LA CENICIENTA ALADA

Por: Blanca Felipe Rivero (Escrita en el 2005-2006)

Teatro de títeres para toda la familia al jugar con los clásicos.

A mis hijas, recordando el arrullo que nos

une, con el agradecimiento a Augusto Carrazana
que me incitó a la escritura de una Cenicienta.

PERSONAJES

CENICIENTA: Muchacha de 15 años de edad. Irreverente inquieta y bondadosa

PRINCIPE AZUL: Muchacho de 15 años de edad. Prepotente solo en apariencia.
CIPRES: Gusano de algún grano. En verdad el “yo” interior de Cenicienta.
MADRASTRA: De una belleza malévola aunque su rostro es una mueca. Su porte no
define edad.
TIOFILA: Muchacha de 18 años de edad extremadamente delgada
PETRA: Muchacha de 15 años de edad extremadamente gorda
ZAPATO: El zapato de algún cuento de Cenicienta contado por alguna mamá a abuela.
Feo sin relación alguna con el vestido de baile de Cenicienta. Tiene la vitalidad de la
juventud pero con sabiduría. Es intemporal.

ESCENOGRAFÍA

Al espacio vacío irrumpen indistintamente elementos escenográficos para dar la

atmósfera de la escena. Imagino estructuras no convencionales adaptables, con diferentes
niveles que se arman ante los ojos del espectador como un acto de prestidigitación,
acompañado de enlaces musicales. Los títeres tendrán énfasis en cabezas, rostros y
manos. El resto del cuerpo es solucionado con tejidos sueltos o amarrados. Veo fantasmas
de títeres de varilla. El Zapato como parlante con varilla.

CUADRO I

Zapato despierta de algún lugar del espacio. Se asoma lentamente sigiloso. Corre gritando
de manera sobreactuada

ZAPATO: ¡Ay, me quieren calzar a la fuerza y yo solo le pertenezco a Cenicienta!

(Pausa. Solloza) Me he pasado miles de años existiendo con este conflicto (Molesto)
Cada medio segundo hacen el cuento mío alrededor de todo el mundo y yo no consigo

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descansar (Pausa. Pretencioso) Realmente soy muy importante y distinguido porque sin
mí la historia no existe (Pausita) Así de sencillo.

Aparece propuesta de cocina de Cenicienta. Escoge granos que la madrastra ha unido.

CENICIENTA: ¡Cuántos granos juntos! No voy a terminar nunca (Pausita) Claro, esa es
la idea. Este aquí, el otro allá, el otro allí…
MADRASTRA: (En off) Cenicienta te hice una observación y no quiero volver a
repetirla.
CENICIENTA: Si, dígame.
MADRASTRA: (En off) Te prohíbo terminantemente que cantes mientras trabajas. No le
des migajas de pan a los pajarracos que vienen a la ventana de la cocina porque trae
cucarachas ¿Escuchaste bien?
CENICIENTA: Sí, sí claro (Pausa) Cocinar, fregar, limpiar, escoger entre frijoles y maíz.
Este aquí, el otro allá. Recoger regueros, botar basura, ordenar. Las voy a dejar sin aliento
(Transición de la rabia al estornudo) Ah aaaaaaaaaachis (Se llena la cara de tizne. Se
juntan los granos escogidos) No, no puede ser, ahora estoy más tiznada.
CIPRES: Cenicienta, Cenicienta.
CENICIENTA: (Molesta) ¿Quién me habla?
CIPRES: Yo soy el gusano Ciprés y puedo ayudarte
CENICIENTA: (Lo busca y lo advierte) Crees que con ese tamaño y esa cara puedas
ayudarme.
CIPRES: Pata ser un gusano de tus granos no estoy tan mal. Además tengo poderes.
TIÓFILA: (En off) Cenicienta, Cenicienta
CENICIENTA: Ya ni siquiera tengo nombre.
PETRA: (En off) Cenicienta, ven acá.
CENICIENTA: Ya va, la Cenicienta ya va. Como las odio (Pausa) ¡Ay papá! ¿Por qué
me dejaste sola?
TIOFILA: Cenicientaaaaaaaa
CENICIENTA: Eso es lo que soy la princesa de las cenizas y ellas las brujas del infierno
¿Será por eso que soy la cenicienta en mi propia casa? ¿Seré así de tan mala?
MADRASTRA: (Autoritaria) Cenicienta (La sorprende) Ya terminaste de escoger los
frijoles entre las lentejas y el maíz, porque quiero que organices un nutrido banquete para
una visita que recibiré en estos días.
CENICIENTA: Pero hoy tengo que planchar
MADRASTRA: Si
CENICIENTA: Y después lavar
MADRASTRA: Por supuesto
CENICIENTA: Darle brillo al piso, quitar las hiervas del jardín, limpiar 70 pares de
zapatos y leerle a Petra ya Teofila el último capítulo del volumen Cómo tener el torso
más fino.
MADRASTRA: Que artificiosa eres porque sabes bien que eso no es nada para tus
habilidades en los trabajos caseros (Chiqueando rabiosa) No te preocupes, podrás
terminarlo todo perfectamente (Petra y Teofila revolotean peleando) ¿No es cierto mis
tesoros?
PETRA Y TIOFILA: (A coro) Así es mamá.

