Ensayo de La Epica Española-Satiango Romero
Ensayo de La Epica Española-Satiango Romero
Ensayo de La Epica Española-Satiango Romero
ALUMNO:
SANTIAGO ROMERO RODRIGUEZ
C.I. 31.111.861
En el Poema de Mío Cid la mayor parte de los acontecimientos se ajusta a la historia. Un rasgo
muy marcado en la épica francesa y la germana fue el elemento maravilloso. A diferencia de la
epopeya española que se reduce a lo elemental es decir, la mentalidad del hombre de esa época
admite como posible; por ejemplo el sueño que el Cid que tiene con el arcángel San Gabriel o el
episodio del león. Otro aspecto muy importante que relatan algunos historiadores de la vida son
ciertas incongruencias; por ejemplo el nombre de las hijas del Cid llamadas Doña Elvira y Doña
Sol sino Cristina y María. Es decir, al parecer se utilizó fantasía y agregaron detalles que no son
reales pero que de ninguna manera alteran la historicidad.
Todos los lugares que de allí se señalan, están localizados en la ruta del Cid en un mapa de la
España actual. Mientras en Francia se abandonan los temas épicos; España los repite a través de
su historia literaria como el romancero, el teatro y la poesía lírica. Su estructura poética está
compuesta por 3.730 versos que oscilan entre 10 y 20 silabas, constituidos por largas tiradas de
versos, con rima asonante con versos de 14, 15 y 13 silabas los cuales están divididos en tres
partes: «Cantar del destierro». Narra la partida del Cid desde Burgos a Levante, el «Cantar de las
bodas». Narra el asentamiento del Cid en Valencia y las bodas de sus hijas, Elvira y Sol, con los
Infantes de Carrión y por último el «Cantar de la afrenta de Corpes». Habla de la partida de sus
hijas con sus maridos hacia Castilla, del abandono y ultraje en Corpes, de la petición de justicia
del Cid al rey y del nuevo matrimonio de sus hijas.
Este poema es un testimonio de valores sociales y políticos de la edad media española.
Aspectos importantes como la organización social, el sentimiento cristiano, las relaciones entre
señores y vasallos, ciertas costumbres, se observa en el Poema de Mío Cid. La humanización del
héroe se caracteriza por no estar ligado a lo sobrenatural; no son semidioses, tampoco tienen
poderes especiales; las manifestaciones épicas de la edad media la concepción religiosa cristiana
está presente en los cantares de gesta. El objeto se presenta estructurado en un viaje,
características propias de un desplazamiento. Asimismo, presenta un doble plano: un viaje real y
físico por los lugares de España; y un viaje interior, que se da en la psique de los personajes y que
se manifiesta en una constante evolución de su personalidad, culminando cargado de fama y
gloria y no como un vasallo sino como un héroe victorioso.
Y ahora, finalizando el tema, es importante resaltar que al Cid se le conoce por la literatura.
Porque fué el Cid literario el que nos trajo de la mano al Cid histórico es decir, más que la
historia y que la tradición, la interpretación del poema incitó a descubrir su figura real a los
investigadores de España y fuera de ella. La literatura es antecedente y epílogo del Cid; por ella
entró en la Historia. Cabe destacar, que el humano en el Cid nos refleja su amor a Dios al
agradecer antes las pruebas en las que se ve sometido, de modo que el último verso citado, más
que una acusación, es simplemente la constatación de un hecho. A partir de ese momento el héroe
habrá de sobrevivir con los suyos en las penalidades del destierro. Pero éste, aunque constituye
una condena, también abre un futuro cargado de promesas como cita en el siguiente verso
exclamando a su lugarteniente: “¡Albricia, Álvar Fáñez, ca echados somos de tierra!” (v. 14).