Introducción Al Estudio Del Pentate
Introducción Al Estudio Del Pentate
Introducción Al Estudio Del Pentate
(apuntes)
Jorge Piedad-Sánchez
2) La crítica literaria
Problemas que pone el Pt (Pentateuco) e inicio y desarrollo de la crítica
literaria al Pt: De los orígenes a la hipótesis documentaria. Diversos
tentativos de solución: Hipótesis de los fragmentos, de los complementos o
suplementos, Wellhausen y la Hipótesis documentaria la Formageschichte,
Traditionsgeschichte, la escuela escandinava, Rendtorff y las “unidades
mayores”, la posición de la iglesia de frente al problema crítico.
Existen dos formas de denominar a cada uno de los cinco libros que
componen el Pentateuco, el modo hebreo y el modo griego
a)La manera hebrea de denominar se basa en las primeras letras con las
cuales un libro inicia:
En una manera global el Pentateuco ofrece sin duda una cronología más o
menos lineal que va desde la creación del cosmos y de la humanidad, a
través de la historia primitiva de la humanidad, de los patriarcas, Abraham,
Isaac y Jacob, la bajada a Egipto, esclavitud y liberación del pueblo elegido,
la alianza en el Sinaí, la marcha por el desierto con todas sus vicisitudes,
hasta la llegada a la parte oriental del Jordán, y que se concluye con los
últimos gestos, muerte y sepultura de Moisés.
Además se puede individuar una cierta unidad temática en todo este
conjunto de libros: el tema de la promesa (Gn 15,13-18, 24,7, 26,2,
28,4.13). Ahora bien, el cumplimiento de esta promesa se encuentre
finalmente en el libro de Josué. Por este motivo algunos autores prefieren
hablar de Hexateuco.
LA CRITICA LITERARIA DEL PENTATEUCO
Cap. 11,15-23: que Josué fue fiel al mandato divino transmitido por Moisés.
(cfr. 1Rg 2,3; 2Rg 1,7;9.1; 10,28; Ecles 46,6 etc.). También en el libro de
los Reyes, 1Re 2,3" ... observando sus preceptos, sus sentencias y sus
instrucciones según está escrito en la ley de Moisés..."; y en el libro de
Crónicas, 2Cr 34,14-18 - habla del descubrimiento de la Ley- "... el
sacerdote Jilquías encontró el libro de la Ley de Yahvéh dada por Moisés..."
c). del Nuevo Testamento: El Señor hable varias veces de Moisés como
autor de la Ley: ej. Ioh 5,45-47 ‘Vuestro acusador es Moisés porque si
creyerais a Moisés me creeríais a mi, porque él escribió de mí ....creed en
sus escritos’. Ioh 6,32 ‘....Moisés no os dio el pan del cielo, sino mi Padre
es quien os da el verdadero pan del cielo’. (cfr. Lc 24,44; Mt. 5,17 ‘La ley
es lo que fue dado por Moisés....".etc.
Y así muchos más testimonios en otros libros que hablan de Moisés como
instrumento de Dios para la salvación del pueblo de Israel. Estos
testimonios prueban ser histórica y dogmáticamente ciertos que Moisés es
el legislador inspirado de Israel, y que su Ley se halla contenida en el
Pentateuco, único código conocido por el pueblo elegido.
Es sobre todo, aunque si, como hemos visto, algunos autores antiguos
hablan ya intentado, en el medioevo que se va introduciendo la voz de que
hay que aplicar al texto sagrado los mismos métodos que se emplean en el
estudio de la literatura profesional. A los inicios de la critica histórica-
literaria nos encontramos con la pregunta inicial acerca del autor del Pt.
Esta pregunta se hacía más fuerte si se tiene en cuenta que en el Pt se narra
la muerte de Moisés: ¿Moisés pudo haber escrito la situación, modalidades
y lugar de su propia muerte como la afirmaba la tradición Judía y cristiana?
“la tesis- dice Fanulill- de la tradición judío-cristiana, que hace de Moisés
el autor literario de todo el Pt, es realmente insostenible por diversos
motivos que nos ofrece en abundancia el propio texto”. ¿Cuáles son pues
estos indicios que hacen insostenible esta tesis, a parte de la muerte de
Moisés de la que ya hemos hablado?.
Dos veces se habla de la Alianza de Dios con Abraham (Gn 15,1-21 y 17,1-
27).
Dos veces se encuentran los relatos del Maná y de las codornices (Ex 16,2-
36 y Núm. 11,4-34).
Pero es sobre todo en el uso del nombre divino que resulta evidente este
cambio de vocabulario dentro del mismo Pt, como se notará en una lectura
sinóptica del siguiente esquema;
A. MASIO (1514-1573), jurista católico, sostiene que los libros de Jos, Jc, 1
y 2 Sam y 1 y 2 Re habrían sido escritos por los círculos de Esdras en base
a documentos conservados en la “Iglesia de Dios” y que habrían de ser
agregados al Pt, que también son obra de Esdras o de algún otro hombre.
Encontramos por primera vez una voz que comienza a hablar de
“compilación” y “redacción”, así como también se encuentra un lazo entre
el Pt y lo que se le llama “libros históricos” según M. Noth.
(s. VIII) JE
Las fiestas: En JE las fiestas son mas bien naturalistas, agrícolas, mientras
que en D están ligadas con la historia de la salvación. P contiene ya el
ritualismo.
i) En fin, un redactor sacerdotal (RP) hacia el año 400 a.C. habría unido P
con JE y D (RP;P + JE +D = Pt).
Lugar de composición:
en el reino del norte pues, faltan las tribus del sur. Su patriarca predilecto es
Rubén y no Judá según el J
Se interesa más por Jacob y los santuarios del norte (Gn 28,17.22; 31,13;
35,1-3)
No es monárquico, prefiere a los hombres de Dios y a los profetas
Teología:
Usa el nombre de Elohim para designar a Dios quizás de más trascendencia
no narra encuentros directos de Dios y los hombres Dios se dirige a través
de sueños, o mensajeros (ángeles) Gn 31,11;28,12; 20,3; 31,24.
Los patriarcas no son padres sino profetas (Gn 20,7; Ex 4,12; Nm 16,8; Ex
15,20;
Dios no sacó a Israel de Egipto sino Moisés (Ex 4,10.12)
No le interesa las promesas sino la Alianza
Visión pesimista de la historia, pues ve la política en decandencia.