CUADRO II

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Entra Zapato disfrazado de presentador real.

ZAPATO: Por orden estricta, irrestricta, calculada y cuadrada, el rey ordena que al
término de 30 minutos toda joven sea de donde fuese o fuera deberá asistir sin
miramientos, excusas ni pretextos a la fiesta en la que su hijo el Príncipe Azul elegirá a
su inequívoca esposa (Pausita) No se la pierdan.
CENICIENTA: (Triste) Este aquí, el otro allá (Suspira) Treinta minutos para encontrarse
con el Príncipe Azul ¿Quién pudiera?
TIOFILA: (Apareciendo de un lado) Cenicienta ¿Dónde está mi vestido de lazos?
CENICIENTA: (Sin dejar de escoger) Debajo de los pañuelos, al lado de los encajes de la
gaveta uno del escaparate gris.
PETRA: (Aparece del lado contrario) La sorprende Cenicienta ¿Y mi collar de perlas
violetas?
CENICIENTA:( Apresurada por la exigencia) En el escaparate marrón, en la puerta de la
izquierda en el colgante ocho.
TIOFILA: (En off) Cenicienta lávame los dientes.

Cenicienta toma un cepillo de dientes enormes y lava con esfuerzo una tremenda boca
llena de dientes. Surgen globos y ruidos graciosos de gárgaras y escupitajos Cenicienta
termina exhausta.

PETRA: Cenicienta. Límpiame los oídos.

Cenicienta toma un aplicador enorme y limpia con esfuerzo un tremendo oído como si se
tratara de un pozo. Se escuchan sonidos de placer y ay de pequeñas lastimaduras.
Cenicienta termina exhausta.

MADRASTRA: Muchachas, rapidito que solo quedan 15 minutos (A Cenicienta muy

fuerte) Cenicienta-
CENICIENTA: (Asustada) ¿Qué?
MADRASTRA: ¿Te gustaría ir a la fiesta. ?
CENICIENTA: ¿Yo? Si, si

Teofila y Petra se mueven intranquilas con vestidos ridículos.

MADRASTRA: Pero antes limpiaras la chimenea por los lados norte, sur, este y oeste.
Después si lo deseas vas.
CENICIENTA: La chimenea es tan grande y alta que toca el mismo cielo.
MADRASTRA: Podrás, llegaras a tiempo, ja, ja, ja,ja.

Cenicienta queda sola y triste. Entre los granos se asoma Ciprés.

CIPRES: No hay nada que desees con fuerza que no puedas llevar a cabo.
CENICIENTA: (Sin mirar) Es tan difícil cumplir mis sueños.
CIPRES: ¿Lo crees?

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CENICIENTA: ¿Dónde está el parlanchín que quiere ordenar mi vida? (Transición) Si
no tengo otro destino que la ceniza Ciprés .
CIPRES: Toma este espejo y mira bien dentro de ti.
CENICIENTA: Para eso no necesito el espejo. Estoy horrible.
CIPRES: Pero tu rostro es el espejo del alma. Te crees mala porque detestas a quienes
viven a tu lado.
CENICIENTA: ¿Y a caso no es así?
CIPRES: Deja de lamentarte y haz algo por ti.
CENICIENTA: (Como alumbrada) Eso mismo haré ¿Pero cómo?
CIPRES: Yo, soy tu yo y tengo tantos poderes como un hada madrina.
CENICIENTA: Cuando lo vea lo creo.
CIPRES: Ahora veras.

Ciprés comienza a girar y como en un acto de magia se convierte en un hada, que no es

más que un pedazo de tul que surca el espacio acompañado de música, Cenicienta esta
extasiada. Ciprés hada hace evoluciones y la transforma para la fiesta con hermoso
vestido y peinado.

CENICIENTA: Ciprés, lo lograste, lo lograste.

