Actividad 15-Iparraguirre Aliaga

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“Año del Bicentenario del Perú: 200 Años de Independencia”

FACULTAD DE DERECHO Y CIENCIA


POLÍTICA

ESCUELA PROFESIONAL DE DERECHO

TEMA:
“ANÁLISIS DEL CÓDIGO DE ÉTICA DE LA FUNCIÓN

PÚBLICA. LEY Nº 27815. LOS COLEGIOS DE ABOGADOS Y EL


CONTROL DE LA CONDUCTA MORAL DEL ABOGADO”

ÁREA:
ÉTICA PROFESIONAL

AUTOR:
IPARRAGUIRRE ALIAGA, JOSÉ EDUARDO

ASESOR:
DR. SILVA MADINA, WALTER

AYACUCHO – PERÚ

2021
“ANÁLISIS DEL CÓDIGO DE ÉTICA DE LA FUNCIÓN PÚBLICA. LEY Nº
27815. LOS COLEGIOS DE ABOGADOS Y EL CONTROL DE LA
CONDUCTA MORAL DEL ABOGADO”

Los abogados y estudiosos de las leyes a medida de su formación son

inculcados con principios y valores para poder desempeñar sus funciones en base a la

ética que debe de caracterizarlos en su carrera profesional.

En el territorio peruano, los abogados son formados a base de valores y

principios éticos acorde al Código de Ética de la Función Pública Ley N°27815, existe

una institución la cual resguarda todo ello, es el Colegio de Abogados, dentro de esta

institución se agrupan distintas personas que han sido formados en la profesión de

derecho. Dentro de este colegio los abogados, magistrados y demás colegas en general

son formados bajo los siguientes principios:

 Justicia: Es el fin máximo y supremo que los abogados deben de

alcanzar mediante el ejercicio de su profesión.

 La ética: Los abogados deben de actuar con ética y moral al relacionarse

con sus colegas como también en la defensa de sus patrocinados, bajo

el respeto del derecho, deberes y valores a fin de alcanzar el bien común.

 La cultura y democracia: Los abogados deben de ejercer su profesión

sin distinción alguna, no puede tolerarse algún tipo de discriminación.

 La contribución al desarrollo: El profesional en leyes debe de buscar

que el lugar donde se encuentre se desarrolle de forma integral a base

de paz e integración, es decir, justicia social, tal cual lo manifiesta el

Colegio de Abogados.
 Ejercicio de la abogacía en derecho: Los abogados han de actuar

respetando los derechos de todos los integrantes del territorio, pues la

función que el conocedor de leyes ejerce no debe de ser bajo ninguna

circunstancia inmoral o injusta.

 Defensa de la constitución: Cabe decir que toda actuación de los

abogados debe de ser dentro del margen de la ley, respetando la carta

magna que viene a ser la constitución.

Así como se ha mencionado en el Perú los abogados son formados con la

finalidad de que sean quienes velen por la justicia y el respeto a los derechos y deberes

de cada persona, pues deben de alcanzar el fin supremo que viene a ser la justicia

mediante la paz social.

Silva (2012) refiere:

La ética profesional que desempeña un abogado, por supuesto, incluye este

sentido ético del trabajo, pero implica un mayor compromiso ético o moral, ya

que el profesionista, al adoptar como su profesión (o sea, como su forma de

vida) un determinado trabajo, adopta libre y conscientemente el ethos de este

quehacer, es decir, el fundamento ético que hace posible una específica forma

de praxis humana. (p.55)

Con el transcurso de los años, la realidad peruana se ha ido manchando de un

sinfín de problemas sociales que aquejan a los distintos sectores, siendo uno de los

principales la administración de justicia, se quiera o no los abogados y jueces se

relacionan de manera directa con la justicia pues son ellos quienes han sido formados

y preparados para afrontar estos problemas que acarrean en la realidad peruano, sin
embargo ellos son los primeros en no respetarla. Últimamente se han estado

presentando diversos casos de corrupción que se podría decir viene a ser uno de los

problemas que más daño ocasionó y ocasiona en el gobierno y en los sectores públicos

y privados. Si bien es cierto existen muchos profesionales de las leyes que resultan ser

excelentes abogados, lo cierto es que abundan más aquellos que no lo son, dejando de

lado el código de ética, la función pública, la administración de justicia, etc.

