Complicaciones de La Toracocentesis

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MONOGRÁFICO

Complicaciones de la toracocentesis y de la biopsia pleural


con aguja
F. Gallo Marín, F. Pascual Lledó y J.L. Viejo Bañuelos
Sección de Neumología. Hospital General Yagüe. Burgos.

Describimos las complicaciones de la toracocentesis y la biop- Complications of thoracocentesis


sia pleural con aguja, concluyendo en la bondad y utilidad de and pleural biopsy with needle
ambas técnicas. Se describen el neumotorax, hemotórax, con-
taminación bacteriana y alteraciones funcionales como com- The authors describe the complications of thoracocentesis and
plicaciones principales, siendo otras de menor entidad las de pleural biopsy with needle concluding with the goodness and
menor frecuencia. usefulness of both techniques. Pneumothorax, hemothorax
Arch Bronconeumol 1993; 29:129-135 and bacterial contamination and functional alterations in ad-
dition to the principal complications are described, with ot-
hers of lesser entity being of lower frequency.

Complicaciones de la toracocentesis ral/creatinina sérica mayor de 1) y ruptura esofágica


(aumento de amilasa en líquido pleural y pH ácido)3.
La aspiración con aguja transtorácica de líquido No hemos de olvidar que la toracocentesis tiene
alojado en el espacio pleural, o toracocentesis, es co- otra indicación que es la terapéutica6, debiendo ser
nocida desde la antigüedad, siendo desarrollada pos- realizada en pacientes con disnea, portadores de gran
teriormente en el siglo XIX', habiendo llegado a ser derrame pleural, sobre todo si presentan desplaza-
un valioso método diagnóstico rutinario y obligado en miento mediastínico.
nuestros días2. También practicaremos toracocentesis terapéuticas
La toracocentesis es diagnóstica aproximadamente de repetición a enfermos con derrame pleural malig-
en el 75 % de los enfermos con derrame pleural 3 y útil no, en los que no obtuvo éxito el intento de sínfisis y
en el manejo de los enfermos en el 15-20 % de los res- que se confirma mejoría tras la misma.
tantes4. No está claro el por qué se mejora tras la toracocen-
La toracocentesis que llamamos diagnóstica5, debe tesis evacuadora, ya que se consigue escaso incremen-
realizarse en casi todos los derrames pleurales que to en las funciones pulmonares7 y descenso, al menos
estudiamos por primera vez2 a excepción de aquéllos en algunos pacientes, de la PaO/, siendo posible que
que coexisten con insuficiencia cardíaca congestiva y la presencia de líquido pleural estimule receptores de
pequeños derrames víricos que disminuyen con el la cavidad torácica que produzcan disnea5 9.
tratamiento adecuado 2 ' 3 - 5 - 6 , aunque es obligada la vi- No existen contraindicaciones absolutas para la to-
gilancia y la realización de la toracocentesis sí la evo- racocentesis2-3, siendo la principal la diátesis hemo-
lución no fuera favorable. rrágica6, debiendo pensarse dos veces la realización de
La toracocentesis puede ser definitivamente diag- la misma sí el paciente está con tratamiento anticoa-
nóstica en las pleuresías malignas (presencia de célu- gulante sobre todo trombolítico, aunque dependiendo
las malignas en líquido pleural), empiema (presencia de la situación se podría realizar con aguja fina. Son
de pus), tuberculosis (presencia de micobacteria tu- asimismo contraindicaciones relativas la escasa canti-
berculosa), pleuresía típica (presencia de células LE), dad de líquido pleural, la poca colaboración del en-
quilotórax (elevación de triglicéridos o presencia de fermo y las condiciones locales como piodermitis o
quilomicrones), urinotórax (relación creatinina pleu- herpes.

