Manifiesto Plataforma de Familiares Centro Alzhéimer de La Fundación Reina Sofía

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– 3 de junio de 2022 –

CONCENTRACIÓN DE FAMILIARES POR LA NEFASTA


GESTIÓN DE MENSAJEROS DE LA PAZ DE LA RESIDENCIA
FUNDACIÓN REINA SOFÍA DE ALZHEIMER

La Plataforma de Familiares del Centro de Alzheimer Fundación Reina Sofía


nos hemos reunido hoy para poner voz a los enfermos que aquí viven, y que
sufren la nefasta gestión de la que es su casa por parte de la Asociación
Mensajeros de la Paz.

Esta empresa adquiere en mayo de 2021 el compromiso de hacerse cargo de la


gestión del centro mediante un Contrato Público, a pesar de que la CAM
establece un precio inadecuado. Tanto es así que CLECE, empresa que lo
gestionó desde su inauguración en el año 2007, se retira del concurso antes de
que se produzca la adjudicación, al igual que otras empresas del sector,
alegando ser un precio insuficiente para garantizar el cuidado de los enfermos
de Alzheimer ingresados.

Finalmente la CAM adjudica la gestión a la única empresa que la acepta, la


Organización Mensajeros de la Paz, cuya única preocupación desde el principio
ha sido rentabilizar su negocio sin importar el daño que sus recortes causan a
los enfermos. Un año después podemos decir que su pésima gestión ha
provocado un empeoramiento de la salud y calidad de vida de los residentes.

Por ello nosotros, como familiares y allegados de los enfermos


institucionalizados en este centro, queremos exigir a la Comunidad de Madrid
la rescisión de su contrato. Tas un año durante el que se ha demostrado que el
precio ofrecido para su gestión era inadecuado, y que la empresa Mensajeros de
la Paz no tiene ni la sensibilidad ni la calidad necesarias para gestionar este

Con el apoyo de:

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centro, redactamos el presente manifiesto con los puntos mínimamente
necesarios e imprescindibles para garantizar a nuestros familiares una calidad
de vida aceptable:

1- La revisión urgente de los Pliegos de prescripciones técnicas y el incremento


de los ratios mínimos de gerocultores de atención directa, teniendo en cuenta
las particularidades del edificio, y que un centro que tiene exclusivamente
residentes con Alzheimer no puede equipararse a ninguna otra residencia; no
son mayores, son enfermos. En la situación actual el bajo número de
gerocultores y la rotación del personal les impide el conocimiento de los
enfermos, lo cual está ocasionando problemas tan graves como:

- Retrasos en los horarios de ingesta de alimentos, llegando a pasar en


ocasiones 14 horas entre la cena y el desayuno o menos de dos horas
entre desayuno y comida.
- Higiene deficiente y problemas dermatológicos hidratación incorrecta o
falta de secado, cambios de pañales insuficientes, o falta de tiempo para
llevarles al baño, que provocan infecciones incluso en pacientes que
nunca las habían padecido antes.
- Caídas y altercados entre residentes al no tener vigilancia constante.
- Heridas, magulladuras y golpes en residentes asistidos por una
manipulación incorrecta, al tener que manejar un solo gerocultor a
residentes que necesitan de al menos dos personas para moverlos.
- Falta de cambios posturales a los residentes encamados, que provocan
escaras y otras lesiones.
- Y así un largo etcétera.

2- El afianzamiento y aumento de la plantilla sanitaria, incorporando además


la figura de un geriatra, asegurando así la asistencia a nuestros familiares las 24
horas del día de lunes a domingo con la calidad, especialización y
humanización que se merecen. En la actualidad la falta de herramientas ágiles
para consultar historias clínicas y la escasa coordinación entre turnos están
provocando graves errores en el suministro de las medicaciones, tanto en

Con el apoyo de:

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patologías crónicas como en prescripciones hechas por especialistas externos.

