Tema 42 Admja
Tema 42 Admja
La Administración electrónica en
la Junta de Andalucía. Servicios
telemáticos al ciudadano.
Política informática de la Junta
de Andalucía. Normativa de los
empleados públicos en el uso de los
sistemas informáticos y redes de
comunicaciones de la Administración
de la Junta de Andalucía. Sistemas
de Información horizontales de la
Junta de Andalucía
1. LA ADMINISTRACIÓN ELECTRÓNICA
1.1. Introducción
La Administración electrónica o e-Administración no es un tipo especial de
Administración, sino que es un nuevo modo de acceso e interacción con y entre
las Administraciones Públicas, haciendo uso para ello de las técnicas y medios
electrónicos, informáticos y telemáticos en el desarrollo de sus actividades y pro-
cedimientos.
La Administración electrónica se ha visto impulsada por los avances opera-
dos en los últimos años en las tecnologías de la información y de la comunica-
ción (TIC).
La incorporación de las tecnologías de la información y las comunicaciones a
la organización interna de las Administraciones Públicas ha provocado la trans-
formación de las oficinas tradicionales.
Así, desde una perspectiva de las relaciones externas, habilitar la vía electróni-
ca como nuevo medio de relación con la ciudadanía, ha hecho a las Administra-
ciones Públicas más accesibles y ha permitido la simplificación administrativa y
la automatización de procesos, tendiéndose actualmente a una “Administración
sin papeles”.
Por su parte, desde el punto de vista de las relaciones internas, las TIC han
permitido la mejora de las comunicaciones entre los órganos de una misma Ad-
ministración y también entre distintas Administraciones Públicas.
En conclusión, la Administración electrónica es un instrumento de especial
utilidad para transformar las Administraciones Públicas y hacerlas más eficaces,
eficientes y modernas, estando entre sus principales ventajas:
– La reducción de la carga administrativa y la simplificación de los procedi-
mientos administrativos.
– Ofrece a los ciudadanos una mejora sustancial en la disponibilidad de los
servicios públicos, que se ofrecen a cualquier hora del día, todos los días
del año (24x7), con independencia de su localización geográfica.
– Evita desplazamientos innecesarios.
– Mejora la inclusión social.
– Facilita el acceso a la información pública.
– Aumenta la confianza de la ciudadanía en las Administraciones Públicas,
las cuales se hacen más transparentes.
– Se crean nuevas vías de participación democrática en la toma de decisiones
públicas.
– Ahorro de papel, con la consiguiente reducción de los costes tanto para las
Administraciones Públicas como para los particulares.
La brecha digital consiste en la dis nción entre aquellos ciudadanos que enen ac-
ceso a Internet y pueden hacer uso de los nuevos servicios ofrecidos por la World Wide
Web, y aquellos otros que están excluidos de estos servicios, aunque tales desigual-
dades también se pueden referir a todas las nuevas tecnologías de la información y la
comunicación (TIC), como el computador personal, la telefonía móvil, la banda ancha y
otros disposi vos. Este término también hace referencia a las diferencias que hay entre
grupos según su capacidad para u lizar las TIC de forma eficaz, debido a los dis ntos
niveles de alfabe zación, carencias, y problemas de accesibilidad a la tecnología.
LA SEDE ELECTRÓNICA
La sede electrónica es aquella dirección electrónica, disponible para los ciu-
dadanos a través de redes de telecomunicaciones, cuya titularidad corresponde a
una Administración Pública, o bien a una o varios organismos públicos o entida-
des de Derecho Público en el ejercicio de sus competencias.
Cada Administración Pública determinará las condiciones e instrumentos de
creación de las sedes electrónicas, con sujeción a los principios de transparencia,
publicidad, responsabilidad, calidad, seguridad, disponibilidad, accesibilidad,
neutralidad e interoperabilidad. En todo caso deberá garantizarse la identifica-
ción del órgano titular de la sede, así como los medios disponibles para la formu-
lación de sugerencias y quejas.
El establecimiento de una sede electrónica conlleva la responsabilidad del ti-
tular respecto de la integridad, veracidad y actualización de la información y los
servicios a los que pueda accederse a través de la misma.
Las sedes electrónicas dispondrán de sistemas que permitan el establecimien-
to de comunicaciones seguras siempre que sean necesarias.
La publicación en las sedes electrónicas de informaciones, servicios y transac-
ciones respetará los principios de accesibilidad y uso de acuerdo con las normas
establecidas al respecto, estándares abiertos y, en su caso, aquellos otros que sean
de uso generalizado por los ciudadanos.
