Caso LNP VS Argentina Comite de DDHH Nu

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CASO LNP C/ ESTADO ARGENTINO COMITÉ DE

DERECHOS HUMANOS ONU

Naciones Unidas

Pacto Internacional de DerechosCiviles y Políticos

Comité de Derechos Humanos 102º período de sesiones11 a 29 de


julio de 2011

Dictamen
Comunicación Nº 1610/2007

Presentada por:L.N.P. (representada por el Instituto de Género y Desarrollo –


INSGENAR- y el Comité de América Latina y el Caribe para la Defensa de
los derechos de la Mujer –CLADEM)

Presunta víctima:La autora

Estado parte:República Argentina

Fecha de la comunicación:25 de mayo de 2007 (presentación inicial)

Referencias:Decisión del Relator Especial con arreglo al artículo 97 del


reglamento, transmitida al Estado parte el 8 de octubre de 2007 (no se publicó
como documento)

Fecha de aprobación

del dictamen:18 de julio de 2011

Asunto:Discriminación contra niña indígena víctima de violación

Cuestiones de fondo:Igualdad entre hombres y mujeres/trato cruel, inhumano


o degradante/igualdad ante los tribunales y derecho a la revisión del fallo
condenatorio y la pena por un tribunal superior/injerencia en vida privada y
familiar/protección de menores/igualdad ante la ley y prohibición de
discriminación/derecho a un recurso efectivo
Cuestiones de procedimiento:Agotamiento de recursos internos

Artículos del Pacto:Artículo 2, párrafo 3, artículo 3, artículo 7, artículo 14,


párrafos 1 y 5, artículo 17, artículo 24, y artículo 26

Artículos del ProtocoloFacultativo: Artículo2 y artículo 5, párrafo 2 b)

El 18 de julio de 2011 el Comité de Derechos Humanos aprobó el texto


adjunto como dictamen del Comité a tenor del artículo 5, párrafo 4, del
Protocolo Facultativo respecto de la comunicación Nº 1610/2007.

[Anexo]

Anexo
Dictamen del Comité de Derechos Humanos a tenor del
artículo 5, párrafo 4, del Protocolo Facultativo del
Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos
(102º período de sesiones)
respecto de la

Comunicación Nº 1610/2007**

Presentada por:L.N.P. (representada por el Instituto de Género y Desarrollo –


INSGENAR- y el Comité de América Latina y el Caribe para la Defensa de
los derechos de la Mujer –CLADEM)

Presunta víctima:La autora

Estado parte:República Argentina

Fecha de la comunicación:25 de mayo de 2007 (presentación inicial)

El Comité de Derechos Humanos, establecido en virtud del artículo 28 del


Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos,

Reunido el 18 de julio de 2011,

Habiendo concluido el examen de la comunicación Nº 1610/2007, presentada


al Comité de Derechos Humanos por la Sra. L.N.P. en virtud del Protocolo
Facultativo del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos,

Habiendo tenido en cuenta toda la información que le ha presentado por


escrito la autora de la comunicación y el Estado parte,
Aprueba el siguiente:

Dictamen a tenor del artículo 5, párrafo 4, del Protocolo Facultativo

1.La autora de la comunicación es la Sra. L.N.P., ciudadana argentina nacida


en 1988. Alega ser víctima de violaciones por la República Argentina de los
derechos reconocidos en el artículo 2, artículo 3, artículo 7, artículo 14,
párrafos 1 y 5, artículo 17, artículo 24, y artículo 26 del Pacto Internacional de
Derechos Civiles y Políticos. El Protocolo Facultativo entró en vigor para el
Estado parte el 8 de noviembre de 1986.

Los hechos expuestos por la autora

2.1La autora es de etnia Qom y residente en la localidad denominada “El


Espinillo”, situada en el norte de la provincia del Chaco argentino. El 3 de
octubre de 2003, cuando la autora había recién cumplido 15 años, fue agredida
sexualmente por tres jóvenes “criollos” de entre 17 y 20 años. La autora
afirma haber sido llamada por los tres jóvenes referidos, conocidos de ella, esa
noche en la plaza del pueblo y haber sido llevada a la parte posterior de la
iglesia sita en la plaza, donde fue obligada por el mayor de ellos, con la
asistencia de los otros dos, a practicarle sexo oral y fue posteriormente sujeta a
penetración anal. Según la autora, el agresor le tapó la boca cuando ella
intentó gritar y la sujetó por los brazos contra la pared, mientras los otros dos
cubrían la escena con sus chaquetas.