Contexto histórico
+ la reforma de Josías (640-609) año 628 se realiza la reforma (Cfr. 2Re 22-
23) El libro encontrado era –según WETTE- parte del actua Dt
+ Razones de la teoría
la reforma de Josías remarca motivos teológicos presentes en el Dt.
centralización del culto Dt 12,4-16 y 2Re 23,5-9;
condena de los cultos paganos y sincretistas (2Re 23,4-11; Dt 12,4-16)
La idea de condenar a los dirigentes según hayan sido fieles a la ley de
Señor.
El autor: dos teorías un solo sacerdote levíta del reino del norte, en contacto
con las escuelas proféticas
El Dt es fruto varias redacciones con un núcleo central (Dt 12-25) Una
redacción prexílica y otra exílica condenando a los reyes su infidelidad a los
mandamientos de yhwh
Teología
+ Un solo Dios (Dt 6,4)
+ La elección del pueblo de Israel
+ un solo pueblo
+ la alianza y la ley
+ un solo culto
+ apoyo a los marginados y humildes
Código de Santidad:
Lv 17-26
Leyes sobre el santuario, sacrificio, leyes morales del matrimonio, sobre los
sacerdotes, las fiestas, los sacrificios; termina con bendiciones y
maldiciones
Se parece al discurso de Moisés en Dt 34
Su teología
centrada en la trascendencia de Dios
Dios es santo y comunica su santidad al pueblo
El hombre participa de la santidad divina a través del culto
Un concepto de Israel: Pueblo santo de Dios, Asamblea santa
Se preocupa por el bien de la comunidad (leyes morales)
Se preocupa por el bien del prójimo
Fecha
Época del exilio: Datos para su fecha
Centralidad del culto (Jerusalén)
Los ritos y fiestas bien organizadas suponen un estadio posterior
sustituye el término pueblo por el de comunida
Da importancia a la circunsición y al sábado.
Contexto histórico
Judá en exilio
Gobernantes en la cárcel de Babilonia
Templo destruido
Pueblo sin tierra
La fe en peligro (Marduk dios de Babilonia más fuerte que yhwh)
Relectura de la propia historia
“Somos un pueblo de la misma sangre elegidos por Dios”
Teología de la esperanza y del regreso a la tierra prometida
Conclusión previa
A la base de que actualmente conocemos y designamos como Pt, según la
crítica histórica están a la base cuatro fuentes: J + E + DTR+ P
La tradción de J en el sur y del E en el norte se formaron paralelamente
pero independientes.
Al desparecer el reino del norte (722) la fuente E se unió a la fuente J,
formando el JE
Dtr siendo un texto de los levitas emigró al sur. En tiempos del Rey Josías
(625) se une al J y E
Al final del exilio estos materiales fueron compilados y reunidos según la
mentalidad del P, dando resultado a lo que llamamos Pt
Crítica y conclusión
Debido a las cuestiones que abría la hipótesis documentaria, por una parte,
y los innumerables descubrimientos realizados en el Antiguo Cercano
Oriente ha dado origen a proponer nuevamente el problema y trazar un
camino hacia la solución.
Ahora bien, un motivo de base que se encuentra en varias culturas son los
conflictos nocturnos contra demonios, monstruos o espíritus. Otro motivo
es el del hombre que sale vencedor. Por ejemplo en la Odisea Menelaus
retiene al viejo Proteus hasta que no le revela su sabiduría. Otro de los
motivos sería que los espíritus desaparecen al alba, perdiendo su fuerza,
motivo que se encuentra también en el AT.
Otra cosa que se puede observar con respecto de este relato es el así
llamado Namenglaube, es decir, una cierta creencia en nombre. En el
primer momento el demonio se rehusa a revelar su propio nombre; en
segunda instancia él le concede un nuevo nombre y todo esto en base a una
creencia en el.nombre. El nombre llega a ser una especie de doble de la
persona que lo lleva. Quien lo conoce tiene un cierto poder sobre la persona
que lo lleva, aunque se trate de un demonio o de una divinidad.
E1 v.3 que expresa el castigo divino, no tiene ninguna ligazón con lo que
precede. Este castigo cae sobre todos los hombres y no sobre los culpables
y sus hijos bastardos. La impresión que se tiene es que el material antiguo
se vio sometido a una reelaboración posterior, lo que viene probado por el
v.4. Esta afirmación se esperaría después del v.2, no después del castigo, ya
que se presenta como una noticia arqueológica y como un dato cronológico
general fuera de contexto.
Es posible que en el mito antiguo haya tenido lugar el motivo de la envidia
de las divinidades. También aquí se puede individuar las tres etapas del
desarrollo que hemos individuado para el primer ejemplo. La existencia de
un antiguo mito de la rivalidad de las divinidades. La transposición al
ámbito hebreo y la elaboración de las fuentes J que lo coloca antes del
diluvio, signo de la gradual decadencia de la humanidad.
CRITICA
a) No se está del todo seguro de que el credo histórico sea antiguo y sirva
como base del Hexateuco ya que aparece en el Dtr, algo muy discutible. Las
confesiones de fe representan más bien un punto de llegada más que un
punto de partida.
CRITICA
a) No obstante la capacidad sintética de Noth, quedaban algunas cuestiones
abiertas, por ejemplo la consistencia literaria de Gattung, puesto que Noth
no especificó si G existió por escrito o solo oralmente.
Los principios de esta escuela pueden ser resumidos en los tres puntos
siguientes:
a)Las tradiciones del AT tenían un origen cultual, entorno a los santuarios
por y en función del culto.
b) Los libros históricos (D) que dan lugar al grupo literario Dt-2 Re.
CRITICA
Por lo que respecta a los relatos patriarcales cada uno tiene su forma
independiente y diferente de la otra y luego vienen fusionadas en una
unidad mayor (Gn 12-50) sobre todo con lo incierto de las promesas. Los
contenidos principales son: la tierra, la descendencia y la guía del Señor,
Rendtforff subraya sobre todo la bendición a Abraham (Gn 12,1-3) que abre
un horizonte de esperanza sobre el porvenir de Israel y de todas las
naciones.
