Encuentro 2
Encuentro 2
Encuentro 2
ENCUENTRO N° 2
ENCUENTRO N° 2
Materiales:
Primer momento:
Motivación (15 minutos)
Para comenzar el encuentro, les proponemos escuchar la canción "Esta historia" de Raly Barrionuevo.
(letra y video en el Anexo No. 1). Luego de escucharla, les sugerimos las siguientes preguntas para
analizarla en comunidad.
► ¿Qué les sugiere la frase “vamos desandando este camino”? ¿De qué
manera creen que, como jóvenes, están “desandando este camino”?
► ¿En qué les hace pensar la siguiente frase: “Somos artesanos de memoria, y
está lleno de rostros nuestro amor”?
► ¿Qué rostros e imágenes te vienen a la mente y al corazón con las palabras
del estribillo? ¿Cuáles creés que compartís con tu comunidad? ¿Por qué?
► ¿Cuándo ha “brotado luz de tus cenizas” a lo largo de tu historia? ¿Cuáles
han sido los “vientos de tu andar”?
Segundo momento:
Descripción de la experiencia (30 minutos)
Luego de trabajar la canción como motivación para este encuentro, los invitamos a fabricar una línea de
tiempo gigante de papel (la pueden hacer uniendo varios afiches, cartulinas u hojas, usando un rollo
grande de papel o simplemente uniendo diarios o algunas otra cosa que tengan a mano). En la línea de
tiempo, les sugerimos marcar los siguientes eventos:
► El año de nacimiento del más viejo del grupo/la comunidad como punto de
partida, o el año en que se fundó la parroquia/el movimiento.
► De acuerdo a la cantidad de años que haya entre ese momento y el presente,
pueden poner una referencia de tiempo cada dos, tres o cinco años.
► El ENJ Rosario 2018 como un evento próximo importante, y si quieren, un
tiempo posterior para dar continuidad a lo que vivan en el encuentro.
La idea de este momento es que, siguiendo la propuesta de la canción, cada joven vaya escribiendo
papeles (pueden ser autoadhesivos) con eventos importantes de su historia personal, su historia de fe y
la historia de su grupo/comunidad, pensando especialmente en personas, momentos alegres, momen-
tos tristes, anécdotas, etcétera. Luego, en un momento comunitario, con alguna canción de fondo (a
elección del animador, significativa para el momento o para el grupo/la comunidad), pueden pegar los
papeles en la línea de tiempo.
Les sugerimos dejar que el compartir entre los jóvenes en ese momento sea natural, ya que seguramen-
te algunos acontecimientos coincidan, y otros llamen la atención o traigan recuerdos agradables.
Tercer momento:
Análisis de la experiencia (30 minutos)
Para este momento, les proponemos formar grupos de 4 ó 5 personas para trabajar algunas resonancias
de la dinámica anterior.
Para que ustedes, animadores, puedan hacer un cierre de este momento, les proponemos las siguientes
líneas de reflexión:
► Conocer nuestra historia implica conectarnos con quienes somos, con
nuestra identidad. Necesitamos ser conscientes de que nuestra historia perso-
nal tiene que ver con procesos y acontecimientos más amplios: ¿cuántas
cosas de nuestra historia hicieron que estemos juntos hoy acá? ¿Cuántas
cosas del país hicieron que hoy tengamos “esta historia”?.
► Destacar el protagonismo que tuvieron y tienen los jóvenes en la historia de
la Pastoral de Juventud (en los distintos niveles), del país y en su propia historia
personal.
► Dios abraza nuestra historia, se hace presente de manera muy creativa,
hasta pedagógica. El cuento clásico “Huellas”, de autor anónimo, nos propone
una imagen muy agradable para vivir con alegría esta verdad de fe (ver Anexo
No. 4).
Cuarto momento:
Discernimiento cristiano (15 minutos)
Para finalizar, los invitamos a hacer un momento de oración comunitaria en el que puedan dar gracias
por el camino de cada uno y del grupo/la comunidad, y pedir ser protagonistas para, juntos, “renovar la
historia”.
Les sugerimos ambientar el espacio la línea del tiempo en el piso (si pueden hacerlo al aire libre, mejor).