2.2Inmediatamente después de la agresión, la autora acudió sola, con la ropa


con restos de sangre, al puesto de policía de la misma localidad, donde esperó
durante aproximadamente tres horas hasta ser enviada al puesto sanitario
local. Una vez allí, la autora afirma haber tenido que esperar de nuevo durante
varias horas de pié antes de ser atendida. Sobre las 4 horas de la madrugada
fue sometida a un examen médico por el director de dicho puesto sanitario,
quien realizó palpaciones en la región anal y vaginal que le ocasionaron un
dolor intenso. El informe médico concluyó la existencia de lesiones anales
propias del acceso violento acaecido de 30 a 40 minutos antes del examen. La
autora hace notar la discrepancia existente entre la hora en que fue atendida en
el puesto médico -aproximadamente las 04:00 horas- y la hora reflejada en el
informe médico –las 00:30 horas-. La autora argumenta que se pretende
demostrar que fue atendida inmediatamente cuando en realidad estuvo
esperando durante largas horas tanto en la comisaría como en el puesto
médico.

2.3Alertada por la ausencia de la autora, su familia y varios miembros de la


comunidad Qom emprendieron su búsqueda. Tras conocer lo sucedido, éstos
se reunieron ante la comisaría de policía de la localidad, donde la madre de la
autora presentó una denuncia, redactada en español y sin traducción a pesar de
las dificultades de comunicación de ésta en dicho idioma. Se ordenó asimismo
la apertura de una investigación judicial, la detención de los tres agresores y la
práctica de un peritaje forense sobre la autora, que se realizó el 7 de octubre.
El informe del médico forense de 7 de octubre corroboró la conclusión del
informe médico practicado el 4 de octubre. Asimismo, el 5 de noviembre de
2003 se envió una asistente social a la localidad de la autora “para determinar
el medio de vida, costumbre y todo otro dato de interés” para las
investigaciones. La autora sostiene que la asistente investigó únicamente a la
víctima, a su familia y su comunidad, indagando acerca de su moralidad, y no
así a los tres denunciados.

2.4 Varios meses de investigaciones policiales resultaron en la apertura de un


proceso judicial por el delito de abuso sexual con acceso carnal contra los tres
responsables. La autora sostiene que ni ella ni su familia fueron informadas de
su derecho a constituirse en parte querellante en dicho proceso, de
conformidad con los artículos 89 y 94 del Código Procesal Penal de la
Provincia del Chaco. Todo el juicio se sustanció en español, sin intérpretes, lo
que dificultó las declaraciones tanto de la víctima como de otros testigos cuyo
idioma principal es el Qom. Asimismo, no fueron admitidas las declaraciones
testimoniales de tres miembros de la comunidad Qom por considerar que sus
declaraciones eran “descabelladas” y basadas en “la discriminación propia de
esa zona entre criollos y tobas”. Mediante sentencia de 31 de agosto de 2004,
la Cámara Segunda en lo Criminal de la ciudad de Presidencia Roque Sáenz
Peña absolvió a los tres acusados. La Cámara concluyó que, si bien el acceso
anal quedó probado e incluso reconocido por el principal acusado, no quedó
probado que dicho acceso no hubiera sido consentido por la autora. El fallo
judicial determinó que “mal podía hablarse de inexperiencia sexual [de la
autora si ésta] presentaba desfloración de larga data” según lo establecido en
los dos informes médicos practicados. Asimismo, la Cámara concluyó que
tampoco podía sostenerse que hubiera aprovechamiento en razón de la
mayoría de edad del imputado principal.

2.5La autora sostiene que, al no ser parte querellante en el juicio, la sentencia


no les fue notificada ni a ella ni a sus representantes legales y que, por la
misma razón, tampoco pudo apelar dicha sentencia. El Ministerio Público era
el único competente para recurrir la sentencia dentro del plazo de diez días
desde la notificación de la misma. Al no hacerlo, la sentencia quedó firme el
16 de septiembre de 2004. La autora sostiene asimismo que tampoco pudo
interponer un recurso de casación o de inconstitucionalidad por la misma
razón de ser recursos reservados a las partes y estar sujetos al plazo de
interposición de diez días desde la notificación de la sentencia, de
conformidad con los artículos 446 y 477 del Código Procesal Penal del Chaco.
Por último, la autora señala que el recurso de amparo tampoco sería viable ya
que, según la Ley Nacional de Amparo No. 16.986, dicho recurso no puede
interponerse contra actos emanados del poder judicial. Adicionalmente, dicha
Ley establece un plazo de 15 días hábiles para la interposición del recurso. La
autora afirma que, en vistas de todo lo anterior, los recursos internos han sido
agotados.