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Las complicaciones de la toracocentesis, en general, En nuestra experiencia13, el neumotorax yatrógeno


son poco significativas2'6, no requiriendo la mayoría en la toracocentesis, tanto terapéutica como diagnósti-
de las veces actuación médica posterior, ni caracteri- ca, puede ser evitado con una técnica cuidadosa, sien-
zándose por sus consecuencias graves. do también de gran ayuda la utilización de una llave
Tanto en la toracocentesis diagnóstica como en la de tres pasos entre la aguja/catéter y la conexión al
terapéutica, podemos encontrarnos con las siguientes aspirador y/o jeringa.
complicaciones: Light no recomienda practicar radiografía de tórax
rutinaria tras la toracocentesis diagnóstica por la baja
Contaminación de líquido pleural con sangre por incidencia del neumotorax, aunque sí tras la terapéu-
punción traumática a pesar de tomar todas las tica.
precauciones técnicas Por otra parte, la mayoría de los neumotorax tras la
toracocentesis, carecen de significación clínica y son
Cuando tras la punción encontramos un líquido una minoría los que precisan drenaje con tubo toráci-
hemático, tenemos que saber si es debido a contami- co para su resolución.
nación por punción traumática o sí realmente se trata
A este respecto, es significativa la experiencia de
de un líquido pleural hemorrágico. 0'Moore et al14, quienes comunican en un trabajo
Para aclarar su naturaleza analizaremos con pronti-
sobre toracocentesis terapéutica y diagnóstica con
tud el líquido pleural para ver sí, tras centrifugación, guía ecográfica, la incidencia de neumotorax en nueve
se trata de un líquido xantocrómico, lo que indicaría de los 118 pacientes a los que practicaron toracocente-
hemolisis secundaria a efectos oncóticos en el seno del
líquido pleural, lo que es posible sí lleva, al menos 20 sis diagnostica, siete de los cuales estaban asintomáti-
minutos (la sangre) en la cavidad pleural2. Otro dato cos, uno preciso tubo de drenaje y otro paso a su
domicilio unas horas más tarde después de ser tratado
indicativo de la existencia de líquido hemático previo con válvula de Heimiich. Asimismo estos autores con-
a la punción, sería la existencia de hematíes crenados. tabilizaron ocho neumotorax bajo control ecográfico,
Estos criterios no serían válidos si no se efectuara el cinco de los cuales estaban asintomáticos con neumo-
análisis del líquido antes de 15 o 20 minutos tras la
extracción. Para Sahn3, la contaminación con sangre torax mínimos (menores del 5 %) o moderados (mayo-
res del 20 %), siendo tratados dos con válvula de
del líquido pleural por punción traumática es el pro-
Heimiich. Otros tres con neumotorax sintomático fue-
blema técnico más frecuente, señalando en su serie
ron tratados también con válvula de Heimiich. Los
una frecuencia para el mismo del 11 %. autores mencionados concluyen diciendo que las com-
plicaciones de la toracocentesis son extremadamente
Hemotórax bajas, siendo la más frecuente el neumotorax que solo
Puede ocurrir por lesión de un vaso intercostal, lo será tratado si el paciente se quejara de disnea, lo que
que habitualmente es evitado al realizar la punción realizaron a través del catéter de drenaje conectado a
siguiendo el borde superior de la costilla inferior, con una válvula de Heimiich o en pocos casos con tubo de
lo cual se elude el paquete vásculo-nervioso. drenaje.
De todas formas, en pacientes ancianos, la arteria En la mayoría de los casos, los enfermos son segui-
intercostal puede tener un trayecto tortuoso y corre- dos de forma ambulatoria con controles radiológicos
mos el riesgo de lesionarla a pesar de realizar una hasta la reexpansion pulmonar.
técnica escrupulosamente correcta10. Es de señalar que la presencia de neumotorax es
En ocasiones el hemotórax puede producirse por quizás más frecuente en pacientes con pleuresías ma-
alteraciones de la coagulación". lignas a los que se les practica toracocentesis evacua-
El hemotórax puede confundirse con un derrame dora y que son también portadores de afectación in-
hemático, estando indicado el realizar hematocrito en tersticial pulmonar. De todas formas, en estos pacien-
líquido pleural, ya que si éste es mayor del 50 % del de tes no suele ser necesaria la actuación sobre su
la sangre, estaremos ante un hemotórax verdadero12. neumotorax.
Neumotorax Contaminación bacteriana del espacio pleural
3
Fue la complicación más común para Sahn , esti- Para Light 15 y otros autores16, un 2 % de todas las
mada en un 12 %. infecciones pleurales son debidas a contaminación
El neumotorax puede estar causado por entrada de bacteriana durante la toracocentesis, siendo más fre-
aire a través de la aguja de toracocentesis y, menos cuente en la toracocentesis terapéutica, debido a que
frecuentemente, por lesión traumática de la pleura agujas y catéteres permanecen más tiempo en el espa-
visceral. cio pleural. Es obvio señalar la importancia de la
Para la mayoría de los autores, el neumotorax post- realización de la técnica con estrictas medidas estéri-
toracocentesis es más frecuente en la toracocentesis les.
terapéutica que en la diagnóstica, fundamentalmente La mayor parte de los gérmenes de la piel residen en
por dos razones: el pulmón al reexpanderse puede ser la epidermis, siendo sencilla su eliminación, pero más
lesionado por la aguja de drenaje y el aumento de la de un 20 % de los mismos 17 no se eliminaron con las
presión negativa intrapleural favorece la entrada de técnicas, ya que se protegen en los folículos pilosos,
aire desde el exterior. glándulas sebáceas y pliegues de la piel.
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Brashear18 señala, que nada específico se ha escrito Hipoxemia