La escasez de personal médico con conocimiento sobre las patologías asociadas


a la enfermedad está provocando que no se diagnostiquen ni se traten
enfermedades que en ocasiones suponen sufrimiento y hospitalizaciones
innecesarias. A veces hasta que un familiar no da la alarma, nadie se percata de
que algo va mal.

La falta de profesionales de enfermería para asumir el gran número de curas y


tratamientos que necesitan estos pacientes ocasionan, entre otras lesiones:
escaras infectadas, desnutrición, infecciones de orina, deshidratación, etc.

Queremos que se prohíba al equipo técnico la reducción, eliminación o


modificación de medicación crónica pautada por las figuras del geriatra o del
neurólogo sin previo conocimiento y autorización de las mismas, así como sin
informar a las familias del cambio.

3- La implantación de un sistema de comunicación fiable, donde los familiares


tengamos acceso a registros con información real, tanto de datos médicos como
de las actividades en las que participan y terapias que se realizan. En este año
solo unos pocos familiares han recibido el PAI, y a los que lo han recibido de
poco les sirve, pues no detalla ningún plan concreto e individualizado de
actuación, e incluso los datos de enfermería son un copia y pega de los valores
que tenía el PAI del año anterior.

Desconocemos la evolución médica, tanto física como cognitiva, de nuestros


familiares, dado que no se les está realizando ningún seguimiento periódico
salvo en el caso de ingresos hospitalarios. Exigimos se realicen con una
periodicidad mínima a valorar dependiendo del residente.

4- Terapia Ocupacional y Fisioterapia. Los enfermos de Alzheimer requieren


unos cuidados especializados y una estimulación continua en cada etapa de la
enfermedad. Un año después siguen sin realizarse apenas terapias grupales y
mucho menos individuales, tan necesarias para mantener las capacidades que
todavía conservan en las etapas moderadas. En cuanto a los residentes en

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estadio avanzado, ya sin movilidad, no se realizan ejercicios de fisioterapia en
cama, que son tremendamente necesarios para paliar las terribles
consecuencias de esta enfermedad. Ahora y desde hace un año, la única
actividad que realizan durante el día es la de permanecer sentados o tumbados,
dependiendo del caso. En este año hemos observado en nuestros familiares una
pérdida importante de capacidades físicas y mentales, ya irrecuperables.

Queremos que se aprovechen las instalaciones comunes, como el jardín, el


huerto, el gimnasio o la sala Snoezelen, todos ellos prácticamente en desuso en
la actualidad, y que estos lugares vuelvan a formar parte de las terapias diarias.

5- Mejora en la alimentación. A pesar de la ligera mejoría en este aspecto


gracias a la creación del comité de menús y a la insistencia de algunos
familiares, seguimos teniendo un menú bastante mediocre, con ausencia de
productos frescos, y carnes y pescados de baja calidad a diario.

6- Exigimos cuidado de los efectos personales de los residentes, pues el último


año ha aumentado considerablemente el extravío o rotura de prótesis tan
necesarias como dentaduras y audífonos, así como de gafas y otros enseres
personales como joyas. Se han notificado incluso sillas de ruedas que pierden
brazos y nadie es capaz de encontrar.

También, aunque sabemos que la pérdida y deterioro de la ropa es algo habitual


en los centros sociosanitarios, desde que la Asociación Mensajeros de la
Paz gestiona el centro la pérdida y deterioro de ropa es continuo y excesivo. Nos
encontramos a nuestros familiares con prendas rotas o sucias, y en ocasiones
con el armario vacío.

7- Necesitamos soluciones con los problemas en los pedidos de


farmacia. Están utilizando en todos los residentes tallas incorrectas de pañales,
independientemente del peso o tamaño del residente en cuestión, y de que
tengan pautados facultativamente pañales especiales por alguna circunstancia.
No pueden llevar pañales apretados o con escasa absorción que les hagan estar
incómodos y mojados todo el día y les provoquen rozaduras, que en ocasiones
se convierten en heridas e infecciones. Llevamos meses pidiendo solución a este

Con el apoyo de:

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problema y parece que les resulta imposible.