2.6La autora hace notar que, al no serle notificada la sentencia a su familia, y


al vivir en un poblado aislado sin cobertura de teléfono o internet y sin
transporte público, distante de 250 Km de Presidencia Roque Sáenz Peña,
donde se dictó la sentencia, y accesible por un camino de barro que permanece
inhabilitado en época de lluvias, no pudo conocer el resultado de la misma
hasta transcurridos casi dos años. Viendo que los agresores seguían en
libertad, un grupo de jóvenes de la asociación indígena Meguexogochi se
desplazaron 80 km en bicicleta hasta la localidad de Castelli para conseguir un
teléfono y comunicarse con la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación.
El 4 de julio de 2006, dicha Secretaría envió un pedido de informes a la
Cámara Segunda de lo Criminal de Presidencia Roque Sáenz Peña. La Cámara
respondió a dicho pedido comunicando el resultado absolutorio de la
sentencia. La autora justifica así la demora de casi tres años en plantear el
caso ante el Comité.

2.7La autora señala que el suyo no es un caso aislado, sino que las agresiones
sexuales a niñas y mujeres Qom es frecuente en la zona, existiendo un patrón
de impunidad frente a dichos caso propiciado por la prevalencia de una
mentalidad racista. La autora añade que, por el contrario, cuando una mujer
criolla asegura haber sido violada por un indígena Qom, este es detenido y
condenado inmediatamente.

La denuncia

La autora afirma ser víctima de una violación del artículo 2, artículo 3,


artículo 7, artículo 14, párrafos 1 y 5, artículo 17, artículo 24, y artículo 26 del
Pacto.

La autora sostiene haber sido víctima de discriminación por su condición de


niña y por su etnicidad tanto en sede policial como durante la práctica del
examen médico a que fue sometida y durante todo el juicio. Sostiene que tuvo
que esperar durante varias horas de pié y llorando antes de nadie le atendiera
en la comisaría de policía. Una vez en el puesto médico, donde también
esperó durante horas, le realizaron palpaciones en las zonas lastimadas sin
consideración al profundo dolor que esto le ocasionaba y con el único fin de
comprobar la efectiva existencia de dolor. Asimismo, se le practicó un
examen vaginal para comprobar su virginidad, a pesar de que la agresión
recibida requería únicamente de una prueba anal. El tribunal que conoció del
caso introdujo el factor de la virginidad de la víctima como elemento decisivo
del proceso. La autora sostiene que, a diferencia de ella, los imputados se
expresaron libremente relatando los hechos crudamente, sin negar el acceso
carnal, pero que por afirmar que ella era prostituta –hecho que nunca fue
probado y que fue desvirtuado por el informe socioambiental aportado- el
tribunal se puso inmediatamente a su favor. Sostiene que a todos los testigos
se les preguntó si la autora tenía novio y si ejercía la prostitución. La autora
afirma asimismo que el tribunal no tomó en cuenta el hecho de que ella tuvo
que expresarse en un idioma que no le era propio y en un estado de profunda
conmoción a la hora de determinar la existencia de imprecisiones y
discrepancias en su declaración y descalificarla, minimizando sin embargo las
imprecisiones y contradicciones de las declaraciones de los acusados. La
autora concluye que el juicio estuvo marcado por prejuicios de género que
motivaron la impunidad.

La autora sostiene que a lo largo de todo el proceso fue tratada sin


consideración a su condición de niña y sin ninguna atención a su honor y su
dignidad.

La autora afirma que la falta de asesoramiento jurídico y la falta de


información sobre su derecho a constituirse en parte querellante obstaculizó su
adecuada intervención en el juicio y le negó su derecho a un juicio justo y al
debido proceso.

La autora alega que los actos de violencia física y psicológica perpetrados por
los agentes estatales, tanto en sede judicial como en la comisaría de policía y
el puesto médico donde fue atendida, le causaron daño físico y moral.