Las sedes electrónicas utilizarán, para identificarse y garantizar una comuni-
cación segura con las mismas, certificados reconocidos o cualificados de autenti-
cación de sitio web o medio equivalente.
LA IDENTIFICACIÓN ELECTRÓNICA
Los interesados podrán identificarse electrónicamente ante las Administracio-
nes Públicas a través de cualquier sistema que cuente con un registro previo como
usuario que permita garantizar su identidad. En particular, serán admitidos, los
sistemas siguientes:
a) Sistemas basados en certificados electrónicos reconocidos o cualificados
de firma electrónica expedidos por prestadores incluidos en la «Lista de
confianza de prestadores de servicios de certificación». A estos efectos, se
entienden comprendidos entre los citados certificados electrónicos recono-
cidos o cualificados los de persona jurídica y de entidad sin personalidad
jurídica.
b) Sistemas basados en certificados electrónicos reconocidos o cualificados
de sello electrónico expedidos por prestadores incluidos en la «Lista de
confianza de prestadores de servicios de certificación».
c) Sistemas de clave concertada y cualquier otro sistema que las Administra-
ciones Públicas consideren válido, en los términos y condiciones que se
establezcan.
LA FIRMA ELECTRÓNICA
En el caso de que los interesados optaran por relacionarse con las Administra-
ciones Públicas a través de medios electrónicos, se considerarán válidos a efectos
de firma:
a) Sistemas de firma electrónica reconocida o cualificada y avanzada basados
en certificados electrónicos reconocidos o cualificados de firma electrónica
expedidos por prestadores incluidos en la «Lista de confianza de prestado-
res de servicios de certificación». A estos efectos, se entienden compren-
didos entre los citados certificados electrónicos reconocidos o cualificados
los de persona jurídica y de entidad sin personalidad jurídica.
b) Sistemas de sello electrónico reconocido o cualificado y de sello electróni-
co avanzado basados en certificados electrónicos reconocidos o cualifica-
dos de sello electrónico incluidos en la «Lista de confianza de prestadores
de servicios de certificación».
c) Cualquier otro sistema que las Administraciones Públicas consideren váli-
do, en los términos y condiciones que se establezcan.
El DOCUMENTO ELECTRÓNICO
Se considera documento electrónico la información de cualquier naturaleza en
forma electrónica, archivada en un soporte electrónico según un formato deter-
minado y susceptible de identificación y tratamiento diferenciado.
El documento electrónico será soporte de:
a) Documentos públicos, por estar firmados electrónicamente por funciona-
rios que tengan legalmente atribuida la facultad de dar fe pública, judicial,
notarial o administrativa, siempre que actúen en el ámbito de sus compe-
tencias con los requisitos exigidos por la ley en cada caso.
b) Documentos expedidos y firmados electrónicamente por funcionarios o
empleados públicos en el ejercicio de sus funciones públicas, conforme a
su legislación específica.
c) Documentos privados.
Los documentos a que se refiere el apartado anterior tendrán el valor y la
eficacia jurídica que corresponda a su respectiva naturaleza, de conformidad con
la legislación que les resulte aplicable.
Se entiende por documentos públicos administrativos los válidamente emi-
tidos por los órganos de las Administraciones Públicas. Las Administraciones
Públicas emitirán los documentos administrativos por escrito, a través de medios
electrónicos, a menos que su naturaleza exija otra forma más adecuada de expre-
sión y constancia.
Para ser considerados válidos, los documentos electrónicos administrativos
deberán:
a) Contener información de cualquier naturaleza archivada en un soporte
electrónico según un formato determinado susceptible de identificación y
tratamiento diferenciado.
b) Disponer de los datos de identificación que permitan su individualización,
sin perjuicio de su posible incorporación a un expediente electrónico.
c) Incorporar una referencia temporal del momento en que han sido emitidos.
d) Incorporar los metadatos mínimos exigidos.
e) Incorporar las firmas electrónicas que correspondan de acuerdo con lo pre-
visto en la normativa aplicable.
EL EXPEDIENTE ELECTRÓNICO
Se entiende por expediente administrativo el conjunto ordenado de documen-
tos y actuaciones que sirven de antecedente y fundamento a la resolución admi-
nistrativa, así como las diligencias encaminadas a ejecutarla.
No formará parte del expediente administrativo la información que tenga ca-
rácter auxiliar o de apoyo, como la contenida en aplicaciones, ficheros y bases
de datos informáticas, notas, borradores, opiniones, resúmenes, comunicaciones
e informes internos o entre órganos o entidades administrativas, así como los
juicios de valor emitidos por las Administraciones Públicas, salvo que se trate de
informes, preceptivos y facultativos, solicitados antes de la resolución adminis-
trativa que ponga fin al procedimiento.