ZAPATO: Estoy aquí, estoy aquí. Al fin llego mi turno en esta historia. El Zapato.
CENICIENTA: ¡Ciprés, no tengo Zapatos!
ZAPATO: Falto yo, falto yo.
CENICIENTA: (A Zapato) ¿Y tu quién eres?
ZAPATO: Tu Zapato. ¿No eres a caso Cenicienta?
CENICIENTA: Si, pero no me gustas.
ZAPATO: (Sorprendido) Con lo atractivo que soy.
CENICIENTA: ¿Y dónde esta el otro?
ZAPATO: Bueno, yo, eh, yo soy uno, y el otro se quedó atrás.

Zapato sobreactúa el pensamiento, no encuentra solución y comienza en típica perreta a

darse contra el retablo.

ZAPATO: (Deteniéndose) Ya se, se que do de ba jo del col chón (Le cuesta trabajo
recordar y empuja las palabras) de una de las hermanastras, en el cuento que ocurrió hace
120 893 milésimas de segundos, exactamente en la zona amazónica.
CENICIENTA: ¿y cómo lo piensas traer?
ZAPATO: Fácil, doy un giro y ya está (Lo hace, espera y no sucede nada) Espera un
segundo (Da otro giro, espera y no sucede nada) Espera el tercer giro.
CENICIENTA: No espero nada, me voy así.
ZAPATO: ¿Sin zapatos?
CENICIENTA: Sin zapatos.

Cenicienta comienza a moverse.

ZAPATO: (Rogándole) No te vayas, mira que lindo estoy (Se pone un sombrero
exagerado y no funciona, se coloca unos flecos fosforescentes y tampoco funciona) Si no
me calzas el Príncipe Azul no te encontrará.
CENICIENTA: Entonces no tendrá suficiente voluntad para buscarme.

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ZAPATO: No puedes asistir a palacio con un vestido tan hermoso sin zapatos ¿Qué
pensarán todos?
CENICIENTA: No me interesan los demás.
ZAPATO: ¿Y el Príncipe?
CENICIENTA: No le importarán mis zapatos
ZAPATO: Ciprés haz algo que esta niña no comprende nada. Sin zapatos no hay cuento.
Hazme caso que yo sé.
CIPRES: (En off) ¿Lo crees?
CENICIENTA: (Retirándose) Adiós
ZAPATO: Soy enlace sin sostén
elemento sin destino
y no se que hacer con esta historia
Soy costumbre involuntaria
archivo cerca del cielo
Lujo para los sombreros
cuando mi aliento se pierde en un sueño roto:
Ser el zapato de una princesa que no me calza.

A Zapato le da una perreta en el retablo. Se retira dando bandazos.

CUADRO III

Música de salón real. Se levantan las columnas interiores del castillo. Salen parejas de
baile, marotes alegorías de bailarines. Se termina el baile. Queda música de fondo. Entran
a escena Madrastra junto a Tiofila y Petra.

PETRA: ¡Que apretado me queda este vestido! No soporto más. Me duele el estómago.
MADRASTRA: Aguanta y disimula.
PETRA: (Llorosa) Se me va a romper.
TIOFILA: Come menos masa real.
PETRA: Yo tengo que dejar lo que tú debes comer.
MADRASTRA: Silencio (Aparta a sus hijos simulando) Petra, suéltate un poco el
vestido. Un segundo (Sonido de zafado y suspiro de alivio) Súbelo ahora.
PETRA: (Desalentada) ¿Yaaaaaa?
MADRASTRA: Cállate y respira (Respiración exagerada de las tres. Cuentan) Uno
TIOFILA Y PETRA: Dos.
MADRASTRA: Y tres.

Sonido de subir un ciper. Irrumpen trompetas de aviso real. Entra Cenicienta dejándose
llevar por Zapato que está disfrazado de presentador real. Cenicienta queda a un lado.

ZAPATO: En esta noche única, se anuncia que el Príncipe Azul, hoy, más azul que nunca
escogerá, elegirá, seleccionara para danzar solo aquella joven que podrá aspirar a su
noviazgo totalmente azul como el mismo cielo. Será ahora en este instante (Pausita) sin
perdida de tiempo (Pausa) He dicho.

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Sonido de trompetas. Hace entrada el Príncipe bello, dueño de si. Se forma tumulto
delante de el. Cenicienta se esconde. El príncipe observa. Pausa larga.

PRÍNCIPE AZUL: Bailare la próxima pieza.