respecto a la esterilización de manos y campo opera-
El intercambio gaseoso puede empeorar después de
torio para las técnicas invasivas pulmonares y en con-
creto para la toracocentesis, quizás porque se argu- la toracocentesis20, disminuyendo la Pa0¡ a los 20
menta que el riesgo de infección para una persona con minutos y a las 2 horas, volviendo a valores básales a
defensas normales es muy pequeño, pero generalmen- las 24 horas de la misma. El grado de hipoxemia se
te los pacientes que son sometidos a toracocentesis u correlaciona directamente con el volumen de líquido
otras técnicas invasivas pulmonares no son personas extraído. Esta hipoxemia se corrige fácilmente con
sanas y están expuestas, por otra parte, a microorga- oxigenoterapia a bajo flujo, debiendo administrarse
nismos hospitalarios, por lo que concluye señalando la durante la toracocentesis y al menos dos horas más
importancia de una buena asepsia. Este autor aconse- tarde, sobre todo en pacientes en los que se extraen
ja, a pesar de la controversia respecto al tiempo de grandes volúmenes.
lavado de manos, el realizarlo de forma concienzuda La causa de la hipoxemia, que por otra parte no es
encontrada por todos los autores21, no está clara, aun-
al menos durante 2-3 minutos con hexaclorofeno, que parece ser el fin de una suma de efectos como son
clorhexadina (hibidens) o povidona yodada (betadine)
y tras aclararse y secarse con toalla estéril, ponerse la presión negativa que se ejerce sobre los vasos del
guantes también estériles, para, durante tres minutos, intersticio tras la evacuación, el aumento del flujo
lavar concienzudamente la piel del paciente con deter- sanguíneo en zonas previamente atelectasiadas con
daño en la membrana alveolo-capilar y el trasvase
gente de povidona yodada frotando con una gasa de
resultante con alteraciones de la ventilación-perfu-
forma circular partiendo de la zona elegida para la
punción. Tras aclarar la zona con agua estéril o suero sión.
salino, se secará con gasa estéril, aplicando una solu-
ción antiséptica de povidona yodada, dejándola secar Edema pulmonar unilateral
antes de comenzar la punción, procediendo para reali- Sólo ocurre en las toracocentesis terapéuticas, cuan-
zar la punción al cambio de guantes estériles. do se evacúan generalmente más de 1.000 ó 1.500
Es importante señalar que parte de la efectividad de mi.
la descontaminación es la destrucción de las bacterias El edema pulmonar unilateral, que sigue a la reex-
por la fricción sobre la piel, por lo que es aconsejable pansión pulmonar, ocurre al reairearse rápidamente el
que el detergente de povidona yodada se aplique so- pulmón previamente colapsado por el derrame pleu-
bre la piel con gasa y guantes estériles, mejor que con ral. El edema pulmonar se asocia a un grado variable