Como se puede notar Rendtorff prefiere hablar más bien de estratos
tradicionales independientes que de fuentes continuativas, con su propio
desarrollo, pensamientos y elementos constitutivos de la hipótesis
documentaria.
Crítica
a) No queda claro si las etapas por las que pasa la historia patriarcal son el
resultado de una actividad redaccional o permanecen dentro de la tradición
oral.
“Por eso invitamos a los sabios católicos a estudiar estos problemas sin
prejuicio alguno, a la luz de una sana crítica y a la luz de otras ciencias
interesadas a estas materias, y este establecerá indudablemente la gran parte
einfluencia de Moisés como autor y como legislador”
A) Creación del hombre: (Gen. 2,7) ‘Formó Dios al hombre del polvo de la,
tierra y le inspiró en el rostro aliento de la vida, y fue así el hombre ser
animado’.
Son relatos que a partir de antiguas tradiciones que, con los acontecimientos
de Éxodo, son fruto de una profunda reflexión. Se pueden clasificar en tres
ciclos!
La Alianza
CONCLUSIÓN
Introducción
"No hago el bien que quiero, sino el mal que no quiero" dice San Pablo en
Rm 7,19. Cada una de nuestras tendencias naturales, orientadas hacia el
bien del hombre (individuo y comunidad humana), están constantemente
expuestas a un desdoblamiento en su dirección. Se da pues, en el interior
del hombre una tensión o desgarramiento producido por dos fuerzas
antagónicas (no tanto es una fuerza, sino una debilidad): una fuerza dirigida
a construir la persona y la comunidad; otra que apunta al placer individual y
tiende a dividir al hombre interiormente y a separarlo de su relación propia
con Dios y con la comunidad.
Los hagiógrafos del Antiguo Testamento, llegaron a concebir el drama del
paraíso a través de una meditación etiológica, que buscaba las causas de la
condición actual de la humanidad, contemplándola dentro de los esquemas
de la historia de la salvación. Aquí es donde resulta fascinante el relato de la
Torre de Babel, que marca la última parte de los orígenes de la humanidad,
donde somos dispersos y divididos por causa del pecado. El hagiógrafo
entendía perfectamente lo arriba descrito, ya que liga en el conjunto total de
su obra, el hecho de Babel con la elección de Abraham.
Y esto vale no solamente a los hombres que viven después de Cristo, sino
de todos absolutamente, incluso aquellos que vivieron antes de su venida.
Dios ofrece pues, su gracia por medio del E.S., a todos los hombres, y no
deja de ofrecerla hasta el término de la vida de cada uno, incluso cuando la
gracia ha sido rechazada. Por lo tanto, si el hombre se encuentra y
permanece en la imposibilidad de evitar los pecados, esto no quita la
responsabilidad: en efecto, el permanecer en esta situación de alienación
depende de él, y al cerrarse, no puede entrar en el diálogo de salvación con
Dios.
El documento P
La redacción sacerdotal no puede entenderse más que en el marco del
choque profundo que supuso el exilio de Babilonia y la caída de Jerusalén
en el 587 a.c.. Aquí es cuando se fija la redacción del Pentateuco tal como
la conocemos y la historia sacerdotal, antes del final del exilio en el año 538
a.c.
"La época de la última redacción de estos textos que dan el sello a la torah
es, la del principio del segundo templo, la sanción de la reorganización del
culto antiguo a la par que renovado. Mientras que la historia sacerdotal está
redactada en Mesopotamia y define estatutariamente el nuevo éxodo, estos
textos son una redacción palestina de antiguas costumbres, puestas al día en
función de la nueva luz aportada por los grandes profetas a la revelación
mosaica en la que se había fundado el pueblo. Los profetas del retorno de la
cutividad nos dan ecos de los problemas planteados por la restauración".
La ideología monárquica ambiental de J se modifica profundamente en
función de la elección de los patriarcas, prototipo y garante de la elección
del hijo de David, y de la revelación hecha por Moisés en el Sinaí. La vida
del pueblo ya no se centra en la persona del rey y en sus órdenes, sino en la
presencia del Señor en su santuario, en el que los israelitas tienen que
acudir a tributarle culto durante las fiestas litúrgicas. Vemos a Moisés
confiando el sacerdocio a los levitas, al que están vinculados Sadoq y los
sacerdotes guardianes del arca de Sión. Alrededor de este santuario,
edificado por el hijo de David, se desplegará este esfuerzo de cristalización
de las antiguas tradiciones incluso de las que primitivamente se habían
desplegado alrededor de Siquem o de Silo. Estas últimas eran tanto más
preciosas cuanto que conservaban más pura la herencia de Moisés a través
de los fracasos de la monarquía.
"P cuenta con una clase de lectores que no quieren ser formados, sino que
se preguntan acerca de la relación de Dios con el mundo, con los hombres,
acerca de las disposiciones divinas sobre los pueblos y, sobre todo, acerca
de la relación de Israel con Dios".
Geografía y arqueología
La geografía bíblica no empieza en Palestina, sino en el valle del Éufrates.
Ur cae hacia el sur y Jarán hacia el norte de un amplio arco que traza el
valle del Éufrates. Podemos completar este mismo arco desde el oeste de
Jarán a la costa siria y luego por el sur hasta Egipto. Esto nos da la imagen
de una media luna con sus extremos en los golfos Pérsico y de Suez, con su
mitad extendiéndose a lo largo de la actual frontera turca. Esta franja recibe
el nombre de Creciente Fértil.
La existencia de agua determinó el establecimiento de centros agrícolas o
sedentarios, pero al mismo tiempo condicionó el trazado de las rutas
comerciales.
La región de la cuenca del Tigris-Éufrates, cerca del golfo Pérsico, es
llamada en Gn 10,10 Tierra de Senaar. Esto significa país de los Sumerios,
antiguos ocupantes no semitas de aquella región. Cerca de Ur se hallaba
Uruk, la Erek del mismo versículo anterior.
A partir de ca. 2500, los amorreos, semitas (occidentales, por proceder del
sur de Arabia o de Siria, al noroeste), comenzaron a invadir Sumer. La más
importante de las dinastías semíticas establecidas en esta zona tuvo su
centro en Babilonia, unos 250 Km. al noroeste de Ur. Muy al este de la
región que hemos descrito cae la región montañosa de Persia.