Desaliento general. Zapato se acerca a Cenicienta y la sorprende pretendiendo ser

gracioso.

ZAPATO: ¿Te asusté?

CENECIENTA: No, claro que no.
ZAPATO: Aquí me tienes.
CENICIENTA: No necesito de ti.
ZAPATO: ¿Ah no? ¿Y cómo llegaras a él?
CENICIENTA: Si esta es mi noche algo sucederá.
ZAPATO: Pero no tienes zapatos puestos.
CENICIENTA: El príncipe no lo sabrá porque siempre mira hacia arriba ¿No te has
fijado?
ZAPATO: Su condición de príncipe no le permite mirar al piso. El siempre tiene a
alguien que mire por el.
CENICIENTA: Debería hacer algo por si mismo alguna vez.
ZAPATO: (Con resolución) Eso es verdad.

Trompetas de anuncio real. El príncipe se adelanta. Todos miran atentos.

PRÍNCIPE AZUL: Es ella (Todos miran a Cenicienta) Es ella con quien bailare

El Príncipe Azul camina, todos se apartan. Toma a Cenicienta y comienza a danzar.

Zapato da brincos de alegría. La música baja y los que bailan quedan de fondo.

MADRASTRA: ¿Quien será esa estúpida que eligió? Esa figura y esa cara me suenan
(Pausita) Aun así el Príncipe Azul será para alguna de mis hijas. Todo es poco para mi y
para ellas (Observa con inquietud a los danzantes) Se me parece un poco a la tiznada,
pero no, claro que no es ella (Rabiosa) Esta metida en la chimenea y creo verla en medio
del palacio real con príncipe y todo (Pausita) Que desliz el de mi mente. Es tan
odiosamente lista, y mis hijas tan tremendamente torpes. Por más trabajo que le doy,
fuertes, difíciles y desesperantes, solo consigo que sea más eficiente (Pausita) Pero mi
inteligencia la aplasta y la llena de tizne negro como la noche. Hu que miedo, que fea. Ja,
ja, ja. Esa cara y esa figura.

La Madrastra hace lo posible por acercarse a los que bailan y el Zapato no se lo permite.
Se produce un forcejeo gracioso entre la Madrastra y el Zapato, mientras el Príncipe
Azul y Cenicienta bailan sin advertirlos saliendo de las encrucijadas sin tropiezos. Suenan
doce campanadas. Todos se congelan menos Cenicienta y el Zapato.

CENICIENTA: Se acabo mi oportunidad. El hechizo de mi Ciprés termino.

ZAPATO: ¿Aquí que pasó? No entiendo nada. Ese Ciprés es un brujo porque eso hacen
los brujos.
CENICIENTA: Cállate ya, Ciprés es un hada. Vamos, tengo 10 minutos para llegar a mi
cocina

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ZAPATO: Perdónala San Juan de los empecinados, los obcecado, los encaprichados.
CENICIENTA: (Va hacia el Príncipe Azul extasiada. Suspira) Que hermoso es.
ZAPATO: Si, no hay nada más parecido a un sueño. ¿Te vas a quedar ahí a esperar por
tus harapos para cuando todos despierten?
CENICIENTA: Vamos, vamos pronto.
ZAPATO: Porque seguro que me echan la culpa a mí, porque ya me di cuenta que yo no
pinto nada en esta historia. Pensándolo bien yo mejor me quedo.
CENICIENTA: ¿Para que? ¿Quién va a creerte? A ver ¿Tienes algo que ver con este
vestido?
ZAPATO: Bueno yo sinceramente te digo que yo soy tu zapato.
CENICIENTA: Búscate otra Cenicienta.
ZAPATO: Mal agradecida. Resulta que quiero ayudar y no se deja. Yo no se lo que se
piensa, tiene la adolescencia en su punto.
CENICIENTA: ¿Qué dices?
ZAPATO: Yo nada, nada, si yo no he hablado

CUADRO IV

La Cenicienta en la cocina simula contar granos. Llegan las hermanas alborotando y

peleando.

CENICIENTA: Este aquí, aquel allá, otro aquí, no, allá. Escóndete Ciprés
PETRA: Déjame ya, tengo hambre.
TEOFILA: Eres una glotona insoportable.
PETRA: No me importa. Cenicienta dame algo de comer (En secreto) Esta noche nos
sigues leyendo
TEOFILA: Cenicienta.
CENICIENTA: Si
TEOFILA: (Disimulando) Quiero que vengas conmigo porque no entiendo como se
desabrocha este vestido
PETRA: (Disimulando) Y yo estoy tan cansada que no puedo mover un solo dedo.