La autora sostiene que la asistente social enviada a investigar a su casa


interrogó a los vecinos acerca de su vida familiar y su moral, violando su
intimidad, su honor y el buen nombre de la víctima, especialmente tratándose
de una población pequeña, provocando su revictimización.

Solicitud del Estado parte de una solución amistosa

El 30 de abril de 2008, el Estado parte informó al Comité que el Gobierno de


la Provincia del Chaco había solicitado a la Cancillería la apertura de un
espacio de diálogo tendiente a explorar la posibilidad de una solución
amistosa del caso entre las partes a nivel nacional. El Estado solicitó al
Comité el traslado de dicha propuesta a la autora. Sin perjuicio de esto, el
Estado se reservó el derecho de presentar comentarios sobre la admisibilidad y
el fondo del caso.

El 9 de mayo de 2008, el Estado parte reenvió la comunicación de 30 de abril


con inclusión en anexo de una serie de comunicaciones de distintas
autoridades ejecutivas y judiciales de la provincia del Chaco en las que se
admitía la plena responsabilidad del Estado Provincial en el caso y se
solicitaba al gobierno nacional que se allanara y comenzara a reparar el daño
sufrido por la autora.

Observaciones de la autora

5El 10 de junio de 2008, la autora lamentó la falta de admisión de la


responsabilidad del gobierno nacional por las violaciones por ella sufridas,
toda vez que las autoridades provinciales del Chaco sí admitieron su
responsabilidad. La autora manifestó su predisposición a dialogar pero
únicamente una vez que el Estado nacional hubiera admitido su plena
responsabilidad y estuviera dispuesto a discutir las medidas para la reparación
integral a la autora y a su familia y comunidad, así como las medidas y
programas necesarios en el ámbito nacional para evitar futuros casos
análogos.

Consideración provisional del Comité en relación con la propuesta de


solución amistosa

6.Durante el 93º periodo de sesiones, en julio de 2008, se examinó la


propuesta del Estado parte sobre el acuerdo amistoso. Sin embargo, a la luz de
las observaciones de la autora de 10 de junio de 2008, se decidió continuar el
procedimiento ordinario en el examen de la comunicación y solicitar al Estado
parte que presentara sus observaciones sobre el fondo a la mayor brevedad.

Comunicaciones adicionales de las partes

7.El 8 de septiembre de 2008, el Estado parte informó al Comité sobre la


celebración el 29 de agosto de 2008 de una reunión entre la autora, miembros
de su familia y representantes, y representantes del Gobierno nacional y
provincial, para inicial un diálogo tendiente a llegar a una solución amistosa
en el caso.

8.El 12 de noviembre de 2008, la autora señaló que, en la reunión mantenida


con las autoridades nacionales y provinciales, el gobierno de la provincia del
Chaco aceptó íntegramente las demandas de la autora y añadió el ofrecimiento
de una vivienda para ella y su familia en una localidad vecina. La autora
señaló asimismo que, mediante carta enviada por el Gobernador del Chaco al
Ministro de justicia, aquél solicitaba que el gobierno nacional compartiera la
responsabilidad de afrontar gastos de las reparaciones. La autora añadió que el
borrador de acuerdo de solución amistosa preparado por el gobierno nacional
fue parcialmente insatisfactorio por la ambigüedad de la agenda reparatoria y
la vaguedad de los términos empleados. La autora reafirmó su reclamo de
contar con un reconocimiento claro y expreso de la responsabilidad del Estado
nacional.
9.El 24 de noviembre de 2008, el Estado parte informó al Comité que,
mediante su comunicación de 9 de mayo de 2008, el gobierno de la provincia
del Chaco, responsable primario por las violaciones de derechos humanos en
el presente caso, ya manifestó claramente su posición, allanándose
incondicionalmente y proponiendo la apertura de un espacio de diálogo
tendiente a la solución amistosa. El Estado parte reconoció su responsabilidad
internacional en el presente caso, comprometiéndose a realizar los mejores
esfuerzos, en coordinación, con la provincia del Chaco, para reparar
íntegramente a la autora.