Orígenes
Una introducción era necesaria para situar a Abraham en medio de las
naciones y precisar el alcance de su bendición, describiendo la maldición
que parecía pesar sobre el suelo y la vida humana.
Todos los materiales que ha reunido, con toda su vastedad, sólo están al
servicio de una cosa: mostrar la perdición que viene al mundo a causa del
pecado; y no se podría decir que sea el único modo de considerar el asunto,
sino más bien que es una afirmación vinculada a una fe totalmente
determinada. "Tampoco se agota la intención del autor en dejar sentada la
solidaridad que une a todos los hombres en el pecado, sino que además
dibuja de forma implacable la perturbación que en las bases existenciales
del hombre, e incluso en su constitución psíquica, provoca su primer
rechazo consciente de Dios; por eso, si el hombre está expuesto las
múltiples formas de sufrimiento de la vida, se explica por haberse apartado
de la comunión con Dios".
Junto con el abismo que hay entre Dios y el hombre, da testimonio del
crecimiento secreto de la gracia. La historia de la caída en el pecado; la
historia de Caín; la historia del diluvio, muestran al mismo tiempo el obrar
salvífico de Dios perdonador y paciente. Sólo en la historia de la
construcción de la torre, cuando los pueblos se destruyen y se ha perdido la
unidad del género humano, la última palabra parece ser el juicio de Dios.
Pero en ese momento engrana la protohistoria con la historia de la
salvación: Abraham es llamado de entre la multitud de los pueblos y se le
promete la bendición de que "en el serán benditas todas las generaciones de
la tierra". El alargar la duración de la protohistoria hasta llegar a la creación
misma no es algo ornamental. La protohistoria y el comienzo de la historia
de la salvación se compenetran mutuamente de modo indisoluble. Da la
etiología de todas las etiologías de Israel y se transforma en ese momento
en un verdadero profeta. Gn 12, 1 s, no es una unidad completa, sino una
pieza de unión creada ad hoc y, en virtud de esta propiedad, transformada
en receptáculo de las últimas afirmaciones de la fe.
Género literario
El género de nuestro texto es Etiológico y tiene una parte (la cual es una
división del género etiológico) donde se usa la etimología "popular", donde
se le una interpretación de un nombre por su significación pero jugando con
las palabras o con algún verbo, no estudiando minuciosamente la raíz
nominal o la historia semántica.
Género etiológico
La escritura presenta, en ocasiones, relatos en los que se dan explicaciones
de las causas (aitía = causa) de los hechos que se narran. Generalmente son
hechos de trascendencia, pero otras veces son hechos chocantes o
interesantes al propósito del hagiógrafo. El autor, o sus fuentes, si no
encuentra la causa verdadera del mismo, o le busca una causa desde la
perspectiva religiosa de su esquema teológico o utiliza la explicación
popular, folklórica, que estaba en curso, con el fin de sacar de ella el partido
que le interesa.
Estos términos se sacaron del (1) Diccionario de la biblia de Haag, van den
Born y Ausejo y de (2) Vocabulario de Teología Bíblica de León-Dufour.
Mundo
La idea que los escritores bíblicos tenían del mundo era la misma que la de
los hombres de su tiempo y de su raza, se limitaban a las apariencias
externas y no pretendían llegar a la esencia misma que ocultaban esas
apariencias.
Tierra
El cielo y la tierra forman juntos el universo. A veces es triple y se
menciona el mar (el gran mar universal que se extiende debajo de la tierra),
y también "El cielo, la tierra y lo que hay debajo" (donde habitan Dios y sus
ángeles, la tierra y la ultratumba). Como el cielo es el trono de Dios, así la
tierra es el escabel de sus pies. Es propiedad de Dios por haber sido creada
por El. La tierra ha sido dada a los hombres para habitarla. Por eso se utiliza
la palabra tierra también para indicar los habitantes de la misma. La tierra
es la sede y el origen de todo lo material, natural y pecaminoso.
La vida del hombre depende enteramente de las riquezas que oculta la tierra
y de la fertilidad de su suelo; es la tierra el marco providencial de su vida.
Pero no es sólo el marco de su vida: entre ella y el hombre hay un vínculo
íntimo, el hombre salió de ella de donde toma su nombre.
Dios separa de las aguas el continente al que llama tierra, luego la puebla;
por otro lado es la tierra un desierto vacío y estéril donde va Dios a plantar
un huerto para situar en él al hombre. La tierra depende enteramente de
Dios. Dios confía al hombre la tierra y lo hace dueño de ella, debe dominar
en ella, es un administrador, con su trabajo imprime su marca en la tierra,
pero por otro lado la tierra es una realidad vital que modela en cierto modo
la psicología del hombre.
Lenguaje
Lengua- Por la lengua se comunica el hombre con sus semejantes y expresa
a Dios los sentimientos de su corazón. Pag. 473 diversidad de las lenguas
Los pueblos del universo son de "todas las lenguas". Con esta expresión
concreta designa la Biblia la diversidad de las culturas. Esta no expresa
solamente la riqueza intelectual del género humano, sino además es un
principio de incomprensión entre los hombres, un aspecto del misterio del
pecado, cuyo significado religioso es sugerido por la torre de Babel: la
soberbia sacrílega de los hombres que construían su ciudad sin Dios tuvo
como fruto esta confusión de los lenguajes. Con el acontecimiento de
*pentecostés (Hch 2,1-13) quedo superada la división de los hombres: El
espíritu Santo se reparte en lenguas de fuego sobre los apóstoles de modo
que se oiga el Evangelio en las lenguas de todas las naciones. Así los
hombres serán reconciliados por el lenguaje único del Espíritu, que es la
caridad. El carisma de "hablar en lenguas" es entre los apóstoles una forma
de oración que alaba a Dios en el entusiasmo y a la vez una forma de
profecía que anuncia a los hombres las maravillas de Dios. Para regular en
la Iglesia el uso de este carisma alaba Pablo su primera forma, pero declara
preferir la segunda porque es útil a todos. Las manifestaciones de
pentecostés muestran que la Iglesia escatológica desde su nacimiento,
dirigiéndose a los hombres en todas lenguas y reuniéndose en una alabanza
única de las maravillas de Dios. Así "toda lengua confesará que Jesús es
Señor, para gloria de Dios Padre".
