
vulnerabilidad se exponen en la Tabla 6.
Los resultados obtenidos muestran una clasificación de vulnerabilidad sólo para los acuíferos superiores, y no
para cada formación acuífera presente en la isla. Dentro de este análisis el acuífero de San Luis presenta un a
vulnerabilidad extrema, fomentada por la ubicación de los asentamientos humanos, en está parte de la isla y el
acuífero San Andrés presenta vulnerabilidad alta.
Para el análisis de la carga contaminante, se hizo un inventario, una categorización y caracterización de las
fuentes potenciales de contaminación. Las principales actividades contaminantes en la isla son: El saneamiento
básico, el sistema de disposición de aguas residuales domésticas (alcantarillado y pozos sépticos), estos fueron
clasificados con un índice de peligro potencial, IPP. El resultado de este análisis fue un mapa de densidad de
población, mostrando las potenciales actividades contaminantes.
La evaluación del riesgo se hizo superponiendo el índice de peligro potencial, con la vulnerabilidad obtenida,
clasificando el riesgo como extremo, elevado, moderado y bajo. Las zonas de riesgo extremo cubren el sector
Central y los sectores coincidentes con el acuífero de San Luis. La zona conformada por el acuífero de San
Andrés fue catalogada como zona de alto riesgo. La zonas de riesgo moderado, están caracterizadas por los
depósitos cuaternarios.
Como consecuencia, de este estudio, se diseño y construyó la red de monitoreo, cuyos fundamentos se explican
en el siguiente capítulo.
6
6 R
REEFFE
ERRE
ENNC
CIIA
ASS
ALLER, Linda, BANNET, Truman, HACKET, Glen, LEHR, Jay, PETTY, Rebeca. DRASTIC: A
STANDARDIZED SYSTEM FOR EVALUATION GROUNDWATER POLLUTION POTENTIAL USING
HYDROGEOLOGICAL SETTINGS. National Well Association. U.S. Environmental Protection Agency.
Ada, Oklahoma, USA. Mayo, 1987.
HOLMAN, I.P., LEWIS, M.A., PALMER, R. C., ROBINS N.S., GUIDE TO GROUNDWATER VULNERABILITY
MAPPING IN ENGLAND & WALES. National Rivers Authority. HMSO. Londres, 1995.
VARGAS Q., María Consuelo. EVALUACIÓN DEL RIESGO DE CONTAMINACIÓN DE LOS ACUÍFEROS
CUATERNARIOS DE LA ZONA MUÑA – SIBATÉ. Universidad Nacional de Colombia. Facultad de
Ingeniería. Maestría en Ingeniería Ambiental. Santafé de Bogotá D.C. 1993.
VARGAS Q., María Consuelo. EVALUACIÓN DEL RIESGO DE CONTAMINACIÓN DE LAS AGUAS
SUBTERRÁNEAS DE LA ISLA DE SAN ANDRÉS. Convenio Ingeominas – Ministerio de Salud. Santafé
de Bogotá D.C. 1997.