10.1El 1 de febrero de 2010, la autora señaló que, tras varias reuniones


mantenidas con representantes de los gobiernos nacional y provincial, el
gobierno provincial aceptó y cumplimentó la mayoría de medidas reparatorias
solicitadas por la autora, a saber, el pedido de perdón público, el pago de una
indemnización, la entrega de títulos de terreno y vivienda, el otorgamiento de
una beca de estudios de 150 dólares americanos y la organización de un
seminario sobre discriminación de género y violencia contra la mujer, con
asistencia obligatoria de todos los funcionarios judiciales provinciales. La
autora consideró la actitud del gobierno de la provincia del Chaco positiva. En
relación al gobierno nacional, la autora manifestó que se cumplió una de las
medidas solicitadas: la sanción de una Ley Nacional integral sobre Violencia
contra las Mujeres. Sin embargo, otros aspectos del acuerdo de solución
amistosa propuestos por el gobierno quedaron redactados, al parecer de la
autora, de forma imprecisa, incluido el reconocimiento expreso de la
responsabilidad del Estado nacional y la falta de fijación del monto de la
indemnización pecuniaria. Sobre esta base, la autora concluyó que los intentos
de llegar a una solución amistosa no han prosperado debido a la vaguedad de
los compromisos del Estado y rechazó el acuerdo amistoso, solicitando la
continuidad del caso ante el Comité.

10.2El 25 de marzo de 2010, la autora amplió sus comentarios relativos al


acuerdo de solución amistosa propuesto por el Estado parte, señalando como
principales medidas pendientes la asignación de un beca para continuar sus
estudios (siendo la cantidad asignada insuficiente), la asignación de una
pensión vitalicia y el ofrecimiento de atención psicológica gratuita. La autora
reconoció que el inicio del proceso de reparación por parte del Estado había
tenido un efecto positivo en su vida pero insistió en la necesidad de contar con
el cumplimiento total de las medidas acordadas en el acta firmada con el
gobierno para lograr una reparación íntegra. La autora señaló la importancia
de un dictamen del Comité en este caso, siendo éste el primero en llegar a
juicio. La autora hizo notar asimismo la importancia de los casos
paradigmáticos en Argentina, más allá de la reparación de la víctima, para
promover importantes cambios legislativos, judiciales y sociales, y como
garantía de no repetición. Solicitó al Comité un pronunciamiento para que el
Estado diera cumplimiento a la totalidad de sus obligaciones asumidas en el
acta firmada con la autora.

11.1El 13 de mayo de 2010, el Estado parte informó al Comité de las medidas


reparatorias adoptadas en el marco del proceso de solución amistosa acordado
con la autora, incluido un proyecto de ley para el otorgamiento de una pensión
vitalicia, así como las medidas ya referidas por la autora en su comunicación
de 1 de febrero de 2010.

11.2El 5 de agosto de 2010, el Estado parte aportó copia de la Ley No 6.551,


promulgada por Decreto Provincial No 1202 de 24 de junio de 2010, relativa
al otorgamiento de la pensión vitalicia a la autora, así como constancia del
inicio de la liquidación mensual de la misma.

Deliberaciones del Comité

Examen de la admisibilidad

12.1Antes de examinar toda reclamación formulada en una comunicación, el


Comité de Derechos Humanos debe decidir, de conformidad con el artículo 93
de su reglamento, si dicha reclamación es o no admisible en virtud del
Protocolo Facultativo del Pacto.

12.2Conforme al apartado a) del párrafo 2 del artículo 5 del Protocolo


Facultativo, el Comité se ha cerciorado de que el mismo asunto no ha sido
sometido ya a otro procedimiento de examen o arreglo internacionales.

12.3El Comité toma nota del argumento de la autora relativo a la


imposibilidad de agotar los recursos internos disponibles, reservados a las
partes y sujetos a cortos plazos de interposición, debido a que no fue
informada de su derecho a constituirse en parte querellante y que la sentencia
absolutoria no le fue notificada. Toma nota asimismo de las alegaciones de la
autora sobre la inviabilidad del recurso de amparo, que estaría excluido
respecto de los actos judiciales según la legislación nacional vigente. En
ausencia de argumentos del Estado parte en contra, el Comité considera que la
autora no dispuso de ningún recurso efectivo para plantear su queja
relacionada con el artículo 14 a nivel nacional. El Comité observa asimismo
que el Estado parte no ha invocado la cuestión del agotamiento de recursos
internos en relación con el resto de quejas de la autora. En consecuencia, el
Comité considera agotados todos los recursos de la jurisdicción interna a
efectos de lo estipulado en el apartado b) del párrafo 2 del artículo 5 del
Protocolo Facultativo.