Las hermanas simulan retirarse pero quedan vigilantes.

CENICIENTA: Si, si ya voy.

MADRASTRA: Que calor (A Cenicienta) Échame fresco (A Cenicienta con sospecha)
¿No te has movido de aquí verdad? (La rodea y la estudia. La huele, Cenicienta se aparta)
Déjame ver tus manos (Cenicienta las enseña) Las tienes tiznadas (Pausita) Me voy a
descansar (Se va pero vuelve) ¿Qué peinado tienes? Déjame ver tus aretes (Se burla) No
son pendientes (Satisfecha) Adiós, ocúpate de las niñas. Vamos rápido (Pausita) Lenta.

La Madrastra se va de escena. Las hermanas vuelven a Cenicienta.

CENICIENTA: ¿Estuvo lindo el baile?

TIOFILA: Si (Desalentada)
PETRA: El príncipe escogió a la más fea ¿Verdad Teofila?
TEOFILA: Horrible

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PETRA: Envidiosa, no era tan fea.
TIOFILA: Envidiosa tu.

Se pelean manoteando. Cenicienta las espera.

CENICIENTA: Ya no me cuenten entonces ¿Qué quieren que les narre?

PETRA: Cualquiera de esas historias que haces.
TIOFILA: Si decide tu. Continúa con la del escarabajo.
CENICIENTA: El escarabajo insistía en subir por la madama y una y otra vez caía sin
remedio, pero una hoja anciana del rosal cercano, con gran esfuerzo, empujo al torpe
escarabajo (Pausa) Si lo vieran, parecía un rey árabe sobre su alfombra mágica (Pausita)
Y como la hoja debía partir para siempre, quiso entregar sus ultimas energías a la
felicidad de aquel escarabajo perseverante que a pesar de su gordura, quiso beber el
néctar de la rosada flor de la madama.

Las hermanas roncan exageradamente. Cenicienta se va despacio susurrando una canción

de cuna

CUADRO V

La escena que ocurre en diferentes espacios que pueden caracterizarse o no, es decir solo
el espacio vacío. Entra el Príncipe Azul molesto.

PRÍNCIPE AZUL: Les dije que ya escogí. Siempre digo lo que siento, y ahora que digo
la verdad no me creen (A los padres) No, no hace falta que me traigan mas doncellas. Ya
encontré la que buscaba (Pausa) Solo que ahora no sé dónde está (Transición triste) No
entiendo lo que me pasa, estoy tan extraño. Que angustia, que tormento.

El Príncipe Azul queda en pose de atormentado. Entra Cenicienta feliz

CENICIENTA: Yo soy la escogida (Dando vueltas de alegrías) Yo la Cenicienta soy la

preferida del príncipe azul (Revisa y grita muy alto) Soy yo, soy yo.
PRÍNCIPE AZUL: ¿Quién eres? ¿Dónde estas para besarte?
CENICIENTA: Que labios tan hermosos. Casi los rozo con los míos
PRÍNCIPE AZUL: ¿De qué me sirve ser azul sino tengo a mi amada (Se acuesta en el
retablo extasiado) Una princesa sin zapatos (Reí) ¿Qué curioso?
CENICIENTA: Parecía altanero y me miro a los ojos, tomo mi mano y le dio un beso
tibio
PRÍNCIPE AZUL: Es diferente (Se levanta) por eso se fue (Da pasos desesperado de un
lado a otro)

Entra el Zapato sofocado

ZAPATO: Al fin llegue (Mira a los dos) ¿En que lugar estoy ahora? ¿Qué? (Mira hacia
abajo al titiritero) En la escena ¿Cuál escena? En esta ¿En la mía o en la de ellos? (Al
titiritero) Ah ¿En la de los tres? Esta bien
PRÍNCIPE AZUL: ¿Cómo buscarte si no tengo ninguna pista?

