Tema 2 - La Generación Del 98

TEMA 2 – GENERACIÓN DEL 98
La generación del 98 está formada por un grupo de escritores que a finales del XIX y comienzos del XX se
vieron afectados por la crisis moral, política y social provocada en España por la pérdida en de sus últimas
colonias: Cuba, Puerto Rico y Filipinas. En 1901 Azorín forma con Pío Baroja y Ramiro de Maeztu el “Grupo
de los tres”, y en 1913 inventa el nombre de Generación del 98. Además de Baroja y Azorín, los otros tres
grandes escritores de esta generación son Miguel Unamuno, Antonio Machado y Ramón María del Valle-
Inclán. Todos nacen entre 1864 y 1875.
Características de los autores de la generación del 98:
El tema de España. Europeísmo y gusto por lo castizo: Los noventayochistas se sienten atraídos por
descubrir el alma nacional, la esencia del país. Se produce así la interiorización del problema de España. El
98 es un movimiento que intenta hacer frente a los problemas nacionales. Si en una primera propuesta hubo
la intención de elevar España a la altura de Europa, el descubrimiento del alma española lleva a proclamar la
idea de españolizar Europa.
Su amor a España no es incompatible con la crítica a la sociedad y una visión crítica de la historia
nacional: Unamuno acuña el término de intrahistoria para referirse a las costumbres y modos de vida de los
hombres anónimos.
Idealización del paisaje y amor por Castilla: El tema de España supone un descubrimiento del paisaje
nacional. Sienten un gran interés y amor por la Castilla miserable de los pueblos abandonados. Ven la
autenticidad de España en la Castilla medieval, libre y dominadora, poderosa e invicta, en ella ven el alma
española.
Sobriedad. Búsqueda de un lenguaje natural, antirretórico. Los noventayochistas intentan exponer su

ideario con la máxima claridad y llaneza. Su lenguaje pretende ser claro y sencillo. Su afán de expresividad
les lleva a buscar términos poco frecuentes del lenguaje popular o arcaísmos.
Subjetivismo. La preocupación del problema de España les lleva a la subjetividad, a una visión introspectiva
de la realidad. Les hace subordinar la forma al contenido, de ahí que recurren preferentemente al ensayo.
Rompen y renuevan los moldes clásicos de los géneros literarios, creando nuevas formas en todos ellos.
Reflexiones filosóficas. Los autores de este grupo reflexionan sobre el sentido de la vida, la religión, la
existencia de Dios, etc.
Escritores de la generación del 98.
Miguel de Unamuno: cultivó todos los géneros. En sus ensayos reflexiona sobre dos temas fundamentales:
El tema de España: en una primera etapa propone europeizar España, como solución a sus problemas, esto
lo vemos en su obra En torno al casticismo . Más tarde, una aguda crisis religiosa determinará su afirmación
de la supremacía del espíritu español frente al europeo. En Vida de Don Quijote y Sancho defiende el espíritu
español y la españolización de Europa. En Por tierra de Portugal y España describe el paisaje español.
El sentido de la vida humana. Se centra en el problema de Dios y de la inmortalidad. Fe y razón se hallan en

una lucha continua pero no puede prescindir ni de una ni de otra. Del sentimiento trágico de la vida.
Sus novelas, llamadas por sí mismo”nivolas”, están fuera de un lugar o de un tiempo determinado. En Niebla
están presentes las típicas preocupaciones existenciales unamunianas: la consistencia e identidad de la
persona, la angustia ante la muerte y el más allá. En San Manuel Bueno, mártir, trata de un cura que ha
perdido la fe, pero sigue ejerciendo para ayudar a sus parroquianos a conservar la suya. En La tía Tula trata
de un sentimiento de maternidad frustrado, y en Abel Sánchez aborda el problema de la envidia.
Pío Baroja: su personalidad se caracteriza por un pesimismo existencial. Tiene una actitud inconformista y
crítica frente a los defectos de la sociedad: convencionalismos, hipocresías, prejuicios morales, etc. Es
anticlerical. Los rasgos más significativos de sus novelas son el tema de la vida, el acceso a la experiencia;
comentarios y reflexiones; diálogos y descripciones y su lenguaje se aproxima al habla coloquial.
Sus principales novelas son: El árbol de la ciencia (donde predomina la reflexión pesimista); Zalacaín el
aventurero, Las inquietudes de Santhi Andía (en ambas predomina la acción y la aventura); su trilogía La
lucha por la vida: La busca, Mala hierba y Aurora roja (predomina la descripción de ambientes y tipos).
Azorín: Fue uno de los escritores que a comienzos del siglo XXI luchó por el renacimiento de la literatura
española y el que bautizó a este grupo con el nombre de Generación del 98. El tema que domina en sus
escritos es el tiempo y la continuidad del pasado nacional castellano. Entre sus ensayos destacan El alma
castellana (1900). Los pueblos (1904) y Castilla (1912). Se le conoce sobre todo por sus novelas
autobiográficas, La voluntad (1902), Antonio Azorín (1903) y Las confesiones de un pequeño filósofo (1904).
Su obra destaca por la sagaz crítica literaria que realiza en textos como Los valores literarios y Al margen de
los clásicos.
Ramón María del Valle-Inclán se inició en el modernismo y fue adoptando una postura más comprometida y
crítica con la sociedad y con la política de su tiempo (Generación del 98). Son modernistas los relatos de
Sonatas (de primavera, de estío, de otoño y de invierno). Después fue experimentando otras formas de
expresión: La guerra carlista, Tirano Banderas y El ruedo ibérico.
Su obra dramática se compone de varios ciclos: el modernista (El marqués de Bradomín); el mítico (la trilogía
Comedias Bárbaras y Divinas palabras); y el de la farsa (La marquesa Rosalinda).
Destacamos los esperpentos: Luces de Bohemia, y la trilogía Martes de carnaval. Bajo la denominación
esperpento se incluyen obras en las que bajo un aparente tono de burla subyace una fuerte crítica social. Los
personajes y el mundo en general se presentan deformados, exagerando sus rasgos y su comportamiento,
con intención de ofrecer la auténtica verdad.
Antonio Machado: En su obra poética, se observa una evolución desde el modernismo de los primeros libros
hacia una depuración formal en busca de la palabra sencilla y verdadera. Sus versos están llenos de símbolos
como el del viajero (el poeta) que recorre un camino (la vida), que sueña (el tiempo del amor) bajo los árboles
y dialoga con las fuentes (la vida del poeta). Sus dos libros principales son: Soledades, galerías y otros
poemas y Campos de Castilla, este último es una reflexión sobre la realidad de España, sus tierras y sus
gentes.

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Características de los autores de la generación del 98:

Sobriedad. Búsqueda de un lenguaje natural, antirretórico. Los noventayochistas intentan exponer su

Escritores de la generación del 98.

El sentido de la vida humana. Se centra en el problema de Dios y de la inmortalidad. Fe y razón se hallan en

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