A veces faltan productos básicos, como suero, que en alguna ocasión ha tenido
que ir a comprar un familiar a la farmacia, o batidos nutricionales de los que
depende la alimentación de muchos residentes.

Antes de finalizar este acto, os leo textualmente las definiciones que hacen de
nuestro centro algunos de los implicados en este desastre.

La Asociación Edad Dorada Mensajeros de la Paz dice en su web: “En nuestra


organización buscamos dar a los mayores una mejor calidad de vida,
preocupándonos especialmente por aquellas personas mayores que se
encuentran en ámbitos sociales más vulnerables. No sólo queremos ofrecer a
nuestros residentes un espacio agradable y familiar donde puedan sentirse a
gusto, sino que también queremos que sus familiares tengan la seguridad de
que sus seres queridos se encuentran en un espacio seguro y confortable.”

Así define nuestro centro la CAM en su web:

“Centro referente de la Comunidad de Madrid destinado a combatir de una


manera integral la enfermedad de Alzheimer, abarcando para ello distintos
campos de actuación, desde un punto de vista multidisciplinar. Es un complejo
asistencial pionero, especializado en la atención a personas mayores afectadas
por la enfermedad de Alzheimer.”

También la Fundación Reina Sofía se muestra orgullosa del centro y publica en


su web que la división en 9 unidades de vida “permite que la atención integral y
las terapias que se apliquen sean específicas para el momento de la enfermedad
en el que se encuentra el residente.”

D. Juan José García Ferrer, Director General de Atención al Mayor y a la


Dependencia, afirmaba el pasado 6 de mayo en el Simposio que tuvo lugar en
nuestro centro, “Evolucionando los modelos de atención a personas con
Alzheimer y otras demencias”, que “el objetivo de una residencia es mejorar la
calidad de vida de las personas, que tiene que ser un modelo centrado en la

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persona, con unos estándares de calidad de vida similares a los de un hogar, en
el que se trabaje la estimulación cognitiva, se fomenten sus capacidades y los
cuidados sociosanitarios de larga duración, donde exista un trabajo
interdisciplinar entre áreas, y donde las familias sean cómplices en la creación de
este entorno de convivencia.”

Queremos recordar también que las personas con Alzheimer son ciudadanos de
pleno derecho. Los artículos 49 y 50 de la Constitución establecen que los
poderes públicos prestarán a las personas con algún tipo de discapacidad
atención especializada y promoverán su bienestar atendiendo sus problemas
específicos de salud.

Por todo lo anterior podemos decir que Mensajeros de la Paz, la Comunidad


de Madrid y el Ministerio de Derechos Sociales, además de no cumplir con lo
que dicen o predican, vulneran la Constitución.

¡Exigimos unos gestores eficientes, que pongan en el centro de su negocio


el cuidado, bienestar y respeto a nuestros familiares enfermos de alzheimer,
y que la Comunidad de Madrid y el Ministerio de Derechos Sociales pongan los
medios y controles necesarios para garantizar los derechos fundamentales de
nuestros mayores!

Pedimos desde aquí al director de atención al mayor, D. Juan José Ferrer, que
tal y como se comprometió recientemente, nos reciba, y que ponga en marcha
urgentemente los mecanismos necesarios para rectificar este error.

Agradecemos, por último, el apoyo prestado a las organizaciones que luchan


cada día por mejorar las condiciones de nuestros mayores en las residencias:
Marea Residencias, Asociación de Familiares de Residencias (ADEMAF), Unión
de Residencias de Leganés (URL), Verdad y Justicia, Plataforma Familiares
Residencia Usera y Plataforma Familiares Residencia Pública de Alcorcón.

Con el apoyo de:

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