Los expedientes administrativos tendrán formato electrónico y se formarán me-
diante la agregación ordenada de cuantos documentos, pruebas, dictámenes, in-
formes, acuerdos, notificaciones y demás diligencias deban integrarlos, así como
un índice numerado de todos los documentos que contenga cuando se remita.
Asimismo, deberá constar en el expediente copia electrónica certificada de la reso-
lución adoptada.
Cuando en virtud de una norma sea preciso remitir el expediente electrónico,
se hará de acuerdo con lo previsto en el Esquema Nacional de Interoperabilidad y
en las correspondientes Normas Técnicas de Interoperabilidad, y se enviará com-
pleto, foliado, autentificado y acompañado de un índice, asimismo autentificado,
de los documentos que contenga. La autenticación del citado índice garantizará
la integridad e inmutabilidad del expediente electrónico generado desde el momen-
to de su firma y permitirá su recuperación siempre que sea preciso, siendo admi-
sible que un mismo documento forme parte de distintos expedientes electrónicos.
Se entenderá cumplida la obligación de la Administración de facilitar copias
de los documentos contenidos en los procedimientos mediante la puesta a dispo-
sición de las mismas en el Punto de Acceso General electrónico de la Administra-
ción competente o en las sedes electrónicas que correspondan.
EL ARCHIVO ELECTRÓNICO
Todos los documentos utilizados en las actuaciones administrativas se alma-
cenarán por medios electrónicos, salvo cuando no sea posible.
Cada Administración deberá mantener un archivo electrónico único de los
documentos electrónicos que correspondan a procedimientos finalizados, en los
términos establecidos en la normativa reguladora aplicable.
Los documentos electrónicos que contengan actos administrativos que afec-
ten a derechos o intereses de los particulares deberán conservarse en soportes
de esta naturaleza, ya sea en el mismo formato a partir del que se originó el
documento o en otro cualquiera que asegure la identidad e integridad de la in-
formación necesaria para reproducirlo. Se asegurará en todo caso la posibilidad
de trasladar los datos a otros formatos y soportes que garanticen el acceso desde
diferentes aplicaciones.
Los medios o soportes en que se almacenen documentos, deberán contar
con medidas de seguridad, de acuerdo con lo previsto en el Esquema Nacio-
nal de Seguridad, que garanticen la integridad, autenticidad, confidencialidad,
calidad, protección y conservación de los documentos almacenados. En par-
ticular, asegurarán la identificación de los usuarios y el control de accesos, el
cumplimiento de las garantías previstas en la legislación de protección de datos,
así como la recuperación y conservación a largo plazo de los documentos elec-
trónicos producidos por las Administraciones Públicas que así lo requieran, de
acuerdo con las especificaciones sobre el ciclo de vida de los servicios y sistemas
utilizados.
La publicación del «Boletín Oficial del Estado» en la sede electrónica del Orga-
nismo competente tendrá carácter oficial y auténtico en las condiciones y con las
garantías que se determinen reglamentariamente, derivándose de dicha publica-
ción los efectos previstos en el título preliminar del Código Civil y en las restantes
normas aplicables.
Art. 83.1 de la Ley 9/2007: “Los registros telemá cos dependientes de la Junta de
Andalucía estarán habilitados para la recepción o transmisión de documentos electró-
nicos rela vos a los procedimientos, las ac vidades o los servicios contemplados en las
disposiciones autonómicas que establezcan la tramitación telemá ca de los mismos y
permi rán la entrada y salida de documentos electrónicos a través de cualquier sopor-
te reconocido.”
Art. 83.2 de la Ley 9/2007: “Los registros telemá cos permi rán la entrada de do-
cumentos electrónicos a través de redes abiertas de telecomunicación todos los días
del año durante las vein cuatro horas del día.”
Art. 83.3 de la Ley 9/2007: “Reglamentariamente se regulará el funcionamiento
de los registros telemá cos (véase apartados 4 a 6 del art. 9 del Decreto 183/2003)”.
Art. 9.1 del Decreto 183/2003: “Para garan zar el ejercicio efec vo de los derechos
reconocidos en esta norma y la prestación de los servicios que en ella se contemplan
se crea un Registro telemá co único; sin perjuicio de lo establecido en la Disposición
adicional tercera (Registro Telemá co Tributario)”.