pinzas19, debiendo considerar asimismo que el rasurar de hipoxia e hipotensión, requiriendo en ocasiones
aumenta la tasa de infecciones postoperatorias. intubación y ventilación mecánica.
La siembra bacteriana con infección secundaria de El mecanismo responsable exacto no se conoce y se
tejidos blandos de la pared torácica en el trayecto de cree que está en relación con la presión negativa pleu-
la punción es una complicación más teórica que real ral que se crea, aunque en algunos casos ha ocurrido
por su rareza. sin aplicar presión negativa al espacio pleural.
El edema pulmonar tras toracocentesis evacuadora
Fracaso en la obtención de líquido pleural parece deberse al aumento de la permeabilidad de la
vasculatura pulmonar, dado el alto contenido proteico
Para Sahn3 es la segunda complicación en orden de del líquido del edema2'. Este aumento de la permeabi-
frecuencia. Las posibles causas de la no obtención de lidad capilar se origina, probablemente, por disminu-
líquido son: ción del agente tensioactivo que se cree acompaña a
- Ausencia de líquido pleural. las atelectasias, así como al trauma de la presión.
- Aguja demasiado corta. Los pacientes que desarrollan un edema pulmonar
- Colocación inadecuada de la aguja, motivo por el post-toracocentesis, presentan tos y opresión durante
cual debe tratarse de seguir escrupulosamente los mé- o después de la toracentesis. Los síntomas progresan
todos de localización del derrame (físicos, radiológi- en 24-48 horas y en la radiografía hay signos de edema
cos, etc.). ipsilateral, pudiendo en ocasiones, ser controlaterales.
- Obstrucción de la aguja de toracocentesis por Si el paciente no muere en las primeras 48 horas, se
fragmento de piel, pus espeso o coágulos. suele recuperar totalmente. Cabe señalar que se han
- Punción demasiado alta, con obtención al aspirar conocido muertes por edema pulmonar unilateral tras
de burbujas de aire, lo que indicaría la lesión del reexpansión pulmonar en personas jóvenes previa-
pulmón, lo que no suele tener consecuencias si retira- mente sanas, tras neumotorax22.
mos la aguja con prontitud y la aguja es de pequeño La incidencia del edema pulmonar posterior a la
calibre. La punción se intentará de nuevo un espacio reexpansión no es conocida, aunque Bernstein23 lo
más abajo. estima en un 10 % para el neumotorax.
Merece la pena considerar la ayuda, en ocasiones Cuando hacemos una toracocentesis y para evitar el
esencial, que puede proporcionarnos la ecografía de edema, debemos limitar la extracción a un máximo de
cara a conseguir líquido, sobre todo en derrames de- 1.000 ce, a no ser que, como aconsejan Light et al,
masiado pequeños, líquido loculado o tras el fracaso monitoricemos la presión pleural durante la evacua-
de un intento previo «ciego» de toracocentesis. ción y suspendamos la misma cuando la presión al-