Palabra
Tanto en entre los antiguos pueblos orientales como entre los primitivos, no
sólo la expresión de un pensamiento o de un deseo, sino un objeto concreto,
que existe realmente, es eficaz y está como cargado de la fuerza del alma
que la ha pronunciado. En las lenguas semíticas, pensar y hablar se
designan con idéntico término:('_mar); hablar es manifestar lo que el
corazón dice. Pero la palabra pronunciada no es sólo un sonido que
continúa en la conciencia del locutor o del oyente sólo como pensamiento,
sino también una cosa, invisible ciertamente, pero real, como el aliento, que
juntamente con la palabra, abandona la boca; por eso frecuentemente el
término palabra se halla paralelo con ruah (aliento, espíritu y también en
muchos textos egipcios y babilónicos).
Humanidad (hombre)
Para los hebreos, el comienzo de la vida del hombre es un misterio, una
obra de la omnipotencia de Dios. La conservación de la vida depende
absolutamente de la voluntad de Dios.
Aunque los hebreos distinguen a veces en el hombre alma y carne o carne y
espíritu; el hombre entero es alma, es decir, ser viviente, y es ser carne, ser
que vive corporalmente, o ser débil y perecedero. Para el cuerpo no
conocen otra denominación que carne. No se pueden imaginar al hombre o
a un alma sin cuerpo y, consiguientemente, consideran siempre al hombre
como un todo. De ahí que se diga indiferentemente: el hombre, el alma, la
carne siente, quiere, espera, muere.
Piedra
La piedra, a causa de su increíble abundancia en Palestina, se halla siempre
presente en la mano y en la mente de los hebreos. Por otra parte en la
mentalidad primitiva y en la simbólica común a todos los hombres, la
piedra, sólida, duradera y pesada, es signo de fuerza.
Cocerlos al fuego
No se sabe de que manera obtenían el fuego los israelitas. El fuego se
encendía por medio de un pedernal en 2 Mac, aunque esta costumbre era,
evidentemente, mucho más antigua. En un principio debió de ser trabajo
importante; por eso no se podía hacer fuego para guisar los alimentos en el
día del sábado (Ex 35,3). Para ahorrarse ese trabajo, procuraban tener
siempre cerca algunos carbones encendidos. Abraham llevaba consigo el
fuego cuando subió al monte para sacrificar a su hijo.
Sin duda Israel comparte con todos los pueblos antiguos la teoría de los
cuatro elementos; pero, en su religión, el fuego tiene sólo el valor de signo,
que hay que superar para hallar a Dios. (varias cosas más sobre el fuego
como símbolo de Yahavé, purificador, muestra su ira, Él no es el fuego,
pero puede expresarse por medio de el).
Betún
Nombre de varias sustancias compuestas de carbono e hidrógeno, que se
encuentran en la naturaleza y arden con llama, humo espeso y olor
particular. Betún de Judea=asfalto.
Cemento Cal hidráulica que sirve para fabricar una especie de argamasa.
Asfalto (hebr. hemar)
Edificar
2+El verbo hebreo banah designa ante todo la construcción de edificios
materiales, un altar, una casa, una ciudad, y Dios no condena estas empresas
a condición de que no estén, como en Babel, destinadas a levantar al
hombre contra él. La presencia divina es indispensable para que la obra no
esté condenada al fracaso. Las construcciones "paganas" no tienen peso
delante de Dios; él las destruirá cuando quiera, por bellas y sólidas que
puedan parecer.
Ciudad
Población, generalmente fundada junto a una fuente, que se distingue de
aldea, casa de campo o campamento, por poseer fortificaciones.
Israel tiene la convicción de que la vida urbana se remonta mucho más allá
de los patriarcas hebreos: el Génesis, después de oponer la vida pastoral de
Abel a la vida agrícola de Caín atribuye a éste la fundación de la primera
ciudad, a la que dio el nombre de su hijo Henoc (juego de palabras con el
término, que quiere decir "dedicación"). Pero sólo después del corte
marcado por el diluvio asistimos a la fundación de las grandes ciudades,
alrededor de las cuales se organizan los imperios mesopotámicos (10,10s).
Torre (ziggurat)
Edificio sagrado característico de la religión mesopotámica, en forma de
torre escalonada. Aunque se desconoce su función exacta, hay indicios para
creer que no era una tumba, por lo que no debe comprarse con las pirámides
de Egipto. La explicación más aceptable es que se trate de torres que unían
al cielo con la tierra, facilitando la relación con los poderes celestes. No
obstante, o se excluye su función como observatorios astronómicos para
determinar el momento propicio para la celebración de ceremonias.
Para los hebreos como para nosotros es el cielo una parte del universo,
diferente de la tierra, pero en contacto con ella, una semiesfera que la
engloba y constituye con ella el universo que el hebreo, no teniendo la
palabra propia para designarlo, llama siempre "el cielo y la tierra". La biblia
distingue perfectamente el cielo físico, de la misma naturaleza que la tierra,
"el cielo y la tierra", y el cielo de Dios "el cielo que no es la tierra". Pero el
primero es siempre el que permite al hombre pensar en el segundo. El
hombre pertenece a la tierra y el cielo se le escapa. Es necesaria la locura
del rey de Babel para pensar en subir al cielo: esto es igualarse con el
Altísimo. Así se establece como la cosa más natural una relación entre el
cielo y Dios.
Obra (actividad)
La palabra obra puede revestir toda clase de sentidos, puede designar
acciones, trabajos, producciones diversas y más especialmente "la obra de
la carne" en que consiste la generación. Tras toda obra humana importa
descubrir la obra única de Dios: a su propio Hijo, con el que enlaza y al que
quiere expresar a su manera.
Prójimo (otro, compañero, hermano)
La palabra prójimo, que traduce con bastante exactitud el término griego
plesion, corresponde perfectamente a la palabra hebrea rea', que es
subyacente a este último. No debe confundirse con la palabra "hermano",
aunque con frecuencia le corresponde. Etimológicamente expresa la idea de
asociarse con alguno, de entrar en su compañía. El prójimo, contrariamente
al hermano, con el que está uno ligado por la relación natural, no pertenece
a la casa paterna; si mi hermano es otro yo, mi prójimo es otro que yo, otro
que para mí puede ser realmente el otro, pero que puede llegar a ser un
hermano. Así puede crearse un vínculo entre dos seres, ya sea en forma
pasajera, o en forma durable y personal en virtud de amistad o de amor o
del compañerismo. En los antiguos códigos no se habla de "hermanos", sino
de "otros": a pesar de esta abertura virtual hacia el universalismo, el
horizonte de la ley apenas si rebasó los límites del pueblo de Israel.