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ZAPATO: Piensa, calcula. Toma referencia de otros cuentos. Hazme caso que yo sé.
CANICIENTA: Debería buscarlo y decirle quien soy
ZAPATO: Míralo aquí, anímate, díselo.
CENICIENTA: Yo soy tu princesa, yo la cenicienta de esta casa
ZAPATO: (Al Príncipe Azul) Oye te lo está diciendo
PRÍNCIPE AZUL: No, no, no.
ZAPATO: Si, si, si.
PRÍNCIPE AZUL: Claro, el zapato ¿Cuál zapato?
ZAPATO: Yo soy el zapato de Cenicienta, mira que interesante estoy (Zapato rodea al
Príncipe Azul tratando que lo vea y este se mueve desesperado sin verlo) Aquí estoy,
Aquí estoy.
CENICIENTA: Todo esto es mentira. No sé para qué sueño si mi destino es la cocina.
Soy fuego sin talento
princesa sin atuendo
y no se que hacer con esta historia
Soy lumbre entre cenizas
sazón para peinar pestañas
cuando las mías están solas
¿O contigo?
ZAPATO: (A Cenicienta) Te lo dije que faltaba yo, ahora como te va a encontrar con él.
CENICIENTA: Mi madre haría con gusto lo que hago yo.
ZAPATO: ¡Que calor! (Sofocado se da contra el retablo, se detiene de inmediato, hace
gesto de haber encontrado una solución. (Saca un enorme papel, con un enorme lápiz)
Euler elevado al limite de x que tiende a cero de G en X mas el logaritmo neperiano de F
en X ¿Qué? (Mira hacia abajo al titiritero. En secreto) Estoy calculando a ver si estos dos
se encuentran (Pausa) La tecnología hace milagros. Porque no se puede aplicar la
propiedad de A la menos K porque euler al infinito esta positivo y tiene que ser negativo
porque un numero chiquito dividido por uno grande da Cero (Peleando)
MADRASTRA: (En off) Cenicienta, Cenicienta
CENICIENTA: ¿Estaré preparada para enfrentar mi futuro? Ciprés contéstame
PRÍNCIPE AZUL: ¿Cómo conducirme ahora? ¿Por dónde empezar?
Si soy palabra sin escucha
amante sin respuesta
y no se que hacer con esta historia
Soy mascara para otros
argumento cansado y vacío
Postal para un viaje
que no cuenta conmigo
cuando el camino se me pierde
entre las manos ¿Y las tuyas?
MADRASTRA: (En off) Cenicienta te estoy llamando
ZAPATO: Ahora no, esta es la escena clave de la historia, ella no puede aparecer, no
ahora que están uno frente a otro (Mira a los dos y están en posiciones opuestas) Bueno,
para eso estoy calculando (sigue calculando mientras se oye la voz de la Madrastra, esta
pasa dictando tareas sin ver a nadie)
MADRASTRA: Cenicienta ¿déjame ver tus manos? Están tiznadas, no hay problemas.
Limpia todas las lámparas, los ventanales y me lavas de inmediato las cortinas, friega los
muebles, arregla los escaparates y escama el pescado de la alacena.

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La voz de la Madrastra se pierde dictando tareas. También se va perdiendo las figuras del
Príncipe Azul y la Cenicienta.

ZAPATO: Bruja, es una bruja (Pausa) Acabó con la escena (Le da una perreta en el
retablo y se deja caer sobre el retablo y se pierde)

CUADRO VI

Entra el Zapato disfrazado de presentador real como apurado porque apenas le da tiempo.
Las manos del titiritero pueden ayudarlo a terminar de colocarse algún elemento o
aguantarle el papel que lee.

ZAPATO: (Apurado y nervioso) Por orden necesaria, desesperada, insistente,

voluntariosa y enamorada el Príncipe Azul con puño y letra atormentada que serán
visitados todos los hogares donde el mismísimo Príncipe azul en persona descubrirá a su
amada en cualquier lugar donde se encuentre (Pausa) A si sea en una chimenea (Pausita)
Con permiso (Pausita) Ya lo saben (Pausa) Despejen.

Se comienzan a dar flacheos de escena. Entra Cenicienta

CENICIENTA: ¿Ciprés escuchaste? Mi príncipe vendrá ¿Qué hago? ¿Cómo me visto?
¿Ciprés serás mi hada otra vez? (No tienen respuesta) Que me conozca como soy.

Se retira Cenicienta. Entran la Madrastra y sus hijas.

TIOFILA: Mamá ¿Dónde está Cenicienta? Cenicientaaaaa

PETRA: Mamá Cenicienta se escondió y ¿Quién me busca todo lo que me voy a poner?
MADRASTRA: Tranquilas nenas, ella no puede perderse, no tiene como salir de esta
casa (Ríe)¿La buscaste en la cocina, o en el baño, dentro de los escaparates?
PETRA Y TIOFILA: (a Coro) Claro.
MADRASTRA: Vamos a buscar

Entra Cenicienta.

CENICIENTA: No voy a contestar ningún llamado. Ya me canse, que se las arreglen

solas. Vamos Ciprés.