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canee los -20 cmH^O. Estos autores han evacuado, signos de toxicidad nerviosa o vascular si nos excede-
con este sistema y sin problema, hasta 5.000 mi24. mos en la dosis recomendada (15 mi, si es al 2 %, 30
Aconsejamos, para prevenir esta complicación, el eva- mi si al 1 % o 60 si al 0,5 %).
cuar lentamente el derrame y parar ante la presencia La toxicidad nerviosa puede manifestarse por ma-
de tos, disnea o dolor torácico. reo, visión borrosa, temblor fino, pudiendo aparecer
Para Shan3, el edema es más frecuente si el paciente convulsiones tipo gran mal.
es portador de un carcinoma con atelectasia o con La toxicidad cardiovascular a la lidocaína se mani-
afectación de pleura visceral, así como también en fiesta por hipotensión secundaria a bradicardia, vaso-
aquellos procesos benignos que no permiten la buena dilatación periférica, transtornos de conducción y fi-
reexpansión pulmonar. brilación ventricular pudiendo llegar a parada cardía-
ca.
Reflejo vaso-vaga!
Ocurre en ocasiones y se caracteriza por bradicar- La reacción dérmica al desinfectante es rara, ya que
dia, descenso del gasto cardíaco e hipotensión. en la actualidad no se usa yodo.
Esta reacción puede bloquearse con la administra- La punción accidental del hígado o bazo es muy
ción intra-muscular de 1 mg de atropina, por lo que se rara, pudiendo ocurrir cuando el derrame es pequeño
recomienda administrar como premedicación, aun- y la toracocentesis se realice en el 10.° espacio inter-
que otros autores lo utilizan solamente si se presenta- costal o por debajo.
ra el reflejo, lo que tiene la ventaja de que obvia las La posible siembra bacteriana o de células inmorales
posibles contraindicaciones de la atropina en pacien- en el trayecto de la punción son excepcionales.
tes cardíacos, portadores de glaucoma, hipertrofia Podemos concluir diciendo que en general, las com-
prostática o fiebre. plicaciones de la toracocentesis son escasas, y aunque
La administración de atropina es opcional en la el tipo de las mismas es similar, indudablemente, su
toracocentesis y obligada en la biopsia2. frecuencia es mucho más baja cuando la técnica es
realizada por médicos experimentados.
Dolor en lugar de la punción. Ansiedad
No se consideran prácticamente como complicacio- Complicaciones de la biopsia pleural con aguja
nes. El dolor se evita con la anestesia local con lidocaí- Entendemos por biopsia pleural con aguja, la obten-
na al 2 %, droga que inhibe la conducción nerviosa de ción de un fragmento de tejido pleural parietal por
forma reversible cuando se aplica a concentración medio de una aguja, atravesando la pared torácica. Es
apropiada. Con lidocaína conseguiremos una aneste- una técnica poco lesiva que nos permitirá etiquetar un
sia más intensa y duradera que con procaína. buen número de derrames pleurales, tras la evalua-
La ansiedad suele evitarse con la explicación al ción microscópica y bacteriológica de la pieza27'29. La
paciente de la técnica y con la buena relación médico- realización de la biopsia pleural percutánea se ha con-
enfermo, siendo para diversos autores2 opcional la vertido en técnica rutinaria a partir de los años 50 y su
aplicación previa de un ansiolítico. El dolor, la ansie- indicación es la evaluación de todos los exudados
dad, la visión de sangre y otras emociones pueden pleurales de causa no conocida2 3- 5 6. Para Sahn, una
desencadenar un síndrome caracterizado por pérdida indicación más precisa serían los exudados linfocita-
súbita de la resistencia vascular periférica, sin bradi- rios no diagnosticados, dado que el diagnóstico habi-
cardia, con disminución de la tensión arterial, palidez, tual al que llegamos con la biopsia pleural percutánea
sudoración, frialdad y mareo. Este síndrome no es es el derrame tuberculoso o el derrame maligno.
bloqueado por la atropia y sí por derivados de benzo- Otros autores señalan asimismo como indicación2