12.4En cuanto a las alegaciones de la autora relativas a la violación del


derecho a la doble instancia penal, reconocido en el párrafo 5 del artículo 14
del Pacto, el Comité hace notar que dicho párrafo prevé una garantía procesal
de que dispone toda persona acusada de un delito de que el fallo condenatorio
y la pena sean sometidos a un tribunal superior. En el presente caso, la
sentencia fue absolutoria, por lo que dicha disposición no resultaría aplicable.
En consecuencia, el Comité considera que la denuncia de la autora relacionada
con el párrafo 5 del artículo 14 es incompatible con el Pacto y la declara
inadmisible en virtud del artículo 3 del Protocolo Facultativo.

12.5En cuanto a las denuncias de la autora relacionadas con los artículos 2; 3;


7; 14, párrafo 1; 17; 24, y 26, el Comité considera que las mismas han sido
suficientemente fundamentadas a efectos de la admisibilidad y declara la
comunicación admisible respecto a estas denuncias.

Examen de la cuestión en cuanto al fondo

13.1El Comité de Derechos Humanos ha examinado la presente comunicación


teniendo en cuenta toda la información que le han facilitado las partes, de
conformidad con lo dispuesto en el párrafo 1 del artículo 5 del Protocolo
Facultativo.

13.2El Comité toma nota del reconocimiento del Estado parte, incluidas las
autoridades provinciales, de su responsabilidad por violaciones de sus
obligaciones internacionales. Los siguientes párrafos reflejan la posición del
Comité respecto de provisiones específicas del Pacto que sirven de base para
determinar la responsabilidad del Estado parte en el presente caso.

13.3El Comité toma nota de las alegaciones de la autora en el sentido que fue
víctima de discriminaciones basadas en su condición de niña e indígena, tanto
durante el juicio como en sede policial y durante el examen médico a que fue
sometida. La autora alega que el personal de la comisaría de policía del
Espinillo mantuvo a la autora en espera durante varias horas, llorando y con
restos de sangre en el vestido, y que no se le tomó denuncia alguna,
limitándose finalmente a remitirla al puesto médico local. La autora alega
asimismo que, una vez en el puesto médico, fue sometida a pruebas vejatorias,
innecesarias para determinar la naturaleza de la agresión recibida, y tendientes
a determinar su virginidad. A su vez, el tribunal que conoció del caso se basó
en criterios discriminatorios y vejatorios, cuales son “la presencia de una
desfloración de larga data” de la autora para concluir que no quedó
demostrada la falta de consentimiento de ésta al acto sexual. La autora
sostiene asimismo que se interrogó a todos los testigos sobre si ella era
prostituta. El Comité considera que todas las afirmaciones anteriores, que no
han sido discutidas por el Estado parte, denotan un tratamiento discriminatorio
por las autoridades policiales, sanitarias y judiciales, tendientes a cuestionar la
moral de la víctima. El Comité observa, en particular, que la sentencia de la
Cámara en lo Penal de Presidente Roque Sáenz Peña centra su análisis del
caso en la vida sexual de la autora y en determinar si era o no “prostituta”.
Asimismo, toma la falta de virginidad de la autora como elemento principal
para determinar su consentimiento al acto sexual. Con base a los hechos no
refutados que tiene ante sí, el Comité concluye que los hechos ante sí ponen
de manifiesto la existencia de discriminación basada en la condición de niña y
la etnicidad de la autora, en violación del artículo 26 del Pacto.

13.4El Comité considera asimismo que el trato recibido por la autora por parte
del personal judicial, policial y médico descrito denota un incumplimiento del
Estado de su obligación de adoptar las medidas de protección requeridas por
la condición de menor de la autora reconocida en el artículo 24 del Pacto.

13.5El Comité toma nota de la afirmación de la autora en el sentido que, al no


haber sido informada sobre su derecho a constituirse en parte querellante
según la legislación provincial vigente, no pudo participar como parte en el
proceso y que, en consecuencia, tampoco le fue notificada la sentencia
absolutoria. La autora alega asimismo varias irregularidades acaecidas durante
el proceso judicial que se siguió contra los tres imputados. En particular,
según afirma la autora, el proceso tuvo lugar íntegramente en español y sin
interpretación a pesar de que tanto ella como otros testigos tenían problemas
de comunicación en dicho idioma. En vista de que el Estado parte no ha
refutado dichas alegaciones, el Comité considera que se ha violado el derecho
de la autora a acceder a los tribunales en condiciones de igualdad reconocido
en el párrafo 1 del artículo14.