Desperdigar (dividir)
División de la familia humana.- Lo que en primer lugar descubre Adán
pecador es su desnudez. Lo que simbolizaba la separación de los seres se
convierte en realidad: Adán, interrogado por Dios, acusa a su mujer
mostrando así que se desolidariza de ella. entonces les anuncia Dios a los
dos que sus relaciones van a ejercerse bajo el signo de la fuerza instintiva.
La sucesión de los capítulos del Gn. muestra cómo esta división primera
tiene su repercusión, entre Caín y Abel, hermanos enemigos, entre los
hombres que, en Babel, no se comprenden ya. La historia sagrada es un
tejido de divisiones, una sucesión de guerras, entre el pueblo y las naciones,
etc.
Babel
Babel es el nombre hebreo de Babilonia, y para el es la ciudad del mal por
excelencia. La torre es el gran templo de Babilonia, un ziggurat.
El nombre de la ciudad de Babel en Babilonia quiere decir "La puerta de
Dios" (bãb-ili).
Confundir Mezclar sin orden. Confusión.- reunión de cosas inconexas.
Embrollar.- Desordenar, enredo, confusión.
Oriente Punto cardinal del horizonte por donde sale el sol.
Vega Tierra baja bien regada y muy fértil.
País del latín pagus, pueblo. Territorio.
Llanura Superficie lisa, igual, plana.
Establecieron Fundar, hacer de nuevo, avecindarse en un sitio.
Emigrar Salir de su país para ir a establecerse a otro.
Fabricar Hacer una cosa por medios mecánicos.
Cúspide Punto culminante de un monte.
Remate Fin, cabo, extremo.
MENSAJE TEOLÓGICO
8 1 The whole world spoke the same language, using the same words.
1 2 Al desplazarse la humanidad desde oriente, hallaron una vega en el país
de Senaar y allí se establecieron.
2 2 Al emigrar de oriente, encontraron una llanura en el país de Senaar, y se
establecieron allí.
3 2 Sucedió que, al emigrar los hombres desde el Oriente, encontraron una
llanura en el país de Sinear y se establecieron allí.
4 2 Al emigrar (el hombre) de oriente, encontraron una llanura en el país de
Senaar, y se establecieron allí.
5 2 Pero al emigrar los hombres desde Oriente se encontraron una vega en
el país de Sin 'ar y allí se asentaron.
6 2 Pero cuando los hombres partieron desde el oriente encontraron un
campo en la tierra de Senaar, y vivieron allí.
7 2 Mas cuando (los hombres) emigrando desde el Oriente hallaron una
llanura en la tierra de Sinear, donde se establecieron,
8 2 While men were migrating in the east, they came upon a valley in the
land of Shinar and settle there.
1 3 Entonces se dijeron el uno al otro: "Ea, vamos a fabricar ladrillos y a
cocerlos al fuego." Así el ladrillo les servía de piedra y el betún de
argamasa.
2 3 Y se dijeron unos a otros: Vamos a preparar ladrillos y a cocerlos
(empleando ladrillos en vez de piedras y alquitrán en vez de cemento).
3 3 Se dijeron unos a otros: "Ea; fabriquemos ladrillos y cozámoslos al
fuego". Les sirvió el ladrillo de piedra y el asfalto les sirvió de cemento.
4 3 Y se dijeron unos a otros:
-Vamos a preparar ladrillos y a cocerlos, (empleando ladrillos en vez de
piedras y alquitrán en vez de cemento).
5 3 Dijéronse unos a otros: "¡Ea, fabriquemos ladrillos y cozámoslos al
fuego!"; y les sirvió el ladrillo de piedra, y el asfalto, de argamasa.
6 3 Luego dijo el una al otro: "vamos, hagamos ladrillos y cozámoslos al
fuego". Hicieron pues uso de ladrillos en vez de piedras, y de betún en vez
de mezcla.
7 3 dijéronse unos a otros: "Vamos, fabriquemos ladrillos, y cozámoslos
bien". Y sirvióles el ladrillo en lugar de piedra, y el betún les sirvió de
argamasa.
8 3 They said to one another, "Come, let us mold bricks and harden them
with fire". They used bricks for stone, and bitumen for mortar.
1 4 Después dijeron: "Ea, vamos a edificarnos una ciudad y una torre con la
cúspide en los cielos, y hagámonos famosos, por si nos desperdigamos por
toda la haz de la tierra."
2 4 Y dijeron: Vamos a construir una torre que alcance al cielo, para
hacernos famosos y para no dispersarnos por la superficie de la tierra.
3 4 Dijeron después: "Ea; edifiquémonos una ciudad y una torre con su
remate hasta el cielo y hagámonos un nombre, no sea que seamos dispersos
sobre la superficie de toda la tierra".
4 4 Y dijeron:
-Vamos a construir una ciudad y una torre que alcance al cielo, para
hacernos famosos, y para no dispersarnos por la superficie de la tierra.
5 4 Luego dijeron: "¡Ea, edifiquémonos una ciudad y una torre cuya
cúspide llegue al cielo y así nos crearemos un nombre, no sea que nos
dispersemos por la superficie de toda la tierra!".
6 4 Luego dijeron: "Vamos , construyamos una ciudad y una torre cuya
cumbre toque el cielo; y hagamos famoso nuestro nombre antes de
repartirnos por todas las tierras".
7 4 Y dijeron, pues: "Vamos, edifiquémonos una ciudad y una torre, cuya
cumbre llegue hasta el cielo; y hagámonos un monumento para que no nos
dispersemos sobre la superficie de toda la tierra".
8 4 Then they said, "Come, let us build ourselves a city and a tower with its
top in the sky, and so make a name for ourselves; otrherwise we shall be
scattered all over the earth".
1 8 Y desde aquel punto los desperdigó Yahveh por toda la haz de la tierra,
y dejaron de edificar la ciudad.