Art. 9.2 del Decreto 183/2003: “La administración de usuarios y el mantenimiento
de los medios técnicos correspondientes al servidor central del Registro telemá co es
competencia de la Consejería de Jus cia y Administración Pública de la Junta de Anda-
lucía (actualmente Consejería de Hacienda y Administración Pública)”.
Art. 9.3 del Decreto 183/2003: “El Registro telemá co permi rá la entrada de do-
cumentos electrónicos a través de redes abiertas de telecomunicación todos los días
del año durante las vein cuatro horas. La fecha de entrada o salida de los documentos
electrónicos en el Registro se acreditará mediante un servicio de consignación electró-
nica de fecha y hora. Dicha fecha producirá los efectos que la legislación sobre procedi-
miento administra vo común le atribuya en orden al cómputo de los términos y plazos
en el seno del procedimiento administra vo. A efectos del cómputo de dichos términos
y plazos, se entenderá que la recepción de documentos electrónicos en un día inhábil
en el ámbito territorial del órgano competente para tramitarlo sur rá sus efectos el pri-
mer día hábil siguiente, siendo ésta la fecha en la que el documento ha tenido entrada
en el Registro del órgano competente para su tramitación.”
Junto al que puede denominarse como “general”, en el ámbito de la Junta de An-
dalucía existe un registro telemá co específico para el ámbito tributario, el cual fue
creado por la Disp. Adic. 3ª del Decreto 183/2003 y está regulado por la Orden de 10 de
junio 2005 de la Consejería de Economía y Hacienda, cuyo art. 2.1 indica que son fun-
ciones del mismo la recepción y salida de declaraciones, solicitudes, comunicaciones y
demás escritos rela vos a los trámites y procedimientos tributarios.
Art. 5.3 del Decreto 68/2008, de 26 de febrero, por el que se suprime la aporta-
ción de la fotocopia del los documentos iden fica vos oficiales y del cer ficado de
empadronamiento en los procedimientos administra vos de la Administración de la
Junta de Andalucía, y se establece la sede electrónica para la prác ca de la no ficación
electrónica: “todas las personas interesadas que manifiesten su voluntad de ser no fi-
cadas por medios electrónicos en cualesquiera de los procedimientos en que sean par-
te, pueden solicitar que la Administración de la Junta de Andalucía, a través del portal
www.andaluciajunta.es, les provea de una dirección electrónica segura, que será única
para todas las posibles no ficaciones a prac car por la Administración de la Junta de
Andalucía y sus en dades, y que tendrá vigencia indefinida, excepto en los supuestos
en que se solicite su revocación por el tular, por fallecimiento de la persona sica o
ex nción de la personalidad jurídica, que una resolución administra va o judicial así lo
ordene o por el transcurso de tres años sin que se u lice para la prác ca de no ficacio-
nes, supuesto en el cual se inhabilitará la dirección electrónica única, comunicándoselo
así a la persona interesada.”
Art. 113.2 de la Ley 9/2007, de 22 de octubre, de la Administración de la Junta
de Andalucía. La no ficación telemá ca se entenderá prac cada a todos los efectos
legales en el momento en que se produzca el acceso a su contenido en la dirección
electrónica de modo que pueda comprobarse fehacientemente por el remitente tal
acceso. Cuando, exis endo constancia de la recepción de la no ficación en la dirección
electrónica señalada, transcurrieran diez días naturales sin que el sujeto des natario
acceda a su contenido, se entenderá que la no ficación ha sido rechazada con los efec-
tos previstos en la norma va básica estatal, salvo que de oficio o a instancias del sujeto
des natario se compruebe la imposibilidad técnica o material del acceso.
Cuando por razón de las materias tratadas resulte de interés, podrá invitarse
a las organizaciones, corporaciones o agentes sociales que se estime conveniente
en cada caso a participar en las deliberaciones de la Comisión Sectorial.
3. LA ADMINISTRACIÓN ELECTRÓNICA EN LA
JUNTA DE ANDALUCÍA
Actualmente las principales competencias en materia de “Administración
electrónica” en el ámbito de la Administración de Junta de Andalucía las tiene
asignadas la Consejería de Hacienda y Administración Pública en virtud de lo
dispuesto en el artículo 1.5 del Decreto 206/2015, de 14 de junio, por el que
se establece la estructura orgánica de la Consejería de Hacienda y Admi-
nistración Pública. Dichas competencias son ejercidas a través de la Dirección
General de Política Digital, órgano directivo que se encuentra bajo la depen-
dencia directa de la Viceconsejería, y al que le corresponde (art. 9.1 del Decreto
206/2015, de 14 de junio):