Arturo Cova La Voragine
Arturo Cova La Voragine
Arturo Cova La Voragine
Arturo Cova, un hombre de la ciudad pero aventurero y valiente, se va de Bogotá al llano con Alicia
una muchacha, hija de familia adinerada y de aceptable condición social, la cual se va con Arturo
porque no quiere casarse con un hombre terrateniente. Llegan a una selva y ambos se hospedan
en la marolita, casa del llanero franco y su mujer Griselda. Surge entonces un personaje
despreciable, Barrera, un asesino y ladrón que se dedica a engañar trabajadores, barrera secuestra
a Alicia y a Griselda, por lo que Arturo y Franco se ven requeridos a una persecución.
Comienza para Arturo y franco un viaje por la selva tropical. Llegan a una especie de infierno
terrestre en las plantaciones de caucho. En este lugar conocen al anciano Clemente Silva quien
desde hace tiempo busca en la selva los restos de su hijo.
Guiados por Clemente, junto con otros fugitivos, Arturo y Franco continúan la persecución para
castigar al bandolero y salvar a los caucheros. Finalmente encuentran a Alicia y a Griselda y
después de un combate con el despreciable bandolero, Barrera encuentra la muerte, Arturo y
Alicia retornan a la ciudad.
Mientras que en el sueño de celta se narra que esta novela empieza en el Congo en 1903 y
termina en una cárcel de Londres, una mañana de 1916. Allí se cuenta la peripecia vital de un
hombre de leyenda: el irlandés Roger Casement. Héroe y villano, traidor y libertario, moral e
inmoral, su figura múltiple se apaga y renace tras su muerte.
De sus viajes al Congo Belga y a la Amazonía peruana quedaron dos informes memorables que
conmocionaron a la sociedad de su tiempo, pues tras ellos se revelaba una verdad dolorosa: no
era la barbarie africana ni amazónica la que volvía bárbaros a los civilizados europeos; eran ellos,
en nombre del comercio, la civilización y el cristianismo, quienes cometían los actos más bárbaros.
Estos dos viajes y lo que allí vio, cambiarían a Casement para siempre, haciéndole emprender otra
travesía
En plena I Guerra Mundial, viajó a Berlín para conspirar contra el Reino Unido y participó en el
Alzamiento de Pascua de 1916, hecho que lo llevo finalmente prisión por la publicación de unos
diarios, de veracidad dudosa, en los últimos días de su vida, airearon unas escabrosas aventuras
homosexuales que le valieron el desprecio de sus compatriotas. En este territorio que se multiplica
por cinco (África, la Amazonia, Irlanda, la cárcel, el sexo), El sueño del celta describe una aventura
existencial, en la oscuridad humana aparece en su estado más puro y, por tanto, más enfangado.