diazepinas, en el caso de que sea desencadenado por aquellos pacientes con enfermedad maligna ya diag-
el miedo25, pero no si el desencadenante es el dolor. nosticada y fallo cardíaco asociado, para confirmar o
Su tratamiento es suspender la toracocentesis y po- descartar enfermedad metastásica pleural. Asimismo
ner al enfermo en posición de Trendelemburg26. hemos de considerar que la biopsia pleural percutánea
puede ser también diagnóstica en enfermedades reu-
Reacción adversa al anestésico local
máticas-"- y parasitarias.
Puede tratarse de una reacción alérgica, a una in- Aunque puede realizarse sin presencia de líquido32,
yección intramuscular o una dosis excesiva de anesté- la mayoría de los autores sólo la practican en presen-
sico. cia del mismo, debiendo considerar otros procederes
Las reacciones alérgicas son raras, sobre todo con como son la toracoscopia o biopsia quirúrgica, en
los anestésicos tipo amida, siendo las reacciones gene- ausencia de líquido.
ralmente secundarias al conservante. No creemos que la biopsia pleural percutánea deba
Si existe historia de reacción a un anestésico, debe realizarse de forma rutinaria ante la primera toraco-
usarse otro de familia diferente (amida/ester) sin con- centesis, debiendo confirmar previamente que se trata
servantes. de un exudado, ya que la biopsia causa más morbili-
En general, no deben usarse en las técnicas pulmo- dad que la toracocentesis diagnóstica, es más cara y
nares anestésicos que contengan adrenalina26, siendo raramente aporta información útil en los trasudados.
el más ampliamente usado la lidocaína, pudiendo dar Light aconseja usar un refractómetro a la cabecera del
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paciente para medir el nivel proteico y decidir la piratoria, ya que el posible neumotorax tras la misma
práctica de la biopsia simultáneamente a la toracocen- puede precipitar al paciente al fallo respiratorio.
tesis. El empiema es otra contraindicación, habiéndose
En los trasudados sin evidencia de fallo cardíaco, comunicado la existencia de abscesos subcutáneos en
nefrosis o cirrosis, se aconseja seguir la evolución el lugar de la biopsia32.
clínica y radiológica y si el derrame persiste o existen Es útil incluir entre las contraindicaciones los derra-
otros datos de enfermedad granulomatosa o maligna, mes pleurales de causa conocida (insuficiencia cardía-
se realizará la biopsia. ca, nefrosis, etc.).
Sahn revisa 2.893 biopsias pleurales y el 57 % de las La biopsia pleural ciega estaría contraindicada en
mismas fueron diagnósticas para carcinoma, siendo el ausencia de líquido pleural libre, pudiendo realizarse
75 % diagnósticas para tuberculosis en otras series. en estas circunstancias bajo control pleuroscópico o
Respecto al rendimiento para el diagnóstico de carci- ecográfico.
noma, influiría el estadio del mismo en el momento Las enfermedades de la piel (piodermitis, herpes),
de realizar la técnica, la experiencia del médico en la serían, por último junto con la negativa del paciente,
realización de biopsias pleurales, el número de biop- las últimas contraindicaciones.
sias y la localización de las mismas. Para Cantó33 el La frecuencia de las complicaciones tras biopsia
lugar de la realización es importante, pues sus estu- pleural con aguja se estima entre el 5 y 11 %40, siendo
dios indican que el rendimiento sería mayor en las por otra parte las mismas que las de la toracocentesis
pleuresías metastásicas, si la biopsia percutánea se diagnóstica.
realiza lo más cerca posible del diafragma.
La biopsia pleural es muy rentable para el diagnósti- Neumotorax
co de tuberculosis, pero lo es menos para malignidad, Más habitual tras la biopsia pleural (3 %) que tras la
al menos si se compara con la citología del líquido toracocentesis (2 %), ya que es más fácil lesionar la
pleural, que es diagnóstica, en algunas series hasta el pleura visceral y también está favorecida la entrada de