2 8 El Señor los dispersó por la superficie de la tierra y dejaron de construir
la ciudad.
3 8 Después el Señor los dispersó de allí sobre la superficie de toda la tierra,
y cesaron de edificar la ciudad.
4 8 El Señor los dispersó por la superficie de la tierra
5 8 Luego los dispersó Yahveh de allí por la superficie de toda la tierra y
cesaron de construir la ciudad.
6 8 Y de esa manera los dividió Dios desde aquel lugar a todas las tierras,
dejando de construir la ciudad.
7 8 Así los dispersó Yahveh de allí por la superficie de toda la tierra; y
cesaron de edificar la ciudad.
8 8 Thus the Lord scattered them from there all over the earth, and they
stopped building the city.
Génesis 11,1-9
1 Tenía entonces la tierra un solo lenguaje y unos mismos vocablos. 2
Sucedió que, al emigrar los hombres desde el Oriente, encontraron una
llanura en el país de Sinear y se establecieron allí. 3 Se dijeron unos a
otros: "Ea; fabriquemos ladrillos y cozámoslos al fuego". Les sirvió el
ladrillo de piedra y el asfalto les sirvió de cemento. 4 Dijeron después:
"Ea; edifiquémonos una ciudad y una torre con su remate hasta el cielo y
hagámonos un nombre, no sea que seamos dispersos sobre la superficie de
toda la tierra".
5 Bajó el Señor para ver la ciudad y la torre que habían edificado los hijos
de los hombres. 6 Dijo el Señor: "He aquí que todos ellos son un solo
pueblo y un solo lenguaje; si es esto lo que comienzan a hacer, nada
entonces les será imposible de todo lo que proyecten hacer. 7 Ea; bajemos y
confundamos allí su lenguaje, para que unos no entiendan el lenguaje de
los otros". 8 Después el Señor los dispersó de allí sobre la superficie de
toda la tierra, y cesaron de edificar la ciudad. 9 Por esto se llamó su
nombre Babel, porque allí confundió el Señor el lenguaje de toda la tierra y
de allí el señor los dispersó sobre la superficie de toda la tierra.
Por este versículo fue que me decidí a usar esta traducción, porque al
principio no entendía que tan malo era "hacerse famosos" como decía la B.
de Jerusalén; pero si ahora nos fijamos la importancia del "nombre" (ver p.
18), y el no quererse dispersar como se les había indicado a Adán y a Noé,
se entiende la importancia del versículo.
5 Bajó el Señor para ver la ciudad y la torre que habían edificado los hijos
de los hombres.
En las palabras de Dios suena en contrapunto un sueño que un día podrá ser
una esperanza: un pueblo, una lengua, una empresa, y el poder humano
crece sin límites. Pero no cuando el pecado pervierte sus planes.
La exclamación de este versículo es como la de Gn 3,22, una exclamación
llena de ironía, típica de J. ("Entonces dijo el Señor Dios: "He aquí que el
hombre se ha vuelto como uno de nosotros, conociendo el bien y el mal.
Ahora bien, que no vaya a extender su mano, a tomar también del árbol de
la vida, a comer y vivir para siempre" "). La respuesta divina o es irónica o
simplemente sintetiza todo el proceso del drama paradisíaco (promesa de la
serpiente, transgresión, soberbia del hombre, frutos derivados de la
transgresión), como poniendo de relieve la especie de independencia y de
propia autonomía conseguidos por el hombre frente a Dios, aunque no en el
sentido propuesto por la serpiente. Ironía o simple comprobación de hechos,
las palabras divinas señalan junto al árbol de la ciencia..., un fracaso cuyas
trágicas consecuencias se extienden hasta el árbol de la vida.
CONCLUSIÓN
"La historia de la torre de Babel presenta un fenómeno de grandes
proporciones en la historia cultural de la humanidad. Las grandes culturas
suelen nacer de las grandes migraciones; los hombres salen de su existencia
oscura y emergen a la luz de la historia hasta alcanzar (¡sobre las vastas
llanuras!) el nivel de grandes potencias culturales. Pero desde este momento
su vida cambia y su convivencia social toma nuevas formas. Planean una
comunidad de intereses económicos; un entusiasmo vital les anima en su
obra titánica, para la cual, en cambio, tienen a su disposición materiales de
construcción muy débiles. Con una clarividencia admirable, la antigua saga
dibuja aquí, la imagen primordial de toda la cultura humana y las fuerzas
fundamentales que la animan. La colaboración económica y una voluntad
viva e indomable de grandeza (con un toque de angustia) llevan al hombre a
construir una obra colosal, que la saga contempla con un escepticismo
innegable, pues ve en este titanismo la amenaza más grave a las relaciones
del hombre con Dios; más aún, ve en la gigantesca empresa cultural un
ataque contra Dios mismo.
Cuando el hombre abandona la simplicidad de la obediencia y consigue la
ciencia, rebelándose contra Dios, inicia un camino en el cual se manifiesta
cada vez más poderoso y titánico. En las historias de los matrimonios entre
los ángeles y las mujeres (Gn 6, 1 s.) o en la torre de Babel, podemos
percibir todavía reminiscencias de un auténtico terror primitivo frente a las
inmensas posibilidades del hombre. A lo largo de esta evolución hacia un
poder titánico perfecto, encontramos también las piedras milenarias del
creciente progreso de la cultura humana. Pero este crecimiento y esta
elevación lenta del hombre a un nivel cultural superior, lleva consigo la
separación cada vez más profunda de Dios, que debía conducirle a una
catástrofe. Sin embargo, lo dicho hasta el presente, no refleja con claridad
suficiente el sentido específico de la historia yahvista de los orígenes; éste
se manifestará plenamente en Gn 12, 1-3, su verdadera conclusión".