Se colocan todos alrededor de la línea, y comienzan la oración con la Señal de la Cruz. Se proclama la
siguiente lectura: Mateo 11, 25-26. En estos versículos, Jesús da gracias por lo que Dios ha mostrado a
los humildes. De la misma manera, nosotros, en este encuentro, queremos ser agradecidos por haber
podido “desandar nuestro camino”, y volver a pasar por la memoria y por el corazón nuestra historia,
personal y comunitaria.
Luego, en la línea del tiempo, los jóvenes van dejando velas encendidas con su deseo de ser protagonis-
tas en la construcción de la Civilización del Amor. Pueden cantar juntos alguna canción al final, como
“Una nueva civilización” (para escucharla, pueden ver el Código QR en el Anexo No. 5). Pueden cerrar
rezando un Gloria y dándose el saludo de la paz.
Anexos:
Anexo N° 01:
Esta Historia
Vamos desandando este camino,
vamos resistiendo en este olvido
que está lleno de vida este dolor,
está lleno de sangre este dolor.
Somos trashumantes de la historia,
somos artesanos de memoria
y está lleno de rostros nuestro amor
está lleno de sangre.
En 1981, los obispos argentinos, atentos a la opción preferencial por los pobres y por los jóvenes, procla-
mada en Puebla, lanzan la Prioridad Juventud, un plan pastoral de cinco años, bajo el lema “Toda la
Iglesia evangeliza a toda la Juventud”.
En 1985 se realiza en la ciudad de Córdoba el Encuentro Nacional de Juventud bajo el lema “Construya-
mos juntos una patria de hermanos”. El tema de este encuentro fue la Civilización del Amor. Más de 100
mil jóvenes de todo el país participaron, agrupados en distintos centros de interés, que dan origen a
pensar juntos una pastoral sectorial.
Se comienza la organización y coordinación a nivel nacional. Al mismo tiempo se tienen los primeros
contactos con las pastorales juveniles de América Latina.
La Jornada Mundial de la Juventud, se celebra en Buenos Aires en abril de 1987, bajo el lema “Nosotros
hemos conocido el amor que Dios nos tiene y hemos creído en Él”.
En octubre de 1990 en Paraná, provincia de Entre Ríos, se realiza el Primer Encuentro Nacional de
Responsables de Pastoral de Juventud, bajo el lema “Creemos en Cristo, con Él hacemos la historia”.
En la etapa posterior este encuentro se consolida la acción pastoral organizada, que se expresa en la
permanencia y periodicidad de las instancias nacionales de Asambleas y reuniones con representantes
de las distintas regiones, movimientos, e instituciones.
Los obispos presentan las «Líneas Pastorales para la Nueva Evangelización», cuyo núcleo
Evangelizador queremos vivir: La estrecha vinculación entre la fe y la dignidad humana.
Se desarrollan diversos programas de formación tanto a nivel nacional como regional, teniendo en
cuenta la encarnación del Evangelio en la realidad juvenil, para impulsar comunidades juveniles, cele-
brativas y misioneras.
Esta experiencia es vivida de un modo especial en la acampada juvenil del Congreso Eucarístico
Nacional (CEN), en 1994, en Santiago del Estero. Los 5000 jóvenes que participaron, vivieron la
Eucaristía como centro y corazón del compartir de pequeñas comunidades. El lema del CEN fue “Jesu-
cristo, pan de vida y esperanza de los hombres”.
En octubre de 1996, en la diócesis de Mar del Plata, se realiza el Segundo Encuentro Nacional de
Responsables de Pastoral de Juventud. En la localidad de Chapadmalal, más de 3.000 referentes de la
Pastoral de Juventud de todo el país reflexionaron a la luz del lema “Junto con Jesús construyamos la
cultura de la vida”.
1998, en Chile, un gran número de jóvenes argentinos participan del Encuentro Continental de Jóvenes,
y del II Congreso Latinoamericano de Pastoral Juvenil.
1999, con las pastorales juveniles del Cono Sur, Brasil, Chile, Uruguay y Paraguay, se realiza por primera
vez un Gesto Común, para expresar el compromiso en la construcción de sociedades más justas y
fraternas, en nuestro continente.
En el año 2000 y como fruto de la reflexión nacional empezó a funcionar el Instituto Nacional de
Formación de Pastoral de Juventud “Cardenal Eduardo Francisco Pironio”.