90 %, mejorando si se realiza en toracocentesis seria- aire desde el exterior a través de la aguja por el
das. gradiente de presiones.
Los falsos positivos son raros en la biopsia pleural, Para Light, sólo el 1 % de los neumotorax tras biop-
mientras que los falsos negativos son más frecuentes, sia pleural, requieren tubo torácico y Sahn señala una
siendo para algunos autores2 de un 43 % para tubercu- incidencia del 3 al 15 % para neumotorax, pero añade
losis y de un 52 % para malignidad. que no requieren actuación para su resolución.
Se aconseja repetir la biopsia ante un hallazgo nega- Ante un neumotorax post-biopsia pleural debemos
tivo28 y aunque algunos autores refieren que no mere- examinar cuidadosamente la zona anatómica de la
ce la pena realizar una tercera2 otros aconsejan hacer- biopsia, ya que sobre todo en pacientes delgados, el
lo' 2 - 34 . aire puede seguir entrando desde el exterior a través
No cabe ninguna duda sobre la utilidad diagnóstica del trayecto de la biopsia, una vez retirada la aguja, lo
de este método, que se realiza a la cabecera del enfer- que suele ocurrir más frecuentemente con las agujas
mo y para el que disponemos de diversos modelos de de mayor calibre. En estas ocasiones, es obligada la
sencillas agujas. sutura del lugar de la biopsia para interrumpir la
El método fue introducido en los años 50 por Fran- entrada de aire.
cis35 para diagnóstico de pleuresía tuberculosa y en Como todos los neumotorax yatrogénicos, si el pa-
1958 Cope36 y Abrams37 describieron nuevas agujas ciente no tiene síntomas o está oligosintomático y el
para biopsia pleural, así como Castelain38 en 1964. neumotorax ocupa menos del 40 % del hemitorax, el
Abundan las comunicaciones sobre el uso de las enfermo será vigilado cuidadosamente, siendo acon-
diferentes agujas siendo difícil determinar cual da sejable la administración de oxígeno para así aumen-
mejores resultados, estando quizás más en relación tar la rapidez de reabsorción del neumotorax 41 .
con la habilidad del operador que con el modelo de Por otra parte y como ya hemos indicado, solo el
aguja. Morrone39 en su serie concluye que en su expe- 1 % de los neumotorax post-biopsia pleural, requeri-
riencia obtienen los mismos resultados con aguja de rán tubo torácico.
Cope que con aguja de Abrams, a pesar de que los
fragmentos son mayores y menos distorsionados con Hemotórax
la aguja de Abrams, pero esto no se traduce en un
mayor rendimiento en su serie. Por otra parte, la Sahn lo encuentra menos de un 2 %. La causa es la
aguja de Cope y la de Castelain serían de más fácil uso lesión de los vasos intercostales, lo que es fácilmente
y de más bajo precio. Nosotros hemos obtenido bue- evitable con la técnica adecuada. Recientemente se ha
nos resultados con la de Castelain y la de Abrams. comunicado42 un hemotorax con fístula arteriovenosa
La contraindicación principal para la biopsia pleu- intercostal tras biopsia pleural, que preciso toracoto-
ral con aguja es la diátesis hemorrágica, no debiendo mía.
realizarse bajo tratamiento anticoagulante y pudiendo
hacerse tras transfundir plaquetas ante un déficit de Punción accidental del hígado, bazo o riñon
las mismas. También se considera contraindicada la Por error al elegir la zona de la biopsia, aunque en
biopsia pleural ante un paciente con insuficiencia res- ocasiones se visualiza tejido hepático o renal en la

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biopsia, sin que el enfermo sufra complicaciones6. Sin BIBLIOGRAFÍA


embargo, la lesión del bazo amerita, en ocasiones 1. Garrison FM. Introduction to the history of medicine, 4th ed.
esplenectomía43, por lo que se debe ser cuidadoso en Philadelphia: WB Saunders Co 1929; 661.
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con adecuada esterilización, como hemos descrito al En: Martín Escribano P, López Encuentra A. Derrames pleurales.
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