13.6En cuanto a las afirmaciones de la autora relativas al sufrimiento físico y


psicológico experimentado, el Comité considera que el trato recibido por ésta
en la comisaría de policía y en el puesto médico justo después de haber
sufrido la agresión, así como durante el proceso judicial, en la que se
realizaron múltiples declaraciones discriminatorias en su contra,
contribuyeron a su revictimización, agravada en razón de su minoría de edad.
El Comité recuerda que, según lo señalado en su Observación general No 20 y
en su jurisprudencia, el derecho protegido por el artículo 7 no sólo comprende
el dolor físico sino también el sufrimiento moral. El Comité concluye que la
autora fue víctima de un trato en violación del artículo 7 del Pacto.

13.7En cuanto a la queja de la autora relacionada con el artículo 17 del Pacto,


el Comité considera que las constantes indagaciones por la asistencia social,
por el personal médico y por el tribunal sobre la vida sexual y la moral de la
autora constituyeron una injerencia arbitraria en su vida privada y un ataque
ilegal a su honra y reputación, especialmente por ser irrelevantes para la
investigación del caso de violación y por tratarse de una menor de edad. El
Comité recuerda su Observación General No 28, señalando que se entiende
como injerencia en el sentido del artículo 17 la toma en consideración de la
vida sexual de una mujer al decidir el alcance de sus derechos y de la
protección que le ofrece la ley, incluida la protección contra la violación. En
vistas de todo lo anterior, el Comité considera que el artículo 17 del Pacto ha
sido violado.

13.8El Comité toma nota de las alegaciones de la autora en el sentido que no


dispuso de ningún recurso para plantear sus quejas presentadas ante el Comité
porque, según la legislación nacional vigente, los actos judiciales no son
susceptibles de ser recurridos en amparo. En ausencia de argumentación del
Estado parte en contra de dicha afirmación, el Comité considera que no se
garantizó a la autora, en tanto que víctima, un recurso efectivo. En
consecuencia, el Comité concluye la existencia de una violación del párrafo 3
del artículo 2 del Pacto, en relación con los artículos 3; 7; 14, párrafo 1; 17;
24; y 26.

13.9El Comité de Derechos Humanos, actuando de conformidad con el


párrafo 4 del artículo 5 del Protocolo Facultativo del Pacto Internacional de
Derechos Civiles y Políticos, considera que el Estado parte ha violado los
artículos 3; 7; 14, párrafo 1; 17; 24 y 26; y el párrafo 3 del artículo 2, en
relación con todos los anteriores, del Pacto Internacional de Derechos Civiles
y Políticos.

14.El Comité toma nota de las medidas reparatorias acordadas entre la autora
y el Estado parte mediante el procedimiento de acuerdo amistoso entablado.
Reconociendo los avances del Estado parte en el cumplimiento de varias de
estas medidas, el Comité solicita el cumplimiento integral de los compromisos
acordados. El Comité recuerda asimismo que el Estado parte tiene la
obligación de evitar que se cometan violaciones semejantes en el futuro, en
particular, asegurando el acceso de las víctimas, incluidas las víctimas de
agresiones sexuales, a los tribunales en condiciones de igualdad.

15.Teniendo presente que, por ser parte en el Protocolo Facultativo, el Estado


parte reconoce la competencia del Comité para determinar si ha habido o no
violación del Pacto y que, en virtud del artículo 2 del Pacto, el Estado parte se
ha comprometido a garantizar a todos los individuos que se encuentren en su
territorio y estén sujetos a su jurisdicción los derechos reconocidos en el
Pacto, el Comité desea recibir del Estado parte, en un plazo de 180 días,
información sobre las medidas que haya adoptado para aplicar el presente
dictamen, Se pide al Estao parte asimismo que publique el dictamen del
Comité.

[Aprobado en español, francés e inglés, siendo la versión original el texto


español. Posteriormente se publicará también en árabe, chino y ruso como
parte del informe anual del Comité a la Asamblea General.]

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