Cenicienta se va. Entra el Príncipe Azul muy dispuesto y Zapato cansado

PRÍNCIPE AZUL: ¡Que grande es este reino! Me aburre ser el sueño de todas (Pausa)
Me abruman tanto como las exigencias de mis padres.
ZAPATOS: El rey y la reina solo quieren lo mejor para usted.
PRÍNCIPE AZUL: También eres aburrido.
ZAPATO: Puedo ser más simpático
PRÍNCIPE AZUL: ¿De dónde saliste?
ZAPATO: ¿Yo?… Ya se lo dije una vez (Pausita) Realmente soy el Zapato de Cenicienta
PRÍNCIPE AZUL: ¿Quién es Cenicienta?

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ZAPATO: Una muchacha que se convierte en criada de su propia casa, entonces tiene
una madrastra que es un monstruo, y unas hermanastras odiosas, y entonces…
PRÍNCIPE AZUL: No quiero más cuentos. Seguimos buscando
ZAPATO: Pero escucha. Talvez. Hazme caso que yo sé.
PRÍNCIPE AZUL: No escucho nada. Andando.

Príncipe Azul camina decidido, Zapato detrás agotado. Entra la Madrastra con Teofila y
Petra

PETRA: Ya estoy cansada y el príncipe esta al llegar.

TIOFILA: ¿Dónde se habrá metido?
MADRASTRA: Mejor no la buscamos.
TIOFILO Y PETRA: (A coro) ¿Cómo?
MADRASTRA: No son vestidos lujosos los que busca el príncipe, sino pies pequeños..
TIOFILA: (A coro y desalentadas) ¿Pequeños?

Teofila y Petra elevan patas enormes. Las de Petra son anchas y gordas, las de Teofila
largas con dedos desproporcionados y juanetes

MADRASTRA: Muchachitas, eso tiene solución.

La Madrastra saca un sable chino, hace movimiento de samurai. Al terminar de los pies
desproporcionado se sueltan pedazos quedando pequeños pero mutilados

TIOFILA: (Bajando los pies) Ya esta mamá.

PETRA: (Bajando los pies) Seguro me servirá.
MADRASTRA: Descansen sin preocuparse que otras serán mis ocupaciones

Tiofila y Petra salen de escena. Madrastra queda a la expectativa. Entra Cenicienta a

hurtadilla, la rodea sin verla y la Madrastra la atrapa de un zarpazo

MADRASTRA: Te tengo
CENICIENTA: (Resuelta) Suéltame
MADRASTRA: No te suelto, porque te vas a quedar aquí (La Madrastra saca detrás del
retablo una estructura, introduce a Cenicienta y cierra una puerta con un cerrojo enorme.
Diciendo en tono de burla)
Soy perla entre las cenizas
muro para las aspiraciones
Y no se que hacer con esta historia
Soy pretexto para los dudosos
obsequio para los perversos
Triunfo de la tradición
del poder, de la extorsión
En fin: antagonista predilecta
¿De quien? De Cenicienta

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CENICIENTA: Miraré por nuevas ventanas y abriré puertas que no imaginas.
MADRASTRA: Aprovecha el encierro para filosofar es tu única opción, mientras mis
hijas y yo nos ponemos radiantes para esperar al príncipe

Entra el Príncipe Azul buscando y Zapato detrás. Tiofila y Petra tratan de convencerlos
algo nerviosas.

TIOFILA Y PETRA: (Pidiendo ayuda) Mamá.

PRÍNCIPE AZUL: ¿No hay más doncellas en esta casa?
MADRASTRA: No mi príncipe (Pausa) ¿No trae usted alguna pertenencia de quien
busca?
PRÍNCIPE AZUL: No (Áspero y molesto)
MADRASTRA: Pero mire su excelencia.

El Zapato hace señas para la puerta donde está Cenicienta.

PRÍNCIPE AZUL: ¿Qué hay detrás de esa puerta?

MADRASTRA: ¿Aquí? (La bloquea disimulando) Desechos, herramientas de trabajo,
granos, la antigua herrería de mi finado esposo, donde mi criada…
P. AZUL: (Atormentado) Vamos (Cenicienta se desalienta. El P. Azul sale de escena
pero regresa) ¿Una criada?
TIOFILA Y PETRA: (A coro reclamando ayuda) Mamaaaa
MADRASTRA: Si, una insignificante que ni siquiera cubre sus pies.
P. AZUL: ¿Qué no cubre sus pies?
ZAPATO: (Indicando la puerta) Esta aquí, esta aquí
El Príncipe Azul se precipita hacia la puerta.