"La construcción de la ciudad-Babel y de la torre suscita un doble problema
arqueológico: la identificación de la ciudad-Babel y la identificación de la
torre. Resuelto sin sombra de duda el primero, queda al aire el segundo a
pesar de los esfuerzos por identificarla con alguno de los frecuentes zigurat-
ziggurat babilónicos (ver p. 17). Sea lo que fuere de la relación más o
menos posible encerrada en el binomio torre bíblica-ziggurat pone en pie
un problema histórico. ¿Se trata de un hecho real en la historia de la
humanidad, o más bien de un recurso religioso-literario, sugerido por los
ziggurats babilónicos, para explicar el origen de las lenguas, la dispersión
de la humanidad, la entrada de Abram en la historia?. El relato bíblico
parece inclinar a un hecho real sobre una base histórica de más o menos
amplitud y precisión en sus detalles. La inseguridad científica hasta ahora
existente en torno a los ziggurat babilónicos y a su finalidad, sobre todo si
se compara con el alcance seguro y transparente en sus líneas centrales de la
ciudad-torre bíblicas, no favorece mucho el camino hacia una postura
radicalmente antihistórica: si se quiere llegar a esto a base de un mero
recurso religioso-literario, se ha de prescindir del caso concreto actual y
refugiarse por sistema en la teoría general de los géneros literarios o en el
hipotético carácter antihistórico de la historia oriental antigua.
Propuesto con uno u otro matiz, todos admiten en el primer plano de Gn. 11
la existencia de un problema teológico fundamental con diversas
ramificaciones: el absoluto dominio de Dios, del que en vano una
humanidad soberbia trata de liberarse. Este dominio divino se manifiesta en
el doble castigo de la humanidad: confusión en la lengua, que directa y
milagrosamente, o indirectamente y valiéndose de un proceso natural más o
menos largo, Dios provoca; dispersión de las naciones. Sobre este fondo
histórico, cuya determinación cronológica y alcance concreto en los detalles
son difíciles de fijar, se alza como símbolo la ciudad de Babel con su
enorme influjo, pero ante Dios impotente, en toda la antigua historia del
Oriente. Dominio divino con sello de castigo sobre la humanidad rebelde,
pero con desemboque final en un dominio con sello de favor, a través de la
elección de Abram y del futuro Israel. Teología sobre la base de la historia:
sólo con un sistema exegético antihistórico puede intentar destruirse
radicalmente este maravilloso y providencial conjunto".
El don del Espíritu restaura la unidad humana, que se rompió con Babel. El
milagro de Pentecostés es el símbolo y la anticipación maravillosa de la
misión universo de los apóstoles. "Id, pues, y haced discípulos a todas las
gentes bautizándolas en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo,
y enseñándoles a guardar todo lo que yo os he mandado. Y he aquí que yo
estoy con vosotros todos los días hasta el fin del mundo". (Mt 28 19-20)
"En este día de Pentecostés se revela plenamente la Santísima Trinidad.
Desde ese día el Reino anunciado por Cristo está abierto a todos los que
creen en Él: en la humildad de la carne y de la fe, participan ya en la
Comunión de la Santísima Trinidad. Con su venida, que no cesa, el Espíritu
Santo hace entrar al mundo en los "últimos tiempos, el tiempo de la Iglesia,
el Reino ya heredado, pero todavía no consumado.
"Dios es Amor" (1Jn 4, 8. 16) y el Amor que es el primer don, contiene
todos los demás. Este amor "Dios lo ha derramado en nuestros corazones
por el E.S. que nos ha sido dado" (Rm 5,5). El amor es el principio de la
vida nueva en Cristo. La Comunión con el E.S. es la que, en la Iglesia,
vuelve a dar a los bautizados la semejanza divina perdida por el pecado.
Gracias a este poder del E.S. los hijos de Dios pueden dar fruto, que es
caridad, alegría, paz. paciencia, afabilidad, bondad, fidelidad,
mansedumbre, templanza" (Gal 5, 22-23). "El espíritu es nuestra Vida":
cuanto más renunciamos a nosotros mismos (Mt 16, 24-26), más "obramos
también según el Espíritu" (Gal 5, 25):
Por la comunión con él, el Espíritu Santo nos hace espirituales, nos
restablece en el Paraíso, nos lleva al Reino de los cielos y a la adopción
filial, nos da la confianza de llamar a Dios Padre y de participar en la gracia
de Cristo, de ser llamado hijo de la luz y de tener parte en la gloria eterna
(San Basilio, Spit. Sto. 15, 36).
La misión de Cristo y del E.S. se realiza en la Iglesia, Cuerpo de Cristo y
Templo del E.S.. Esta misión conjunta asocia desde ahora a los fieles de
Cristo en su Comunión con el Padre y el E.S.: El E.S. prepara a los
hombres, los previene por su gracia, para atraerlos hacia Cristo. Les
manifiesta al Señor resucitado, les recuerda su palabra y abre su mente para
entender su Muerte y su Resurrección. Les hace presente el Misterio de
Cristo, sobre todo en la Eucaristía para reconciliarlos, para conducirlos a la
comunión con Dios, para que den mucho fruto. Desde el comienzo y hasta
la consumación de los tiempos, cuando Dios envía a su Hijo, envía siempre
a su Espíritu: la misión de ambos es conjunta e inseparable.
La Iglesia es santificada continuamente por el Espíritu Santo (LG 4). A
partir de Pentecostés, la Iglesia se manifestó públicamente ante la multitud;
se inició la difusión del Evangelio entre los pueblos mediante la
predicación. La Iglesia constituye el germen y el comienzo del Reino de
Cristo y de Dios en la tierra (LG 5).
La palabra "católica" significa "universal" en el sentido de "según la
totalidad" o "según la integridad". La Iglesia es católica porque Cristo está
presente en ella. "Allí donde está Cristo Jesús, está la Iglesia Católica" (San
Ignacio de Antioquía, Smyrn. 8,2). En ella subsiste la plenitud del Cuerpo
de Cristo unido a su Cabeza, lo que implica que ella recibe de Él "la
plenitud de los medios de salvación" (AG 6) que Él ha querido: confesión
de fe recta y completa, vida sacramental íntegra y ministerio ordenado en la
sucesión apostólica. La Iglesia, en este sentido fundamental, era católica el
día de Pentecostés y lo será siempre hasta el día de la Parusía.
Desde Pentecostés, el Espíritu Santo realiza la santificación a través de los
signos sacramentales de su Iglesia. Los sacramentos de la Iglesia no anulan,
sino purifican e integran toda riqueza de los signos y de los símbolos del
cosmos y de la vida social. Aún más, cumplen los tipos y las figuras de la
Antigua Alianza, significan y realizan la salvación obrada por Cristo, y
prefiguran y anticipan la gloria del cielo.