Muchos profesionales de leyes desempeñas labores para el estado, pero es

alarmante la respuesta de la sociedad, pues cuando se debería de confiar en la justicia

del país resulta ser todo lo contrario, muchas de as personas prefieren tomar la justicia

por sus propias manos, pues según manifiestan la justicia peruana tiene precio y que

los más pobres no cuentan con recursos suficientes para alcanzarla. Es increíble la gran

brecha de desconfianza que existe en las personas frente a la administración de justicia

peruana.

El artículo 138 de la Constitución vigente señala que "La potestad de

Administrar Justicia emana del pueblo" y que el pueblo usa como intermediario

para Administrar Justicia al Poder Judicial, por lo tanto, la Justicia en el Perú

no es sólo un tema de discusión para abogados, para fiscales o para jueces. La

Administración de Justicia en nuestro país es un problema del ama de casa, es

un asunto del vendedor ambulante, es un dilema del carpintero, del artesano,

es un tema de la sociedad en su conjunto, y, es por eso que, cuando deseamos

realizar un diagnóstico objetivo del Poder Judicial, tenemos inevitablemente

que remitirnos a la opinión de todos estos ciudadanos. Deseo plantear como

premisa de análisis lo que piensa hoy esa ama de casa, el vendedor ambulante
o el ciudadano común, sobre la Administración de Justicia en el Perú. ¿Qué

piensan estas personas?.

En su gran mayoría, sencillamente no confían en la Justicia en el Perú, de cada

10 peruanos, 7 el día de hoy no cree en la Administración de Justicia. ¿Por qué

no dan crédito a la Administración de Justicia?, por una serie de razones:

señalan que es lenta, costosa, corrupta, impredecible. Ello produce como

consecuencia la inseguridad jurídica, y eso deriva en un hecho mucho más

grave que afecta el desarrollo de cualquier país: las inversiones productivas.

Un estudio de las Naciones Unidas señala que en 40 países donde existe

inseguridad jurídica, el problema se refleja gravemente en la economía de los

países. (Chanamé, 2021, p.36)

Así como menciona el citado autor, de que sirve que dentro del Perú existan

múltiples leyes y que nuestro marco normativo cuente con las mejores leyes si quienes

deben de cumplirlas y administrarlas no lo hacen como debería de ser, por el contrario,

con los primeros en causar los peores perjuicios a la sociedad y en consecuencia a las

personas.

Otro problema que también se viene presentando en lo que respecta a la función

pública por parte de los abogados viene a ser la lentitud de los diferentes procesos

judiciales, es lamentable el tipo de sistema judicial que se maneja dentro del Perú,

como bien se ha dicho, puede que existan diversas normas que sean excelentes pero

de nada sirve si no son aplicadas un ejemplo de ello vienen a ser los plazos que se

establecen para cada proceso, pero en la praxis resulta ser lo contrario, pues casos que

deberían de durar cortos tiempos, duran más de lo previsto, perjudicando quien le urge

que su derecho sea dado o ejercido.


Es difícil creer y entender que la función pública y la abogacía en a mayoría de

los casos no realicen un buen trabajo, pues ellos como tal apuntan a lograr el bien

común, pero valga verdades no resulta serlo. Por ello, la reacción de las personas viene

a ser a través de la desconfianza.

Es así que hablar del Código de Ética de la Función Pública, en la mayoría de

los casos supone hablar de una norma que solo está escrita y más bien no es practicada

como debería de ser, resultará un tanto utópico pensar que una ley que entra en

vigencia es capaz de cambiar un problema que a medida de los años se ha ido

agudizando, puede que las leyes cambien, pero la inseguridad de las personas frente a

la justicia peruana, no.


REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

Chanamé Orbe, R. (2021). Necesidad del cambio del poder judicial. Reforma

Judicial.

https://sisbib.unmsm.edu.pe/bibvirtual/Libros/csociales/ep_desarrollo/necesidad.htm

Silva Camarena, Juan Manuel (2012). ¿Qué es eso de ética profesional?

Contaduría y Administración, núm. 205, abril-junio, pp. 5-11 Universidad Nacional

Autónoma de México Distrito Federal, México

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