TIOFILA Y PETRA: ¡Mamaaaa!

Aparece Ciprés hada, surca el espacio y los congela a todos menos a Cenicienta y Zapato.
Este mira ansioso por el cerrojo dando saltos desesperados.

CENICIENTA: Necesito algo para cambiar la dirección de mi vida ¿Dónde estás Ciprés?
Aconséjame. No me dejes sola ¿Qué hago ahora sin ti?
ZAPATO: El príncipe ya te encontró, yo te salvo. No me escucha, claro si del lado de acá
todos están tiesos.
CENICIENTA: (Sin escuchar a Zapato) Ya sé, cierro los ojos y bien tranquila escuchó
mis sonidos internos, mi respiración, mi corazón, bun, bun, bun (Sorprendida) Mi
corazón quiere volar, le han salido alas hermosas (Las alas le han salido a Cenicienta)
Ciprés tú soy yo y yo soy tú (Pausa) Me volviste mariposa porque maduraste dentro de
mi (Pausita) Ya soy responsable de mis actos y mis decisiones (Pausa) Volaré y me
posaré en la rama más alta y después me iré junto a la hoja que quiso llevar al viejo
escarabajo en su ultimo viaje.

Todos se congelan. El príncipe azul logra abrir la puerta.

PRÍNCIPE AZUL: ¿A dónde vas. Te irás sin mí y no me has dicho tu nombre?

CENICIENTA: Puedes ponerme el nombre que desees porque todos los Príncipes Azules
tienen su Cenicienta.

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PRÍNCIPE AZUL: Mi Cenicienta eres tú.
CENICIENTA: Conocerte no puede ser mi única meta en mi vida, hay tantas cosas por
descubrir.
PRÍNCIPE AZUL: Las descubriré contigo.
CENICIENTA: ¿También creció un Ciprés dentro de ti?
PRÍNCIPE AZUL: Si, fuerte y de un rojo incorruptible.

El Príncipe Azul se acerca a Cenicienta y ella lo abraza suavemente cubriéndolo con sus
alas, giran y se convierten en un pedazo de tul fino que se mueve en el espacio como
Ciprés hada. Tiófila y Petra están extasiadas. La Madrastra se mueve de un lado a otro
observando desproporcionadamente.
MADRASTRA: Ti, ti,ti,ti,ti,ti,ti, pío, pío, pío. Coman mis gallinitas para que se pongan
gorditas que den gusto. ¡Ay niñas pero que sucias se han puesto! Denme la ropa que
ahora mismo la voy a lavar ¡Ay el fogón! Se me quedo la sopa en la candela. Permiso,
permiso que estoy apurada.
TIOFILA Y PETRA: (Asustadas) Pero mamaaaa
MADRASTRA: Mis tesoros no se preocupen que tendrán la comida a su hora (Pausa) Y
hoy les voy hacer un cuento hermoso para que duerman bien tranquilas. Y no crean que
no me di cuenta que no se cepillaron los dientes.
TIFILA Y PETRA: (Asustadas) Pero mamaaaaa.
ZAPATO: Y así volaron sin obstáculos en un abrazo infinito el Príncipe Azul y
Cenicienta. Pero en cada hogar donde haya una niña que se crea Cenicienta nace una flor
con alas de mariposa donde es posible ver los rostros felices del Príncipe Azul y la
Cenicienta alada (Al público) ¿Tú eres Cenicienta? Tú no, pero tú sí, porque yo soy tu
zapato, dale pruébame.

El titiritero sale al encuentro del público tratando de ponerle su personaje Zapato en los
pies de alguna niña mientras se retira de la sala interactuando con los espectadores.

Fin.

La Cenicienta Alada fue:

- Tesis de diseño de teatro de títeres del ISA, realizada por Ana.
- Proceso de trabajo de la Asignatura de Actuación y Dirección del 4to año de la
EIA 13 de Marzo de la Habana llevada a títeres y zancos para la calle.
- Objeto de tesis de un graduado de teatro de dicha escuela y llevada a escena con
adolescentes de secundaria en teatro de actores, en Madruga, provincia La Habana
- En el 2009 fue llevado a las tablas por el grupo Teatro La Proa con el nombre de
Cenicientaaaaaaa. Este montaje titiritero se presento en el XII Festival de Pequeño
Formato Santa Clara, donde obtuvo: Premio del Consejo Provincial de Casas de
Cultura, Reconocimiento Especial a la Puesta en Escena como Opera Prima y
Mención de Actuación Masculina con Títeres.

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