Bases Biologicas
Bases Biologicas
Bases Biologicas
Los objetivos de estas bases son establecer (o no) relaciones de determinación entre
nuestra naturaleza y las formas de actuar en solitario o en sociedad. Lo que sí es
importante señalar es que, en estos casos, el análisis que se busca es global. Por lo tanto,
e indudablemente, habrá numerosas generalizaciones.
Hay que señalar, además, que suele existir una interrelación entre las diferentes
vertientes. Los tres principales ejes biológicos que condicionan nuestras actitudes y
comportamiento son el sistema nervioso, el sistema endocrino y la genética.
El sistema nervioso
La configuración cerebral y el funcionamiento del sistema nervioso son elementos
fundamentales para entender nuestras acciones. No en vano, los miles de millones de
neuronas de nuestro cerebro accionan nuestros comportamientos, aunque luego puedan
estar influidos por otros factores.
La disciplina encargada de estudiar los factores del sistema nervioso con nuestras acciones
es la neurociencia. Es indudable que las alteraciones o problemas que podamos tener
influyen en el comportamiento. Ahora bien, la actuación del sistema nervioso es,
fundamentalmente, adaptativa.
La gran diferencia del homo sapiens, con respecto a otras especies, está en esa capacidad
de decisión racional. Por lo tanto, la arquitectura de nuestro cerebro influye, y lo hace
decisivamente, en nuestras conductas y comportamiento.
El sistema endocrino
La segregación de hormonas, de la que es responsable el sistema endocrino, también
genera o predispone a determinadas actitudes. Es importante señalar que, en función de
las hormonas que se segreguen, estos cambios serán más o menos permanentes.
La genética
La genética ya se ha sugerido, históricamente, como factor que determinaba conductas de
padres e hijos. Sin embargo, es importante señalar que la socialización y la cultura tienen
un peso decisivo.
Dicho esto, hay que señalar que el descubrimiento del genoma humano en 2000 ha
permitido afinar los estudios. Hoy sí, se puede determinar que, al igual que en
determinadas enfermedades, la herencia genética puede influir en los comportamientos.
Ahora bien, los estudios actuales van mucho más allá de la herencia genética, también
denominada epigenética. Hoy se trata de comprobar también, sin más, qué genes pueden
influir más o menos en determinadas actitudes o predisposiciones. Si las alteraciones
genéticas influyen en las enfermedades, también lo hacen en nuestros comportamientos.
El estudio, pues, de la genética, tiene una importancia capital en todo lo relacionado con
la conducta.
Es importante señalar, sin embargo, que, aunque los condicionantes biológicos pesan, el
factor ambiental también lo hace. Esto es, que dónde vivimos influye, y mucho. Otros
elementos, como la procedencia social, también serán determinantes.
Los descubrimientos científicos de las últimas décadas han arrojado luz a cuestiones que,
en el pasado, solo eran especulativas o intuitivas. Entender que, como especie, tenemos
unos condicionantes biológicos al igual que otros mamíferos abre la puerta a una
comprensión mejor en varios ámbitos.