Ese mismo año, Argentina fue sede del XIII Encuentro Latinoamericano de Responsables Nacionales de
Pastoral Juvenil. Esto representó un signo de la creciente sintonía latinoamericana que venía impreg-
nando a nuestra Pastoral de Juventud.
En el año 2001 se realizó un Concurso Nacional de Proyectos Sociales, el cual buscó entrar en contacto
y acompañar iniciativas concretas a favor de la dignidad de los jóvenes, llevadas adelante por jóvenes de
todo el país.
El lanzamiento del Plan Nacional de Pastoral de Juventud en el año 2001 buscó involucrar a todos los
jóvenes en un proceso de planificación a partir de la reflexión y conversión, para transformar la acción
pastoral y la realidad juvenil. A través de la metodología de una Planificación Pastoral Participativa, se
fueron viendo las distintas etapas para hacer realidad el sueño de una Pastoral de Juventud que acom-
paña la vida y las opciones de los jóvenes.
En el marco de ese proceso, en 2002 se realizó el Segundo Gesto Común del Cono Sur, expresión del
compromiso por los más pobres en torno al anuncio, la denuncia y la celebración.
En 2007, como resultado del profundo trabajo del Plan Nacional se publicó “Un mapa para navegar mar
adentro”, un libro que describe el camino realizado en las dos primeras etapas del plan e invita a dar
continuidad a los procesos de planificación en las diócesis, movimientos, comunidades juveniles,
etcétera.
La realización del Tercer Gesto Común del Cono Sur tuvo lugar del 14 al 22 de Agosto de 2004. Los
países de la región quisimos poner la mirada en el compromiso social y político de los jóvenes, para
propiciar la reflexión sobre la solidaridad y la ciudadanía. Por esto, el lema que acompañó este gesto fue
“Construyendo la democracia como bien común” en el cual cada país debía elegir el logo y la acción a
realizar. En Argentina, se propuso el ayuno como gesto central entendiendo que: “ayunar es privarnos de
algo... ese algo se transforma en un gesto solidario para mi hermana y hermano más necesitado... Así
Hasta ese año 2012 llevamos adelante diversos proyectos que surgen de los desafíos que nos presentó
“Un mapa para navegar mar adentro”, buscando caminos para animar y servir mejor a las comunidades
juveniles, a los movimientos, a los animadores y asesores y a las y los jóvenes de nuestra patria.
Actualmente nos encontramos en un proceso que busca revitalizar la Pastoral de Juventud de Argentina
y renovar la opción preferencial por los jóvenes, a través de un proceso de relectura de nuestra acción
pastoral, que sea participativo, y de conversión personal y comunitaria en las comunidades juveniles,
equipos Diocesanos, de Movimientos, Equipos Regionales y Comisión Nacional, para la construcción
de la Civilización del Amor.
Anexo N° 03: Discurso del Papa en Copacabana, en la Vigilia de la JMJ Río 2013
Una noche tuve un sueño: soñé que estaba caminando por la playa con el
Señor y, a través del cielo, pasaban escenas de mi vida. Por cada escena que
pasaba, percibí que quedaban dos pares de pisadas en la arena: unas eran las
mías y las otras del Señor.
Cuando la última escena pasó delante nuestro, miré hacia atrás, hacia las
pisadas en la arena y noté que muchas veces en el camino de mi vida queda-
ban sólo un par de pisadas en la arena. Noté también que eso sucedía en los
momentos más difíciles de mi vida. Eso realmente me perturbó, y pregunté
entonces al Señor: "Señor, Tú me dijiste, cuando resolví seguirte, que andarías
conmigo a lo largo del camino, pero durante los peores momentos de mi vida,
había en la arena sólo un par de pisadas. No comprendo por qué me dejaste en
las horas en que yo más te necesitaba".
Entonces, El, clavando en mí su mirada infinita me contestó: "Mi querido hijo.Yo
te he amado y jamás te abandonaría en los momentos más difíciles. Cuando
viste en la arena sólo un par de pisadas fue justamente allí donde te cargué en
mis brazos".
Anexo N° 03: Canción “Una Nueva Civilización”, Himno Oficial de la JMJ Buenos Aires 1987
ROSARIO 2018