Samuel, Juez y Profeta (ANDRE WENIN) Figura en Las Páginas Del Antiguo Testamento Como Uno de Los Grandes Hombres Elegidos Por Dios Para Salvar Al Pueblo de Israel de Una Crisis Religiosa Provocada Por La Convivencia Con Naciones Paganas
Samuel, Juez y Profeta (ANDRE WENIN) Figura en Las Páginas Del Antiguo Testamento Como Uno de Los Grandes Hombres Elegidos Por Dios Para Salvar Al Pueblo de Israel de Una Crisis Religiosa Provocada Por La Convivencia Con Naciones Paganas
Samuel, Juez y Profeta (ANDRE WENIN) Figura en Las Páginas Del Antiguo Testamento Como Uno de Los Grandes Hombres Elegidos Por Dios Para Salvar Al Pueblo de Israel de Una Crisis Religiosa Provocada Por La Convivencia Con Naciones Paganas
de los grandes hombres elegidos por Dios para salvar al pueblo de Israel de
una crisis religiosa provocada por la convivencia con naciones paganas de
su vecindario. No fue rey, pero sí el auténtico instaurador de la monarquía,
ungiendo al primer rey que tuvo Israel, Saul.
La biografía recorre toda la vida del profeta. Fue hijo querido de una buena
madre llamada Ana. Una mujer de corazón puro y limpio, verdadera
adoradora de Jehová. Cuando nace el niño por intervención divina, apenas
tuvo edad lo pone a disposición del sumo sacerdote Eli, encargado del
tabernáculo en Silo.
Cuando Israel deseaba ser liberado del yugo filisteo, Samuel dice al
pueblo: “Si de todo vuestro corazón os volvéis a Jehová, quitad los dioses
ajenos y preparar vuestro corazón” (1º Samuel 7:3). En la vida espiritual
existe un orden. Si queremos ayudar a otros se impone que Dios nos ayude
primero a nosotros. Que purifiquemos el corazón por medio de la
conversión y la entrega a Él.